 Funciones motoras de la médula espinal.

Organización de la medula espinal para

las funciones motoras

1. Coordinación de movimientos voluntarios e involuntarios.

2. Control de reflejos.

3. Transmisión de señales motoras entre el cerebro y el cuerpo.

4. Regulación del tono muscular.

5. Generación y coordinación de patrones motores para actividades como caminar,

correr y otros movimientos complejos.

6. Control de funciones autónomas como la micción y la defecación.

 Definición de reflejos, tipos (superficiales, profundos y viscerales)

Los reflejos son respuestas automáticas e involuntarias del sistema nervioso a un

estimulo específico. Además de involuntaria es Innata, quiere decir, quiere decir que ya
venimos con el desde que nacemos, ya que nadie te enseña a usarlos, aparte es
estereotipada, todos los individuos responden de la misma manera frente a la aplicación
de un estímulo optimo. Puede ser de tipo táctil o percutor. Fisiológicamente, el proceso de
un reflejo sigue una secuencia.

Comienza con un estímulo que activa los receptores sensoriales en una parte del cuerpo.
Estos receptores, Ilamados propioceptores, detectan cambios en el entorno o en la
posición del cuerpo. Cuando los receptores son estimulados, envian señales eléctricas
llamadas impulsos nerviosos a través de las fibras nerviosas a la médula espinal. En esta
el impulso nervioso llega a un centro de integración, donde se procesa la información, en
algunos casos, el impulso puede ser enviado directamente a los músculos, sin pasar por
el cerebro. Esto permite respuestas rápidas y automáticas. Luego son controlados
localmente en la médula espinal, lo que acelera la respuesta. Ya por último se da salida
del centro de integración, que es un impulso nervioso que se envía a través de las fibras
motoras hacia los músculos o glándulas. Esto desencadena la respuesta fisica, como la
contracción muscular en el caso de los reflejos musculares. Un ejemplo clásico es el
reflejo rotuliano

 Componentes del arco reflejo: estímulo, receptor, transducción, traducción,

propagación por vías aferentes, papel del centro integrador, propagación por vías
eferentes, papel del órgano efector, generación de la respuesta al estímulo.

 Vías piramidal y extra piramidal Reflejos medulares: Reflejo miotático muscular,

reflejo tendinoso de Golgi, reflejo flexo y reflejo de retirada, reflejo extensor
cruzado, reflejos posturales y locomotores.
 Explicar los mecanismos fisiológicos por los que se evocan reflejos en el ser
humano. Utilizando instrumentos especializados.
Reflejo rotuliano: La fisiopatología detrás del reflejo rotuliano implica la integridad de
los nervios periféricos, la médula espinal y las vías nerviosas superiores que controlan
la función motora en la región de la rodilla. Cuando el tendón patelar es golpeado, los
receptores sensoriales en el músculo cuádriceps envían señales a través de las vías
nerviosas a la médula espinal. Desde allí, las señales son procesadas y transmitidas a
través de vías nerviosas ascendentes y descendentes hacia el cerebro, donde se
genera una respuesta motora que resulta en la extensión de la pierna en la rodilla.

Reflejo aquiliano: El reflejo aquiliano, también conocido como reflejo del tendón de
Aquiles o reflejo patelar, es un reflejo monosináptico que involucra la contracción
refleja del músculo tríceps sural (gemelos y sóleo) en respuesta a la percusión del
tendón de Aquiles. Este reflejo se desencadena cuando el tendón de Aquiles es
golpeado, lo que estira los receptores sensoriales (husos musculares) en el músculo.
La información sensorial viaja a través del nervio ciático y luego del nervio tibial hacia
la médula espinal, donde se produce una respuesta motora que se transmite a través
del nervio tibial hacia los músculos tríceps sural, causando su contracción y la
extensión del pie. Este reflejo ayuda en la evaluación de la integridad del arco reflejo y
de la médula espinal.

Reflejo bicipital: El reflejo bicipital es un reflejo monosináptico que implica la

contracción refleja del músculo bíceps braquial en respuesta a la percusión del tendón
del bíceps en la parte anterior del codo. Cuando el tendón del bíceps es golpeado, se
estiran los receptores sensoriales (husos musculares) en el músculo. La información
sensorial viaja a través del nervio musculocutáneo y luego del nervio braquial hacia la
médula espinal, donde se produce una respuesta motora que se transmite a través del
nervio musculocutáneo hacia el músculo bíceps, causando su contracción y la flexión
del antebrazo en el codo. Este reflejo es útil en la evaluación de la integridad del arco
reflejo y de la médula espinal en la región cervical.

Reflejo tricipital es un refle¡” monosináptico que involucra la contracción refleja del

músculo tríceps braquial en respuesta a la percusión del tendón del tríceps en la parte
posterior del codo. Cuando el tendón del tríceps es golpeado, se estiran los receptores
sensoriales (husos musculares) en el músculo. La información sensorial viaja a través
 del nervio radial y luego del nervio radial hacia la médula espinal, donde se produce
una respuesta motora que se transmite a través del nervio radial hacia el músculo
tríceps, causando su contracción y la extensión del antebrazo en el codo. Este reflejo
es útil en la evaluación de la integridad del arco reflejo y de la médula espinal en la
región cervical.

El reflejo radial y cubital son d¡” reflejos diferentes que implican la contracción de
músculos en respuesta a la estimulación de los tendones en diferentes áreas del
brazo.

1. **Reflejo Radial:** Este reflejo implica la contracción refleja del músculo tríceps
braquial en respuesta a la percusión del tendón del tríceps en la parte posterior del
codo. La información sensorial viaja a través del nervio radial hacia la médula
espinal, donde se produce una respuesta motora que se transmite de regreso a
través del nervio radial hacia el músculo tríceps, causando su contracción y la
extensión del antebrazo en el codo.

2. **Reflejo Cubital:** Este reflejo implica la contracción refleja del músculo flexor
ulnar del carpo en respuesta a la percusión del tendón del músculo flexor ulnar del
carpo en la parte medial del antebrazo. La información sensorial viaja a través del
nervio cubital hacia la médula espinal, donde se produce una respuesta motora
que se transmite de regreso a través del nervio cubital hacia el músculo, causando
su contracción y la flexión del carpo.

Ambos reflejos son parte del repertorio de pruebas neurológicas utilizadas para
evaluar la integridad del sistema nervioso periférico y la médula espinal en el brazo

Los mecanismos fisiológicos que evocan respuestas en los seres humanos son diversos y
pueden incluir procesos como la percepción sensorial, la activación del sistema nervioso
central, la liberación de neurotransmisores y hormonas, así como la respuesta del sistema
endocrino y del sistema inmunológico. Estos procesos trabajan juntos para generar
respuestas emocionales, comportamentales y físicas ante estímulos internos y externos.

 Explorar la relación entre el estímulo y la respuesta de los reflejos observados en

la práctica auxiliándose de escalas estandarizadas para medir reflejos.
 Describir la función y las vías eferentes del sistema piramidal para regular los
arcos reflejos

Realizados durante la práctica.

  Reconocer la importancia de evocar reflejos miotáticos y viscerales para explorar
la integridad del sistema motor, unidad motora, tipos y efecto de la lesión de
motoneuronas.

Evocar reflejos miotáticos y viscerales es crucial para evaluar la integridad del sistema
motor y la unidad motora en los seres humanos. Los reflejos miotáticos, como el reflejo
rotuliano, proporcionan información sobre la función de las vías nerviosas sensoriales y
motoras, así como sobre la integridad de la médula espinal. Por otro lado, los reflejos
viscerales, como el reflejo pupilar, pueden indicar la función del sistema nervioso
autónomo y la integridad de las vías nerviosas que regulan las respuestas viscerales.

La exploración de la integridad del sistema motor mediante estos reflejos es fundamental

para detectar posibles lesiones o trastornos neurológicos. Además, permite identificar la
presencia de hiperreflexia o hiporreflexia, que pueden ser indicativos de diferentes
afecciones, como lesiones de la médula espinal, neuropatías periféricas o enfermedades
neurodegenerativas.

En cuanto a las motoneuronas, su lesión puede tener diversos efectos dependiendo del
tipo de lesión y su localización. Por ejemplo, una lesión de motoneurona superior en la
corteza cerebral puede provocar espasticidad y debilidad muscular, mientras que una
lesión de motoneurona inferior en la médula espinal puede causar debilidad, hiporreflexia
y atrofia muscular.

En resumen, la evaluación de los reflejos miotáticos y viscerales es esencial para

comprender la integridad del sistema motor y la unidad motora, así como para identificar y
caracterizar las lesiones de motoneuronas y otros trastornos neurológicos.

 Describir la relación existente entre el sistema piramidal y el sistema

extrapiramidal, describiendo las principales vías eferentes de ambos y destacando
su importancia en la regulación del tono muscular.

La relación entre el sistema piramidal y el sistema extrapiramidal es crucial para la

regulación del tono muscular y la coordinación del movimiento en el cuerpo humano.

Sistema Piramidal (Vía Corticoespinal):

- El sistema piramidal está compuesto por las vías corticoespinales, que son las
principales vías eferentes motoras.

- La vía corticoespinal se origina en la corteza motora primaria (corteza cerebral) y

desciende a través de la sustancia blanca de la médula espinal.

- Las fibras del sistema piramidal cruzan en la decusación de las pirámides en el bulbo
raquídeo, por lo que la mayoría de las fibras controlan los músculos del lado opuesto del
cuerpo (control contralateral).

- El sistema piramidal está implicado en el control fino y voluntario del movimiento, así
como en la ejecución de movimientos precisos y hábiles.

Sistema Extrapiramidal:*
 - El sistema extrapiramidal comprende varias estructuras subcorticales, incluyendo el
núcleo caudado, el globo pálido, el subtálamo, la sustancia negra y el núcleo rojo.

- Las principales vías eferentes del sistema extrapiramidal incluyen:

- Vía Corticonuclear: Proyecta desde la corteza motora a los núcleos motores de los
nervios craneales, controlando así los movimientos de la cara y la cabeza.

- Vías Rubroespinales y Tectoespinales: Transmiten señales motoras desde el núcleo

rojo y el colículo superior hacia la médula espinal, contribuyendo al control del tono
muscular y la postura.

- Vías Vestibuloespinales y Reticuloespinales: Transmiten señales desde el sistema

vestibular y la formación reticular hacia la médula espinal para regular el equilibrio, la
postura y el tono muscular.

La interacción entre el sistema piramidal y el extrapiramidal es compleja y se

complementan en la regulación del tono muscular y la ejecución del movimiento. Mientras
que el sistema piramidal está más asociado con el control voluntario y la ejecución precisa
de movimientos, el sistema extrapiramidal desempeña un papel importante en el control
del tono muscular, la postura y los movimientos automáticos y reflejos. Una disfunción en
cualquiera de estos sistemas puede conducir a trastornos del movimiento y alteraciones
en el tono muscular, como la espasticidad o la hipotonía.

 Identificar las importancias de los reflejos viscerales en la regulación y función de

diferentes procesos fisiológicos, y la importancia de los reflejos miotáticos.

Los reflejos viscerales juegan un papel fundamental en la regulación y función de diversos

procesos fisiológicos, incluyendo:

Regulación cardiovascular: Los reflejos viscerales, como el barorreceptor y el

quimiorreceptor, ayudan a controlar la presión arterial y la frecuencia cardíaca en
respuesta a cambios en la presión sanguínea y los niveles de oxígeno y dióxido de
carbono en la sangre.

Regulación respiratoria:Los reflejos viscerales, como el reflejo de estiramiento pulmonar y

el quimiorreceptor, contribuyen a regular la frecuencia y la profundidad de la respiración
en función de la concentración de gases en la sangre y la distensión de los pulmones.

Digestión y metabolismo: Los reflejos viscerales participan en la regulación de la actividad

gastrointestinal, la secreción de enzimas digestivas y la absorción de nutrientes,
contribuyendo así al proceso de digestión y metabolismo.

Regulación de la temperatura corporal: Los reflejos viscerales, como la sudoración y la

vasoconstricción cutánea, ayudan a regular la temperatura corporal mediante la
modulación de la pérdida y la conservación de calor.

Por otro lado, los reflejos miotáticos son importantes para la función y el control del
sistema musculoesquelético. Estos reflejos proporcionan retroalimentación sensorial
sobre la longitud y la tensión muscular, lo que permite ajustar la actividad muscular para
mantener la postura, el equilibrio y realizar movimientos coordinados. Además, los reflejos
miotáticos también son cruciales en la detección de lesiones o trastornos neurológicos
que afectan la función muscular y la coordinación motora.

Para generar una reacción ante un estímulo, generalmente se siguen estos pasos:

1. Percepción del estímulo: El organismo percibe el estímulo a través de los sentidos

(vista, oído, tacto, gusto, olfato)
2. Procesamiento:El cerebro procesa la información recibida del estímulo, lo
interpreta y determina una respuesta adecuada.
3. Evaluación: El cerebro evalúa la importancia y la naturaleza del estímulo para
decidir la respuesta más apropiada.
4. Generación de la respuesta:Se activan los sistemas nerviosos y/o endocrinos para
producir la respuesta adecuada al estímulo percibido.
5. Ejecución de la respuesta: Finalmente, se lleva a cabo la respuesta, que puede ser
un comportamiento, una acción muscular, una emoción, etc.