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Tema 7: La sugestión de lo nuevo

7.1. Museos de arte contemporáneo de los siglos XX y XXI


Una de las causas por las que los museos habían experimentado ese auge y esa nueva
atracción, que hace pensar como obsoletas esas críticas vanguardistas, es la incidencia
del arte contemporáneo en los museos. Es uno de los grandes problemas y una de las
grandes paradojas. Encierra, conserva y fosiliza las obras de arte del pasado, pero el arte
continúa produciéndose y el arte nuevo puede tener una relación crítica con el mundo
del arte tradicional, pero también puede integrarse y realizar nuevas propuestas. Se une
con el tema del arte vivo, el arte que se produce en la actualidad.
Parece que el arte y los museos acabaron triunfando a finales del siglo XX. Lo nuevo
resulta sugerente, el arte de vanguardia necesita ser reunido y coleccionado y necesita
ser expuesto, pero ¿dónde? Es una de las primeras preguntas que se hacen. Aparición,
en el año 1929, del Museo de Arte Moderno de Nueva York, que será el paradigma de
museo de arte contemporáneo del siglo XX. No se entendería el MoMA sin las
experiencias europeas que causaron un gran impacto en Alfred Barr, primer director del
MoMA, y en el grupo de coleccionistas que apoyaron esta empresa.
Karl Ernst Osthaus, fue un coleccionista e historiador del arte alemán, coleccionando
muchas obras impresionistas de grandes artistas. Su colección la instala en la ciudad de
Hagen, creando el museo en 1906.

Es un museo de arte vivo que presenta las obras de una forma nueva, sin la típica
clasificación de escuelas y artistas. La propia vanguardia rompe con esa idea de
nacionalismo y de arte de una escuela. La Vanguardia, desde los impresionistas, está
primando el individuo y la personalidad propia del artista.
La obra de arte total, una mezcla de géneros en las distintas salas. Sigue las pautas de la
iluminación museológica, pero no se presenta como una obra de arte en conjunto. Peter
Behrens diseña para este museo una sala de conferencias. Es una idea de museo total
que quiere terminar entre museo pedagógico e ilustrado que aburría, pues es una idea
completamente distinta de museo.

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También tenemos que destacar a Alexander Dorner fue director del museo de Hannover,
que tenía una colección de cuadros modernos y antiguos. Instala a principios del siglo
XX, una manera más moderna de colgar los cuadros, con una ordenación y disposición
más clara y limpia.
A partir de 1921, fueron habituales sus viajes a Europa, especialmente a Alemania, idas
y venidas donde va a conocer a muchos creadores dadaístas y miembros de De Stijl.
Influenciado por Malevich pero también por el Constructivismo, El Lissitzky desarrolló
su particular forma de arte, obras que empezó a denominar Proun (Proyectos para la
afirmación de lo nuevo). Estas variaciones presentadas en un principio como óleos o
acuarelas, magníficos en su concreción y limpieza, también las realizó en litografías,
como la Carpeta Kestner (1923) o la exquisita Carpeta de figurines Victoria sobre el
sol (1923), siluetas inspiradas en los dispositivos visuales que ideó para el vestuario y
maquinaria de una ópera. Algunas de estos personajes, caso de El hombre nuevo,
aparecen también recreados en tres dimensiones como pequeñas esculturas.
La evolución más prodigiosa de estos conceptos es el Prounenraum, un espacio que ideó
en 1923 para la Gran Exposición de Arte de Berlín. Este lugar recreado ahora para la
ocasión, pretende implicar al visitante para que se estimule emocional e
intelectualmente una experiencia que modifica los normativos parámetros estéticos
heredados del siglo XIX y busca la integración del espectador con su entorno.
Asimismo, el modelo tuvo dos desarrollos posteriores, tal como podemos observar en
diferentes bocetos: uno en Dresde (1926) y otro en el museo de Hannover, el Gabinete
de los Abstractos (1927), pabellón que contó con la complicidad del director del centro,
Alexander Dorner, una personalidad primordial que Harald Szeemann considera el
precursor de las dinámicas expositivas contemporáneas que ponen el acento en los
procesos y no tanto en los resultados.
En la International Exhibition of Modern Art se expusieron artistas del siglo XIX de
distintas corrientes artísticas y, también, de las primeras vanguardias. Introducción de
todo un arte que en EEUU era completamente desconocido. No era tan importante la
manera de presentar las obras de arte como el hecho de presentarlas.
El desnudo bajando una escalera de Duchamp fue muy impactante, sacando las
conclusiones de lo que estaba siendo la vanguardia cubista. Introduce el movimiento en
esa descomposición de la figura.
Alfred Barr viajó a Europa para formarse, interesándose por el arte contemporáneo. Le
interesaba el objeto artístico y el qué se puede hacer con él. Entró en contacto con los
grupos de coleccionistas de Estados Unidos que estaban empezando a formar
colecciones de arte contemporáneo. Fue aquí cuando surgió la idea de fundar un museo
de arte moderno en Nueva York.
Además de esta idea, Alfred Barr, tuvo la idea de presentar las obras de una forma
dinámica. No se presenta cerrada, sino que, al lado de la colección permanente, están las
exposiciones con obras del propio museo o de otros museos o coleccionistas.
Va creando exposiciones inspirado pro lo que había visto en Europa. También le da
importancia al diseño industrial. Se interesan por el diseño total, unir arte y vida; ese es
uno de los elementos de vanguardia. Integra en sus colecciones la pintura, la escultura,

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la fotografía, el diseño de muebles y arquitectónico. Es un museo total de todo aquello
que tiene un interés para el arte del siglo XX y XXI.

La exposición de Cubismo y Arte Abstracto fue una exposición de comienzos de los


años 30 cuando ya había terminado el ciclo del cubismo. Desarrolló la idea de arte del
siglo XX como un árbol o esquema que se iniciaba a finales del siglo XX. En 1890
aparecían los grabados japoneses, los neoimpresionistas, etc., que van a influir en el
fauvismo, el cubismo… también está el constructivismo ruso, De Stijl y el
Neoplasticismo y el expresionismo abstracto.
Alfred Barr desarrolla el canon del siglo XX, hablando desde Cézanne hasta la Escuela
de Nueva York en 1950.
Otro de los esquemas más reproducidos es el esquema sobre qué papel debe cubrir el
MoMA en la ciudad de Nueva York.

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Da mucha importancia a lo mexicano, ya que los muralistas mexicanos tenían un papel
muy importante en la antigua disposición del museo porque interesaba mucho en los
años 30 y fue una de las fuentes de inspiración para los primeros pintores americanos
abstractos. Veía que el Metropolitan era un museo que debía ser basado en el arte
antiguo y el contemporáneo debería ser el MoMA.
El MoMA y la Tate fueron los que empezaron a darnos ideas más modernas y distintas
del arte del siglo XX, no como una evolución lineal. El juego con la obra de arte,
representado por Picasso y sus Señoritas de Aviñón.
Otro gran museo de arte contemporáneo es el Museo de Arte Moderno de París. Vuelta
al clasicismo moderno en la arquitectura. El Centro Pompidou causó gran sensación por
el gran contraste que se creaba con el Museo de Arte Moderno.

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