En los años 60 sucedió lo que yo llamo también, colonización de nuevas tierras, para los

inmigrantes que provenían mayormente de la Sierra, este hecho que acontecía en un

momento de algarabía política donde por ejemplo se elegia a un nuevo presidente, implicaba
estrategias que partían primero del hecho de tener a alguien conocido aquí en Lima ya sea por
alguna relación de parentesco, familiar , amical etc., y esto es porque se necesitaba
lógicamente un grupo suficiente de personas para poder invadir un pedazo de tierra o lo que
fuere. En este punto, el siguiente paso iría hacia la legalización de estas tierras y por
consecuente los servicios básicos con los que toda persona debe contar para vivir dignamente,
esto incluía postas, mercados, pavimentación. Ahora, todo lo antes mencionado no se hubiera
dado: 1) Sin la organización de estos inmigrantes, 2) Sin la ayuda de algún organismo del
Estado, político o cualquier otra institución. Por otro parte, ¿Si bien ya se tiene el terreno y los
servicios, como se ejecutará el proceso de urbanización?, aquí los pobladores tienen claro que
necesitan conocimientos que les permitan interactuar en la ciudad, que les ayuden a un
crecimiento y esto no se alcanza solo con estudios en el colegio, donde muchos no llegan a
completar ni la primaria, sino que involucra un aprendizaje de trabajo en base a ensayo y
error. Asimismo, no podemos pasar por alto la diferenciación que estas estrategias denotan
mas adelante, en las relaciones asociativas entre estos mismos inmigrantes, que tienen su base
con relaciones de parentesco (como ya lo había mencionado en el primer párrafo), veneración
a un santo, pertenencia a un barrio, compraventa de fuerza de trabajo, etc., todo ello de todas
maneras que se va transformando en nuevas formas de relación que tienen que ver con su
nueva realidad así como situación social y económica en la capital.

Finalmente, respecto a si estas estrategias aún están presentes en la actualidad.