Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
05 - Barbero Agustina TFG
05 - Barbero Agustina TFG
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
PÁGINA DE APROBACIÓN
______________________________________________________________________
______________________________________________________________________
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Firma ______________________________________
Lugar y fecha________________________________
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Agradecimientos
Este trabajo final de graduación, como estipulan los requisitos académicos, ha sido
escrito por mi persona, pero es fruto del acompañamiento y sostén colectivo de las
personas que contribuyeron en este proceso. A su vez, es producto de la reflexión y
lucha colectiva de millones de mujeres. Por ello he decidido utilizar la tercera
persona; para dar cuenta de las múltiples voces que se entretejen en el texto.
Agradezco primero, y especialmente, a las compañeras mujeres y protagonistas de
este trabajo, quienes me han confiado sus relatos de parto, con sus alegrías y
dolores.
A la Universidad Nacional de Luján.
A la Dra. Laura Massa, mi tutora, por su detallada lectura y su guía amorosa y
comprometida. A la Lic. Carolina Francia, mi asesora, por sus valiosos aportes,
aliento y motivación. A Andrés (Rulo), mi lector, por su tiempo y dedicación.
A mi compañero de vida, Néstor, por su enorme apoyo para lograr este y tantos
otros proyectos compartidos.
A mis motores que todo lo impulsan, León y Yaco.
A mi madre y su compañera Silvia, por su incondicional confianza en mí.
A mi padre y su compañera Mónica, por el acompañamiento indispensable de cada
día.
A mis hermanos Lucila y Facundo, a mis amigas y a mis hermanas de la vida.
A cada una de las mujeres que luchan por nacimientos libres de violencia.
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Índice
PÁGINA DE APROBACIÓN ...................................................................................... 1
Agradecimientos ...................................................................................................... 3
RESUMEN.................................................................................................................. 7
INTRODUCCIÓN........................................................................................................ 8
Capítulo 1: EMERGENTES DE UNA RELACIÓN DESIGUAL ............................... 15
1.1 Antes de empezar............................................................................................ 15
1.2 Capitalismo y violencia: La “partera” de la historia .......................................... 18
1.3 Patriarcado capitalista ..................................................................................... 22
1.4 Los partos hasta el S. XVI y la sabiduría de la resistencia ancestral. .............. 27
1.5 Advenimiento de la obstetricia e institucionalización de los partos – De
protagonistas, a espectadoras de nuestros partos. ............................................... 33
1.6 Colonialidad y Modelo Médico Hegemónico .................................................... 40
1.7 Género y salud sexual y reproductiva.............................................................. 46
Capítulo 2: LA VIOLENCIA OBSTÉTRICA COMO EXPRESIÓN DE LA VIOLENCIA
DE GÉNERO EN EL AMBITO DE LA SALUD ........................................................ 53
2.1 Enfoque de riesgo y modelo tecnocrático: La máquina en el centro de la
escena. .................................................................................................................. 53
2.2 Violencia de género y violencia institucional .................................................... 58
2.3 Violencia obstétrica como violencia de género ................................................ 64
2.4 Mecanismos de desautorización hacia las mujeres-. ...................................... 71
2.5.1 Tipos de violencia obstétrica ........................................................................ 78
2.5.2 Intervenciones y cascada de intervenciones ................................................ 85
2.6 Consecuencias de la violencia obstétrica ........................................................ 92
2.7 El Currículum oculto de la formación en medicina. .......................................... 97
Capítulo 3: EXPERIENCIAS DE LAS MUJERES EN LAS MATERNIDADES
PÚBLICAS Y PRIVADAS. ..................................................................................... 104
3.1.1 Territorio y caracterización del sistema de salud argentino y del conurbano:
............................................................................................................................ 104
3.1.2 El territorio donde ocurre el parto y espacialidad hegemónica ................... 109
3.2 Marco legal de la violencia obstétrica y Derechos de -quien se le demanda que
sea- paciente ....................................................................................................... 116
3.3 La ley del parto respetado y sus reveses. ..................................................... 128
3.4 Parir es político: Movimientos por el parto respetado. ................................... 140
CONSIDERACIONES FINALES ............................................................................ 147
Posibles líneas de acción .................................................................................... 151
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
RESUMEN
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
INTRODUCCIÓN
1 Personas cuya identidad de género está alineada con el sexo que le asignaron al nacer.
2 Según la RAE (Real Academia Española) se definen las mujeres primíparas como aquellas
que paren por primera vez.
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
▪ ¿Como son las experiencias de las mujeres para el acceso a sus derechos
sexuales y reproductivos en los servicios públicos y privados de salud?
▪ ¿En qué medida las mujeres llegamos con conocimientos acerca del parto
respetado a nuestros partos?
▪ ¿Qué posibilidades tienen las mujeres de que sus derechos sean efectivizados
durante el trabajo de parto y/o parto/cesárea?
Para poder avanzar en el abordaje de estos interrogantes, los propósitos de
investigación son:
Objetivo general:
Conocer las experiencias de violencia obstétrica de las mujeres adultas
primíparas, que asisten a las maternidades públicas y privadas para la asistencia al
parto / cesárea, en el conurbano bonaerense, desde el año 2017 al 2020.
Objetivos específicos:
▪ Caracterizar la violencia obstétrica como una de las expresiones de la violencia de
género.
▪ Describir el paradigma de salud y su expresión en la salud sexual y reproductiva
en el sistema de salud público y privado.
▪ Indagar el nivel de conocimiento de las mujeres primíparas acerca del parto
respetado y sus percepciones en torno a la asistencia al parto.
▪ Reflexionar acerca de las expresiones de violencia obstétrica que se dan en las
maternidades públicas y privadas.
Para poder concretar los propósitos delimitados, y en clave de fundamentación
metodológica, cabe recuperar que los antecedentes de este trabajo dan cuenta que la
violencia durante la asistencia al parto o cesárea persiste en toda América Latina. A
partir de ello, decidimos explorar las experiencias de las mujeres en el conurbano
bonaerense, con la premisa de que encontraremos la misma variable en los relatos
de este territorio. Afirmamos lo antedicho, en tanto la violencia sobre los cuerpos de
las mujeres y disidencias, trasciende las experiencias singulares, respondiendo a la
estructura patriarcal capitalista que organiza nuestra sociedad. No obstante, nos
preguntamos acerca de cuáles son las particularidades de las vivencias de las mujeres
que paren en los subsistemas públicos y privados del conurbano. En concordancia
con ello, se entretejen reflexiones teóricas con verbalizaciones de las entrevistadas a
lo largo de todo el trabajo.
10
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
11
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
3 Se utiliza el término casos para respetar la terminología del autor, aunque en este trabajo adherimos
al término situación: donde está situado algo.
4 También llamada adultez joven.
5 Organización Mundial de la Salud.
6 Existen también otras modalidades de vivenciar los partos por fuera de las instituciones de salud, tales
como los partos planificados en domicilio, partos planificados en domicilio sin asistencia, parto no
12
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
planificado en domicilio sin asistencia. No obstante, estos requieren otro marco teórico que excede a
este trabajo.
7 Grupo público en la Red Social Facebook llamado Trabajo Social UnLu Estudiantes, docentes y
graduados.
13
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
14
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
15
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
16
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
realidad se distinguiría de modo radical y esencial del mundo fenoménico: en tal caso,
el mundo de la realidad sería para el hombre -el otro mundo-" (1967:3).
Siguiendo a Pontes (2003) se entiende que las mediaciones, permiten captar las
determinaciones y relaciones de los fenómenos sociales. Desde la perspectiva de
totalidad, todo es complejidad, cada totalidad parcial, articulándose mediante múltiples
mediaciones. En síntesis, si es posible acceder a la esencia, a través de lo
fenoménico, entendemos que el ámbito por excelencia donde se da esto último, es la
vida cotidiana. Al respecto Netto refiere:
17
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
9 Marx (1967) definió a la plusvalía en El Capital como el valor no pagado del trabajo del obrero u
obrera, que será apropiado por las clases dominantes. Originando así la esencia de la explotación o
acumulación capitalista.
10 Cuando se transforma la naturaleza mediante el trabajo.
18
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
podemos identificar que en todo modo de producción existió la pobreza, pero que
siempre estuvo ligada a la escasez de recursos.
En cambio, con el desarrollo de las fuerzas productivas, aumenta la riqueza
producida, pero al mismo tiempo aumenta el empobrecimiento de la masa de
población que trabaja. Entonces, pobreza y riqueza son dos caras de la misma
moneda, por lo que para que deje de existir una, debe dejar de existir la otra. Esto
indica que, la pobreza de ninguna manera es eliminable en el orden del capitalismo.
Se puede apaciguar, pero bajo ningún concepto acabar con ella, ya que el capitalismo
normalmente funciona generando riqueza y pobreza.
Como se hemos venido diciendo, Marx (1967) sostiene que, a diferencia de las
anteriores clases oprimidas, los medios de producción son ahora propiedad privada
de la burguesía, mientras el proletariado es absolutamente desposeído, siendo ahora
la clase trabajadora, doblemente libre: de los medios de producción y de vender su
fuerza de trabajo. Estas “libertades”, además, traen consigo la posibilidad de morir de
hambre11.
Al hablar del capitalismo, hablamos de un modo de producción que todo lo
destruye en la medida de obtener y maximizar sus ganancias. A decir de Marx: “Por
tanto, la producción capitalista solo sabe desarrollar la técnica y la combinación del
proceso social de producción socavando al mismo tiempo las dos fuentes originales
de toda riqueza: la tierra y el hombre” (1978: 423).
Por lo cual, siguiendo a Iamamoto (2007), se ubica la génesis de la "Cuestión
Social" en la sociedad burguesa en el carácter colectivo de la producción, en
contraposición a la apropiación privada de la propia actividad humana.
Resulta importante caracterizar que la “Cuestión Social”:
“(…) No es otra cosa que las expresiones del proceso de formación y desarrollo
de la clase obrera y de su ingreso en el escenario político de la sociedad,
exigiendo reconocimiento como clase por parte del empresariado y del Estado.
Es la manifestación, en el cotidiano de la vida social, de la contradicción entre
el proletariado y la burguesía (…)” (Netto 1997:5).
11 En este trabajo consideramos la pobreza una de las formas de violencia económica y política.
19
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
20
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Karl Marx (1978) postula que necesariamente este sistema será acabado, pero
difícilmente la burguesía entregue el poder de manera pacífica y armoniosa. Por el
contrario, si las clases dominantes llegaron al poder de manera violenta, según el autor
es del mismo modo que estas pueden ser derrocadas. Al respecto afirma:
“La historia del proletariado va pasando por distintas etapas (…). Al principio son
obreros aislados; luego los de una fábrica; después los de toda una rama de
trabajo, los que se enfrentan en una localidad, con la burguesía que personal y
directamente les explota. Sus ataques no van sólo contra el régimen burgués de
producción, van también contra los propios instrumentos de producción. Los
obreros sublevados, destruyen las mercancías ajenas que les hacen la
competencia, destrozan las máquinas, prenden fuego a las fábricas, pugnan por
volver a la situación ya enterrada del obrero medieval” (Marx y Engels, s.f.).
21
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
12El autor hace esta división a fines metodológicos, pero explica que ambas esferas se encuentran en
constante relación dialéctica.
22
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
es insuficiente para describir nuestra sociabilidad. Por lo que tomaremos los aportes
de Marx, pero los enriqueceremos en base a lo desarrollado por las autoras que han
profundizado al respecto, ampliando hacia las múltiples formas de dominación.
Autoras como Silvia Federici (2018), han analizado detalladamente aquellos
límites que presenta la teoría de Marx, recuperando y resaltando el papel de las
mujeres. La misma, señala que Marx, describe tanto el capitalismo como la lucha de
clases, desde la óptica del trabajador industrial asalariado, de la fábrica, de la
producción de mercancías y del sistema del salario. De ahí que, al pensar en la posible
rebelión, Marx se limita a encuadrarla a los hombres, en el sentido estricto de la
palabra.
Retomamos el interrogante de la autora: ¿Guarda Marx silencio sobre el trabajo
doméstico porque no veía en él, fuerzas sociales capaces de transformarlo en una
dirección revolucionaria? Federici (2018) afirma que es necesario ampliar las teorías
marxistas a las formas de explotación de las mujeres específicamente, en tanto no se
puede estudiar la historia desde el punto de vista de un sujeto universal, único, dado
que ello termina por imponer la cosmovisión hegemónica impartida por las clases
dominantes.
Por otro lado, en el anterior apartado, hemos caracterizado la vida cotidiana
como el ámbito de la reproducción. Pero ¿Qué entendemos por reproducción? Para
comprender dicha categoría, resultan pertinentes los aportes de Federici (2018), quien
enfatiza el rol central de las mujeres como encargadas de la reproducción de la mano
de obra en trabajos como el doméstico, la sexualidad y la procreación entre tantos
otros. Rechazando la teoría de la reproducción únicamente comprendida a los límites
del sistema salarial y el trabajo dentro de las fábricas.
La economía feminista, ha demostrado la manera en que el capitalismo logra
exitosamente imponer que estos trabajos no producen valor, y son secundarios,
naturales y se encuentran caracterizados por el amor e instinto13. Las autoras Icart y
Velazco (2016) señalan que el campo del trabajo asalariado en tanto campo
mayoritariamente masculino ha invisibilizado su necesaria relación con las actividades
de cuidado, menos mercantilizadas pero básicas para la sostenibilidad de la vida, las
cuales han sido asignadas a lo femenino, y asociadas a la supuesta eficacia de las
13Sin ir más lejos, hasta nuestros días el trabajo doméstico no es tenido en cuenta por ninguna clase
de contabilidad nacional.
23
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
24
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
“El hombre tiene un nivel de vida más alto que la mujer por lo que se refiere al
consumo de artículos de lujo, al tiempo de ocio y a los servicios personalizados.
Un enfoque materialista no debería ignorar este punto crucial. De aquí se
desprende que el hombre tiene un interés material en que continúe la opresión
de la mujer. A largo plazo, ésta puede ser una “falsa conciencia”, ya que la
mayoría de los hombres podrían beneficiarse de la abolición de la jerarquía
dentro del patriarcado. Pero a corto plazo esto equivale a controlar el trabajo
de otra gente, control al que el hombre no está dispuesto a renunciar
voluntariamente.” (1996:7)
Entonces, según la autora, la dominación de los hombres por sobre las mujeres,
principalmente alude a la exclusión de estas últimas del sistema del trabajo asalariado,
relegándola al ámbito de lo doméstico, y por consiguiente a las tareas de reproducción
que se dan dentro del hogar, mencionadas previamente. Si analizamos estos aportes
en base a nuestra actualidad, por un lado, podemos afirmar que -en contraposición a
lo que plantea el feminismo liberal-, la creciente participación femenina en el mercado
laboral siempre está acompañada del mantenimiento de trabajo doméstico y/o
explotando a otras mujeres de manera precarizada.
En segundo lugar, las relaciones sociales patriarcales dentro del capitalismo no
se restringen al ámbito aparentemente privado, familiar-doméstico; sino que se hayan
tanto en el trabajo asalariado como en todos los ámbitos de la vida. Por esto, es
menester desnaturalizar la escisión de lo privado y lo público, porque ambas
responden a la misma desigualdad. Teniendo en cuenta que esta fragmentación fue
promovida con el objetivo de instalar la familia nuclear 15 , garantizando así, la
reproducción de la clase trabajadora y la reproducción del trabajo16.
Ahora bien, en tal sentido, la autora Iris Young, postula que el patriarcado:
15 Netto (1997) describe cómo la familia nuclear dificultó o demoró asumir la conciencia de clase, desde
que se dejó atrás la colectivización de las tierras y las familias extensas.
16 Por eso también, la norma de la heteronormatividad que permita procrear biológicamente
17 La teoría dual, según Young (1992) explica y entiende, por un lado, el capitalismo con su
25
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
18A decir de Marx (1967) aunque el capital tiende a aumentar la población trabajadora, (ya que en ello
radica la posibilidad de aumento de la plusvalía), de forma constante, convierte a una parte de ella en
26
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
La cacería de brujas coincide en el tiempo con el periodo en el que surge la ciencia, abarca el final de la
Edad Media, el Renacimiento, y se extiende hasta el siglo XVII, periodos clave en la edificación de la ciencia
moderna. Esto significa que ocurrieron simultáneamente dos fenómenos. Por una parte, la destrucción de una
línea de conocimiento: el de las mujeres. Y por otra, el nacimiento de otra forma de conocimiento que
acompañaría el desarrollo de la civilización occidental, que surge con una marca distintiva: la ausencia de las
mujeres.
(Norma Blázquez 2011: 32)
mano de obra excedentaria, la cual funciona como presión a quienes están actualmente asalariados/as,
hasta que esté en condiciones de aprovecharla. Es una contradicción inherente al capitalismo,
independientemente del hecho de que, según la coyuntura y el lugar, se manifiesta bajo formas y grados
diferentes, podemos afirmar que el ejército de reserva se compone por una cantidad enorme y creciente
de personas, que se encuentran ya sea paradas, infraocupadas o extremadamente precarizadas.
27
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
19 “La bipedestación trajo consigo ciertas modificaciones en la estructura de la pelvis: la vagina no está
alineada con el útero, sino que forma un ángulo recto con éste, así que el canal de parto presenta
distintas dimensiones y dificultades en cada zona, el bebé (cuya cabeza mide unos 35 cm de diámetro
aproximadamente), para salir, va realizando diversas rotaciones con su cuerpo, lo que hace que el
parto humano resulte un acto complejo y largo. Un parto humano dura de media nueve horas, frente a
las dos horas que suele durar el de cualquier primate”. (Shipman, 2014: 38).
28
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
“Las mujeres siempre han sido sanadoras. Ellas fueron las primeras médicas y
anatomistas de la historia occidental. Sabían procurar abortos y actuaban como
enfermeras y consejeras. Las mujeres fueron las primeras farmacólogas con
sus cultivos de hierbas medicinales, los secretos de cuyo uso se transmitían de
unas a otras. Y fueron también comadronas que iban de casa en casa y de
pueblo en pueblo. Durante siglos las mujeres fueron médicas sin título;
excluidas de los libros y la ciencia oficial, aprendían unas de otras y se
transmitían sus experiencias entre vecinas o de madre a hija. La gente del
pueblo las llamaba -mujeres sabias-, aunque para las autoridades eran brujas
o charlatanas. La medicina forma parte de nuestra herencia de mujeres,
pertenece a nuestra historia, es nuestro legado ancestral” (Ehrenreich y English
1988: 7).
20
Sin embargo, Sadler (2004) explica que hubiese sido relativamente muy sencillo capacitar a las
matronas en medidas de higiene.
29
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Cuando los médicos desplazaron a las mujeres del ámbito de la salud en general
y de la asistencia a los partos en particular, de manera fenoménica, ello parece
justificarse debido a una práctica más científica y “objetiva”. Sin embargo, como
explica García (2018), las curanderas y matronas habían acumulado años de práctica
empírica que los médicos despreciaban. Por lo que, en sus orígenes, la medicina
como única habilitada a “curar”, no fue más que una imposición de la clase dominante,
teniendo en cuenta que, en ese entonces, la carrera duraba entre algunos meses a
dos años, y cuyos estudios jamás se completaban con una práctica, siendo la
formación enteramente teórica, pero a su vez muy aferrada a doctrinas dogmáticas.
La bibliografía elaborada por autoras feministas (García 2018, Canevari 2011,
Campiglia 2018, Sadler 2004) ha criticado ampliamente la idea de la supuesta
objetividad de las ciencias médicas, argumentando que esa premisa legitima
proyectos científicos que perpetúan la existencia de poderes sociales hegemónicos,
que bloquean y excluyen a todos aquellos sectores de población exentos de poder.
Como explica Foucault (1975), la medicina no es un campo de conocimiento puro
y universal, sino que está condicionado y visto por los ojos del momento histórico, y
los sistemas económicos y políticos en los que se inscribe. Y agrega:
Con esto último, damos cuenta de que no es menor la base de poder 21 que
posee esta ciencia, ya que como veremos más adelante, esta radica en establecer los
límites de qué será sano o normal y qué será patológico22.
21 Foucault (1997), uno de los pensadores contemporáneos que más ha desarrollado al respecto,
sostiene que el poder es algo que está en la sociedad, que a veces se personaliza, pero que actúa
permanentemente en nosotros, determinándonos, ordenándonos, tanto en lo mental, consciente o
inconsciente, en el cuerpo, en las fantasías, etc. Nos predetermina, nos impide pensar en otras
posibilidades que las promovidas por quienes detentan el poder. En este sentido, existe una acción del
poder en nuestra conciencia permanente, unida a la idea de culpa, si no cumplimos con lo propuesto.
En concordancia con ello, podríamos afirmar que nuestra posibilidad real y material de libertad se
encuentra bastante acotada o al menos sumamente condicionada por la hegemonía que impongan los
poderes dominantes.
22 Como veremos en los próximos apartados, se encuadran más aspectos en lo que concierne a la
30
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Como contrapartida, por supuesto que las mujeres, no han entregado sin más la
base de poder y el dominio sobre sus propios cuerpos, sino que se emprendió una
autentica resistencia a la imposición de las relaciones capitalistas y a la expropiación
del poder obtenido en virtud de la sexualidad, el control sobre la reproducción y “el
arte de curar”. Es así como el Estado de la Europa medieval, en respuesta
aleccionadora, impulsa una de las mayores masacres contra las mujeres de la historia:
La caza de Brujas.
“Se calcula que más del 80 % de las personas juzgadas y ejecutadas en Europa
en los siglos XVI y XVII por el crimen de brujería fueron mujeres” (Fajardo 1977:60).
Dando como resultado, cientos de miles de mujeres 23 asesinadas, quemadas,
colgadas y torturadas. Recordemos nuevamente que este fenómeno, no era una
especie de linchamiento popular, sino que eran ejecuciones planificadas y llevadas a
cabo por el incipiente Estado, de la mano del poder religioso, valiéndose de
herramientas legales. Frente a esto nos preguntamos ¿Qué implicaba el poder y
autonomía de las mujeres acusadas de brujería en ese momento histórico? ¿Acaso
representaba una amenaza política, sexual y religiosa para la Iglesia, y para el
Estado?
23 En la bibliografía existente, las precisiones respecto a este suceso son muy heterogéneas; algunos
investigadores sostienen que entre los siglos XIV y XVII se condenó a la hoguera alrededor de un millón
de mujeres acusadas de brujas. Incluso algunas investigaciones estiman que fueron varios millones de
víctimas.
24 En la actualidad, según Campiglia (2018) una gran cantidad de las mujeres que forman parte del
31
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
“Existen siete métodos por medio de los cuales (las brujas) infectan de brujería
el acto venéreo y la concepción del útero. Primero, llevando las mentes de los
hombres a una pasión desenfrenada; segundo, obstruyendo su fuerza de
gestación; tercero, eliminando los miembros destinados a ese acto; cuarto, con-
virtiendo a los hombres en animales por medio de sus artes mágicas; quinto,
destruyendo la fuerza de gestación de las mujeres; sexto, provocando el aborto;
25“(El martillo de los brujos) Escrito en 1486 por dos monjes dominicos, convirtiéndose en el manual
indispensable y la autoridad final para la Inquisición, para todos 'los jueces, magistrados y sacerdotes,
católicos y protestantes, 'en la lucha contra la brujería en Europa” (García Fernandez 2014: 10)
32
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
del cuerpo de las mujeres con el objetivo de convertirlas en una verdadera máquina
de gestar y parir.
Es por ello, que consideramos realmente muy llamativo, que la caza de Brujas
no aparezca frecuentemente en la historia del modo de producción capitalista, a pesar
de constituirse en, como expresa Federici (2018), uno de los acontecimientos más
importantes de su desarrollo.
Silvia Federici (2010) en El Calibán y la bruja, demuestra la relación existente
entre este suceso y el desarrollo de una nueva división sexual del trabajo, donde
quedan las mujeres relegadas al trabajo reproductivo; por lo que como se precisó
anteriormente, la caza de brujas es un eje central de la acumulación y la formación
del proletariado. La autora expresa que la caza de brujas fue también:
Como narra Federici (2010) la mujer paso de ocupar el rol social de la bruja,
salvaje y peligrosa, a considerárselas como seres pasivos, asexuados, más
obedientes y hasta moralmente mejores que los hombres, incluso capaces de ejercer
una influencia positiva sobre ellos.
Concluyendo este apartado, concluimos que la caza de brujas finaliza en la
última parte del siglo XVII, cuando la clase dominante se aseguró de haber destruido
la base de poder de las mujeres de la Europa previa al capitalismo. Pero ahora sí, la
medicina tenía el terreno allanado para su gran entrada triunfal.
33
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
“Si en la Edad Media las mujeres habían podido usar distintos métodos
anticonceptivos y habían ejercido un control indiscutible sobre el proceso del
parto, a partir de ahora sus úteros se transformaron en territorio político,
controlados por los hombres y el Estado: la procreación fue directamente puesta
al servicio de la acumulación capitalista” (Federici, 2010:139).
26 Agregamos que además se intersectan con múltiples variables (económica, política, laboral, etc.).
34
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
35
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
27 Entonces, entendiendo al lenguaje como político, en esta investigación optamos por utilizar la
categoría mujeres, ya que nuestra muestra está justamente conformada por mujeres CIS. Sin embargo,
partiendo de que no solo las mujeres podemos gestar/parir, sino que también lesbianas, no binaries y
varones trans, consideramos que el término cuerpo gestante puede invisibilizar nuestra realidad
material y sexuada, limitando nuestra existencia a la gestación y parto: Lo que no se nombra, no existe.
Y si no existe, solo por dar un ejemplo ¿Cómo tendrá, un equipo de salud, las herramientas para
brindarle asistencia a un varón trans en trabajo de parto?
Si bien se comprende el uso de la economía del lenguaje, sustituir el término mujeres, no binaries,
varones trans y/o lesbianas por "persona gestante" y/o "cuerpo gestante” o incluso “útero-portante”,
representa una fragmentación y reducción del plano reproductivo en detrimento de la integralidad de
las personas. Este planteamiento resulta funcional a la invisibilización de las mujeres y disidencias, y
la perpetuación de su explotación sexual y reproductiva.
28 Tales como el fórceps.
36
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
La autora afirma que los hospitales se convirtieron en el lugar donde los valores
de la obstetricia moderna se pusieron en práctica. Ello implicó el uso de tecnología y
medicaciones en los nacimientos con el objetivo de minimizar los riesgos
potenciales. Pero también se modificó con ello, el tiempo que mujeres y personal
médico dedicaban al proceso de parto.
Recordemos que estamos en presencia de un contexto de revolución industrial,
por lo que es un momento clave en el desarrollo de la medicina ya que incorpora
sustancialmente la tecnología, lo cual favorece que esta obtenga la hegemonía en
torno a “las prácticas apropiadas”.
Por ello el incremento de burocratización y estandarización de la asistencia
también tuvo lugar, lo cual analizaremos más adelante. También es el momento de la
“modernización” y “el progreso”, donde el estado reorganiza la intervención sobre la
“Cuestión Social”, potenciando los componentes de naturalización y moralización. La
ciencia se reconfigura en ese mismo sentido
En los hospitales, los cuerpos de las mujeres eran considerados territorio digno
de todo tipo experimentación. Por lo que, en la práctica médica, como Sadler (2004)
y García (2018) desarrollan, los primeros obstetras se dedicaron a realizar
absolutamente todo tipo de intervenciones.
De la mano de la institucionalización progresiva del parto, siendo ahora el médico
quien dirige la situación, para comodidad de este, las autoras explican que se instala
la obligación de acostarse para la revisación (tactos) y casi todas son promovidas a
parir de forma supina29 y con las piernas levantadas. Magnone Alemán (2010) afirma
que el sistema pasa por alto el dolor y pretende cuerpos dóciles para ser intervenidos.
El poder simbólico del mandato médico es tan fuerte que algunas mujeres pierden la
noción intuitiva de qué tipo de posiciones las favorecerían en el trabajo y proceso de
parto.
Es esta posición, sumada a la inmovilización durante el trabajo de parto, lo que
conllevó, entre otros factores, a que este se desarrolle con dolores de una gran
magnitud30; cuestión que increíblemente, siglos después, pese a que (como veremos
más adelante) la evidencia científica viene desaconsejando reiteradamente desde
hace siglos, se mantiene intacta:
37
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
“Me acostaron. Yo quería salir de esa cama, no quería estar acostada (..) Yo ya no podía
controlarme más en las contracciones: ¡No me podía controlar a mí misma! (…) Yo pensé que
practicarían con una otras posturas y no estar ahí en la cama acostada a solas, esperando en una
camilla, teniendo las contracciones, esperando que dilatara más”
Gala, 34 años
Entrevista realizada el 6 de agosto de 2020
31Según Sadler (2004) el término paciente alude a quien sufre y tolera los trabajos y adversidades sin
perturbación del ánimo, a la persona que padece física y corporalmente; el/la doliente, el/la enfermo/a,
y especialmente quien se halla bajo la atención médica.
38
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
39
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
40
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
En este sentido, adherimos a lo propuesto por Quijano (2000) quien rompe con
el “Eurocentrismo”, afirmando que Europa no sería potencia hoy en día, si no fuese
gracias a la emergencia de América. Propone que es a partir de la conquista de
América como territorio, lo que posibilita que emerja un nuevo orden geopolítico y
económico, otorgándole así, centralidad en esta última.
Afirmamos que este fenómeno configura hasta nuestros días nuestra
sociabilidad, en concordancia con el término utilizado por el autor como Colonialidad
del poder39, dando cuenta de la colonización en clave de un proceso de larga duración,
en contraposición a pensarlo como un hecho histórico que empieza y termina. La
Colonialidad resulta en la imposición de un ordenamiento, basado en patrones de
poder que con clasificaciones sociales operan en múltiples dimensiones. “Venimos de
violaciones a indígenas”, se lee en el cuerpo de mujeres en manifestaciones
38Territorio que curiosamente ya estaba descubierto por millones de personas que vivían en él
39Quijano (2000) se contrapone a las corrientes teóricas de los estudios “postcoloniales”, dado que
postula la idea de continuidad histórica.
41
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
En este sentido, según la autora, los cuerpos de las mujeres y sus subjetividades
requieren ser domesticados y dominados para llevar adelante la empresa. Es
entonces, que el Modelo Médico Hegemónico amplía progresivamente su injerencia
42
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
40Por esos motivos, Menéndez (1983: 3) realiza múltiples cuestionamientos al MMH: “ (el) aumento del
costo de la atención de la salud…; el aumento correlativo de la “intervención” médica, una de cuyas
expresiones más visibles y costosas son las inter quirúrgicas, que en algunos casos supone normalizar
determinado tipo de intervenciones como la forma estandarizada de atención; el aumento correlativo
de la iatrogenia, así como de la ineficacia; el predominio de los criterios de productividad y rendimiento
43
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
44
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
45
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Un claro ejemplo de este proceso sucede con la muerte, suceso tabú en nuestros
tiempos, el cual lejos de ser visualizado como parte de la vida, es más bien una
especie de fracaso de la medicina o las ciencias. Así mismo, sucede con el proceso
de envejecimiento. Aunque llevado al extremo si quien envejece no es un varón.
Ahora bien, esta medicalización se va a ver fuertemente exacerbada cuando se
trate de otras identidades sexo-genéricas que no sean la de un varón, CIS y
heterosexual. No obstante, dado que en este trabajo recortamos nuestro universo a
mujeres CIS, de acuerdo a nuestro problema de investigación, profundizaremos sobre
la medicalización de los cuerpos de estas.
En el anterior apartado, explicamos que el Modelo Médico Hegemónico
incrementa cada vez más sus recursos tecnológicos. Consideramos que como
contracara de los avances que ello permite, también existe una creciente
fragmentación principalmente de los cuerpos de las mujeres, que radica en una
perspectiva basada exclusivamente en los aspectos biológicos. Así mismo, este
proceso es continuado por una fuerte patologización. Y no nos referimos sólo de los
momentos del parto/cesárea y gestación. Sino que estamos en presencia de una
enajenación de todo aquello que atañe a la vida sexual de las mujeres. Como bien
explica Patricia Schwarz:
46
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Fue como vergonzoso, es vergonzoso en realidad. Me acuerdo viste, cuando vieron todo mi cuerpo,
desnuda no sé por qué. Si bien una se depila y todo, en el momento cuando vieron mi cuerpo, no sé
porque, se rieron de mí, se miraron entre ellas y se rieron. Dijeron, dame una presto barba y como
que cortaron bello en la panza. Me dio mucha vergüenza, porque no me dijeron nada digamos. Pero
se reían entre ellas de mí. Lo que sentí es como que dijeron, la panza de ella es (…) Como que se
tendría que haber depilado más. Me acuerdo de eso y es vergonzoso.
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto de 2020.
47
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Todo esto parece indicar que el cuerpo femenino no sería el ideal, y que deberá
someterse a una serie de prácticas de disciplinamiento, que abarcan desde mandatos
impuestos a través de todos los medios de comunicación, hasta las expresiones más
aberrantes de violencias como las que ejecutó el personal de salud que violentó a Luz,
minutos antes del nacimiento de su primer hijo.
Dimos cuenta anteriormente, que nuestra sociedad, tiene diferentes mecanismos
de disciplinamiento y de domesticación para con las mujeres: El capitalismo se adueñó
de su fuerza de trabajo, mientras el patriarcado de sus cuerpos.
Ahora bien, el modus operandi de la medicina para disciplinar toda persona cuya
identidad sexo – genérica42 no se corresponda con la de un varón CIS heterosexual,
es justamente la patologización de sus cuerpos.
Es entonces por ello, que la vida sexual femenina se encuentra fuertemente
medicalizada. Como afirma García (2018) las mujeres son domesticadas para que
teman lo que en sus propios cuerpos se produce, como si se tratara de una bomba de
relojería a punto de estallar. Domesticar a las mujeres, expresa la autora, en el miedo,
es una estrategia exitosa de control, para obtener el “consentimiento” frente a diversas
prácticas.
Esto implica la manipulación en torno a todo lo que atañe a la sexualidad. “Las
mujeres tienen órganos que no sienten como suyos, cuyas funciones les son ajenas,
y de los que disponen los entendidos en el terreno que sea” (García 2018:94 citando
a Sau, 2000). La sexualidad femenina toda, se ha patologizado, y pasado por una
especie de “filtro de enfermedad”, para desnormalizar lo que deberían ser
considerados estados naturales y/o saludables de la vida de las mujeres.
Es en esa misma lógica, que el Modelo Médico Hegemónico, desde la
institucionalización del parto, ha construido de este un evento médico.
Contrariamente, desde nuestra perspectiva afirmamos que el parto es un hecho
sexual, parte de la vida sexual de las mujeres. Paula Quevedo (2012) afirma que la
destrucción de la sexualidad femenina afecta a toda la maternidad, no sólo al parto.
Puesto que destruye también la posibilidad de placer de la gestación, de la
exterogestación43 y de la lactancia. A decir de Fernandez del Castillo:
42 Si bien en este trabajo realizamos el recorte a Mujeres CIS, es preciso ampliar la mirada, por lo que
afirmamos que la patologización se extiende a lesbianas, no binaries y varones trans, que pueden tener
como denominador común el hecho de menstruar, entre otros.
43 Ser llama exterogestación al periodo que abarca los primeros 9 meses después del nacimiento.
48
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Por otro lado, a nuestro juicio, se suma la variable de que en el occidente impera
una fuerte subestimación a todo lo que es natural, así como todo lo que respecta al
autoconocimiento. Desde la época de la modernidad a esta parte, estos aspectos, de
manera fenoménica, se presentan como contrarios a los criterios válidos, al control, a
las ciencias; por lo que se va a promover un fuerte rechazo y desvalorización de estos,
estableciéndose una falsa dicotomía entre ellos. A causa de esto último, hay un gran
desconocimiento sobre cómo funcionan los propios cuerpos, lo que no ayuda
precisamente a salir de esta opresión.
Dijimos que la medicalización no sucede solo durante el evento reproductivo,
pero si podremos ver su expresión más feroz en él. Según afirma García (2018), esto
sucede a partir de un saber-médico inscripto en la necesidad de control social del
cuerpo y la sexualidad femenina. Se ha aceptado como “natural” reducir la sexualidad
de las mujeres a los aspectos reproductivos y por lo tanto a la maternidad. Esta
manera de ver la sexualidad de las mujeres como una función supeditada a la
reproducción, determina que les sea negado el derecho al erotismo y al placer, y se
les adjudica por completo y de manera unilateral las tareas de crianza.
Esto último, se traduce en la perspectiva materno – infantil, a partir del cual,
históricamente las instituciones de salud funcionan. Este clásico enfoque, según
Lopez (2003) está centrado en la figura de la mujer en tanto madre y del niño/a en
tanto hijo/a, estando ausente en esta relación, la participación del varón en el ejercicio
de la paternidad y desligándolo por completo de la planificación familiar 44. Una clara
muestra de este enfoque es la toma de posición de dejar totalmente afuera a los
varones-padres45 del suceso del nacimiento:
49
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Yo necesitaba alguien que me acompañe no quería estar sola. Quería que estuviera mi pareja
conmigo. (…) Les pedí también que, si se podía quedar conmigo después de la cesárea, durante la
noche. Y me dijeron que no, que un hombre no podía pasar, que eran todas mujeres las que estaban
ahí.
Gala, 34 años.
Entrevista realizada el 06 de agosto de 2020.
50
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
a la falta de dolencias o enfermedades. Tiene que ver con que las personas estén
aptas para tener relaciones sexuales gratificantes y enriquecedoras, sin coerción y sin
temor de infección ni de embarazos no deseados; poder regular la fertilidad sin riesgos
de efectos secundarios desagradables o peligrosos, tener una gestación y parto
seguro y criar hijos/as saludables. La OMS sostiene que existen factores como la
pobreza, el trabajo, el acceso a la salud y educación, las desigualdades de género, la
violencia contra las mujeres, la baja condición social y personal, la falta de
oportunidades, y factores de índole demográficos, como la formación temprana de
pareja, fecundidad y envejecimiento que afectan a la salud de las mujeres.
Por lo tanto, se habla de salud no sólo en términos de ausencia de enfermedades
sino de “bienestar”, definición que va más allá del Modelo Médico Hegemónico que se
centra en la enfermedad. Esta perspectiva de salud incorpora las condiciones
sociales, económicas, ambientales, emocionales y culturales que se intersectan
respecto al bienestar de las mujeres.
Sin embargo, al recorrer las definiciones de la OMS nos preguntamos ¿Esta
definición adscribe también a mujeres y disidencias?
En este sentido se torna fundamental hacer un análisis que permita iniciar una
deconstrucción de la división sexual del trabajo, en clave de perspectiva de género,
en vista de políticas de salud que piensen a la mujer como sujeta activa y soberana
de su cuerpo.
En definitiva, incorporar la perspectiva de género a las políticas de salud, pero
fundamentalmente en materia de salud reproductiva habla de una decisión ético –
política que permite avanzar hacia un corrimiento del enfoque tradicional materno-
infantil, que sin duda ha impactado en la anulación de las mujeres como sujetas
activas durante el parto o cesárea, pero también sobre la invalidación para poder
decidir autónomamente sobre su salud sexual y reproductiva, en todas sus
expresiones.
A modo de síntesis, los cuerpos femeninos como territorio de control y de
disputa, han sido objeto de mitos, representaciones y prácticas. El Modelo Médico
Hegemónico, disputa ese territorio, valiéndose de tecnologías diversas, así como de
su base poder, la cual radica en el conocimiento-saber autorizado.
En consecuencia, observamos que la medicina refuerza los estereotipos
tradicionales de género legitimándolos a partir de las diferencias biológicas entre
mujeres y varones, siendo estas últimas objeto del ejercicio de múltiples
51
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
52
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
53
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Por eso era ir todo el tiempo a sacarme sangre y tener como un nudo en la garganta, porque
según ella se me podía morir en cualquier momento si yo hacía algo mal. Por lo menos esta vez
fue cuando más me reto porque supuestamente yo no estaba como cuidándome, ni cuidando a
mi hijo, pero bueno.
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto de 2020
47De acuerdo con la RAE la palabra embarazo se define como: impedimento, dificultad, obstáculo;
como encogimiento, falta de soltura en los modales o la acción; y como estado en que se halla la
hembra gestante. A lo largo de este trabajo, optamos por utilizar el término gestación, como la acción
de gestar: llevar y sustentar la madre en su seno el embrión o feto hasta el momento del parto. También
se entiende como: preparar o desarrollar algo, especialmente un sentimiento, una idea o una tendencia
individual o colectiva.
54
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
48 Según Davis Floyd (2004) el modelo tecnocrático puede ser sintetizado en doce principios básicos:
1) Separación mente cuerpo: se asume que para conocer mejor algo es preciso aislarlo de su contexto.
2) el cuerpo como máquina: Esta metáfora hace distinción de género, mientras el cuerpo masculino es
tomado como la máquina Ideal, el cuerpo femenino se veía como inminentemente defectuoso al
alejarse "del modelo".
3) Ver al paciente como un objeto y 4) Distanciamiento del médico: si el paciente es un objeto' no
importa su opinión y sentimientos; se desecha la posibilidad de que esté
intelectualmente incluido en la conversación y decisiones, a pesar de ser la persona protagonista del
proceso de salud-enfermedad. El médico realiza una especie de alienación con respecto de su
paciente, elige conversaciones cortas y en donde no se comprometa afectivamente.
5) Diagnóstico y tratamiento desde afuera hacia adentro (reparando disfunciones): el
impulso racionalista promovió un abordaje mecanicista, materialista e intervencionista en la medicina
En el parto esto se traduce en el uso de tecnologías de diagnóstico y tratamiento que tratan de
“regularizar” los procesos que el sistema médico entiende no se están produciendo en tiempo y forma.
6) Organización jerárquica y estandarización del cuidado: la forma más básica es la
subordinación del individuo a la institución. La organización del sistema necesita que
los/as pacientes respeten las rutinas hospitalarias.
Finalmente existe el sistema de especializaciones médicas que se coloca por encima de la atención
primaria e instaura a la interna médica jerarquías dentro de las especialidades. En intervención y alta
tecnología para parir.
7) Autoridad y responsabilidad inherente al médico, no al paciente: cuando el médico tiene la autoridad
el paciente carece de responsabilidad. Muchos médicos creen que solo a ellos les corresponde el curso
de un tratamiento y que los pacientes deben obedecer.
8) Sobrevaloración de la ciencia y de la tecnología: este modelo expresado en la obstetricia utiliza
rutinariamente alta tecnología respondiendo a un propósito más profundo que el de producir bebés
sanos, tiene que ver con uno de los aspectos de fuerte arraigo cultural que constantemente surge a lo
55
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
largo del proceso de embarazo y parto: el miedo frente a lo incontrolable de un proceso natural liderado
por los cuerpos de las mujeres.
9) Intervenciones agresivas con énfasis en resultados a corto plazo: en un modelo que cree en la cura
desde afuera hacia adentro en general las enfermedades crónicas no pueden ser curadas, lo que se
trata es de aliviar los síntomas. Y esto se hace a través del uso de tácticas agresivas con alto nivel de
efectos secundarios.
10) La muerte como derrota: la muerte es interpretada como la derrota de las capacidades humanas
frente al poder de la naturaleza. No se la contempla como parte de la misma vida.
11) Sistema guiado por las ganancias: como en casi todas las dimensiones de la sociedad en un
contexto capitalista, el cuidado humano se guía por la mercantilización y la acumulación de ganancias
para el sistema médico.
12) La intolerancia hacia otras modalidades de curación humana: cuando existen sistemas
hegemónicos, como en salud el tecnomédico, los demás sistemas son devaluados a "alternativos".
49 Ver apartado 3.4.
56
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Yo le decía como que estaba muy nerviosa, que se me estaba subiendo la presión, porque realmente
estaba muy nerviosa y ella miraba ahí y me decía: no, tranquila, un poquito. Es normal, es normal.
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto de 2020
57
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Para concluir, como dijimos, a nuestro juicio resultaría ingenuo no reconocer los
innegables beneficios que los avances tecnológicos han logrado conquistar en el
campo de la medicina. Sin embargo, las prácticas de rutina y de protocolo durante el
momento del parto, aplicadas de forma sistemática y como justificación a toda clase
de intervenciones sobre los cuerpos de las mujeres, adquieren un carácter negativo,
que muchas veces deriva en situaciones de violencia contra las mujeres.
“Ella, no es otra cosa que lo que el hombre decida que sea; así se la denomina
-el sexo-, queriendo decir con ello que a los ojos del macho aparece
esencialmente como un ser sexuado: para él, ella es sexo; por consiguiente, lo
es absolutamente. La mujer se determina y se diferencia con relación al
hombre, y no éste con relación a ella; la mujer es lo inesencial frente a lo
esencial. Él es el Sujeto, él es lo Absoluto; ella es lo Otro50” (1949:18).
En este sentido, afirmamos que los cuerpos de las mujeres son arena de control
y disputa, por lo que siguiendo a Colanzi (2014), comprendemos el cuerpo femenino
como territorio, el cual es y ha sido objeto de vigilancia de saberes, representaciones
y prácticas. Ahora bien, como resultado de esta puja de fuerzas, tal como fuimos
demostrando durante el capítulo anterior, podemos afirmar que la búsqueda de la
opresión de las mujeres es una constante en la historia de la humanidad misma.
58
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
A este respecto cabe preguntarnos ¿De qué medios se valió este atropello?
¿De qué manera logró consolidarse? Pues bien, se trata de un mecanismo de control
y subordinación contra las mujeres y toda persona que su identidad sexo genérica no
se corresponda con la de un varón CIS y heterosexual, el cual conocemos cómo
violencia por razones de género.
Esta les permite a los varones sostener la dominación masculina y es, además,
un instrumento para afianzar ese sometimiento.
La Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer fue un punto
nodal a nivel internacional, dado que por primera vez se abordó la violencia contra las
mujeres dentro del ámbito de los derechos humanos. Sin embargo, sostenemos que
su importancia radica en lo planteado por Segato (2003), la cual postula que:
59
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Tal como expresó Silvia Federici en una de sus ponencias53, adherimos que la
violencia es una constante en la vida de la mujer bajo el capitalismo. Podemos afirmar
que esta ocurre en absolutamente todas las circunstancias de la vida. Ya sea durante
periodos neoliberales o de mayor redistribución, al interior de los hogares, en las
plazas, en los diferentes empleos, e incluso dentro de las cuatro paredes de un
quirófano o de una sala de partos.
En este sentido, si bien el término violencia de género no fue utilizado por
Simone de Beauvoir, consideramos que sus aportes se actualizan de manera
pertinente para comprenderla. En particular, si entendemos que las situaciones de
violencia contra las mujeres responden al plano de lo estructural, dada su condición
de otredad, inferioridad y dominación. En este sentido, ser “lo otro” en el orden del
patriarcado, nos coloca en una condición de profunda subordinación. A decir de la
autora:
Por otro lado, la autora refiere que, dado que generalmente se justifican las
desigualdades entre varones y mujeres desde las diferencias en la genitalidad, ello
promueve la idea de que estas responden a un orden natural y biológico. Y explica
que:
53 «La Guerra contra las mujeres y la acumulación capitalista» jueves 19 de septiembre 19:00 hs.
Biblioteca del Congreso Nacional (Paraguay) disponible en
https://revistaemancipa.org/2019/09/20/silvia-federici-la-guerra-contra-las-mujeres-y-la-acumulacion-
capitalista/
54 Las negritas son nuestras.
60
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Es así como en este mundo de “dueños”, son estos quienes van a decidir sobre
la vida y la muerte. Anteriormente dijimos, citando a Simone de Beauvoir (1949), que
este mundo siempre perteneció a los varones. Pues bien, Segato afirma que el cuerpo
de la mujer es un territorio para demostrar con crueldad e impunidad, justamente esa
dueñidad.
Pero para que la violencia patriarcal contra las mujeres se consolide a lo largo
del tiempo, es preciso que estos actos sean legitimados y naturalizados. El patriarcado
no tiene reparo ni compasión, incluso en culpabilizar a las mismas mujeres por las
violencias que les es perpetrada, haciendo uso de los mitos y estereotipos de género.
Para ello, funciona muy fuertemente la dimensión simbólica de la violencia. Pierre
Bourdieu fue quien primero acuñó este término y lo explica como una:
61
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
56
Ley N 26.485 de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las
mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales.
62
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
63
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
hasta una noción más restringida de daño físico intencional, fruto del racismo,
sexismo, moralismo, y otros estigmas” (Fleury, Bicudo, Rangel 2013: 14).
57 La desacreditación, infantilización y humillación a la que son sometidas, genera en las mujeres que
vivieron algún tipo de violencia de género una revictimización, es decir, agrega otra importante cuota
de sufrimiento y dolor, por lo que difícilmente esa mujer decida volver a denunciar.
58 Establece la capacitación obligatoria en género y violencia de género para todas las personas que
64
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
59
Según Colanzi (2014) la etapa reproductiva de las personas con capacidad gestante concentra las
mayores acciones e intervenciones en los servicios de salud.
65
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
prácticas tienen que ver con saberes sociales, que se imprimen en los cuerpos de las
mujeres. Tal como lo señala Menéndez (1994), la institución médica, además de
atender el cuidado de la salud, está impregnada de concepciones sociales que se
traducen en prácticas, las cuales dan cuenta de las profundas desigualdades en la
distribución del poder de la sociedad de la que es producto.
Si bien en informes y documentos de organismos de salud nacionales e
internacionales, no se aconseja la intervención innecesaria durante el proceso
fisiológico del parto (por supuesto hablamos de partos de bajo riesgo), el número de
cesáreas e intervenciones médicas en Argentina supera altamente la media
recomendada (Las Casildas60 OVO, 2015). Los datos son estimativos e informales ya
que no hubo un real interés por parte del Estado en lograr recabar datos formales al
respecto.
Pues bien, según desarrolla Campiglia (2016), todas esas intervenciones que se
consideran legítimas realizar en el cuerpo de la mujer, pese a ser contrarias a la
medicina asentada en evidencia científica, cuyo fin no es el cuidado de su salud, sino
que responde a otros intereses, también refieren a expresiones de violencia. Por
ejemplo, “agilizar” el tránsito de las mujeres dentro del hospital:
60Agrupación feminista que difunde información e interviene en torno a la gestación, parto, nacimiento
y crianza de niños y niñas que impulso el Observatorio de Violencia Obstétrica (OVO).
66
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Me dice (la médica obstetra): - Bueno, ¿Porque no lo tenemos ahora? Hay una cama libre, aparte
faltan solo unos días para la fecha de programación y nada, lo tenemos ahora y listo. Y yo me quedé
sorprendida, porque bueno, ya me había planificado para la cesárea programada.
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020.
67
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
(que hacen las contracciones más frecuentes y dolorosas), la rotura artificial de bolsa
y/o membranas, o se recurre a la cesárea, sea de forma directa, o indirectamente fruto
de las excesivas intervenciones, tal como sucedió con Gala.
Me dijeron que me ponían oxitocina para agilizar un poco más el parto61. Eso sí lo sentí, porque
empecé a sentir más rápido las contracciones. De eso sí me acuerdo, quizás me dieron más
explicaciones, pero no las recuerdo.
Gala, 34 años.
Entrevista realizada el 06 de agosto de 2020.
Ahora bien, estos discursos encuentran su vertiente en, al menos, dos tipos de
violencias: por un lado, la violencia por razones de género, que se expresa en la
asignación de las mujeres a un lugar subordinado en la sociedad, generando una
relación de profunda desigualdad entre las usuarias de los servicios de salud, y los
efectores y efectoras del mismo62.
Por otro lado, la violencia institucional, basada y sostenida por un saber/poder
autorizado tanto de la medicina en general, como de la institución hospitalaria en
particular.
Esta relación dialéctica entre violencia de género e institucional, resulta en lo que
conocemos como violencia obstétrica. Entendemos a la misma como un tipo de
violencia que ejerce el sistema de salud y sus efectores, mediante una apropiación del
cuerpo de las mujeres y los procesos de gestación, trabajo de parto, parto/cesárea y
posparto. Pero también ocurre fuertemente durante las interrupciones de embarazos,
ya sean inducidos o espontáneos, hacia mujeres que no han tenido una gestación a
término y vivieron una pérdida gestacional.
Cuando mi bebé tenía 5 meses, yo me volví a embarazar y bueno… Justo se descubrió que yo
era celíaca, que tenía mucha anemia y demás. Y terminé perdiendo el embarazo. Entonces cuando
volví a internarme ahí para que se me hiciera el legrado, me pusieron con una mujer que acaba de
tener familia. Y bueno, la verdad que no me tenían que haber puesto en la misma habitación con una
persona que está feliz, que acaba de recibir a su bebé, que está festejando… Y vos estas ahí… ¡Mal!
Sufriendo por la pérdida de tu embarazo. Entonces ahí si lo ves también desde otro lado. Yo te entiendo
68
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
que no pueda haber otras habitaciones, pero de última poneme en la habitación de monitoreo o
cualquier lado, pero no justo en esa. Fue muy, muy fuerte.
Bianca, 30 años.
Entrevista realizada el 8 de Agosto de 2020.
69
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Mas después de lo que paso con mi hermana. Estábamos ahí porque a nosotros nos dijeron va a ir a
cesárea porque es de emergencia. Y no nos dijeron nada más. Estábamos todos (…) La familia con el
corazón en la boca y no nos decían nada. Pasaron 6 horas hasta que terminó todo, y ella estaba en
terapia intensiva. Pero no sabes lo que tuvimos que reclamar para que alguien nos diga dónde estaba
mi hermana y mi sobrina. ¡Impresionante! No nos decían dónde estaban, ni que había pasado (…)
Teníamos que exigir y me acuerdo bien, que nos dijo un guardia que estaba ahí custodiando
todo, nos dijo no se preocupen (…). Está en terapia intensiva, pero está viva. Y bueno, horrible fue.
Pero no solo fue horrible para ella sino para nosotros también.
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020.
70
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
una mujer acerca de su propio proceso, le realice una cirugía no justificada sin su
consentimiento, o mutile su vagina por protocolo.
La autora afirma que el desdibujamiento de la condición de sujetas de las
mujeres gestantes en los dispositivos de salud se ejecuta por medio de una serie de
prácticas estandarizadas que apuntan a la serialización de los procedimientos,
reduciendo a la mujer a su condición orgánica63.
Pero resulta que la violencia obstétrica se encuentra tan normalizada en nuestra
sociedad que resulta difícil la visibilización de la enorme magnitud del fenómeno. “La
violencia obstétrica es una de las caras de la violencia contra las mujeres más
legitimada por el poder/saber médico y más silenciada por el colectivo social”
(Camacaro Cuevas 2009:49). Así mismo, cómo toda violencia de género, a más
invisibilización, mayor peligro.
Por último, es importante considerar que los discursos y prácticas no recaen de
la misma manera en todas las mujeres, sino que varían dependiendo de múltiples
determinaciones, tales como el nivel socioeconómico, la edad, la etnia, el contexto, la
región y el número de partos anteriores. En este punto es importante la noción de
interseccionalidad, entendiendo que la categoría de género nunca funciona de
manera independiente, sino que tiene profundas conexiones con otros ejes de poder
que se inscriben sobre los sujetos y las sujetas (Hill-Collins 2012; Kerner 2009). De
todos modos, aunque nuestro trabajo no tiene por objeto investigar la asistencia al
parto/cesárea según dichas variables, afirmamos que son cuestiones interseccionales
las que muchas veces se materializan en un incremento del trato irrespetuoso o
deshumanizante
Aun así, esta violencia se da en todo tipo de mujeres, de todas las culturas, todas
las clases, todas las edades, lo que demuestra que el principal factor que predispone
a padecer violencia obstétrica es simplemente ser “paciente” y ser mujer.
Las técnicas modernas de represión son en general invisibles y no dicen lo que prohíben,
porque decirlo es dar indicación de su existencia.
(Casilda Rodrigáñez 2010: 19).
63A los dichos de la autora, consideramos pertinente agregar que la reducción al plano de lo biológico
no implica un respecto a lo fisiológico del proceso, sino que todo lo contrario.
71
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
No me ponía en el rol de: ¿Qué es lo que yo quiero? Me ponía en el rol de… bastante sumisa,
en realidad. Ahora me agarra como culpa, decir bueno, ella es la que sabe que es lo mejor para mí hijo,
le voy a hacer caso. Por eso, por ahí me río pensando en eso.
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020.
Pero, por otro lado, en las mujeres se encuentra internalizado, que al más
mínimo margen de cuestionamiento, esa violencia generalmente aumenta. En la
situación de Luz, además de la violencia verbal y emocional frente al incumplimiento
de las indicaciones realizadas, percibimos un desconocimiento absoluto de las
condiciones materiales de existencia, lo que denota violencia de tipo económica:
Y es ahí que me preguntó: - ¿la medicación la compraste? Y yo digo ¿Qué medicación?, - ¡La
medicación que te dije que te compres! Y digo no, no porque me habías dicho que era por las dudas,
y nada yo como estaba cara…La verdad que, si era por las dudas no, no, no la compré. Y ella me dice:
- No, vos estás poniendo en peligro la vida de tu hijo. No puede ser. Lo primero que hice fue largarme
a llorar
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020.
72
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
No, nunca me llamaron por mi nombre. Era mamá, mami, mamita. Tampoco me preguntaron
cómo me llamaba… Era como era muy impersonal digamos. La verdad que no se me preguntó eso.
Pero sí me acuerdo de que, por ejemplo, a mi marido cuando lo vieron le preguntaron el grado (militar),
porque lógicamente entiendo que ahí todos los médicos tienen grado militar, entonces le preguntaron
el grado, donde había estado… Con el sí hablaban, pero no, a mí no me preguntaron cómo me llamaba.
Bianca, 30 años.
Entrevista realizada el 8 de Agosto de 2020.
Observamos que el modo en dirigirse hacia las mujeres por parte del personal
médico, además de ser impersonal, es caracterizado por la infantilización de las
mujeres, lo cual se relaciona con la concepción de que estas atraviesan un estado
“poco racional”, por lo tanto, incapaces de comprender razones o motivos. Es aquí,
durante un proceso que remite a funciones tanto fisiológicas como culturales, que se
64 Según la RAE de desautorización es: 1. f. Acción y efecto de desautorizar. Quitar a alguien o algo
autoridad, poder, crédito o estimación.
65 En estos cursos, se despliegan una serie de discursos, prácticas y mecanismos, donde, a decir de
Sadler (2004), las mujeres van interiorizando medidas de control, así como una serie de complejos de
sospecha, carencia, deficiencia, que funcionan como mecanismos poderosos de desautorización de
las gestantes.
73
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
materializa el mito aún vigente por el cual a las mujeres se las concibe como alejadas
de la esfera racional, y más cercanas a la naturaleza que a la cultura.
En segundo lugar, se sitúa la patologización como elemento primordial del
paradigma de riesgo. Como hemos visto, el modelo biomédico bajo las lógicas del
capitalismo requiere del fomento de una relación de dependencia de los usuarios y
usuarias, para con los efectores. Vallana (2016) señala que en las gestaciones el
cuerpo es representado como sospechoso y en riesgo, por lo que esta relación se da
para, conseguir una especie de restitución de la salud o la normalidad.
El cuerpo gestante es interpretado como una especie de bomba por explotar
en cualquier instante, sospechándose que pueda presentar problemas y patologías,
así como la premisa de que puede no estar “funcionando bien”. como relata Gala,
quien atravesó todo su trabajo de parto acostaba debido a que se le colocó el monitor
fetal de manera continua, pese a la no recomendación de la OMS de dicha práctica, y
pese a no presentar signos de sufrimiento fetal alguno:
El monitoreo siempre fue constante, todo el tiempo. Todo el tiempo le monitoreaban los latidos.
Gala, 34 años.
Entrevista realizada el 06 de agosto de 2020
74
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Cuando entramos al quirófano, le dije que estaba muy nerviosa. Me dijeron que no tenía que hablar ni
respirar (…) Luego el anestesista me dijo que me callara y no respire así, porque yo estaba muy alterada
y recién ahí entendí porque me lo dijo. Que no tenía que hablar y esas cosas (…) Después hablaban
entre ellos otras cosas, cosas de ellos, a mí ni me hablaban. Sentí como si era un trámite estar ahí
conmigo.
Gala, 34 años.
Entrevista realizada el 06 de agosto de 2020
Me habían hecho el tacto a las 6:40. Y a las 7 y punto vino otra y me dijo bueno es cambio de guardia,
te tengo que hacer tacto, le dije que no quería, no daba más. ¡Me hicieron recién!, le dije. Es el cambio
de guardia, dice, tengo que ver cómo estás, y yo ya a esa altura no daba más, pero bueno… Me dijo
de buena manera, incluso no sentí que lo hiciera de mala gana, pero sentí que era innecesario.
Bruna, 24 años.
Entrevista realizada el 8 de agosto de 2020.
75
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
(…) Pero la mayoría del tiempo estuve ahí sola en sí, yo pedía que venga alguien, pero no
venían. No sé si sería una estrategia de ellos o una manera de ellos de atención en sí.
Gala, 34 años.
Entrevista realizada el 06 de agosto de 2020
Y entonces ya me la ponían a Simón al lado mío, y yo estaba como llorando del dolor. Entonces nada,
le decía a mi mamá que no lo podía tener; porque realmente me dolía mucho, que si pudiera llamar a
alguien porque me dolía un montón. Y la enfermera me decía que era normal.
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020
Me acuerdo de que fui en ayunas a sacarme sangre como siempre; que ella me hacía la prueba y era
un sábado, y entonces estaba todo cerrado y yo me atendía por guardia. Y cuando vio el papel que le
di, de los resultados, como que empezó a decirme: - ¡Vos no te das cuenta de que Simón se puede
76
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
morir, qué esto no puede ser que se te suba a este nivel Supone qué tenía 50 de ácidos biliares, que
era montón
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020
Ya cinco y media estaba entrando, en la camilla, esperando. Estaba acostada y no permitieron que
entre mi pareja. El no puedo estar en ningún momento. Yo les pedí, si él podía pasar y me dijeron que
no (…) Tampoco pude escuchar la explicación porque estaba concentrada en los dolores que tenía,
eran impresionantes las contracciones. Y estuve sola un rato largo, sola ahí adentro y eso no me gustó.
Yo necesitaba alguien que me acompañe no quería estar sola. Quería que estuviera mi pareja conmigo.
Gala, 34 años.
Entrevista realizada el 06 de agosto de 2020
77
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
mujeres usuarias con que hemos sostenido conversaciones reportan conocer este tipo
de trato, por haberlo vivido ellas mismas y familiares.
Una vez definida la violencia obstétrica y los mecanismos que la sustentan, nos
abocaremos a profundizar en las diferentes maneras que existen de ejercerla. Vale
aclarar que estas divisiones que establecemos son a fines conceptuales, ya que estas
pueden presentarse tanto de manera independiente, como simultánea.
Para dicho propósito, optamos por retomar los aportes de Mercedes Campiglia
(2016) quien, a partir de su investigación, construyó tres categorías para explicar los
tipos de violencia obstétrica, cuyas particularidades serán exploradas en este
apartado.
La primera de ellas refiere al maltrato. Tanto los relatos de las mujeres
entrevistadas en nuestra investigación, como aquellos que fueron documentados en
la bibliografía que utilizamos como marco teórico de este trabajo, dan cuenta de la
magnitud y profundidad del maltrato perpetrado contra las mujeres, cotidianamente
durante la atención obstétrica.
Campiglia (2016) ubica en esta categoría, los malos tratos ejercidos tanto
verbalmente por medio de amenazas, gritos y burlas, como físicamente, a través de
la práctica injustificada de procedimientos dolorosos66. Sumamos a esta categoría los
aportes de Medina (2008), quien desarrolla el maltrato del orden de lo psicológico (o
emocional), donde se incluyen tratos deshumanizados, discriminación y humillación.
Comprende también la omisión de información sobre la evolución de la gestación,
parto o cesárea y el estado de salud de la persona recién nacida. No obstante, a partir
de las entrevistas realizadas, podemos afirmar la información no solo es omitida, sino
que también es tergiversada o directamente falaz, como observamos en reiteradas
oportunidades. En el relato de Luz, por ejemplo, a pesar de su deseo de tener un parto
vaginal, la obstetra aduce las siguientes objeciones:
66
Canevari (2011) da cuenta de la práctica disciplinadora de la realización de legrados sin anestesia a
mujeres que llegan al servicio de salud con “sospecha de aborto”.
78
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Pero ella me dijo, no vos sos primeriza, -me acuerdo esa frase textual- nunca vas a dilatar. Así me dijo,
vos sos primeriza y nunca vas a llegar a dilatar, así que lo más rápido y eficiente es hacer la cesárea y
ya está.
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020
67 Ver anexos.
79
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
son idénticos y todas las mujeres responden a un mismo patrón: Si sos primeriza, no
vas a dilatar nunca.
Retomando la caracterización del maltrato como tipo de violencia, tres de las
cuatro entrevistas realizadas, hicieron mayor hincapié en el dolor o el sufrimiento
referido al trato que les brindó el personal de salud, que en lo que respecta al plano
corporal físico estrictamente hablando.
Ahora bien, en este trabajo nos preguntamos: ¿Cuál es él o los factores que
permiten y legitiman estas vejaciones sobre el cuerpo de las mujeres, a partir desde
que se ingresa a la institución?
Para llevar adelante estos maltratos, tal como lo señalan Castro y Erviti (2015)
es preciso que previamente, se de ese extrañamiento respecto de “esa otra” sobre
quien se va a intervenir, basada en la otredad que describe Simone de Beauvoir
(1949), y su construcción como “no-persona” que la desdibuja como sujeta.
Dicho de otra manera, según lo que hemos observamos en las entrevistas,
parece que, al ingresar a la institución hospitalaria, surge una especie de “suspensión”
de la cualidad de sujeta de las mujeres gestantes, lo cual se manifiesta de diversas
maneras, que van desde burlas y humillaciones, hasta la obligación de las mujeres a
pedir permiso y autorización para ir al baño, caminar, moverse, o ingerir un alimento
o bebida.
Ahora bien, como dijimos previamente, consideramos que la violencia
obstétrica también puede presentarse mediante los mismos tipos que la violencia de
género en general. De modo tal podemos encontrar una violencia obstétrica de tipo
simbólica, física y psicológica como relatamos anteriormente, pero también ubicamos
de tipo sexual y económica.
La violencia sexual se hace visible con la falta de respeto al pudor, la desnudez,
la cantidad de tactos sin previo aviso -ni permiso-, donde visualizamos las
manifestaciones de la apropiación y dueñidad sobre los cuerpos femeninos
Por otro lado, la violencia económica, en las entrevistas se presentó de manera
más frecuente y explícita en los servicios privados, aunque no exclusivamente. Bianca
relata como tuvo que abonar estudios obligatorios por fuera de su obra social:
Además de lo que pagamos de Obra social, hubo varias ecografías que las tuve que pagar. No
hice 3D ni nada de eso, solo las ecografías que me pedían y aparte de la de la translucencia. Bueno,
un Doppler del corazón me pidieron y cada una de estas las tuve que abonar por fuera.
80
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Bianca, 30 años.
Entrevista realizada el 8 de Agosto de 2020
Tengo obra social por el trabajo y bueno, no sé por qué, pero acá en Buenos Aires los médicos
te cobran un plus aparte para asistirte en el momento del parto o cesárea. Esto también era un problema
digamos, porque uno tenía que saber que para el nacimiento tenía que contar con 15 o 20 mil pesos
para que te asista. Si no tenías que ser atendida por el que este en ese momento de turno. Bueno,
cuando encontré una doctora que me gustó que era de la obra social, está también me cobraba, pero
yo ya había decidido que era una locura gastar 15 o 20 mil pesos en alguien que me asistiera el parto
cuando todos son médicos y ya todos deberían saber.
Llegado el momento decidí ir por guardia, porque tener un bebé por primera vez genera muchos
gastos y la verdad que a mí en su momento me pareció una locura. Pero si hubiese sabido todos lo
que iba a pasar el día del parto los hubiese pagado cerrando los ojos, pero bueno…
Bianca, 30 años.
Entrevista realizada el 8 de Agosto de 2020
68Vale la aclaración de que no necesariamente aquellas personas que hacen más inversiones para
acceder a una buena salud obtienen mejores resultados que aquellas otras que acuden a los servicios
públicos.
81
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Luego cuando me rompieron bolsa eran como 7 personas más las que entraron y ahí ya no sabía
quiénes eran.
Gala, 34 años
Entrevista realizada el 6 de agosto de 2020
Estaba un poco desesperada porque como te dije sentía que estaba muy sola. Necesitaba alguien
conmigo. En la misma habitación había otra chica conmigo. Y nadie se acercaba. No tenía con quién
practicar (los ejercicios). Yo tenía la idea de que dejaban entrar a mi pareja y él me acompañaba a
realizar los ejercicios.
Gala, 34 años.
Entrevista realizada el 06 de agosto de 2020
Las historias de las mujeres también dan cuenta, con frecuencia, de otro tipo
de abandono; una desatención deliberada que responde a una intención decidida de
no atender las solicitudes o hacerlo con cierta indiferencia.
Después lo que pasó fue que como, terminó toda la cesárea estuve mucho tiempo por ahí esperando
a que me asignaran un lugar.
Habrán sido como dos horas, yo sentía frío. Estaba en un pasillo, o sea me pusieron en un pasillo medio
aislado. Yo con mucho frio. No había nadie, así que estaba ahí esperando, esperando… esperando.
(…) Y es horrible. Cuando me acuerdo estar con mucho frío, frío, frío, y desnuda con la bata. Pero estar
82
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
en un pasillo, que nadie te diga con esto (La anestesia) vas a sentir un poco de frío, por el efecto o
estamos viendo donde ubicarte, ¡Algo! ¿No?
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020
Tanto frente al abandono como al maltrato, como Castro y Erviti (2015) desarrollan,
se le pide a la mujer sumisión y obediencia, lo cual guarda relación con la idea
arraigada de que el rol de la mujer gestante durante el nacimiento es el de “cooperar”,
ya que quienes “hacen” el parto son los y las profesionales.
Hemos dado cuenta que el maltrato y el abandono son formas de violencia.
Ahora bien, vale aclarar que agilizar los procesos sin relación alguna a riesgos
basados en evidencia científica, también constituye una forma de violencia. Incluso
cuando esto se lleve adelante con absoluta amabilidad.
Con relación a lo antedicho, nos detendremos más detalladamente en la tercera
categoría: La hiper-medicalización. Campiglia (2016) ubica en este tipo de violencia
obstétrica, la inmensa cantidad de intervenciones que son llevadas a cabo de forma
cotidiana, aun cuando está demostrado por las instancias de regulación de la medicina
(Tales como la OMS, FASGO69, Etc.) que lejos de procurar salud, generan daños de
toda índole. Esta violencia de manera fenoménica se presenta como “necesaria” y
generalmente implica un aumento del dolor y el sufrimiento. Campiglia (2016) afirma
que se usan sistemáticamente los recursos de la biomedicina para alterar los procesos
fisiológicos sin tomar en cuenta las recomendaciones70 o guías. Al respecto señala
Magnone Alemán (2013):
83
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
A este respecto, coincidimos con Felitti (2011) quien señala que el parto concebido
como un hecho patológico, coincide con una larga historia de sustracción de la mujer
del control de los saberes referidos a la sexualidad, los nacimientos, los abortos, y la
salud en general. Saberes que eran ejercidos por mujeres (parteras y curanderas).
Ese “pasaje”, afirma la autora, de la salud en el seno del hogar/comunidad a la
institución fija un antes y un después en la historia de la autonomía del cuerpo de la
mujer y, en particular, en el parto.
Anteriormente dijimos que en el ámbito de la medicina coexisten prácticas
diversas y estas se imponen en la formación en medicina; todas aquellas
intervenciones que no tienen como fin el cuidado de la salud, lo que la autora identifica
como hípermedicalización.
Según la OMS (1996), el 70% de los partos que demandan atención en los
hospitales, no requieren de asistencia medicalizada por lo que deben existir razones
muy válidas para interferir con el proceso natural. Ahora bien ¿Que entendemos por
un parto medicalizado? Según la OMS, es aquel que, aun habiéndose iniciado de
forma espontánea71, es dirigido mediante oxitocina sintética, rotura de membranas, y
otras prácticas destinadas a acortar su duración. Mercedes Campiglia (2016) afirma
que el parto es un proceso que en la gran mayoría de los casos no debería necesitar
de grandes intervenciones, pero contrariamente en la actualidad se encuentra
fuertemente intervenido y conducido, aplicándose diferentes medicamentos para
acelerarlo o desacelerarlo, aliviar el dolor, practicándose episiotomías de rutina y
cesáreas en una cifra alarmante, entre otras intervenciones.
De esta manera, lo que sucede es que unos tipos de medicación se hacen
necesarios por utilizar otros, por ejemplo, como afirma Campiglia (2016) muchos de
los anestésicos administrados para aliviar el dolor desaceleran el trabajo de parto, por
lo cual se hace necesario suministrar oxitocina para acelerarlo nuevamente. Así
mismo sucede en el sentido contrario, cuando se administra oxitocina, puede ocurrir
que la intensificación de las contracciones haga que las mujeres se desesperen de
dolor e incomodidad. Como visualizamos en el relato de las mujeres, este
procedimiento es vivido con un gran sufrimiento:
71 Nos referimos aquellos que no fueron inducidos mediante medicamentos y/o maniobras.
84
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Me acostaron, -yo quería salir de esa cama, no quería estar acostada-. Me sacaron toda la
ropa, me pusieron medicación por vía, para agilizar un poco más las contracciones. Me dijeron que me
ponían oxitocina. Eso sí lo sentí, porque empecé a sentir más rápido las contracciones (…) fue una
desesperación constante, estar sola y esperar mucho tiempo… Todo me parecía interminable, muy
largo. Estaba desesperada porque como te dije sentía que estaba muy sola. Necesitaba alguien
conmigo.
Gala, 34 años.
Entrevista realizada el 06 de agosto de 2020
85
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
En ese sentido, ocurre que cuantas más intervenciones, tantas más serán
necesarias. Por supuesto nos referimos aquellas que no tienen que ver con la
medicina asentada en evidencia, ejemplo de ello, como afirma Campiglia (2016), son
el uso generalizado de oxitocina sintética durante el trabajo de parto, el corte de rutina
en los genitales en el momento del nacimiento (episiotomía), el uso de posiciones
contraindicadas por la OMS para el trabajo de parto y parto, la separación de la mujer
y la persona recién nacida, entre otras.
Si bien no es objeto de este trabajo abordar cada una de las intervenciones
para contrastarlas a luz de las recomendaciones de los organismos internacionales,
tomaremos una limitada muestra de ellas en relación con la frecuencia con que se
presentaron en las entrevistas. A fin de lograr especificar la manera en que
determinadas prácticas constituyen expresiones de violencia de género, nos interesa
especificar solo algunas de ellas, en tanto se presentan de manera sumamente
invisibilizada y hasta justificada.
Al indagar acerca de las intervenciones, una de las primeras que se relevan
son los tactos vaginales. En los relatos, las mujeres consideran que les realizan
tactos innecesarios, a veces muy seguidos unos de otros, y señalan la molestia que
sienten, al ser estos efectuados por personal diferente. Tal como relató Bruna, quien
fue sometida a un tacto a las 6:40 y a otro, por otro personal distinto, a las 7:00.
Lo loco fue que pasé muchas guardias, porque Dante nació a las doce menos cuarto del mediodía del
otro día, toda esta tarde la madrugada y bueno cambié varias guardias y cada nueva guardia era
revisarme hacerme tacto a ver como estaba.
Bruna, 24 años.
Entrevista realizada el 8 de agosto de 2020.
Como a las 2 de la mañana empecé con contracciones fuertes y más seguidas. Y bueno, y ahí empecé
con un médico que venía, me hacía tacto. Al rato venía otro y hacían tacto de nuevo. El médico que
86
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
estaba de guardia venía, hacia tacto, pero a la vez los practicantes también tenían que hacerlo para
poder verificar, comprobar.
Ellos, es parte de su profesión, pero en este momento no le gusta a nadie (…) Nunca me pidieron
permiso, o sea, eso era de imaginar, yo ya sabía que iba a ser así, que los residentes van a pasar a
hacerte tacto. Pero no imagine que tantos. Cuando cambio el horario de los turnos de la Guardia, entro
otro profesional y entraron otros dos residentes y entró la partera. Y bueno, todos ellos también hicieron
tacto. En realidad, estaba tan nerviosa y cansada… muy cansada, que el medico venia cada rato, el
tacto de los residentes, todo.
Bianca, 30 años.
Entrevista realizada el 8 de Agosto de 2020
Dijeron, dame una presto barba y como que cortaron bello en la panza. Me dio mucha vergüenza,
porque no me dijeron nada digamos. Pero se reían entre ellas de mí.
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020
87
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Yo lo que le tenía terror era a la episiotomía, que es el corte que te hacen si no sale él bebé,
supuestamente eso no se puede hacer. Yo le pedí a mi obstetra que, si él estaba en el parto, que, si él
podía por favor evitar hacerlo, que haga todo lo posible. Pero me dijo como, no lo hacemos la
episiotomía, es el último paso, tranquila, no es que vas a llegar y te van a cortar.
Bruna, 24 años.
Entrevista realizada el 8 de agosto de 2020.
Ese fue el pedido que le realice, pero al final si me lo hicieron. (...)Lo del corte fue lo peor que me pasó
en el parto y que después me cosieron sin anestesia. Fue lo que más recuerdo. Como que yo le tenía
tanto miedo y al final tuvo que pasar.
Bruna, 24 años.
Entrevista realizada el 8 de agosto de 2020.
Esta práctica constituye un grave problema de salud, por tratarse de una lesión
quirúrgica y hemorrágica que violenta la integridad anatómica y funcional del canal
blando del parto (Cárdenas 2008). Al practicarla se incrementa también el riesgo de
afectación de esfínteres. Existe la posibilidad de que la mujer presente dolor crónico
en el ejercicio de la sexualidad. La autora Cárdenas (2008), refiere que los médicos y
médicas que practican episiotomías de forma rutinaria argumentan que se debe a
evitar desgarros. Contrariamente, está ampliamente probado que los desgarros
severos (de tercer y cuarto grado), sólo se presentan cuando se ha realizado una
episiotomía. Sadler (2004) advierte que las episiotomías son realizadas
incansablemente e incluso para desarrollar la destreza de los estudiantes sin
justificación médica para emplearla.
88
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Vale aclarar que de ninguna manera intentamos decir que toda episiotomía
constituya violencia obstétrica, pero si lo es, cuando no existe real justificación para
practicarla.
Continuando con las intervenciones, ubicamos un medicamento llamado
oxitocina sintética que, diluido e inyectado en vena por goteo72, desencadena y/o
acelera el proceso de parto. Esta intervención no siempre se realiza con la
autorización o el conocimiento de la gestante (Gutman: 2007). Michel Odent (2011),
reconocido obstetra francés, señala que el uso de oxitocina sintética durante el trabajo
de parto podría tener efectos nocivos para él o la bebé a largo plazo.
Aunque se supone que las inducciones del parto obedecen a causas
relacionadas con la medicina asentada en evidencia científica, como gestaciones
prolongadas (después de la semana 41.3 o 42, -dependiendo del protocolo que posea
la institución-) o problemas en la salud en la gestación que requieran de la
programación anticipada del nacimiento, pueden responder más al acomodo de
agendas por parte de los y las obstetras que, como hemos visto, son fácilmente
transformadas en necesidades e inminente riesgo:
(…) Y ella (la médica obstetra), como que me lo planteó, que era lo mismo tenerlo ese día, que tenerlo
después de una semana ¿No? Entonces ya que estaba en la clínica, y ella que estaba de guardia, y ya
fue, total era como un trámite. Y así que lo tuve ese día.
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020.
Me dijo que tenía colestasis, si yo quería medicación o el parto gratuito y todo gratuito, o sea, con la
cobertura, tenía que atenderme con ella. Así que tuve que volver. Y ella lo que me dijo es que no había
89
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
73 Ver anexo N° 4
74 Disponible en https://www.youtube.com/watch?v=Nl7Z0tw82QQ
90
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Fuente: http://somosmamiferas.blogspot.com/2015/01/la-cascada-de-interveciones.html
91
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
pero es importante remarcar que aquello que los caracteriza es el hecho de que
apuntan a un objetivo diferente al del cuidado de la salud.
Anteriormente dimos cuenta de que en el Modelo Médico Hegemónico se
entretejen acciones propias de la medicina asentada en evidencia con otra serie de
acciones que responden a intereses diferentes a éste, por lo que afirmamos que se
constituyen en prácticas violentas, de sometimiento y disciplinamiento de los cuerpos
femeninos. Teniendo en cuenta lo antedicho, cabe cuestionarnos ¿Qué pasaría si en
el centro de esta escena, en lugar de estar una mujer, se encontraría un varón?
Los testimonios de las mujeres dan cuenta de las vejaciones que viven en los
dispositivos de Obstetricia y evidencian situaciones de alto grado de vulnerabilidad y
angustia tanto durante el evento, como después del mismo. Como afirma Olza (2017),
se puede salir debilitada de un parto y tener que afrontar emocionalmente dañada la
etapa del posparto, con sus claras consecuencias en lo vincular y con un impacto
profundo en todo el sistema familiar. O bien salir empoderada de un parto y esto
permitirá obtener confianza durante el puerperio.
Me recuperé bien. Bah, si no hubiese sido por lo del corte (la episiotomía) enseguida estaba re
bien. Pero me tiraban los puntos. Por semanas no me podía sentar y todavía no me quedó igual.
Bruna, 24 años.
Entrevista realizada el 8 de agosto de 2020.
92
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Puede ser que apuren el trabajo de parto, o sea, cuando intentan apurarlo, en algún punto, no
es una violencia literal. Pero si hay prácticas al momento de cuando vos entras que te deberían avisar
previamente. En un punto que se transforman en prácticas un poco violentas cuando no te informan
bien o no te permiten otras opciones en sí. En todo caso sos vos la que estás ahí poniendo el cuerpo y
asumiendo todos los riesgos.
Gala, 34 años.
Si, lo creo, de echo te digo la verdad, yo realmente siento que tuve suerte en el hospital porque
tienen el mejor equipamiento, es un hospital re lindo, sofisticado, por eso tiene tanta demanda, pero
tengo conocidas que no la pasaron nada bien y es también la gente que te toca, eso también lo rescato.
Bruna, 24 años.
Entrevista realizada el 8 de agosto de 2020.
¿Podríamos decir que la buena atención es una “suerte”? ¿Se podría decir que
la misma es una excepción, mientras la norma sería una mala atención? A través de
las entrevistas quedó validada la idea que la obtención de factores simbólicos y
económicos no bastan para garantizar un nacimiento libre de violencias. Con relación
a lo planteado por Bruna, consideramos que, sumado a estos factores, simplemente
queda librado al factor “azaroso” y a manos de qué dispositivo institucional y equipo
médico quede la atención.
93
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Entonces nada, me acuerdo de que ese primer día por lo menos yo, no podía estar yo con
Simón. No podía, fue re difícil para mí, encima tuvo que tomar mamadera, que en realidad eso me
costó, porque digo ¡No puedo darle la teta, ni siquiera eso pude! Así que me costó un montón ese
primer tiempo y bueno, después dos o tres días estuve así y bueno (…) Fue muy difícil ese primer
contacto.
Luz, 24 años.
En una segunda etapa lanzaron otra encuesta para medir el impacto que tiene
estos maltratos en la vida de las mujeres y sus hijos/as. Un 76,1 % ciento de las
entrevistadas contó que sufrió un impacto en su estado emocional y psicológico:
imágenes repetitivas del evento obstétrico, pesadillas, vergüenza o culpa sobre ese
sufrimiento, crisis de llanto, pérdida del apetito, problemas para dormir, miedo frente
al estado de salud, falta de deseo hacia la vida, dificultades para identificar las
emociones, irritabilidad y cambios de humor. Un 48,7 % de las mujeres dijo haber
sufrido secuelas en su salud sexual y reproductiva, que incluyen problemas de
infertilidad, daños en el suelo pélvico, prolapso, problemas en futuras gestaciones y
dolores, incomodidad o dificultad emocional en relaciones sexuales. Un 43,8 % de las
encuestadas, además, contó que el maltrato en el parto le generó dificultades en el
vínculo con su hijo o hija.
94
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
En una primera instancia se partió del supuesto de que el tipo de atención que
recibían las mujeres durante el parto impactaba en su subjetividad moldeando su
relación con las nociones de cuerpo, femineidad, sexualidad y maternidad. Parece que
aún es necesario recordar la obviedad: La mujer tiene derecho a decidir sobre su
cuerpo y sobre su vida reproductiva.
95
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Bianca, 30 años.
Me dolió un montón porque siempre tuve la ilusión de tener un parto natural. Sobre todo, porque
la partera que fue la que me dio el curso de preparto, habló de los beneficios de que era mejor para el
niño. Yo ya sabía que iba a nacer porque ya había roto bolsa, estaba dilatando y bueno… Y trataba de
75El parto instrumental es aquel que en el momento del expulsivo requiere de la utilización de un
instrumento, ya sea ventosa, espátula o fórceps.
96
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
tranquilizarme por ese lado, pero por otro lado estaba tan dolorida y cansada ya, entonces cuando vino
la médica a eso de las 2:00 de la tarde le dije que quería una cesárea.
Bianca, 30 años.
97
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
curricular para incorporar los contenidos de género y derechos, pero aun así es
incipiente. A decir de Canevari:
98
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Después lo que pasó fue que como, terminó toda la cesárea estuve mucho tiempo por ahí esperando
a que me asignaran un lugar.
Habrán sido como dos horas, yo sentía frío. Estaba en un pasillo, o sea me pusieron en un pasillo medio
aislado. Yo con mucho frio. No había nadie, así que estaba ahí esperando, esperando… esperando
Luz, 24 años.
Entrevista realizada el 6 de agosto 2020
Así mismo, las mujeres también deben estar preparadas para apurarse cuando
se considere necesario, aceptando que se aceleren sus procesos de dilatación y
nacimiento a través de hormonas, cuyo proceso apareció en las entrevistas con la
categoría “agilizar”, “agilizar un poquito”.
Campiglia explica este fenómeno con total claridad: “La híper-medicalización
del nacimiento es un reflejo de las asimetrías sociales, que se traducen en el valor que
se atribuye al tiempo de los diferentes actores” (2017:108).
Entonces, desde nuestra mirada, afirmamos que hay una diferenciación
absoluta del valor del tiempo. Donde el tiempo de las mujeres aparece con un valor
muy bajo, mientras que el del personal de salud es sumamente valioso porque es
escaso. Y en este sentido, el tiempo destinado a la atención de cada mujer debe ser
“optimizado”. Ahora bien, es allí donde radica una de las causas de la sobre
intervención: reducir el tiempo de atención de los y las profesionales, aunque vaya en
contraposición de la medicina asentada en evidencia científica, aunque impacte
negativamente en la salud física y emocional de las mujeres y las personas recién
nacidas.
Es interesante ver las tensiones que existen entre las y los Lic. Obstétricas/os
y los/as médicos/as. La atención de los partos y cesáreas en Argentina es asignada a
los y las obstetras. Resulta que, tal como vienen reclamando las y los profesionales
99
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
la partería.
79 Disponible en https://logueos.com/adjuntos/46a745d53597ce97c6e7b5f2d5aa4c66.pdf
http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/15000-19999/19429/norma.htm (Último acceso 15
de noviembre, 2020)
80 Los principales sectores que se oponen a ley de ejercicio profesional de la partería son AMAP
100
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Como a las 2 de la mañana empecé con contracciones fuertes y más seguidas. Y bueno, ahí empecé
con un médico que venía, me hacía tacto. Al rato venía otro y hacían tacto de nuevo. Y me decía, no
está bien. Yo entiendo también, a la vez habiendo residente, el médico que estaba de guardia venía
101
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
y hacia tacto. Pero a la vez los practicantes también tenían que hacerlo para poder verificar,
comprobar ellos. Es parte de su profesión, pero en este momento no le gusta nadie.
(…) Nunca me pidieron permiso, o sea, eso era de imaginar. Yo ya sabía que iba a ser así, que los
residentes van a pasar a hacerte tacto, pero jamás me imagine que tantos.
Bianca, 30 años.
Entrevista realizada el 8 de Agosto de 2020
102
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
103
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
En la sociedad capitalista el cuerpo es para las mujeres lo que la fábrica es para los
trabajadores asalariados varones: el principal terreno de su explotación y resistencia…”
En este sentido, además, esta categoría nos permite leer las prácticas de los
sujetos y sujetas en clave situacional. Es por ello que la perspectiva territorial permite
superar la mirada que se limita a la inmediatez y despolitiza las desigualdades,
trascendiendo las demandas individuales, reconstruyendo demandas colectivas.
82 Disponible en http://www.atlasconurbano.info/pagina.php?id=169
104
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
GBA” (INDEC), que refiere al área que rodea a la Ciudad de Buenos Aires y que forma
parte del aglomerado “Gran Buenos Aires” que incluye, conjuntamente, a la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires y dichos partidos distribuidos en 2 Cordones:
105
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
misma se compone por tres sectores; público, de seguro social obligatorio (Obras
Sociales) y privado.
Por otro lado, Como Acuña y Chudnovsky (2002) exponen, el sector del seguro
social obligatorio se organiza en torno a las Obras Sociales, que brindan cobertura
a aquellas personas que se encuentran asalariadas y sus familias, según ramas de
actividad 83 . Además, cada provincia cuenta con una Obra Social que cubre a los
empleados y empleadas públicos/as de su jurisdicción. Finalmente, el Instituto
106
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Estos tres subsistemas, no solo están escasamente integrados entre sí, sino
que además se encuentran fragmentados al interior de cada uno de ellos. “Su falta de
coordinación y articulación impide la conformación de un “sistema formal” de salud y
atenta contra el uso eficiente de recursos y el logro de niveles aceptables de equidad
en su cobertura” (Acuña y Chudnovsky 2002:4 citando a Cetrángolo,1997:23).
84“Este subsector se financia a partir del aporte voluntario de las personas usuarias que, generalmente
también cuentan con cobertura de seguridad social (doble afiliación)” (Acuña y Chudnovsky 2002:15).
107
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
dando lugar a brechas considerables entre los territorios locales en el acceso a los
servicios y en las modalidades de la atención.
108
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
85Fuente: Series 2000-2015, base de datos del Grupo de diseño y gestión de políticas de salud, en
base a datos DEIS 2015, para los 24 partidos del conurbano.
109
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
La maternidad está en primer piso y hay como 10 habitaciones más. Está quirófano y está la sala donde
te monitorean. Porque eran dos por habitación (…) Después él (Compañero de Gala) no se animaba
entrar. Porque todo lo que sentía de los gritos de las que estaban en trabajo de parto y es como que se
quedó un poco acobardado.
Gala, 34 años
Entrevista realizada el 6 de agosto de 2020
110
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
como las mujeres utilizan casi en su totalidad los términos “me llevaron”, “me trajeron”
para relatar su traslado por las distintas habitaciones y/o salas.
Según Campiglia (2016), generalmente cerca de la sala de trabajo de parto se
ubica el quirófano. Este se encuentra provisto del equipo necesario para la práctica
de cesárea y al cual se accede exclusivamente con la vestimenta indicada por la
institución. Probablemente en ello radica la dificultad aún mayor de las mujeres en
reconocer a los y las profesionales, ya que sumado a que, como visualizamos, en
ninguna de las entrevistas realizadas estos se presentaron por su nombre, y aún más
dificultoso será si sumamos los ambos, botas, gorros y barbijos.
También cerca del área de trabajo de parto, se encuentra la sala de parto. A
este espacio se traslada a las mujeres cuando se considera que ha llegado el
momento del período expulsivo86. En esta espacialidad que llamaremos hegemónica,
el periodo expulsivo, acontecerá en una camilla ginecológica. Campiglia (2016) explica
que alrededor de dicha camilla circula un importante número de profesionales que
dará indicaciones a la mujer con respecto a cómo y cuándo debe pujar. También se
encuentra el equipo que asistirá a el/la obstetra ejecutando las maniobras que
éste/esta considere necesarias.
Ya dijimos previamente que la única posición que habilita la camilla dificulta el
trabajo de parto y parto. ¿Cuál es entonces su razón de ser? Se trata de un espacio
diseñado para colocar el cuerpo de las mujeres en una posición que facilite la
manipulación e intervención a la totalidad de su cuerpo.
Por otro lado, a decir Campiglia (2017) describe que los partos o cesáreas son
divididos por “etapas” que ocurren en diferentes salas: trabajo de parto, expulsivo/
cesárea - alumbramiento de la placenta y post parto inmediato. En concordancia con
Canevari (2011), consideramos que el hecho de que se divida las etapas del parto en
diferentes espacios da cuenta de la fragmentación con la que es visualizada el
proceso.
86 El expulsivo o también llamado periodo de pujar, termina con el nacimiento del bebé, que sale por el
canal de parto gracias a contracciones involuntarias uterinas. Disponible en
https://www.elpartoesnuestro.es/informacion/4-periodo-de-expulsivo (Último acceso 15 de noviembre,
2020)
111
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
“… Las reglas respecto al uso de los espacios se vivencia por las mujeres y sus
familias como una expresión de la violencia. (…) el ingreso y el egreso al
servicio es restringido, con una guardia de seguridad que regula los
movimientos. Cuando la mujer llega al servicio queda sola y no siempre se le
permite estar acompañada por un familiar. Una vez que ingresa no tiene
libertad para irse…” (2017:147)
112
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Eran dos veces al día (las visitas), mediodía y a la tarde. Y mi pareja se quedaba todo el día ahí en la
sala de espera.
Esperaba y volvía a entrar a la tarde, tipo 4:30 de la tarde.
Gala, 34 años
Entrevista realizada el 6 de agosto de 2020
87 Este poder se va a ver reforzado y acrecentado si el obstetra es varón. Canevari (2017) explica que,
aunque una colega mujer tenga las mismas atribuciones, simbólicamente se le asigna mayor poder a
él. Esto radica en que estamos en presencia de un sistema que se basa en una lógica androcéntrica,
de ahí se desprende que la especialidad que más prestigio y poder detenta, se masculinice,
independientemente del sexo de los/as que la lleven adelante.
113
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
sobre las parteras. Nos preguntamos ¿Y dónde se ubicarán las mujeres y sus
familias? En el piso inferior de la escala jerárquica, con poco margen para tomar
decisión alguna.
Ante la pregunta sobre las interacciones entre el personal de salud durante las
cesáreas, tres de las tres entrevistadas que pasaron por una cesárea, comentan que
solo hablaban entre ellos en términos médicos, o a cuestiones cotidianas cuyo
universo para las mujeres eran totalmente ajeno, como relata Gala:
Sí, (hablaban de) como se iba desarrollando la cesárea. Después hablaban entre ellos otras cosas,
cosas de ellos, a mí ni me hablaban. Sentí como si era un trámite estar ahí conmigo.
Gala, 34 años.
Entrevista realizada el 06 de agosto de 2020
114
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
88 El Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, en conjunto con el Ministerio de las Mujeres,
Políticas de Género y Diversidad Sexual y la Cámara de Diputados de la Provincia, organizaron un Foro
Regional para trabajar la implementación de la Ley Nacional 25.929 y el proyecto de creación de un
Plan Estratégico Provincial de Parto Respetado. Disponible en
https://www.youtube.com/watch?v=5wdPmFKOZ9c (Último ingreso 15 de Noviembre de 2020)
115
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
de salud da cuenta de ello en tanto es posible advertir en los mismos que aún existe
una fuerte violencia desplegada. Ello cobra visibilidad en que, como hemos
desarrollado, el tipo de espacialidad hegemónica reduce a las mujeres a un rol
absolutamente pasivo.
No obstante, consideramos que los cuerpos de las mujeres también se han
constituido en los principales terrenos para ejercer sus luchas y resistencias. En este
sentido, en el próximo apartado caracterizaremos el marco legal vigente, producto de
la lucha de las mujeres en la búsqueda de recuperar la soberanía sobre sus cuerpos.
“La apropiación del cuerpo y los procesos reproductivos de las mujeres por el
personal de la salud, que se expresa en un trato deshumanizador, en un abuso
de medicalización y patologización de los procesos naturales, trayendo consigo
pérdida de autonomía y capacidad de decidir libremente sobre sus cuerpos y
sexualidad, impactando negativamente en la calidad de vida de las mujeres
(Ley Orgánica Sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de
Violencia)”89.
89 Nos pareció sumamente interesante que, en la legislación venezolana, en el artículo 15, numeral 13,
directamente se establecen sanciones a las instituciones y al personal de la salud que incurra en
determinadas acciones que nombra y enumera de manera clara y explícita:
1. No atender oportuna y eficazmente las emergencias obstétricas.
116
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
2. Obligar a la mujer a parir en posición supina y con las piernas levantadas, existiendo los medios
necesarios para la realización de un parto vertical.
3. Obstaculizar el apego precoz del niño o niña con su madre, sin causa médica justificada, negándole
la posibilidad de cargarlo o cargarla y amamantarlo o amamantarla inmediatamente al nacer.
4. Alterar el proceso natural del parto de bajo riesgo, mediante el uso de técnicas de
aceleración, sin obtener el consentimiento voluntario, expreso e informado de la mujer.
5. Practicar el parto por vía cesárea, existiendo condiciones para el parto natural, sin obtener el
consentimiento voluntario, expreso e informado de la mujer. (Ley Orgánica Sobre el Derecho de las
Mujeres a una Vida Libre de Violencia).
90 Como crítica a al modelo de atención hegemónico en los nacimientos, la OMS en 1985 impulsa una
procesos de manera que pueda optar libremente cuando existieren diferentes alternativas.
b) A ser tratada con respeto, y de modo individual y personalizado que le garantice la intimidad durante
todo el proceso asistencial y tenga en consideración sus pautas culturales.
c) A ser considerada, en su situación respecto del proceso de nacimiento, como persona sana, de modo
que se facilite su participación como protagonista de su propio parto.
d) Al parto natural, respetuoso de los tiempos biológico y psicológico, evitando practicas invasivas y
suministro de medicación que no estén justificados por el estado de salud de la parturienta o de la
persona por nacer.
e) A ser informada sobre la evolución de su parto, el estado de su hijo o hija y, en general, a que se le
haga participe de las diferentes actuaciones de los profesionales.
f) A no ser sometida a ningún examen o intervención cuyo propósito sea de investigación, salvo
consentimiento manifestado por escrito bajo protocolo aprobado por el Comité de bioética.
g) A estar acompañada, por una persona de su confianza y elección durante el trabajo de parto, parto
y postparto.
h) A tener a su lado a su hijo o hija durante la permanencia en el establecimiento sanitario, siempre que
el recién nacido no requiera de cuidados especiales.
117
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Sin embargo, Buenos Aires, era una de las tres provincias (junto con Formosa
y Catamarca) que no adhería a la misma. Esto resulta sumamente alarmante y
llamativo, considerando que en dicho territorio reside cerca del 40% de la población
argentina.
Con estos antecedentes, en marzo del año 2009, se sanciona la Ley Nacional
N° 26.485, Ley de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia
contra las Mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales.
La violencia contra las mujeres es conceptualizada como:
i) A ser informada, desde el embarazo, sobre los beneficios de la lactancia materna y recibir apoyo para
amamantar.
j) A recibir asesoramiento e información sobre los cuidados de sí misma y del Niño o Niña.
k) A ser informada específicamente sobre los efectos adversos del tabaco, el alcohol y las drogas sobre
el niño o niña y ella misma.
92 Las otras modalidades que expone la ley N° 26.485 son violencia doméstica, institucional, laboral,
118
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Cabe señalar que los tipos y las modalidades de violencia que aparecen en el
texto legislativo como categorías delimitadas, en la realidad se presentan de manera
dialéctica o con mayor preponderancia de un tipo por sobre otro. Incluso en las
situaciones de violencia obstétrica, donde esta se puede expresar mediante todos y
cada uno de los tipos descriptos en la ley.
En la misma línea, es recién durante el año 2020, que la provincia adhiere a ley
de “Parto respetado”. Si bien la efectividad de dicho texto legislativo se encuentra
119
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
120
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Me costó mucho conseguir un médico con quien pudiera sentirme cómoda y tranquila para llegar a
avanzar con el embarazo. Tengo obra social por el trabajo, es la del ejército: IOFA. Y bueno, no sé por
qué, pero acá en Buenos Aires los médicos te cobran un plus aparte para asistirte en el momento del
parto o cesárea. Esto también era un problema, digamos porque uno tenía que saber que para el
nacimiento tenía que contar con 15 o 20 mil pesos, para que te asistan, si no tenías que ser atendida
por el que este en ese momento de turno (…) Bueno, cuando encontré una doctora que me gustó, que
era de la obra social, esta también me cobraba, pero yo ya había decidido que era una locura gastar
121
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
15 o 20 mil pesos en alguien que me asistiera el parto cuando todos son médicos y todos deberían
saber.
Bianca, 30 años.
Entrevista realizada el 8 de Agosto de 2020
Desde que el acceso a la salud fue dispuesto como un bien posible de comprar
y vender en el mercado, los y las usuarias de este pasaron a ser consumidoras/es,
por lo que se construirán también, todo tipo de inequidades y desigualdades.
Mientras tanto, el cumplimiento de esta ley se transforma en un rentable
negocio en Buenos Aires y CABA. Algunas clínicas privadas han comenzado a ofrecer
un programa de parto dónde se interviene sólo si es necesario, las mujeres pueden
parir entonces acompañadas, en la posición que elijan. Para acceder a los mismos,
es necesario abonar por fuera, incluso de hasta la más alta categoría de prepagas,
tanto las consultas previas y el pago del parto / cesárea. Uno de los hospitales
privados que ofrecen este “servicio” es el Hospital Universitario Austral. El mismo
describe el programa en su página web como:
122
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
del niño recién nacido es llevada a cabo por un neonatólogo y una nurse de
nuestro hospital”.93
Vemos que lo que se ofrece no es nada más que aquello que se estipula en la
Ley N°25.929. En efecto, para acceder a ello se requiere un abultado pago extra,
además de lo cubierto por la prepaga u obra social.
Simultáneamente, también debemos resaltar que en algunas maternidades
públicas se han comenzado a impulsar asistencias a nacimientos de manera
respetuosa, como es el caso de la Maternidad Estela de Carlotto y del Hospital
Posadas.
Por otro lado, entendiendo a la salud en clave de totalidad, afirmamos que no
existe salud, sin alimentación, sin alegría, sin agua, sin buenos tratos, sin vestimenta,
sin amistades, sin trabajo, con discriminación y fundamentalmente con violencia
(Canevari 2017:94 citando a Chiarotti, 2003).
Otro de los obstáculos que tiene nuestro marco legal, es la ausencia de
sanciones, por lo que, ante un hecho de violencia obstétrica, no existe una forma
puntual de denunciarlo, en tanto no está tipificada como un delito.
No obstante, si existe la posibilidad de realizar reclamos de tipo
administrativos. Una de las opciones, es ante la CONSAVIG. Trata de un trámite
gratuito que consta de la presentación de una nota (Ver anexo N° 3) relatando lo
sucedido. A partir de ello, la comisión intentará verificar la existencia de prácticas y/o
condiciones en el establecimiento sanitario denunciado, que generen situaciones de
violencia hacia las mujeres. Asimismo, puede realizarse una auditoría en el
establecimiento y posteriormente se formularán recomendaciones para procurar que
las situaciones de violencia no vuelvan a ocurrir.
Otra vía de reclamo administrativo es ante la Defensoría del Pueblo de la
Nación. El mismo, también es un trámite gratuito que consiste en la presentación de
una nota relatando lo sucedido. A partir de la denuncia, la Defensoría puede iniciar
una auditoría en la institución y hacer las recomendaciones pertinentes. Esta entidad
puede solicitar la intervención de otros organismos94.
123
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Por último, para realizar una denuncia judicial es preciso el patrocinio jurídico
de un abogado. Pero sucede que, para ello, las situaciones deben encuadrarse en
mala praxis, la cual, si está configurada por las leyes como delito, valiéndose de
secuelas físicas.
Son escazas las herramientas existentes ya que la violencia obstétrica
propiamente dicha no tiene sanción penal. No obstante, pese a estas limitaciones, es
sustancial fomentar la realización del reclamo o denuncia ante un hecho de violencia
obstétrica, ya que ello contribuye a hacer visible la problemática. Puede aportar,
además al proceso singular de sanar/procesar la experiencia vivida, así como
interpelar a los diversos sujetos involucrados; desde el personal y la institución de
salud, donde lo deseable es que puedan re pensar sus propias prácticas, hasta la
comunidad en general.
En este trabajo aseguramos que el punitivismo nunca es la solución, pero
teniendo en cuenta que mientras las lógicas de nuestra sociedad sigan siendo
sancionatorias y punitivistas, es importante que exista la posibilidad real, concreta de
denunciar el incumplimiento de esta ley por parte de las instituciones, tal como ocurre
con otras violencias. Sin duda, la sanción no es la clave, pero es un acto reparatorio
hacia las mujeres que han sufrido violencia.
Otra de las dificultades que ubicamos en esta ley, es aquella que hace
referencia a la medicalización y patologización. ¿Hasta cuándo se considera
medicalización necesaria y cuando se transforma en un exceso de ella? ¿Cómo y
quiénes delimitan lo normal de lo patológico? Como explica Canevari (2017) son solo
los/as profesionales de la medicina quienes tienen la autoridad para hacer las
demarcaciones, ya que en ello descansa en el carácter científico de la medicina
Las recomendaciones de la OMS ya en 1985, la OMS publicó unas
recomendaciones (OMS 1985:436-437), que suelen llamarse La declaración de
Fortaleza (Brasil). Las recomendaciones se basan en que la mujer tiene un papel
central en todos los aspectos de dicha atención y deben poder elegir como parir. Las
parteras han de ser las encargadas de los partos normales/ vaginales/ fisiológicos.
Las cesáreas nunca deben superar el 10-15 %, y se insiste en la inconveniencia de
rituales de medicalización sin justificación.
Sin embargo, ¿Cómo puede ser que sigamos teniendo una tasa tan alta de
cesáreas? ¿Cómo puede ser que se rechace toda la evidencia científica disponible,
que demuestra lo importante que es el modo de nacer en un gran número de factores
124
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
125
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
96De hecho, según Rita Segato (2013) es necesario, inclusive, lidiar con la perplejidad de que, aunque
nunca las mujeres han tenido más capacidad de denuncia que en la actualidad, nunca han sido más
vulnerables a las agresiones de tipo letal y a las formas de crueldad que hoy se aplican al cuerpo de
las mismas. ¿Por qué? Porque la legislación formal no es capaz de desarticular ese artefacto – o
dispositivo - violento que organiza las relaciones interpersonales que llamamos “patriarcado” (Segato,
2013:83).
126
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
prevención del embarazo basados en la observación de signos y síntomas naturales de las fases
fecunda e infecunda del ciclo menstrual (OMS 1989:1)
127
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
embargo, la distancia entre la letra de las leyes mencionadas y las garantías para el
ejercicio de tales derechos es todavía un abismo, lo cual profundizaremos en el
siguiente apartado.
ARTICULO 1º.- La presente ley será de aplicación tanto al ámbito público como
privado de la atención de la salud en el territorio de la Nación. Las obras
sociales regidas por leyes nacionales y las entidades de medicina prepaga
deberán brindar obligatoriamente las prestaciones establecidas en esta ley, las
que quedan incorporadas de pleno derecho al programa médico obligatorio.
Este primer artículo, establece las competencias, señalando que los tres
subsistemas de salud deben ajustarse a la ley en cuestión. A su vez postula que todas
las prestaciones deben estar cubiertas por las prepagas y obras sociales.
Sin embargo, tal como relata Bianca, es usual en el sistema privado y de obras
sociales, la solicitud de una considerada cantidad de dinero por parte de los y las
obstetras para asistir personalmente los nacimientos. En su relato, si bien considera
128
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
De cambiar algo, creo que le pagaría la doctora. Digamos, el hecho de tener un profesional que ya sabe
tu historia clínica, que te conoce más o menos y que está para lo que una está necesitando, cambia
totalmente. Igual es injusto porque en Córdoba los partos no son así. El médico que te sigue, el médico
que te acompaña, entrás en trabajo de parto y lo llamás para que venga a asistirte y listo. Nunca supe,
excepto cuando vine a vivir acá (Conurbano de Buenos Aires) que haya que pagar para que el médico
te acompañara. Bueno creo que ese orgullo fue el que me impidió tener una mejor atención. El hecho
de que me parece un robo que te cobren, porque de última el Estado o la obra social les paga la hora
para hacer su trabajo. Te viene haciendo un seguimiento que dura todo el embarazo ¡Y no podés no
estar el último día ! Encima a la vez una tener que estar todo el tiempo dándoles detalles a los
residentes, a los obstetras de turno, que: - ¿Cuantas semanas estás? que esto y lo otro. Encima que
te sentís mal, que tenés un montón de cosas en tu cabeza, no es agradable digamos. No es justo pasar
por esa situación.
Bianca, 30 años.
Entrevista realizada el 8 de Agosto de 2020
Por otro lado, Bianca relata que, pese a que se atendió mediante obra social,
tuvo que abonar por su propia cuenta, gran parte de los estudios básicos:
A pesar de lo que pagamos de Obra Social, hubo algunas ecografías que las tuve que pagar. Varias
ecografías las tuve que pagar aparte. No hice 3D, ni nada de eso, solo las ecografías que me pedían y
aparte de la de la translucencia la de la nuca, la de los órganos. Bueno, un Doppler del corazón me
pidieron y cada una de estas las tuve que abonar por fuera de la obra social.
Bianca, 30 años.
Entrevista realizada el 8 de Agosto de 2020
Es evidente que el derecho a que las mujeres sean informadas sobre lo que se
está practicando sobre sus propios cuerpos no es más que el respeto más elemental
hacia ellas. Ahora bien, en las entrevistas pudimos visualizar que en absolutamente
129
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
La obstetra de guardia del materno directamente me dijo, te vas a quedar internada y te vamos a
inducir el parto, porque tiene que nacer Dante. Ese mismo sábado me quedé ahí a las 18 horas me
pusieron la primera pastilla intravaginal para empezar la inducción. Iban cada 6 horas, así a medida
que dilatas, te ponían otra, y otra… y ahí fue ya como a las 22 horas que empezaba a sentir mucho
los dolores. Pero lo único que me decía la doctora era: descansá.
Bruna, 24 años.
Entrevista realizada el 8 de agosto de 2020.
Mediante las entrevistas, pudimos dar cuenta que en las instituciones de salud
ocurre que no son pocas las intervenciones médicas que, no sólo no se informan a la
mujer ni a su familia, sino que además se llevan a cabo de manera rutinaria y/o
protocolaria, y sin lugar para la información y por ende a un real consentimiento.
Michel Odent (2009), viene alertando sobre lo perjudicial que es un para una
mujer en trabajo de parto atravesar situaciones de stress, en tanto estas segregan
hormonas que inhiben la producción de oxitocina99. Sin embargo, la confinación a las
camillas, las luces altas, escenarios donde hay siete personas observando como una
de ellas realiza un tacto vaginal100, entre otras, son algunas de las situaciones que
aparecen en los relatos, las cuales se encuentran muy lejos de garantizar respeto,
intimidad y consideración de la individualidad. Bruna plantea que a pesar de estar
130
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
París acostada y punto. No es opción. Eso que yo sí que estaba bien estaba informada, pero bueno, al
menos yo si o si quería parto natural. Entonces no cuestione la posición, él era el que sabía y bueno,
así fue.
Bruna, 24 años.
Entrevista realizada el 8 de agosto de 2020.
El primer interrogante que nos surge al leer este artículo es ¿Quiénes deberían
facilitar el protagonismo de la mujer? Consideramos que habla más bien de una
naturalización de la apropiación de los nacimientos por parte del Modelo Médico
Hegemónico, por lo que el protagonismo, debería de alguna manera ser devuelto o
concedido a la mujer. Contrariamente, de acuerdo con el enfoque hegemónico que es
el de riesgo, se visualiza a las mujeres como pacientes y a las gestaciones y partos
principalmente, como procesos que en cualquier momento pueden desatar una
catástrofe, como relata Luz:
Me fui a aplicar las inyecciones. Por si ella decía que, si no me bajaban rápidos esos ácidos, iban a
tener que tener una cesárea de urgencia; me fui rápido a inyectarme con el corazón en la boca de que
se podía estar muriendo mi hijo.
Y nada, después era así porque yo fui al día siguiente y ya me bajaron y bueno, bueno, “ándate a tu
casa ya está”, pero no era que me querían internar.
131
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Si había tanto riesgo de que se me podía morir mi hijo, lo mínimo que una se espera es bueno, déjame
internada, contrólame. Y nada, si tengo que tener una cesárea de urgencia, la tengo: no importa. Pero
no, ella me hacía irme a mi casa con todo el susto en el corazón y después volver otra vez y así.
Luz, 24 años.
132
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Sin embargo, el hecho de parir vaginalmente no implica que esta pudo atravesar un
parto donde se hayan respetado las necesidades fisiológicas.
Al principio quería un parto normal, eso quería cuando me plantee tener un embarazo.
Luz, 24 años.
133
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Mi marido él se sentó al lado mío (lo dejaron entrar con nosotras) y se quedó hasta que nació la gorda.
Y bueno me acuerdo de que el anestesista hablaba y hablaba y hablaba y hablaba de una cosa y de la
otra. Entonces me puso al lado un turbo que me tiraba aire caliente y conversaba con las médicas. Y
antes de la cesárea le pregunto a mi marido: Papá ¿Estás listo? Prepara el teléfono. La sacaron a la
gorda y cuando la sacan es re rubia y bueno… Le hacen una bromita a mi marido.
Bianca, 30 años.
134
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Si, durante la guardia esa fueron tres (tactos) una chica y un varón. Eran los residentes más la doctora
que estaba a cargo. Pero no, nunca me pidieron permiso.
Bianca, 30 años.
Consideramos que el aislamiento de las mujeres es clave para dar rienda suelta
a todos los tipos de violencia obstétrica. La realidad es que los horarios de visita, los
protocolos, la supuesta falta de espacio y etc. generan que este articulo sea un mero
enunciado teórico. Al preguntarle a Gala acerca de sus sensaciones durante el trabajo
de parto, hace mayor hincapié en el sufrimiento que le generaba la soledad, que al
propio dolor físico producto de las contracciones uterinas.
Sola. Al Igual que en todo el trabajo de parto: sola. Porque tampoco es como lo que yo espere en los
cursos de parto, que no informan un poco más quien iba a estar o no podía estar. Dictaban solamente
135
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
los ejercicios. Y un poco de lactancia. Pero yo pensé que mi pareja iba a poder estar ahí. Pero llegamos
y dijeron directamente que no, que no podía estar mi pareja ahí, que solamente en el horario de visita
puede estar.
Gala, 34 años.
Este articulo concuerda con los postulados que la OMS (2018) viene
postulando:
“Se debe mantener a los recién nacidos sin complicaciones en contacto piel
con piel (CPP) con sus madres durante la primera hora después del nacimiento
para prevenir la hipotermia y promover la lactancia” (OMS 2018:7).
Sin embargo, los protocolos institucionales se sobreponen una vez más, a los
derechos de las mujeres, las personas recién nacidas y a toda recomendación
postulada por los organismos reguladores:
Recién cuando me llevaron a la habitación, al rato, me llevaron al bebe y a la hora lo pude ver. El
primero que lo vio fue mi pareja. Y después mi mamá. Recuerdo que lo llevaron a la hora a la habitación
donde estaba yo y ya en la cunita. Pero primero lo conocí en una foto del celular. Cuando lo llevaron lo
primero que hice fue intentar estirar los brazos para poder tocarlo. Ahí recién fue el primer momento
que tuve contacto con él. Luego de eso estuve casi todo el día en la cama, recién al día siguiente pude
sentarme para poder estar con él. Y ahí recién si, lo pude levantar y tocar.
Gala, 34 años.
136
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
someterse a una nueva cirugía, por lo que fueron sumamente complejos los primeros
encuentros con su bebé:
Entonces nada, me acuerdo de que ese primer día por lo menos yo, no podía estar yo con Simón. No
podía, fue re difícil para mí. Así que me costó un montón ese primer tiempo y bueno, después dos o
tres días estuve así y bueno, me dieron el alta y después estuve con Simón ya yo sola, pero bueno, fue
muy difícil ese primer contacto.
Luz, 24 años.
¿Y sobre el parto respetado ya sabias algo? Si, en realidad, el curso preparto de me lo dieron ahí en el
Hospital Militar la partera hablaba de la importancia del parto respetado y nos dio algunas partes de la
ley para que leyéramos nos dijo que teníamos que estar acompañadas, pero yo me fui con una
sensación de que ellos no me respetaron a mi cuando quería la cesárea, entonces esto en el fondo
creo que es como si sintiera la decepción basándome en lo que me dijeron la partera y la obstetra.
Bianca, 30 años.
137
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
realmente significativa. Sabemos que los recursos profesionales pueden ser limitados
por lo que no puede haber acompañamiento permanente por parte de estos a cada
mujer. Ahora bien, ¿Qué pasaría si se capacitaría con información realmente
relevante, acerca del proceso del parto y técnicas de acompañamiento emocional y
del manejo de dolor, tanto a la mujer como a su pareja o vinculo significativo para ella?
Sin embargo, la información que se brinda en estos espacios sigue centrándose en el
modelo medico hegemónico, donde el fin del parto es una persona recién nacida sana
y bien cuidada, más allá de los medios para llegar a ello. Al consultarle a Gala acerca
de los temas abordados en el curso, relata lo siguiente:
Primero como tenía que preparar el bolso. Tanto el mío, como el del bebé: ya tenerlo listo con unos
pañales, unas ropitas, algodón, pervinox, óleo y todo lo que tiene que ver con él y conmigo. Dos
camisones y algunas cosas más, que no me acuerdo ahora eso. Y después si lo de las cuestiones del
cuidado. Y las señales de alerta que debía tener para las últimas semanas o respecto a las
contracciones.
Gala, 34 años.
138
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
En relación con lo antedicho, el concepto de “riesgo”, como fuimos dando cuenta, no es neutral, sino
102
139
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
abogar por los partos domiciliarios planificados, pero, aun así, debe respetar la
autonomía de cada mujer y contemplar la diversidad103.
Para cerrar este apartado, si bien nos limitamos a realizar un análisis especifico
de la Ley 25.929, podemos concluir que esta ley es transversal a otras leyes como
aquellas con relación a las cuestiones de género y a los derechos del Paciente.
103 La Sociedad de Ginecología y Obstetricia de Buenos Aires emitió un comunicado en el año 20015
en el que se posiciona en contra del parto domiciliario, aludiendo que “En nuestro medio los partos
domiciliarios por elección no estarían cumpliendo con la letra y el espíritu de la ley, ya que son asistidos
por "equipos de salud" autoconvocados que no cuentan con aval ni apoyo de una institución
responsable. SOGIBA ve con preocupación los casos de complicaciones graves de partos asistidos en
domicilio por "equipos de salud" pero sin "institución asistente" y que son llevados y a veces
"depositados" sin responsable alguno en las guardias de hospitales, sanatorios o clínicas. (…) Por este
motivo nos vemos en la obligación de advertir a la población que, en coincidencia con lo expresado en
la ley, entendemos que el nacimiento de cualquier argentino debe llevarse a cabo en instituciones que
cuenten con las condiciones necesarias para resolver cualquier complicación materna o feto-neonatal
en tiempo y forma”. (http://www.fasgo.org.ar/images/Parto_Domiciliario_Documento.pdf).
104 Es un concepto acuñado por el geógrafo teórico y marxista David Harvey (2005). Este término hace
alusión al acto de desposeer o desposeerse, pero con relación con arrebatar, quitar, robar, privar,
expropiar o despojar.
140
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
El mismo, colocó en el debate público aquello que hasta entonces parecía ser
sólo del ámbito familiar y doméstico. Las críticas se dirigieron tanto a la forma
tradicional de trazar la frontera entre ambas esferas, como al sentido mismo de la
distinción. (...) En primer lugar, el ámbito público se transformaba en objeto de
reflexión, teorización y legislación, mientras que la esfera doméstica (familiar y sexual)
se trivializaba, aceptando como dato natural las relaciones patriarcales. En segundo
lugar, la distinción público-privado suponía, tanto desde el punto de vista de la
organización social como de la ideología, la desigual asignación de mujeres y hombres
a una y otra esfera. en tercer lugar, la defensa de la “privacidad” tenía como
consecuencia práctica que el ámbito doméstico y familiar se sustrajera al escrutinio
público y a la protección legal. (Lopez Gómez 2003:21 citando a Pateman:1996).
Es de este modo, que el feminismo de los 60´ abordó cuestiones tales como
métodos anticonceptivos, aborto, gestación, parto, puerperio, menstruación, patria
potestad, divorcio, etc.
“Los feminismos que emergieron a partir de las décadas del `60 y `70 en
América Latina y en el mundo, tomaron como una de sus cuestiones centrales la crítica
a los significados y reglas atribuidos a la sexualidad y a la reproducción, y su papel en
la estructuración de las relaciones de subordinación entre varones y mujeres. El
cuerpo, la sexualidad y la reproducción, habían sido constituidos como territorios de
privación de poder para las mujeres. El feminismo entiende que cualquier proyecto de
emancipación debe necesariamente enfrentar y desentrañar la trama de relaciones
desiguales allí erigidas. Con ese punto de partida, se encendió un proceso de
politización 105 o de (des)encubrimiento de los diferenciales de poder en esos
ámbitos. Introdujeron en las discusiones públicas, los derechos y la autonomía, como
interpretaciones alternativas acerca de las necesidades de las mujeres”. (Canevari
20107:66 citando a Claudia Bonan 2003)
Mientras tanto, en nuestro país, como explica Felitini (2011), las mujeres de los
sectores medios urbanos atravesaban un periodo de grandes cambios a nivel político,
jurídico, laboral, y se interpelaban acerca de las pautas en relación con la reproducción
y la sexualidad. En este contexto, relata la autora, se evidenciaba además un uso
141
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
142
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Los cambios legislativos, como bien señalan Castro y Erviti (2009), se han
acompañado por el activismo por parte de grupos, redes y asociaciones que
denuncian la prevalencia de un modelo biomédico en la atención al parto y al
nacimiento y la persistencia de situaciones de violencia obstétrica, al mismo tiempo
que promueven el empoderamiento de las mujeres y sus familias desde un enfoque
de derechos sexuales y reproductivos – no reproductivos (Levin, 2010).
Eva Giberti (1993) afirma que uno de los principales objetivos de los
movimientos por el parto humanizado es denunciar las intervenciones que limitan la
autonomía y el poder de decisión de las mujeres. Los mismos, son sumamente
heterogéneos. Dentro del mismo convergen mujeres, feministas, doulas y
profesionales de la salud. En este sentido, luchan por el respeto tanto de los tiempos
biológicos y emocionales, así como de los aspectos culturales y singulares, en
concordancia con lo estipulado por la ley. Algunas de esas conquistas fueron
cristalizadas por herramientas tales como el plan de parto 110 . Afirmamos que lo
un Plan de Parto, el cual es un documento donde las mujeres estipulan sus preferencias, necesidades,
143
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
“De esta forma, el parto respetado aboga por una humanización del sistema de
salud que pueda priorizar la singularidad del otro, valiéndose de la tecnología
en los casos en donde sea necesario, pero, por, sobre todo, mirando a la
persona en su aquí y ahora como sujeto de derecho y soberana de su cuerpo.
Este modelo necesita, por parte de los profesionales de la salud, un amplio
conocimiento de fisiología del parto y entrenamiento en el trato con
personas sintientes, pensantes, que tienen historias personales que las
definen, siendo conscientes del poder que tienen sus actos, palabras,
miradas, en un momento tan crucial, significativo y de tanta vulnerabilidad para
las parturientas, y haciendo un uso ético de este poder” (Arnao Bergero 2018
:10).
deseos y expectativas sobre el proceso de trabajo de parto, parto/cesárea, nacimiento y pos parto. El
mismo debe ser presentado a la institución.
Por otro lado, entre las alternativas de servicios particulares, existe la posibilidad de la
contratación de parteras y/o doulas para que acompañen las gestaciones, el proceso en las
instituciones, o durante el trabajo de parto en el domicilio de la mujer gestante. Las doulas cumplen un
rol como acompañante de la mujer-madre en el proceso de gestación y parto, y posparto. Las mismas,
tienen conocimientos básicos sobre fisiología del parto y sobre puerperio, primeros auxilios,
puericultura, lactancia y educación prenatal. Las doulas pueden desempeñarse en hospitales, casas
de partos, sanatorios y domicilios y como bien dijimos es un servicio al alcance solo de aquellas familias
que pueden costearlo. Por esto queda claro que es dificultoso que cada mujer gestante cuente con una
doula. Pero nos preguntamos ¿Qué pasaría si en los cursos de preparto se capacitaría con algunos de
estos conocimientos acerca de la fisiología de los cuerpos durante el trabajo de parto?
144
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Según Arnao Bergero, Galván y Rosso (2018), cuando las personas con
capacidad gestante son habilitadas para parir de un modo respetuoso, las
experiencias son vividas como situaciones de plenitud y empoderamiento. Las autoras
afirman en su estudio que los relatos de las mujeres que viven un parto respetuoso
(en los tiempos del propio cuerpo, a su ritmo, en un ambiente familiar, íntimo, cuidado,
amoroso) constituyen en sí relatos de experiencias de empoderamiento.
Por último, en este trabajo consideramos firmemente que nacer mejor es vivir
mejor. Cambiar la forma de nacer nos hará una sociedad más digna, más justa, más
equitativa y sobre todo menos violenta.
111 Este modelo plantea el reconocimiento a las mujeres-madres y a la familia, junto al equipo de salud,
como protagonistas. Define la seguridad de la atención como una de sus prioridades; estimula el
respeto y la protección de los derechos de la mujer y del bebé por parte del equipo de salud. Promueve
la participación y la colaboración de la familia y la comunidad en la protección y el cuidado de la mujer
y el recién nacido. Y estipula la implementación de prácticas seguras y de probada efectividad (Larguía
et al, 2011).
112 Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia.
113 Con estos lineamientos comenzó a funcionar en enero de 2013, en el partido de Moreno, Provincia
de Buenos Aires, la Maternidad de Moreno Estela de Carlotto (MEC), orientado a garantizar derechos
perinatales, pero también aquellos vinculados a la salud sexual integral (Rosemberg y Zerbo 2017).
145
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
146
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
CONSIDERACIONES FINALES
147
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
De esta manera todos los saberes y conocimientos que tenían las mujeres
sobre el parto fueron desautorizados y este pasó a ser concebido como un
acontecimiento médico, relacionado con la enfermedad, lo patológico y el riesgo. Por
ende, una vez desplazados los partos de los domicilios hacia los hospitales, se instala
la necesidad de que debe ser controlado e intervenido.
En ese sentido, la medicina visualiza como sujeto ideal al varón; las mujeres,
por su parte, son del orden de la otredad, como aquello que no es un varón y asociada
a la naturaleza, por ende, al caos. Es así como su sexualidad toda es reprimida,
medicalizándolas y patologizándolas.
En este trabajo pretendimos contribuir a problematizar las falsas dicotomías
como naturaleza/cultura, biológico/social, cuerpo/mente, sexo/género como posición
política, ya que estas clasificaciones duales constituyen uno de los fundamentos de
las desigualdades, legitimadas por el Modelo Médico Hegemónico, tras su apariencia
de neutralidad.
Las asimetrías en la distribución del poder en nuestra sociedad llevan a que,
como lo señala Butler (2002), algunos cuerpos tengan más valor que otros. La
violencia obstétrica da cuenta fuertemente de la asimetría entre los géneros propia de
una sociedad en la que las mujeres tienen un lugar subordinado respecto de los
varones.
Fuimos desarrollando algunos de los mitos sociales y científicos respecto al
género femenino y cómo estos han ido cambiando con el transcurso del tiempo. Sin
embargo, lo que parece permanecer intacto, es el supuesto de que el Modelo Médico
Hegemónico, se posiciona desde un lugar de objetividad y verdad autorizada. Y en
ese sentido, este último ha arrebatado la posibilidad de las mujeres de tomar
decisiones en nombre de ese saber autorizado.
Esto es así en tanto, en los relatos, las mujeres dan cuenta de que la
información que se les brinda es insuficiente, tergiversada o en ocasiones una
verdadera falacia para obtener su consentimiento. Hemos hallado que no hay
diferencia ni en la amplitud, ni en la profundidad, ni en las expresiones de la
violencia obstétrica en el ámbito público ni privado, porque, como dijimos, las
desigualdades de género tienen que ver con la estructura más general de
nuestra sociedad Patriarcal- Capitalista.
Observamos, además, que dado que el Modelo Medico Hegemónico aborda el
parto como un fenómeno exclusivamente orgánico, la atención disponible es colocada
148
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
149
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
150
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
En este trabajo nos preguntamos cuáles serían los posibles caminos por seguir
que permitan comenzar a desarticular el estrecho vínculo que existe entre violencia y
atención del nacimiento. Como hemos analizado, si bien los movimientos por el parto
respetado siguen trabajando arduamente por visibilizar estar problemática, y han
logrado colocar el tema en la agenda pública y política, aún no está garantizado el
cumplimiento de la Ley N° 25929.
151
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
En primer lugar, que todos y todas podamos visibilizarlas. Para ello, es preciso
propiciar herramientas tales como aprovechar la oportunidad de los encuentros
prenatales para brindar una verdadera preparación, que implique además a otros
vínculos significativos para las mujeres y las personas recién nacidas.
152
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Referencias bibliográficas
153
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
154
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
155
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
● HARTMANN, Heidi (1980) Un matrimonio mal avenido: hacia una unión más
progresiva entre marxismo y feminismo. Papers de la Fundación, 88. Fundación
Rafael Campalans.
● HARVEY, David (2005) El “nuevo” imperialismo: acumulación por desposesión.
Buenos Aires. Editorial: CLACSO.
● HERNÁNDEZ SAMPIERI, Roberto, FERNÁNDEZ COLLADO, Carlos y
BATISTA LUCIO, Pilar. (2014). Selección de la muestra. En Metodología de la
Investigación (PP. 170-191). México: Editorial McGraw-Hill.
● KOSIC, Karel (1967) Dialéctica de lo concreto. México: Editorial Grijalbo
● KRAMER, Heinrich y JAMES Sprenger (1971) [1486], Malleus Maleficarum
(traducido del alemán), Nueva York: Editorial Dover Publications.
● Las Casildas. Observatorio de Violencia Obstétrica. (2015). Informe sobre la
encuesta de 2003 al parto o cesárea - Argentina. Recuperado a partir de
https://drive.google.com/file/d/0BucL20WyuYRYTRZWThPcWVyY1U/View
● LEBOYER, Fréderick. (1976). Por un nacimiento sin violencias. Editorial:
Mandala ediciones.
● LÓPEZ, Alejandra, et al (2003) Del enfoque materno infantil al enfoque de la
salud reproductiva. Tensiones, obstáculos y perspectivos. Uruguay: Facultad
de Psicología, Universidad de la República.
● Luisa Fernanda Correa Jiménez, Santiago Escobar, Camilo Gallego El papel
de la violencia: una revisión a la obra de Marx, Engels y Lenin
● MAGNONE ALEMAN, Natalia (2013). “Modelos contemporáneos de asistencia
al parto: Cuerpos respetados, mujeres que se potencian”. Revista
Latinoamericana de Estudios sobre Cuerpos, Emociones y Sociedad, 5(12), 79-
92.
● MALLARDI, Manuel (2016) Fundamentos y génesis de la cuestión social:
acumulación originaria, patriarcado y conquista.
● MARX, Karl y ENGELS, Friedrich (2005). El Manifiesto del Partido Comunista.
● MARX, Karl y ENGELS, Friedrich. (1969). El papel de la violencia en la historia.
Obras Escogidas. Tomo III. Progreso.
● MARX, Karl y ENGELS, Friedrich. (1974). La ideología alemana. Barcelona:
Pueblos Unidos.
● MARX, Karl. (1964). El capital. Crítica de la economía política. México: Fondo
de Cultura Económica.
156
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
157
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
158
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
● YOUNG, Iris. (1992). Marxismo y feminismo: más allá del matrimonio infeliz
(una crítica al sistema dual). Boston: Editorial El cielo por asalto.
159
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
ANEXOS
ANEXO N°1
Guía de entrevista y entrevistas.
Los nombres de las mujeres son ficticios para resguardar la intimidad de cada una de
ellas, así como tampoco se hace mención a los nombres de las instituciones de salud.
160
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
161
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
3.2 Preguntas sobre violencia verbal – simbólica (Para mujeres que han atravesado o
no trabajo de parto).
162
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
• Una vez que nació tu bebé ¿Cómo fue el corte del cordón?
• ¿Cómo fue el primer contacto?
• ¿Cómo fue cuando lo llevaron a hacer los controles? ¿Cuánto tardó
aproximadamente en volver?
6. Preguntas de cierre.
163
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Entrevistada: Gala
• Subsector: Público
• Edad gestacional al momento del parto: 40 semanas de gestación
• Evento: Cesárea
Gala: Fue difícil en los primeros meses, era como un montón de sensaciones nuevas
y estaba como muy alborotada en muchos sentidos. Los últimos meses fueron medios
complicados, por una cuestión de lo que se venía. El tema de los calambres, sueño.
Tenía que sostener muchas cosas. Pero puntualmente no fue difícil para mí.
Entrevistadora: Respecto a los controles, ¿Me podrías decir más o menos cómo era
la relación con tu obstetra y cómo se fueron desarrollando los controles?
Gala: Si. Los controles fueron buenos, me gusto la relación que tenía con la obstetra
en el hospitalito.
Cada vez que tenía que ir, me aclaraba las cosas: para qué eran las ecografías,
porque era necesario hacerlas en determinado tiempo. Con ella si podía sacarme
dudas, en sí. En eso no tuve problemas. Pude hacerme todos los controles. Lo que sí,
una parte los tuve que hacer en otro lugar donde tenía que pagar, porque en el hospital
demoraban mucho tiempo para hacerlos: Una ecografía, que es algo simple,
demoraba un mes y medio, y no tenía tiempo a veces para esperar tanto.
Gala: Al curso de preparto me invitaron del hospitalito en sí. Pero yo fui a uno que
hicieron acá, en Villa Tesei, en el centro cultural. Que convocaba la municipalidad, eso
fue en los últimos meses. Fui con mi pareja los primeros encuentros, después ya fui
sola. Estuvieron buenos, te tranquilizaba el saber por lo menos lo que tenía que
esperar. Después los ejercicios, muchos me los olvide en el camino al parto (risas).
Gala: Primero como tenía que preparar el bolso. Tanto el mío, como el del bebé: ya
tenerlo listo con unos pañales, unas ropitas, algodón, pervinox, óleo y todo lo que tiene
164
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
que ver con él y conmigo. Dos camisones y algunas cosas más, que no me acuerdo
ahora eso. Y después si lo de las cuestiones del cuidado. Y las señales de alerta que
debía tener para las últimas semanas o respecto a las contracciones.
Entrevistadora: ¿Hay algún tema que no se tocó y hubiese sido necesario que se
incluya?
Gala: La lactancia. Me hubiera gustado. Porque eran como 4 encuentros por temática,
pero en el medio los suspendían. Suspendieron como un mes casi y fui a los últimos.
Pero cuando lo dieron, yo estaba en el último mes: ya no tenía ni ganas de ir.
Entrevistadora: Bueno, vos me dijiste que tuviste una Cesárea ¿Te gustaría
contarme cómo se fue dando?
Gala: El día anterior, el viernes por la tarde noche, ya había despedido la mucosa más
o menos. Igual al día siguiente, yo a la mañana fui a la feria a caminar un poco. Fue
mi pareja, y ahí ya empecé como a cansarme de más y tener más contracciones. Nos
fuimos a casa, y las fui controlando. Empecé a controlar los tiempos, estaba asustada
un poco. Las contracciones se daban cada 5 minutos y ya estaba. Así que pedimos
un Uber y nos fuimos al hospital tipo cuatro. Y a partir de ahí, cuando llegamos espere
afuera un rato, me dijeron que camine un poco más y ya cinco y media estaba
entrando, en la camilla, esperando.
Gala: Si, estaba acostada. Estaba acostada y no permitieron que entre mi pareja. El
no puedo estar en ningún momento. Yo les pedí, si él podía pasar y me dijeron que
no.
165
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Yo necesitaba alguien que me acompañe no quería estar sola. Quería que estuviera
mi pareja conmigo. Lo que vi es que fue el mismo mecanismo con todas las mujeres
que estábamos ahí.
Estaban solas ahí adentro, esperando a que dilataran más. En mi caso, ya a las 8:30
se acercó un grupo de médicos con las enfermeras, y yo no rompía bolsa y ya estaba
en 8 dilatación.
Y me tuvieron que romper la bolsa y cuando rompieron me dijeron que tenían que
programar rápido la cesárea, que tenía que ser en ese momento por meconio.
Gala: Me acostaron, -yo quería salir de esa cama, no quería estar acostada-. Me
sacaron toda la ropa, me pusieron medicación por vía, para agilizar un poco más las
contracciones.
Pero la mayoría del tiempo estuve ahí sola en sí, yo pedía que venga alguien, pero no
venían. No sé si sería una estrategia de ellos o una manera de ellos de atención en
sí.
Y cuando yo entré al hospital, me pidieron todos los estudios, pero luego me los
volvieron a hacer en ese momento, porque como los otros fueron pagos y hechos en
otro lugar, ellos tenían que hacerlos ahí, previamente al parto.
Entrevistadora: ¿Te acordás que respondían cuando pedías que viniera tu pareja?
Les pedí también que, si se podía quedar conmigo después de la cesárea, durante la
noche. Y me dijeron que no, que un hombre no podía pasar, que eran todas mujeres
las que estaban ahí.
Pasó mi mamá. Ella trabaja ahí y entonces la conocían. Y la dejaron pasar. Pero en
sí, tenía que estar sola todo el tiempo. Pero igual una respuesta clara nunca me dieron.
Si me la dieron, no lo recuerdo.
Entrevistadora: Cuando te ibas suministrando los medicamentos por la vía ¿Te iban
explicando más o menos qué era lo que estaban poniendo?
166
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Gala: Me dijeron que me ponían oxitocina para agilizar un poco más el parto. Eso sí
lo sentí, porque empecé a sentir más rápido las contracciones. De eso sí me acuerdo,
quizás me dieron más explicaciones, pero no las recuerdo.
Gala: El recordar como respirar. Intentaba hacer los ejercicios, intentaba respirar de
acuerdo con la última capacitación que tuve en los talleres. Eso un poco, me
tranquilizaba, porque fue una desesperación constante, estar sola y esperar mucho
tiempo, todo me parecía interminable muy largo. Necesitaba que alguien me hablara,
me contenga.
Gala: Estaba un poco desesperada porque como te dije sentía que estaba muy sola.
Necesitaba alguien conmigo. En la misma habitación había otra chica conmigo. Y
nadie se acercaba. No tenía con quién practicar (los ejercicios). Yo tenía la idea de
que dejaban entrar a mi pareja y él me acompañaba a realizar los ejercicios.
Gala: El monitoreo siempre fue constante, todo el tiempo monitoreaban los latidos.
Gala: Si la obstetra sí, las dos que estaban ahí si se presentaron por su nombre.
Luego cuando me rompieron bolsa eran como 7 personas más las que entraron y ahí
ya no sabía quiénes eran.
Gala: Tres estaban a cargo atendiéndome a mí. Después el resto me di cuenta con el
pasar de los días que eran personal de enfermería. Que estaban ahí. Que los fui
conociendo a medida que estaba allá dentro, de maternidad.
167
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Gala: En realidad para mí fue como que pasó rápido. Como que fueron 15 minutos,
pero en realidad fueron desde las 8:30 que entré, hasta las 11:30 de la noche. Que
nació mi bebé. Pero para mí no duró nada, lo que sí apenas me rompieron la bolsa
me di cuenta de que iba a ser por cesárea y eso me lo dijeron enseguida. Entonces la
obstetra, ahí fue enseguida a buscar a mi pareja para que firmara, de ahí me llevaron
directamente al quirófano.
Cuando entramos al quirófano, estaba muy nerviosa. Porque fue todo muy rápido para
mí. Me dijeron que no tenía que hablar ni respirar. Y después me preguntaron qué
música quería escuchar. Y les dije Abel pintos. Y recuerdo que escuchaba esos temas.
Y eso me tranquilizó.
Luego el anestesista me dijo que me callara y no respire así porque yo estaba muy
alterada y recién ahí entendí porque me lo dijo. Que no tenía que hablar y esas cosas.
Gala: Sí, como se iba desarrollando la cesárea. Después hablaban entre ellos otras
cosas, cosas de ellos, a mí ni me hablaban. Sentí como si era un trámite estar ahí
conmigo.
Entrevistadora: Me dijiste que tu pareja no pude entrar, ¿Pero tu mamá pudo entrar
en el momento de la cesárea?
Porque tampoco es como lo que yo espere en los cursos de parto, que no informan
un poco más quien iba a estar o no podía estar. Dictaban solamente los ejercicios. Y
168
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
un poco de lactancia. Pero yo pensé que mi pareja iba a poder estar ahí. Pero
llegamos y dijeron directamente que no, que no podía estar mi pareja ahí, que
solamente en el horario de visita puede estar.
Gala: Eran dos veces al día, mediodía y a la tarde. Y mi pareja se quedaba todo el día
ahí en la sala de espera.
Después él no se animaba entrar. Porque todo lo que sentía de los gritos de las que
estaban en trabajo de parto y es como que se quedó un poco acobardado.
Gala: La maternidad está en primer piso y hay como 10 habitaciones más. Está
quirófano y está la sala donde te monitorean, esa noche estaba sola. No había otra
mujer al lado mío. Porque eran dos por habitación. Yo esa noche estuve sola. Por
suerte estaba mi mamá. Qué puedo entrar, porque me habían dicho que mi pareja no
podía, yo me había desesperado de quedarme sola.
Entrevistadora: ¿Podrías contar cómo fueron los primeros contactos con tu bebé?
Me explicaron que no podía hablar, porque era para que no me hinche porque con la
cesárea iba a ser peor. Creo que a la hora -más o menos- pude ver recién a mi bebé.
No fue en el momento, sí recuerdo cuando nació, que lo escuché cuando lloró. Pero
no lo pude ver.
169
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Gala: Cuando lo llevaron lo primero que hice fue intentar estirar los brazos para poder
tocarlo. Ahí recién fue el primer momento que tuve contacto con él. Luego de eso
estuve casi todo el día en la cama, recién al día siguiente pude sentarme para poder
estar con él. Y ahí recién si, lo pude levantar y tocar.
Gala: De una de las médicas, que fue la que siempre estuvo ahí fue bueno. Que fue
la que me explicó que hay que había que hacer cesárea ya. Y actuar rápido, ir a buscar
a mi pareja. Y no estar dando muchas vueltas con esos procedimientos que tienen
ellos. En ese sentido sí. Después, todo eso los controles fueron buenos, pero me
hubiese gustado que hubiera más acompañamiento, que hablarán más. Qué
practicaran con vos otras posturas y no estar ahí en la cama sentada a solas, o
esperando sentada en una camilla teniendo las contracciones, esperando que dilatara
más. Y vos pedís que venga alguien y no, te dejaban que pase un tiempo, los llamaba
y al rato venían. Quizás es su manera de trabajar, ¿No? Para mí debería haber otra
manera de comprender lo que es un parto.
Gala: Si, yo pensé que iba a estar con mi pareja. Que iba a estar acompañada. Que
me iban a hablar más. Que me iban a preguntar qué otras posturas querían tener. El
taller te daba muchos ejemplos de situaciones que podías llegar a tener.
En el curso se trabajaba más estando parada, creo que tenían otra cultura de lo que
es el parto
Gala: Si fuera la única opción y no quedará otra en ese momento, iría si me encontrara
con la obstetra que me atendió todos estos meses, ahí si volvería a ir.
En ese momento yo le dije si iba a estar ahí, pero como es un hospital público la
atención es despersonalizada. Vos vas y el personal que está, te atiende. Ella
después, al día siguiente fue y me visitó en la sala.
170
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Gala: En los últimos momentos con 8 dilatación yo ya estaba aterrada, estaba gritando
estaba como loca.
Después fue difícil la lactancia. En si la lactancia ahí adentro. Tenía muy poca
información. Estaba cansada, me dolía todo el cuerpo, no sabía si bajaba la leche o
no bajaba, o si yo estaba haciéndolo bien o no. En el primer momento que lo hacía,
sentía como me miraba mi bebe, nos mirábamos como dos desconocidos.
El momento más difícil después fue llegar a casa y no saber qué hacer, un montón de
cambios en el cuerpo, por estar en el hospitalito tres días y con mucha tensión, miedos
y nervios.
Gala: Si, yo me quede con él. Yo pedí que se quedará un día más, porque cuando yo
estaba con él, sentía que no respiraba bien y como él nació con meconio, quería que
se quede un día más, para que lo controlen un poquito más, porque no me quedaba
tranquila con como respiraba. Y lo controlaron un día más para ver si seguía con esa
situación, pero ya el día siguiente no, no la tenía más, él ya estaba bien y le dieron el
alta.
Entrevistadora: Te quería preguntar ¿Vos conocías algo acerca de los derechos del
parto, el parto respetado?
171
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Gala: Creo que sí, que en un punto sí. Puede ser que apuren el trabajo de parto, o
sea, cuando intentan apurarlo, en algún punto, no es una violencia literal. Pero si hay
prácticas al momento de cuando vos entras que te deberían avisar previamente. En
un punto que se transforman en práctica un poco violentas cuando no te informan bien
o no te permiten otras opciones en sí. En todo caso sos vos la que estás ahí poniendo
el cuerpo y asumiendo todos los riesgos.
Entrevistada: Luz
• Subsector: Privado
• Edad de la mujer al momento del parto/cesárea: 25 años
• Evento: Cesárea
Luz: Bueno, el embarazo bastante bien, pero como yo tenía colestasis sufría mucho
en el sentido de la picazón y el miedo de lo que le pase al bebé y todo eso. O sea, eso
se me descubrió después, como en el segundo trimestre - casi tercero - y a partir de
ahí un poquito más complicado por el tema de que tenía muchos controles: me
sacaban sangre todo el tiempo y bueno por ahí así fue un poquito difícil en general.
Luz: Las últimas semanas fueron más complicadas porque en realidad me sacaban
sangre cada tanto y cuando llego como la semana 35, ahí es como que se me se me
elevó un montón los ácidos.
Y la obstetra en ese momento, lo que me dijo es que, yo ya tenía que tener una
medicación y que ya la tenía que haber estado tomando, anterior a eso. Pero yo había
entendido otra cosa: que la medicación era por las dudas y como eran muy caras, yo
no la había comprado porque se suponía que era por las dudas, ¿No?
172
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Pero en ese momento que se me subió un montón, me reto la obstetra. Porque dijo
que no, que si la tenía que tomar que estaba poniendo en riesgo la vida de Simón,
que se me podría morir ahí cualquier momento. Y tenía que tomar si o si esa
medicación; también me dieron unos corticoides para el desarrollo de los pulmones y
todo;
Todo el tiempo me hacía ir: cada dos días, me sacaba sangre y todo.
Como así, ¿No? Así que fue intenso en las últimas semanas, por eso era ir todo el
tiempo a sacarme sangre y tener como un nudo en la garganta, porque según ella se
me podía morir en cualquier momento si yo hacía algo mal. Por lo menos esta vez fue
cuando más me reto porque supuestamente yo no estaba como cuidando o
cuidándome ni cuidando al a mi hijo, pero bueno.
Luz: Me acuerdo de que fui en ayunas a sacarme sangre como siempre; que ella me
hacía la prueba y era un sábado, y entonces estaba todo cerrado y yo me atendía por
guardia. Y cuando vio el papel que le di, de los resultados como que empezó a
decirme: - ¡Vos no te das cuenta de que Simón se puede morir, qué esto no puede ser
que se te suba a este nivel supone qué tenía 50 de ácidos biliares, que era montón!
La verdad que, si era por las dudas no, no, no la compré y ella me dice: - No, vos estás
poniendo en peligro la vida de tu hijo. No puede ser.
Lo primero que hice fue largarme a llorar porque, o sea, me lo dijo prácticamente
gritándome y diciéndome que estaba como poniendo la vida de Simón en riesgo.
Porque en realidad, la colestasis hasta lo que ella me había explicado no tenía cura ni
173
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
tratamiento, qué es como que era algo inevitable que me iba picar que me iban a subir
los ácidos. Entonces supuestamente la medicación bajaba un poco los ácidos, pero
nada.
Hasta lo que ella me había explicado, yo sentí que no tenía control de la enfermedad
en mi cuerpo, y que me iba a durar hasta donde me duré el embarazo. O sea, una vez
que yo tenía el parto, ya se me va a ir, pero bueno, en este momento lo que ella me
hizo sentir, era como que no. Como que la culpa si me llegaba a pasar algo era mía.
Me fui a aplicar las inyecciones. Por si ella decía que, si no me bajaban rápidos esos
ácidos, iban a tener que tener una cesárea de urgencia; me fui rápido a inyectarme
con el corazón en la boca de que se podía estar muriendo mi hijo.
Y nada, después era así porque yo fui al día siguiente y ya me bajaron y bueno, bueno,
“ándate a tu casa ya está”, pero no era que me querían internar.
Si había tanto riesgo de que se me podía morir mi hijo, lo mínimo que una se espera
es bueno, déjame internada, contrólame. Y nada, si tengo que tener una cesárea de
urgencia, la tengo: no importa. Pero no, ella me hacía irme a mi casa con todo el susto
en el corazón y después volver otra vez y así.
Era como todo el tiempo vivir con eso, incluso yo estaba cursando, eso fue otra cosa
que yo no tendría que haber hecho. Por ahí tendría que haber dejado de cursar y
quedarme solo en casa, pero bueno, yo sentía que también no me quería perder la
cursada, estaba como entre las dos cosas, ¿No? Como perder todo el año, y cuando
yo tuviera el bebé ahí sí. Ya no quería cursar entonces era perder el año embarazada,
o cursarlo después cuando naciera.
Yo no quería tener que cursar con un bebé en brazos, se me hacía más difícil, que
estando embarazada, por eso yo seguía yendo.
Pero bueno, al final cuando pasó eso que yo iba y venía al hospital, hable con la
docente y ella me dijo no vengas más, no importa lo de las faltas vos ya estas
174
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
aprobada y regular: no te preocupes. Pero bueno, eso paso después de que me paso
esto.
Entrevistadora: Lu, respecto al vínculo que tenías con esta obstetra, ¿Me podrías
comentar si tuviste un pedido especifico hacia ella y cuál fue su respuesta al respecto?
OSECAC tiene sus propios médicos. Y si yo necesito algún medicamento, eso tiene
que ser recetado por sus médicos.
Pero bueno llego un momento como que me obligaban a como que tenga está
obstetra.
(El obstetra privado) Me dijo que tenía colestasis, si yo quería medicación o el parto
gratuito y todo gratuito, o sea, con la cobertura, tenía que atenderme con ella. Así que
tuve que volver. Y ella lo que me dijo es que no había opción más que cesárea, y me
la había programado para la semana 38.
Al principio quería un parto normal, eso quería cuando me plantee tener un embarazo.
Pero ella lo que me planteaba, que solo podía cesárea.
Esto después yo me enteré de que aun teniendo colestasis yo podía tener un parto
normal, pero me podían inducir al parto antes para acelerar las contracciones y todo.
Pero ella me dijo, no vos sos primeriza, -me acuerdo esa frase textual- nunca vas a
dilatar. Así me dijo, vos sos primeriza y nunca vas a llegar a dilatar, así que lo más
rápido y eficiente es hacer la cesárea y ya está.
175
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Así que me la programo para la semana 38, y luego al final lo tuve unos días antes:
en la semana 37. Porque yo fui como siempre, cada dos días a sacarme sangre: tenía
los ácidos normales.
Le pedí más medicación para tratar de dormirme, porque la picazón era tanta que uno
no podía ni dormir. Entonces le pido esa medicación, porque le digo que no estoy
pudiendo dormir, porque me picaba todo el cuerpo y todo. Me dice bueno, ¿Porque
no lo tenemos ahora? Hay una cama libre, aparte faltan solo unos días para la fecha
de programación y nada, lo tenemos ahora y listo. Y yo me quedé sorprendida, porque
bueno, ya me había planificado para la cesárea programada.
Y ella, como que me lo planteó, que era lo mismo tenerlo ese día, que tenerlo después
de una semana ¿No? Entonces ya que estaba en la clínica, y ella que estaba de
guardia y ya fue que tenga la cesárea, total era como un trámite y así que lo tuve ese
día.
(Se tienta) Me río, me río. Porque no puedo creer que realmente, yo le haya hecho
tanto caso a ella.
Y también sentía en ella una figura de autoridad fuerte, como que yo no sé, que
tampoco me ponía a pensar: ¿Y qué tal si yo no quiero tenerlo ahora?
Porque digo bueno, hoy capaz con la comprensión que tengo de las cosas, no voy a
dejar que me pasen tanto por encima, yo voy a tratar de hacer valer lo que yo quiero
con mi cuerpo o sea con mi embarazo, pero bueno.
Por eso me reía, porque la verdad me pongo a recordar, y digo: No puedo creer como
me dejé que ella no me dejara decidir, y ella decidiera todo. (Se conmueve)
176
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Luz: Ella es la que sabe. Al ser obstetra y haber estudiado, uno se ponen las manos
de ella. Entonces a pesar de que al principio no la quería y todo. Bueno, uno tenía que
agachar la cabeza porque si no, quién sabe cuánto me hubiera salido una cesárea en
algo privado o en otro lugar.
Entrevistadora: Lu Podemos ir al día del nacimiento, ¿Cómo fue el trato que recibiste
ese día?
Luz: El día del parto, bueno a la mañana paso eso que te dije. Que ella me dijo que
iba a entrar a cesárea porque bueno, justo no había muchas teniendo, así que había
como disponibilidad justo ese día.
Bueno, ahí en ese momento, pude estar con Lucas (compañero de Luz). Que me
daban como un suero y después ya pasé al quirófano que estaba solo con la partera
y con ella.
Dijeron, dame una presto barba y como que cortaron bello en la panza. Me dio mucha
vergüenza, porque no me dijeron nada digamos. Pero se reían entre ellas de mí. Lo
que sentí es como que dijeron, la panza de ella es (…) Como que se tendría que haber
depilado más. Me acuerdo de eso y es vergonzoso.
Entrevistadora: Bueno Lu, pero todas las mujeres tenemos bellos en el cuerpo.
Luz: Si, pero era como que en ese momento a mí no me gustó. Ya que se miraron
entre ellas y se mataron de risa; yo no podía hacer nada.
177
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
No sé qué tipo de anestesia es. Pero era como que te anestesiaba de los pechos para
abajo, así que me agarro al toque.
Yo le decía como que estaba muy nerviosa, que se me estaba subiendo la presión,
porque realmente estaba muy nerviosa y ella me decía: no, tranquila, es normal, es
normal.
Luz: Yo cuando le dije me sube la presión, estoy muy nerviosa, ella me dijo: mmm,
no, un poquito, bueno tranquila, no se te subió tanto la presión tranquila, ya está todo
bien. Como es normal que estés un poco nerviosa y nada seguían hablando entre
ellas en realidad.
Luz: No hablaban tanto conmigo, yo me acuerdo de que estaba como muy nerviosa,
no hablaban conmigo; y por ahí cuando llegó Lucas ahí yo lo miré y le dije: - estoy
muy, muy nerviosa. Y como que me decían que trate de no hablar también. Porque
no sé porque es, como que viste que con la operación después no tenés que hablar.
Entrevistadora: ¿Lu, me podrías contar acerca del primer vínculo con Simón cuando
terminó la cesárea?
Luz: Si me acuerdo de que salió, o sea lo saco a Simón de la panza -que costó un
poquito, porque lo tenía muy, muy arriba- yo sentía como esa sensación de que
estaban tratando de bajarlo.
Y cuando ni bien salió, y meo (risas); me acuerdo de que la obstetra la meo toda. Y
se rió y dijo: - Uy, nació Simón, dice. Y me lo pusieron un ratito, que lloraba. Estaba re
nervioso y bueno.
178
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Y después se lo llevaron muy poquito tiempo y le dijeron a mi marido que se los lleve,
que vaya con él.
Y así que eso, pero fueron 3 segundos.
Después lo que pasó fue que como, terminó toda la cesárea estuve mucho tiempo por
ahí esperando a que me asignaran un lugar.
Habrán sido como dos horas, yo sentía frío. Estaba en un pasillo, o sea me pusieron
en un pasillo medio aislado. Yo con mucho frio. No había nadie, así que estaba ahí
esperando, esperando… esperando.
Y bueno, justo pasó que tuve una complicación: que sangraba mucho y de que me
dolía, o sea me dolía mucho y parecía realmente como contracciones.
Y entonces ya me la ponían a Simón al lado mío, y yo estaba como llorando del dolor.
Entonces nada, le decía a mi mamá que no lo podía tener; porque realmente me dolía
mucho, que si pudiera llamar a alguien porque me dolía un montón.
Y así pasó la tarde, me lo ponían a Simón para que le dé la teta. y yo no podía darle
la teta, no podía porque realmente el dolor era horrible y me trataban de exagerada
¿no?
Así que eran como las 11 de la noche cuando yo gritando de dolor le dije a mi mamá
que llamé a la obstetra de guardia. Porque no podía más.
Y cuando me vio la obstetra que estaba de guardia, que era otra dijo: ¡Esto es un
asco, esto es un asco, se está desangrando!
Y toda la camilla estaba toda llena de sangre, porque había derramado sangre desde
la tarde hasta las 11 de la noche, así que tuve que volver al quirófano, porque ella me
dijo que ya no se podía más estar así que había perdido un montón de sangre; estaba
débil y me tuvieron que sacar sangre ahí en ese momento y era como todo tratarte
179
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
mal. ¡¿Como porque no avisaste antes?! y yo lo único que sabía decir era yo avise,
yo avise, y me dice no, horrible que no avisaste. Yo no podía más del dolor. Lo que
me pasó era que estaba eliminando coágulos de sangre grandes, como mini bebés y
era por esto las contracciones que yo sentía y hasta que bueno el anestesiólogo me
vio y me anestesió y ya no sentí más nada.
Así que digamos que, yo el vínculo con Simón me costó un montón en ese momento
porque no podía darle la mamadera nada ¡Nada!
Era como que mi cuerpo estaba todo dormido por la cantidad de sangre que perdí y
la anestesia que tenía encima. Además, los obstetras de la noche decían ¿Cómo no
avisaste?, pero yo decía avise a la enfermera. Pero ellas no sé, no me daban bola.
Entonces nada, me acuerdo de que ese primer día por lo menos yo, no podía estar yo
con Simón. No podía, fue re difícil para mí, encima tuvo que tomar mamadera, que en
realidad eso me costó, porque digo no puedo darle la teta, ni siquiera eso. (Se
conmueve)
Así que me costó un montón ese primer tiempo y bueno, después dos o tres días
estuve así y bueno, me dieron el alta y después estuve con Simón ya yo sola, pero
bueno, fue muy difícil ese primer contacto.
No enfocado en lo que me había pasado a mí. Ahí es como que sentí y me di cuenta
de que había pasado por la violencia obstétrica, pero en realidad en ese momento yo
no sabía.
La verdad es que no sabía, que me culpen por una enfermedad que yo no podía
controlar o que me culpen por algo…
180
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Porque en realidad, por ahí yo siempre trataba de dejarme en las manos de ellos, de
los profesionales de la salud y siempre pasaba algo que era mi culpa, supuestamente.
La verdad que ahora yo siento que no era mi culpa, porque uno no controla lo que le
pasa al cuerpo o cómo transitar el embarazo.
Una no sabe qué es lo que le va a pasar. Y la colestasis no sabía que la iba a tener;
y digamos que en ese momento yo no sabía nada, ni lo había escuchado tampoco,
Pero después lo escuché y después me fui concientizando y bueno…
Incluso después de este parto que tuve tan horrible, -porque si yo me acuerdo de mi
cesárea lloro-, es recordar y llorar.
Yo dije un montón de tiempo, no. No voy a tener otro hijo porque esto es horrible,
horrible. Como la pase, no sabía que se podía pasar tan mal.
Uno piensa en el embarazo que es color de rosa. Pero no. Era como pasarla mal todo
el tiempo.
Que te controlen, que es lo que te pasa y te pasa por sobre tu cuerpo y como está él.
Siempre anular lo que vas a decir, y lo que decís porque es normal y porque total es
una pavada, así que mucho tiempo digamos que yo dije que no, no voy a tener otro.
Sí, sí, esto es lo que tengo que pasar para tener otro hijo y no, uno prefiere no pasarlo.
Luz: Creo que cambiaría poder tener más control sobre lo que me pasa y control sobre
lo que sea. Sobre los profesionales también, que me guíen por lo menos poder elegir
la obstetra, que es salgo mínimo. Por lo menos elegir quien te va a atender o quién te
va a realizar el parto y también por ahí, si fuera posible, que yo estuve averiguando, y
es posible tener un parto natural, que es lo que mejor. Porque al final yo nunca entendí
qué fue lo que me paso ese día.
Porque no sé porque perdí tanta sangre y se echaban las culpas entre ellos, pero creo
que sí, que algo habrá pasado en la cesárea o mi cuerpo habrá respondido
determinada forma a la cesárea creo yo, no sé.
181
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Pero si hubiera tenido un parto natural no me hubiera pasado esto de tener que pasar
tantas veces por el quirófano.
También, porque uno si tiene un parto respetado tiene el parto como natural y ya está,
y no tiene que estar con todo esto que uno no sabe cómo reacciona en el quirófano,
y a mí se me podía haber ido en la vida en ese momento, así que eso cambiaría, si
tuviera que cambiar algo. -
Se complicó porque no tenía obra social. Y el año pasado tuvo (Un hije) y fue increíble
la violencia que tuvo. Yo igualmente estaba más preparada ¿no? Pero también la
paso muy mal. ¡Muy mal!
Y bueno, horrible fue. Pero no solo fue horrible para ella sino para nosotros también.
Estábamos ahí porque a nosotros nos dijeron va a ir a cesárea porque es de
emergencia. Y no nos dijeron nada más. Estábamos todos (…) La familia con el
corazón en la boca y no nos decían nada. Pasaron 6 horas hasta que terminó todo, y
ella estaba en terapia intensiva. Pero no sabes lo que tuvimos que reclamar para que
alguien nos diga dónde estaba mi hermana y mi sobrina. ¡Impresionante!
No nos decían dónde estaban, ni que había pasado. Nosotros pensamos que se nos
había muerto mi hermana.
Porque era tanto lo que no que no nos decían, que yo ahí me di cuenta de que
realmente la violencia obstétrica, pasa todo el tiempo. Todo el tiempo, a todas. Y ellos
se creen dueños de nuestro cuerpo, o qué nosotros no sabemos lo que ellos saben y
como ellos saben más que nosotros…
Yo entiendo que ellos sepan más, pero sigue siendo tu cuerpo. Una tiene que tener
derecho de pedir explicaciones de lo que te está pasando.
182
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Entrevistadora: Totalmente. -
Y no, al final estaba en terapia intensiva, pero estaba viva. Pero ¿qué les costaba
decirnos? Teníamos que exigir y me acuerdo bien, que nos dijo un guardia primero:
un guardia que estaba ahí custodiando todo, nos dijo no se preocupen está viva. Está
en terapia intensiva, pero está viva.
Es increíble, vos ves en las películas de EE. UU., que salen, te lo muestran al bebe, o
te dicen: ¡Ah! Mira, paso esto o te explican paso esto.
Pero acá no pasa. Eso acá no pasa. Y es horrible. Cuando me acuerdo estar con
mucho frío, frío, frío, y desnuda con la bata. Pero estar en un pasillo, que nadie te diga
con esto (La anestesia) vas a sentir un poco de frío, por el efecto o estamos viendo
donde ubicarte, ¡Algo! ¿No?
Así que nada, es horrible y digo bueno, ahora yo pienso que si tengo otro voy a tratar
de que sea más respetado y hacerme valer.
Y que, si tuviste una cesárea, no implica tener cesárea después. No es así, no, yo
puedo tranquilamente. Yo pensaba que no podía. -
Creo que es algo que debería ser más popular, que todo el mundo esté hablando de
esto, que toca a todas.
Entrevistada: Bruna
• Subsector: Público
• Evento: Parto
183
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Bruna: El embarazo fue divino, perfecto. Desde que me enteré. Hacia el final no. Más
o menos cuando me faltaban dos meses, un mes como mucho, empecé a tener
muchos vómitos, pero hacía mucho calor y comía algo y se ve que toda esta cuestión
de la panza que ya estaba crecida, más la hinchazón, ahí vomitaba mucho, el último
mes.
Bruna: Se llama a Fernando, era un amor, a mí me lo recomendó mi tía, qué ella tuvo
a sus dos bebés y mi mamá también tuvo a dos de sus hijos con él. Es muy dulce,
muy tierno, muy tranquilo. Yo al principio como que fui con mucha confianza y me
costó como poco, igual, pero los primeros meses era, como ¡Dale, decime algo más!
Yo siempre le hablaba, y el “tranquila” … como que todo amor y paz, que nada iba a
pasar. Y lo que sí le pregunté, fue cuando una se prepara para el momento, que tenés
miedo, que no vas a poder, que como es y yo le tenía terror a la episiotomía, que es
el corte que te hacen sino sale él bebe, supuestamente eso no se puede hacer.
184
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Bruna: Yo estaba ansiosa, siempre quise que bueno… eso que sea parto natural, eso
estaba segura al finalizar, este… Como que ya te sentís preparada, más allá de los
miedos que siempre están. Dante no daba señales todavía y un día a las 38 semanas
justamente un viernes, me acuerdo, estaba acostada y me pica el cuerpo, ¡pero me
picaba mal! Hasta las plantas de las manos, al punto de rascarme contra la pared. Yo
decía que raro… La panza toda roja. Espere, pase la noche… Al otro día voy al trabajo
y bueno, le pregunto a mi mamá, le digo Ma mira, me pica bastante y le pregunto a
una de mis tías y me dice, Bren anda ya a control, me dijo que eso que no era normal
del embarazo.
La llamo a mi vieja, voy con ella, me acompaña a las 3 de la tarde el sábado. Llego,
me hacen un estudio de sangre y me salta que tengo colestasis: Es un problema en
el hígado, segrega más líquido y eso estaba generando las picazones.
Supuestamente hay embarazos donde se detecta antes, y en ese caso a las 37
semanas hacen nacer él bebe, porque a partir de ahí corre peligro la vida del bebe.
Yo estaba en la semana 38, así que la obstetra de guardia del materno me dijo, te vas
a quedar internada y que me iban a inducir el parto, porque tiene que nacer Dante.
Ese mismo sábado me quede ahí, a las 18 horas me pusieron la primera pastilla
intravaginal para empezar la inducción. Iban cada 6 horas, así a medida que dilatas,
te ponían otra. Mientras estaba todo bien, a las 12 me pusieron la otra y ahí fue ya
como a las 22 horas se empezaba a sentir los dolores, tranqui… tampoco era que me
moría, la doctora me decía “descansá”. Lo loco fue que pasé muchas guardias, porque
Dante nació a las doce menos cuarto del mediodía del otro día, toda esta tarde la
185
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
madrugada y bueno cambié varias guardias y cada nueva guardia era revisarme
hacerme tacto a ver como estaba.
Bianca: Sí, sí, sí, la verdad fueron bastantes. En un momento me pareció bastante
como rebuscado que calculá a las 7:00 hicieron un cambio de guardia. Siempre las
que venían se despedían, incluso me decían “buena suerte negrita” … Buena onda,
pero me acuerdo de que me habían hecho el tacto a las 6:40 y a las 7 vino otra y me
dijo “bueno es cambio de guardia, ¿cómo estás? Te tengo que hacer tacto”, le dije me
hicieron recién, “es el cambio de guardia tengo que ver cómo estás”, y yo ya a esa
altura no daba más. Pero me dijo de buena manera, incluso no sentí que lo hiciera de
mala gana, pero sentí que era innecesario. -
Bruna: No, la verdad es que previamente me dieron una pelota, te facilitan la ducha,
te ayudan… Hay una partera que viene y te dice podés hacer estos movimientos…
Pero parís acostada, no es opción. Y yo si bien estaba informada, no me planteé la
186
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
posición, si sabía lo que quería parto natural. No me cuestioné, la posición era como
él sabía que iba a ser así y estaba como esperando que así sea y así fue.
Bruna: Gracias a Dios, me permitieron que esté mi mamá y mi tía y estaba Nico, que
es mi pareja. Siempre, incluso cuando venían las doctoras me preguntaban si quería
que se quedaran al hacerme tacto, y es muy importante estar acompañada porque
conozco casos en los que se ponen mala onda y no dejan que haya nadie por ahí la
pareja y nadie más.
Lo que si fueron muchas horas y por ahí mi tía ya en un momento estaba sacada. “No
puede ser que la tengan así sufriendo” Para ella lo tendrían que haber intervenido, yo
le dije a mi mama en un momento, le dije llorando, por favor que hagan algo no puedo
más… No era posible porque no había anestesista, fueron muchas horas.
Entrevistadora: ¿Si pudieras cambiar algo de tu parto algo que no te haya gustado?
Bruna: Sinceramente la veo muy difícil, lo del corte fue lo peor que me pasó en el
parto y que después me cosieron sin anestesia, fue lo que más recuerdo como que yo
le tenía tanto miedo y al final tuvo que pasar.
Bruna: No, no. Mi mamá que estaba ahí conmigo, que sabía que yo le tenía miedo y
Nico, que lo torture todo el embarazo, como que se puso blanco, solo recuerdo que
mi mamá le dijo Nico que está bien, como si quería salir. Pero yo creo que tuvo más
esa reacción porque sabía que era lo que yo no quería que pasara y paso.
Pero no, mi mamá me dijo que tardaron en hacerlo, hasta que ya no se pudo más y lo
hicieron.
187
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Entrevistadora: Los primeros contactos que tuviste con tu bebé, ¿podrías describirlo?
Bruna: Sí, pero no, digamos, lo dije en la medida que pude. La mina, siempre
receptiva y vamos, decía “aguanta es un poquito más, yo sé que te duele” y en un
momento me dijo bajala, porque claro son los pinchazos y levantaba la cola por la
reacción, me decía baja la cola y yo le decía es que me duele mucho.
Bruna: Si, si ya sé que te duele, pero falta un par y ya está, como que era rápido
188
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Si, lo creo, de echo te digo la verdad yo realmente siento que fui afortunada en el
hospital porque tienen el mejor equipamiento, es un hospital re lindo sofisticado, por
eso tiene tanta demanda, pero tengo conocidas que no la pasaron bien y es también,
la gente que te toca, eso también lo rescato.
Me acuerdo de que de hecho fue así y nació creo que hice cuatro pujos, fue muy
rápido. Eso sí puedo pensar que podría haberse evitado, porque Dante nació bien no
tenía vuelta de cordón, nada. Eso creo podría haberse respetado más.
Entrevistada: Bianca
• Subsector: Privado
• Evento: Cesárea
Bianca: Si. Estuve mucho tiempo buscando embarazarme -casi un año- y bueno…
Cuando empecé con todos los análisis y demás para saber si estaba todo bien, me
embaracé. El embarazo en general fue tranquilo, me costó mucho conseguir un
médico con quien pudiera sentirme cómoda y tranquila para llegar a avanzar con el
embarazo.
Tengo obra social por el trabajo: Es la del ejército (IOFA) y bueno, no sé por qué, pero
acá en Bs As los médicos, te cobran un plus aparte para asistirte en el momento del
parto o cesárea. Esto también era un problema, digamos, porque uno tenía que saber
que para el nacimiento tenía que contar con 15 o 20 mil pesos, para que te asista. Si
no tenías que ser atendida por el que este en ese momento de turno
189
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Bianca: En realidad todos los que conocía por amigas que habían tenido familia
cobraban. Pero bueno, ya sabía esto más o menos, cuánto era lo que estaban
pagando y demás. Bueno, cuando encontré una doctora que me gustó, que era de la
obra social, si, está también me cobraba. Pero yo ya había decidido que era una locura
gastar 15 o 20 mil pesos en alguien que me asistiera el parto, cuando todos son
médicos y ya todos deberían saber.
El embarazo lo tuve sin problema, me hice muchas ecografías. Hubo una que no salió
bien y fui repitiendo porque parecía que tenía un problema en el corazón. Pero
después resultó que no. Y todo lo demás fue bien después. A pesar de lo que pagamos
de Obra Social hubo algunas ecografías que las tuve que pagar, como varias
ecografías que las tuve que pagar aparte… No hice 3D ni nada de eso, solo las
ecografías que me pedían y aparte de la de la translucencia la de la nuca la de los
órganos. Bueno, un Doppler del corazón me pidieron y cada una de estas las tuve que
abonar por fuera de la obra social.
Entrevistadora: ¿Bueno y al final vos fuiste con esta obstetra que te sentías cómoda?
Bianca: No, yo me sentía cómoda con ella, pero llegado el momento decidí ir por
guardia, porque tener un bebé por primera vez genera muchos gastos y la verdad que
a mí en su momento me pareció una locura. Pero si hubiese sabido todos lo que iba
a pasar el día del parto… los hubiese pagado cerrando los ojos, pero bueno...
Entrevistadora: Bueno de eso se trata nuestra entrevista, de lo que paso el día del
parto… ¿Querés empezarme a contar cómo fue?
Bianca: Si, había cumplido las 40 semanas, ya habían pasado como 5 días de la
fecha de parto que tenía… Y bueno y empecé a salir a caminar y a la noche me sentí
mal… y rompí bolsa. Cuando rompí bolsa me fui a la guardia y bueno, preparé todos
los papeles de la internación y demás, llevé toda la documentación que yo tenía.
Llegué y había dos médicos de guardia: una obstetra y el otro era un residente. ¡Te
preguntan todo! a pesar de que leen los análisis -que quiero creer que los leen-, igual
te preguntan todo. Y me llevaron a una sala de monitoreo y después me asignaron
una sala. Estuve como 2 horas ahí en monitoreo y después me derivaron a la
habitación que me habían asignado. Como a las 2 de la mañana empecé con
190
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
contracciones fuertes y más seguidas. Y bueno, y ahí empecé con un médico que
venía me hacía tacto, al rato venía otro y hacían tacto de nuevo, y me decían, no está
bien. O entiendo también, a la vez habiendo residente, el médico que estaba de
guardia el venía, hacia tacto. ¡Pero a la vez los practicantes también! Tenían que
hacerlo para verificar comprobar ellos… Es parte de su profesión, pero en este
momento no le gusta nadie.
Bianca: No, nunca me pidieron permiso, o sea, eso era de imaginar… Yo ya sabía
que iba a ser así. Que los residentes van a pasar a hacerte tacto, pero no imagine que
tantos.
Bianca: Si, durante la guardia esa fueron tres: una chica y un varón -eran los
residentes-, más la doctora que estaba a cargo.
Cuando cambio el horario de los turnos de la guardia, entro otro profesional, entraron
otros dos residentes y entra la partera. Y bueno, ellos también hicieron tacto, después
de las 8:00 digamos cuando cambiaba el turno. Y entra el resto del equipo y eso. Me
hacían tacto… Ya no veía más al resto que había visto durante la madrugada.
Como a las 12 del mediodía, las contracciones eran tan fuertes que era como que
convulsionaba de cómo me sacudía con cada una, no podía controlar nada de
movimiento. Y obviamente por el dolor y yo ya estaba en un ataque de nervios, la
partera venía}, me tranquilizaba, me decía que era normal y ella pidió que me dieran
un sedante.
El sedante lo que hizo fue que durmiera media hora - media hora reloj -, y, pero nada
más, porque no me calmaba, las contracciones volvían. Ya estaba muy cansada…
Como a las 12 la noche rompí bolsa. A las 2 de la mañana empecé con muchos
dolores. Al mediodía seguía con 2 de dilatación, a pesar de todo el trabajo seguía con
2 de dilatación… Entonces mi mama se preocupó porque ella paso por una situación
parecida y al final mi hermana nació con una discapacidad.
Entonces que tampoco me ayudaba… Y bueno y por las malas experiencias que
hemos tenido a la hora de tener familia en la familia… Mi mamá, aparte de que mi
hermana nació con discapacidad, después perdió un bebé porque se le desprendió la
191
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Yo ya sabía que iba a nacer porque se había roto bolsa, estaba dilatando y bueno y
trataba de tranquilizarme por ese lado, pero por otro lado estaba tan dolorida y
cansada ya… Entonces cuando vino la médica a eso de las 2 de la tarde le dije que
quería una cesárea. Me dijo que íbamos a esperar un rato más, y ahí me hizo tacto y
me dijo que tenía cuatro o cinco de dilatación, vamos a esperar un rato más.
Paso una hora. Volvieron a hacerme tacto y estaba igual, entonces le dije que quería
la cesárea. Entonces vino la partera a decirme porque era mejor el parto y demás y
yo dije igualmente, y ya estaba con un mal humor y no quería ver a nadie, que no me
importaba, que trajeran los papeles que iba a firmar el consentimiento para la cesárea.
Bueno, creo que hasta el día de hoy se me caen las lágrimas por la cara de decepción
de la pantera. Nunca me había sentido tan mal, no sé. Al final creo que en el fondo
pensó, “no me va a cobrar el parto”. Fue lo único que pensé, que no me va a cobrar
el parto, por la cara que me hizo. Pero no me sentía mal porque al fin y al cabo tener
la cesárea, pero si me hizo sentir mal ella. Defender el parto respetado es una cosa y
respetar la decisión del otro también es importante. Porque en el momento el dolor me
superaba y que está estaba muy cansada y que no quería tener un parto era mi
decisión.
Bueno, lo alargaron como una hora y pico… esperando. Y tenía miedo porque una
vez que dilatas hasta cierto punto no es viable una cesárea, pero bueno, me llevaron
al quirófano. Y cuando llegue temblaba tanto por las contracciones que me moría,
aunque parece que estaba convulsionando todo el cuerpo, no me podían poner la
anestesia. Estuve un rato, pero en un rato ahí los médicos tratando de prepararme
para ponerme la anestesia, que pudieron y apenas me pusieron anestesia sentí un
alivio y frío, hacía mucho frío. Y bueno, pero bueno justo vino mi marido, él se sentó
al lado mío, lo dejaron entrar con nosotras y se quedó hasta que nació la gorda y
bueno me acuerdo de que el anestesista no me hablaba, pero hablaba y hablaba y
192
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
hablaba de una cosa, de la otra. Y me puso al lado un turbo que me tiraba aire caliente
y conversaba con las médicas. Antes de la cesárea le pregunto a mi marido “papa
¿Estás listo? Prepara el teléfono”. Sacaron a la gorda y la saca, ¡Re rubia! Bueno ahí
le hacen una bromita a mi marido.
Entrevistadora: ¿Volviendo más a la parte del trabajo de parto, aparte del tacto te
pusieron vía?
Bianca: No, cuando yo entre y dije que había roto bolsa, dijeron que no podía caminar,
que no podía moverme. Que tratará de recostarme y bueno, estuve en la cama y
bueno, mi mamá entraba y me masajeaba. Es lo único que hice. No podía estar en
ninguna forma en la cama.
Bianca: Si me hubiesen dejado caminar, hubiese podido caminar por el pasillo, que
había no digo grandes distancias, pero tenía un dolor tan grande atrás, que necesitaba
moverme. No podía estar ahí en la habitación, por más que me dijeran lo que me
dijeran, no tenía forma de estar y bueno. Yo había visto vídeos de partos que les dicen
que traten de caminar, de moverse, bailar. Pero a mí no. Entonces pensé que nunca
había previsto que al haber perdido el líquido de la bolsa no me podía mover. Entonces
como me dijeron eso, no, no lo hice, después la verdad que nunca averigüé si eso se
podía no se podía, pero ya estaba.
193
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Bianca: Me di cuenta… fue la cara porque la conocía o sea, cuando eso hice el curso
preparto, está nos dijo que si queríamos pautáramos una cita en el hospital y nos iba
a mostrar todas las partes del hospital, a dónde eran las salas donde esperaban, etc.
Si vos tenías un parto lo tramitabas con grupo pediátrico, que es la parte de
maternidad en este Hospital Militar, esa parte es tercerizada. Pero si vos te haces una
cesárea, ellos no la facturan. Porque se hace cargo el hospital, porque se hace en el
cuarto piso, en el quirófano con el personal del hospital. Entonces creo que ahí venia
la decepción de ella y por eso insistían en que sea por parto natural
Bianca: No, nada, yo cené en casa la noche anterior como a las 9:30 a 22 y estuve
hasta la noche, que estuve 24 horas sin comer, y al otro día tampoco porque como a
la tarde me hicieron la cesárea, no me dejaron comer hasta el otro día, estuve casi un
día y medio sin comer.
Bianca: En realidad estaba tan nerviosa y cansada, muy cansada, que el médico
venia cada rato, el tacto de los residentes y que en cada cambio de turno te volvían a
preguntar todo: que los análisis que de cuantas semanas estaba, todo así, y yo
pensaba ¿No hablan estos médicos en cada cambio de turno? Encima que ya no tenía
más ganas de hablar, tenía que explicar todo yo. Si vuelvo a tener otro bebé, cerrados
los ojos pago lo que me pidieran, 20 y 30 mil pesos, los pago. Porque no tengo ganas
de pasar otra vez por esa situación tan estresante y desagradable.
194
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Entrevistadora: ¿Cómo se dirigían hacia vos por tu nombre o por algún apodo? ¿y
ellos mismos se presentaban?
Bianca: Si, eso se presentaban. Decían si eran residentes o médicos. Desde qué año
estaban, quién era el superior que tenía en la guardia. Y no, nunca me llamaron por
mi nombre. Tampoco me preguntaron cómo me llamaba, era como era muy
impersonal digamos. La verdad que no se me preguntó eso, sí me acuerdo, pero si
por ejemplo mi marido cuando lo vieron le preguntaban el grado porque lógicamente
entiendo que ahí que los médicos tienen grado militar, entonces le preguntaron el
grado, donde había estado… Con el sí hablaban, a mí no me preguntaban, solo me
preguntaban que como me sentía, y si tenía contracciones, si tenía mucho dolor, si
las contracciones las sentía muy fuertes.
Bianca: Miedo sentía cuándo empezaba a sacudirme con todo el cuerpo por las
contracciones. Ahí si entonces me dió un poco de miedo. Me acuerdo de que mi mamá
me contaba que la paso tan mal, como que le dejaron pasar el parto y le tuvieron que
sacar a mi hermana con fórceps. Y ella quedo con secuelas motrices, no pudo caminar
nunca y un leve retraso madurativo; Y creo todo eso también me ponía ansiosa y
sentía que no estaba acompañada. Que necesitaba contención. Si hubiese tenido eso
seguramente tenía un parto, que si pagaba no me pasaba todo esto, porque podría
haber tenido con quien hablar y decirle lo que me pasaba.
Realmente no tenía ganas de pasar por una cesárea, los puntos y el posoperatorio,
es más difícil manejarse con un bebe. De todas maneras, luego estuve feliz porque
nació la gorda y estaba bien y tenía a mi mama, mi marido y tuve a la gorda el
miércoles a tarde y el viernes.
Bianca: No, no, hablaban entre ellos y hablaban con mi marido y recuerdo que le
decían que prepare el teléfono que iban a abrir.
Bianca: Se las llevaron y mi marido se fue con ellos, si les escuchaba porque la lavan
ahí cerca, donde yo estaba en el quirófano, hasta que a mí me cerraron y demás.
195
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
Cuando nació me la mostraron, estaba toda bordo, no la vi muy bien, que aparte que
estaba muy ansiosa. Es como ver, pero no ver… Recuerdo haberla tenido y mi marido
la agarró, ya vi que la tenía el, me quedé tranquila. y espera que terminar el proceso
digamos de la cesárea y bueno, me llevaron a la habitación y al ratito me trajeron a la
bebé ahí nomás, no paso mucho tiempo.
Bianca: Creo que le pagaría la doctora, digamos el hecho de tener un profesional que
ya sabe tu historia clínica, que esa te conoce más o menos, y que está para lo que
una está necesitando, cambia totalmente. Igual es injusto porque en Córdoba los
partos no son así. El médico que te sigue el médico que te acompaña, entrás en
trabajo de parto y lo llamas para que venga a asistirte. Nunca supe, excepto cuando
vine a vivir acá, que haya que pagar para que el médico te acompañara. Bueno creo
que ese ese orgullo fue el que me impidió que el hecho de que me parece un robo te
cobren. Porque de última el estado o la obra social les paga la hora para hacer su
trabajo, te viene haciendo un seguimiento dura todo el embarazo y no podés no estar
el ultimo día. A la vez tener que estar todo el tiempo dándoles detalles a los residentes
a los obstetras de turno, que cuántas semanas estás, que esto y lo otro, encima que
te sentís mal, que tenés un montón de cosas en tu cabeza, no es agradable digamos,
no justo pasar por esa situación
Bianca: Si había escuchado, pero en el momento ese que vos estas ahí teniendo
familia pasan tantas cosas por tu cabeza y tantos miedos, que en lo último que estás
pensando es en el trato o en cómo se están manejando los médicos o la institución.
Bianca: Creo que sí, de echo cuando mi bebé tenía 5 meses yo me volví a embarazar
y bueno, justo se descubrió que yo era celíaca, que tenía mucha anemia y demás y
termine perdiendo el embarazo, pero cuando volví a internarme ahí para que me
hiciera el legrado, me pusieron con una mujer que acaba de tener familia. No te
pueden poner en la misma habitación con una persona que está feliz, que acaba de
recibir a su bebé, que está festejando, y vos estas ahí mal sufriendo por la pérdida de
196
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
tu embarazo, entonces ahí si lo ves también desde otro lado, no entendés que no
pueda haber otras habitaciones, pero creo que de última poneme en la habitación de
monitoreo u otra, pero no justo en esa, es muy fuerte.
ANEXO N° 2
RECOMENDACIONES DE LA OMS SOBRE EL NACIMIENTO
DECLARACIÓN DE FORTALEZA 1985
ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD
197
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
198
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
199
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
200
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
201
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
ANEXO N° 3
Modelo de denuncia ante la CONSAVIG y Resoluciones de la Defensoría del
Pueblo de la Nación
Modelo de carta para la denuncia ante la CONSAVIG.
…………………………………, de………………………. de 20…
A La CONSAVIG, Comisión Nacional Coordinadora de Acciones para la elaboración de
Sanciones de la Violencia de Género.
Av. Corrientes 327, piso 14, C1043AAD, Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Por medio de la presente, yo,…………………………………………………………,
con DNI N° ………………………. y domiciliada en (indicar dirección, localidad, provincia y
CP) ………………………………………………………………, siendo mi Obra Social/Prepaga
……………………………………, vengo, en virtud del derecho que me otorga la Ley N°
26.485 de “Protección Integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia hacia las
mujeres
en los ámbitos en que desarrollan sus relaciones interpersonales” a poner en su
conocimiento y
denunciar los hechos de violencia perpetrada hacia mi persona el día ……………… en
la
institución ………………………………………………………………………ubicada en
(indicar dirección, localidad, provincia) ........…………………………………………………….
En tal oportunidad, sucedió lo que a continuación detallo: ………………………..……….
………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………
Estoy convencida que los sucesos narrados constituyen actos de violencia Obstétrica y por
tal motivo solicito su pronta intervención.
Sin otro particular, les saluda atentamente,
Firma:
aclaración:
DNI:
dirección de contacto:
teléfono de contacto:
dirección de mail:
Solicito que mi identidad se mantenga en reserva:
SI / NO
202
General
Barbero Agustina – Leg. N° 128459 –TFG - UnLu – CR. San Miguel.
ANEXO N° 4
Plan Estratégico Provincial de Parto Respetado
Diputada Provincial Mariana Larroque
Resumen del proyecto de Ley
Se crea el Plan Estratégico Provincial de Parto Respetado en el ámbito del Ministerio
de Salud de la Provincia de Buenos Aires.
Se reafirman los derechos de las personas gestantes y las personas recién nacidas
durante el trabajo de parto, parto y postparto establecidos en la Ley Nacional 25929
de Parto Humanizado.
Objetivos
● Articular con organismos provinciales con incumbencia en la temática.
● Brindar asistencia técnica y capacitación a los equipos de salud de los
establecimientos de la provincia.
● Desarrollar campañas de difusión sobre los derechos de las personas
gestantes y las personas recién nacidas.
● Promover la adecuación de las salas de preparto y parto contando con el
equipamiento y elementos necesarios que permitan la libertad de movimientos
que cada persona gestante requiera.
● Desarrollar estrategias comunitarias y territoriales de acompañamiento y
asesoramiento durante el embarazo y preparación del parto.
● Elaborar indicadores de seguimiento y resultado de la implementación de los
protocolos.
● Promover acciones que mejoren la comunicación entre el primer y segundo
nivel de atención para la atención del embarazo y el parto, en concordancia
con los niveles de complejidad que se requieran.
El Plan se implementará en establecimientos de salud -públicos y privados- quienes
deberán garantizar procesos de atención que respeten los derechos de las personas
gestantes y recién nacidas promoviendo el acceso a la salud con equidad y calidad.
Mesa Intersectorial de Trabajo
Conformación de una Mesa de Trabajo Intersectorial, convocada por el Ministerio
de Salud de la provincia de Buenos Aires. Será un espacio de consulta, discusión y
generación de propuestas y protocolos para el desarrollo e implementación del Plan
Estratégico de Parto Respetado.
203
General