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EL ALCOHOL: EN TU ESTILO DE VIDA , NI UN SOLO

VASO
El alcohol no es más que un veneno causante de numerosas enfermedades crónicas, trastornos
mentales, abusos, violencia y accidentes. Todo el mundo está de acuerdo en que el consumo de cantidades
importantes de alcohol daña la salud física, mental y social, pero algunos todavía creen que en dosis
moderadas o bajas puede resultar beneficioso.
Sin embargo, un moderado o bajo consumo de alcohol tiene también consecuencias negativas.
Incluso un solo vaso de bebida alcohólica al día resulta nociva, y por lo tanto, no es aceptable.

PROPOSITO: Demostrar las buenas razones para rechazar un solo vaso de vino, de cerveza,
champaña o cualquier bebida que contenga alcohol:

 Riesgo de accidente: La legislación española admite un máximo de 0,3 gramos de alcohol por litro
de sangre para los conductores profesionales y niveles, y de 0,5 g/l para los demás. Esos niveles de
alcohol en sangre se alcanzan fácilmente después de beber un solo vaso de vino de 200 ml.,
especialmente en el caso de las mujeres. Un solo vaso o copa de bebida alcohólica ya altera la
capacidad para conducir y aumenta el riesgo de accidente, por lo que en varios países europeos la
tolerancia con el consumo de alcohol es cero, y el límite se establece en 0,0 g/l.
 Riesgo de cáncer: El consumo de un vaso de vino por día aumenta el riesgo de cáncer de mama,
según muestran varios estudios científicos [1]. El Instituto Nacional del Cáncer de Francia ha
publicado un amplio informe sobre el efecto cancerígeno del alcohol en el que se dice que “incluso un
consumo moderado del alcohol aumenta el riego de cáncer” [2], particularmente de cáncer de mama. Esta
declaración reviste especial valor al proceder de un país como Francia, unos de los principales
productores de bebidas alcohólicas del mundo. Al menos esta vez, la presión de la industria
alcoholera no ha podido ocultar la evidencia científica.
 Mal ejemplo: ¿Cómo puedo aconsejar a un adolescente o a un joven, tan vulnerables a los daños
causados por el alcohol, que no beba o que no fume si yo mismo transijo frente a la presión social
para consumir? ¿Cómo podemos ayudar a tanta gente a nuestro alrededor que tiene problemas con el
alcohol, si a nosotros mismos nos falta el dominio propio necesario?
 Coherencia con tus principios biblicos: Mantener siempre una posición clara sobre el
consumo de bebidas alcohólicas: tolerancia cero, es decir, abstinencia total de cualquier tipo de
bebida alcohólica.
 Alteración de la conciencia moral: El alcohol es una droga psicoactiva que trastorna el
funcionamiento neuronal, especialmente el de los lóbulos frontales del cerebro, sede de las facultades
superiores del ser humano. Es precisamente con los lóbulos frontales, sede de la razón y del
pensamiento, con los que entramos en comunión con la divinidad. Si un solo vaso altera la
capacidad para conducir, ¡cuánto más interrumpirá nuestra relación con el Cielo! Hemos escuchado
testimonios de como orar se vuelve imposible tras consumir alcohol, a la vez que pecar resulta
mucho más fácil.
 Falta de discernimiento espiritual: El alcohol anestesia el dolor físico, y también las
facultades espirituales como la del discernimiento.

“Entonces Jehová habló a Aarón y le dijo: Ni tú ni tus hijos debéis beber vino ni sidra… para poder
discernir entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio…” Levítico 10:8-11

REFLEXION:
.
 Cuando en ocasión de estas próximas fiestas nos veamos probablemente confrontados al consumo de
una bebida alcohólica, no olvidemos:
 Que un solo vaso puede suponer la diferencia entre la salud y la enfermedad;

 entre el gozo verdadero y la diversión insensata;

 entre la mente clara y la falta de discernimiento espiritual.

El fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios y velad en oración.” [4] La sobriedad que
nos conviene en este tiempo final es la abstinencia total de cualquier tipo de
bebida alcohólica y de todo tipo de drogas adictivas, tal como la ciencia, el
Espíritu de profecía y la Biblia recomiendan.

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