El enfoque administrativo de Henry Ford se caracterizó por su énfasis en la estandarización,

la eficiencia y la producción en masa. Ford revolucionó la industria automotriz al

implementar la línea de ensamblaje, un método de producción que dividía el proceso de
fabricación en tareas simples y repetitivas, permitiendo así una producción más rápida y
económica de vehículos.

La historiadora Diana Uribe contextualiza la figura de Henry Ford en el contexto de su

tiempo, destacando su visión innovadora y su capacidad para transformar radicalmente la
industria. Ford no solo introdujo métodos de producción revolucionarios, sino que también
fue pionero en la implementación de políticas laborales progresistas, como el pago de
salarios más altos y la reducción de la jornada laboral, lo que le valió el reconocimiento
como un empresario visionario y humanitario.

Entre las cualidades por las que Henry Ford es considerado un gran empresario se
encuentran su determinación, su visión de futuro y su capacidad para llevar a cabo sus ideas
con determinación. Ford era conocido por su obstinación y su enfoque meticuloso en la
mejora continua de sus productos y procesos. Además, su habilidad para identificar y
satisfacer las necesidades del mercado lo convirtió en un líder indiscutible en la industria
automotriz de su época.

En resumen, el enfoque administrativo de Henry Ford se caracterizó por su innovación,

eficiencia y atención a las necesidades del mercado, mientras que sus cualidades
personales, como su determinación y visión de futuro, lo consolidaron como uno de los
grandes empresarios de la historia.