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ELENA JORDANA

oemas no
m nd dos·
 •

~ .

POE lvf S NO M ND DOS

Premio Nacional de Poesía 1978
Ciudad de Aguascalientes
El jurado estuvo constituido por

Roberto Fernández Retamar

Efraín Huerta
Jaime Sabines

Primera edición
edición abril de 1979
D.R. © Editorial Joaquín Mortiz S. A.
Tabasco 106 México ·7 D. F
ISBN 968-27-0074-4
 PRÓLOGO

Sabines dijo:
A la chingada las lágrimas
y se puso a llorar
como s ponen a parir.

Yo dije: ·
al carajo l poesía

y me se
como puse a escribir
ponen a vivir.
 . a .Miguel Áng l Estrella
pianista preso en Uruguay

Recuerdo inexorablemente una escena:

acababas de tocar
y tu cuerpo aún temblaba
tus ojos
como profundísimos estanques
llenos de extraña luz.
Todo era magia.
Frente a ti
una muchacha
se recogía con una mano un mechón de pelo

y te Ili
Ilira
raba
como sin poder creerlo
como a un milagro,
aquella muchacha.
Estoy asistiendo a un encuentro
recuerdo que pensé.

Al día siguiente te escribí una carta

de esas que de antemano sé
que no voy a mandar.
Le daba vueltas a cosas profundas
usando frases cursis:
si cierro los ojos no veo a un pianista

11
veo usembrador invitarte con un cigarro
o un hombre soldando preguntarte si tienes frío
de sus dedos salen estrella: contarte un chiste
zenzontles ofrecerte una tajada de melón
jacarandas en flor. decirte que mañana
n fin no sé contarte . odo lo que te queremos Miguel.
ya no me acuerdo
Pero no olvido Ahora Miguel
tu cuerpo tem bla nd
ndoo después
después del concie
concierto
rto ahí
y la muchac
muchacha
ha aquella
aqu ella recogiéndose el pelo solo
y tú sin nadie que te pida una canción de cuna
como llegado de otro mundo sin una almohada
mirándola. sin un cigarro
sin sueños
no te mandé esa carta cursi que decía
Miguel de tus dedos salen estrellas.

ahora
todas las_ cartas del mundo que yo te escriba
todos los poemas que te dedique
no podrán reinventar ese minuto
en que estuvimos frente a frente

mientras.· yo me sacaba el pelo de la cara

y te miraba como a un milagro.
N o podrán reinventar tus dedos dulcísimos
sacando amaneceres jacarandas zenzontles
zenz ontles
del piano.
No podrán encenderte un cigarro

12 3
 I pe ro tú sa bes:
pero
supeermercado esmalte
sup esmalt e de uñas
uñas qué vestido
vestido pa
part:
Allí estabas esta noche
corno todas
todas las tardes esa mujer que sigue preg
pre g untando . por Alfredo
sentada en una banca de .Reforma con un descaro inconc
incon cebibl
ebiblee
escondiendo pudorosa entre tu brazo izquierdo y
tu bolso Pero créeme
la botellita de tequila envuelta en papel de a la tarde siguiente corrí a buscarte

Pero estraza.
esa tarde no estabas triste en l a banca de siempre.
· urante ununaa semana cada tarde
ta rde vol ví
no parecía que hubieras llorado onde quie
quiera
ra que esté
estéss perdóname.
ni mirabas melancólicamente a los nmos jugando
o a las parejas besándose furtivamente en las bancas
cercanas.
¡ . ¿Quizá recordarías a tu madre hace cincuen
cincuenta
ta años
fi ·¡

· ~ cepillándote l pelo llamándote porque la sopa sopa

..
: ·1

1
se enfría?
¿o las paiabras de la maestra diciendo a los otros
alumnps: deberían aprender de Carmela?
¿o el calor de la mano ·de Paco metiéndose ·en tu
blusa?

Esaa tard
Es tardee sonreías
sonreías parecías radiante.

T e juro que quise detenerme un segundo a tu lado

cualquier e:x:cusa pedirte fueg
fuego
o o la hora
pregunt
pre gunt art
artee si no eras
eras Marta que estudió
estudió en tal
escuela

14 15
 III vino a alterar mi paz una mañana
en un bar de la calle Reconquista
a Antonio
o rge y transformó también el delicado equilibrio
que había entre yo
Sus pelos cayéndole sobre los ojos como ramas de graduada
gradu ada en letras filos
filosofía
ofía
sauce sobre un torrente exageradamente turbio y , los camioner9s que dicen rubia
su aliento lírico los compadritos que miran descaradamente las
o t r o s dirían que alcohólico pero me opongo . caderas de las chicas que pasan
a un interpretación tan b a n a l los tipos que en cualquier lugar y a cualquier hora
su mirada -· -· n o confundir con los torrentes dicen puta
t u rb i o s los curdas que mean bajo la luna . escribiendo el ·
gritando puta puta nombre de la mina que los abandonó
qu1za a l vida los que canturrean cuesta abajo en mi rodada
· quizá a la mina que lo dejó plantado los qµe toman mate amargo
,1 solo · los que lloran de furia

cuando
·· Su todo el mundo está -en Punta del Este.
mirada o de ternura.
p e r d ó n por la insistencia-- El flaco me acecha desde los bolsillos dados vuelta
deletreando por medio de grises centelleos de u n canillita
la furia por cosas que callo desde los pelos parados de ese m~chachito que
para no entrar en problemas de censura sube al mismo colectivo ·que yo .
que no ayudarían al flaco desde la chamamé que están tocando en la pizzería
y que silenciarían.
silenciarían . en .cambio de la esquina
este homenaje -en sílabas contadas ah, rubia, si no conocés el charn,amé no podés
a ese tipo tan singular entender a , la Argentina)
tan malevo desde los cuentos de Arlt los versos de Gelman y
tan qué se yo los tangos de Rivero
que bajo
bajo el pseud
pseudónimo
ónimo los ojos grise
grisess del flaco está escondido en todos los catres

16 17
en t:odos osaltillos que entonces me daré cuenta de }que el. flaco es
en t:odos los bares sólo una nube

en t:odos los mates amargos del mundo que se apellida Buenos Aires
en todo
todoss los
lo s que me dice
dicen
n linda y que nos cubre a todos.
como l negro.
Buenos Aires 19 5
Flaco,
por qué no estás aquí
ahora
llamándome rubia o linda o sin llamarme
pero aquí
antes del lunes
día en que me encontraré con el negro
que quizá sólo me gusta porque tiene tus mismos
ojos grises

pero que se me aparece en el plato de sopa (

en· el camb
cambio
io que me da el colect
colectivero
ivero
en la voz de alguien que dice equivocado
en el jabón
en la alrn:ohada
y que el lunes
·cuando lo vea
no volveré a escaparme como esta tarde
sino que, negro
cuando me volvás a llarn,ar linda
enfrentaré tus ojos de buen malevo
y no será que esté traicionando al flaco, negro
sino más bien .

18 9
 JV

para
para lfr ed
edoo Zitarrosa
Che, pibe
esta mañana hace un frío tan nuestro
Si tuviera tre; años
tan bonaerense
te pediría una canción de cuna
que quisiera
te invitaría a remon
remontar
tar barrilete
barriletess
acurrucada en tu hombro
te tiraría el pelo
pedirte
y t e h~ría cosquillas en la barriga
que me inventaras a Gardel
si fuera inspector rápido
no te revisaría el abono
antes que la nostalgia haga el último gol
te dejaría viajar gratis en todos los tranvías o invitarte a montar
si fuera tu hermana menor
una bicicleta mágica
te prestaría· mi
mi bicicleta
que nos llevara por la costanera y el bajo
mis libros y mis sueños
si fuera . u tía
te remendaría los codos de la camisa muchachito
esta tarde tan bonaerense
te haría sopas calientes
siento unas ganas demasiado fuertes
te pondría una bufanda
de inventar con vos un futuro
c o m o dice Vallejo ·
no tan gris
no porque hace frío sino para que haga frío
como este que invento
si creyera en Dios
·

tecla a ecla
le pediría que no estés tan triste a solas
está noche tan de allá
Si me atreviera
va a ser larga sin tus manos
te mandaría este poema:
sin un mate
sin un sueño al que asirse
sin otra cosa que los poemas de Vallejo
20
21
 a q ui n y no l si r ve que yo l e grite VI
t entiendo
va a s e r Lma larga ·noche
noche Ese hombrecito
patea
ateando
ndo recu
recuerdo
erdoss pequeño, sí
sin u n Vallejo que oig
oig I pero no enano como él cree
sm vos escondiendo los destellos de su ternura
sin bicicleta tras los gruesos anteojos
sin Buenos Aires sintiéndose miserable, ínfimo
un
in vos m
ssm ate porque no 'puede lucir sobre su frente la etiqueta de
... Columbia University
o Harvard
ni siquiera una que diga secundaria aprobada.
que pide perdón cada vez que dice algo ingenioso
sin poder citar al que lo dijo antes
porque nadie q u e él s e p a · lo di jo antes.
Que cuando entra a una junta de jefes
o a una reunión cualquiera · ·
{ sus pies piden · disculpas contra el suelo
por su corbata ni siquiera pasada de moda
_implemente amodada
su voz pequeña y a Eo aguda ·

su mirada de no triunfador
· su traje cuidadosamente zurcido
su olor a glostora
ese tic en un ojo
· · \ por donde explotan la cuenta del dentista, las várice
váricess
de su mujer, la indiferencia de sus hijos
ese hombrecito que
22 23
 1

sin embargó VIL C NTOR

asiste a su oficina cada día
salucla con Ja misma deferencia Trágico como un arpegio en sol menor tocado én
al linotipista que al jefe violoncelo
mira e reojo como un perro flaco y sin hambre
a.dolescentemente tímido .como un niño con anteojos
a la recepcionista. comó un bañista musculoso que se deja fotografiar
por cinco pesos cinco
Hombrecito pequeño sí junto a bellas turistas de pelo rubio y OJOS
no m a no
pero indiferentes
aunque o lo sepás estoico como un cantante de ópera
t quiero. de voz potente y alma tímida
repitiendo por veinJeava vez
en -un bar de tercera
y tú que te· creías el rey de todo el mundo
jodido como el olor a humedad
las uñas comidas
las masturbaciones nocturnas
o los llantos nocturnos
.desamparado como un adolescente fumandoespero
en una esquina
s~lo como un gerente de banco los fines de semana

como un ex presidente
o un viudo
patético como un buzón vacío
como no ganar o t r a v e z la lotería
como querer ensayar una. sonrisa frente a un espe
espejo
jo
y ni siquiera encontrar un espejo

24
25
i
1
1-írico como manos de monja bordando las iniciales VIII
de Cristo en un pañuelo
c o nmovedrn cono un fantasma llorando a ese pibe qtte estaba parado hí
t:ierno com{) l a pregunta quieres agua
t:riste como todos los tristes del mundo Ese pibe
los feos tristes que e~tá parado ahí
los e nferm )S tristes . con inconsciente pose de hombre
los triunfadores tristes en la cola del supermercado:

y en una mano lleva un paquete de dulces

sin embargo en la. otra una moneda de cinco pesos.
o suficientemente cabrón Con simulada paciencia
como para decir carajo hace su turno en la caja.
y Por fin, pone su paquete sobre el mostrador
_ alquimista
alquimista tremendo
tremend o espera a que la cajera teclee en la máquina
aférrarse a su voz y su guitarra registradora
y salir a inventarles sueños y da, indolente, su moneda de cinco pesos.
a muchachas que aún no han podido superar la
nostalgia de Carlos Gardel. Son cinco diez con el impuesto.

Toda su seguridad se desbarata.

i siquiera hace el gesto de buscar los diez centavos

en sus bolsillos.
Alguien, detr~s de él, le dice a la cajera
aquí están los diez centavos que faltan .
Entonces el chico, sin darse vuelta
recuperado y
deja el paquete de dulces sobre el mostrador
y s~le
26 27
 IX

- Las gotas de lluvia en t u ventana

De pronto fuiste todos los chicos del mundo: se mezclan con flechas disparadas desde un tiempo
el que corre por el parque con un globo
el que estrena -traje o zapatos remoto:
el que juega con su perro tu niñez

el que se trel'a a un árbol Villa del Parque

el que contempla fascinado una hilera de hormigas el viejo zapatero clavando las suelas con expresión ·
.de apóstol
cu cara s lle11ó de besos de madre la maestra elogiando tu composición
de partido de fútbol ganado el primer cigarrillo
de buena nota en el cuad~rno de clase h e c h o con paja de escob~ y papel de b a ñ o -
de mano de amigo sobre el hombro y fumado a solas
de día de cumpleaños ¡oh pecadora
e trenzas d e niña casi rozándote la cara. el día de tu primera comunión.
El Beto
Todo sucedió aquella mañana que pasaba todas las tardes a las seis
en que tu mamá te dio una raja de sandía. silbando a barca
Aquella sirvienta un poco boqachina
que te contaba historias de monjas, curas y
huérfanos
el poema aquel, escrito después del primer beso
la fiesta de quince años a la que alguien prometió
llegar ·
¿pero llegó?
los paseos en bicicleta sintiéndote barrilete, hélice,
viento
¡tantas cosas vividas con la intensidad de barrilete,

28 29
 hélice. r iento una sopa caliente
la carra. de un amigo lejano
despt1és? el cielo desde la ventana.
Después
aterrizar
bajarse e un poema
para. mirar las cuentas del mercado
mecanografiar cartas

contestar eficazmente "sí, señor" de nueve a cinco

hacer fotocopias
gárgaras
pagar cuenta;
ir cada seis meses al dentista

tom r gotas para el hígado

teñirse el pelo
rechazar coquetamente
los pasteles de . frutill
frutillas
as
recordarle al gerente
la ley de la jubilación
escuchar con envidia a · as sobrinas
y con pac;:iencia a las tías.

Y luego
casi imperceptibles
otra vez los despegues:
Bach. escuchado a oscuras
Onetti, Cardoza y Aragón, Cortázár
el calorcito de la estufa

30 31
 XI. 10 D E MAYO y esa mi
missma noche
noch e, m adr
dre,
e, m ie ntC3 S t Ú a bra za s y
bes as a tus hijos
en este · dí11 glorioso, oh madre conmovida .por la tierna inutilidad de
está dicho qu~ recibirás de tus hijos la jarrita de plástico, los guantes, el pañuelo de
los símbolos d e amor eterno condensados en gasa, los gladíolos
una jajarr
rraa de plá
plásti
stico imitand o l tallado del
co imitando los dueños de la Comercial Mexicana se frotan
cristal las manos
un perfuine e invitan a una copa de champaña

cien veces
cebollamenos cálido que el olor a chile y
l tus guisos
al contadory al supervisor
al gerente
p e r o firmmlo por C o t y - por el éxito de yentas de cosas que
unos guantes demasiado suaves para tus manos la verdad
acostumbradas a la sosa y las escobas creíamos que nunca nadie sería capaz de comprar.
un pañuelo de gasa que sólo te atreverás a usar
ruborizada
durante os primeros cinco minutos de la fiesta en
tu nombre .
un ramo de gladiolos que equivale al salario de
dos días de tu esposó
un póster, un papel ilustración, a cinco colores,
que dice te quiero .

Y sin . embargo, en este día, oh madre, _

lo~ ojos de tus hijos brillarán de un modo especial
mientras te entregan, temblorosos y expectantes,
sus regalitos . envueltos en papel glasé . y adornados
con grandes moños de colores brillantes.

32 33
 XII Sábato
O el refinamiento de la forma versus el erupto del

Esos mi úsClllos superhombres o sypermujeres contenido.

que le dicen _al poeta principiante:
- a n t e s d e usar la palabra desesperado Esos que
miree en e diccionari
mir diccionario
o sin e,mbargo
y a miré de pronto se ponen a gesticular desesperados
- ¿en cuál? ( olvidándose de la etimología de la palabr
palabraa
en el Pequeñ.o larousse desespegaziem )
¡ e s que no conoce siquiera l porque no han sido nombrados académicos de la
Dictionaire des Etimologies, editado en París, poesía
con todas las etimologías posibles de la palabra o de la lengua
de-ses-pe·ga-ziem o del uso del diccionario
( aunque por supuesto se guardarían
gua rdarían muy bien
Esos que dicen de escribir un poema sobre estas frustraciones

ah, cl
claro
aro,, el psicoanálisis
psicoanálisis está de moda, que sólo deben ser guardadas en lo más recóndito
pero hay que vivir la vida tal cual viene del hígado)
y luego se la pasan psicoanalizando palabras
( sintagma correlati
correlativo,
vo, hipérbo
hipérbole
le retrue
retruecada,
cada, A todos esos les digo
galicismo vulgar) ¿sabía usted que después de los veinte
en vez de vivir las palabras tal cual vienen. todo lo que uno no dice por· la boca
o la máquina de escribir
Esos que se dibuja en la cara?
habland9 de poesía
se ríen de las vísceras, la angustia, l vómito
y sólo ha
habl
blan
an de emociones estética
estéticass
en una especie de teorema que enuncian así:
l quintaesencia de Borges versus la histeria de

34 35
 XIII. TA _]{ O
esa mujer que te Ilevás a un hotel
n una noche de borrachera
y a quien te olvidás de preguntar su nombre
SDy esa borracl1e ra que ·nec
·necesit
esitás
ás a mitad de a ño
cll.ando l aguin:i.ldo o si podrás volver a verla algún día.
las vacaciones
l ascenso

atÍ.n están lejos

so·y l nota disoriante
qt1.e te ayuda a sobrellevar esa armonía monótona
q11e decís que vida
es u

soy ese minuto ele locura

qu.e te peu:nité aguantar l resto de la hora
el elogio dicho
dicho con firmeza t al qu e descarta tu duda
l urna en que depoifrás tus lastimeros
lastimeros vos no
sabés,,
tus pequeñas frustraciones cotidianas
tus:
el café está frío
quién me abrió esta carta
otra vez la cuenta del gas

soy la que despierta los rincones más inéditos de

tu piel
l a que te hace ~ecir:
con vos me siento otra vez un colegial

soy ,
e n otras palabras

36 37
 XIV miro de reoJO a una muchach,1
saludo cordialmente al ,portero
y se una
masturban
páñuelo solitarios
de la nariz al borde del abro lata de sardinas
m desvisto
para que la vieja patrona no se entere m masturbo cuidadosamente sobre u pañuelo
de su miseria
sueño que Clara ha vuelto y me acaricia
FÉLIX GR NDE de pronto
suena el despertador
Suena el despertador
escupo en u n pañuelo
tono la medicina
me visto
ensayo una sonrisa frente al espejo
me ajusto l a corbata
salgo

bajo al metro
una mujer m e mira de reojo
llego a la oficina
saludo cortésmente al jefe
escribo, borro, releo, corrijo, archivo
tomo café
el mensajero mira con desdén mis zapatos lustrados
yo envidio las manchas de sudor de su camisa
escribo, tacho, releo
sin corregir, archivo
fumo un cigarro
me despido respetuosamente del jefe
bajo al .metro

38 39
 xr ¡:ero sólo por un insta
inst ante.
· Más tarde, cuando tu sobrino y esté dormido
a udwig mcenderás una vela
tomarás una pluma
Cierro lDs ojos y te veo y te pondrás a escribir
envuelto en u viejo sobretodo en un pentagrama de trazo irregular
con una bufa.nda al cuello fas notas de la oda a la alegría
e l pelo canoso y despeinado para tu sinfonía novena.
l a cara sin la.va.r

encendiendo l a lumbre para calentar un poco de

café.
¡,
T e veo restregarte las manos al calor de la lumbre.
Luego irás a ver qué consigues de comer
para ti y t u sobrino
que yace enfermo, en un rincón del cuarto.
·

Discutirás humillado
p e r o seguro de que hay que h a c e r l o
el pi _ecio q un
un.. trozo de pan y cuatro huevos.
Caminarás cabizbajo de vuelta a casa
cocinarás ·
pondrás la mesa
lavarás los platos.

Te. quedarás m~rando el atardecer, los pájaros, los

árboles
con ojos demasiado grises ·
tratando ·de adivinar el canto de los pájaros
el ruido del viento entre los árboles.
Puede que aprietes los puños por un instante
41
40 /
 XV XV II

Y ESTÁ TODO E¡.;;rORDEN: N o pretendo la g r an feli

eliccidad
l dentista esa que se viste de blanco y avanza
la ·votación bajo los acordes de l marcha nupcial de
la carta aquella · · M~ndelssohn
la cuenta del gas la que da l mano a profesores y colegas
la tierra deba. j o e La cama en la ceremonia de entrega de diplomas de honor
la vieja pelea
o lasiquiera
·ni que viaja e~ yate del
la felicidad alrededor
coche del mundo
el traje nuevo
sólo falta el pequeño desván
al que nadie entra apenas pido volver a sentir
el olor del pasto recién cortado
el sabor del agua
el tacto de tu mano en mi cuerpo

42 43
 . I

XVIII X X

Y a no es tie:m p de ·reyes ~agos l j rdinero qtte veo desde mi terr z .

trayen
tra yendo
do la :fel
:felici.
ici.dad
dad disfrazada
disfraz ada de bicicleta
ni de hadas inaél
inaélrina
rinas.
s. que trans
transforme
formenn cenici
cenicientas
entas A vos te inquietan los yuyos creciendo entre los
en pri lcesa~ almácigos
no es tiempo de tinturas corsés caretas los bichos canastos desafiándote a ver quién llega
para el desasosiego y la tristeza primero a los frutos maduros
la leña no cortada

ahora hay qq.e cantar el cuesta abajo en mi rodada el césped lleno de hojas secas que
sin melodramatisrnos ni autocompasión indefectiblemente
verle el lado bueno a este minuto habrá que barrer
y no malgastarlo el perro que no dejará de ladrar
hasta que le arrojes sus huesos y mendrugos
a vos te inquietan la primavera el invierno
la tierra reseca
el viento

a mí esta página en blanco

esta vida en blanco
que trato de convertir en páginas
a ver si así es más fácil llenarla.

44 45
 XX
a veces la d_jmensi )n de la felicidad
está. dada e n s filedio centímetro más del nuevo
zapato
e n u n color de pelo inusitado
n u n cigarrillo fumado a medias
n las migas de p1.n y las manchas de vino sobre
el mantel
en l evocaación de una mano maternal
evoc
carnosa regordeta
salando los bistecs del mediodía
e n el silbido milenario del afilador de cuchillos
e n el silencio radiante de un chico
al que se le elogian su buena _letra
o sus rodillas limpias
a veces l felicidad es algo tan descabellado
como querer volar
o como necesitar la mano de mamá
para seguir andando por el mundo.
46
XX
Envidio tu fe en las espmacas hervidas
el arroz sin sal y el germen de trigo
en las caminatas a las seis de la mañana
respir-ando profundamente un-dos un-dos
al ritmo de tu corazón -
envidio tu paz al.
al. darle una moneda de diez pesos
a una mendiga
envidio la avidez con que h~cés palabras ~cruzadas
o tu sentido de triunfo cuando ganás un solitario
envidio tu fe en e} agua colonia
. los diseños de Dior
la admiración de tus vecinos
envidio esa sonrisa satisfecha
que no querría para mí
pero cuyo · reverso t~ml >OCO aguanto.
7
 XX
XX

al inventor de rr a fórmula de la i
Creo en la televisión
.creo en el yoga felicidad
creo en la crema Ponds y los enjuagues bucales
con un poco más de fe Ahora creo que todo va a cambiar.
podría también creer en Carter Hace una semana éompré un libro vital:
en la declaración de los derechos humanos Cómo conquistar amigos y disfrutar de la vida.
y en la paz. Cada mañana leo un capítulo:

· ayer me tocó repetirme ante cada contrat

contratiempo
iempo
soy feliz soy feliz soy feliz
hoy me toca abrirme vitalmente a todas las
oportunidades o sea: decir a todo que sí
mañana me tocará pensar un poco en los demás:
tratar
trat ar de adivinar qué quieren
quieren para
·. 1

complacerlos de inmediato.
., Y o creo que en una semana todo va a ser
perfecto
salvo que aún no he decidido si seguir leyendo
o de una vez ~brir la llave del gas.

8 9
 XXIV odio
quiero matar
la q mero venganza.
Puede ser que las noticias de radio Todo eso puede ser
te hagan cerrar violentamente el piano

m}entras una voz, algo desconcertada tiene que ser.

sigue cantando, sola Pero algún día
Guten Abend ut Nacht. y no estoy delirando
Puede ser que te distraigan la risa las noticias de la radio
la fe t e harán decir de nuevo

te fuercen a decir yo amo

el hombre s una mierda y volverás tranquilo
te hagan sentir culpable al reuma de tu madre
por las sábanas con olor a almidón a tus zambullidas en el mar
los pasteles de fresas a releer cierto poema
las zambullidas nocturnas en el mar mientras alguien canta

y los subsiguientes besos salados y arenosos. al pianoAbend

Puede ser que las noticias de la radio Guten ut Nacht.
te obliguen a olvidar
cierto poema
cierto olor
cierta mano en tu piel
o incluso
el reuma de t u madre
las cuotas del refrigerador
o las visitas a amigos.
Y también puede ser, carajo
que las noticias de la radio
te hagan gritar

50
 XX que no se rruguen-
junto con u vestído de raso.
Siento mi corazón
como la calle Rivadavia Marisol
arráncate ya de la cara
un día después de carnaval: ese antifaz rojo
las mascaritas han desaparecido forma de corazón
dejando el suelo cubierto bordeado de piedritas brillantes.
de ·serpentin~.s
·serpentin~.s rotas Alejandro
papel picado guarda silenciosamente
y vómitos. para el año que viene
En el aire flotan · os piropos que · u boca tímida
como balas perdidas no se atrevió a decir
entre olor a sudor y perfumes baratos en este carnaval.
la s ilusiones de aquellos que Corazón
este carnaval aprende para siempre
tampoco que el carnaval llega una vez al año
encontraron al príncipe o l princesa y que vivir es otra cosa . . .
que loloss redimi
redimiera
era .de todo un año
agachados sobre la máquina o los biblioratos.
Pasó este carnaval
con sus desvelos
mentiras

sueños.
María borra el carmín de tus mejillas
mejillas
Manuel olvida eseese paso de duque
con el que ibas a despertar a l bella durmiente del
corso
Candelas plie
pliega
ga tus sueños con cuidadq
cuidadq

52 53
 XXV
a Elena que tun vez 3:scribió y
· quisiera soñar con el amor · sólo
las moscas revoloteando cerca de la cocina
las enredaderas
el pasto creciendo en los ceL1C: 1terios
1

veo . amo los hornos de pan

el fifo gastado de los cuchillos
Amo las migas de pan y las manchas de vino sobre las cabezas despeinadas
el mantel las bocas despintadas
los zapatos embarrados las camisas a las que les falta un botón
los libros subrayados
las tazas de café a la madrugada amo ciertos silencios
los paraguas goteando en el zaguán ciertos sonroJOS
ciertas ausencias
amo la cuenta exagerada del teléfono
amo los juegos de cartas incompletos
l cocina llena de platos sucios los espejos empañados
las huellas de manos de niño en paredes y
almohadones los cuentos de. los abuelos

las toallas húmedas después del baño las· mentiras de los abuelos
las camas desvencijadas
las cacerolas abolladas amo a todos los nmos comiendo sandía
los bordes de la mesa a todos los viejos sentados en las bancas de las
quemados por cigarrillos plazas
a todos los cobradores de luz
amo los vidrios rotos por una pelota a todos los vendedores ambulantes del mundo
los escalones gastados amo locamente a los que escriben a escondidas
los callos a los que llevan siempre su botellita en un bolsillo
los overoles grasientos a los que se deslizan silbando por calles desiertas
a los que charlan frente a un espeJo
las rayuelas de tiza sobre la vereda /

55
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amo a los que s ríen de su miseria ciertas iras

amo también a los qu se esconden para llorar ciertas muertes

amo el olor a ajo Amo mis ojos

a tostadas mis oídos
a pasto recién cortado mi piel
a tierra mojada estas manos sobre la máquina
más aún la máquina misma
a los zenzontles
las jacarandas
las lombrices
los cerdos comiendo bellotas

amo las visitas inesperadas

las grandes oilas de frijoles
los colchones n el suelo

amo el olor a pis de niño

a comida quemada

·amo incluso los bastones

las muletas

las siIIas de ruedas

los anteojos
los dientes post zos
amo también
en ciertos casos
ciertas puteadas

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ÍN D I E
Prólogo
Pról ogo . . . . . .. .. . . .. . . . . . . . .. .. . . .. . 9
I Recuerdo inexomblemente . . . . . . . . . 11
II. llí estabas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . i4

III. Sus pelos cayéndole . . . . . • . . . . . . . . 16

IV. Si tuviera tres años . . . . . . . . . . . . . . 20
V. Che pibe . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21
VI. Ese hombrecito . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
VII. Cantor . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25
VIII. Ese pibe . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27
IX. De pronto fuiste . . . . . . . . . . . . . . . . 8
X. Las gotas de lluvia . . . . . . . . . . . . . 29
XI. 10 de mayo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 32
XII. Esos minúsculos superhombres . . . . . 34
XIII. Tang
Ta ngoo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 36
XIV. Suena el despertador · 38
XV. Cierro los ojos y te veo . . . . . . . . . . . 40
.XVI. Y a está todo en orden . . . . . . . . . . . 42
XVII. No pretendo . . . 43
XVIII. Y a no es tiempo de reyes . . . . . . . . . . 44
XIX. A vos te inquietan los yuyos . . . . . . 45
XX. i veces la dimensión . . . . . . . . . . . . . 46
XXI. Envidio tu fe . . . . . . . . . . . . . . . . . . 47
XXII. Creo en la televisión . . . . . . . . . . . . . 48
XXIII. Ahora creo que todo . . . . . . . . . . . . 49
XXIV. Puede ser que las noticias . . . . . . . . . 50
XXV. Siento mi corazón . . . . . . . . . . . . . . 52
XXVI. Amo las migas de pan . . . . . . . . . . 54

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Impreso hecho en México
Printed and made in Mexíco
En los talleres de Editorial Galache S~ A

Privada
México 7del
delDDr.F. Márquez 81
Edición de 2 000 ejemplare
ej emplaress
sobrantés para reposición
25 IV 1979

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