Está en la página 1de 2

TEMA 23: PASOS PARA MI RECONCILIACIÓN CON DIOS

OBJETIVOS
Que el niño aprenda a no tener miedo a acercarse al Sacramento de la Confesión y
que conozca bien que pasos se debe dar para hacer una buena confesión
Materiales:
Papelógrafos, masking tape, plumones, trébol, vela.
1. AMBIENTACIÓN
Laminas o dibujos de algún niño o niña confesándose, donde se pueda ver escrito
los cinco pasos para la confesión.
2. MOTIVACIÓN
Canción: “Danos un corazón” “Tú que siempre nos perdonas”
La historia de un niño sin nombre…
Un niño le robó a su amigo un juguete y le contó a su mamá que se lo había dado.
Después de un tiempo, su conciencia le decía que había sido ladrón y mentiroso. El
niño estaba triste.
Arrepentido y llorando fue un día a su mamá y le contó la verdad. la mamá –que era
muy buena– se fue con su hijo a comprar a la juguetería otro juguete igual. Los dos
se lo devolvieron al amigo, llorando y pidiéndole perdón… el niño se confesó,
quedó muy contento y no lo volvió a ser más. Ese niño ya tenía nombre; se había
encontrado a sí mismo y su nombre era “Cristiano”, seguidor de Cristo.
Dialogar con los niños acerca de la canción y la dinámica
 ¿El niño estaba alegre de lo que había hecho?, ¿qué falta ha de más de robar
había cometido?.
 ¿Cuándo se arrepiente como procede? ¿qué pasos da para poder amistarse con su
amigo y ciertamente con Dios?.
 ¿Le hubiese bastado a su amigo simplemente confesarse?
También nosotros podemos extraviarnos, perder el camino, alejarnos del padre y del
amor a los hermanos.
Pero, si nos arrepentimos delante de Dios y confesamos nuestros pecados al
sacerdote, que representa a Cristo en la Iglesia, Dios nos perdona siempre y
quedamos reconciliados.
3. ILUMINACIÓN
Lc. 15, 11- 24; Hch. 2, 1-4; 1Cor. 12, 4-7. 11
 Antes de confesar nuestros pecados, debemos examinar nuestra conciencia. En
silencio, delante de Dios, repasamos los Mandamientos y pensamos si hemos
hecho siempre lo que Jesús nos ha mandado hacer. (Examen de Conciencia).
 Cuando vamos al sacerdote, hemos de hacer como el hijo pródigo: reconocer
nuestros pecados, dolernos sinceramente de ellos sintiendo la necesidad de Dios,
al que hemos abandonado (Dolor de los pecados). Hay dos maneras del dolor
de nuestros pecado: de contrición: ‘que es el dolor de haber ofendido a Dios por
ser Él Quien Es, Bondad Infinita’; y el dolor de atrición: ‘que es un sentimiento
espiritual de haber ofendido a Dios por tener miedo al castigo o por la misma 1
fealdad del pecado o porque ese pecado me tiene incomodo. El dolor de
Contrición perdona de inmediato los pecados mortales, si se tiene el propósito de
confesarlos.
 Después de arrepentirnos debe nacer en nosotros un verdadero propósito de no
volver a pecar más y de evitar todo lo que me pueda alejar de Dios o a pecar de
nuevo. (Propósito de Enmienda).
 Confesar nuestras culpas al sacerdote su ministro(Decir los pecados al
Sacerdote), y debemos empezar a confesarnos empezando por todos los pecados
más graves, con su número y circunstancias(lugar donde se realiza la falta). Y
conviene decir los pecado veniales.
 Estar dispuestos a seguir sus consejos y a Cumplir la Penitencia que nos
imponga. Y hacer las buenas obras que manda el confesor.
 Nuestra confesión tiene que ser: Concisa(no decir en la confesión otras cosas,
sino solo nuestra faltas), Concreta(ir a la falta misma que hemos cometido) y
Completa(Decir todo lo que tenemos que decir y no callarnos nada por
vergüenza, ya que esto haría inválida la Confesión y sería un sacrilegio, lo cual
quiere decir que si vamos con cinco pecados salimos con seis y uno bien grave.
 El padre nos acoge como Jesús acogía a los que acudían a Él: mientras levanta
su mano sobre nuestra cabeza, nos da la absolución:
“Yo te absuelvo de tus pecados en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo”
Tus pecados te son perdonados. Vete en paz y no peques más.
 Después de confesarnos, oramos y damos gracias a Dios Padre porque nos ha
dado un corazón nuevo y alegre. Y hacemos como penitencia, lo que sacerdote
nos ha mandado hacer.
4. INTERIORIZACIÓN
Hacer caer en la cuenta de que Dios es un Dios de amor, por eso es bueno que uno
se prepare cada vez que va a confesarse. Compartir en grupos las preguntas, plasmar
en un papelógrafo y exponer su trabajo.
 ¿Dónde crees tú que es bueno hacer nuestro examen de conciencia?.
 ¿Cómo explicarías el dolor de los pecados de un niño que se ha peleado con su
hermano y está arrepentido?. Si tuvieras que dibujarlos cómo los dibujarías.
 ¿Qué hace el padre el Confesonario?
5. COMPROMISO
 Nos comprometernos a compartir esta catequesis con nuestros papás.
 Nos comprometemos a ya ir preparándonos para confesarnos bien. Dios no nos
perdona si nos confesamos sin arrepentimiento.
6. ORACIÓN
Señor te pedimos que envíes el Espíritu Santo
Sobre nosotros, llena mi alma con tu fuerza y tu amor,
Y ayúdanos a vivir en el amor con los demás.

También podría gustarte