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LOS 4 ENEMIGOS
En la clase del día de hoy hablamos que Según la Biblia, existen diferentes enemigos que
enfrentamos en nuestra vida diaria como creyentes. Uno de ellos es el diablo, quien
constantemente busca atacar y destruir nuestra fe. En 1 Pedro 5:8, se nos advierte: "Estad
sobrios, velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor
buscando a quien devorar." El diablo es descrito como un enemigo astuto y poderoso que
busca tentarnos y apartarnos de Dios. Por lo tanto, debemos permanecer alerta y resistir sus
20/03/2024
Carreto Gutiérrez Yunuen Noemi
15° CLASE – ACADEMIA DE OBREROS
ataques a través de la oración y la Palabra de Dios. Otro enemigo al que nos enfrentamos es
la carne, que representa nuestros deseos y pasiones terrenales. En Gálatas 5:16-20, se nos
advierte sobre los frutos de la carne, que incluyen la inmoralidad sexual, la idolatría, la
envidia, entre otros. La carne nos lleva a actuar de manera egoísta y pecaminosa,
alejándonos de la voluntad de Dios. Por lo tanto, es importante aprender a dominar nuestros
impulsos y someter nuestra vida a la dirección del Espíritu Santo, quien nos guiará por el
camino de la justicia y la santidad. Además, el mundo también se presenta como un
enemigo que busca alejarnos de Dios y sus enseñanzas. En 1 Juan 2:12-17, se nos advierte
sobre el peligro de amar las cosas del mundo, como el orgullo, la avaricia y la vanidad. El
mundo nos ofrece placeres temporales y satisfacciones superficiales que nos apartan de la
presencia de Dios. Por lo tanto, debemos aprender a no conformarnos a los patrones de este
mundo, sino a renovar nuestra mente y enfocar nuestra vida en obedecer a Dios y vivir de
acuerdo a sus mandamientos. Por último, nosotros mismos podemos ser nuestros propios
enemigos cuando tomamos decisiones que van en contra de la voluntad de Dios. En Gálatas
6:7 se nos recuerda: "No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el
hombre sembrare, eso también segará." Nuestras acciones tienen consecuencias, por lo que
debemos ser conscientes de nuestras elecciones y procurar actuar de acuerdo a los
principios y valores que Dios nos ha dado. Al tomar responsabilidad por nuestras
decisiones y aprender a someternos a la voluntad de Dios, podremos evitar caer en trampas
y enfrentar victoriosos a nuestros enemigos internos y externos. En resumen, como
creyentes enfrentamos una batalla espiritual contra el diablo, la carne, el mundo y nosotros
mismos. Sin embargo, contamos con el poder y la protección de Dios para vencer a estos
enemigos y vivir una vida en victoria y en comunión con Él.
20/03/2024
Carreto Gutiérrez Yunuen Noemi