Está en la página 1de 9

ELEMENTOS SUBJETIVOS DEL TIPO

Los elementos subjetivos del tipo son: dolo o culpa.

a) Dolo:

El dolo consiste en conocer (elemento cognitivo) y querer (elemento volitivo) la


realización de los elementos del tipo objetivo. Entonces obra con dolo quien conoce y
quiere realizar los elementos del tipo penal objetivo. El dolo se clasifica de acuerdo con el
predominio del elemento cognitivo o volitivo en:

Dolo directo: Es aquel dolo presente en aquellos casos en que el sujeto persigue la
realización de un tipo penal determinado, teniendo su cumplimiento como objetivo. En
estos casos prima el elemento volitivo. Pedro quiere matar a Juan. Pedro compra un arma
de fuego. Pedro espera que Juan regrese a su domicilio, le dispara y lo mata. Pedro ha
cometido homicidio con dolo directo respecto de Juan.

Dolo directo de segundo grado (o dolo de las consecuencias seguras o necesarias): Este tipo
de dolo se da en aquellas situaciones en donde el sujeto se representa como consecuencia
clara o segura la realización del tipo, y a pesar de ello, igualmente obra asumiendo la
realización del tipo como una consecuencia necesaria para llevar a cabo su obra y lograr sus
objetivos. Ejemplo: Pedro quiere matar a Juan. Juan debe tomar un avión hoy en la tarde.
Para matar a Juan, Pedro oculta en su maletín una bomba que explotará en pleno vuelo,
matando a Juan y a todos los pasajeros del avión. Respecto de Juan, Pedro ha actuado con
dolo directo, respecto del resto de los pasajeros con dolo de las consecuencias seguras o
necesarias.

Dolo eventual: Es tipo de dolo es aquel que se presenta e las situaciones en las que el sujeto
activo no busca la realización del tipo penal, ni tampoco se representa su realización como
algo seguro o necesario, sino que más bien se lo plantea como una posibilidad, y a pesar de
aquello actúa de todas maneras. En estos casos existe una cuota de voluntariedad
expresada a través de la aceptación del resultado que el sujeto se ha representado. Se
estima la concurrencia de dolo eventual cuando el sujeto se representa la posibilidad de un
resultado que no se proponía causar, pero que en definitiva acepta (lo ratifica) para el caso
de que el evento llegara a producirse. Ejemplo: Juan circula en un vehículo a gran velocidad
por una zona peatonal, intentando esquivar a todos los peatones, pero sabiendo que es
posible impactar a alguno de ellos. Si Juan colisiona a algún peatón y lo mata, habrá
cometido homicidio con dolo eventual.

Para efectos prácticos, la doctrina ha establecido que cuando la Ley utiliza las
expresiones: “a sabiendas”, “conociendo”, “sabiendo”, “constándole”, “maliciosamente”,
“con malicia”, con “conocimiento de causa” u otras similares; está exigiendo la existencia
de dolo directo o dolo de las consecuencias seguras o necesarias.

1
b) Culpa:

El art. 2º del CP establece que las acciones y omisiones que cometidas con dolo o
malicia importarían un delito, constituyen cuasidelitos si sólo hay culpa en el que las
comete.

La ley establece parámetros para la ejecución de actividades inherentemente


riesgosas, por ejemplo: la conducción de vehículos motorizados, intervenciones quirúrgicas
o actividades en el ámbito de la construcción. Estos parámetros deben ser cumplidos por
todos los miembros de la sociedad a objeto de minimizar los riesgos propios de tales
actividades. En los delitos imprudentes o cuasi delitos no se realiza una conducta con el
propósito de lograr un resultado típico, ni siquiera se acepta este resultado como
consecuencia posible. No obstante, la sanción penal se impone por no seguir los estándares
o parámetros establecidos para la realización de las actividades que producen riesgos. El
sujeto no busca concretar el resultado típico, pero el resultado se produce igualmente
porque el sujeto no emplea el cuidado debido.

Para que exista un cuasidelito es necesario que concurran las siguientes


circunstancias: a) Ausencia de dolo: la conducta del agente debe verificarse mediando la
culpa; b) la conducta debe satisfacer un tipo penal determinado que establezca una
penalidad a título de culpa, por ejemplo: el homicidio o las lesiones art. 490 CP; c) que la
naturaleza de la culpa coincida con la naturaleza o tipo de culpa que establece la ley para el
caso concreto.

ITER CRÍMINIS

Las etapas de ejecución del delito o “iter criminis” está regulada en el art. 7 del CP.
El “iter criminis” o “iter criminalis” es el esquema abstracto del camino práctico que un
sujeto debe recorrer para la comisión de un delito. Este “camino” está compuesta de varias
etapas o fases.

A. Etapa interna o subjetiva: Es la etapa de ideación delictiva. El sujeto activo forma


en su conciencia el plan para cumplir el fin de la acción que desea ejecutar. Toda intención
que no tiene manifestación en el mundo exterior no es punible.

B. Etapa externa u objetiva: En el plano temporal, es la etapa que sigue a la interna o


subjetiva. Cuando la intención del sujeto se exterioriza comenzará una fase de preparación
(actos preparatorios) y luego una fase de ejecución (actos de consumación). Por regla
general, los actos preparatorios no son punibles.

2
Actos de Ejecución del Delito:

La consumación, frustración (tentativa acabada) y la tentativa (tentativa inacabada)


son situaciones que se producen en la etapa de ejecución del delito.

El delito consumado existe cuando se cumplen todas las condiciones subjetivas y


objetivas de la figura penal, cumpliéndose por ende en su integridad el proceso conductual
y material descrito en el tipo peal respectivo.

Hay tentativa cuando el culpable da principio a la ejecución del delito por hechos
directos, pero faltan uno o más para su complemento.

Hay frustración cuando el sujeto activo pone de su parte todo lo necesario para que
el crimen o simple delito se consume y esto no se verifica por causas independientes de su
voluntad.

Desde el punto de vista subjetivo, no hay diferencias entre tentativa, frustración y


consumación, dentro de cada una de estas fases se requiere el mismo tipo de dolo. Las
diferencias se encuentran en el plano objetivo. En la consumación el resultado típico se
produce, en la tentativa y la frustración no. En la tentativa la acción no es completa y por
ello el resultado no se produce. En la frustración la acción se realiza complemente pero el
resultado no se produce.

¿Cuándo se entiende que se ha dado comienzo a la ejecución del delito?

El art. 7º CP establece ciertos requisitos:

a) Que el autor principie la ejecución del delito: Ello ocurre cuando el sujeto expresa
o manifiesta una verdadera determinación para llevar a cao el delito. El análisis debe
realizarse desde el punto de vista del sujeto activo concreto, sobre la base del plan
y la concepción de la realidad que tenga al momento de manifestar la conducta.

b) Que los hechos ejecutados sean directos en relación con la concreción del delito:
No cualquier conducta implica dar inicio a la ejecución del delito, debe tratarse de
conductas directa e inmediatamente relacionada con la concreción del delito. Lo
anterior tendrá lugar cuando: i) la conducta esté encaminada en forma recta a la
comisión del delito, lo que se determina a partir de una análisis objetivo, desde el
punto de vista de una tercero imparcial; y ii) el acto sea idóneo para alcanzar el
resultado típico esperado.

3
AUTORÍA

Es autor aquel sujeto sin cuya intervención el hecho típico no puede siquiera principiar a
ejecutarse. Si la “autoría” consiste en que sólo una persona partícipe en el ejecución de un
delito no se presentan mayores problemas. Si varias personas concurren a la ejecución de
delito el problema práctico será determinar que calidad tendrán todos los sujetos que
participan.

Conceptos:

• Autor directo, inmediato o material: El sujeto activo ejecuta, libremente, por sí


mismo la actividad material que resulta necesaria para cometer el delito. Ejemplo:
Pedro mata a Juan. Pedro es autor inmediato

• Autor mediato: El sujeto activo ejecuta el delito a través de otra persona, que le
sirve de instrumento material para la ejecución del delito. El autor mediato domina
sobre la base de un error, coacción, situación de superioridad o de poder, la
voluntad de que realiza en forma inmediata o de propia mano la acción típica
prohibida. El ejecutor es un instrumento. Por ejemplo: Pedro amenaza a Juan con
matar a toda su familia para que mate a Diego. Juan mata a Diego. Pedro es autor
mediato.

• Coautoría: Se presenta cuando dos o más personas, previo acuerdo expreso o tácito
realizan un hecho de manera mancomunada mediante una contribución a su
realización. Pedro y Juan deciden matar a Diego. Juan consigue un arma y se la
entrega a Pedro. El día de los hechos Juan le da a Diego un somnífero, luego abre
una ventana de la casa para permitir el ingreso de Pedro. Una vez en la casa, Juan le
indica Pedro el lugar donde Diego duerme. Pedro ingresa a la pieza de Diego,
mientras Juan sale de la casa para advertir a Pedro de la presencia de personas que
los pueden descubrir. Pedro, aprovechando que Diego duerme, lo mata. Pedro y
Juan son coautores.

• Inducción (instigación): En sentido estricto es una forma de participación, y consiste


en la realización de conductas dirigidas a la afectación del mismo bien jurídico contra
el que se dirige el autor, pero por vías indirectas. Existe inducción si una persona de
forma directa, a través de medios materiales o psicológicos, forma o determina en
otra persona una resolución delictiva, quien posteriormente realiza la conducta
típica. El autor del delito por su parte tiene libertad para adoptar la decisión delictiva

Conforme a lo dispuesto en el art. 15 Nº 2 CP, se consideran autores (se les


denomina entonces autores inductores) a los que inducen directamente a otro a
ejecutar un delito. Inducir consiste en crear en otra persona la determinación de
cometer un delito. La inducción debe ser directa, es decir, a través de actos positivos

4
para lograr la formación de la voluntad delictiva en el autor ejecutor. Ejemplo: Pedro
ofrece a Juan un millón de pesos para que mate a Diego. Juan mata a Diego. Pedro
es autor inductor. Juan es autor directo, inmediato o ejecutor

CONCURSO DE DELITOS

I.- Introducción:

El derecho penal se construye a partir de la conducta humana. En razón de lo anterior,


podría pensarse que quien realiza una conducta típica ha cometido un delito, y por lo tanto
merece la imposición de una pena.

Ejemplo: Juan propina a Pedro un golpe de puño en el rostro y le fractura la nariz


requiriendo de un tiempo de recuperación de 35 días. Juan ha incurrido en la conducta
típica del artículo del artículo 397 Nº 2, ha cometido un delito de lesiones graves y es
merecedor de la pena correspondiente.

Por lo tanto si un sujeto realiza diversas conductas típicas comete tantos delitos como
conductas típicas ha ejecutado. Ejemplo: Juan se encuentra en un bar, discute con Pedro y
con Diego. Con un cuchillo, Juan propina una estocada en el corazón a Pedro y lo mata. Con
el mismo cuchillo, Juan le corta un dedo a Diego. Juan ha cometido homicidio respecto de
Pedro y mutilación de miembro menos importante respecto de Diego.

Sin embargo, no siempre la conducta típica coincide, como en los ejemplos con la unidad
de acción. Lo anterior se produce, pues la ley penal debe “recortar” valorativamente la
realidad natural para crear tipos penales. En efecto, puede ocurrir que un sujeto al realizar
una conducta típica, esa misma conducta se encuadre o realice dos o más tipos penales.
Ejemplo: Pedro rompe la venta de la casa de Juan e ingresar a sustraer especies. La conducta
de Pedro satisface los tipos penales de los delitos de daños, violación de morado y robo en
lugar habitado o destinado a la habitación.

Por otra parte, hay casos en los que el sujeto desarrolla una acción típica de manera
reiterada en un mismo contexto espacio-temporal, pero esa reiteración no determina una
pluralidad de delitos. Ejemplo: En una pelea, Juan propina a Pedro tres golpes de puño en
el rostro y dos patadas. Juan ha cometido un solo delito de lesiones.

Por lo tanto, la teoría del concurso de delitos busca determinar si el hecho delictivo
realizado es susceptible de una unidad o pluralidad valorativa, y de acuerdo con ello,
constitutiva de uno o varios delitos.

5
II.- Conceptos:

§ Unidad natural de acción: Se trata de un conjunto de acciones iguales que lleva a cabo
un sujeto dentro del mismo contexto y con el mismo objetivo. Consiste en una
reiteración de la misma conducta en el mismo contexto espacio temporal. Existe unidad
tanto en el ámbito objetivo como subjetivo y siempre que se afecte al mismo sujeto
pasivo. Ejemplo: En una pelea, Juan propina a Pedro tres golpes de puño en el rostro y
a Diego dos patadas en el torax. Juan ha cometido dos delitos de lesiones, uno respecto
de Pedro y otro respecto de Diego.

§ Unidad jurídica de acción: Es la ley la que establece que una serie de acciones u
omisiones en su conjunto constituyen la conducta penalmente sancionada. Se trata de
delitos con multiplicidad de acciones, en estos casos el tipo penal actúa como una
“cuerda” que amarra diversas acciones u omisiones. En estas situaciones encontramos
diferentes clases de delitos:

a) Delitos complejos: Aquellos en los que el tipo penal exige la realización de dos acciones
distintas que consideradas aisladamente son constitutivas cada una de ellas de tipo
penal autónomo. Ejemplo: Robo con Homicidio.
b) Delitos permanentes: Aquellos en que la consumación se extiende en el tiempo
mediante la repetición de actos que dependen únicamente de la voluntad del sujeto
que ejecuta la acción típica. Ejemplo: Secuestro.
c) Delitos relacionados con hipótesis de tipicidad reforzada: Aquellos en los que el tipo
penal establece varias posibles acciones, de tal forma que la realización de cualquiera
de ella es suficiente para satisfacer las exigencias del tipo penal. Ejemplo: Delito de
trata de personas, art. 411 quáter CP.
d) Delitos habituales: El tipo penal exige la ejecución de forma reiterada de una determina
acción. Ejemplo: Delito de maltrato habitual art. 14 Ley 20.066.
e) Delito continuado: Se trata de una definición jurisprudencial y doctrinaria, y no legal
como las situaciones anteriores. Se trata de aquellos en los que el mismo sujeto activo
lleva a cabo varias acciones conectadas entre sí por una relación de dependencia y que
infringen la misma disposición jurídica, de tal manera que el supuesto de hecho los
abarca en su totalidad en una unidad de acción final que satisface completamente las
exigencias del tipo penal. En consecuencias las acciones son castigadas como un solo
delito. Por ejemplo: Pedro quiere robar todas las especies almacenadas en una bodega.
Una vez en el lugar del robo se percata que no es posible sustraer todas las especies en
un solo día y lo realiza durante tres noches sucesivas. Quienes sostienen que se trata
de un delito continuado, estimaran que existe un solo delito de robo en lugar no
habitado; quienes niegan la existencia del delito continuado estiman que estamos
frente a tres delito de robo en lugar no habitado.

6
III.- Concurso Real

Está regulado en el art. 74 del CP. “Al culpable de dos o más delitos se le impondrá
todas las penas correspondientes a las diversas infracciones”. Existe concurso real cuando
un sujeto ha participado en varios delitos, se trata de una situación de unidad de sujeto
activo y pluralidad de delitos.

Los requisitos del concurso real son:

a) Unidad de sujeto o sujetos activo: una misma persona participa en varios hechos;
b) Independencia fáctica o material entre los diferentes delitos cometidos: los delitos deben
haberse cometido a través de diferentes acciones;
c) Independencia jurídica de las acciones: las acciones no deben estar ligadas ente sí a través
una relación de necesidad recíproca (como en los casos de delito continuado);
d) Ausencia de condena de los delitos que se pretenden penalizar: el concurso real es un
régimen especial de penalidad.

La forma de aplicación de las penas, en situaciones de concurso real, es la siguiente:

- Regla general: El artículo 74 inciso 1º del CP, consagra la regla general: un sistema de
acumulación material o aritmética de las penas, que incluye el denominado concurso
heterogéneo (delitos de distinta especie o clase). La misma disposición establece otras
reglas de acumulación de las penas.
- Excepciones: Son excepciones a la general:
i) la acumulación jurídica prevista en el art. 351 del CPP, en el caso de concurso homogéneo
(delitos de la misma especie);
ii) la absorción de la pena, cuando en un caso de concurso real uno de los delitos sea el
medio necesario para cometer el otro (art. 75, inc. 1º, parte final) esta situación es también
conocida como concurso medial. Además existe otra regla especial en el art. 451 del CP.

V.- Concurso Ideal:

Está consagrado en el art. 75 del CP. Se trata de situaciones en las que un solo hecho
constituye uno o más delitos.

Los requisitos del concurso ideal son:

a) Unidad de sujeto o sujetos activo: una o varias personas ejecutan las acciones;
b) Unidad de acción: La acción debe estar compuesta por una serie de actividades unidas
por un fin o propósito determinado, lo que permitirá apreciarlas unitariamente.
c) Pluralidad de valoración jurídica: Las diversas actividades valoradas como una sola acción
deben ser posible de subsumir en varios tipos penales o en un mismo tipo penal varias
veces. Por lo tanto, el concurso puede ser heterogéneo (si las acciones pueden subsumirse

7
en delitos distintos) u homogéneo (si las acciones pueden subsumirse en el mismo tipo
penal de manera reiterada).

La forma de aplicación de las penas, en situaciones de concurso ideal está regulada


en el inciso segundo del art. 75 CP y consiste en aplicar la pena mayor al delito más grave.

V.- Concurso Aparente de Leyes Penales

Estaremos en presencia de un concurso aparente de leyes penales en aquellos casos


en que una acción pareciese cumplir con los requisitos de procedencia de dos o más tipos
penales, pero en realidad, dicha acción solamente satisface los supuestos de procedencia
de sólo uno de ellos, en tanto que los demás resultarán desplazados por causas lógicas o
valorativas.

Se trata de una “disputa” entre varias normas penales, todas las que en principio
parecen aplicables al caso concreto; no obstante, luego de llevar a cabo un correcto proceso
de interpretación una sola de ellas es la que corresponde aplicar. No se trata de una
situación de concursos de delitos, sino que más bien un problema de interpretación de las
normas. Sin embargo, este problema interpretativo está estrechamente relacionado con
los conceptos de concursos de delitos, pues antes de intentar aplicar los principios que
resuelven los concursos aparentes, debemos tener claro si nos encontramos frente a un
caso de pluralidad de delitos o de un solo delito que debe ser regido por una sola norma.

Los principios que permiten solucionar los problemas de concursos aparente de


leyes penales son los siguientes:

a) Principio de especialidad: Conforme a este principio, si una determinada acción parece


ser posible de subsumir en dos normas entre las que puede existir una relación de
genero-especie, se debe preferir la norma que comprende de manera más perfecta
todas las particularidades de la conducta. La norma que posee un carácter más general
es desplazada por la norma especial. Ejemplo: Juan mata a su padre. Esta conducta
puede ser calificada como homicidio (art. 391) y parricidio (art. 390). En este caso la
norma del parricidio es especial respecto del homicidio, la conducta de matar al padre
queda captada en todos sus extremos por el art. 390 por sobre del art. 391 que tiene un
carácter general.
b) Principio de consunción: Es también conocido como principio de absorción. La aplicación
de este principio tiene lugar cuando la ejecución de una acción se encuentra
comprendida dentro de la ejecución de otra u oras acciones, por tal razón, la última
acción ejecutada “absorbe” las acción “menor”. De esta manera se desplazaban las
normas que permitan sancionar las acciones que han sido “absorbidas”, y sólo se aplicará
la norma que sanciona la conducta que “absorbe” a las demás. Ejemplo: Para matar a
Juan, Pedro le dispara, Juan resulta herida en el hombro. Luego, Pedro apuñala a Juan en
el corazón y lo mata. Los hechos no son calificados como homicidio frustrado y homicidio

8
consumado. La última acción absorbe la primera y el hecho se califica solo como
homicidio consumado.
c) Principio de subsidiaridad: Este principio opera cuando un determinado hecho pareciera
ser sancionable a través de dos o más normas, pero por un mandato expreso de la ley,
la regulación y sanción de este hecho es captado por una sola de las normas. La ley es la
que desplaza la aplicación de una de las normas.
d) Principio de accesoriedad: Se trata de una forma especial del principio de consunción,
que tiene aplicación en los casos de tipos penales con una pluralidad de hipótesis. Por
ejemplo: Pedro golpea, hiere y maltrata a Juan. Pedro ha cometido un delito de
lesiones del art. 397 del CP.

También podría gustarte