Selección Natural

La selección natural es el proceso por el cual los organismos mejor

adaptados a su entorno tienen más probabilidades de sobrevivir y
reproducirse, transmitiendo sus características a las generaciones
futuras. Un ejemplo clásico es el de las jirafas con cuellos largos,
donde la ventaja en alcanzar comida alta favorece la supervivencia y
reproducción de individuos con este rasgo.

Selección Artificial

La selección artificial es el proceso en el cual los humanos

seleccionan y crían deliberadamente ciertas características deseables
en plantas o animales, guiando la reproducción para producir
descendencia con rasgos específicos. Un ejemplo común es la
domesticación de animales como los perros que en la actualidad
podemos encontrar en diferentes razas o cultivos como el maíz. En
ambos casos se han seleccionado rasgos beneficiosos a lo largo del
tiempo para adaptarlos a las necesidades humanas.

Las pruebas de la evolución

Las pruebas de la evolución son evidencias científicas que respaldan

la teoría de la evolución de las especies a lo largo del tiempo. Entre
ellas se incluyen el registro fósil, la anatomía comparada, la
biogeografía, la embriología comparada, la genética y la observación
directa de la evolución en acción. Estas pruebas proporcionan una
sólida base científica para comprender cómo las especies cambian y
se adaptan a lo largo del tiempo.

El registro fósil
El registro fósil es el conjunto de restos y huellas de organismos
antiguos que se han conservado en rocas a lo largo del tiempo. Esto,
nos proporcionan evidencia directa de la vida pasada en la Tierra y
nos ayudan a entender cómo han evolucionado las especies a lo
largo de millones de años.
Registro de fósil incompleto: Se refiere a la realidad de que solo una
pequeña fracción de todos los organismos que han vivido en la Tierra se
han conservado como fósiles, creando lagunas en la interpretación de la
historia de la vida.
Dificultad en la datación: Se refiere a los desafíos para determinar
con precisión la edad de los fósiles y otros restos arqueológicos.
Esto se debe a que diferentes métodos de datación tienen
limitaciones y pueden proporcionar resultados variables .
Tipos de restos fósiles: Debido a las características del proceso de
fosilización, mayoritariamente solo se conservan restos óseos, ya
que raramente fosilizan las partes blandas de los organizamos.
La anatomía comparada
La anatomía comparada es el estudio de las similitudes y diferencias
en la estructura anatómica de diferentes organismos. Al comparar
las estructuras corporales entre especies relacionadas y no
relacionadas, los científicos pueden inferir relaciones evolutivas y
entender cómo han evolucionado los organismos a lo largo del
tiempo.
Órganos homólogos: Son estructuras anatómicas similares de
diferentes organismos que pueden tener funciones diferentes, esto
implica que comparten un ancestro común del cual heredaron la
estructura del órgano.
Órganos análogos: Son estructuras de diferentes organismos
que realizan la misma función pero no comparten una misma
estructura sino una forma similar. Estas similitudes en función
pueden ser el resultado de adaptaciones independientes a entornos
similares.
Órganos vestigiales: Los órganos vestigiales son estructuras
corporales que han perdido su función original en un organismo
debido a la evolución, pero que todavía están presentes en una
forma reducida o rudimentaria.