PASEOS NOCTURNOS

JOOHYUN

-No, no puedes salir. Estas castigada.

Escucho la voz de mi madre a través de la puerta de mi

habitación, mi cuerpo cayendo en la cama mientras miro fijo el
techo, siento mi celular vibrar a mi lado contestando la llamada
sabiendo muy bien quién es.

-¿Y bien?

-No poder salir Nam, ya sabes… sigo castigada desde la última

vez que llegamos tarde la fiesta.

-Pero está no será una fiesta…

-Eso no lo cree mi madre – me coloco boja abajo aún
sosteniendo el celular contra mi oreja – y además, dice que ya es
tarde.

-Okay… está bien amor – escucho como suspira a través de la

línea, un puchero formándose en mis labios – pero… ¿Puedes
asomarte por la ventana un momento?

Frunzo el ceño confundida, corro hacia la ventana una sonrisa

formándose en mis labios al ver a aquel chico alto de tez
morena, una sonrisa de hoyuelos apareciendo en su rostro.

-Vamos a dar un pequeño paseo.

-Acepto.

*******
Sonrió aferrando mis brazos alrededor de su cuello, mis piernas
estando enroscadas en su cintura mientras camina conmigo en
su espalda por aquel bosque (que literal es el patio de la casa del
buen amigo de Namjoon, Seokjin).

Pasamos un buen rato hablando de cosas triviales, los dedos de

mis manos acariciando la piel de su cuello mientras miro hacia
las estrellas…

-Es hermoso – murmuró sintiendo como Namjoon me deja

suavemente en el suelo – No puedo creer que Seokjin se pierda
de esta belleza.

-Es extraño, ya sabes – nos sentamos en una manta en el suelo

que Namjoon coloca, mi cuerpo acurrucandose junto a él, mi
brazo pasando por sobre su abdomen.

-Me aceptaron – murmura Namjoon de pronto, mi mirada

alzándose hacia la suya, mi mandíbula apoyándose en su pecho.

-¿A que… te refieres?

Namjoon sonríe mirándome a los ojos, una de sus manos yendo

hacia mi rostro apartando el cabello de mis ojos con suavidad,
aquello siempre haciéndome sentir relajada.

De verdad, que amo a este chico.

-En la universidad en New York – susurra...

Pero claro que lo escuche claramente, una sonrisa formándose

en mi rostro mientras golpeó con suavidad su pecho.

-No estad jugando… ¿verdad? – murmuró un poco asustada…

Vamos.

Kim Namjoon, rey de las bromas, algo que amo pero al mismo
tiempo me irrita en ocaciones.

-Es completamente verdad – dice juntando sus labios con los

míos, una sonrisa formándose en mis labios a medio beso.

--Te amo – murmura de pronto cerca mi rostro, sus ojos

teniendo aquel brillo que tanto amo.

-Yo más – murmuró llevando una de mis manos hacia su mejilla,

mis dedos acariciando su piel, aquel momento…

Siendo perfecto.

Las horas transcurren y se que es tarde, se que tengo que volver

pero no quiero alejarme de Nam, una mueca formándose en mi
rostro al tener que levantarme junto con el, sus dedos
entrelazandose con los míos mientras caminamos por el bosque.

Llegamos al auto ambos subiendo en el, Nam comienza a

encender el auto pero este simplemente parece muerto. Nam lo
intenta varias veces pero no consigue que encienda, su mirada
cayendo sobre la mía.

Resoplo dejando caer mi cabeza en la ventana.

-Tengo que ir por ayuda…

-¿No es un poco peligroso? – murmuró frunciendo un poco el

ceño algo preocupada.

-Vamos, Seokjin vive cerca, iré a buscarlo y nos ayudará.

-Si mamá se entera de que no estoy en la cama ahora mismo

Namjoon…

-No pasará cariño – Nam me mira, sus manos sujetando mi

rostro con suavidad mientras deja un beso en mis labios – ya
vuelvo ¿bien? Pasa seguro y no le abras a nadie a menos que sea
yo.

--No soy una niña se lo que tengo que hacer.

-Okay hermosa.

Namjoon sonríe bajando del auto, al instante paso el seguro a las

puertas y espero, miro mi celular notando que son las 1 de la
madrugada…

Dios…

Mama…

Ojalá y no pases por mí habitación.

Me entretengo por unos minutos con el celular, mis dedos

moviéndose ágiles por la pantalla, aquel juego teniéndome
hipnotizada…

Pero entonces, veo la hora.

Abro los ojos como platos…

3:08 a.m

Frunzo el ceño en ese momento teniendo una leve

preocupación…
Namjoon…

Un ruido.

Me mantengo alerta viendo a mí alrededor…

Pero no hay nada, solo soledad y oscuridad….

Pero aquel ruido…

Es en el techo del auto, parece más bien como si una rama

estuviera rozando con el techo, pero es extraño porque allí no
habían árboles…

Trago con fuerza sintiendo me preocupada, pero no bajaré del

auto, Nam me dijo que lo esperara y eso haré…

Tal vez y ya viene en camino…

Me reclinó en el asiento sintiendo como el sueño comienza hacer

de las suyas, mis ojos estando cada vez más pesados, a pesar de
estar asustada el sueño me vence y caigo dormida, solo
pudiendo escuchar aquella rama en el techo del auto…
Toc, toc…

Toc, toc…

Frunzo el ceño abriendo los ojos, no se en donde estoy hasta que

recuerdo la noche anterior, mi mirada cayendo en el oficial que
se encuentra afuera tocando la ventana.

-Hola señorita – dice uno de ellos ya que son tres uno de ellos
siendo mujer – soy el detective Kim Taehyung y estos son mis
compañeros Song Mingi y Kang Wendy…

-¿Qué sucede? – pregunto un poco confundida abriendo un poco

más la puerta del auto.

-Por favor baje del auto pero no miré atrás – dice la mujer
detective mientras me toma de la mano suavemente.

-¿Por qué?

-Solo camine y no miré atrás.

Trago con fuerza comenzando a bajar del auto aún algo
confundida, asustada y preocupada. Solo doy unos tres pasos
cuando escucho voces a mi espalda, un grito conocido llegando a
mis oídos…

Giró sobre mis talones, mis ojos abriéndose, mis rodillas

debilitándose sin ya poder sostener mi peso, aquello…

-N-no… no puede ser…

Namjoon…

-Esta muerto – susurro sintiendo mi cuerpo temblar, su cuerpo

estando colgado de un árbol, sus piernas rozando en el techo del
auto…

No…

No…

No por favor… no…

Veo a los segundos como los policías tienen a Seokjin esposado,

pasa por mi lado, una sonrisa macabra apareciendo en su rostro
y yo solo…
No puedo reaccionar, no puedo…

Hacer nada…

-Por suerte no salió del auto señorita Bae – dice el detective Song
mientras deja caer una manta sobre mi – Kim Seokjin estaba
esperando detrás del auto.

FIN