DIEZ RASGOS DE LOS LÍDERES NARCISISTAS

Por definición, un narcisista es una persona que cree que el mundo gira a su alrededor hasta tal punto que sus
deseos le ciegan a la realidad relacional, lo que le vuelve insensible a las necesidades y perspectivas de los demás.
Una de las tristes realidades de nuestra cultura hedonista impulsada por el consumismo es que estamos
produciendo millones de personas narcisistas, incluidos líderes de grandes organizaciones.
Debido a nuestra naturaleza pecaminosa como seres humanos, todos tenemos algunas tendencias narcisistas con
las que lidiar.
Los siguientes rasgos identifican el narcisismo de liderazgo.
1. Cuando los líderes piensan que los demás están ahí para servirles y no al revés
Esto revierte el principio de Mateo 20:26-28 en el que Jesús dice que una gran persona en el reino sirve y que no
vino para ser servido sino para servir y dar su vida en rescate por muchos. En una organización o iglesia dirigida por
un líder de este tipo, la escalera hacia el éxito se basa más en satisfacer el narcisismo del líder que en el mérito o el
rendimiento laboral. (Nota: no descarto la importancia de la lealtad con esta afirmación).
2.Cuando los líderes quieren los beneficios del ministerio sin el dolor del ministerio
Hay líderes que conozco que quieren títulos, prestigio, honor y el respeto que conlleva una posición de liderazgo,
pero no quieren pagar el precio por ello. La mayoría de los líderes sénior y directores ejecutivos exitosos ya
entienden esto, por lo que este problema es más frecuente cuando los líderes secundarios trabajan en estrecha
colaboración con los líderes sénior que desean reconocimiento como líderes superiores, pero no hacen el trabajo
duro necesario para obtener excelentes resultados.
3. Cuando los líderes anteponen sus propias necesidades a las necesidades de la organización que dirigen
Los verdaderos líderes espirituales dan su vida por las ovejas de la misma manera que lo hizo el Señor Jesús (Juan
10). Los líderes narcisistas desplumarán a las ovejas y pondrán en peligro financieramente a sus organizaciones por
sus estilos de vida indulgentes.
4. Líderes que son autoindulgentes cuando se trata de las cosas materiales de este mundo.
Algunos líderes tienen un deseo excesivo de comprar continuamente las cosas que les interesan (ropa, automóviles,
computadoras, etc.) para mantenerlos felices y motivados para servir. Junto a esto puede haber un deseo excesivo
de entretenimiento, placer o juego.
5. Líderes que buscan relaciones cercanas con quienes los complacen y evitan a quienes los confrontan.
Algunos líderes sólo tendrán personas en sus círculos internos que complazcan su necesidad de sentirse superiores.
No quieren que haya gente a su alrededor que no esté de acuerdo con ellos o que hable en sus vidas. Estos líderes
caen continuamente en la adulación, lo que abre una enorme puerta al engaño satánico.
6. Cuando los líderes ven a las personas como objetos que pueden utilizar en su beneficio
En lugar de considerar a las personas como portadores de la imagen de Dios, algunos líderes ven la importancia de
las personas en función de si pueden cumplir su agenda. Tan pronto como creen que una persona ya no contribuye
a su agenda, comienzan a ignorarla y buscan a la siguiente persona a la que puedan utilizar. Para ello, cortejan e
incluso halagan a las personas en las que tienen sus ojos, tratándolas como a las personas más importantes del
mundo, lo que se detiene abruptamente cuando sus servicios ya no son necesarios.
7. Líderes que no están interesados en los problemas de otras personas.
Algunos líderes no prestan atención a los demás cuando hablan de sus cuestiones o problemas. Participarán en
conversaciones siempre que se trate de ellos o de algo que les interese. Sin embargo, se cerrarán emocionalmente
cuando la conversación gire hacia algo ajeno a sus intereses.
8. Líderes que rara vez ceden ante las ideas de otras personas.
Algunos líderes no saben escuchar, se niegan a ceder e incluso actúan emocionalmente inmaduros cuando no se
salen con la suya o cuando no se pone en práctica o no se acepta una idea suya. Una vez que líderes como este
han decidido que quieren algo, es casi imposible cambiar de opinión a menos que escuchen otra idea que sea más
beneficiosa para ellos.
9. Líderes que no pueden tener conexiones emocionales íntimas con asociados cercanos o sus cónyuges.
Debido a la falta de interés en satisfacer las necesidades de los demás, algunos líderes sólo tendrán amistades
superficiales basadas en la diversión, el entretenimiento y los chismes. Cuando surgen conflictos, evitan las
relaciones porque ya no satisfacen sus ansias de diversión, escape y entretenimiento. Sus matrimonios son geniales
al principio, cuando están en la etapa de luna de miel y disfrutan de una vida sexual sólida. Pero cuando las
presiones de criar a los hijos, las finanzas y la gestión del tiempo hacen acto de presencia, se sumergen en cosas
que les ayudan a escapar de la realidad: otra relación, entretenimiento, pasatiempos y cosas por el estilo. Sus
matrimonios se distancian cada vez más a medida que se divorcian emocionalmente antes de que se produzca el
divorcio físico (a menos que, a través de la autoconciencia y el arrepentimiento, sus matrimonios puedan salvarse).
10. Los líderes narcisistas son más vulnerables a los pecados sexuales.
Las personas narcisistas se aburren fácilmente y son propensas a mirar pornografía y cometer adulterio porque su
principal deseo sexual no es la intimidad emocional sino el placer físico. Tan pronto como la excitación desaparece
en sus relaciones, buscan a otras personas que puedan excitarlos sexualmente. En aquellos casos en los que el
adulterio aún no ha ocurrido, aquellos con una libido alta gravitarán hacia la pornografía entre seis meses y un año
después de cada relación seria que tengan y, en muchos casos, ocultarán su uso continuo de pornografía en cada
relación que tengan.
Los líderes espirituales narcisistas son presa fácil de los halagos de aquellos por quienes se sienten atraídos
sexualmente lo que a menudo conduce al adulterio incluso en las iglesias que supervisan. Esto se debe a que, a
menos que la cruz de Cristo se aplique directamente a su profunda necesidad emocional de ser el centro de atención
cuando su cónyuge no cumple con sus expectativas, recurrirán a otra persona para satisfacer su adicción a la
alabanza.
Para remediar estos rasgos, los líderes deben
Fomentar la humildad a través de la autorreflexión y el reconocimiento de las propias limitaciones y el valor de las
contribuciones de los demás.
Practica la escucha activa y la empatía para comprender y responder genuinamente a las necesidades de los
demás.
Construir una cultura de responsabilidad donde se fomenten y valoren los comentarios constructivos. Esto ayudará a
los líderes a reconocer y ajustar sus comportamientos y a enfrentar los problemas de raíz del carácter.
Fomentar el liderazgo de servicio, centrándose en servir a los demás y a la organización en lugar de liderar para
beneficio o reconocimiento personal.
Busque asesoramiento o entrenamiento profesional para abordar rasgos narcisistas profundamente arraigados y
desarrollar habilidades relacionales y de liderazgo más saludables.