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Economía en la Alta Edad Moderna: Comercio

Breves apuntes sobre economía en la Edad Moderna


La economía en la Edad Moderna es, en su esencia, muy similar a la Medieval: su base
es la producción agrícola, siendo esta la principal actividad económica. El sistema
feudal sigue vigente, y Europa sigue siendo principalmente rural. Sin embargo, es en el
incremento del mercantilismo, de la clase burguesa, y en general, en el comercio donde
se encuentran las principales diferencias.

La revolución comercial
El comercio ya venía cobrando más importancia a lo largo de la Baja Edad Media y la
progresiva urbanización de Europa. Sin embargo, el siglo XV supone un punto de
inflexión por muchos aspectos:

• La ruta de la seda resulta progresivamente más complicada a medida que los


turcos se apoderan del Imperio Bizantino, hasta finalmente 1453 con la caída de
Constantinopla. Esto afecta principalmente a los genoveses y es un motivo para
buscar rutas alternativas1. Conseguir especias de Asia costaba oro y plata, de lo
cual no quedaba mucho en Europa, y ahora resultaba mucho más caro. De donde
se extraía tradicionalmente era el África subsahariana, que no era lo más
conveniente para las potencias europeas.2
• Diversos avances tecnológicos de carácter
marítimo: portulanos, cartas marítimas,
brújulas, astrolabio...Y, sobre todo, la
carabela.
• La religión. Quizá sobre este tema hay
menos consenso3, pero es una idea repetida
con frecuencia que la aparición del
calvinismo supusieron un cambio de
paradigma en la parte superior de la Europa
cristiana respecto a la riqueza, los bancos y
el sistema de créditos. Cambios legales y
sociales colaborarían con la hegemonía de la
burguesía, bancaria y mercader.

1
Rankin, Rebecca; Cleveland Rodgers, B. (1948). «Chapter 1». New York: the World's Capital City, Its
Development and Contributions to Progress
2
Lopez, Robert S. (1956). «Back to Gold, 1252». The Economic History Review. Volume 9 (en inglés):
219-240.
3
Me parece necesario señalar que pese a que esta tesis- que plantea Max Weber en La ética protestante y
el espíritu del capitalismo -ha sido defendida tradicionalmente por gran parte de la historiografía, también
plantea serias dudas, especialmente porque se limita al impacto del calvinismo y parece ignorar el
desarrollo que se venía sucediendo en Italia previamente. Sin embargo es cierto que para muchos ponía
fin a un debate que ya tenían los teólogos católicos sobre si era lícito el interés o no.
Cuando hablamos a nivel nacional, en el comencio interno tienen mucha importancia las
redes de caminos, descritas en España por Villuga en 15464:

(Reconstrucción contemporánea)

Tal es la importancia de los caminos que en 1476 se establece la Santa Hermandad, un


gran impacto teniendo en cuenta que es en cierto modo antecesor de los cuerpos de
seguridad del Estado y embrión del ejército profesional. Sin embargo, el buen estado de
los caminos dependía de los municipios.

Se privilegia a arrieros, carreteros y al gremio ganadero de La Mesta, así como al de la


Cabaña Real de Carreteros.

La era de los descubrimientos tuvo un gran impacto en la transformación del comercio


europeo y mundial. Primero llevada a cabo por los aragoneses, venecianos y genoveses,
posteriormente por la corona portuguesa y distintos exploradores (Enrique el
Navegante; Vasco da Gama), y alcanzando su máxima expresión con la corona de
Castilla. Cristóbal Colón buscaba precisamente una ruta a Asia alternativa a los turcos,
y se lo ofrecería a los portugueses sin éxito, para finalmente recibir financiación tras
reticencias por parte de los Reyes Católicos.5 Las consecuencias económicas, el
comercio alimenticio y la extracción masiva de plata de América es harto conocida por
todos, y esta última tuvo un impacto definitivo en la relevancia de la moneda en Europa
dada su accesibilidad. El descubrimiento de América aceleró la creación de monopolios
comerciales y produjo la creación de un triángulo comercial:
4
Villuga, Pedro Juan: Repertorio de todos los caminos de España (hasta agora nunca visto), 1546.
5
De las Casas, Bartolomé: Brevísima relación de la destrucción de las Indias, 1552. pág. 243.
El comercio conlleva múltiples riesgos. La piratería berberisca y turca siempre fue un
peligro para los mercaderes europeos en el Mediterráneo. Estos piratas dieron origen a
una frase que ha perdurado desde entonces: «No hay moros en la costa»
Diferentes corrían las cosas en el agua: porque de África salían tantos corsarios que
no se podía navegar ni vivir en las costas de España.
Sandoval6
El Reino de España, por citar uno, tomó medidas defensivas (visibles en las múltiples
torres de vigilancia en las costas mediterráneas españolas) así como agresivas: la toma
de Orán, Bujía, Túnez, el intento de toma de Argel o incluso la Batalla de Lepanto.
Por no hablar de la piratería caribeña y los corsarios británicos, harto conocidos por
todos dada su extensa presencia en la cultura literaria y popular. No hay que subestimar
el gran impacto negativo en el comercio que esta actividad supuso al Imperio Español
durante siglos.
Este y otros motivos (guerra, clima y otras incertidumbres menores) suponían un riesgo.
El riesgo desestimula a la gente con capital de dedicarse a actividades comerciales, es
por ello que otra de las soluciones encontradas a esto fue uniones de ‘ricos’ que
“compartían” eses riesgo a través de acciones. Otra fue la formalización de los seguros
y la creación de compañías de seguros.
También sería interesante mencionar la creación del copyright en el siglo XVIII, que
aunque no tuvo tanto alcance en su día, arrastra una influencia comercial enorme a día
de hoy.
En conclusión, la revolución comercial tuvo un impacto permanente y transformador en
Occidente y el mundo. Motivó el colonialismo, el liberalismo económico y con ellos el

6
Feijoo, Ramiro: «España pone pie en Berbería, Mazalquivir», n.º 83 de La Aventura de la Historia,
Arlanza Ediciones, Madrid, septiembre de 2005.
esclavismo, la importancia de la moneda, aceleró la urbanización de Europa y la
exploración del globo.

Bibliografía

➢ De las Casas, Bartolomé: Brevísima relación de la destrucción de las Indias,


1552.
➢ Rankin, Rebecca; Cleveland Rodgers, B. New York: the World's Capital City,
Its Development and Contributions to Progress. 1948
➢ Feijoo, Ramiro: «España pone pie en Berbería, Mazalquivir», n.º 83 de La
Aventura de la Historia, Arlanza Ediciones, Madrid, septiembre de 2005.
➢ Lopez, Robert S. «Back to Gold, 1252». The Economic History Review. 1956
➢ Villuga, Pedro Juan: Repertorio de todos los caminos de España (hasta agora
nunca visto), 1546.

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