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investigación, desde la discusión sobre suPsicopatología Generalno
debe ser únicamente de naturaleza histórica, independientemente
de la realidad contemporánea.
Antecedentes dePsicopatología General
Como graduado de la facultad de medicina, Karl Jaspers se dedicó a
la práctica clínica en la clínica psiquiátrica de Heidelberg. Fue
miembro de la comunidad terapéutica del mismo durante algunos
años. Su libro no sólo estaba profundamente arraigado en las
realidades locales y los debates que tenían lugar en el campo de la
psiquiatría de esa época, sino que también hacía referencia a
cuestiones de debate en la ciencia y la filosofía europeas. El trabajo
de Jaspers estuvo considerablemente influenciado por la psiquiatría
académica alemana de las décadas de 1870 y 1880. Él mismo
describió este período –inmediatamente anterior a su propia
investigación en psiquiatría– como el desarrollo de la "mitología del
cerebro". La figura de un alienista profundamente comprometido
con la práctica clínica ha sido reemplazada entonces por la de un
"patólogo cerebral", como lo ejemplificaron Meynert y Flesching. De
acuerdo con la idea atribuida a Wilhelm Griesinger de que "los
trastornos mentales son enfermedades del cerebro", el foco de
atención se ha desplazado del paciente y su experiencia a un
examen histopatológico detallado y completo de su cerebro. En este
contexto, Jaspers se sintió obligado a esbozar una perspectiva de
investigación más amplia, que incluyera no sólo los supuestos de la
"primera psiquiatría biológica"[2], pero también instrumentos de
investigación más antropológicos y humanistas. Sin embargo, la
opinión final de Jaspers sobre la naturaleza de los trastornos
mentales fue bastante equilibrada. Sus análisis presentados en
Psicopatología Generalevidencia su conciencia de las interrelaciones
entre los aspectos mentales y biológicos de la vida humana, de las
influencias mutuas y las limitaciones existentes entre el cuerpo y el
alma, particularmente destacadas en las condiciones médicas. Si
bien Jaspers reconoce en general la necesidad del desarrollo de las
ciencias neurobiológicas, reconoce la dificultad en la comprensión
teórica de la relación entre los eventos mentales y somáticos. No
cree que pueda determinarse ninguna relación simple entre un
cambio cerebral (daño cerebral) y un cambio mental (trastorno). Le
preocupan las consecuencias de la dominación del modelo
biológico, es decir, la "superstición somática" de que la
investigación neurobiológica resolverá todos los problemas del
estatus ambiguo y la ineficacia terapéutica de la psiquiatría de
aquella época.[1].
Karl Jaspers escribió su libro como un médico y psiquiatra de 30
años sin experiencia clínica ni de investigación significativa. Sin
embargo, supo remitir las discusiones llevadas a cabo en ese
momento en el campo de la psicopatología al marco de
consideraciones antropológicas, epistemológicas y existenciales. En
sus análisis se implementaron creativamente las ideas propuestas
por Wilhelm Dilthey, Max Weber, el neokantismo o Edmund Husserl,
dando como resultado una síntesis del conocimiento disponible en
su época y una valiente aplicación de los métodos humanistas a la
psiquiatría. En general, la contribución de Karl Jaspers a los
desarrollos en el campo de la psicopatología se basa en la
constatación de que el rechazo de las reflexiones metateóricas y
filosóficas sólo puede conducir al surgimiento de formas ocultas de
ideología y dogmatismo.
Áreas de investigaciones psicopatológicas.
El libro extenso, polifacético y de múltiples niveles del psiquiatra de
Heidelberg puede resultar un material de lectura bastante difícil
para profesionales y clínicos. Sin embargo, dado que el libro tiene la
forma de un manual, puede resultar útil para el lector familiarizarse
únicamente con fragmentos y capítulos seleccionados, y no
necesariamente con la obra completa. Sin embargo, el objetivo de
este artículo es presentar una visión general de laPsicopatología
General. Según el psiquiatra contemporáneo Mario Maj[3], se
pueden distinguir tres áreas significativas de reflexión en el
Psicopatología General:problemas epistemológicos, cuestiones de
clasificación de los trastornos mentales y la dimensión subjetiva de
los trastornos.
1. En un enfoque holístico de la psicopatología, además del análisis
de trastornos particulares, también se deben tener en cuenta
cuestiones epistemológicas de mayor escala. Así, es necesario
reconstruir los supuestos teóricos y conceptuales presentes en la
práctica psiquiátrica, incluyendo el problema de los métodos de
investigación adecuados, la conciencia de la propia perspectiva
teórica, el reconocimiento de las formas de conceptualización del
mundo del paciente y el conocimiento de las limitaciones
inherentes a los intentos de objetivación. de experiencias de
personas con trastornos mentales. La cuestión de particular
importancia para Jaspers fue la caracterización de diferentes
perspectivas científicas y de investigación, de sus posibilidades y
limitaciones. A pesar de su pluralismo metodológico y de su
reconocimiento de la necesidad de desarrollar y adquirir diversos
métodos de investigación y perspectivas terapéuticas, Jaspers
compara sobre todo los métodos explicativos (es decir, buscar
las causas y mecanismos de la enfermedad) con métodos de
comprensión (es decir, analizar e interpretar el significado de los
pacientes). 'experiencias y comportamientos). Además, el
problema surge de la relación entre la psiquiatría, por un lado, y
la neurobiología y la genética, por el otro. Un aspecto importante
de la perspectiva filosófica jaspersiana es su escepticismo o
agnosticismo existencial, es decir, la imposibilidad de una
comprensión global de toda la realidad del mundo del paciente.
Mario Maj enfatiza que estas cuestiones epistemológicas son
particularmente destacadas en el debate actual sobre el carácter
"ateórico" de las clasificaciones psiquiátricas contemporáneas
(en primer lugar, el DSM[4]), y en una explicación más profunda
de los trastornos mentales debido al desarrollo de la
neurobiología.
2. Los problemas de la clasificación de los trastornos mentales se centran
en las posibilidades de una demarcación clara de unidades
nosológicas particulares y en la diferenciación entre estados de salud
y enfermedad mental. Jaspers polemiza con la suposición
kraepeliniana de que existen entidades patológicas separadas
equivalentes a tipos naturales, caracterizadas por una etiología,
patogénesis, sintomatología, pronóstico y, posiblemente, tratamiento
similares. Critica también la llamada ''estructura de mosaico de los
trastornos mentales'', que supuestamente consta de componentes
idénticos o bloques básicos que, en diversas configuraciones,
constituyen todas las enfermedades mentales. Por el contrario, según
el enfoque de Jaspers, las clasificaciones psiquiátricas son siempre
provisionales.