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ISSN: 1134-7937
Antonio Cano Vindel
Resumen: Los desórdenes emocionales (DE), que Abstract: Emotional disorders (ED), including anxi-
incluyen trastornos de ansiedad, del estado de áni- ety, mood and adaptive disorders, and somatization
mo y adaptativos, comparten con las somatizacio- share common pathways with psychosocial factors,
nes una fuerte asociación con factores psicosocia- such as stress, high levels of anxiety or negative emo-
les, como el estrés, altos niveles de ansiedad o tionality, and are very common in primary care (PC).
emocionalidad negativa, y son muy frecuentes en The frequency of PC visits made by these patients
Atención Primaria (AP). La hiperfrecuentación de and the low efficacy of non-established evidence-
estos pacientes, el bajo grado de adecuación del based usual treatments have promoted the implemen-
tratamiento convencional a la evidencia científica y tation of psychological intervention programmes of a
su baja eficacia han llevado a la puesta en marcha cognitive-behavioural type to help improve the effec-
de programas de intervención psicológica de tipo tiveness and efficiency rates, following the recom-
cognitivo-conductual en AP, que mejoran la efica- mendations of high-quality clinical guidelines. This
cia, la eficiencia, y están recomendados por guías paper proposes an integrative approach for ED and
clínicas de alta calidad. En el presente artículo se somatization based on emotional regulation problems
propone un enfoque de los DE y somatizaciones (elevated cognitive biases and unadaptive emotional
basado en problemas de regulación emocional learning) that defends the possibility of reversing the
(elevados sesgos cognitivos y aprendizaje emocio- cognitive-emotional processes involved in the onset
nal desadaptado), que defiende la posibilidad de of these disorders, using cognitive-behavioural tech-
hacer reversibles estos procesos cognitivo- niques, especially cognitive restructuring and expo-
emocionales que han llevado al desorden, usando sure. In addition, we analyse and discuss the theoreti-
técnicas cognitivo-conductuales, especialmente re- cal foundations of these techniques (which can act as
estructuración cognitiva y exposición. Además, se the psychological support of collaborative pro-
analizan y discuten las bases teóricas de estas grammes), according to the principles of proper emo-
técnicas (que pueden ser el soporte psicológico de tion regulation (cognitive bias reduction and adaptive
programas colaborativos), de acuerdo con los prin- emotional learning). Finally, the dissemination of
cipios de una correcta regulación emocional (dis- these effective psychological treatments is recom-
minución de los sesgos cognitivos y aprendizaje mended, with a transdiagnostic focus and Internet-
emocional readaptado). Finalmente, se recomienda based homework, through the implementation of col-
la diseminación de estos tratamientos psicológicos laborative stepped programmes in PC.
eficaces, con enfoque transdiagnóstico y tareas pa-
ra casa apoyadas en Internet, a través de la aplica- Key words: emotions, anxiety disorders, mood dis-
ción de programas colaborativos escalonados en orders, primary care, cognitive-behavioural tech-
AP. niques, evidence-based practice.
Palabras clave: emociones, trastornos de ansie- Title: Theoretical and empirically supported
dad, trastornos del estado de ánimo, atención prima- psychological interventions for emotional
ria, técnicas cognitivo-conductuales, práctica basada disorders in primary care: An update
en la evidencia científica.
Las emociones son una parte esencial memoria, dan sentido a muchos actos de
de nuestra actividad cotidiana y nuestra nuestra vida, nos ayudan o nos impiden de-
cidir o pensar, nos activan e impulsan a ac-
*Dirigir la correspondencia a: tuar o nos bloquean, son básicas para la
Antonio Cano Vindel. Facultad Psicología. comunicación con los demás, están siempre
Univ. Complutense Madrid. 28223 Madrid
E. Mail: canovindel@psi.ucm.es presentes en los grandes acontecimientos
© Copyright 2011: de los Editores de Ansiedad y Estrés vitales, buenos o malos, y son de indudable
158 Cano Vindel
(Eysenck & Derakshan, 1997). Sin embar- sible enfado de otros, incapacidad de ex-
go, también es posible encontrar algún pa- presar ira por temor a perder el control,
ciente que ha tenido ataques de pánico, a miedo a ciertas situaciones o a experimen-
pesar de manifestar un nivel de ansiedad tar ansiedad por temor a las sensaciones
anormalmente bajo en los cuestionarios de físicas, etc.); (2) pueden mostrar evitacio-
ansiedad (en la experiencia emocional), por nes a situaciones emocionales, aunque no
lo que podríamos suponer que mantiene un puedan permitirse evitarlas (e.g., evitar
estilo represivo de afrontamiento (Sirgo, hablar en público por culpa de la ansiedad,
Díaz Ovejero, Cano-Vindel, & Pérez Man- aunque sea una exigencia de su trabajo; o
ga, 2001) con el que intenta suprimir de su evitar viajar en avión, cuando sería lo más
experiencia las respuestas de ansiedad (pa- conveniente, etc.); (3) o pueden experimen-
ra evitar el malestar), procedimiento de au- tar una elevada activación fisiológica en
torregulación que, como se ha comprobado una determinada respuesta, como el rubor,
experimentalmente, suele llevar a una alta el sudor, el temblor muscular de extremi-
activación fisiológica. En ambos casos se dades, o el temblor de voz, porque temen
habrían producido fallos en la autorregula- que los demás observen esta respuesta en
ción de la ansiedad, por caminos diferentes, ellos, les evalúen muy negativamente por
que estarían en la base de los ataques de no poder controlarla y les rechacen o les
pánico. despidan del trabajo. En todos estos casos,
El estudio científico de aspectos esen- por lo general, lo que observamos es que
ciales de la emoción, como las relaciones estas personas, además de ignorar qué son
entre procesos cognitivos y emocionales, las emociones, para qué sirven y cómo se
no cristalizó hasta los años 80 y 90, como regulan, han desarrollado unos patrones de
puede verse en algunas revisiones y mono- relación cognitivo-emocionales caracteri-
grafías (Cano-Vindel, 1989; Cano-Vindel zados por la presencia de importantes ses-
& Fernández-Castro, 1999). Quizás por gos cognitivos y ansiedad (Bar-Haim, La-
ello, hoy en día es frecuente que muchas my, Pergamin, Bakermans-Kranenburg, &
personas presenten trastornos emocionales, van, 2007; Craske & Pontillo, 2001; Ey-
pero no tengan información sobre qué son senck & Derakshan, 1997), así como un
las emociones, para qué sirven o cómo ma- proceso de aprendizaje emocional “des-
nejarlas o regularlas (Cano-Vindel, 2004; adaptado” (i.e., evitar para reducir el ma-
Cano-Vindel & Serrano Beltrán, 2006). lestar), lo que les conduce en la dirección
Así, encontramos que personas que llevan opuesta a la deseada, de manera que cada
tiempo sometidas a un fuerte estrés (Cano- vez tienen menos control sobre las reaccio-
Vindel, Dongil Collado, & Wood, 2011a) y nes emocionales que les gustaría regular,
han desarrollado síntomas ansiosos, con pudiendo desarrollar algún DE.
frecuencia no saben qué es la ansiedad, a En estos casos podremos observar fre-
pesar de presentar altos niveles de respues- cuentemente que esta persona está come-
ta en esta emoción, así como algunos pro- tiendo una serie de errores y sesgos cogni-
blemas en la regulación de ésta y otras tivos, como por ejemplo: (1) prestando
emociones (i.e., ira). En estos casos obser- atención casi todo el tiempo (sesgo aten-
vamos con frecuencia ciertos patrones de cional) a una respuesta fisiológica sobre la
relación cognitivo-emocional, como por que no tiene control voluntario; (2) está
ejemplo: (1) temor irracional a algunas re- multiplicando la probabilidad subjetiva de
acciones o a determinados aspectos de las que esa respuesta sea percibida inmediata-
mismas (e.g., temor a dar una respuesta mente por los otros con la misma intensi-
asertiva por dar excesiva importancia al po- dad que él/ella experimenta sus sensaciones
Intervención psicológica sobre los desórdenes emocionales en Atención Primaria 163
(sesgo interpretativo); (3) está magnifican- et al., 2008), pues podemos enseñar al pa-
do la posible evaluación negativa (i.e., “es ciente qué es lo que le pasa, por qué, qué
terrible …”) que harán los demás cuando hace mal y explicarle qué es lo que tiene
observen su respuesta fisiológica (sesgo que hacer para invertir el sentido del
interpretativo); (4) está pensando en lo que aprendizaje que ha desarrollado. Está com-
pensarán los otros de él, cuando en realidad probado que esta información cualificada
él no es adivino y esos pensamientos contra es necesaria, aunque no es suficiente para
él son suyos (sesgo atribucional); o (5) llevar a cabo una intervención eficaz sobre
tiende a evitar situaciones (con lo que está los DE, como la fobia social (Olivares, Ro-
reforzando su temor y su falta de control sa-Alcázar, & Olivares-Olivares, 2009).
sobre esas situaciones), etc. Estos sesgos Además de información, necesitará poner
cognitivos y fallos en la regulación emo- en práctica habilidades diferentes a éstas
cional están provocando un progresivo in- que ha aprendido erróneamente; por ejem-
cremento del nivel de ansiedad. Además, se plo, deberá aprender a no priorizar la in-
observa con mucha frecuencia que la per- formación amenazante todo el tiempo, no
sona que presenta estos trastornos emocio- prestar tanta atención a las respuestas fi-
nales, ya sean de tipo mental o físico, lleva siológicas involuntarias que pretende con-
ya algún tiempo desarrollando este proceso trolar, o tendrá que aprender a reinterpretar
de aprendizaje cognitivo-emocional que, el significado social que los demás suelen
básicamente, conduce a potenciar las reac- dar a las respuestas de ansiedad cuando las
ciones emocionales que paradójicamente observan en otra persona (lo poco que pue-
quería desactivar o controlar. Véanse como den observar), y tendrá que hacer exposi-
muestra algunos casos clínicos tratados ción, bajo condiciones de control (cuando
desde esta perspectiva cognitiva emocional sepa regular su emoción), a las situaciones
en la revista Ansiedad y Estrés, volumen que antes evitaba. Este re-aprendizaje lle-
14, número 2-3 (Dongil Collado, 2008; Vi- vará a la solución de los DE que estaba pa-
dal-Fernández, Ramos-Cejudo, & Cano- deciendo o comenzando a desarrollar (Bro-
Vindel, 2008; Wood, 2008), así como el es- san, Hoppitt, Shelfer, Sillence, & Mackin-
tudio sobre la eficacia de este tipo trata- tosh, 2010; Cano-Vindel et al., 2011a;
miento en un grupo de pacientes con tras- Dongil Collado, 2008; Herrero-Gómez &
torno obsesivo-compulsivo de Leal- Cano Vindel, 2010; Leal-Carcedo & Cano-
Carcedo (2011). Vindel, 2008; Ramos-Cejudo & Cano-
De acuerdo con este enfoque, las res- Vindel, 2008; Vidal-Fernández et al., 2008;
puestas emocionales desadaptada y los DE Wood, 2008). Muchos grupos de investiga-
se van desarrollando a lo largo del tiempo, ción trabajan en el estudio de la regulación
siguiendo un proceso de aprendizaje que de las emociones y su relación con trastor-
incluye el condicionamiento directo de res- nos de ansiedad (Amstadter, 2008; Cisler,
puestas fisiológicas (reguladas por el sis- Olatunji, Feldner, & Forsyth, 2010; Han-
tema nervioso autónomo y por otros siste- nesdottir & Ollendick, 2007), como el gru-
mas automáticos, no voluntarios) con algu- po de Michelle Craske (Arch & Craske,
na situación o estímulo, así como alteracio- 2006) que desarrolla un proyecto denomi-
nes progresivas en los procesos cognitivos nado “Regulación Emocional”, cuyo obje-
de atención, interpretación, memoria o jui- tivo es mejorar las estrategias terapéuticas
cio. que han demostrado ser eficaces para todos
Pero este aprendizaje cognitivo- los trastornos de ansiedad y evaluar formas
emocional, que está en la base de los DE, de mejorar los resultados a largo plazo del
afortunadamente puede revertirse (Berking tratamiento cognitivo-conductual a través
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mitad de los pacientes tiene 3 ó más), tien- formato grupal para pacientes con cual-
den a cronificarse (2 de cada 3 personas los quiera de estos desórdenes.
presentan desde hace más de 6 meses) y su Técnicas cognitivo-conductuales y regu-
acumulación está relacionada con ansiedad, lación emocional en los DE
así como con peor salud física (van der La investigación sobre la eficacia de las
Windt et al., 2008). técnicas cognitivo-conductuales y sobre la
En segundo lugar, existe una estrecha regulación emocional ha transcurrido por
relación entre trastornos mentales comunes caminos diferentes. No obstante, juntar los
(e.g., DE) y condición física crónica (e.g., conocimientos consolidados en ambas líne-
diabetes, hipertensión). Así, en un estudio as puede ser de gran utilidad para conocer
llevado a cabo en 17 países (Scott et al., mejor y tratar de manera más eficaz los DE
2007) se encontró que todas las condicio- (Berking et al., 2008).
nes físicas (obesidad, diabetes, asma, hiper- Continuando con las observaciones rea-
tensión, artritis, úlcera, trastornos cardio- lizadas sobre cognición-emoción y los tipos
vasculares, dolores de cuello-espalda, dolor de aprendizaje emocional, parecen existir
de cabeza y múltiples dolores) se asociaron dos tipo de principios terapéuticos o dos
significativamente con depresión y/o tras- grandes técnicas cognitivo-conductuales
tornos de ansiedad, no habiendo variación (Brewin et al., 1996): la exposición y la re-
importante en la fuerza de asociación para estructuración cognitiva. La primera sirve
ambos tipos de DE (OR 1.2 – 4.5); no obs- para reducir la asociación entre estímulos
tante, la comorbilidad del trastorno depre- del ambiente y respuestas fisiológicas con-
sivo y de ansiedad estuvo más altamente dicionadas, mediante un reaprendizaje pro-
asociada con varias de estas condiciones gresivo; con la segunda, se reducen los ses-
físicas que cada uno de estos trastornos gos cognitivos, que están en la base del
mentales por separado. DE.
En España, en un estudio realizado en 1. Exposición
todas las comunidades, el 53,6% de los pa-
Diferentes técnicas de tratamiento cog-
cientes de AP presentaron uno o más tras-
nitivo-conductual (exposición en vivo, de-
tornos mentales, según una prueba de cri-
sensibilización sistemática, exposición
bado, los más frecuentes fueron los DE y
imaginaria, realidad virtual y exposición
las somatizaciones: trastornos del estado de
simulada con ordenador, desensibilización
ánimo (35,8%), de ansiedad (25,6%), y
y reprocesamiento por movimientos ocula-
somatomorfos (28,8%); el 30,3% de los
res, tensión aplicada, relajación aplicada,
pacientes tenían más de un trastorno mental
tareas para casa, experimentos conductua-
actual y el 11,5% presentó comorbilidad
les, terapia de aceptación y compromiso,
entre los trastornos del estado de ánimo,
etc.), incluyen desiguales dosis de exposi-
ansiedad y somatomorfos (Roca et al.,
ción (Marks & Dar, 2000) por parte del in-
2009).
dividuo a las situaciones que generan emo-
Dada la alta comorbilidad entre DE, ción de manera desadaptada. La exposición
somatizaciones y condiciones físicas cróni- supone un reaprendizaje para la reacción
cas es muy probable que los procesos falli- emocional asociada a una situación, así
dos de regulación emocional estén presen- como una disminución de la actividad de la
tes de una u otra forma en los tres tipos de amígdala (Schienle, Schafer, Hermann,
trastornos, lo que permitiría adoptar un tra- Rohrmann, & Vaitl, 2007). La exposición
tamiento con enfoque transdiagnóstico y en sí debería reducir por sí sola la respuesta
condicionada, de manera que las respuestas
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fisiológicas condicionadas se vayan habi- los sesgos cognitivos que disparan la emo-
tuando o debilitando ante la presencia de la ción (Craske & Pontillo, 2001; Eysenck &
situación, ante la cuál el individuo puede Eysenck, 2007).
comprobar que no sucede nada catastrófico, El modelo conductual radical, que pre-
excepto que se disparan las respuestas fi- dominaba en la psicología hasta los años
siológicas en un primer momento (Carey, 80, antes de que tomasen fuerza los mode-
2011). Sin embargo, en el proceso de expo- los cognitivos, tuvo muchos problemas pa-
sición también operan los factores cogniti- ra explicar por qué no siempre se producía
vos que acabamos de describir, por lo que la extinción de la respuesta emocional tras
resulta que la exposición, siendo una técni- la exposición repetida a la situación emo-
ca muy eficaz, no siempre funciona. Para cional. Diferentes intentos de explicación
que funcione es necesario que la actividad recurrieron a variables de tipo cognitivo,
cognitiva acompañe también, en la misma pese a que esta orientación radical del con-
dirección, a la progresiva habituación de ductismo rechazaba la posibilidad de estu-
las respuestas fisiológicas en presencia de diar científicamente las variables cogniti-
la situación (que de por sí tiende a provocar vas. Así, durante años se estuvo defendien-
la exposición). Si por el contrario, una per- do que si bien la exposición repetida a la si-
sona se expone a la situación, pero sigue tuación emocional o los recuerdos espontá-
activando los sesgos cognitivos de interpre- neos del trauma, normalmente sería sufi-
tación catastrofista y de atención perma- ciente para extinguir las asociaciones con-
nente a los estímulos amenazantes y sus dicionadas, la extinción dejaría de ocurrir si
consecuencias magnificadas, entonces esta la persona que se estaba exponiendo trataba
actividad cognitiva estará produciendo el de distraerse o bloquear los recuerdos du-
efecto contrario a la exposición: la temida rante la exposición, lo que haría una expo-
reactividad fisiológica que se pretendía re- sición incompleta, que fallaría en su objeti-
ducir (Dongil Collado & Wood, 2009). Es vo. De acuerdo con esta explicación (Kea-
un error creer que la exposición funcionará ne, Zimering, & Caddell, 1985), esta evita-
siempre, en cualquier circunstancia, sin te- ción cognitiva de los estímulos condiciona-
ner en cuenta los procesos cognitivos, y dos, ya sea a través de la distracción, el
que al cabo de un tiempo se producirá habi- bloqueo de los recuerdos u otras conductas,
tuación. De hecho, la exposición puede se vería reforzada por una reducción en el
producir el efecto contrario, es decir la sen- miedo, lo que llevaría al mantenimiento del
sibilización o aumento de la reacción emo- trastorno emocional (por ejemplo el tras-
cional, si el individuo continúa interpretan- torno de estrés postraumático, pese a expo-
do erróneamente sus procesos cognitivos y nerse a los recuerdos traumáticos). Esta ex-
emocionales cuando se está exponiendo a plicación ha llevado a una práctica profe-
la situación emocional (Gross, 1998; Ray- sional contraria a los principios de la regu-
burn & Otto, 2003; Starcevic & Berle, lación emocional, o a los modelos de ses-
2006), por lo que es necesario que la expo- gos cognitivos actuales, como el modelo de
sición se produzca dentro de un proceso de los cuatro factores de Eysenck (Eysenck &
aprendizaje que siga el principio de Derakshan, 1997; Eysenck & Eysenck,
aproximaciones sucesivas (exponerse poco 2007), al insistir en la necesidad de hacer
a poco, según se vaya dominando la situa- exposición mientras el paciente imagina, en
ción) y el de favorecer el progresivo au- todo momento, consecuencias de tipo ca-
mento de las habilidades cognitivo- tastrofista, que pueden conducir a la sensi-
emocionales de autorregulación emocional bilización, así como a una alta tasa de
(Allen & Barlow, 2009) y disminución de abandono terapéutico (Dongil Collado &
Intervención psicológica sobre los desórdenes emocionales en Atención Primaria 169
Wood, 2009). En cambio, según los mode- gadas y los supuestos subyacentes que pue-
los de sesgos cognitivos y de la autorregu- dan llevar a interpretar una situación de
lación emocional, esta práctica clínica sería manera problemática. Más recientemente,
inadecuada, pues se estaría forzando al pa- además de atender los procesos interpreta-
ciente a activarse (a base de aumentar el tivos, se centra también en procesos cogni-
sesgo atencional e interpretativo, o fomen- tivos más generales, como la atención o la
tando una regulación emocional centrada memoria, así como en sus posibles sesgos
en la rumiación), esperando que funcione (como la excesiva atención a algunos ele-
así mejor la exposición, cosa que no ocurre mentos del procesamiento emocional que
en muchas ocasiones (aunque siempre se potencian la amenaza y la respuesta de an-
puede echar la culpa de estos fallos al pa- siedad) o selección de recuerdos dirigida
ciente por haberse distraído o producido casi exclusivamente a eventos relacionados
una evitación cognitiva mientras se expo- con pérdida o fracaso, que provocan el
nía, como hacen algunos clínicos). En rea- afecto negativo, especialmente la tristeza,
lidad, según el modelo de los sesgos cogni- el estado de ánimo negativo y la depresión
tivos la explicación de por qué no siempre (Dongil Collado, 2008; Eysenck & De-
funciona la extinción sería la contraria (Ey- rakshan, 1997; Eysenck & Eysenck, 2007).
senck & Eysenck, 2007): el problema no La reestructuración cognitiva tradicio-
estaría en que el paciente ha evitado cogni- nal se basaba en modelos de intervención
tivamente durante la exposición y se ha dis- clínica, como el de terapia racional emotiva
traído (en lugar de pensar continuamente en de Ellis o la terapia cognitiva de Beck (Ca-
lo que le activa), sino que la extinción fa- no-Vindel, 2002). Hoy en día permite tam-
llaría porque el paciente está centrando su bién llevar a cabo una terapia basada en
atención en los estímulos amenazantes y modelos más básicos sobre las relaciones
los está magnificando, actividades cogniti- entre cognición y emoción, siempre que
vas que provocarán una reacción emocional haya obtenido apoyo empírico, como por
más intensa y menos controlable; mientras ejemplo el modelo de la valoración (Cano-
que, por el contrario, sería más fácil que Vindel & Miguel-Tobal, 1999; Lazarus &
funcione la exposición cuando el paciente Folkman, 1986) o el modelo de los sesgos
sepa autorregular sus procesos cognitivos y cognitivos (Bar-Haim et al., 2007; Eysenck
emocionales, y efectivamente disminuya & Derakshan, 1997). En la práctica, se trata
los sesgos cognitivos de tipo atencional e de identificar y modificar los contenidos de
interpretativo que provocan la activación la experiencia consciente (pensamientos,
emocional. imágenes, sensaciones, etc.), o los procesos
2. Reestructuración cognitiva cognitivos (atención, interpretación, memo-
La Terapia Cognitiva es una forma de ria, atribución, etc.) que supuestamente
psicoterapia que postula que la forma en están implicados en la reacción emocional
que un individuo percibe e interpreta even- o en su regulación. Este procedimiento de
tos influye fuertemente en cómo esa perso- reestructuración cognitiva (Cano-Vindel et
na responde a nivel emocional y conduc- al., en prensa) puede utilizarse para ayudar
tual, por lo que su principal eje de acción se a los pacientes a conseguir los objetivos
centra en la modificación de los procesos que se detallan en la Tabla 1.
cognitivos que operan en tales percepcio- Por ejemplo, en las situaciones que pro-
nes e interpretaciones. Desde hace tres ducen un grado excesivo de ansiedad (e.g.,
décadas, combina técnicas cognitivas y hablar en público para algunos individuos),
también conductuales para enseñar a los es necesario informar (Cano-Vindel et al.,
pacientes a desafiar las percepciones ses- en prensa) a la persona que sufre mucha
170 Cano Vindel
1) adquirir la información necesaria que permita a los pacientes identificar las emocio-
nes específicas que les afectan, como la ansiedad, en todas sus manifestaciones;
2) buscar los contenidos y procesos cognitivos que pueden estar en la base de estas
emociones, como los pensamientos negativos, la valoración cognitiva o los sesgos
cognitivos;
3) identificar posibles sesgos cognitivos o alteraciones (atención, interpretación, memo-
ria, atribución, solución de problemas, etc.), pensamientos automáticos negativos,
pensamientos distorsionados, autoinstrucciones erróneas, creencias irracionales des-
adaptadas, esquemas disfuncionales, etc.;
4) modificarlos mediante el uso de información adecuada, entrenamiento en autoobser-
vación (para detectar y tener presente el papel de las cogniciones sobre la emoción y
la conducta), fomento de habilidades de razonamiento, generalización, reinterpreta-
ción y modificación de pensamientos o autoinstrucciones (trabajando con muestras
de sus problemas cotidianos recientes), aprendizaje de habilidades para contrastar
posibles errores subjetivos con datos de la realidad social (i.e., probabilidad subjetiva
versus real de que sucedan acontecimientos amenazantes), adquisición de destrezas
para el manejo y redirección de la atención (mediante la repetición de ejercicios de
focalización), reforma de estilos de procesamiento de información (entrenando repe-
tidamente nuevos procedimientos de solución de problemas, nuevas formas de reali-
zar atribuciones causales, habilidades para analizar la información o el fomento de la
reflexividad frente a la impulsividad), etc
ansiedad ante esta situación (qué es la an- utilizar la contrastación con la realidad, el
siedad, cómo se manifiesta en los tres sis- razonamiento, la adopción de un estilo
temas, o sus relaciones con la valoración de socrático, el uso de metáforas, la compara-
la situación o los sesgos cognitivos), listar ción de su conducta en esta situación frente
los posibles síntomas que debe observar, a otras en las que se maneja bien, la persua-
así como detectar si la valoración que hace sión, etc. Consiste en dedicar un tiempo al
de dicha situación puede ser clasificada análisis del problema para hacer que el pa-
como “muy amenazante” para esta persona ciente se plantee que toda la dificultad que
(Lazarus & Folkman, 1986). Seguramente, presenta esta situación reside en algo (e.g.,
habrá también que intentar modificar esta la amenaza, como temor a hacer el ridícu-
valoración de la situación (para que deje de lo), que aunque llegara a producirse en su
ser amenazante y pase a ser un desafío, con forma más severa (ridículo, que la ansiedad
lo que disminuiría la ansiedad). Para ello, sea observada por el público, etc.), en rea-
será necesario discutir sobre la forma de lidad no sucedería nada grave o lo que
ver o interpretar la situación, las conse- acontecería sería menos grave que lo que
cuencias (reales vs. subjetivas) y la capaci- ya le está sucediendo por evitar esa situa-
dad de afrontamiento del propio sujeto ante ción (e.g., pérdida de oportunidades, sufrir,
esta situación (que puede estar bloqueada etc.). Suele ser útil analizar y modificar la
por la ansiedad). Para ayudar a reducir la interpretación subjetiva de cuatro aspectos
valoración de amenaza sobre la situación básicos de la situación amenazante, señala-
(Cano-Vindel et al., en prensa) es frecuente dos en la terapia cognitiva de Beck (Cano-
Intervención psicológica sobre los desórdenes emocionales en Atención Primaria 171
Vindel, 2002): (1) probabilidad de que su- efecto hasta ahora conseguido con las
ceda lo peor; (2) gravedad de las conse- técnicas cognitivo-conductuales (Starcevic
cuencias si sucede lo peor; (3) posibilida- & Berle, 2006). Recordemos el modelo de
des de afrontamiento personal de la situa- Ehlers y Clark sobre el trastorno de estrés
ción; y (4) posibilidad de recibir apoyo so- postraumático (Ehlers & Clark, 2000) y la
cial para afrontarla mejor. Las dos primeras terapia cognitiva que han desarrollado para
cuestiones suelen estar magnificadas y en este desorden (Ehlers et al., 2005), con la
cambio sobre las dos últimas se tiende a que han demostrado se puede obtener un
minimizar. La reestructuración cognitiva gran tamaño del efecto. Otros ejemplos los
consistiría en contrastar las valoraciones encontramos en los esfuerzos por estudiar y
subjetivas con datos reales o datos estima- reducir la sensibilidad a la ansiedad en pa-
dos de la realidad (Cano-Vindel, 2002). cientes con pánico (Pincus, May, Whitton,
Además, habría que trabajar la reducción Mattis, & Barlow, 2010; Schneider &
del sesgo atencional, como la frecuencia de Schulte, 2008), así como en otra línea de
las anticipaciones que realiza o el tiempo investigación que se centra en el sesgo
que dedica a pensar en la amenaza, median- atencional dirigido a las sensaciones físicas
te técnicas de redirección o refocalización de la ansiedad y el sesgo interpretativo que
de la atención (Cano-Vindel et al., en pren- magnifica dichas sensaciones y las convier-
sa). te en amenazas muy potentes para las per-
En el caso del trastorno de pánico, sonas con trastorno de pánico (Clark, 1986;
según el modelo de Eysenck, la atención se Rayburn & Otto, 2003; Wood, 2008; Zvo-
centra casi todo el tiempo en las sensacio- lensky, Schmidt, Bernstein, & Keough,
nes físicas de la ansiedad, cuando realmen- 2006). Este enfoque de la vulnerabilidad
te no son peligrosas (Eysenck & Eysenck, cognitiva característica de un determinado
2007). Los sesgos cognitivos de atención e trastorno de ansiedad está en pleno auge y
interpretación sobre estas sensaciones lle- puede ser una vía importante para la mejora
varían al desarrollo de miedo a estos de los tratamientos eficaces en los trastor-
síntomas de activación y niveles cada vez nos de ansiedad. Pero para poder demostrar
más altos de ansiedad, que podrían ser co- la eficacia que pueda añadir al tratamiento
rregidos disminuyendo el sesgo atencional este tipo de intervención deberían mejorar-
e interpretativo sobre estas señales físicas se los procedimientos de evaluación del tra-
(Cano Vindel, 2007; Rayburn & Otto, tamiento, de manera que no sólo se evalúe
2003; Starcevic & Berle, 2006; Wood, la disminución de la intensidad de la ansie-
2008). dad (y de manera bastante general, con una
Una línea de investigación actual se escala de rasgo de ansiedad), sino que se
centra en el desarrollo de modelos de vul- enriquezca con evaluaciones más específi-
nerabilidad cognitiva en los DE (Cano- cas, por ejemplo, de los constructos que se
Vindel, 2011; Leal-Carcedo, 2011), especí- supone son relevantes para la vulnerabili-
ficos para cada trastorno, así como en su dad (como la actividad cognitiva caracterís-
contrastación empírica, el desarrollo de ins- tica de cada trastorno), o una evaluación
trumentos de evaluación como el IACTA más exhaustiva de la emoción (tres siste-
(Cano-Vindel, 2001), una terapia de rees- mas de respuesta) y de los síntomas del
tructuración cognitiva basada en dichos trastorno de ansiedad (criterios diagnósti-
modelos y la demostración de la eficacia de cos).
esta técnica de tratamiento (Leal-Carcedo, Guías clínicas de tratamiento
2011), que se va enriqueciendo progresi- Hoy en día, los tratamientos psicológi-
vamente y promete mejorar el tamaño del cos más eficaces y eficientes para los DE
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tradicionales'. A los 18 meses, se seguían Dongil, & Latorre, 2011b). Otro programa
manteniendo en 51,5% y 33,3%, respecti- similar, desarrollado por la misma empresa
vamente. Además, se encontró que este tra- es “Depression Center” (Evolution Health,
tamiento fue más eficaz que el convencio- 2011a). Se trata de programas educativos
nal para cada uno de los trastornos de an- autoguiados, totalmente personalizados y
siedad considerados, incluso con presencia de fácil acceso a través de la gran red, con
de comorbilidad de otros desórdenes, si una duración de 12 semanas, accesible las
bien en este caso la eficacia fue algo menor 24 horas del día, para todas aquellas perso-
(Craske et al., 2011). nas que están sufriendo TP con o sin agora-
Como puede verse en este caso, este ti- fobia, o depresión. Los datos se recogen
po de programas está obteniendo mejores anónimamente a través del Web-Based De-
resultados que el tratamiento convencional pression and Anxiety Test (WB-DAT), un
y no sólo en términos de eficacia, sino de test de screening (cribado) diseñado para
eficiencia y costes (McHugh et al., 2007). detectar trastornos de ansiedad y trastorno
Algunos programas de este tipo están apo- depresivo mayor, compatible con los crite-
yados por la atención a través de Internet o rios DSM-IV y el ICD-10. Como test de
programas de ordenador, un soporte que cribado es altamente sensible y razonable-
permite incluir las pruebas de cribado ini- mente específico.
ciales, la evaluación con instrumentos de Existen otros programas de intervención
autoinforme antes y después del tratamien- similares al CALM, como el Protocolo
to, información sobre el trastorno emocio- Unificado para el Tratamiento Transdia-
nal que se está trabajando en la aplicación gnóstico de los Trastornos Emocionales
Web o en el programa, administración de (UP) del grupo de Barlow (Barlow et al.,
tareas interactivas automatizadas sobre au- 2011), que ha demostrado ser también más
toobservación, autorregistro, reestructura- eficaz que el tratamiento convencional
ción de contenidos y procesos cognitivos, (Wilamowska et al., 2010). Igualmente,
técnicas de relajación o diversas formas de existen otros tratamientos psicológicos más
exposición y otras tareas para casa. Todo simples y breves (entre 2 y 10 sesiones)
ello libera a los profesionales de muchas que han sido aplicados a pacientes con DE
horas de trabajo, aunque se produce lógi- en AP y han mejorado así mismo la efica-
camente una cierta merma en la comunica- cia del tratamiento tradicional. En un meta-
ción con el terapeuta, pero que no afecta de análisis (Cape, Whittington, Buszewicz,
una manera importante a la eficacia y redu- Wallace, & Underwood, 2010) de 33 ensa-
ce los costes (Kiropoulos et al., 2008). En yos clínicos controlados aleatorizados se
general se consiguen tamaños del efecto encontró que las terapias psicológicas bre-
medios o grandes (.49 – 1.14) frente a la ves aplicadas en AP a pacientes adultos con
lista de espera; si bien se precisa más estu- DE son eficaces, frente al tratamiento con-
dios de investigación que incluyan compa- vencional, especialmente las terapias de ti-
ración con placebo (Reger & Gahm, 2009). po cognitivo-conductual para los trastornos
Para una mejor comprensión de cómo fun- de ansiedad, que alcanzan un tamaño del
cionan estos programas a través de Internet, efecto comparable al que se obtienen en
véase, por ejemplo el programa “Panic otros contextos (en torno a 1.0). Las tera-
Center” (Evolution Health, 2011b), una pias breves que están basadas en consejo
aplicación en línea que desarrolla una in- psicológico y solución de problemas, apli-
tervención cognitivo-conductual, o la revi- cadas a pacientes con trastornos depresivos
sión sobre pánico en AP que hemos llevado o trastornos mixtos de ansiedad y depre-
a cabo recientemente (Cano-Vindel, Wood, sión, son también eficaces pero tienen un
178 Cano Vindel
tamaño del efecto pequeño (entorno a .30) mas psicológicos con técnicas cognitivo-
en comparación con el tratamiento conven- conductuales pueden formar parte de pro-
cional. gramas colaborativos de tipo multidiscipli-
Discusión y conclusiones nar en los se integran otros tratamientos,
En un trabajo previo revisamos abun- especialmente el farmacológico y la inter-
dantes datos sobre los DE en AP (Cano- vención social. Esta revisión arroja resulta-
Vindel, 2011) que incluían un claro apoyo dos que van de excelentes a buenos, dismi-
al enfoque psicológico (que señala una nuyendo ligeramente la valoración a medi-
fuerte influencia de factores psicosociales da que ahorramos más costes (e.g., al redu-
como el estrés o la ansiedad sobre este tipo cir horas de atención directa cara a cara del
de desórdenes), así como los problemas terapeuta); pero siempre los resultados en-
que presenta el tratarlos exclusivamente contrados suelen ser mejores que los obte-
desde una orientación biológica, olvidando nidos hasta ahora con el tratamiento con-
su origen cognitivo-emocional. Además, se vencional, como se demuestra en las guías
argumentaba y se aportaban datos sobre las clínicas (NICE, 2006, 2009, 2010, 2011b)
debilidades de nuestro sistema público sa- y programas que hemos revisado (Craske et
nitario en la atención de estos desórdenes y al., 2011).
las costosas consecuencias económicas, Las limitaciones de este estudio tienen
psicológicas y sociales que ello acarrea. que ver sobre todo con la amplitud del ob-
En este artículo hemos revisado las ba- jetivo, pues un propósito tan amplio como
ses teóricas del tratamiento psicológico con dibujar las principales bases teóricas y el
enfoque cognitivo-conductual, que se vie- apoyo empírico que ha obtenido el enfoque
nen desarrollando en occidente desde hace cognitivo-conductual en la aplicación
casi cien años, la evidencia científica acu- práctica de técnicas y programas es una ta-
mulada a favor de algunas técnicas que se rea que sobrepasa las restricciones de espa-
están mostrando altamente eficaces, con cio que impone un simple artículo.
tamaños del efecto grandes y perdurables a Además, dentro del enfoque cognitivo-
lo largo del tiempo, los avances consegui- conductual existe una gran diversidad de
dos por el enfoque de la autorregulación modelos, orientaciones y técnicas que, en
emocional (que integra las bases teóricas general, han mostrado su utilidad y efica-
sobre procesamiento cognitivo-emocional, cia. Pero nosotros hemos elegido los que
aprendizaje emocional, y las técnicas de in- han mostrado mayor grado de eficacia, con
tervención), los cambios que se han produ- tamaños del efecto mayores, y permiten
cido ya en algunos países como el Reino una reducción de costes, frente al trata-
Unido, al adoptar un sistema de atención a miento convencional, basándonos en los es-
los DE basado en esta evidencia (NICE, tudios que reunían las mejores condiciones
2011b) o los enfoques experimentales más o garantías posibles de calidad metodológi-
recientes (transdiagnóstico, tratamiento es- ca (i.e., ensayos clínicos controlados alea-
calonado, reestructuración cognitiva, auto- torizados) obtenidos en una revisión ex-
rregulación emocional, etc.), que intentan haustiva y crítica. Sin embargo, no hemos
llevar estos tratamientos al máximo número llevado a cabo una revisión sistemática,
posible de individuos de la población que dada la amplitud de tópicos revisados, aun-
acuden a AP, a través de programas de que nos hemos apoyado en las publicacio-
grupo, transdiagnósticos, con tratamiento nes de mayor calidad, como revisiones sis-
escalonado y con apoyo en las nuevas tec- temáticas, meta-análisis y ensayos contro-
nologías de la información. Estos progra- lados aleatorizados, siempre que los había.
Para un enfoque más práctico de la inter-
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