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Crisorio, Ricardo

Los fundamentos pedagógicos y


didácticos de educación física escolar
¿pilares de una unidad o escombros de
una fragmentación?

Pensar a prática

2008, vol. 11, nro. 1, p. 27-35

Crisorio, R. (2008). Los fundamentos pedagógicos y didácticos de educación física escolar


¿pilares de una unidad o escombros de una fragmentación?. Pensar a prática, 11 (1), 27-35.
En Memoria Académica. Disponible en:
https://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.14444/pr.14444.pdf

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Atribución 3.0 Internacional
http://creativecommons.org/licenses/by/3.0/
LOS FUNDAMENTOS PEDAGÓGICOS Y DIDÁCTICOS DE
EDUCACIÓN FÍSICA ESCOLAR ¿PILARES DE UNA UNIDAD
O ESCOMBROS DE UNA FRAGMENTACIÓN?

Ricardo Crisorio
Centro Interdisciplinario de Metodología de las Ciencias Sociales, Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación,
Universidad Nacional de La Plata, Argentina.

Resumen
Con base en una entrevista sobre las relaciones entre la Pedagogía y Didáctica, realizada con el Dr. Alfredo Furlán,
pedagogo argentino exiliado y radicado en México desde 1974, el presente trabajo discute la idea de que estas asig-
naturas constituyan o deban constituir algún tipo de fundamento para Educación Física como disciplina educativa.
Propone, un debate horizontal entre especialistas y discursos que articulan teorías y prácticas mucho más situadas,
más locales, menos universales y menos abstractas que lo que se tiende a suponer cuando se habla de la teoría y la
práctica como si fueran categorías totales. Enfatiza, sin olvidar el lugar y las tareas concretas, curricularmente exis-
tentes, que Educación Física tiene en la escuela, la importancia del proyecto completo, del conjunto del contenidos
que la escuela selecciona para transmitir. Plantea, como problema principal de la construcción de un curriculum, la
selección de los temas y su distribución: discutir qué contenidos (conocimientos, habilidades, actitudes) es necesario
garantizar, antes que definir las competencias que hoy por hoy, concentran la atención de los tecnocratas, establecer
los límites y marcas para que una disciplina funcione con identidad propia o las divisiones “ordenadoras” a que esos
mismos tecnocratas son tan acostumbrados.
Palabras-clave: Pedagogía – Didáctica – tradiciones – disciplinas – curriculum – contenidos – discursos.

D iscutir el carácter de fundamento de


la Pedagogía y la Didáctica en rela-
ción con la Educación Física implica entrar
cia de sus respuestas. No obstante, aprovecho
la oportunidad para solicitar las debidas dis-
culpas, tanto a los potenciales lectores como
de lleno en la disputa entre las disciplinas y al propio Alfredo Furlán.
las llamadas, en general, Ciencias de la Edu- 1. Las palabras Pedagogía y Didáctica se
cación, sobre sus respectivos alcances e in- entienden de manera diferente en diferentes
cumbencias en la definición de lo que deben tradiciones académicas. La tradición alemana
ser las prácticas educativas. Pero antes debe es la que más ha insistido en distinguir en-
explicarse qué se entiende por Pedagogía y tre ambos términos. En ella, la Pedagogía y
qué por Didáctica. Para eso y para el debate la Didáctica deben dar cuenta de los aspec-
posterior recurriré, también como homenaje, tos conceptuales y prácticos de la educación,
a una entrevista que hicimos con el profesor respectivamente. Así, la Pedagogía estudia
Marcelo Giles, en la primavera de 1998, al Dr. el fenómeno educativo con la intención de
Alfredo Furlán, pedagogo argentino exiliado y orientar su desarrollo práctico sobre todo a
radicado en México desde hace muchos años. un nivel normativo; reflexiona sobre los pro-
Por muchas y distintas razones esa entrevista blemas educativos a partir de compromisos
ha permanecido inédita, reservando la vigen- ideológicos y filosóficos o, lo que es más típi-

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co, de compromisos o enfoques propiamente práctica y en torno del cual él racionalice su
educativos; por ejemplo, las clásicas doctrinas actividad de enseñanza.
que han centrado la enseñanza en el maestro En la tradición inglesa, en cambio, la pa-
o en el niño. La Didáctica, en cambio, alude labra pedagogía hace alusión, directamente,
a la figura del maestro. Etimológicamente se a los métodos de trabajo de los maestros, a la
vincula con la palabra griega didaskein (didas- “pedagogía” de un maestro particular, a tipos
kein), que significaba “enseñar”, y con didaska- de “pedagogía” que funcionan en la práctica, a
louj (didaskalos) o didaskhj (didaskês), que era configuraciones metodológicas, estilos, formas
quién enseñaba. Tiene una gama amplia de básicas, etc. En términos generales, ellos no
derivaciones y de posibilidades de uso pero utilizan la noción de Didáctica. A diferencia de
prácticamente en todos los casos refiere a la cómo la entienden los alemanes, en el medio
presencia de una figura individual, llamado anglosajón la pedagogía es una idea de orden
generalmente “maestro”, que enseña funda- práctico. Los anglosajones plantean de otro
mentalmente contenidos disciplinarios espe- modo los vínculos entre saber y valores y entre
cíficos. No refiere a quien realiza la formación saber y actuar, entre acción y discurso. Ellos son
en valores o en hábitos de cuidado personal, tradicionalmente más pragmáticos, no conci-
porque en Grecia esa tarea la cumplían los ben la necesidad de un discurso teórico que no
paidagwgoj (pedagogos), que llevaban a los sea al mismo tiempo una apuesta práctica.
niños a la casa del “didaskalos” o “didaskês”, La tradición francesa, finalmente, formu-
del maestro, -en griego, gogia (gogía) signi- lada particularmente por Durkheim (1858-
fica “conducir”, no en un sentido metafórico 1917), diferenciaba en sus comienzos a la
sino en el de llevar, trasladar- y cuidaban de la Pedagogía de las Ciencias de la Educación,
educación de los niños y, fundamentalmente, entendiendo que ella se validaba por su capa-
de hacer que los jóvenes aprendieran a cui- cidad de insertarse en la práctica para orien-
darse a sí mismos. Los didaskalos, maestros, tarla y no por su consistencia teórica abstrac-
entre los que estaban los paidotri¿bhj (paido- ta. Suponía que la Pedagogía debía dar cuenta
tribês), maestros de gimnasia, esperaban a los del conjunto de los discursos que hacían refe-
niños en el Gimnasio y les enseñaban música, rencia a la educación y articularlos en torno a
gimnasia, retórica, sofística, bajo la dirección un proyecto educativo, a la vez que servir de
del gimnasiarca (gimnasiarca)1. El discurso ex- correa de transmisión entre los maestros y su
perto actual en el campo de las Ciencias de la experiencia, la institución educativa y el res-
Educación, interpretando estos significados a to de la sociedad, que incluía a los científicos,
su modo, asigna a la Pedagogía el estudio del a los políticos, a los filósofos. El positivismo
fenómeno educativo desde un punto de vista que dominaba entonces el medio académico
general y la elaboración de un discurso tam- francés entendía que la ciencia entrañaba una
bién general sobre los problemas de la edu- posición puramente contemplativa y explica-
cación, y reserva a la Didáctica el estudio del tiva y que, en cambio, toda intención de inter-
trabajo del maestro, en tanto agente principal vención, o de compromiso con una realidad,
de la actividad instruccional, para construir programa, finalidad u objetivo, era cuestión
un discurso que intervenga en el seno de la de texhn (arte, técnica, “teoría práctica”). Para
Durkheim, las Ciencias de la Educación eran
1
En Las Leyes, VII, 804c, Platón recomienda cons- la Psicología y la Biología, en tanto campos
truir gimnasios públicos que fueran a la vez escuelas científicos académicamente reconocidos que
en el centro de la ciudad, y en torno a ella explanadas podían limitarse a explicar los fenómenos
para el ejercicio, dispuestas para el lanzamiento de educativos sin comprometerse con ningún
dardos y otras armas arrojadizas, y para la instrucci-
ón y adiestramiento de los jóvenes. proyecto que implicara intervención, y la for-

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ma de no contaminarlas era dejar el lugar de vidado la historia y las importantes diferen-
la aplicación, del tránsito entre el discurso y cias que existen entre las tradiciones2.
la acción, a la Pedagogía y a los pedagogos, a 2. Estimo que estas distinciones son im-
quiénes, por cierto, aunque no les reconocía prescindibles si se quiere hacer una crítica
un carácter científico, les asignaba un valor precisa de la idea de que una disciplina edu-
histórico de primer orden. Esta repartición de cativa, por caso la Educación Física, pueda
tareas reflejaba la rigidez teórica del positivis- o deba “fundamentarse” en la Pedagogía y
mo francés y sus duras jerarquías entre insti- la Didáctica, en las llamadas Ciencias de la
tuciones y disciplinas. Con el paso del tiempo Educación, en una Teoría del Curriculum o
y el desarrollo de las luchas por la distinción en una mezcla de todas ellas. En la misma
en el mundo intelectual, en las instituciones entrevista, el propio Furlán propone asumir,
académicas se intentó dejar en las universida- permaneciendo “modestamente latinoame-
des a las Ciencias de la Educación, consagra- ricano, patrón actitudinal que habría que
das principalmente a la investigación, y correr definir” las virtudes de las tres posiciones.
el discurso pedagógico hacia las instituciones Plantea que se puede y se debe elaborar un
que tenían la función de lidiar con la práctica discurso pedagógico sobre educación, en el
(supervisándola o evaluándola), estableciendo sentido en que lo entienden los alemanes.
ahí un espacio de funcionamiento para la Pe- Un discurso que procure cierta sistematicidad
dagogía. De este modo, en la tradición fran- interna, cierta coherencia teórica y axiológi-
cesa, la pedagogía constituía un discurso que ca en aras de una consistencia práctica, que
aspiraba a un rigor teórico y lógico, a la luci- pretenda cierta unidad y efectividad respecto
dez pero no al estatuto de ciencia, que tenía de las necesidades y problemas de los países
una pretensión fundamentalmente práctica y latinoamericanos; es decir, que se puede y se
no puramente explicativa. debe aspirar, como proyecto intelectual de los
En nuestro medio, en el medio de habla que trabajan en educación en las instituciones
hispana, que es un medio receptor de influen- académicas, a construir una Pedagogía, pero
cias diversas, las palabras Pedagogía y Di- con la muy “francesa” condición de no pre-
dáctica se usan de maneras muy variadas. A tender ejercer por decreto monopolio alguno
nivel no académico, Pedagogía suele aludir a burocráticamente garantizado. Dicho de otro
las formas de enseñar, como entre los anglo- modo, con la condición de que sus planteos
sajones, mientras que Didáctica se usa como demuestren su potencial explicativo en el te-
calificativo de una enseñanza clara y efectiva; rreno de la discusión conceptual y su potencia
por ejemplo: “Las clases de tal son muy di- orientadora demuestre su “terrenalidad” en las
dácticas”. Nuestro medio experto, académico, prácticas. Enfatiza, además, que la posición
ha producido diversas amalgamas entre las francesa posibilita y, aún, obliga, a escuchar
tradiciones dominantes. En Argentina, por con atención todo lo que se diga de las prác-
ejemplo, las carreras universitarias se llaman ticas llamadas educativas desde los distintos
de Ciencias de la Educación y las de Peda- campos científicos. “Es muy enriquecedor”
gogía se ofrecen en instituciones no univer- – dice – “apreciar los modos de trabajo y los
sitarias, al modo francés. Pero los curricula
incluyen materias como Pedagogía y Didác- 2
A este respecto, Furlán recomienda un artículo de
tica, reflejando el peso de la influencia alema- Jûrgen Schriewer, en el que según él se exponen y
na, junto con asignaturas sobre Curriculum o explican las diferencias entre la Pedagogía alemana
Tecnología Educativa, que muestran el efecto y las Ciencias de la Educación francesas, y también
de la orientación anglosajona. Sin embargo, el dossier del n. 20 de Propuestas Educativas de la
FLACSO, en el que encuentra desarrollos muy inte-
esta hibridación pasa desapercibida: se ha ol- resantes sobre esta problemática.

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estilos analíticos de las disciplinas emparenta- tica que a veces desarrollen un tipo de cons-
das con la nuestra, observar lo que producen trucción conceptual que puede ser retraducida
cuando, desde sus respectivas apuestas, se to- en términos de la relación entre teoría y prác-
pan con problemas que también pueden ser tica: es el caso de Lawrence Stenhouse, para
los nuestros”. Advierte sobre el riesgo de leer quien el problema del currículum es el pro-
pedagógicamente lo que dicen los sociólogos, blema de la relación entre teoría y práctica o,
los psicólogos, los antropólogos, sin procurar más específicamente, entre proyecto y acción,
primero entender el significado propio de los porque el “hiato” entre teoría y práctica es in-
discursos, el sentido específico de los textos salvable. Esto no refleja las relaciones que se
en sus disciplinas de origen. Propone, enton- dan en los procesos prácticos reales. Los fran-
ces, para no reducir los alcances primarios de ceses dan algunas claves que permiten escapar
los planteamientos de las ciencias humanas y de la trampa que implica encerrar el problema
sociales, un trabajo en dos tiempos, y previene en la relación teoría y práctica. Precisamente,
contra la interpretación latinoamericana de la la autonomía relativa que tienen las distintas
postura alemana, que invita a posicionarse ciencias sociales y humanas francesas les ha
desde el comienzo en el terreno pedagógico, permitido valorar las particularidades de cada
induciendo a no leer, a no escuchar, o a leer uno de los campos del saber y les ha permi-
y escuchar a medias, los diferentes discursos. tido conceptualizar también los procesos de
Ese apuro lleva, en general, a falsear o a elimi- intervención como procesos particulares en
nar, concientemente o no, lo que “viene mal” los cuales funcionan otros planos aparte de la
o lo que “no cuadra”. Llama, entonces, a los intención de reunir teoría y práctica. “El pro-
que trabajan en pedagogía, a clarificarse a sí blema de la relación teoría y práctica no existe
mismos que su apuesta por la educación los en términos puros” [las cursivas son mías]3. Lo
inhibe para sostener una posición “antieduca- que existe de hecho es la relación entre los
ción” (es inconcebible una “pedagogía antie- discursos teóricos y los discursos prácticos, o
ducativa”), que son cautivos de la positividad entre los discursos que elaboran los produc-
de lo educativo, que educación es una noción tores de los discursos teóricos y los discursos
axiológicamente cargada que no tienen la li- que elaboran los productores de los discursos
bertad de negar o de sustituir por otros objetos prácticos. A partir de esta clave surgió la hi-
parecidos, como el aprendizaje, por ejemplo pótesis de que en nuestro campo profesional
(como lo hacen algunos psicólogos y tecnólo- operan cuatro pedagogías, o cuatro tipos de
gos). Pero los insta, también, a ser capaces de discurso pedagógico. Son muy diferentes las
escuchar las críticas u objeciones a las teorías pedagogías que elaboran los actores de la acti-
y a las prácticas que definen como educati- vidad educativa, los responsables de la admi-
vas, por duras que sean. Desde una apuesta nistración, los políticos y los académicos4. Es
libertaria como la de Foucault, por ejemplo, decir, los discursos no son discursos teóricos
la educación siempre “huele a sujeción” y des- o prácticos. Cada discurso articula determi-
de una opción por los explotados, como la de nadas formas de relación entre prácticas di-
Bourdieu, la escuela siempre exhibe una di- versas, lugares institucionales, niveles de au-
mensión reproductora de las diferencias. Hay, toridad repartidos asimétricamente; y cuando
en el campo educativo, la necesidad imperiosa
de saber escuchar ese tipo de cosas y de poder
pensarlas sin corazas y mecanismos autode-
3
Cfr. Crisorio (2007).
fensivos a priori. 4
Entre los años 1998 y 2000, bajo la dirección del Dr.
De la tradición anglosajona, Furlán elogia Furlán, el GEEC desarrolló un proyecto de inves-
tigación, llamado “Educación Física y pedagogías:
la simplicidad de sus planteamientos pero cri- prácticas y discursos”, con base en esta hipótesis.

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decimos teoría y práctica empobrecemos la penetrarse de los problemas epistemológicos,
diversidad de discursos que compiten en el cognoscitivos, prácticos, etc. de cada una de
campo. esas carreras para poder establecer una comu-
3. En cuanto a las relaciones entre la Di- nicación pertinente y brindar auténticamente
dáctica General y las disciplinas educativas, una ayuda. Esto hace inevitable que se con-
en nuestro caso la Educación Física, Furlán fronten con las estructuras conceptuales y con
plantea que cuando son capturadas por la los contenidos curriculares de cada uno de los
lucha corporativa pierden el carácter de pro- distintos campos. Por otro lado, cuando se
blemas racionales, dirimibles a través del in- trata de discutir el currículum de una escuela
tercambio de argumentos. No obstante, aún secundaria, por ejemplo, los especialistas no
si no son capturados en esa lucha, los especia- deberían olvidar tan fácilmente como suelen
listas de los campos disciplinarios suelen no hacerlo que lo más importante es la construc-
encontrar el sentido de un “discurso general” ción del proyecto completo, que la formación
sobre la enseñanza: suponen que si se cuenta no pasa sólo por sus materias sino por la ex-
con una Pedagogía o una Teoría de la Educa- periencia de alternar entre diversos discursos
ción que estudia integralmente el fenómeno disciplinarios cada uno con sus objetos, mé-
educativo no hace falta una Didáctica Gene- todos y léxicos y, además, por la alternancia
ral, que es suficiente con la problematización tiempo de trabajo-tiempo de descanso y por
específica que se elabora desde cada ámbito, muchos otros aspectos de la vida escolar.
que los objetos posibles deben abordarse des- En la construcción de un curriculum
de las “didácticas especiales” de las materias para la formación de maestros o profesores
que integran el currículum escolar; por su el problema principal es la selección de los
parte, muchos pedagogos piensan, como Co- temas y su distribución. Es más importante
menio, que la Didáctica es el arte de enseñar discutir qué contenidos son necesarios que
todo a todos, que hay patrones constantes en establecer límites formales o marcas especia-
todas las acciones de enseñanza, que hay me- les para contar con disciplinas que funcionen
todologías genéricas aplicables a contenidos con identidades propias. Por ejemplo, se hace
de índole muy diversa, etc. Se sienten com- necesaria una comprensión de la problemáti-
prometidos con el trabajo integral de la es- ca educativa contemporánea en relación con
cuela y sienten que no ocurre lo mismo con los cambios en los distintos frentes sociales,
los profesores adscriptos a las diversas ma- económicos, etc., así como una visión de esa
terias, por lo que imaginan que sus aportes misma problemática desde una perspectiva
cuentan con mayor legitimidad que los que histórica, pero no hace falta llamarla Histo-
se emiten desde los enclaves disciplinarios. Es ria de la Educación. También es necesario
preciso encontrar pistas para superar esta dis- ver qué representa la escuela para los jóve-
puta entre pedagogos y especialistas, que se nes y los niños de hoy en relación con las
recrea permanentemente en los profesorados otras ofertas culturales de que disponen, una
y en los equipos técnicos ministeriales, y que reflexión sobre las distintas culturas con las
impide el dialogo. Por un lado, los pedago- que tienen contacto, una consideración de
gos que intervienen en cambios curriculares las culturas de la infancia y de la adolescen-
y programas de formación docente en distin- cia, una interpretación de los modos de vida,
tos campos disciplinarios deberían reconocer los usos y costumbres de los que van a ser
que los especialistas son los propietarios de alumnos de los formadores. Igualmente, es
sus carreras y que el pedagogo concurre para preciso incluir un espacio curricular donde
apoyarlos, es decir, para trabajar en función de se analice la escuela como ámbito de trabajo
ellos. Deben hacer esfuerzos serios para com- y como ámbito de formación y, por supues-

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to, la problemática del curriculum. Si excluir hay disciplinas “fundamentadoras”, por caso
una Didáctica General implica excluir la la Pedagogía y la Didáctica, o las Ciencias de
cuestión del currículum, se pierde la visión la Educación, y disciplinas “fundamentadas”,
del conjunto del contenido que la escuela se- por caso la Educación Física. Surge clara-
lecciona para transmitir y eso sería un error. mente de las descripciones y posiciones de
Habitualmente este problema no está dentro Furlán que se trata, en realidad, de disciplinas
de las didácticas especiales ni dentro de las que, más allá de improntas totalizadoras li-
teorías pedagógicas y puede que para ciertos gadas a su pertenencia a la tradición de pen-
enfoques tampoco esté dentro de la Didácti- samiento occidental, procuran dar cuenta de
ca General. Por eso, más que un problema de distintos problemas o aspectos del fenómeno
nombres de materias o espacios curriculares, de la educación, de modo siempre parcial y
se trata de discutir qué contenidos se debe- diferente en cada una de las distintas tradi-
rían garantizar. Indudablemente, es necesa- ciones de pensamiento educativo. Así, si en la
ria una reflexión general sobre el problema tradición alemana las disciplinas Pedagogía y
del maestro, del alumno, del ambiente, de los Didáctica se distinguen e implican reflexiones
medios tecnológicos y los distintos campos distintas, en la anglosajona se confunden, o
de la cultura; todos estos pueden ser temas una ocupa el lugar de la otra y ésta desapare-
de reflexión de una Didáctica General, pero ce, y en la tradición francesa ambas son, a su
también pueden serlo de las Didácticas Es- vez, “fundamentadas” por las Ciencias de la
peciales: lo que importa es que estén. En un Educación, que en principio fueron la Biolo-
plano conceptual, a partir de una problema- gía y la Psicología, y luego también otras, no
tización epistemológica, cuando se trata de menos parciales en mi opinión. En cualquier
elaborar un curriculum para formar profeso- caso, de ninguna de las tres tradiciones debe-
res de Educación Física o cualquier otro pro- ría deducirse que los discursos más generales
fesional, dado que en los tiempos que corren sobre el fenómeno de la educación constitu-
los tecnócratas están más inclinados a defi- yan los cimientos para las problematizaciones
nir las competencias5 que sustituyen a lo que particulares.
antaño llamábamos “perfiles”, que a centrar Un discurso pedagógico como el que
su atención en los contenidos, no podemos sostiene la tradición alemana, entonces, tie-
limitarnos a responder con deconstrucciones ne sentido precisamente en la medida en que
de los saberes que circulan en el campo: hay no intente convertirse en un “fundamento”
que definir los conocimientos, habilidades, incuestionable, categórico, concluyente, defi-
actitudes cuyo aprendizaje habrá que garan- nitivo. Y la autonomía relativa de las ciencias
tizar; en todo caso, luego se pueden elegir sociales y humanas francesas permite valorar
sabiamente los nombres de los conjuntos a las particularidades de los distintos campos
transmitir. Y tal vez sea útil adoptar alguna del saber y conceptualizar los procesos de in-
de las tradiciones para clarificar el marco de tervención como procesos particulares justa-
referencia y estabilizar un sistema de nomi- mente en tanto las “Ciencias de la Educación”
naciones, en lugar de seguir hibridando cul- no pretendan reproducir el esquema tradicio-
turas pedagógicas para estar a tono con la nal de la ciencia moderna que la escinde en
globalización. “pura” y “aplicada” (epistéme y technê), con-
4. De estas consideraciones, que en su ma- sintiendo graciosamente que la Pedagogía, la
yoría comparto, quiero destacar aquéllas que Didáctica o las disciplinas educativas particu-
nos sirven para deshacernos de la idea de que lares aspiren a ser, en términos aristotélicos,
epistémes poiéticas pero nunca teoréticas. Fi-
5
Cfr. Crisorio (2006). nalmente, el valor teórico y práctico del prag-

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matismo anglosajón será tal mientras no re- En definitiva, a partir de la problema-
duzca conceptualmente la problemática de las tización epistemológica, elaborar hoy un
prácticas educativas a la relación entre teoría y curriculum para formar profesores de Edu-
práctica, o entre proyecto y acción, es decir, si cación Física, o de cualquier otra materia,
asume que el problema de la relación teoría- requiere indudablemente una reflexión ge-
práctica no puede concebirse en términos de neral sobre el problema de la educación,
totalización, que las relaciones teoría-práctica sobre cómo conservar lo mejor del pasado y
son mucho más parciales y fragmentarias, que mejorar el futuro simultáneamente, o cómo
las teorías son siempre locales, relativas a un hacer el equilibrio que supone la transmisión
determinado campo, que en nuestro caso po- crítica de una cultura para “formar” mejores
dríamos llamar “educación corporal”, que se hombres; hace necesaria una comprensión
trata de “un sistema de relevos en un conjun- de la problemática educativa contemporánea
to, en una multiplicidad de piezas y de peda- en relación con los cambios en los distintos
zos a la vez teóricos y prácticos” (DELEUZE frentes sociales, económicos, culturales, y una
en FOUCAULT, 2000, p. 8)6. visión histórica de esa misma problemática;
De igual modo, un discurso general so- impone considerar el problema del maes-
bre la enseñanza tiene sentido si abandona la tro, del alumno, del ambiente, de los medios
ilusión comeniana de “enseñar todo a todos”; tecnológicos y de los distintos campos de la
si entiende que no hay patrones constantes cultura; obliga a ver qué representa la escuela
en todas las acciones de enseñanza, ni meto- para los jóvenes y los niños en relación con
dologías genéricas aplicables a contenidos de las otras ofertas culturales de que disponen
índole diversa; si admite que los especialistas y a reflexionar sobre ellas e interpretar los
de las distintas disciplinas son los propietarios modos de vida, los usos y costumbres de
de sus carreras y programas de formación, y las nuevas generaciones; y vuelve indefec-
emprende seriamente el esfuerzo de compe- tible incluir un espacio curricular donde se
netrarse con los problemas epistemológicos, analice la escuela como ámbito de trabajo y
cognoscitivos, prácticos, de cada una de ellas, como ámbito de formación y, por supuesto,
disponiéndose a confrontarse con las estruc- la problemática del curriculum. Sin embar-
turas conceptuales y con los contenidos cu- go, no obliga a incluir imprescindiblemente
rriculares de los distintos campos. En fin, si una Didáctica General, por ejemplo, o una
asume un compromiso con el trabajo integral Historia o una Sociología de la Educación.
de la escuela que ayude a completar la proble- En el Plan de Estudios de nuestra carrera de
matización que se elabora desde las didácticas Profesorado, muchos de los temas plantea-
especiales en la construcción de un proyecto dos, que podrían ser objeto de una Didáctica
acabado, exhaustivo, que recupere el saber que General, están en las Didácticas Especiales;
las disciplinas tienen de la escuela, y el lugar otros, también relacionados con la enseñan-
y las tareas concretas, curricularmente sustan- za, figuran en materias específicas, como
tivas, que tienen en la escuela, así como éstas Educación Física o Teoría de la Educación
debieran hacer lugar a un saber elaborado en Física, y la inserción de genealogías, esos
las cátedras universitarias cuyo valor quizás estudios de “historia” pero no trabajos de
resida, precisamente, en su distancia del dia- “historiador” (FOUCAULT, 1993, p. 12), en
rio trajín, en no estar expuesto a la obligación esas mismas materias disciplinarias, nos ha
de dar respuestas útiles o certeras a los pro- mostrado ser tan útil o más que la inclusión
blemas cotidianos del trabajo escolar. de una Historia de la Educación, o que el
tratamiento de esos contenidos únicamente
6
Cfr. Crisorio (2007). en Historia de la Educación.

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Discutir qué contenidos (conocimientos, Dr. Alfredo Furlán, an Argentinian pedagogue exiled in
habilidades, actitudes) es necesario que estén, Mexico since 1974. This work discusses the idea that
such subjects constitute, or should constitute, some form
y garantizar que estén, es más importante que of fundamental to physical education as an educational
establecer límites formales o marcas especiales subject. It suggests a horizontal debate among specialists
para que una disciplina funcione con identi- and discourses that articulate theories and practices whi-
dad propia. En otras palabras, un curriculum ch are better placed, more local, less global and less abs-
tract than what one tends to presume when theory and
no puede construirse sin determinar qué con-
practice are discussed as totalizing categories. Without
tenidos es preciso garantizar, pero en absoluto forgetting local concrete tasks that exist in the syllabus,
necesita de las divisiones “ordenadoras” a las this research work emphasizes that physical education
que los tecnócratas son tan afectos, como, por at school has the importance of a finished project, being
ejemplo, la segmentación (fragmentación) en part of the set of contents that a school selects to be taug-
ht. It poses the issue of topic selection and its distribution
“Espacios”: de la Formación General, de la as a main problem in the construction of a syllabus: dis-
Formación de Orientación, de la Formación cussing which contents (knowledge, skills, and attitudes)
Específica, de la Práctica, alumbrados en mi need to be guaranteed before defining the competences
país por la reforma de la última década del that currently attract the attention of technocrats; esta-
blishing limits and landmarks for a subject to work under
siglo pasado y sostenidos por la de la primera
its own identity or the “organizing” divisions such tech-
de éste, de los cuales, al primero le correspon- nocrats are so fond of.
dería la fundamentación teórica, pedagógica, Keywords: Pedagogy – Didactics – traditions – subjects
filosófico-antropológica, con sus concepcio- – syllabus – contents – discourses.
nes del hombre y de la educación; al segundo
las cuestiones relacionadas con la psicología Os fundamentos pedagógicos e didáticos da
Educação Física escolar: pilares de uma unidade
experimental, evolutiva, con sus teorías del
ou escombros de uma fragmentação?
aprendizaje y sus propuestas para enseñar
todo a todos; al tercero los contenidos espe- Resumo
cíficos de la materia de que se trate; y al últi- Com base em uma entrevista sobre as relações entre
mo, por fin, los problemas de la práctica, que a Pedagogia e a Didática realizada com o Dr. Alfre-
do Furlán, pedagogo argentino exilado e radicado no
es preciso conocer mediante la observación México desde 1974, o presente trabalho discute a idéia
y la experiencia. Un ordenamiento racional, de que estas disciplinas constituam ou devam constituir
una secuencia lógica de apoyos sucesivos, un algum tipo de fundamento para a Educação Física en-
trayecto impecable del fundamento a la apli- quanto disciplina educativa. Propõe, assim, um debate
horizontal entre especialistas e discursos que articulam
cación, un pasaje impracticable de la teoría a
teorias e práticas mais situadas, mais locais, menos uni-
la práctica tomando lo peor de las tres tradi- versais e menos abstratas que o que se tende a supor
ciones: un discurso pedagógico de cuño ale- quando se fala em teoria e prática como se fossem cate-
mán, pero con pretensiones de fundamento, gorias totais. Enfatiza, sem esquecer o local e as tarefas
la ilusión comeniana de enseñar todo a todos, concretas, curricularmente existentes, que a Educação
Física tem, na escola, a importância do projeto com-
la epistéme y la technê de las Ciencias de la pleto, do conjunto de conteúdos que a escola seleciona
Educación francesas, y la teoría y la práctica para transmitir. Apresenta, como problema principal da
como totalidades de algunos desarrollos an- construção de um currículo, a seleção dos temas e sua
glosajones. distribuição: discutir quais conteúdos (conhecimentos,
habilidades, atitudes) é preciso garantir, antes de definir
as competências que atualmente concentram a atenção
Pedagogical and didactic fundamentals of school dos tecnocratas, estabelecer os limites e marcas para que
Physical Education: pillars of unit or debris of uma disciplina funcione com uma identidade própria
fragmentation? ou as divisões “ordenadoras” a que esses mesmos tecno-
cratas são tão afeitos.
Abstract Palavras-chave: Pedagogia – Didática – tradições – dis-
This research work was based on an interview about ciplinas – currículo – conteúdos – discursos.
the relations of Pedagogy and Didactics conducted with

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FURLÁN, A. Entrevista con Ricardo Recebido: 4 de dezembro de 2007


Crisorio y Marcelo Giles sobre las relaciones Aprovado: 4 de dezembro de 2007
entre Pedagogía, Didáctica y Disciplinas Endereço para correspondência
educativas. Inédita, 1998. ricardocrisorio@ciudad.com.ar

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