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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE SINALOA

FACULTAD DE INFORMÁTICA CULIACÁN

ASIGNATURA: Sistemas de información

DOCENTE: Alexis Moisés Montaño Araujo

TEMA: La inteligencia de negocios, un


concepto informático

Alumno: Paniagua Rivas Jorge Guadalupe


GRUPO: 3-1

Culiacán. Sin. 11/4/2024


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Desarrollo:

El concepto de Inteligencia Empresarial (IE) es una de las piedras angulares en la


intersección entre la tecnología de la información y la gestión empresarial. Aunque
muchos podrían pensar que este término es relativamente nuevo, su origen se
remonta a décadas atrás, a una época en la que la informática comenzaba a dar sus
primeros pasos. En el artículo de Hans Peter Luhn publicado en el IBM Journal en
octubre de 1958, titulado "Un Sistema de Inteligencia Empresarial", se esbozó por
primera vez el concepto de Inteligencia Empresarial. En ese entonces, Luhn lo definió
como "la capacidad de comprender las interrelaciones de los hechos presentados de
tal manera que guíen la acción hacia un objetivo deseado". Esta definición, esbozada
hace más de medio siglo, sigue siendo relevante.

Es esencial comprender que la Inteligencia Empresarial no se trata simplemente de


recopilar datos, sino de transformar esos datos en conocimiento accionable para
mejorar la estrategia empresarial y obtener ventajas competitivas en el mercado. En
este sentido, la IE se nutre tanto de información estructurada como no estructurada, lo
que presenta un desafío en su gestión y comprensión para aquellos no familiarizados
con su funcionamiento.

La evolución de la IE ha ido de la mano con el avance tecnológico, lo que ha permitido


que las empresas accedan de manera más rápida y eficiente al conocimiento empírico
sobre su negocio. Las tecnologías de IE y Gestión del Conocimiento (GC) han sido
fundamentales en este proceso, proporcionando herramientas y metodologías para
apoyar la toma de decisiones empresariales.

Sin embargo, surge una pregunta fundamental: ¿cuándo la información se convierte en


conocimiento y cuándo el conocimiento se convierte en sabiduría empresarial? Esta
distinción no siempre es clara y puede variar según el contexto y las necesidades
específicas de cada organización.

Para aprovechar al máximo el potencial de la IE, es crucial establecer una sólida


Arquitectura Empresarial (AE) que integre las distintas dimensiones del negocio, la
tecnología y la gestión de la información. La AE proporciona un marco estructurado
para alinear los objetivos empresariales con el uso y desarrollo de la tecnología de la
información.

En este contexto, los sistemas de información son cruciales, pues son la base sobre la
cual se construye el conocimiento empresarial. Desde los sistemas de procesamiento
de transacciones (SPT) hasta los sistemas de soporte a la toma de decisiones (STD),
cada uno de estos sistemas contribuye a la recopilación, procesamiento y análisis de
datos para generar conocimiento útil.

Además, la gestión eficaz de los recursos de tecnología de la información y la


gobernanza son aspectos clave para garantizar el éxito de la IE en una organización.
Estas políticas y prácticas aseguran que las herramientas y recursos tecnológicos se
utilicen de manera óptima para alcanzar los objetivos del negocio.

Conclusión:

La Inteligencia Empresarial representa mucho más que una simple herramienta


tecnológica; es un enfoque holístico para transformar datos en conocimiento
accionable y, en última instancia, en sabiduría empresarial. Desde sus humildes
comienzos en la era de la informática hasta su ubicuidad en el panorama empresarial
actual, la IE ha demostrado ser un catalizador de la innovación y la eficiencia. Al
adoptar una sólida Arquitectura Empresarial y aprovechar al máximo los recursos de
tecnología de la información, las organizaciones pueden capitalizar plenamente el
potencial de la IE para tomar decisiones informadas, impulsar el crecimiento y
mantenerse a la vanguardia en un mercado cada vez más competitivo.

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