EN NUESTROS HIJOS LIC. JORGE IVAN AMARO BERRIOS FORMAS DIRECTAS DE VIOLENCIA
AGRESION FISICA Y ABUSO SEXUAL
Existe más posibilidades que se conviertan en personas violentas en su vida adulta.
Hay un mayor riesgo a realizar conductas dañinas como
el fumar, beber alcohol en exceso, el uso de otras drogas, conducción peligrosas, prácticas sexuales de riesgo. Lesionan la evolución del cerebro y aumentan el riesgo de enfermedades mentales. CONSECUENCIAS PSICOLÓGICAS
1. Depresión: Caracterizada por gran
tristeza acompañada de melancolía y por la falta de comunicación. Esto deriva la pérdida de contacto con las personas más cercanas de su entorno social. 2. Aislamiento Social: Cuando una persona se distancia de sus amigos y familiares o pierde las ganas de salir sin causa aparente. 3. Ansiedad: Se relaciona con la depresión y la insatisfacción vital. Cuando una persona padece este trastorno, es habitual que le cueste afrontar situaciones que podrían ser normales y cotidianas, como por ejemplo salir a la calle. 4. Baja autoestima: Se hecha la culpa por la situación que está viviendo. Pierde el interés por cuidarse, creyendo que no se lo merece, y sentirá un miedo atroz a afrontar nuevos retos o situaciones. 5. Estrés postraumático: Se relaciona directamente con la ansiedad. Este se asocia, como su nombre indica, a situaciones que han creado un trauma en la persona, generando que la persona que lo padece siempre sienta temor o miedo a que vuelva a repetirse la situación que tanto daño le ha causado. FACTORES DE RIESGO QUE PODRIAN AFECTAR EL DESARROLLO CEREBRAL DE LOS NIÑOS CORTISOL (HORMONA PRODUCIDA POR LA GLÁNDULA SUPRARRENAL. SE LIBERA COMO RESPUESTA AL ESTRÉS)
• Someter a momentos estresantes (ya sea porque
escuchó un ruido muy fuerte, escucha gritos, lleva mucho tiempo sin comer o lo están agrediendo física, sexual o emocionalmente), su cerebro entra en estado de alerta y segrega sustancias como el cortisol que resultan dañinas. • Estos menores presentan un coeficiente intelectual más bajo que los niños con un entorno familiar armónico. • Las calificaciones escolares de las víctimas de agresión pueden ser hasta 50% más bajas que las del promedio. • El autocontrol puede ser más difícil en niños que padecen esta experiencia. • Los niños que viven violencia pueden tener mayores problemas para concentrarse, tomar decisiones, idear un plan B y manejar la frustración. • Muchas de las hormonas relacionadas con el estrés aumentan la producción de azúcares en el cuerpo y si esto se mantiene de forma sostenida durante varios años, es más probable la aparición de males crónicos. Jack Shonkoff, profesor de salud infantil en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard MUCHAS GRACIAS