REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL POLITÉCNICA
DE LA FUERZA ARMADA NACIONAL BOLIVARIANA
UNEFA
NÚCLEO TÁCHIRA SAN CRISTÓBAL

Ensayo:
Fundamentos de la Defensa Integral de la Nación.

San Cristóbal, 22 de noviembre 2022

 La concepción tradicional de la Defensa de la Nación establece que la
misma se configura por un conjunto de acciones y previsiones que adopta un
gobierno permanentemente, para salvaguardar la integridad de la República y
las vidas y bienes de la colectividad. Considerada desde este punto de vista, la
Defensa de la Nación tiene como propósito preservar la continuidad de la vida
social, y protegerla ante los diversos peligros y amenazas que puedan
afectarla, independientemente de las características de estos eventos
adversos. En consecuencia, está orientada a generar los máximos niveles
posibles de calidad social.

Por lo cual podemos decir que la Defensa Integral de la Nación es

también un grupo de ocupaciones políticas y militares que desarrolladas por
estados-nación modernos, que le permitan no solo evadir sino también
desechar todo posible ataque militar que puedan ocasionalmente hacer otros
estados-nación o amenazas de cualquier otra índole que logren suceder, como
grupos paramilitares, terrorismo, guerras económicas, entre otras tantas.

Dicho esto, en el marco jurídico de la nación, es la Constitución de la

República Bolivariana de Venezuela la que enfatiza más la categoría Seguridad
que la de Defensa. Esta última la refiere sobre todo al rol de la Fuerza Armada
Nacional para defender nuestro patrimonio ante las posibles amenazas que
pudieran afectar a la Nación. Siendo que la Fuerza Armada Nacional constituye
una institución esencialmente profesional, sin militancia política, organizada por
el Estado para garantizar la independencia y soberanía de la Nación y asegurar
la integridad del espacio geográfico, mediante la defensa militar, la cooperación
en el mantenimiento del orden interno y la participación activa en el desarrollo
nacional. Por otra parte, el Ejército, la Armada y la Aviación tienen como
responsabilidad esencial la planificación, ejecución y control de las operaciones
militares requeridas para asegurar la defensa de la Nación.

Por lo tanto las ocupaciones que están más a menudo en relación con
la protección nacional son las que permanecen referidas a las fuerzas armadas
y la guerra; no obstante, existen también otras ocupaciones y políticas tienen
íntima relación con la defensa y protección nacional, como la indagación y
desarrollo de tecnología tanto en el ámbito militar como en cualquier otra área
de desarrollo, la provisión de materias primas estratégicas y alimentos, la
industria elemental y la ocupación de la región.

Con todo lo anterior mencionado, si bien puede parecer que el concepto

alude solo a la iniciativa de responder a un ataque externo de forma pasiva,
rechazando así la idea misma de un ataque, algunas veces las ocupaciones de
la defensa nacional son usadas por las naciones para hacer actos de
acometida contra otros territorios, con la excusa de que los mismos fueron
ejecutados para prevenir un ataque exterior planeado con anterioridad (llamado
ataque preventivo).

Por otro lado la ley de la fuerza armada tiene como objeto implantar los
principios y las posiciones que rigen la organización, manejo, unión y gestión
de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, dentro del marco de la
corresponsabilidad entre el Estado y el Poblado, como motivo de la Estabilidad
de la País consecuente con los objetivos supremos de conservar la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. La Fuerza Armada
Nacional Bolivariana es la organización que en forma persistente asegura la
protección militar del Estado. Queda derogado el Decreto con Rango, Costo y
Fuerza de Ley Orgánica de las Fuerza Armada Nacional Bolivariana, publicada
en la Gramo.O N° 6.156, existente desde el 19 de noviembre de 2014, y las
otras posiciones contenidas en las soluciones, órdenes e artefactos normativos
que colidan con lo dispuesto en la presente Ley Constitucional

La ley Orgánica de Seguridad y Defensa de la Nación tiene por objeto

regular la actividad del Estado y la sociedad, en temas de estabilidad y custodia
integral, en concordancia a los lineamientos, principios y objetivos
constitucionales.

De igual forma, para garantizar lo anterior se desarrolla con criterios

claros y concretos la defensa integral y el desarrollo integral sustentable y
productivo de plena cobertura para la comunidad nacional, surgen tambien el
conjunto de deberes que tienen los ciudadanos y ciudadanas al respecto entre
sí y con la Nación. Entendiéndose por deber como el conjunto de obligaciones,
ya sea de orden legal o convencional, que todo ciudadano le corresponde
cumplir. De la observancia de estas obligaciones dependerá el funcionamiento
de la Sociedad. De ahí que la CRBV en su Art. 130 plantea: “Los venezolanos y
venezolanas tienen el deber de honrar y defender a la patria, sus símbolos y,
valores culturales, resguardar y proteger la soberanía, la nacionalidad, la
integridad territorial, la autodeterminación y los intereses de la Nación.” Y en su
Art. 134 define que: “Toda persona (…) tiene el deber de prestar los servicios
civil o militar necesarios para la defensa, preservación y desarrollo del país, o
para hacer frente a situaciones de calamidad pública…”.

Por consiguiente y para finalizar, podemos afirmar que la defensa y el

desarrollo integral de la nación, se basa tanto en las ocupaciones políticas y
militares que garantizan la seguridad de la nación frente a amenazas externas
e internar, así como también en el desarrollo de la sociedad y deberes de los
ciudadanos para con la nación y su respectiva defensa, marcando esto el
principio de corresponsabilidad entre el estado y la sociedad, el cual insta a la
sociedad civil a formar parte del establecimiento de los nuevos roles, nuevas
obligaciones, nuevos derechos y herramientas, apegados a la legislación
venezolana; y a su vez el estado es garante y facilitador de la consolidación de
los derechos y deberes de la sociedad civil en los asuntos políticos.