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Veterinaria y Ciencia Animal 22 (2023) 100312

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Veterinaria y ciencia animal

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Grasas y ácidos grasos principales presentes en insectos comestibles utilizados como alimento y alimento

para el ganado.

Sekobane Daniel Kolobe, Tlou Grace Manyelo, Emmanuel Malematja,

Nthabiseng Amenda Sebola, Monnye Mabelebele*
Departamento de Agricultura y Sanidad Animal, Facultad de Agricultura y Ciencias Ambientales, Universidad de Sudáfrica, Florida, 1710, Sudáfrica

INFORMACIÓN DEL ARTÍCULO ABSTRACTO

Palabras clave: Las fuentes alimenticias comunes, como la carne, el pescado y las verduras, son la principal fuente de grasas y ácidos grasos que necesita
entomogafía el cuerpo humano. Los insectos comestibles como gusanos, langostas, termitas, grillos y moscas también han sido identificados como
Acidos grasos esenciales
una fuente potencial de ácidos grasos esenciales, ya que está ampliamente documentado que son ricos en ácidos grasos insaturados
Aceites de insectos comestibles
como los ácidos α-linolénico y linoleico, que son vitales para el funcionamiento normal del cuerpo. La aprobación de los insectos como
Dietas para aves de corral
alimento comestible por parte de la Unión Europea ha despertado el interés en la investigación sobre su potencial para formar parte de la
Beneficios de la salud
dieta humana y animal debido a su abundancia de proteínas, aminoácidos, grasas y minerales. Sin embargo, se ha prestado poca
atención a la importancia y los beneficios para la salud de los lípidos y ácidos grasos presentes en los insectos comestibles consumidos
por humanos y animales. Este artículo tiene como objetivo revisar la importancia biológica de los ácidos grasos esenciales que se
encuentran en los insectos comestibles. Se identificó y describió la acumulación de grasas y ácidos grasos esenciales presentes en
insectos comestibles en base a los niveles recomendados requeridos en la dieta humana. Además, se discutieron los beneficios para la
salud asociados con los aceites de insectos, así como las diferentes técnicas de procesamiento que podrían influir en la calidad de las
grasas y los ácidos grasos en los insectos comestibles.

1. Estrategia de búsqueda 2. Introducción

Se realizó una búsqueda bibliográfica para identificar revistas revisadas por
pares y capítulos de libros recientes publicados entre 2009 y 2023 sobre la
composición de grasas y ácidos grasos de insectos comestibles como alimentos y
piensos. Se realizaron búsquedas en las publicaciones accedidas utilizando bases
de datos electrónicas que incluyen Google Scholar, ScienceDirect, ResearchGate,
Scopus, Web of Science y Directory of Open Access Journals. Las palabras clave
utilizadas en el cuadro de búsqueda fueron “grasas y ácidos grasos”, “insectos
comestibles”, “aceites de insectos”, “entomogafia”, “dietas para el ganado”,
“beneficios para la salud” y “seguridad alimentaria”. Se obtuvieron
aproximadamente 11.700, que se comprobaron y evaluaron minuciosamente. Un
total de 9676 artículos eran artículos no relacionados y otros estaban escritos en
otros idiomas excepto el inglés. Se excluyeron 1954 artículos porque estaban
duplicados, faltaba información o no se centraban específicamente en los insectos
comestibles como fuente de grasas, aceites y ácidos grasos. Posteriormente, se
seleccionaron e incluyeron en la revisión actual un total de 70 artículos
relacionados con el tema y las palabras clave.
A medida que la población mundial sigue aumentando, la malnutrición sigue siendo
un grave desafío en la mayoría de los países subdesarrollados que enfrentan la pobreza y
el hambre, particularmente en África, Asia y Medio Oriente (Atinmo et al., 2009;Adeyeye y
otros, 2023). Durante décadas, las comunidades pobres, especialmente en las zonas
rurales, optan por alimentos cosechados en la naturaleza, incluidos los órdenes de
insectos comestibles, a saber, Orthoptera (langostas y grillos), Isoptera (termitas),
Lepidoptera (orugas), Hemiptera.(chinches) y dípteros (moscas) para hacer frente a la
desnutrición, ya que poseen beneficios nutricionales y para la salud (Tang y otros, 2019;
Elahi y otros, 2022). Estas listas de insectos cosechados y cultivados tradicionalmente son
ricos en nutrientes, principalmente proteínas, grasas y minerales. Sin embargo, el
contenido de grasas y ácidos grasos es el segundo nutriente dominante en los insectos
comestibles después de las proteínas.Kinyuru y otros, 2015;Dobermann y otros, 2017;
Kuntadi et al., 2018). Se componen de aproximadamente 10 a 50 g/100 g de MS de grasas
(Xiaoming y otros, 2010), con una cantidad considerable de ácidos grasos poliinsaturados
Omega-3 (n-3) y Omega-6 (n-6), que son los principales ácidos grasos esenciales
necesarios para el funcionamiento normal de las células del cuerpo humano (Tilami y
otros, 2020; Adli, 2021;Hermans y otros, 2021). Por lo tanto, podrían ser potencialmente

* Autor correspondiente.
Dirección de correo electrónico:mabelm@unisa.ac.za (M. Mabelebele).

https://doi.org/10.1016/j.vas.2023.100312

Disponible en línea el 7 de septiembre de 2023

2451-943X/© 2023 El(los) autor(es). Publicado por Elsevier Ltd. Este es un artículo de acceso abierto bajo la licencia CC BY-NC-ND (http://creativecommons.org/licenses/
bync-nd/4.0/).
SD Kolobe et al.
Se utiliza como fuente de ácidos grasos esenciales en sustitución de los aceites
comestibles convencionales para la alimentación humana y animal.
Según lo informado por estudios anteriores, el pescado, las aves, el cerdo, la carne
de res y los aceites vegetales como el de girasol, soja y palma son los materiales
alimenticios más comunes ricos en grasas y ácidos grasos (Kuntadi et al., 2018;Monter-
Miranda et al., 2018;Tang y otros, 2019). Sin embargo, las comunidades pobres de las
zonas rurales y los pequeños ganaderos tienen poco o ningún acceso a alimentos y
subproductos que suministren aceites esenciales. Por lo tanto, los insectos podrían
resultar una fuente alternativa vital de ácidos grasos esenciales cuando se incorporan a
las dietas. De acuerdo aAbdullahi et al. (2021), la importancia de los lípidos y sus
constituyentes presentes en los insectos comestibles no se ha explorado completamente
a pesar de su alto reconocimiento global como alimentos y piensos funcionales, lo que
limita su demanda y aceptabilidad global por parte de los consumidores. Además, hay
menos información documentada sobre la disponibilidad y el aporte significativo de
ácidos grasos esenciales como los ácidos linoleico y linolénico que se encuentran en los
insectos comestibles (Dobermann y otros, 2017;Feng y otros, 2018). Por lo tanto, esta
revisión tiene como objetivo evaluar el papel importante de los ácidos grasos esenciales
presentes en los insectos comestibles para promover el consumo global, la aceptabilidad
y la cría de insectos comestibles como fuente de aceites comestibles.
3. Descripción de las grasas y ácidos grasos esenciales presentes en los insectos
comestibles
Al igual que en los tejidos animales, el perfil lipídico de los insectos se
compone de fosfolípidos, triglicéridos, esteroles, ceras y vitaminas lipófilas, pero
principalmente dominado por fosfolípidos y triglicéridos, como se muestra en
Figura 1. Ejemplos de fosfolípidos incluyen fosfatidilcolina, fosfatidiletanolamina,
fosfatidilinositoles, fosfatidilserina, esfingomielina y cardiolipinas, que son más
comunes en insectos como las langostas (Mariod, 2020). Generalmente son
responsables de la absorción suave de sustancias liposolubles y también
funcionan para lubricar las capas de las membranas de las articulaciones, el
corazón y los pulmones para mantener su funcionalidad en humanos y animales (
Li y otros, 2015). Los triglicéridos por su parte, son un grupo de ácidos grasos y
gliceroles. Constituyen la mayor parte del contenido de grasa que se encuentra en
materiales alimentarios como insectos comestibles, carne, pescado y aceites
vegetales (Kinyuru, 2014;Kinyuru y otros, 2015;Tang y otros, 2019). El perfil de
ácidos grasos en los insectos se compone de ácidos grasos saturados (AGS) y
ácidos grasos insaturados (AGG), en los que los AGG se dividen a su vez.
Figura 1.Composición de grasas y ácidos grasos de la langosta comestible;langosta migratoria.
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Veterinaria y Ciencia Animal 22 (2023) 100312
en ácidos grasos monoinsaturados (MUFA) y poliinsaturados (PUFA) (Kouřimská y
Adámková, 2016;Akullo et al., 2018;Kuntadi et al., 2018;Elahi y otros, 2022). Como
se muestra enFigura 1, los ejemplos más comunes de AGS incluyen los ácidos
palmítico, esteárico y araquídico (Mishyna y otros, 2020). Además, los ácidos
miristoleico, palmitoleico y oleico son los MUFA que se encuentran comúnmente
dentro de la fracción lipídica, mientras que el n-6 (ácidos linoleico y araquidónico)
y el n-3 (ácidos linolénico y eicosapentaenoico) son los PUFA que se encuentran
comúnmente dentro de la fracción lipídica.Kinyuru y otros, 2015;Musundire et al.,
2016;Tao y Li, 2018). El ácido palmítico, el ácido oleico y el ácido linolénico son los
SFA, MUFA y PUFA más comunes que se encuentran en abundancia en varios
insectos, respectivamente (Kouřimská y Adámková, 2016;Mariod, 2020;Meyer-
Rochow et al., 2021). Sin embargo, los humanos y otros mamíferos, incluida la
mayoría del ganado, no pueden sintetizar ácidos grasos esenciales,
particularmente los ácidos α-linolénico y linoleico, por lo que los insectos como
alimento funcional podrían ser un suplemento dietético adecuado para
suministrar estos aminoácidos vitales para su utilización por el ser humano.Saini y
Keum, 2018).
4. Acumulación de grasas y ácidos grasos en insectos comestibles
4.1. Contenido de grasas/aceite
Los insectos comestibles son ricos en grasas reservadas principalmente como
energía para el crecimiento durante las etapas de desarrollo (Mariod, 2020).tabla 1
describe la composición de grasas y ácidos grasos de varios insectos comestibles
comúnmente criados y cosechados (orugas, langostas, termitas, grillos y moscas),
incluidosGonimbrasia belina(gusanos mopane),tenebrio molitor (gusanos de la harina
amarillos),Rhynchophorus phoenicis(larvas del picudo africano de la palma),Schistocerca
gregaria(langostas del desierto),langosta migratoria (langosta migratoria),Macrotermos
especies (Termitas aladas), Gryllus spp. (Grillos de campo), Acheta spp. (Grillos
domésticos),Hermetia illucens(Mosca soldado negra) ymusca domestica(mosca
doméstica). Las orugas, langostas y termitas contienen un alto contenido de grasa que
oscila entre 11,49 y 69,78 g/100 g. El mayor contenido de grasa se observa en orugas y
especies de termitas. Resultados similares fueron reportados porHlongwane et al. (2020a
,b), quienes observaron un mayor contenido de grasa en especies de insectos del orden
de los lepidópteros (orugas) en comparación con otros órdenes de insectos. Por lo tanto,
las larvas del orden de los lepidópteros se consideran una buena fuente de ácidos grasos
y contienen más contenido de grasa que otros insectos comestibles en cualquier
crecimiento.
SD Kolobe et al. Veterinaria y Ciencia Animal 22 (2023) 100312

tabla 1
Composición de ácidos grasos (g/100 g) de insectos comestibles seleccionados.

Especies de insectos Escenario Composiciones Referencias

Grasas SFA palmítico Ufá MUFÁ oleico AGPI linoleico Omega Omega
(%) ácido ácido ácido 3 (n-3) 6 (n-6)
(C16:0) (C18:1) (C18:2)

Orugas (Lepidópteros)
gonimbrasia l 15.15- 32.50- 3.20- - 7.60- 34.20 26.12- 6.0 3.70 1,60 Tang y otros, 2019;Mariod,
belina 23.38 46,50 31,90 36.00 48.17 2020;Ghosh y otros 2020;
Meyer-Rochow et al.,
2021;Orkusz, 2021
tenebrio molitor l 24.70- 25.35- 18.00- - 43.27- 40,86- 3.11- 2.84- 1.61 29,68 Zielińska et al., 2017; Tang et
43.08 30.12 28.20 66,77 60,63 31.37 29,68 al., 2019 Tang et al., 2019;
Rhynchophorus l 21.10- 39.90- 27.13- - 41,78- 35.05 2.79- 2.20- 0.00 2.20 Mariod, 2020;Anankware y
fénicis 69,78 54.07 34.20 55.00 22,85 19.50 otros, 2021

Langostas (Orthoptera)
esquistocerca A 12.97- 35.30- 23.26- 63.05 38.35- 31.70- 20.68- 10.10- 11.35- 7.28- Fombong y otros, 2021;
gregaria 35.30 42,37 26,90 42,37 40,87 34,80 14.04 13.40 14.04 Zielińska et al., 2017;
Egonyu y otros, 2021
langosta A 30,52 46,70- 39.00- 43.15 25.70- 22.85- 17.45- 3,38-9,32 6.74 10.71 Sánchez-Muros et al.,
migratoria 56,85 43.01 28.00 26.20 25.20 2014;Fombong y otros,
2021
Termitas (Isoptera)
Macrotermos A 26.30- 46,72- 38.35- 50.54- 14.93- 12.84- 4.90- 5.03- 0.00 8.16 Kinyuru y otros, 2013;Tang y
belicoso 48.00 49,46 46,54 53.20 44,64 41,74 38.27 34,42 otros, 2019;
Meyer-Rochow et al.,
2021;Anankware y otros,
2021
Macrotermos A 34.23- 39,40 31.40 60,64 53.10 52,45- 7.57- 7,60-8,84 - - Fombong et al., 2018; Meyer-
nigeriano 50,90 52,50 7.60 Rochow et al., 2021 Kinyuru
Macrotermos A 44,82- 35.05- 27.65- 64,95- 42.50- 9.50- 12.18- 10.75- - - et al., 2013; Meyer-Rochow et
subhialino 47.00 35.40 33.00 89.00 52,77 48,60 46,5 43.1 al., 2021
Grillos (Ortópteros)
Gryllus assimilis A 7.00- 43,72 25,85 56,29 27,49 25.03 28.80 26.13 1,99 26,81 Magara y otros, 2021
32.00
gryllus A 11.90- 3.25- 2.16- 7.46- 3.13- 2.91- 4.33- 4.16- 0,08- 4.25- Magara y otros, 2021;
bimaculato 20,74 38.02 27,73 62,46 32,91 31,76 29,54 27.33 1.15 27,92 Fombong y otros, 2021
Acheta spp. A 12.20- 32.22- 5.50- 64.36- 21.72- 20.18- 33.90- 32.20- 0,01- 2.08- Tang y otros, 2019;Magará
22,96 32,80 22,65 67,40 33,50 31.10 42,64 41.30 0,39 42,63 y otros, 2021;Orkusz, 2021
Moscas (dípteros)
Hermetia illucens l 18.03- 61.36- 9.44- - 17.39- 2.59- 9.18- 6.43- 0.00 8.16 Makkar y otros, 2014;Tang y
32,60 67,93 13.25 26.06 12,84 14.67 13.91 otros, 2019;Anankware y
otros, 2021
musca domestica l 11.49- 33.40- 9.63- - 29.46- 18.30- 16.11- 8.84- 2.94 13.17 Makkar y otros, 2014;Tang y
24.31 44,74 27,60 47,67 21,75 17.00 16.44 otros, 2019;Anankware y
otros, 2021
Requerimientos de ácidos
grasos Humanos - 26,90 - - 30,85 - 16,90 14,95 - - Tang y otros, 2019
Especies de aves de corral (pollos de engorde, - - - - - - - - - 0,83- NRC, 1994
ponedoras, pavo) 2.00

Clave: L-larvas; A- adulto; '-' No reportado; Ácidos grasos saturados SFA; TUFA- Ácidos grasos insaturados totales; MUFA- Ácidos grasos monoinsaturados; PUFA- Ácido graso poliinsaturado5. Papel
importante de las grasas y ácidos grasos disponibles en los insectos comestibles.

etapa de desarrollo (Tang y otros, 2019). Por eso, los insectos en etapas tempranas de 4.2. Contenido de ácidos grasos

desarrollo tienen niveles más altos de fracción lipídica total que en la etapa adulta (
Mariod, 2020). Así, el estadio de larvas y pupas contienen un mayor contenido de grasa
total en comparación con el estadio adulto, y este contenido oscila entre 1 y 70 g/100 g
de MS (Mlček y otros, 2014). Nuevamente, los insectos con un esqueleto de cuerpo
blando (termitas) contienen más lípidos que aquellos con un esqueleto de cuerpo duro
(langostas) (Dobermann y otros, 2017). Otros estudios también concluyeron que los
insectos secos contienen un mayor contenido de grasa, hasta 77 g/100 g de MS con una
gran proporción de ácidos grasos esenciales (Tao y Li, 2018; Mutungi y otros, 2019). Sin
embargo, la acumulación de contenidos de lípidos y ácidos grasos en diferentes especies
de insectos depende de una combinación de factores como el tipo de especie, el sexo, la
etapa de reproducción, la etapa de desarrollo, la temperatura de vida, la estación, los
sustratos alimentarios, el origen geográfico y los métodos de procesamiento, así como
de factores biológicos, incluida la actividad enzimática (Akullo et al., 2018;Monter-
Miranda et al., 2018;Kim y otros, 2019;Mutungi y otros, 2019).
La existencia de ácidos grasos esenciales determina la calidad de los aceites
de insectos, por lo tanto, es importante distinguir y evaluar varios tipos de ácidos
grasos detectados en insectos comestibles (Kinyuru, 2014). Los ácidos grasos más
predominantes en insectos como grillos, langostas, moscas, chinches y termitas
incluyen el ácido oleico (SFA), el ácido palmítico (MUFA) y el ácido linoleico (PUFA),
respectivamente.Kinyuru y otros, 2013;Akullo et al., 2018; Mariod, 2020).tabla 1
muestra la composición de ácidos grasos de diferentes especies de insectos
comestibles y sus niveles recomendados en dietas humanas y de aves de corral.
En términos de AGS totales, las langostas, las termitas y las limas contienen
alrededor de 32,22 a 64,53 g/100 g de MS de AGS totales, lo que está por encima
de los niveles recomendados requeridos en la dieta humana. Además, el perfil
lipídico de las termitas se compone de AGS más altos que el de las especies de
langostas (Kinyuru, 2014;Kim y otros, 2019).
Sin embargo, las fracciones lipídicas de todos los insectos comestibles entabla
1están altamente dominados por UFA con 16 y 18 carbonos, incluidos los ácidos α-
linolénico y linoleico (PUFA) (Monter-Miranda et al., 2018), que, son algunos de los
ácidos grasos esenciales requeridos por el ser humano y el ganado.

3
SD Kolobe et al.
(Kinyuru y otros, 2013;2015). A pesar de eso, el ácido eicosapentaenoico (EPA) (C20:5) y el
ácido docosahexaenoico (DHA) (C22:6) siguen siendo los principales PUFA necesarios
para la buena salud de los seres humanos (Doberman y otros 2017). Los insectos
reportados contienen un total de UFA que oscilan entre 32,22 y 64,53 g/100 g de MS. Sin
embargo,tenebrio molitoryRhynchophorus phoenicisLas larvas parecen ser ricas en
MUFA y niveles de ácido oleico que otras especies de insectos. Mas de, Gonimbrasia
belina, Schistocerca gregaria, Locusta migratoriayachetá especies contienen altos niveles
de PUFA conachetáespecies teniendo la mayor proporción de ácido linoleico (32,20 a
41,30 g/100g MS). Hallazgos similares también fueron reportados porTang y cols. (2019).
Los niveles elevados de PUFA en los insectos aparentemente modifican su estructura
lipídica para existir en forma de aceites, volviéndose así líquidos a temperatura ambiente
(Mariod, 2020). A pesar de eso, todos los insectos comestibles contienen suficiente
contenido de ácido linoleico por encima de los niveles requeridos por las especies
humanas y avícolas (pollos de engorde, ponedoras y pavos). Además, los ácidos grasos
n-3 y n-6 en ortópteros como langostas y grillos oscilan entre (26,81 a 42,63 g/100 g MS) y
(11,35 a 13,40 g/100 g MS) (tabla 1).Fombong y otros.(2021), también observaron que los
ácidos grasos n-3, como el ácido α-linolénico, se acumulan más en las langostas que en
los aceites vegetales comunes como el de girasol, oliva y soja. Esto indica que los insectos
comestibles como alimentos funcionales podrían complementarse en las dietas humanas
para suministrar los ácidos grasos esenciales necesarios en el cuerpo. Sin embargo,
Macrotermes nigeriensisyHermetia illucensreportados en la tabla tenían el contenido
más bajo de PUFA por debajo de los niveles recomendados en las dietas humanas. Por lo
tanto, el conocimiento sobre la acumulación de ácidos grasos en varios insectos y su
consumo seguro podría ayudar a promover el cultivo de insectos como una alternativa a
los alimentos comunes destinados a suministrar ácidos grasos esenciales (Kuntadi et al.,
2018).
Los lípidos y ácidos grasos presentes en los insectos comestibles desempeñan un
papel importante en su funcionamiento estructural y biológico. Se ha informado que los
SFA que se encuentran en los insectos, incluidos el ácido palmítico y el ácido esteárico,
mejoran el sabor de los insectos, mientras que los UFA, principalmente n-3 y n-6 en los
insectos, ayudan a regular la fluidez de las membranas y también participan en la síntesis
y formación de ceras. , feromonas, eicosanoides y secreciones de defensa (Musundire et
al., 2016). Nuevamente, los ácidos grasos esenciales comunes (α-Los ácidos linolénico y
linoleico) por otro lado, tienen una gran influencia en el valor nutricional del aceite de
insectos al reducir sus niveles de colesterol en relación con el ácido oleico (Akullo et al.,
2018). En los seres humanos, sin embargo, los lípidos y ácidos grasos obtenidos del
consumo de insectos y aceites de insectos brindan soporte, protección y aislamiento a
varios órganos y ayudan aún más en el transporte de vitaminas liposolubles esenciales
en el cuerpo.Musundire et al., 2016;septiembre, 2017).Kuntadi et al., (2018)También
observaron que los PUFA de insectos comestibles, como las especies de chinches,
promueven la viabilidad celular, la mitogénesis y ayudan a proteger las células β de la
apoptosis inducida por la glucosa y el ácido palmítico.
Los ácidos oleicos que se encuentran en alimentos comunes como la carne, los
huevos y el pescado también están presentes en los insectos comestibles. Su
función principal es reducir la presión arterial humana y también tiene la
capacidad de curar enfermedades inflamatorias, inmunes y cardiovasculares (
Sales-Campos et al., 2013). Sin embargo, el ácido α-linolénico (PUFA) que se
encuentra en insectos como las orugas es responsable de actuar como una
sustancia nutracéutica que protege el cerebro y proporciona beneficios
antiinflamatorios, reductores del acné y aclaradores de la piel en los humanos (
Tang y otros, 2019). Los n-6 y n-3 (PUFA), sin embargo, producen enzimas
necesarias para la síntesis de ácidos grasos de cadena larga (Akullo et al., 2018).
Además, los ácidos grasos n-3 actúan como estructura de la membrana lipídica,
especialmente en el tejido nervioso y la retina. La literatura anterior informó que
la acumulación de ácidos grasos n-3 y n-6 presentes en insectos comestibles
ayuda aún más a reducir los niveles de colesterol y otros esteroles cuya
acumulación puede provocar enfermedades cardíacas como la aterosclerosis en
humanos (Musundire et al., 2016;Kuntadi et al., 2018; Kinyuru, 2021). Más aún,
también se ha informado que las altas cantidades de fitoesteroles presentes en
especies de insectos como las langostas están asociadas con la reducción de los
niveles de colesterol en el cuerpo humano (Egonyu y otros, 2021). Sin embargo, se
ha reportado que la incorporación de ácidos grasos en la dieta del ganado
proporciona efectos hipocolesterolémicos, anticoronarios y antiartríticos, que
consecuentemente promueven su salud (Musundire et al., 2016).
4
Veterinaria y Ciencia Animal 22 (2023) 100312
Figura 2A continuación se compara la composición de ácidos grasos de los insectos
comestibles con materiales alimentarios comunes, incluidos los aceites de girasol, soja y palma,
el aceite de pescado y la grasa contenida en el pollo, el cerdo y la carne de res. Los insectos
parecen contener más ácidos grasos que los materiales alimentarios comunes (aceites vegetales
y grasas/aceites animales). Sus niveles de PUFA son más altos que los de las grasas/aceites
animales, pero ligeramente más bajos y comparables a los de los aceites vegetales. Por lo tanto,
podrían ser una buena fuente de ácidos grasos esenciales que son vitales para el crecimiento y la
salud de los seres humanos y del ganado.
5. Beneficios de las grasas y ácidos grasos de los insectos comestibles
5.1. En las dietas humanas
Los humanos necesitan las grasas y los ácidos grasos esenciales de los insectos
comestibles para una mejor nutrición y salud. Como se informó enFigura 2, constituyen
la mayor parte del contenido de grasa de los materiales alimentarios comunes como la
carne, los huevos y los aceites vegetales (Kinyuru, 2014). Se ha informado que los altos
niveles de grasa presentes en los insectos comestibles podrían utilizarse como fuente de
energía en la dieta humana para aliviar los problemas de desnutrición resultantes de las
deficiencias energéticas.Hlongwane y otros, 2020b). Los aceites de insectos comestibles
tienen bajos AGS que la carne de res y de cerdo (Kinyuru, 2014). Por lo tanto, podrían ser
un buen complemento, los insectos contienen más AUG que son deseables para el
consumo humano que los AGS (Akullo et al., 2018). Además, se ha informado que
insectos comestibles como las chinches (Musundire et al., 2016) y termitas (Kinyuru y
otros, 2013) como fuente de AGPI podría ayudar a reducir las deficiencias asociadas con
la falta de ácido α-linolénico y linoleico en las dietas de hogares pobres con acceso
limitado a alimentos básicos que contengan suficientes ácidos grasos esenciales (Kinyuru
y otros, 2015;Khalil, 2018). Además, los PUFA que se encuentran en los insectos
comestibles tienen un efecto directo sobre el sabor de los materiales alimentarios, en los
que mejoran la palatabilidad de los alimentos al permitir la retención de su sabor.
Mishyna y otros, 2021).
El aceite extraído de varios insectos comestibles podría purificarse aún más y
agregarse a la dieta humana como aceite de cocina o procesarse en un subproducto
(margarina) como sustituto de los aceites vegetales ricos en ácidos grasos n-3 y n-6 ya
que (Smetana y otros, 2020;Cheseto et al., 2020). Otros estudios también encontraron
que los ácidos grasos esenciales son responsables de la salud y el desarrollo de niños y
bebés (van Huis, 2013;Anankware y otros, 2015;Khalil, 2018;Akullo et al., 2018). Por lo
tanto, la inclusión de insectos comestibles en la dieta humana podría ayudar a mejorar
los medios de vida de muchas comunidades expuestas a la desnutrición (Dobermann y
otros, 2017;Hlongwane y otros, 2020a,b).Tao y otros (2018), también informaron que los
lípidos de insectos comestibles podrían usarse potencialmente para mejorar la ingesta de
energía dietética tanto en la dieta humana como en la animal. Nuevamente, el aceite de
insecto podría utilizarse como loción o crema de manos para hidratar la piel seca (
Verheyen et al., 2018). Así, los insectos comestibles podrían desempeñar un papel muy
importante como fuente de aceite y ácidos grasos esenciales.
5.2. En dietas para ganado
El consumo de insectos por parte de los animales de granja tiene un efecto indirecto
sobre la salud humana a través de la cadena alimentaria (Nyangena et al., 2020). Por lo
tanto, estudios previos informaron que los insectos comestibles contienen una gran
proporción de AGUI suficientes para satisfacer los requerimientos de ácidos grasos
esenciales tanto para humanos como para animales (septiembre, 2017;Tao y Li, 2018;
Feng y otros, 2018;Kim y otros, 2019). La inclusión de harina de insectos en las dietas del
ganado podría ayudar a mejorar la calidad de la carne de aves al elevar la concentración
de ácidos grasos esenciales en la carne.Selaledi et al., 2020). Por lo tanto, los insectos
comestibles podrían considerarse como una fuente alternativa adecuada de PUFA
utilizados en las dietas animales (Mishyna y otros, 2021; Żuk-Gołaszewska y otros, 2022).
De acuerdo aElahi y otros.(2022), una inclusión dietética del 15% de harina de mosca
soldado negra mejoró los niveles de MUFA y redujo ligeramente el contenido de PUFA de
la carne de pechuga de pollo para asar. Además, el contenido de aceite extraído de los
insectos podría complementarse directamente en las dietas del ganado para suministrar
PUFA que no están disponibles en ingredientes oleosos de origen vegetal, como el aceite
entero de soja y de girasol.Longvah et al., 2011;Monter-Miranda et al., 2018). Sin
embargo, un alto
SD Kolobe et al. Veterinaria y Ciencia Animal 22 (2023) 100312

Figura 2.Comparación del perfil de grasas y ácidos grasos (%) en materiales alimentarios comunes e insectos comestibles. Fuentes: (Abbas y otros, 2009;Kostik et al., 2013;Mishra y
otros, 2012;Muzolf-Panek et al., 2021;Awogbemi y otros, 2019).

La acumulación de grasas en la carne conduce a la oxidación de lípidos, lo que
resulta en un sabor y color indeseables y una vida útil reducida.Kinyuru y otros,
2015). Por lo tanto, existe la necesidad de equilibrar el contenido de lípidos y
ácidos grasos al incluir ingredientes ricos en grasas, como insectos comestibles,
en las dietas animales. A pesar de ello, según lo informado por (Tao y Li, 2018), la
información sobre el uso potencial de lípidos y ácidos grasos esenciales presentes
en insectos comestibles y sus niveles de requerimiento en dietas animales es muy
limitada.
6. El efecto de los métodos de procesamiento sobre la composición de
ácidos grasos de los insectos comestibles.
Los métodos de procesamiento son ampliamente considerados como uno de los
principales factores que influyen en la calidad y concentración de grasas y ácidos grasos
presentes en varias especies de insectos (Fombong y otros, 2021). Ejemplos de técnicas
utilizadas en el procesamiento de insectos comestibles incluyen cocinar (cocer al vapor,
asar, ahumar, freír, guisar, curar, etc.), secado al sol, secado al horno, congelación.

Tabla 2
Efecto de los métodos de procesamiento sobre el perfil de ácidos grasos en insectos comestibles africanos comunes.

Procesando Temperatura Duración Especies de insectos Efectos Referencias

método y

Secar en frío - 20 o -50◦C 72 horas Gusano de harina Afectó significativamente el contenido de ácidos grasos y resultó en la Khalil, 2018;Melgar-Lalanne et al.,
T. molitorl. promoción de una oxidación indeseable de grasas y PUFA totales que 2019;Mariod, 2020; Hernández-
causaron mal olor y sabor, acelerando así el deterioro de los insectos Álvarez et al., 2021
con un valor nutricional, estabilidad y vida útil deficientes de diversos
productos de insectos.
congelar y - - - Se ha informado que produce olores a hierbas y a pescado en los Mishyna y otros, 2020
secado al horno insectos.
Cocinar o 55 a 95◦C 20 a 60 Rhynchophorus La cocción lenta o el secado con humo afectaron el perfil de ácidos grasos al Musundire et al., 2016; Melgar-Lalanne et
calefacción minutos fénicis reducir ligeramente el contenido de grasa y los MUFA totales. Sin embargo, es el al., 2019;Lee y otros, 2019
mejor método para estabilizar el contenido de lípidos del picudo africano de la
palma.
Secado al horno 60◦C 19 horas Imbrasia epimetea Afectó significativamente el perfil lipídico de insectos comestibles como Tiencheu et al., 2013;Melgar-Lalanne
la oruga del gusano mopane al disminuir el contenido de UFA, et al., 2019;Nyangena, 2021;Keil y
especialmente los niveles de MUFA y aumentar sus SFA, como el ácido otros, 2022
esteárico.
Solar o Sol- 20 a 38◦C 8 horas para Polirhachis vicina Tuvo un ligero aumento o ningún efecto sobre los ácidos grasos dentro del Melgar-Lalanne et al., 2019;
el secado 7 días perfil lipídico. Nyangena, 2021
freír y - - Termitas y Contenido elevado de AGS y contenido reducido de UFA de los insectos comestibles. Kinyuru, 2014
secado solar especies de saltamontes
Tostar 120◦C - Gryllus bimaculatus Afectó negativamente la fracción lipídica al reducir el ácido Nyangena, 2021
linoleico en comparación con otros UFA
Microonda - - langostas Provoca un desequilibrio en la proporción de tipos de ácidos grasos, lo que Mariod, 2020;Mishyna et al.,2020
el secado reduce el contenido de UFA y expone a los insectos a la oxidación de lípidos.

extracción de grasa 60◦C 15 a 35 Varios insectos Niveles de PUFA ligeramente mejorados, incluida la proporción entre los ácidos Melgar-Lalanne et al., 2019;Indriani y
segundos polvos grasos linoleico y 6n. También podría mejorar el almacenamiento y la vida útil otros, 2020;El Hajj y otros 2023
de los insectos al estabilizar la oxidación de los lípidos y, por lo tanto, prevenir
los microbios indeseables causados por ciertos pigmentos y compuestos con
malos olores.

5
SD Kolobe et al.
secado, secado por microondas y extracción de grasa mediante prensador de aceite.
Tabla 2 indica los hallazgos de informes anteriores sobre los efectos de diversas técnicas
de procesamiento sobre la disponibilidad de ácidos grasos y la vida útil de los insectos
comestibles. De acuerdo aKinyuru et al. (2013), calentar y secar podrían mejorar
significativamente la calidad nutricional y el sabor de los insectos sin alterar su perfil de
ácidos grasos, principalmente la composición de UFA en (Macrotermosspp.) alados de
termitas. Aunque se ha informado que las técnicas de procesamiento como la liofilización
aumentan el contenido de ácidos grasos de los insectos, esto da como resultado la
oxidación de lípidos que, en consecuencia, reduce la estabilidad y la vida útil de los
insectos comestibles.Mutungi y otros, 2019). Hallazgos similares fueron hechos por
Mishyna et al. (2020)quienes informaron que la alta oxidación de lípidos en insectos y
harinas de insectos podría afectar negativamente su contenido de grasa en términos de
calidad y disponibilidad. Nuevamente, se ha observado que el ácido linoleico se oxida
rápidamente cuando se expone a métodos de procesamiento diferentes a los de otros
grupos de PUFA (ácidos α-linolénico y araquidónico) (Anankware y otros, 2015;Nyangena,
2021). A diferencia de,Akullo et al.. (2018)informaron que los aceites de insectos con bajo
contenido de PUFA, incluidos el ácido linoleico y linolénico, tienen una alta estabilidad
oxidativa que actúa contra la oxidación de lípidos. Por lo tanto, el conocimiento sobre el
método de procesamiento necesario para estabilizar las grasas y los ácidos grasos en
insectos y productos de insectos es crucial para mantener la calidad nutricional y
prolongar la vida útil para el consumo humano y ganadero (Kinyuru y otros.,2015).
7. Normas legales sobre el uso de insectos como fuente de aceite comestible.
Aunque la entomogafía no tiene regulaciones legales en ÁfricaGrabowski et al.
(2020), la prohibición de la utilización de insectos por parte de la Unión Europea
(UE) existió hasta 2017. Posteriormente, la prohibición se levantó porque los
insectos comestibles presentan menos riesgos para la salud cuando los consumen
humanos o animales. Por lo tanto, los aceites de insectos podrían administrarse o
complementarse con éxito en dietas tanto humanas como animales, ya que son
seguros para el consumo. SegúnŻuk-Gołaszewska et al. (2022). El levantamiento
de esta prohibición desempeñará un papel importante en la promoción del cultivo
de insectos como fuente de grasas y ácidos grasos esenciales para los seres
humanos y el ganado. Sin embargo, informó que aunque la UE ha permitido el uso
de grasas de invertebrados como insectos, la aprobación está restringida a una
cierta cantidad de insectos comestibles, incluidos grillos, moscas y orugas, cuyo
consumo ha sido probado para ser seguro (Lähteenmäki-Uutela et al., 2017). Sin
embargo, aún se deben tener en cuenta los niveles óptimos de inclusión de
insectos como fuente de grasas y ácidos grasos en las dietas, ya que se informa
que cualquier material alimenticio con AGS como el ácido palmítico y el ácido
esteárico en niveles altos no es deseable para el consumo (Musundire et al., 2016;
Akullo et al., 2018).
8. Conclusión
La composición de lípidos y ácidos grasos de los insectos comestibles incorporados
en la dieta humana podría desempeñar un papel crucial al actuar como fuente de energía
y proporcionar los PUFA esenciales necesarios para el funcionamiento normal de las
células del cuerpo humano. Esto se debe principalmente a que se encuentran en
abundancia entre los insectos comestibles comunes, de modo que cumplen con los
niveles recomendados de grasas y ácidos grasos que requieren los humanos. Aunque el
perfil lipídico de los insectos podría manipularse mediante diversas técnicas de
procesamiento para mejorar su contenido de nutrientes, técnicas como la liofilización
aumentan la oxidación de los lípidos y, en consecuencia, reducen la estabilidad y la vida
útil de los insectos almacenados para consumo futuro. Por lo tanto, el conocimiento
sobre los beneficios dietéticos para la salud de los insectos y los aceites de insectos como
fuente alternativa de alimento podría ayudar a mejorar la demanda del mercado mundial
de insectos y las prácticas agrícolas en comunidades con acceso limitado al pescado, la
carne, los huevos y los aceites vegetales responsables del suministro. Grasas esenciales y
ácidos grasos. También ayudará a despertar la atención y la aceptabilidad de los insectos
comestibles como alimento y pienso, más especialmente en los países occidentales. Por
lo tanto, se podría concluir que, basándose en un buen perfil nutricional y un alto
contenido de grasas y ácidos grasos, los insectos comestibles podrían ser una buena
fuente alimenticia alternativa para el consumo humano. Además, se necesitan más
investigaciones para evaluar el nivel de inclusión óptimo y la seguridad.
6
Veterinaria y Ciencia Animal 22 (2023) 100312
consumo de insectos como fuente de grasas y ácidos grasos en las dietas.
Fondos
Este artículo de revisión no recibió ninguna financiación ni subvención.
Declaración de contribución de autoría CRediT
SDK; Contribuciones sustanciales a la concepción y diseño del trabajo,
SDK y MM; Redacción y edición de manuscritos, EM, NAS y TGM; Revisar
críticamente el artículo de revisión para detectar contenido intelectual
importante. Todos los autores aprobaron la versión final del manuscrito
para su publicación.
Declaración de Ética
Ninguno. Este es un artículo de revisión y no requiere aprobación ética.
Declaración de intereses en competencia
Los autores declaran que no tienen intereses financieros en competencia
ni relaciones personales conocidas que pudieran haber influido en el trabajo
presentado en este artículo.
Expresiones de gratitud
Los autores desean agradecer a la Facultad de Agricultura y Ciencias
Ambientales de la Universidad de Sudáfrica por los recursos proporcionados para
completar este artículo de revisión.
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