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PERSPECTIVA GENERAL DE

LA DOCTRINA BÍBLICA
SEMINARIO MISIÓN CRISTIANA DE VENEZUELA
CRISTOLOGÍA

La Cristología, es la rama de la teología que, tal como su nombre lo


indica, trata sobre Cristo. Ocupa un lugar central en la teología y en
la historia del cristianismo, puesto que, sin Cristo, no existiría el
cristianismo. Desde muy temprano, la iglesia ha reflexionado y
debatido acerca de cómo se debe entender y expresar quién es Jesús
para lo creyentes, y los dos temas tradicionales de discusión han
sido: la persona de Cristo y la obra de Cristo.
LA PERSONA DE CRISTO

Los asuntos doctrinales tratados bajo el apartado de “la persona de


Cristo”, responden a la cuestión de quién es Jesús, la cual sin duda es
una pregunta fundamental, tanto así, que el mismo Señor se la formuló
en privado a sus discípulos cercanos (Mt 16:13-16).
Tres aspectos son esenciales en cuanto a la persona de Cristo: su
naturaleza humana, su naturaleza divina, y la forma en que estas dos
están unidas en Él.
LA HUMANIDAD DE CRISTO

La doctrina de la humanidad de Cristo ha sido de seguro menos


controversial que la de su deidad, no obstante, también ha sido centro
de debate y ha conducido a visiones heréticas pasado y en la
actualidad, que o bien niegan por completo su humanidad o la
disminuyen.
LA HUMANIDAD DE CRISTO

Que Jesús fue un ser humano de forma total y completa, es una verdad
bíblica. Primero, tuvo un cuerpo físico; dicho en leguaje bíblico,
participó de carne y sangre, o se manifestó en carne (Heb 2:14; 1 Ti
3:16). Experimentó las limitaciones físicas de cualquier ser humano
normal. Tuvo hambre, sed, se cansaba, necesitaba dormir, y aunque no
sabemos si alguna vez llegó a experimentar alguna enfermedad, lo
cierto es que estaba sujeto al dolor y la muerte como todo hombre.
LA HUMANIDAD DE CRISTO

Él también tenía un alma humana, capaz de experimentar todos los


sentimientos y emociones de la humanidad, con la diferencia de que sin
pecado. Entre las emociones que observamos en Él, están la compasión
que sentía por los que estaban en sufrimiento (Mt 15:32; Lc 7:13); el
amor por quienes le rodeaban (Jn 11:5); gozo (Jn 15:11); pero también
el enojo contra las personas y circunstancias que le disgustaban (Mc
3:5; 10:14); la tristeza y la angustia (Mt 26:37-38).
LA HUMANIDAD DE CRISTO

Ahora bien, es evidente que en lo que a las cualidades intelectuales se


refiere, Jesús tenía dotes extraordinarias, especialmente en su
conocimiento del pasado, el presente y el futuro, y de los pensamientos
más profundos de otros, lo cual no es posible en las personas normales.
LA HUMANIDAD DE CRISTO

Un problema que se plantea cuando se habla de la humanidad de Jesús,


es el hecho de su impecabilidad. La Biblia asegura que Él fue tentado
en todo pero sin pecado (Heb 4:15), es más “no hizo pecado, ni se
halló engaño en su boca” (1 Pe 2:22). Esto hace que algunos
cuestionen si la humanidad de Jesús era real o sólo aparente. Sin
embargo, el primer Adán, antes de la caída, podía pecar, de modo que
Jesús, el segundo Adán, también podía pero no lo hizo.
LA HUMANIDAD DE CRISTO

La razón por la cual no pecó es porque en Él estaba también la


naturaleza divina. De cualquier manera, lo más reprochable del
argumento de que Jesús no pudo haber sido verdaderamente humano
porque no pecó, es el hecho de que se asuma que el pecado es parte
esencial de la naturaleza humana.
LA HUMANIDAD DE CRISTO

Este razonamiento es un error. Dios no nos creó para pecar, al


contrario, nos creó para buenas obras (Ef 2:10), y la caída vino a ser, en
lugar de una marca de la verdadera humanidad, una distorsión de ella,
de manera que Cristo, quien nunca pecó, es el único que ha poseido
una naturaleza humana perfecta y auténtica, sin distorsión.
HEREJÍAS ACERCA DE LA HUMANIDAD DE
CRISTO
• Docetismo
Los docetistas negaban que la humanidad de Cristo fuera real, alegando
que sólo había sufrido y muerto en apariencia. Estaban influenciados
por la filosofía gnóstica. El problema es que el Cristo descrito por los
docetistas no podía traernos salvación, puesto que su muerte en un
cuerpo humano, era la condición necesaria para que destruyese el poder
del dominio de Satanás sobre la humanidad (Heb 2:14).
HEREJÍAS ACERCA DE LA HUMANIDAD DE
CRISTO
• Apolinarismo
Tomó su nombre de Apolinar el Joven, obispo de Laodicea, quien en su
intento de evitar la separación innecesaria de las naturalezas de Cristo,
enseñó que Él tenía un cuerpo y un alma humanos, pero, en lugar de un
espíritu humano, tenía el Logos divino, el cual dominaba tanto su
cuerpo como su alma.
HEREJÍAS ACERCA DE LA HUMANIDAD DE
CRISTO
• Cristología existencial
Considera que es de poca importancia una cristología que pretenda basarse en
hechos objetivos de la vida de Jesús, en lugar de su significado existencial; dicho
de otro modo, el asunto crucial es lo que Cristo hace en nosotros, el modo en que
transforma nuestras vidas. Esta visión no se corresponde con la predicación de los
apóstoles que se basa en los dichos y hechos de Jesús, tanto como sus efectos en
el ser humano que se acerca a Él.
HEREJÍAS ACERCA DE LA HUMANIDAD DE
CRISTO
Para finalizar, vale la pena recalcar que la humanidad de Cristo no sólo es una
doctrina importante, sino necesaria en términos de la salvación de todo aquel que
cree. Primero, sólo una persona con un verdadero cuerpo humano podía ofrecer su
vida en sacrificio y sufrir la muerte (Heb 2:14), y luego ser resucitado de entre los
muertos (1 Co 15:12-19). Además, en relación a cualquier aspecto de la naturaleza
humana, si Jesús no lo asumió, entonces no la salvó. Esto se aplica tanto al cuerpo
como al alma y/o espíritu. Todo nuestro ser está corrompido por el pecado, por lo
tanto, nuestro ser entero es el objeto de la salvación de Dios.
LA DEIDAD DE CRISTO

Es necesario observar lo que anticipaba el Antiguo Testamento respecto a Él. Hay


dos líneas que se relacionan. Por una parte, se predijo la venida del Redentor de
Sión (Is 59:20), pero al mismo tiempo se decía que Jehová mismo vendría a salvar
a su pueblo (Is 40:1, 3). Ambas líneas armonizan en los pasajes que hablan de la
venida del Mesías en el lenguaje de la divinidad (Sal 45; 110). Uno de los más
representativos es Isaías 9:6 “Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el
principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios
Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz”.
LA DEIDAD DE CRISTO

En el Nuevo Testamento, la evidencia es todavía más abrumadora.


• Primero, Jesús posee atributos que sólo Dios posee, tales como, eternidad (Jn
8:58; 17:5); omnipresencia (Mt 18:20; 28:20); omnisciencia (Mt 16:21; Jn 4:29),
y omnipotencia (Mc 5:11-15).
• Segundo, Jesús hace obras que son exclusivas de Dios, como perdonar pecados
(Mc 2:1-12); dar vida (Jn 5:21); levantar a los muertos (Jn 11:43), y juzgar a
toda persona (Jn 5:22-27).
LA DEIDAD DE CRISTO

• Tercero, Jesús alegó su igualdad con el Padre durante la fiesta de Dedicación


cuando dijo: “Yo y el Padre somos uno” (Jn 10:30).
• Cuarto, hay pasajes en los cuales se declara de manera contundente la deidad de
Jesús. Uno de ellos es Juan 1:1. También el autor de Hebreos habla del Hijo
como el resplandor de la gloria de Dios y la representación exacta de su
naturaleza (Heb 1:3); y el apóstol Pablo en Colosenses, afirma que Jesús es la
imagen del Dios invisible, por medio de quien fueron creadas todas las cosas y
por quien todas las cosas subsisten (Col 1:15-20).
LA DEIDAD DE CRISTO

• Quinto, la Escritura es enfática en cuanto a que Dios es el único digno de ser


adorado y es celoso en este asunto, es decir, detesta la idolatría a los falsos
dioses (Ex 20:5). Todo judío piadoso era plenamente consciente de este
mandamiento, y si alguien se atrevía a rendirles adoración, enseguida ponían
coto a la situación, tal como lo hizo Pedro con Cornelio (Hch 10:25-26), o Pablo
y Bernabé con los habitantes de Listra (Hch 14:14-15). Incluso los ángeles
tenían una actitud similar de no reclamar adoración (Ap 19:10).
LA DEIDAD DE CRISTO

Sin embargo, Jesús pide ser honrado del mismo modo en que se honra
al Padre (Jn 5:23), y recibió la adoración de Tomás (Jn 20:28) sin
reprocharle nada. En el libro de Apocalipsis se describe a las huestes
celestiales rindiendo adoración al Cordero (5:8-11). En todo esto, no
hay una sola reprensión, sino que Jesús se mostraba de acuerdo, es
más, el Padre mismo mandó a los ángeles diciendo: “adórenle todos los
ángeles de Dios” (Heb 1:6).
LA DEIDAD DE CRISTO

• Sexto, es un dato significativo que a Jesús se le da el título de Señor


en los escritos del Nuevo Testamento, mismo título que se otorga a
Jehová en la versión griega del Antiguo Testamento, la Septuaginta, y
con el cual también los autores neotestamentarios se refieren al Padre.
LA DEIDAD DE CRISTO

• Por último, hay dos eventos de carácter extraordinario que acontecen en la vida
de Jesús, que son una marca distintiva que apunta a su divinidad.
• El primero de ellos es el que se conoce como el nacimiento virginal, aunque
para mayor precisión, se trata de una concepción virginal. Este evento fue
predicho en Isaías 7:14, y no se trató de un medio para preservar a Cristo sin
pecado (puesto que Dios, si lo hubiera querido, podría haber cubierto con su
sombra a ambos progenitores para preservar la impecabilidad del bebé), sino
una señal de la singularidad y divinidad de la persona que nació.
LA DEIDAD DE CRISTO

• El segundo evento es la resurrección de entre los muertos. El apóstol


Pedro en su sermón del día de Pentecostés, testificó del Cristo
resucitado como la evidencia más clara de que se trataba del Mesías
divino que había sido prometido desde tiempo antiguo (Hch 2:29-36).
HEREJÍAS ACERCA DE LA DIVINIDAD DE
CRISTO
• Ebionismo
Niega la deidad real u ontológica de Cristo. Según los ebionitas, Jesús
era un hombre ordinario que en su bautismo recibió al Cristo, más
como una influencia que como una realidad metafísica. Hacia el final
de su vida, este se retiró de él.
HEREJÍAS ACERCA DE LA DIVINIDAD DE
CRISTO
• Arrianismo
Toma su nombre de Arrio, presbítero de la Iglesia de Alejandría, quien
negó la eternidad de Jesús como el Logos divino y concluyó que por
cuanto Él era “Unigénito”, tuvo que haber tenido un comienzo, por lo
tanto, no podía ser Dios, si bien tenía una naturaleza similar,
homoiousios pero no igual, homoousios.
HEREJÍAS ACERCA DE LA DIVINIDAD DE
CRISTO
• Arrianismo
La controversia arriana, provocó la convocatoria del Concilio de Nicea
(325). En él, se estableció que el Hijo es homoousion to Patri, (de la
misma substancia del Padre). Esta es una de las muchas frases en el
Credo resultante, cuyo propósito era rechazar el arrianismo.
HEREJÍAS ACERCA DE LA DIVINIDAD DE
CRISTO
• Arrianismo
Alguien muy importante para resolver la controversia fue Atanasio, obispo de
Alejandría. Él descalificó la doctrina arriana basándose en un claro principio: la
salvación es una “re-creación” de la humanidad caída, la cual sólo puede ser
efectuada por el Creador, por tanto, si Jesús es el Salvador, es necesariamente
Dios. Para Atanasio el arrianismo era repudiable puesto que se acercaba al
politeísmo, y afirmaba algo inconcebible: que la salvación viene de una criatura.
HEREJÍAS ACERCA DE LA DIVINIDAD DE
CRISTO
• Modalismo
Otro ataque a la cristología bíblica, ha venido del lado del “modalismo”, una
enseñanza según la cual, no hay tres personas que son un único Dios, sino una
sola persona que ejerce funciones distintas como Padre, Hijo y Espíritu Santo, y
que se manifiesta de tal modo de acuerdo con la necesidad del momento. Esta
herejía no hace distinción entre las personas, ocasionando una serie de problemas
a la hora de interpretar varios pasajes de la Biblia.
HEREJÍAS ACERCA DE LA NATURALEZA DE
CRISTO
Otro problema surge con el intento de conciliar las dos naturalezas de
Jesús, la humana y la divina, y dar una explicación plausible de cómo
ambas coexisten y se relacionan. Al respecto también surgieron algunas
explicaciones contrarias a la Escritura.
HEREJÍAS ACERCA DE LA NATURALEZA DE
CRISTO
• Nestorianismo
Dividía a Cristo en dos personas, separando su naturaleza humana de
su naturaleza divina. Esta enseñanza fue condenada por el Concilio de
Éfeso en 431.
HEREJÍAS ACERCA DE LA NATURALEZA DE
CRISTO
• Eutiquianismo
Reaccionó contra el nestorianismo, y enseñó que sólo había una
naturaleza en Cristo, error que también es conocido como
“monofisismo”. La naturaleza humana no lo era por completo, lo
mismo que la divina, lo que resulta, es una única naturaleza mezclada.
Esta posición fue condenada en Calcedonia (451).
HEREJÍAS ACERCA DE LA NATURALEZA DE
CRISTO
Justamente, el Credo Calcedonio, corrigió los errores y estableció,
basándose en la enseñanza bíblica, que en Cristo las dos naturalezas
estaban unidas sin mezcla, sin cambio, sin división, y sin separación, lo
cual quiere decir que el complejo entero de los atributos de la deidad y
los de la humanidad perfecta, siempre se mantuvieron en Jesús desde
su encarnación. Las dos naturalezas constituyen una persona o
hipóstasis para siempre.
CONCLUSIONES EN CUANTO A LA PERSONA DE CRISTO

Es importante traer a colación algunas implicaciones del hecho de que Jesús, más
que sólo un hombre, sea Dios mismo.
• Primero, esto significa que podemos tener un conocimiento real de Dios con
sólo mirar a Cristo.
• Segundo, que la redención es posible, puesto que quien murió en la cruz era el
Dios infinito encarnado, de manera que su sacrificio es perfecto y suficiente para
cubrir todos nuestros pecados.
CONCLUSIONES EN CUANTO A LA PERSONA DE CRISTO

• Tercero, que Dios cruzó la barrera que se había originado a causa de nuestra
transgresión. Siendo Él el ofendido por nuestro pecado, tomó la iniciativa de la
reconciliación.
• Por último, contamos con la convicción de que alabar a Cristo es apropiado, no
sería un gesto de idolatría, por cuanto el Hijo es Dios, en el mismo sentido y
grado que el Padre.

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