El proceso sumarísimo es uno contencioso de muy corta
duración, en el que se presentan restricciones a ciertos aspectos procesales, dirigidas a hacer más expeditiva la tramitación de aquel con miras a obtener una rápida solución del litigio. es necesario esclarecer que el proceso sumarísimo vendría a ser la concentración de un conjunto de fases u etapas que por la urgencia o necesidad del asunto, la ley le ha concedido una tramitación breve y en donde la norma expresamente ha previsto que asuntos contenciosos se tramitan en tal vía procedimental. Cuando nuestro Código Procesal alude a la terminación “contencioso”, significa que nos encontramos ante asuntos que además de ser sometidos a conocimiento y decisión judicial, principalmente se caracteriza por su carácter conflictivo o de litigio entre dos o más partes. En el año de 1940 entro en vigencia en el Perú el Código de Procedimientos Penales en el cual se establecía un procedimiento ordinario para la totalidad de los procesos, sin embargo, debido a la elevada carga procesal que afrontaban los pares entonces Tribunales Correccionales y para darle una mayor celeridad a los procesos, se introdujo en el sistema procesal penal peruano mediante el Decreto Ley N° 17110 en el año de 1969, en el cual las facultades de investigación y juzgamiento recaían en la misma persona, que inicialmente limitaba su aplicación para aquellos delitos que no revestían mayor gravedad como son los de daños, incumplimiento de deberes alimentarios, o delitos contra la vida el cuerpo y la salud cometidos con negligencia, posteriormente amplio el número de delitos sobre los cuales se aplicaba a través del Decreto Legislativo N° 124 y actualmente se ha ampliado el tramite del proceso penal sumario a la mayor cantidad de delitos contemplados en el Código Penal a través de la Ley N° 26689 la misma que ha sido modificada por la Ley N° 27507 publicado en el Diario El Peruano el 13 de julio del 2001. El proceso sumario en el Perú significó (y aun significa en muchas partes del país) una involución dentro del proceso penal peruano, pues este proceso que es típico de un sistema inquisitivo, no estuvo presente el Código de Procedimientos Penales de 1940, y su introducción en aras de una mayor rapidez y eficacia de los procesos penales en el Perú derivo en una dramática vulneración del principio de imparcialidad, oralidad, publicidad y contradicción afectándose de esta forma el derecho al debido proceso que es un derecho humano fundamental reconocido no por la actual Constitución, sino también por la Constitución de 1979, además de muchos tratados internacionales suscritos por nuestro país, en el proceso sumario se prescinde de la etapa de juzgamiento o juicio oral lo que implica que una sentencia sin un mayor análisis probatorio, es decir se sanciona sin que haya juicio, siendo éste un elemento fundamental en todo proceso a efectos de una correcta administración de justicia, al respecto del juicio ya Carnelutti afirmaba lo siguiente: “(…) castigar quiere decir, ante todo juzgar. El proceso Sumarísimo, como su denominación lo indica, es aquel proceso contencioso de duración muy corta donde tiene lugar ciertas limitaciones que se traducen en la restricción de determinados actos procesales, como cuando se permite tan sólo los medios probatorios de actuación inmediata, tanto en las excepciones como en las defensas previas, es decir es improcedentes la reconvención, los informes sobre hechos, el ofrecimiento de medios probatorios en segunda instancia, la modificación y ampliación de la demanda y el ofrecimiento de medios de prueba extemporáneos; lo cual esta orientado, precisamente, a abreviar lo mas posible el tramite del mencionado proceso, al fin de lograr una pronta solución al conflicto de intereses de que se trate. El proceso Sumarísimo se encuentra regulado en el Código Procesal Civil en el Titulo III, en la cual comprende los siguientes asuntos contenciosos: Alimentos; Separación convencional y divorcio ulterior; Interdicción; Desalojo; Interdictos; Los que no tienen una vía procedimental propia, son inapreciables en dinero o hay duda sobre su monto o, porque debido a la urgencia de tutela jurisdiccional, el Juez considere atendible su empleo; Aquellos cuya estimación patrimonial no sea mayor de veinte Unidades de Referencia Procesal; y Los demás que la ley señale como: a. Asignación de pensión a herederos forzosos aun dependientes del ausente b. Convocatoria judicial a asamblea general de asociación c. Declaración de perdida del derecho del deudor al plaza d. Fijación judicial del plazo e. Fijación judicial del plazo para la ejecución del cargo f. Ineficacia de actos gratuitos en caso de fraude g. Oposición a la celebración del matrimonio h. Autorización del trabajo fuera del hogar de los cónyuges i. Regulación de contribución de los cónyuges al sostenimiento del hogar j. Administración de los bienes del otro cónyuge k. Nombramiento de curador especial por oposición de interese padres e hijos l. Partición del bien común antes del vencimiento del plaza del pacta de indivisión, entre otros. El proceso penal sumario se caracteriza por los plazos más breves, donde se busca privilegiar la celeridad y la eficacia en la búsqueda de la verdad, en este proceso el juez que investiga es el que juzga, en merito a lo actuado en la instrucción, por lo tanto lo que se conoce como fase de juzgamiento o juicio oral que está presente en todo proceso ordinario es aquello que no está presente en el proceso sumario. Son competentes para conocer de los procesos sumarísimos de separación convencional y divorcio ulterior los Jueces de Familia (parte inicial del primer párrafo del Art. 547 del CPC. Al respecto, debe tenerse en consideración que, con arreglo a lo previsto en el inciso 7) del artículo 1 de la Ley de Competencia Notarial en asuntos no contenciosos, los interesados pueden recurrir indistintamente ante el Poder Judicial o ante Notario para tramitar la separación convencional y divorcio ulterior conforme a la ley de la materia. Además son competentes los Jueces de Familia para conocer los procesos sumarísimos de interdicción, así mismo son competentes los Jueces Civiles para conocer los procesos sumarísimos de interdictos. Son competentes los Jueces Civiles para conocer los casos del inciso 6) del articulo 546 del Código Procesal Civil, es decir, aquellos asuntos contenciosos que no tienen una vía procedimental propia, son inapreciables en dinero o hay duda sobre su monto o, porque debido a la urgencia de la tutela jurisdiccional, el Juez considere atendible su empleo (de la vía sumarísima, se entiende). Es de destacar que en el caso del inciso 6) del artículo 546 del Código Procesal Civil, la resolución que declara aplicable el proceso sumarísimo, será expedida sin citación al demandado, en decisión debidamente motivada e inimpugnable. Requisitos de la demanda (Art. 424 del CPC), la demanda se presenta por escrito y contendrá: La designación del Juez ante quien se interpone; El nombre, datos de identidad, dirección domiciliaria y domicilio procesal del demandante; El nombre y dirección domiciliaria del representante o apoderado del demandante, si no puede comparecer o no comparece por sí mismo; El nombre y dirección domiciliaria del demandado. Si se ignora esta última, se expresará esta circunstancia bajo juramento que se entenderá prestado con la presentación de la demanda; El petitorio, que comprende la determinación clara y concreta de lo que se pide; Los hechos en que se funde el petitorio, expuestos enumeradamente en forma precisa, con orden y claridad; La fundamentación jurídica del petitorio; El monto del petitorio, salvo que no pudiera establecerse; La indicación de la vía procedimental que corresponde a la demanda; Los medios probatorios; y La firma del demandante o de su representante o de su apoderado, y la del Abogado. El Secretario respectivo certificará la huella digital del demandante analfabeto. Además de los anexos establecidos en el Art. 425 del CPC. Si la resolución que declara la improcedencia fuese apelada, el Juez pondrá en conocimiento del demandado el recurso interpuesto. La resolución superior que resuelva en definitiva la improcedencia, produce efectos para ambas partes. EI emplazamiento valido con la demanda produce los siguientes efectos: La competencia inicial no podrá ser modificada, aunque posteriormente varíen las circunstancias que la determinaron. EI petitorio no podrá ser modificado fuera de los casos permitidos en este Código. No es jurídicamente posible iniciar otro proceso con el mismo petitorio. Interrumpe la prescripción extintiva. Las defensas previas son instrumentos procesales por los cuales el demandado solicita la suspensión del proceso iniciado, en tanto el accionante no efectúe, aquello que el derecho sustantivo dispone como actividad preliminar a la interposición de la demanda. Las defensas previas no denuncian una omisión procesal porque no reposan en las leyes adjetivas sino en el ordenamiento sustantivo, sin embargo, afectan el proceso, aunque no implican su conclusión sino tan sólo evitan temporalmente su prosecución. son instrumentos procesales dirigidos a poner en tela de juicio algún medio de prueba con la finalidad de que el Juez declare su invalidez o tenga presente su ineficacia probatoria. Existen dos formas de cuestiones probatorias: La tacha. La oposición.
La tacha constituye una especie de impugnación cuyo objeto es quitar
validez u restarle eficacia a un medio de prueba, en razón de existir algún defecto o impedimento respeto de el. La tacha puede plantearse contra la prueba testimonial y la documental.
La oposición, es un instrumento procesal dirigido a cuestionar un medio
de prueba incorporado al proceso, para así lograr que no se lleve a cabo su actuación o que se evite asignarle eficacia probatoria al momento de resolver; Por mandato del articulo 300 del Código Procesal Civil, se puede formular oposición a la actuación de una declaración de parte, una exhibición, una pericia, una inspección judicial y un medio probatorio atípico. La audiencia de pruebas será dirigida personalmente por el Juez, bajo sanción de nulidad. Antes de iniciarla, toma a cada uno de los convocados, juramento o promesa de decir la verdad. La fórmula del juramento o promesa es: “Jura o promete decir la verdad?” La fecha fijada para la audiencia es inaplazable y se realizara en el local del juzgado. A ella deben concurrir personalmente las partes, los terceros legitimados y el representante del Ministerio Publico, en su caso. Las personas jurídicas y los incapaces comparecerán a través de sus representantes legales. Las partes y terceros legitimados pueden concurrir con sus abogados. Salvo disposición distinta del Código Procesal Civil, sólo si prueba un hecho grave o justificado que impida su presencia, el Juez autorizara a una parte a actuar mediante representante; Si a la audiencia concurre una de las partes, esta se realizara sólo con ella; si no concurren ambas partes, el Juez dará por concluido el proceso. EI secretario respectivo redactara un acta dictada por el Juez que contendrá: Lugar y fecha de la audiencia, así como el expediente al que corresponde; Nombre de los intervinientes y, en su caso, de los ausentes; y, Resumen de lo actuado. Los intervinientes pueden sugerir al Juez la adición, precisión o rectificación de alguna incidencia. Para la elaboración del acta el Secretario respectivo puede usar cualquier medio técnico que la haga expeditiva y segura. EI acta será suscrita por el Juez, el Secretario y todos los intervinientes. Si alguno se negara a firmarla, se dejara constancia del hecho. EI original del acta se conservara en el archivo del Juzgado, debiendo previamente el Secretario incorporar al expediente copia autorizada por el Juez. En líneas generales, el trámite del proceso sumarísimo es como sigue: Una vez presentada la demanda, el Juez la califica, pudiendo declarar su inadmisibilidad o improcedencia, con arreglo a lo dispuesto en los artículos 426 y 427 del Código Procesal Civil (que versan sobre la inadmisibilidad e improcedencia de la demanda, en ese orden), respectivamente (Art. 551 - primer párrafo del CPC). HURTADO POZO, José. Manual de Derecho Penal. Indica sobre este tema que: Los principales actores de la reforma, abogados y magistrados, así como la colectividad en general, convencidos de los importantes avances logrados en la propuesta legislativa han venido esperando con expectativa, la entrada en vigencia del Modelo Acusatorio. Organismos internacionales como la USAID y el Banco Mundial, han prestado su concurso en el nivel de la capacitación de Jueces y Fiscales durante estos años. En las Facultades de Derecho de todas las Universidades del país, el dictado del curso de Derecho Procesal Penal se ha venido y viene haciéndose con obligatoria remisión al modelo acusatorio. De tal modo, que todo el país ya esta comprometido con la reforma, esperando tan solo la decisión política de poner en vigencia el Modelo Acusatorio Garantista. El Juicio Sumario, en Chile, es aquel procedimiento declarativo de carácter ordinario que debe ser aplicado a todos aquellos casos en que la acción deducida requiera, por su naturaleza, tramitación rápida para que sea eficaz, siempre que no exista un procedimiento especial en que deba ser conocida y en los demás casos que la ley prescribe En un procedimiento declarativo. Es un procedimiento ordinario, toda vez que se aplica a todos aquellos casos en que la acción requiera de un procedimiento rápido para ser eficaz y no exista otro procedimiento especial para ella. Algunos lo consideran un procedimiento extraordinario ya que es diferente en cuanto a su estructura al procedimiento ordinario. Es un procedimiento verbal, sin perjuicio de que las partes pueden hacer presentaciones escritas y en todo caso de lo obrado se debe levantar acta. Es un procedimiento breve y concentrado. El proceso penal sumario -actualmente hegemónico en nuestro país- y muy a pesar de las reformas actuales, sólo se le ha excluido la tortura, después, el resto de características son las mismas. Por lo que desde la perspectiva dinámica del Derecho, los procesos sumarios, están quedando desfasados respecto a las demandas de la sociedad moderna y de un Estado de Derecho, por una justicia penal eficiente y garantista. En este tipo de proceso el interés público (Estado) resultó predominante frente a la dignidad de la persona humana. Como consecuencia de ello apareció el Juez inquisitorial, quien monopolizaba la función acusadora y la función decisoria, dando origen así a un modelo procesal que estructuralmente no garantizaba una sentencia justa, pues exista un alto grado de parcialización subjetiva y objetiva. De otro lado, el proceso era una sola etapa de carácter escrito, secreto y no contradictorio, en donde sucumbían las más importantes garantías de los procesos contemporáneos, como el principio de inocencia, el derecho de defensa, la igualdad procesal, etc. El Proceso Sumarísimo es un proceso cuya corta duración se debe al espíritu del legislador de reducir los plazos de un proceso civil y de esta manera reducir la carga procesal.
Se tramitan en proceso sumarísimo los siguientes asuntos contenciosos:
Alimentos; Separación convencional y divorcio ulterior; Interdicción; Desalojo; Interdictos; Los que no tienen una vía procedimental propia, son inapreciables en dinero o hay duda sobre su monto o, porque debido a la urgencia de tutela jurisdiccional, el Juez considere atendible su empleo; Aquellos cuya estimación patrimonial no sea mayor de veinte Unidades de Referencia Procesal; y Los demás que la ley señale.
Nació teniendo en cuenta los criterios de celeridad, rapidez y tutela rápida de
asuntos, que son también parte del referido proceso.
En lo que respecta a la competencia jurisdiccional prevista por la vía sumaria
podemos indicar que esta compete a los Jueces de Familia, Jueces Civiles, Jueces de Paz Letrado y finalmente a los Jueces de Paz, todos ellos se determinaran en razón de los asuntos que ha previsto el artículo 546º y distribuidos en razón de la Cuantía en litigio. Es necesario resaltar que además de los plazos y términos cortos ya mencionados, el proceso sumarísimo se caracteriza también por la “Concentración de Actos Procesales”.
El proceso sumarísimo refleja un acceso hacia la tutela
jurisdiccional de manera rápida y oportuna. Ya que se da preferencia a asuntos que por su urgencia son de necesario pronunciamiento por la autoridad judicial competente y que no realizarse a tiempo, podrían generar un grave perjuicio en quien solicita tutela. Si bien, los plazos son más cortos, ello no significa que se limite la generación de certeza o convicción del A-quo al pronunciar su fallo, sino que exigen que este último realice un mayor esfuerzo y dedicación dentro del proceso a fin de que emita un pronunciamiento justo, equitativo y acorde con el contexto en litigio. En la praxis, podemos señalar que esta vía procedimental se ejecuta mediante la interposición del artículo 546º inc. 1 que corresponde al Proceso de Alimentos, proceso que es la más común y frecuente de esta vía procedimental, además de su continua praxis judicial.