Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
INTRODUCCIÓN:
Usualmente hemos escuchado de Elías en la escuela dominical, de cómo oró y Dios envió fuego,
o lluvia, o como fue llevado a los cielos. Y tales historias cautivaban nuestra imaginación, lo
veíamos como un hombre valiente, casi un héroe, que se enfrentaba al rey idólatra. Pero, así
como de niños solo podíamos entender algunos aspectos de la vida de este hombre, así
también veremos en esta noche que Elías necesitó pasar por la escuela de Dios, antes de tener
sus grandes victorias.
RECAPITULACIÓN
Resumen de la 1era PARTE: La idolatría del pueblo, el celo, la oración, fe y valentía de Elías.
1 Reyes 17: 2 Y vino a Elías la palabra del SEÑOR, diciendo:3 «Sal de aquí y dirígete hacia el
oriente, y escóndete junto al arroyo Querit, que está al oriente del Jordán. 4 Y beberás del
arroyo, y he ordenado a los cuervos que te sustenten allí». 5 Él fue e hizo conforme a la
palabra del SEÑOR, pues fue y habitó junto al arroyo Querit, que está al oriente del Jordán. 6 Y
los cuervos le traían pan y carne por la mañana, y pan y carne al atardecer, y bebía del
arroyo.7 Sucedió que después de algún tiempo el arroyo se secó, porque no había caído lluvia
en la tierra.
Habíamos visto que una de las razones por las cuales el Señor mandó a Elías a esconderse era
por su propia salud espiritual. Quería preservar a su siervo de la soberbia, y quería mantenerlo
humilde para el servicio que aún le quedaba por delante. Necesitaba aún ser instruido y
mantenerse sumiso delante de Dios. Y es que como dice un comentarista: “¡cuán poco digno de
crédito es el hombre, cuán incapaz es de sostenerse en el lugar de honor! ¡Qué pronto aparece
en la superficie el yo, y el instrumento está presto a creerse algo más que un instrumento!
¡Tristemente es muy fácil hacer del servicio que Dios nos confía un pedestal en el que exhibirnos
a nosotros mismos!” Podemos decir entonces que el Señor valora más al siervo anónimo, pero
humilde, que el popular, pero soberbio. JESÚS mismo decía a sus discípulos: “Venid vosotros
aparte al lugar desierto, y reposad un poco” (Mr. 6) JOSÉ, MOISÉS, Y DAVID pasaron por lo
mismo. Veíamos que esa es una lección también para nosotros. (Que no tengamos deseos de
grandeza disfrazados de servicio al Señor)
Esta noche vamos a ver qué cosas y que lecciones había preparado Dios para ELÍAS:
1. LE HABÍA PREPARADO UN REFUGIO
El profeta había morado en la presencia de Dios y el Señor no lo iba a alejar de allí:
LE DIO INSTRUCCIÓN DE IR A QUERIT, AL ORIENTE DEL JORDÁN:
Al escuchar el nombre de este río, Elías había de recordar la fidelidad y el poder de Dios: el
pueblo había cruzado milagrosamente ese río al momento de entrar a la tierra prometida.
(Josué 3:7,10,13,17) El Dios viviente había juzgado antes a los ídolos y sus seguidores por
medio de Josué, y ese mismo Dios vivía ahora. (1) Nuestra fe se fortalece al recordar los
hechos poderosos del Señor. (Salmo 44:1-3)
EL REFUGIO ERA EL ARROYO QUERIT, NO UN RÍO: Un arroyo que podía secarse en cualquier
momento, para descansar en el DADOR, más que en los propios DONES. Hay riesgo de
confiar demasiado en los dones, Dios quería que ELÍAS confíe en ÉL Y SOLAMENTE ÉL. (2) Si
el Señor no nos da algo, es porque nos está cuidando, conoce nuestros corazones ¿En qué
confía Ud.?
EN EL REFUGIO DEL QUERIT TENDRÍA PROVISIÓN: El Señor iba a proveer para sus
necesidades, aunque humanamente nadie escogería un arroyo antes que un río.
SI ELÍAS QUERÍA RECIBIR LA BENDICIÓN DE DIOS, DEBÍA IR AL LUGAR ORDENADO: El profeta
podía haber preferido muchos otros escondites, pero debía ir a Querit si quería recibir el
suministro divino. Dios se había comprometido a proveerle todo el tiempo que
permaneciere allí. Ahora, la pregunta cae por su propio peso: (3) ¿Estoy en el lugar donde
Dios por su Palabra o por su providencia me ha asignado? Quizá somos como el hijo
pródigo, que carecía porque se fue a donde no debía estar. Israel seguía a la nube para
obtener el maná.
HUMILDAD: Quizá en su carne no quería parecer un cobarde, pero tenía que obedecer
aunque su ego y su carne sean humilladas.