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Lengua – Prof.

Federico Matías Flores – Ciclo Superior / Orientado– Año 2022

Los textos argumentativos

Elaboramos textos argumentativos, cuando opinamos acerca de un tema, dando razones o argumentos para defender nuestra
postura y tratar de convencer a quienes nos escuchan o leen. La argumentación aparece en diferentes tipos de texto: avisos
publicitarios, propagandas, notas o columnas de opinión, reseñas críticas, editoriales de diarios y revistas, cartas de lectores, ensayos,
discursos políticos, debates y en la conversación cotidiana.

Características de algunos textos argumentativos

La carta de lector Es un texto epistolar en que el emisor se dirige al director de un diario o una
revista. Su finalidad puede ser denunciar, dar una opinión, agradecer, etc. El
receptor es cualquier lector del diario o revista. No toda carta de lector tiene trama
argumentativa.
La nota de opinión Es un texto periodístico que presenta el punto de vista o la forma de pensar del
autor sobre un tema de actualidad. Llevan su nombre y apellido.
El editorial El director de un diario o revista expone sus argumentos a favor o en contra de un
tema determinado.
La reseña crítica Se opina argumentando sobre la calidad de una película, una obra de teatro, un
programa televisivo, etc.
El ensayo Es un comentario libre sobre un determinado tema (científico, histórico, filosófico,
político, literario o de la vida cotidiana).
El aviso publicitario Se intenta convencer al receptor sobre las características de un producto o un
servicio a fin de que lo adquiera.
La propaganda Se intenta convencer al receptor de que tome conciencia sobre algún
comportamiento, sobre alguna enfermedad, etc.

La argumentación: estructura y recursos

Los textos argumentativos suelen presentar las siguientes partes.

INTRODUCCIÓN O Se presenta el hecho o tema que da origen a la argumentación.


PUNTO DE PARTIDA

TESIS O HIPÓTESIS Es un enunciado breve que expresa directa o indirectamente la opinión del emisor.

DEMOSTRACIÓN O Se despliegan las razones (argumentos) con las que el emisor sostiene su tesis.
ARGUMENTACIÓN

CONCLUSIÓN Se cierra el tema mediante la reafirmación de la tesis demostrada y la síntesis de los


argumentos más convincentes. A veces se aconseja tomar una determinada posición frente
al tema tratado o señalar cuáles son los puntos que aún quedan pendientes con respecto al
tema.

Algunos de los recursos o estrategias argumentativas empleados para construir argumentos son:

 Ejemplificación: se presentan casos concretos y particulares que ilustran la idea defendida. Para introducir una ejemplificación
se emplean estos marcadores textuales: por ejemplo, en concreto, en particular, especialmente, así, pongamos por caso, como
por ejemplo, para ejemplificar, así por ejemplo, sin ir más lejos, para ilustrar esto, como muestra, como muestra el hecho que,
precisamente, tal como, para comprender mejor.

 Cita de autoridad: se menciona o cita a personajes cuyo conocimiento sobre el tema tratado refuerzan la hipótesis del autor. Es
decir, el autor incluye en su texto las palabras de reconocidos periodistas, médicos, profesores, artistas, filósofos, etc. También

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pueden ser refranes (proverbios o dichos populares) o fragmentos de libros famosos. Generalmente, las citas de autoridad van
entre comillas, ya que no son palabras propias del autor del texto.

También existen marcadores textuales para introducir citas de autoridad: de acuerdo con, como dice, según, teniendo en cuenta,
con base en, citando a, como expresa, como lo hace notar, empleando las palabras de, a juicio de, desde la posición de, como
plantea/afirma/señala, dicho con palabras de, en la opinión de, desde el punto de vista de.

 Planteo de causa-consecuencia: se indican las causas (conectores porque, ya que, puesto que, debido a) y consecuencias
(conectores por lo tanto, pues, en consecuencia, por ende, por consiguiente, así que) de lo que se analiza.

 Interrogación retórica: consiste en preguntas que no esperan respuestas de parte del receptor porque estas se presuponen. A
veces se trata de preguntas que ponen en duda un argumento del adversario e introducen los propios argumentos.

 Comparación: se establece una comparación entre dos entidades (personas, animales, objetos, situaciones, acontecimientos,
etc.). Algunos marcadores textuales para introducir una comparación son: como, más/menos que, igual que, semejante a, de
manera análoga, análogamente, de la misma manera/forma, del mismo modo, de manera/forma/modo similar, desde otro punto
de vista.

 Concesión: consiste en aceptar en parte alguna opinión contraria con la intención de reforzar nuestra opinión y convencer al otro.
La concesión puede ir encabezada por marcadores textuales y frases como: si bien, es cierto que, es indudable que, estoy de
acuerdo con, admito que, etc.

 Refutación: consiste en cuestionar y tratar de invalidar otras opiniones mediante argumentos opuestos. Las refutaciones se
introducen mediante conectores como: pero, sin embargo, no obstante. La concesión y la refutación generalmente van juntas.

Otros marcadores textuales empleados en la argumentación son:

1. ORGANIZADORES TEXTUALES. Son palabras o frases que se utilizan para organizar la información de todo un texto:

a) Distributivos: por un lado…por otro…; por una parte… por otra…

b) Ordenadores: primero, en primer lugar, en segundo lugar, etc.

c) Digresivos (introducen un comentario no vinculado directamente con el tema principal): a todo esto, a propósito, por cierto,
dicho sea de paso, entre paréntesis.

d) Espacio-temporales: antes, hasta el momento, más arriba, hasta aquí, ahora, en este momento, al mismo tiempo, mientras,
después, luego, más abajo, seguidamente, más adelante.

e) Conclusivos (cierran un texto o una parte del mismo): en conclusión, en resumen, en suma, en fin, por último, para terminar,
en definitiva, en resumidas cuentas, resumiendo.

2. OPERADORES DISCURSIVOS. Son frases cuya función es determinar el sentido de los enunciados, introduciendo
comentarios acerca de su contenido o de la actitud del emisor ante ese contenido.

a) De expresión del punto de vista: Para mí, en mi opinión, yo creo que, a mi entender/parecer, a mi juicio, desde mi punto de
vista, personalmente, considero que, según considero, por lo que a mí respecta.

b) De manifestación de certeza: evidentemente, es evidente, indudablemente, es indudable, es incuestionable, nadie ignora, está
claro que, de hecho, ciertamente.

c) De confirmación: en efecto, por supuesto, desde luego.

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d) De tematización (indican cambio de tema o cambio de perspectiva del mismo tema): con respecto a, en cuanto a, en relación
con, por lo que se refiere a, por lo que se refiere a, por lo que respecta a, en lo concerniente a, a propósito de, en lo que
concierne a, en lo que atañe a, acerca de.

e) Explicativos (explican o aclaran una idea): o sea, es decir, esto es, a saber, en otras palabras, en otros términos, dicho con/en
otros términos, dicho de otra manera/modo/forma, vale decir.

f) Rectificativos (indican una corrección o mejora en lo dicho): mejor dicho, mejor aún, más bien, digo, en realidad, más
exactamente, más precisamente.

g) De énfasis: cabe destacar que, hay que destacar que, destaquemos que, lo que es más importante, resaltemos que, subrayemos
que, hay que tener en cuenta.

La construcción lingüística del emisor de la argumentación

Como las argumentaciones son textos subjetivos, en los que el autor expone “su verdad”, se caracterizan también por la presencia
de ciertas marcas lingüísticas que remiten al emisor.

Empleo de la primera persona, ya sea a través de los pronombres personales (yo,


nosotros, nosotras) o a través de los verbos (creo, pensamos, sostengo, considero,
opinamos).

Inclusión de verbos de opinión (opinar, creer, negar, afirmar, considerar, pensar)


Marcadores de opinión
Presencia de subjetivemas, es decir, palabras (adjetivos, sustantivos, adverbios,
verbos) que expresan la postura del emisor. Por ejemplo, en la expresión “hecho
lamentable”, el adjetivo “lamentable” refleja una valoración negativa de parte del
emisor.

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