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4.

Efectos de la salud humana


Si bien el aspecto positivo de la innovación tecnológica hace la vida más fácil,
también puede involucrar componentes que deterioran la calidad de vida a través
de ciertos efectos negativos. Una discusión sobre los efectos adversos de las
ondas electromagnéticas en la vida biológica ha estado en curso desde el
descubrimiento de la electricidad en el siglo XIX ( 6 ).

Las ondas electromagnéticas generadas por muchas fuentes naturales y


artificiales pueden viajar largas distancias y desempeñar un papel muy
importante en la vida diaria. En particular, los campos electromagnéticos en la
zona de Radiofrecuencia (RF) se utilizan en comunicaciones, transmisiones de
radio y televisión, redes celulares y sistemas inalámbricos de interior. Como
resultado de las innovaciones tecnológicas, el uso de campos electromagnéticos
aumenta gradualmente y, por lo tanto, las personas están expuestas a ondas
electromagnéticas en niveles mucho más altos que los presentes en la naturaleza
( 1 , 2 , 5 ). Junto con el uso generalizado de productos tecnológicos en la vida
cotidiana, comenzaron a discutirse los efectos biológicos de las ondas
electromagnéticas.

En particular, el número cada vez mayor de usuarios de teléfonos móviles genera


una gran preocupación debido a su daño potencial en las personas expuestas a las
ondas de radiofrecuencia.

Dado que los teléfonos móviles se utilizan en posiciones muy cercanas al cuerpo
humano y requieren una gran cantidad de antenas de estación base, el público y
los científicos tienen dudas sobre el impacto de las redes de telefonía móvil en la
salud ( 9 ).

4.1. Evidencia de los efectos celulares de los campos electromagnéticos.

La opinión general es que no hay evidencia directa de efectos peligrosos para la


salud humana causados por ondas de radiofrecuencia de baja frecuencia. Estudios
a nivel celular, que utiliza frecuencias relativamente más altas, demuestran
efectos indeseables ( 10 - 11 ). Algunos estudios revelaron que las diferentes
dimensiones de las ondas electromagnéticas no han mostrado ningún daño en el
ADN en diferentes líneas celulares. Por ejemplo, en una revisión exhaustiva
publicada, Brusick et al no informaron evidencia sobre el efecto mutagénico
directo de las señales de radiofrecuencia en las células ( 12 ).

Por otro lado, hay muchos estudios contrarios publicados en los últimos años. La
mayoría de ellos preocupados por la evidencia de los efectos bioquímicos o
celulares de los campos electromagnéticos. Marino y Becker han demostrado que
los campos electromagnéticos estáticos o de muy baja frecuencia pueden
provocar efectos biológicos asociados con la redistribución de iones. Además,
muchos estudios demostraron que los efectos biológicos de los campos
magnéticos de baja frecuencia pueden penetrar en los tejidos más profundos
( 13 ).

Foletti et al. mostró que ELF-EMF puede tener un efecto en varias funciones
celulares, como la proliferación y diferenciación celular, lo que fue seguido por
muchos otros investigadores como Tian et al. quienes demostraron su efecto
sobre la apoptosis, Takahashi et al. sobre la síntesis de ADN, Goodman et
al. sobre la transcripción de ARN, Goodman y Henderson sobre la expresión de
proteínas, Zrimec et al. sobre la síntesis de ATP, Paksy et al. sobre la producción
de hormonas, Kula et al. sobre sistemas de enzimas antioxidantes, Milani et
al. sobre la actividad metabólica, y Wolf et al. sobre NFkB y destrucción celular
( 14 , 15 , 16 , 17 , 18 , 19 , 20 , 21 , 22 , 23 ).

Giladi et al. demostró que EMF de frecuencia intermedia fue eficaz para detener
el crecimiento de las células. Kirson et al. indicaron que este efecto inhibidor
directo sobre el crecimiento celular puede utilizarse con fines terapéuticos en el
tratamiento del cáncer ( 24 , 25 ).

Los campos electromagnéticos de muy alta frecuencia tienen efectos térmicos y


no térmicos en los sistemas biológicos. Este efecto termogénico se asocia
principalmente con la intensidad de los campos electromagnéticos, que se
expresa como tasa de absorción específica (SAR). El efecto térmico o el aumento
de la temperatura provocan diversos cambios en las funciones celulares, lo que
puede provocar la destrucción celular ( 26 , 27 , 28 ). Morrisey et al. mostró que
los efectos biológicos pueden ocurrir incluso con cambios de temperatura muy
pequeños en modelos experimentales in vitro ( 29 ).

Hay muchos documentos que muestran que un EMF débil no tiene un efecto
significativo en los sistemas biológicos. Sin embargo, parece que estos estudios
tienen un diseño deficiente en general, carecen de grupos de control apropiados y
también están acompañados de factores de confusión ( 27 , 30 ).

El hecho de que no se hayan detectado evidencias significativas en los ensayos


epidemiológicos anteriores que apoyen las sospechas de que la exposición a
ondas electromagnéticas podría resultar en cáncer está en línea con los estudios
in vitro. Los efectos de los campos electromagnéticos en diferentes líneas
celulares se estudiaron en los últimos 30 años y no se detectaron evidencias sobre
su daño directo o indirecto en el ADN. Maes ( 31 ) y Vijayalaxmi ( 32 )
expusieron células de sangre periférica a campos electromagnéticos de 935 y
2450 MHz y no informaron daños en el ADN de las células después de períodos
de 2 horas. Malyapa estudió los efectos de señales electromagnéticas de 2450
MHz en células de gliablastoma humano y líneas celulares de fibroblastos de
ratón y no detectó daño en el ADN de las células, incluido el período de 24 horas
( 33 , 34). En un estudio similar, Tice et al demostraron que las ondas de
radiofrecuencia de 837 y 1909,8 MHz no provocaron un daño significativo en el
ADN de los leucocitos como resultado de exposiciones de 3 y 24 horas ( 35 ).

Atasoy et al. examinó los efectos de los campos electromagnéticos en las células
mononucleares periféricas in vitro. El objetivo principal de este estudio fue
analizar los cambios en la viabilidad celular, las tasas de apoptosis, los índices de
proliferación y las estructuras antigénicas de la superficie celular resultantes de la
exposición de 2, 6 y 24 horas de células mononucleares aisladas de sangre
periférica a 450, Ondas electromagnéticas de 900 y 1784 MHz. Los datos
obtenidos mostraron que las ondas electromagnéticas no tenían ningún efecto
sobre la viabilidad celular, las tasas de apoptosis y el índice de proliferación.

Autor Año materia estudiada Frecuencias Resultados


Goodman et al. 1983 transcripción de ARN CEM pulsada aumento de la actividad del AR
Takashi et al. 1986 síntesis de ADN 10-100 Hz La síntesis de ADN no se reprim
Goodman y células de las glándulas
1988 ELF 1,5-72 Hz altera la síntesis de polipéptido
Henderson salivales
Células de sangre periférica la exposición combinada reveló
Maes et al. 1997 935,2 MHz
y mitomicina C débil
Malyapa RS et al. 1997 Células de blastoma humano 835,62 y 847,74 Sin ADN dañado
células de mamífero
Malyapa RS et al. 1997 continuo 2450 MHz Sin ADN dañado
cultivadas
No directamente mutagénico,
Brusick et al. 1998 Ácidos nucleicos 800-3000MHz
predominantemente hipertermia
Vijayalaxmi et al 2000 Células de sangre periférica pulsado 2450 mHz Sin ADN dañado
campos
Milani et al. 2001 linfocitos humanos desviación de la actividad meta
electromagnéticos
Tian et al. 2002 Apoptosis ELF y rayos X suprimir la apoptosis
Zyrmec, Alemania,
2002 Síntesis de ATP de E. coli 100 Hz, alterna estimular la síntesis de ATP
Lahajnar
Tice et al. 2002 leucocitos 837 y 1909,8 MHz Sin ADN dañado
50 Hz,0,5-1 mT ELF- influye en la proliferación celul
Wolf et al. 2005 NfkB y destrucción celular
CEM daño del ADN
Giladi et al. 2008 Crecimiento celular 10MHz SI detiene el crecimiento celula
serie de células de carcinoma Campos TT + aumento de la eficacia de la
Kirson ED et al. 2009
humano quimioterapia quimioterapia
Atasoy A et al. 2009 células mononucleares 450, 900, 1784 MHz Sin efecto viabilidad celular, ef
periféricas capacidad funcional
plasma, hígado, cerebro, EMF intermitente eficaz en la
Coskun S et al. 2009 50 Hz, 1,5 mT EMF
muestras, de, cerdos peroxidación de lípidos plasmá
Macrófago derivado de 50 Hz, 1 mT ELF-
Akan A et al. 2010 activación de caspasa 9 suprim
monocitos CEM
Martinez-Samano J sistema antioxidante hígado
2010 60 Hz, 2,4 mT Disminución de SOD y GSH
et al. riñón y plasma
Tabla 3.
Algunas investigaciones y sus resultados acerca de los efectos celulares sobre los
campos electromagnéticos.

Si bien las ondas electromagnéticas no cambiaron la expresión de HLADR y


CD11b en las células mononucleares de sangre periférica, disminuyeron la
expresión de CD11a y aumentaron la expresión de CD49d. Estos datos sugieren
que las señales electromagnéticas podrían afectar la capacidad funcional de las
células mononucleares de sangre periférica al cambiar su capacidad de
adhesión. Quizás estas alteraciones sean un signo de la modulación del sistema
inmunológico ( 36 ).

Akan Z et al. evaluó la respuesta inmune de macrófagos derivados de monocitos


a patógenos en campos electromagnéticos de frecuencia extremadamente
baja. En este estudio, se cultivó una línea celular de leucemia monocítica humana
y se aplicó 1 mT de EMF durante 4 a 6 horas a las células inducidas
conestafilococo aureuso interferón gamma/lipopolisacárido
(IFγ/LPS). Alteraciones en los niveles de óxido nítrico (NO), óxido nítrico
sintasa inducible (iNOS), niveles de proteína de choque térmico 70 (hsp70),
niveles de cGMP, activación de caspasa-9 y la tasa de crecimiento deS.
aureusfueron determinados. Se encontró que la curva de crecimiento de las
bacterias expuestas era más baja que la del control. La aplicación de campo
aumentó los niveles de NO, y este aumento fue más prominente paraS. aureus-
células inducidas y apareció antes que el aumento de células sin aplicación de
campo. Se observó una ligera disminución en los niveles de iNOS mientras que
hubo un aumento en los niveles de cGMP. Se observó un aumento dependiente
del tiempo en los niveles de hsp70. Cuando las células fueron inducidas conS.
aureuso IFγ/LPS, la aplicación de campo produjo niveles más altos de hsp70 y
suprimió la activación de caspasa-9. Estos datos mostraron que ELF-EMF afecta
la respuesta del sistema inmunitario, lo que sugiere que se puede considerar para
usos beneficiosos ( 37 ).

Otra hipótesis de efectos relacionados con ELF-EMF es que cambia los niveles
de radicales libres en el organismo. Los radicales libres en el cuerpo se eliminan
a través de dos vías. La primera vía es la vía no enzimática que incluye glutatión,
vitaminas, carotenoides y flavonoides, mientras que la segunda vía se basa en la
actividad de la enzima, que es la vía más eficaz. Las enzimas clave incluyen
catalasa y superóxido dismutasa. ELF-EMF convierte los radicales libres en
moléculas menos activas y las elimina ( 38 , 39 ). Hay un equilibrio entre la
producción y eliminación de radicales libres. Un desequilibrio puede promover el
estrés oxidativo, lo que eventualmente resulta en la destrucción celular. Uno de
los marcadores que indican destrucción es el malondialdehído, el producto final
de la peroxidación lipídica (40 ). Coskun et al. cobayos expuestos a 50 Hz, 1,5
mT ELF-EMF durante 4 días. Y descubrieron que aumenta la actividad del
malondialdehído, el óxido nítrico y la mieloperoxidasa, y disminuye los niveles
de glutatión S transferasa ( 41 ).

Martínez et al. evaluó los efectos de la exposición a ELF-EMF en los sistemas


antioxidantes en hígado, riñón y plasma en ratas Wistar. Descubrieron que dos
horas de exposición a EMF de 60 Hz condujeron a cambios tempranos en los
niveles de radicales libres, y la actividad de superóxido dismutasa (SOD) en
plasma y el contenido de glutatión (GSH) en el corazón y los riñones se
redujeron, pero no hubo cambios en la peroxidación lipídica. ( 42) .

4.2. Exposición a metales pesados e hipersensibilidad electromagnética

Algunas personas son más susceptibles a la exposición a los campos


electromagnéticos de otras personas. Se conoce como electrohipersensibilidad
(EHS). La fisiopatología de la EHS es desconocida. Algunos autores afirmaron
que se refiere a la exposición a metales pesados. Se cree que los metales pesados
se unen a las proteínas dentro de los tejidos y órganos para tener baja
toxicidad. Mortazavi y colaboradores han descubierto que el campo magnético
estático y la radiación de microondas emitida por los teléfonos móviles pueden
inducir la liberación de vapor de mercurio de la amalgama dental, aumentando la
concentración de mercurio disuelto en la saliva entre los portadores de amalgama
( 43 , 44 , 45 ).

Conclusiones
Aunque los dispositivos electrónicos y el desarrollo de las comunicaciones
facilitan la vida, también pueden tener efectos negativos. Estos efectos negativos
son particularmente importantes en los campos electromagnéticos en la zona de
radiofrecuencia (RF) que se utilizan en comunicaciones, transmisiones de radio y
televisión, redes celulares y sistemas inalámbricos de interior. Junto con el uso
generalizado de productos tecnológicos en la vida diaria, los efectos biológicos
de las ondas electromagnéticas han comenzado a ser más discutidos.

La opinión general es que no hay evidencia directa de efectos peligrosos para la


salud humana causados por ondas de radiofrecuencia de baja frecuencia. Los
estudios a nivel celular, que utilizan frecuencias relativamente más altas,
demuestran efectos indeseables. En los últimos años hay muchos estudios sobre
los efectos de los campos electromagnéticos a nivel celular; Se muestran
moléculas de ADN, ARN, algunas proteínas y hormonas, radicales libres
intracelulares e iones.

En particular, el número cada vez mayor de usuarios de teléfonos móviles genera


una gran preocupación debido a su daño potencial en las personas expuestas a las
ondas de radiofrecuencia. Hay un número creciente de estudios in vivo, in vitro y
epidemiológicos sobre los efectos de los teléfonos móviles, las estaciones base y
otras fuentes de campos electromagnéticos en la última década.

La evidencia epidemiológica recopilada en los últimos diez años comienza a


indicar un mayor riesgo, en particular de tumores cerebrales, por el uso de
teléfonos móviles. Debido a que los teléfonos móviles se usan cerca del tejido
cerebral, las ondas electromagnéticas lo afectan más. La magnitud del riesgo de
tumor cerebral es moderada.

Una búsqueda bibliográfica sobre "uso de teléfonos móviles y cáncer" en


Pubmed enumera 350 estudios. Más de la mitad de todos estos estudios están
relacionados con tumores cerebrales. En la actualidad, la evidencia de una
relación causal entre el uso de teléfonos móviles y los tumores cerebrales se basa
predominantemente en la epidemiología, en particular en los grandes estudios
sobre este tema. Sin embargo, la etiopatogenia de esta relación causal no está
clara. La ausencia de esta etiología clara incluso plantea dudas sobre la causa
misma. Algunos animales proporcionan evidencia débil a favor de una relación
causal.in vitroestudios, pero en general, ensayos de genotoxicidad, tantoin
vivoyin vitro, no son concluyentes hasta la fecha.

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