Machine Translated by Google

ARTÍCULO DE INVESTIGACIÓN

Restauración adhesiva de diseño asistido por computadora/fabricación

asistida por computadora de molares con una cúspide comprometida:
efecto del sellado de dentina inmediato reforzado con fibra y la superposición
de cúspides sobre la resistencia a la fatigajerd_433 1..12

PASCAL MAGNE, DMD, PhD*† , LUÍS L. BOFF, DDS, MDS‡, ELISA ODERICH, DDS, MDS§,
ANTÔNIO C. CARDOSO, MDS, PhD

ABSTRACTO

Declaración del problema: Los dientes agrietados tradicionalmente pueden requerir el uso de coronas de cobertura completa. Los
tratamientos conservadores alternativos implican el uso de inlays/onlays adhesivos con la posibilidad de incluir un parche de fibra para
reforzar la cúspide agrietada.

Propósito: El propósito de este estudio fue evaluar la resistencia a la fatiga de molares comprometidos restaurados con incrustaciones/
onlays de resina compuesta de diseño asistido por computadora/fabricación asistida por computadora (CAD/CAM) con y sin sellado inmediato
de dentina reforzado con fibra (IDS). ).

Métodos y materiales: Se simularon grandes preparaciones mesio­ocluso­distales con cúspides palatinas agrietadas/socavadas en 40 molares
maxilares extraídos. Todos los dientes recibieron incrustaciones (N = 20) y onlays ( N = 20) de IDS (Optibond FL, Kerr, Orange, CA, EE. UU.) y
de resina compuesta (Paradigm MZ100, 3M­ESPE, St. Paul, MN, EE . UU.). Se aplicó un parche de fibra (Ribbond, Ribbond Inc., Seattle, WA,
EE. UU.) en la mitad de las preparaciones. Las restauraciones se cementaron adhesivamente con resina compuesta precalentada (Z100, 3­M
ESPE) y se sometieron a cargas isométricas cíclicas a 5 Hz, comenzando con una carga de 50 N (5000 ciclos), seguida de etapas de 150,
300, 450 , 600, 750, 900 y 1.050 N a un máximo de 25.000 ciclos cada uno.
Las muestras se cargaron hasta la fractura o hasta un máximo de 180.000 ciclos. Los grupos se compararon mediante el análisis de supervivencia
de la tabla de vida.

Resultados: Se encontraron diferencias en la probabilidad de supervivencia (p = 0,04). El grupo de incrustación con parche de fibra falló con una
carga promedio de 870 N y ninguna de las muestras resistió los 180.000 ciclos de carga; las tasas de supervivencia de inlays y onlays sin fibras y
de onlays con fibras fueron del 10, 30 y 50%, respectivamente.

Conclusiones: Los onlays (con o sin fibras) aumentaron la resistencia a la fatiga de los molares comprometidos en este estudio in vitro.

SIGNIFICACIÓN CLÍNICA

Los resultados de este estudio in vitro sugieren que los molares con una cúspide comprometida pueden reforzarse mejor con una
capa de resina compuesta que proteja la cúspide. No hubo ningún beneficio al utilizar refuerzo de fibra debajo de esas restauraciones
indirectas.

(J Esthet Restor Dent ••:••–••, 2011)

*Profesor asociado, División de Ciencias Restaurativas, Facultad de Odontología Herman Ostrow de la Universidad del Sur de California, Los Ángeles, CA, EE. UU.
† Profesor de Odontología Estética de la Fundación Don y Sybil Harrington, Facultad de Odontología Herman Ostrow de la Universidad del Sur de California, Los Ángeles, CA, EE.
UU . ‡ Profesor asistente de Prostodoncia e Investigador, Centro de Ciencias de la Salud— Odontología, Universidad Federal de Santa Catarina— UFSC, Florianópolis, SC,
Brasil § Investigador, Departamento de Odontología, Centro de Ciencias de la Salud— Odontología, Universidad Federal de Santa Catarina — UFSC, Florianópolis, SC, Brasil
Profesor Titular, Centro de Ciencias de la Salud— Odontología, Universidad de Santa Catarina— UFSC, Florianópolis, SC, Brasil

© 2011 Wiley Periodicals, Inc. DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x Revista de Odontología Estética y Restauradora Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 1
Machine Translated by Google
REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.
INTRODUCCIÓN
El síndrome del diente fisurado es una afección dolorosa que se
encuentra en los dientes y en las restauraciones fallidas.1,2
En dientes vitales restaurados, se desarrollan microfisuras en
la base de las cúspides debilitadas, principalmente debido al
aumento del movimiento cuspídeo bajo cargas oclusales funcionales
repetidas.3,4 Se sabe que que los dientes intactos demuestran flexión
cuspídea bajo carga oclusal4–6 y que los procedimientos
restaurativos pueden resultar en un aumento del
movimiento cuspídeo5,7 comprometiendo la resistencia a la
fatiga, induciendo fracturas que conducen al síndrome del
diente fisurado.1,8 Las restauraciones con amalgama son el
ejemplo más típico de este fenómeno.7
Situaciones desafiantes como los movimientos laterotrusivos
y mediotrusivos que generan concentraciones dañinas de
estrés pueden causar una flexión cuspídea que predispone
al diente a fracturarse.9 Un análisis de elementos finitos que
simula esas interferencias10 ha mostrado patrones de estrés
invertidos (interferencias laterotrusivas versus
mediotrusivas). Aunque las cúspides que no eran de soporte
estaban sometidas a tensiones de tracción, las cúspides de
soporte estaban generalmente bien protegidas (esfuerzos de
compresión). En el mismo estudio se encontraron altos niveles
de tensión en el surco central durante el contacto
mediotrusivo. El conocimiento de las fuerzas de mordida y la
distribución de la tensión es de suma importancia para
comprender el comportamiento biomecánico (flexión cuspídea
y fluencia plástica) de la estructura dental comprometida y, en
última instancia, para comprender por qué fallan las
restauraciones.10–15 El proceso de toma de decisiones terapéuticas
y el enfoque biomimético para La restauración de los dientes
posteriores16 se verá influenciada por estos
factores biomecánicos.
Tradicionalmente, los dientes fisurados se han restaurado con
coronas de cobertura completa, que promueven el fortalecimiento
extracoronal y la protección contra fracturas,2,17–20, pero requieren
un sacrificio sustancial de la estructura dental.21,22 Las
técnicas conservadoras alternativas implican el uso de incrustaciones/
onlays adhesivas23–25 y tienen el potencial de “reensamblar”
las cúspides debilitadas mediante refuerzo utilizando materiales y
técnicas adhesivas.3,6,26,27 Durante la última década, el diseño/
fabricación asistida por computadora (CAD/CAM)
2 Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 Revista de Odontología Estética y Restauradora
Los materiales compuestos han ganado popularidad.28–30
Se caracterizan por un contenido de relleno que posiblemente
excede el 70% en volumen, lo que proporciona una mayor
tenacidad a la fractura porque pueden reforzarse significativamente
mediante un tratamiento posterior al curado.29,30 Otro
enfoque de fortalecimiento consiste en incluir refuerzos de
fibra. , que ha sido explorado en varios experimentos de carga
hasta la falla,31–34 con resultados controvertidos sobre su
capacidad para reforzar los dientes. Se pueden utilizar
diferentes sistemas de fibras. Aunque algunos autores prefieren
las fibras tejidas (en su mayoría isotrópicas), 35,36 otros recomiendan
el uso de fibras unidireccionales.
fibras de vidrio (ortotrópicas).37–39 Un sistema de fibras bien
diseñado debería influir en el mecanismo de distribución
de tensiones y, dependiendo de su ubicación y orientación,
ser eficaz para detener, reducir o redirigir la propagación de
grietas.35,36 Mientras que las fibras tejidas refuerzan el
polímero en más de una dirección, las fibras continuas
unidireccionales dan resistencia y rigidez al compuesto sólo en la
dirección de las fibras (resistencia mecánica anisotrópica).37 En la
práctica, el aspecto más desafiante es la capacidad de
aplicar todos estos conceptos de ingeniería en la Pequeña estructura
biológica de un diente. Actualmente, el método más práctico
y conservador de utilizar refuerzo de fibra es la aplicación de
parches de fibra tejida, debido a su facilidad de manipulación
y posicionamiento en un defecto intracoronal, como una preparación
mesio­ocluso­distal profunda. Sin embargo, en vista de los datos
actuales32–34 , la afirmación de que incluir refuerzo de fibra
garantizaría una mejor distribución de la tensión en el diente y
reducir las tensiones de tracción dañinas requiere validación. De
hecho, la literatura existente se centra en restauraciones directas de
resina compuesta, pero no hay datos publicados sobre el uso de
refuerzo de fibra debajo del adhesivo indirecto.
incrustaciones u onlays.
El propósito de este estudio fue evaluar la resistencia a la fatiga
de molares comprometidos (defectos mesio­
ocluso­distales anchos y cúspides socavadas) restaurados
utilizando incrustaciones y onlays de resina compuesta CAD/CAM
con y sin refuerzo de fibra y sellado inmediato de dentina
(IDS). La hipótesis nula probada fue que no existe influencia del
diseño de la preparación y la presencia de refuerzo de fibra en
la resistencia a la fatiga de dichas restauraciones.
DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x © 2011 Wiley Periodicals, Inc.
Machine Translated by Google
A B
FIGURA 1. A, medidas de preparación del inlay y B, onlay (en mm).
MÉTODOS Y MATERIALES
Se recolectaron doscientos terceros molares superiores humanos
sanos, recién extraídos, previa aprobación de los Comités de
Revisión Ética de la Universidad Federal de Santa
Catarina y de la Universidad del Sur de California (No.
632/10). La estandarización es un objetivo en la investigación
para reducir el sesgo, pero es un desafío, especialmente
cuando se utilizan dientes extraídos con una amplia gama de
formas y tamaños. El objetivo del presente trabajo no fue
investigar cómo se comparan los distintos tratamientos con
el diente intacto. Sin embargo, para limitar las variables de
confusión, se seleccionaron 40 molares superiores del
conjunto de 200 terceros molares superiores según su
anatomía oclusal (solo tres cúspides) y tamaño (medidas
vestibulolinguales y mesiodistales de tamaño mediano), y se
distribuyeron en cuatro grupos. Un único operador experimentado
realizó todos los procedimientos.
Los dientes se montaron en una plantilla de posicionamiento
especial con resina acrílica (Palapress, Heraeus Kulzer,
Armonk, NY, EE. UU.) que incrustó la raíz hasta 3,0 mm
por debajo de la unión amelocementaria (CEJ).
Para fines de estandarización, todas las muestras recibieron un
gran defecto mesio­ocluso­distal estandarizado sin cajas (forma
de ranura de 4,5 mm de profundidad y 4,5 mm de ancho
vestibulolingual), que se prepararon con instrumentos de corte
rotatorios de diamante cónicos (313.029 y 314.021,
Brasseler USA, Savannah, Georgia, EE. UU.). Las líneas
de acabado gingival interproximales se mantuvieron 1 mm
por encima de la UCE. Un calibrador digital (nº 1436,
© 2011 Wiley Periodicals, Inc. DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x
REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.
General Tools, Montreal, Canadá) se utilizó para verificar esas
mediciones. Las cúspides palatinas de todas las muestras se
socavaron (se eliminó la dentina) con un instrumento de
corte giratorio de diamante redondo y grueso (801­023,
Brasseler USA) para simular la eliminación de caries secundaria.
Para debilitar aún más la cúspide, se simuló una grieta de 1
mm de profundidad en la base de la cúspide con un disco
de 0,1 mm de espesor (Vision Flex Disc, Brasseler USA)
en un ángulo de 20 grados. En la mitad de las muestras (N = 20)
se mantuvo la cúspide debilitada (grupos IN e INF) y en los
otros 20 dientes la cúspide palatina se redujo de 1,5 a 2,0
mm paralela a la inclinación de la cúspide (grupos ON
y ONF). Se tuvo especial cuidado en obtener ángulos de
línea interna suaves y redondeados
(Figuras 1 y 2).
Se aplicó IDS a todas las muestras como lo sugieren varios
autores para obtener una unión segura.16,26,40,41 Para esto
Para este propósito, se utilizó el instrumento de corte
rotatorio de diamante redondo grueso (801­023, Brasseler
USA) a 1.500 rpm para refrescar la superficie de la dentina
antes de la aplicación de un agente adhesivo de dentina de
grabado y enjuague de cuarta generación (Optibond FL, Kerr,
Orange, CA, USA) según instrucciones del fabricante:
15 segundos de grabado de dentina con ácido fosfórico al
37,5%, enjuague abundante durante 20 segundos,
secado al aire durante 5 segundos, aplicación de primer
(Optibond FL, frasco 1) con un ligero movimiento de cepillado
durante 20 segundos, secado suave al aire durante 5
segundos (dentina húmeda), aplicación de resina adhesiva
(Optibond FL, frasco 2) con un ligero movimiento de cepillado durante 15 segund
Revista de Odontología Estética y Restauradora Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 3
Machine Translated by Google
REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.
FIGURA 2. Muestra con preparación onlay, esmalte socavado
y grieta simulada en la base de la cúspide palatina.
polimerizado durante 20 segundos (1000 mW/cm2 — Allegro, Den­
Mat, Santa Maria, CA, EE. UU.) seguido de la aplicación de
una base de resina compuesta (Z100, 3M­ESPE, St. Paul, MN,
EE. UU.) para bloquear la socavado en la cúspide palatina (Figura
3A). En los grupos IN y ON, se aplicó un recubrimiento de barrera
de aire (KY Jelly, Personal Products Company, Skillman,
Nueva Jersey, EE. UU.) seguido de 10 segundos de exposición
adicional a la luz de curado para polimerizar la capa de inhibición
de oxígeno. En los grupos INF y ONF, la base de resina
compuesta se dejó sin polimerizar.
Mientras tanto, se preimpregnó un parche de fibra de
polietileno en forma de U (7 ¥ 4 mm, Ribbond­THM, Ribbond Inc.,
Seattle, WA, EE. UU.) con resina adhesiva Optibond FL (Optibond
FL, botella 2) durante 5 minutos a 65 °C.
El parche se aplicó al tercio oclusal de la pared bucal, a través del
piso oclusal hasta el tercio oclusal de la pared lingual (Figura
3B). El parche de fibra impregnada sobre la base de
resina compuesta se polimerizó durante 20 segundos, seguido
de la aplicación de un revestimiento de barrera de aire (KY
Jelly) y 10 segundos de exposición adicional a la luz para
polimerizar la capa de inhibición de oxígeno. El recubrimiento de
barrera de aire se eliminó fácilmente mediante un enjuague
abundante, ya que es totalmente soluble en agua. Finalmente, se
eliminó cuidadosamente el exceso de resina adhesiva de los
márgenes del esmalte de todas las muestras con un
instrumento de corte giratorio de diamante redondo a 1500
rpm (801­023, Brasseler USA) (Figura 3C).
Las muestras se restauraron mediante un sistema CAD/
CAM (Cerec 3, Sirona Dental Systems GmbH, Bensheim,
Alemania). Todos los preparados estaban equipados con
4 Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 Revista de Odontología Estética y Restauradora
un inlay u onlay de espesor estandarizado, utilizando el modo
Inlay/Onlay/Partial Crown Master y las herramientas de
diseño del software Cerec (v. 3.03, Sirona Dental Systems
GmbH). Las restauraciones presentaban un espesor
estandarizado de ca. 2,5 mm en el centro
surco (todos los grupos) y 2,0 mm en la punta de la cúspide
palatina (grupos ON y ONF). Para todas las muestras, las
restauraciones se fresaron en resina compuesta (bloques
Paradigm MZ100, 3M­ESPE) con el bebedero ubicado en la
superficie distal.
El acondicionamiento de la superficie de todas las
restauraciones incluyó abrasión con partículas suspendidas
en el aire con 27 μm de óxido de aluminio a 30 psi, seguida de
limpieza con un microcepillo y ácido fosfórico al 37,5 % (Ultraetch,
Ultradent, Salt Lake City, UT, EE. UU.) con un suave movimiento
de cepillado durante 1 minuto y enjuagar con agua durante 20 segundos.
La limpieza se completó mediante inmersión en agua destilada en
un baño de ultrasonidos durante 2,5 minutos. Después de
un completo secado al aire sin aceite, las superficies calcográficas
se silanizaron (Silane, Ultradent) y se secaron a 100 °C/212 °F
durante 1 minuto.
Las preparaciones dentales se condicionaron
mediante abrasión con partículas en suspensión en el aire con
27 μm de óxido de aluminio a 30 psi y 30 segundos de
grabado con ácido fosfórico al 37,5%, enjuague abundante durante
20 segundos y secado completo. Luego se aplicó una capa de
resina adhesiva (Optibond FL, botella 2) a ambas superficies
calcográficas (restauración y diente) y se dejó sin polimerizar hasta
la aplicación del material de fijación precalentado (Z100, 3M­
ESPE; precalentado durante 5 minutos en Calset , Addent,
Danbury, CT, EE. UU.) al diente e inserción final de la restauración.
Tras una cuidadosa eliminación del exceso de resina compuesta
no polimerizada, cada superficie se polimerizó durante 60
segundos (20 segundos por superficie, tres veces). Todos los
márgenes se cubrieron con una barrera de bloqueo de
aire (KY Jelly) durante el último ciclo de
polimerización. Luego, las restauraciones se pulieron
mecánicamente utilizando un sistema de pulido de resina
compuesta (Kit 4477 Q­Polishing System, Komet of America Inc.,
Rock Hills, SC, EE. UU.) y un cepillo de cerdas de silicona
(Occlubrush, KerrHave, Orange, CA, EE. UU.).
Cada muestra se almacenó en agua destilada a temperatura
ambiente durante al menos 24 horas después del adhesivo.
DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x © 2011 Wiley Periodicals, Inc.
Machine Translated by Google

REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.

A B

FIGURA 3. A, Base de resina compuesta para bloquear el corte socavado en la cúspide palatina. B, Posicionamiento de fibra de polietileno preimpregnada en “forma
de U”. C, Refinado de los márgenes del esmalte con un instrumento de corte giratorio de diamante redondo.

colocación de la restauración. Debido a que la estabilidad de la
unión usando esta técnica adhesiva específica parece ser
estable (sin diferencias estadísticas hasta 12 semanas después
de su aplicación)42 no había razón para retrasar las pruebas por
más de 24 horas. Luego se simularon las fuerzas
masticatorias utilizando servohidráulicos de circuito cerrado
(Mini Bionix II, MTS Systems, Eden Prairie, MN, EE. UU.). Cada
muestra se colocó en la cámara de carga con una
angulación de 30 grados y se situó con un dispositivo de
posicionamiento (mesa deslizante). El ciclo masticatorio
se simuló mediante una contracción isométrica (control de
carga) aplicada a través de una cúspide artificial de resina
compuesta (Z100, 3M­ESPE) con forma de cilindro (radio de
2,15 mm). Los penetradores de acero tienden a generar una carga
puntual intensa y localizada, que es más probable que genere
daños en la superficie y desechos en forma de polvo por
aplastamiento (grietas del cono de Hertz).43 En cambio, la menor rigidez y ciclos (protocolo de carga modificado de Fennis y colegas,
un mayor desgaste del cilindro de resina compuesta permitió
una simulación más realista de los contactos de los dientes, a
través de facetas de desgaste que distribuyen la carga sin
alcanzar el límite de compresión de los tejidos o materiales de restauración.
Todas las muestras se ajustaron (con el dispositivo de
posicionamiento) en la misma posición con contacto único
entre el cilindro y la cúspide palatina (Figura 4).
Este punto de carga estaba a 2,0 mm equidistante de la punta de
la cúspide y del surco central. La cámara de carga se llenó
con agua destilada para sumergir las muestras durante la prueba.
La carga cíclica se aplicó a una frecuencia de 5 Hz, comenzando
con una carga de calentamiento de 50 N durante 5000 ciclos
(etapa de preacondicionamiento), seguida de etapas de 150, 300,
450, 600, 750, 900 y 1050 N a una frecuencia de 5 Hz. máximo de
25.000 ciclos cada uno (carga de escalera). Las muestras se
cargaron hasta la fractura o hasta un máximo de 180.000

© 2011 Wiley Periodicals, Inc. DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x Revista de Odontología Estética y Restauradora Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 5
Machine Translated by Google
REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.
FIGURA 4. Muestra (onlay) colocada en la máquina de prueba en un
ángulo de 30 grados. La carga se aplica mediante un contacto
único entre el cilindro de resina compuesta y la cúspide palatina.
y Kuijs y colegas).19,20 La carga de fractura se determinó
mediante el paso de carga en el que se detuvo la máquina
(activado por el módulo de detección de fallas basado en desplazamiento
del software de prueba). Se registró el número de ciclos
soportados y el modo de falla.
Tras un acuerdo entre dos examinadores bajo microscopía
óptica (Leica MZ 125, Leica Microsystems, Wetzlar,
Alemania), se hizo una distinción entre fracturas por encima o por
debajo de la UCE o fractura cohesiva (dentro de la
restauración) o fractura en la interfaz.
La resistencia a la fatiga de los cuatro grupos se comparó mediante el
análisis de supervivencia de la tabla de vida. En cada intervalo
de tiempo (definido por cada etapa de carga), se contó el número
de especímenes que comenzaron el intervalo intactos y el número
de especímenes que se fracturaron durante el intervalo, lo
que permitió calcular la probabilidad de supervivencia en cada
intervalo. La influencia del restaurador.
La resistencia a la fractura del material (etapa de carga en la que
ocurrió la falla) se analizó mediante la prueba de rango logarítmico
con un nivel de significancia de 0,05. Las comparaciones post hoc se
realizaron utilizando la prueba de rango logarítmico y se
realizaron sin ajustar por comparaciones múltiples, lo que
aumenta el potencial de un error de tipo uno (que indica que existe
una diferencia, cuando en realidad no hay diferencia). Sin
embargo, ajustar las comparaciones múltiples utilizando la
corrección de Bonferroni habría aumentado la posibilidad de
un error de tipo dos (no se declara ningún efecto o diferencia,
aunque en realidad sí hay un efecto).
6 Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 Revista de Odontología Estética y Restauradora
TABLA 1. Comparaciones post hoc utilizando la prueba de logrank (p <
0,05 indica diferencia significativa)
EN INF EN ONF
EN —
0,76 0,11 0,06
INF —
0,03 0,02
EN —
0,55
ONF —
RESULTADOS
Los molares restaurados con incrustaciones se fracturaron con
una carga promedio de 844,74 N y un promedio de 118,393 ciclos
(datos IN e INF agrupados). Una muestra en el grupo IN resistió los
180.000 ciclos (supervivencia = 10%) pero ninguna (0%) en el grupo
INF. Para los molares restaurados con incrustaciones, la tasa de
supervivencia para los grupos ON y ONF fue del 30 y el 50 %,
respectivamente (Figura 5A). Se encontraron diferencias
significativas en la supervivencia (p = 0,036). Las pruebas post hoc
detalladas se presentan en la Tabla 1 y revelan tasas de
supervivencia significativamente más altas para los grupos
ON y ONF en comparación con el grupo INF.
Se realizaron comparaciones adicionales agrupando los datos por
diseño de restauración (Figura 5B, incrustaciones versus
incrustaciones) y por presencia/ausencia de refuerzo de fibra (Figura
5C). La supervivencia de las incrustaciones (Figura 6A)
fue significativamente mayor que la de las incrustaciones (datos
agrupados, p = 0,005), pero la presencia de refuerzo de fibra
no fue significativa (datos agrupados, p = 0,91). En consecuencia,
la presencia del parche de fibra de polietileno en forma de U no
aumentó la resistencia a la fractura. Parece que tampoco evitó el
fracaso ante la CEJ. En el grupo INF el 70% de los especímenes se
fracturaron por debajo de la UCE (Figura 6B), en el grupo
IN el 40%, mientras que en el grupo ONF el 40% tuvo falla por
debajo de la UCE y en el grupo ON el 50%.
El porcentaje de fracturas por encima de la UCE (Figura 6C) en los
grupos IN, INF, ON y ONF fue de 56, 30, 29 y 20%, respectivamente
(Tabla 2). En todas las muestras de este estudio, la falla fue
cohesiva en la restauración de resina compuesta y permaneció
cohesiva cuando se abrieron grietas.
se propagó al interior del diente, dejando intacta la unión interfacial.
Sólo se tuvo que cambiar una cúspide de carga debido a la
delaminación.
DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x © 2011 Wiley Periodicals, Inc.
Machine Translated by Google

REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.

A Análisis de supervivencia de la tabla de vida de restauraciones adhesivas CAD/CAM B Análisis de supervivencia de tablas de vida de diferentes diseños de preparación CAD/CAM

100 100

75 75

50 50

urP
aidcandeivliibvarebp)o%
e ds(
eurP
ivarebp)o%
icandeivlib
ad d
s(

25 25

0 0
50 150 300 450 600 750 900 1050 50 150 300 450 600 750 900 1050

Carga (N) Carga (N)

Embutido Incrustación reforzada con fibra superposición Capa reforzada con fibra Embutido superposición

C Análisis de supervivencia de la tabla de vida del refuerzo de fibra.

Restauraciones CAD/CAM

100

75

50
eurP
aidcandeivliibvarebp)o% ds(

25

0
50 150 300 450 600 750 900 1050

Carga (N)

Sin refuerzo de fibra Con refuerzo de fibra

FIGURA 5. Análisis de supervivencia de incrustaciones y onlays de diseño/fabricación asistida por computadora (CAD/CAM) con y
sin refuerzo de fibra.A,Todos los grupos. B, Datos agrupados para inlays (con y sin fibras) y onlays (con y sin fibras).
C, Datos agrupados para restauración sin refuerzo de fibra (inlays y onlays) y con refuerzo de fibras (inlays y onlays).

DISCUSIÓN La ubicación y la gravedad de la grieta son indeterminadas en

el momento de la restauración. El estudio actual sólo
La hipótesis nula de que no hubo influencia de simuló un tipo de defecto (debido a la necesidad de
Diseño de preparación y presencia de refuerzo de fibra. estandarización) y por lo tanto tiene un alcance clínico limitado.

sobre la resistencia a la fatiga de tales restauraciones fue trascendencia. Otra limitación es que el
rechazado en parte porque las superposiciones aumentaron la fatiga El diseño experimental no permitió múltiples especímenes.
resistencia de los molares comprometidos (ancho pruebas y cada muestra fue cargada a lo largo del curso
Defectos mesio­ocluso­distales y fisurados comprometidos. de 1 día. Este método requiere relativamente tiempo.
cúspide) en comparación con las incrustaciones (datos agrupados). porque cada muestra requiere más de 1 día de prueba
Sin embargo, la presencia de refuerzo de fibra no tiempo (tiempo de fabricación no incluido). Sin embargo,

tener un efecto significativo sobre la resistencia a la fatiga de tales normalización de la anatomía de la restauración y la cúspide.
restauraciones. La inclinación se obtuvo mediante el sistema Cerec, en este
caso de que el modo Inlay/Onlay/Partial Crown Master fuera
El diagnóstico clínico del “síndrome del diente fisurado” es usado. La superficie oclusal fue diseñada en base a la
a menudo se debe únicamente a los síntomas del paciente, y la que recuerdan a los contornos del esmalte oclusal. Post­fresado “bien

© 2011 Wiley Periodicals, Inc. DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x Revista de Odontología Estética y Restauradora Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 7
Machine Translated by Google

REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.

A B

FIGURA 6. A, Revestimiento con refuerzo de fibra que sobrevivió (180.000 ciclos en total, sin fallas). B, Fractura no destructiva del inlay en
1.050 N. C, Fallo catastrófico del recubrimiento con refuerzo de fibra a 750 N.

TABLA 2. Distribución de modos de falla (%) según lo observado por El protocolo de carga de fatiga del presente estudio proporciona
microscopia óptica simulación más cercana de las condiciones clínicas que una

Grupo Supervivencia Por encima del CEJ Por debajo del CEJ prueba estática simple de carga hasta falla.26 El diseño de fatiga

EN 10 50 40 se basó en estudios previos.19,26 Según estudios

sobre las fuerzas oclusales máximas en humanos en el molar
INF —
30 70
región, las fuerzas oclusales oscilan entre 597 y
EN 30 20 50 847 N para mujeres y hombres, respectivamente, y puede ser tan
hasta 900 N.13,14 Se puede lograr fácilmente una carga mayor
ONF 50 10 40
cuando los individuos mastican un cuerpo extraño duro
CEJ = unión cemento­esmalte. encontrado accidentalmente en el bolo durante la comida fina
triturar (como un hueso en ensalada, cáscara de almendra en
pastel) o en caso de traumatismo. El estudio actual presenta una
ajuste” del espesor de la restauración, la anatomía y Diseño único para la restauración de molares comprometidos.
La inclinación de la cúspide se logró ajustando con con inlays/onlays CAD/CAM hasta una carga extrema
un instrumento de corte giratorio de diamante. Todos aquellos escenario con la carga de fatiga aplicada a 30 grados a
Los pasos de optimización permitieron cargar las muestras en un la cúspide palatina debilitada, simulando una sola
manera consistente y reproducible. contacto no funcional. En lugar de una esfera de metal y un

8 Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 Revista de Odontología Estética y Restauradora DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x © 2011 Wiley Periodicals, Inc.
Machine Translated by Google
En contacto distribuido sobre un trípode, las probetas fueron
cargadas, en un solo punto, con un cilindro de resina
compuesta. En un estudio observacional, Ratcliff y sus
colegas9 observaron que el esfuerzo cortante generado
durante las interferencias laterotrusivas aumentaba el riesgo de
agrietamiento. La causa de las grietas en los dientes es
compleja y multifactorial.9 La preparación inadecuada, los
materiales de restauración, la edad y las fuerzas oclusales mal
dirigidas sobre la superficie oclusal que generan concentraciones
dañinas de estrés pueden influir en la flexión cuspídea, violar los
límites elásticos de los dientes y predisponer al diente a
agrietarse o fracturarse.9
Como no hubo falla adhesiva y todas las muestras
sobrevivieron la primera mitad de la prueba (rango normal
de fuerzas oclusales), sería prematuro afirmar que la
superposición de cúspides está absolutamente indicada para
la restauración adhesiva de molares con una cúspide
comprometida. Tradicionalmente se recomienda que haya una
superposición de una cúspide socavada en caso de síndrome
de diente fisurado2, para promover el fortalecimiento
extracoronal y proteger contra una mayor propagación de la
fisura. Sin embargo, las restauraciones adhesivas han
demostrado el potencial de “reensamblar” las cúspides
debilitadas mediante refuerzo mediante el uso de técnicas
adhesivas, con o sin superposición de cúspides, como lo
demostraron Opdam y Roeters.3 Los autores trataron 40
dientes fisurados sintomáticos con restauraciones directas de
resina compuesta, y no encontraron influencia de la
superposición de cúspides en la reducción de los síntomas.
Fennis y colegas,19 sin embargo, enfatizaron el efecto
fortalecedor de la superposición de las cúspides, lo cual está de
acuerdo con los resultados del presente estudio (datos
agrupados), aunque no parece haber diferencias en el
desempeño de las restauraciones directas con composite que
reemplazan las cúspides en comparación con indirectas (ya sea
de resina compuesta o cerámica).20 Debido al estrés residual
de contracción de la polimerización, las restauraciones
directas de resina compuesta a menudo están contraindicadas
para preparaciones grandes23–25 y tienden a generar más fallas
adhesivas.20 En estas situaciones, las restauraciones
indirectas de porcelana o polímero pueden ser una mejor
opción porque son más conservadoras que las coronas de
carilla completas. Siempre que se utilizan inlays y onlays
indirectos o semidirectos, se recomienda IDS para optimizar
la fuerza de unión final, desensibilizar y proteger las preparaciones, así como para
© 2011 Wiley Periodicals, Inc. DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x
REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.
presente estudio independientemente del uso de
refuerzo de fibra. El rendimiento de la unión de dentina
optimizada por IDS quedó demostrado por la ausencia de
fallas adhesivas y también puede haber contribuido a la
supervivencia de todas las muestras dentro del rango máximo
de fuerzas oclusales normales (hasta 600 N).
En este estudio, la inclusión de refuerzo de fibra no dio como
resultado un resultado significativamente mejor en
comparación con los grupos sin refuerzo de fibra.
Recientemente, varios estudios de carga hasta la falla ,31–
34,39 han explorado el uso de refuerzo de fibra para
obtener fortalecimiento de dientes debilitados, con resultados
controvertidos sobre su capacidad para reforzar los
dientes. Belli y colegas31–33 utilizaron fibras de polietileno en
forma de U bajo restauraciones directas de composite en
molares endodonciados con preparaciones mesio­ocluso­
distales anchas y observaron un aumento significativo de la
resistencia a la fractura. El mismo enfoque en el
presente estudio (parche de fibra de polietileno en forma de
U) no aumentó la resistencia a la fatiga de los inlays u
onlays, lo que concuerda con los hallazgos de Fennis y colegas34
y Beltrão y colegas.39 El presente estudio es único en que Se
aplicó una carga de fatiga a 30 grados en lugar de la
tradicional prueba de carga estática axial hasta falla.
Las muestras se restauraron mediante inlays/onlays
siguiendo IDS, a diferencia de las restauraciones directas de
resina compuesta utilizadas en los estudios mencionados anteriormente.
Se requiere una impregnación previa de resina para unir las fibras
a la matriz polimérica.37 Según el fabricante de Ribbond, las
fibras deben impregnarse con una resina adhesiva sin
relleno y de baja viscosidad. En su lugar se utilizó Optibond FL
(50 % de relleno en peso), cuya viscosidad podría haber
comprometido la humectación del tejido Ribbond. Sin
embargo, en un estudio piloto, se analizaron algunas muestras
bajo un microscopio electrónico de barrido y se concluyó que
no había diferencias al infundir fibras de polietileno con
Optibond FL relleno o el adhesivo sin relleno del fabricante
(Figura 7).
Desde un punto de vista práctico, es importante considerar la
dificultad de manipulación de las fibras, para su corte y su
colocación. Así lo informó Vallittu37 al intentar incorporar con
precisión fibras de vidrio y polietileno en la base de las prótesis
dentales. Los autores enfatizaron la importancia de
colocar facilitar
con los procedimientos de prueba e inserción.16,26,40,41 Por lo ta
precisión
Revista de Odontología Estética y Restauradora Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 9
Machine Translated by Google
REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.
FIGURA 7. Micrografía con microscopio electrónico de
barrido de fibras de polietileno preimpregnadas con
resina adhesiva Optibond FL (vista en sección, aumento original ¥450).
y orientación de las fibras para obtener el llamado “refuerzo total
de fibras”, que aprovecha mejor las propiedades de
las fibras. Las fibras tejidas de polietileno presentan la
ventaja de un módulo elástico más bajo (en comparación con
las fibras de vidrio electrónico) y la capacidad de adaptarse
mejor a una variedad de formas de defectos. Se
sabe que un sistema de fibras bien diseñado debería influir en
la distribución de tensiones y, dependiendo de su
orientación y alineación, ser eficaz para alterar, detener
y redirigir la propagación de grietas.35,36 Según las
recomendaciones del fabricante y estudios publicados
previamente, 31­33 el parche de fibra se aplicó desde el tercio
oclusal de la pared bucal, a través del piso oclusal, hasta el
tercio oclusal de la pared lingual. Esta forma de U fue
intencionada para colocar las fibras lo más cerca posible del
defecto. Sabiendo que las fibras funcionan mejor en tensión, no
en compresión, podría cuestionarse si sería posible un mejor
posicionamiento. Las mayores tensiones de tracción en
los molares bajo cargas mal dirigidas se encuentran en el
surco central,10,15 por lo tanto, colocar Ribbond más cerca
de la superficie oclusal podría resultar beneficioso para detener
o redirigir las grietas.
Según los estudios, este enfoque no tuvo éxito a menos
que se realice una reducción dental adicional (como en el caso
de un defecto intracoronal) para anclar las fibras dentro de las
cúspides restantes.31–33,39 Además de su dificultad
práctica, la colocación subsuperficial de Ribbond aumenta la
riesgo de exponer las fibras si son necesarios ajustes oclusales
postoperatorios.
10 Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 Revista de Odontología Estética y Restauradora
Otro hallazgo importante en esta investigación fue que la
presencia del parche de fibra de polietileno en forma de U no
influyó en el modo de falla del indirecto.
restauraciones en contraste con los hallazgos de otros estudios
sobre restauraciones directas.31–34 Una limitación del
presente estudio es que el espesor oclusal general de
las restauraciones en los grupos INF y ONF puede haber
sido diferente al de los grupos IN y ON. La uniformidad del
espesor de la restauración habría requerido una preparación
adicional de sustancia dental intacta en el grupo INF y ONF para
crear el espacio para el parche de fibra. Además, la presencia
del refuerzo de fibra podría haber sido “enmascarada” por la
estabilidad de la unión proporcionada por IDS42 (posible
sólo con restauraciones indirectas) porque este último
genera una alta cohesividad del complejo diente­
restauración (testimonio de la ausencia de fallos
adhesivos). Fennis y colegas34 observaron que los dientes se
fracturaban de manera menos catastrófica cuando se aplicaban
fibras bajo restauraciones directas de resina compuesta. Este
efecto beneficioso sobre el modo de falla fue más
consistente con las fibras tejidas (isotrópicas) que con las
fibras unidireccionales (ortotrópicas). El diseño y la
aplicación del sistema de fibras utilizado en este estudio
pueden requerir una mayor optimización, ya que se
sugiere que los mejores resultados se pueden obtener cuando
las cúspides se superponen32 o se traspasan39 por las
fibras. También se necesitan más estudios para explorar
diferentes posibilidades como el uso de fibras unidireccionales,
otros métodos de posicionamiento o el uso de fibras
pretensadas.38 Independientemente del sistema utilizado, se
debe prestar especial atención a la máxima preservación
de la estructura dental, que es la primera objetivo de la odontología
restauradora moderna.
CONCLUSIONES
Dentro de las limitaciones de este estudio de fatiga in vitro, se
concluye que las incrustaciones de resina compuesta CAD/
CAM (con o sin refuerzo de fibra) aumentaron la resistencia
a la fatiga de los molares comprometidos restaurados.
Las incrustaciones de resina compuesta CAD/CAM sin fibras
tuvieron el modo de fallo más favorable (restaurable). Como
no hubo fallas adhesivas y todas las muestras sobrevivieron
la primera mitad de la prueba (rango normal de fuerzas
oclusales), sería prematuro afirmar que la superposición de las cúspides
DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x © 2011 Wiley Periodicals, Inc.
Machine Translated by Google
está absolutamente indicado para la restauración
adhesiva de molares con cúspide comprometida. No es necesaria
la inclusión de refuerzo de fibra. La eficacia de la estrategia
de unión (IDS, técnica indirecta) quedó demostrada
en parte por la ausencia de fallos adhesivos.
DIVULGACIÓN Y AGRADECIMIENTOS
Los autores no tienen ninguna afiliación personal o financiera
con ninguna empresa que produzca los productos utilizados en
este estudio que pueda considerarse un conflicto de intereses
al realizar esta investigación.
Los autores desean expresar su agradecimiento a la Fundación
CAPES Brasil (becas PDEE 1897­09­8 y PDEE 1909­09­6).
Los autores también desean expresar su agradecimiento
a Ribbond Inc., Seattle, Washington, por la donación de
fibras tejidas Ribbond­THM utilizadas en este
estudio, 3M ESPE, St. Paul, MN para bloques MZ100 y resina
compuesta Z100, Kerr, Orange, CA para Optibond FL, Patterson,
El Segundo, CA para CEREC, Ultradent, South Jordan, Utah
para Ultraetch, Porcelain Etch y Silane y Heraeus Kulzer,
Armonk, Nueva York para Palapress.
Un agradecimiento especial al Dr. Reyes Enciso (Profesor
asistente, Ciencias y Terapéutica Craneofaciales, Facultad
de Odontología, Universidad del Sur de California) y
Christianne Joy Lane (Directora, Centro de Investigación de
Consultoría Estadística, Facultad de Medicina Keck, Universidad
del Sur de California) por su orientación con el análisis estadístico
presentado en este estudio y al Dr. Robert Simon (Instructor
clínico, Atención primaria de salud bucal, Facultad de
Odontología Herman Ostrow, Universidad del Sur de
California) por su ayuda en la revisión del borrador en inglés.
REFERENCIAS
1. Cameron CE. El síndrome del diente agrietado: hallazgos adicionales. J Am
Dent Assoc 1976;93:971–5.
2. Geurtsen W, García­Godoy F. Restauraciones adheridas para la prevención
y tratamiento del síndrome del diente fisurado. Am J Dent
1999;12:266–70.
3. Opdam Nueva Jersey, Roeters JM. La eficacia de las restauraciones de
composite adheridas en el tratamiento de dolores,
© 2011 Wiley Periodicals, Inc. DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x
REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.
dientes fisurados: evaluación clínica de seis meses. Opera Dent
2003;28:327–33.
4. Morin DL, Douglas WH, Cross M, De Long R.
Análisis de estrés biofísico de dientes restaurados: medición de tensión
experimental. Dent Mater 1988;4:41–8.
5. Douglas WH. Consideraciones para el modelado. Dent Mater 1996;12:203–7.
6. Morin D, DeLong R, Douglas WH. Refuerzo de cúspides mediante la técnica
de grabado ácido. J Dent Res 1984;63:1075–8.
7. Assif D, Marshak BL, Pilo R. Flexura cuspal asociada con restauraciones de
amalgama. J Prosthet Dent 1990;63:258–62.
8. Cavel WT, Kelsey WP, Blankenau RJ. Un estudio in vivo de la fractura de cúspide.
J Prosthet Dent 1985;53:38–42.
9. Ratcliff S, Becker IM, Quinn L. Tipo e incidencia de grietas en los dientes
posteriores. J Prosthet Dent 2001;86: 168–72.
10. Magne P, Belser UC. Racionalización de la forma y distribución de tensiones
relacionadas en dientes posteriores: un estudio de elementos finitos
utilizando análisis de contacto no lineal. Int J Periodontics Restorative Dent
2002;22:425–33.
11. Magne P, Belser UC. Inlays/onlays de porcelana versus composite:
efectos de las cargas mecánicas sobre la distribución de la tensión,
la adhesión y la flexión de la corona. Int J Periodontics
Restorative Dent 2003;23:543–55.
12. Fennis WM, Kuijs RH, Barink M, et al. puede interno
¿Las tensiones explican la resistencia a la fractura de las restauraciones de
composite que reemplazan las cúspides? Eur J Oral Sci 2005;113:443–8.
13. Waltimo A, Könönen M. Un nuevo registrador de fuerza de mordida y valores
isométricos máximos de fuerza de mordida para adultos jóvenes sanos.
Scand J Dent Res 1993;101:171–5.
14. Waltimo A, Könönen M. Fuerza máxima de mordida y su
asociación con signos y síntomas de trastornos
craneomandibulares en jóvenes finlandeses no pacientes.
Acta Odontol Scand 1995;53:254–8.
15. Magne P, Perakis N, Belser UC, Krejci I. Estrés
Distribución de prótesis parciales fijas adhesivas ancladas con
incrustaciones: un análisis de elementos finitos de la influencia de los
materiales de restauración y el diseño de preparación del pilar.
J Prosthet Dent 2002;87:516–27.
16. Magne P. Resinas compuestas y porcelana adherida: ¿la era postamalgama?
CDA J 2006;34:135–47.
17. Homewood CL. Síndrome del diente agrietado: incidencia, hallazgos clínicos y
tratamiento. Aust Dent J 1998;43:217–22.
18. Burke FJ. Fractura dentaria in vivo e in vitro. J Dent
1992;20:131–9.
19. Fennis WM, Kuijs RH, Kreulen CM, et al. Resistencia a la fatiga de
los dientes restaurados con restauraciones compuestas de
cobertura de cúspides. Int J Prosthodont 2004;17: 313–7.
20. Kuijs RH, Fennis WM, Kreulen CM, et al. Una comparación de la resistencia a
la fatiga de tres materiales para restauraciones adhesivas de reemplazo de
cúspides. J Dent 2006;34:19–25.
Revista de Odontología Estética y Restauradora Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 11
Machine Translated by Google
REFUERZO DE CUSP COMPROMETIDO Magne et al.
21. Edelhoff D, Sorensen JA. Eliminación de estructura dental
asociados con diversos diseños de preparación para dientes anteriores. J
Prosthet Dent 2002;87:503–9.
22. Edelhoff D, Sorensen JA. Eliminación de estructura dental
asociados con diversos diseños de preparación para dientes posteriores. Int J
Periodontics Restorative Dent 2002;22:241–9.
23. Dietschi D, Magne P, Holz J. Tendencias recientes en restauraciones
estéticas para dientes posteriores. Quintaesencia Int 1994;25:659–
77.
24. Magne P, Dietschi D, Holz J. Restauraciones estéticas para
Dientes posteriores: consideraciones prácticas y clínicas. Int J Periodontics
Restorative Dent 1996;16:104–19.
25. Dietschi D, Spreafico R. Restauraciones adhesivas sin metal: conceptos actuales
para el tratamiento estético de los dientes posteriores. Berlín: Quintaesencia;
1997, págs. 121–83.
26. Magne P, Knezevic A. Resistencia a la fatiga simulada de restauraciones
de resina compuesta versus restauraciones de recubrimiento CAD/CAM
de porcelana en molares tratados endodónticamente.
Quintaesencia Int 2009;40:125–33.
27. Krifka S, Anthofer T, Fritzsch M, et al. Incrustaciones de cerámica
y coronas parciales de cerámica: influencia del espesor restante de la pared
de la cúspide sobre la integridad marginal y la formación de grietas en el esmalte
in vitro. Opera Dent 2009;34:32–42.
28. Manhart J, Chen HY, Neuerer P, et al. Evaluación clínica de tres años de
incrustaciones de composite y cerámica. Am J Dent 2001;14:95–9.
29. Leinfelder KF. Resinas compuestas posteriores indirectas.
Compend Contin Educ Dent 2005;26:495–503.
30. Fasbinder DJ, Dennison JB, Heys DR, Lampe K. The
Rendimiento clínico de incrustaciones de composite generadas por CAD/CAM.
J Am Dent Assoc 2005;136:1714–23.
31. Belli S, Cobankara FK, Eraslan O, et al. El efecto de la inserción de fibras sobre
la resistencia a la fractura de molares tratados endodónticamente con cavidad
MOD y cúspides linguales fracturadas reinsertadas. J Biomed Mater Res B Appl
Biomater 2006;79:35–41.
32. Belli S, Erdemir A, Yildirim C. Efecto de refuerzo de
Fibra de polietileno en dientes obturados con raíz: comparación de dos
técnicas de restauración. Int Endod J 2006;39:136–42.
33. Belli S, Erdemir A, Ozcopur M, Eskitascioglu G. El
efecto de la inserción de fibras sobre la resistencia a la fractura del relleno radicular
molares con preparaciones MOD restauradas con composite. Int
Endod J 2005;38:73–80.
12 Vol •• • No •• • ••–•• • 2011 Revista de Odontología Estética y Restauradora
34. Fennis WM, Tezvergil A, Kuijs RH, et al. Resistencia a la fractura in vitro de
restauraciones compuestas de reemplazo de cúspides reforzadas con fibra.
Dent Mater 2005;21:565–72.
35. Karbhari VM, Strassler H. Efecto de la arquitectura de fibra en
características de flexión y fractura de fibras reforzadas.
compuestos dentales. Dent Mater 2007;23:960–8.
36. Karbhari VM, Wang Q. Influencia del denier trenzado triaxial en compuestos
dentales reforzados con fibra a base de cinta. Dent Mater 2007;23:969–76.
37. Vallittu PK. Propiedades de flexión de polímeros de resina acrílica reforzados
con fibras de vidrio unidireccionales y tejidas.
J Prosthet Dent 1999;81:318–26.
38. Schlichting LH, de Andrada MA, Vieira LC, et al.
Resina compuesta reforzada con fibras de vidrio pretensadas. Influencia
del pretensado sobre las propiedades a flexión.
Dent Mater 2010;26:118–25.
39. Beltrão MC, Spohr AM, Oshima HM, et al. Resistencia a la fractura de
molares tratados endodónticamente traspasados horizontalmente por
un poste de fibra de vidrio. Am J Dent 2009;22:9–13.
40. Paul SJ, Schärer P. La técnica de enlace dual: una
Método modificado para mejorar los procedimientos de cementación adhesiva.
Int J Periodontics Restorative Dent 1997;17:536–45.
41. Magne P, Kim TH, Cascione D, Donovan TE. El sellado inmediato de la dentina
mejora la fuerza de unión de las restauraciones indirectas. J Prosthet
Dent 2005;94:511–9.
42. Magne P, So WS, Cascione D. El sellado inmediato de la dentina favorece el
retraso en la colocación de la restauración. J Prosthet Dent 2007;98:166–74.
43. Kelly J.R. Enfoque clínicamente relevante para las pruebas de falla de
restauraciones totalmente cerámicas. J Prosthet Dent 1999;81:652–61.
Solicitudes de reimpresión: Pascal Magne, DMD, PhD, University of Southern
California, Los Angeles, Oral Health Center, 3151 S. Hoover Street, Los
Angeles, CA 90089­7792, USA; Tel.: 213­740­4239; correo
electrónico:
magne@usc.edu Este artículo va acompañado de un comentario, Restauración
adhesiva de diseño asistido por computadora/fabricación asistida por computadora
de molares con una cúspide comprometida: efecto del sellado inmediato de dentina
reforzado con fibra y la superposición de cúspides sobre la resistencia a la
fatiga, André V. Ritter, DDS, MS DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00434.x
DOI 10.1111/j.1708­8240.2011.00433.x © 2011 Wiley Periodicals, Inc.