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EL ENAMORAMIENTO

Había una vez, un joven llamado George, jugaba golfito con su amigo Charlie;,
que era, un tanto abusivo y ambicioso, sin embargo, George era amable y una
persona de corazón. Seguían jugando tranquilamente en el campo, hasta que una
chica coqueta apareció en el otro campo del otro lado, estaba ansiosa por jugar.

-Bueno, ¡hoy es un buen día para practicar mis mejores tiros! – exclamó la chica-.
Agarró su palo de golf y se puso en posición de tiro, pero de pronto, los tres
amigos vieron a la mujer a punto de disparar.

-¡Hola guapa! – gritó Charlie impactado. La pobre niña se asustó tanto que el grito
de Charlie, hizo que la chica disparara hacia una ventana de una casa vecina del
campo de golf, en ese humilde hogar, vivía un señor gruñón. El señor se dio
cuenta del estruendo que hizo la ventana rota.

-¡¿QUIEN RAYOS ROMPIÓ LA VENTANAA!?- gritó muy enojado el señor.


George al escucharlo a la larga distancia, junto con sus amigos empezaron a
correr a sus casas. -¡¿FUISTE TÚ CAROLINE?!- siguió exclamando el viejo
cascarrabias.

-Sí… Fui yo. D-de verdad lo siento, y-yo no quería romper otra ventana-. Dijo
Caroline llorando y llegando a la casa.

-¡YA ES LA TERCERA VEZ ESTE MES, YA NO PUEDO AGUANTAR MÁS!-.


vociferó el señor. -¡TE QUEDAS EN TU CUARTO HASTA QUE NOS
MUDEMOS!-. Y la triste y desesperada Caroline se fue a su cuarto a llorar.

Horas después, George se dio cuenta de lo sucedido y fue al hogar desesperado.


Al llegar, vió la ventana rota y se preguntó -¿Qué pasó aquí?-. Era muy extraño
que estuviera una ventana en esos estados.

-¡ESQUE MI HIJA ROMPIÓ MI VENTANA!-, Dijo el señor.


-Tranquilícese, señor. Yo puedo pagar el vidrio; pero espere ¿su hija es una chica
que estaba en el campo de golf?-. Dijo confundido George.

-¡PUES SII!-. exclamó el señor. Empezaron a hablar los dos y resolver la situación,
el pobre viejo estaba arrepentido de gritarle a su triste hija.

El padre, finalmente dejó a Caroline libre, y al salir de su habitación, ve a George y


se quedó tan paralizada, que se desmayó. George la cargó y le empezó a decir
desesperadamente que despertara, posteriormente, ella despertó y vió los ojos del
queridísimo protagonista.

-¿Vamos afuera?- Preguntó George. Sin duda algunas, Caroline respondió que sí
y fueron al exterior.

-¿Así que la famosísima Caroline, verdad?-. Dijo George un poco nervioso


(porque también se había enamorado)

-S-sí soy yo jeje-. Afirmó Caroline.


-Y disculpa a mi papá, es muy enojón y siempre que hago todo mal, me…castiga-.
-No te preocupes, te entiendo. Pero no mereces esas “condenas”, tú eres muy
linda, yo… no te haría daño-. Declara George sonrojándose.
-Tú también eres lindo, por cierto, ¿cómo te llamas? -pregunta la chica
enamorada.
-Me llamo George, mucho gusto. Se me olvidó decirte que, porfavor disculpa la
actitud de mi amigo hace rato, él es muy… así, no sé como explicar porque no
quiero utilizar palabras malsonantes, ¿entiendes? -.
-Sí, comprendo. Pero para olvidar eso ¿quieres jugar golfito? No terminé de jugar
hace rato jaja-. Cuestiona Caroline.
-Me parece bien, vamos-. Dice alegremente George.

Después de un largo rato de plática y charlas, agarrados de la mano, llegaron a


otro campo de golf, más lejano a la casa del padre de Caroline.
-Caroline…Te quiero decir algo…- Dice George con nerviosismo y con sudor en
las manos. -Sé que nos conocimos hoy pero… me estoy dando cuenta que tú eres
una persona muy bonita y amable, definitivamente eres mi tipo de persona-.
Manifestó.

-Ya sé a que te refieres, George. Tú también me gustas, y mucho-. Declara la


chica inocente.

-Entonces, ¿Quieres ser mi novia?-. Propone George con seguridad. Y Caroline,


sin duda alguna, dice que sí y enseguida, se besan. Fin.

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