Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
2do Parcial - 3ra Actividad - Mercadotecnia
2do Parcial - 3ra Actividad - Mercadotecnia
OBJETIVO PARTICULAR
Por ejemplo, un punto de venta es una tienda de autoservicio o una tienda departamental, las propias sucursales de la empresa
o quioscos en centros comerciales.
Conceptos importantes de la mercadotecnia
Ubicación de la tienda
Debe localizarse donde se encuentra el cliente, considerando el
segmento o tipo de consumidor. Debe tener cierto atractivo
para los posibles compradores y ser accesible (posibilidad de
llegar al establecimiento fácilmente).
Es una secuencia de empresas que realizan las actividades necesarias para crear y distribuir bienes o servicios a los consumidores
o usuarios industriales. Incluye a los proveedores de materias primas para el fabricante y/o productor, al igual que mayoristas y
minoristas que revenden los productos terminados al consumidor final. Cabe destacar que un canal de distribución sólo
considera a intermediarios como mayoristas, minoristas y agentes, mientras que la cadena incluye a los proveedores
Los artículos “imán” o “gancho” son aquellos que, como su nombre indica, generan una atracción en el consumidor motivada por
muchos factores como su esencialidad, su notoriedad, su liderazgo, su precio o simplemente su necesidad o deseo de poseerlo,
por lo tanto, su ubicación debe apuntarse hacia niveles menos visibles y accesibles. Los productos de oferta representan un buen
ejemplo de artículos “imán” o “gancho”.
Los intermediarios son un conjunto de personas u organizaciones que están entre el productor y
el consumidor final. Se vinculan con el productor a través de contratos de compra venta,
depósito o comisión. Como vimos anteriormente, hay distintos tipos de intermediarios:
Mayoristas • Personas o establecimientos que venden a minoristas (detallistas), a otros negociantes y usuarios
industriales, pero que no lo hacen en grandes cantidades al consumidor final.
• Personas o establecimientos que venden en forma directa a los consumidores finales productos
Minoristas sólo para su uso personal.
La arquitectura comercial ejerce una importante influencia psicológica en el comportamiento del consumidor, apelando
directamente a sus sentimientos, emociones, actitudes y creencias.
El uso de las técnicas arquitectónicas aplicadas a los entornos comerciales, han ido evolucionando hasta convertirse
en potentes armas psicológicas, con el fin de crear atmósferas comerciales y entornos temáticos, donde satisfacer las
necesidades y los deseos de los consumidores más exigentes, motivando y estimulando sus innatos impulsos
consumistas.
1. La identidad
La identidad se especifica mediante el nombre, término, símbolo, signo, diseño o la combinación de los mismos,
formando el rótulo comercial o corporativo, cuyo objetivo es identificar los bienes o servicios de un vendedor o grupo
de vendedores.
El diseño de la identidad comercial o corporativa debe realizarse de acuerdo a la imagen que se desee proyectar, de
modo que resulte un elemento identificativo que individualice al establecimiento y, por tanto, lo diferencie de los
demás. Los elementos que forman la identidad comercial deben estar en perfecta consonancia con la imagen
corporativa del negocio. Los colores, los símbolos, los signos, el grafismo y el diseño por sí mismos deben transmitir
el concepto del establecimiento de acuerdo a su formato comercial, contribuyendo activamente en la creación de una
adecuada imagen.
En cuanto a su instalación, es necesario que el rótulo comercial corporativo esté situado en una zona perfectamente
visible a los ojos de los viandantes. También es importante que se distinga desde lejos o al menos que se identifique
por algún elemento que lo caracterice como el color, el grafismo o el diseño.
A la hora de diseñar el rótulo o identificación comercial del punto de venta, hay que tener en cuenta una serie de
características o variables que determinan su diseño en función de lo que es y lo que vende un determinado
establecimiento comercial, con el fin de poder transmitir fielmente su propio estilo y su identidad comercial. Las
características o variables más importantes que determinan el diseño del rótulo comercial son la imagen corporativa,
la sintonía de los elementos de la arquitectura exterior, así como la adecuación al entorno arquitectónico.
La exposición atmosférica
Diseño de un espacio de venta con el fin de producir efectos emocionales en el consumidor y con ello aumentar las compras
imprevistas.
La música en las tiendas, la música juega un papel
importantísimo en el comportamiento del cliente el 34%
de las personas gastan más dinero en un supermercado
con música que en uno en completo silencio y la música
nostálgica funciona un 17% más que la música genérica,
es por ello que en navidad ir al centro comercial es cómo
entrar a una rocola de villancicos.
El escaparate
Un escaparate es aquel espacio físico exterior de los negocios o tiendas comerciales cuyo
fin es la exposición de aquellos productos y servicios que el local o negocio en cuestión
posee a la venta.
La mercancía debe ser la base de la atracción visual del escaparate. Para que esto ocurra, necesitamos seleccionar, de todos los
artículos existentes del surtido de la tienda, aquellos que tengan una mayor fuerza visual, es decir, los que por su color, forma,
diseño, tamaño, estilo o textura, sean capaces de atraer o llamar fácilmente la atención del transeúnte.
La mercancía debe ser sin lugar a dudas, la protagonista del escaparate y, por tanto, hay que procurar que toda la atención del
observador se concentre en ella, pero además para poder potenciarla eficazmente, es necesario que la mercancía forme una
adecuada composición de acuerdo a una técnica bien definida, y un color en sintonía con los restantes elementos que se
presentan en el área expositiva, con el fin de garantizar una escena realmente llamativa que provoque el deseo de poseer el
producto.
Las reglas básicas que debe cumplir la mercancía que se presenta en el área expositiva, se pueden resumir en
cuatro:
– La mercancía no debe conformar un espacio recargado o masificado. El escaparate no es una mini tienda.
– La mercancía debe atribuir a la exposición una importante fuerza visual, mediante la selección de aquellos
artículos que sean capaces de atraer o llamar la atención. El escaparate debe ser capaz de provocar al transeúnte.
– La mercancía debe conformar una composición temática unificada o segmentada. El escaparate no es una
mezcla de artículos sin sentido.
– La mercancía debe conformar un estado fresco y renovado. El escaparate debe renovarse totalmente cada 21
días como máximo.
Además de estas cuatro reglas básicas o fundamentales se pueden lograr mejores resultados en la exposición,
siempre y cuando la mercancía posea un atractivo y una originalidad en función del mensaje que se desea transmitir.
3. La composición
Componer es el arte de ordenar los volúmenes en un espacio, con armonía y gusto, guardando el orden y el sentido de unidad.
En el arte de crear escaparates, la composición debe producir a la vista del observador un efecto de conducción de la mirada de
manera lógica y ordenada para no perderse en la mercancía y evitar la confusión.
La composición está directamente relacionada con las técnicas de escaparatismo que explicaremos más adelante.
A la hora de ordenar la mercancía en el espacio del escaparate, hay que tener en cuenta los principales elementos que
determinan la composición y en definitiva la técnica en la que se fundamentará el escaparate. Estos elementos
son:
– La ordenación o estructura.
– La temática.
– La dominancia.
– El equilibrio.
4. La iluminación
La iluminación es, sin duda, uno de los elementos más importantes a tener en cuenta a la hora de montar un escaparate,
precisamente por los efectos positivos o negativos que puede producir. La luz puede deformar la mercancía de tal manera que se
perciba distinta a como es en realidad. Por eso debemos conocer la luz a nivel técnico, y darle un tratamiento en cada caso, en
función de la naturaleza del producto y el contenido del mensaje, lo que implica una suma de conocimientos importantes sobre
iluminación que no podemos descuidar. En cualquier caso, debemos tener en cuenta que los focos o puntos de luz no
deslumbren a las personas que observan el escaparate, así como evitar los tubos fluorescentes como base de la iluminación.
5. La estacionalidad
La presentación de la mercancía en el escaparate en tiempo estacional está formada por aquellos productos
sometidos a una moderada o fuerte estacionalidad.
En líneas generales, la exposición de los productos estacionales se debe anteponer a cualquier otro, es decir, que
estos artículos hay que destacarlos de forma especial en el espacio del escaparate para darlos a conocer en primera
línea de presentación. Será necesario utilizar todos los medios disponibles:
Los productos deben estar en perfecta sintonía en relación a la época del año en la que nos encontramos. Son
muchos los establecimientos comerciales que sus ventas oscilan de forma importante dependiendo de la estación del
año; por lo que, sus escaparates deben exponer determinados productos en función de la época del año.
La estacionalidad es la cantidad de tiempo que permanecen los productos en exposición dentro del escaparate, por lo
que resulta un elemento muy importante a la hora de percibir una buena imagen de establecimiento dinámico,
fresco y renovado.
La publicidad en el lugar de venta o señalética de comunicación estacional, resultará un elemento imprescindible
para informar a los clientes y poder transmitir con más fuerza e impacto visual aquellos productos sometidos a una
importante estacionalidad.
6. La técnica
En la creación de un buen escaparate necesitamos, además de un cierto sentido artístico, una técnica en la que
basarnos, para poder realizar un buen trabajo técnico y estético, tanto de los bocetos de partida como de los
elementos fundamentales que van a permitir crear una escena provocativa y vendedora. A la hora de organizar la
escena del escaparate, hay que analizar las técnicas en las que se basa la composición gráfica o escenográfica del
escaparate