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LOS JUEGOS DEL LENGUAJE

METAFÓRICO
LOS JUEGOS DEL LENGUAJE METÁFORICO

“No aprendemos un juego del lenguaje


aprendiendo sus reglas; llegamos a
comprender las reglas aprendiendo el juego.”
(Wittgenstein)
Citado en Hintikka, J. Sandu, G. (1994: 177)
• Configuración lógica del mundo que
alude a la totalidad de los hechos que
acaecen
• Pensamiento, entendido como
proposición con sentido
• Lenguaje que se concibe como expresión
senso-perceptible del pensamiento
• EL SIGNIFICADO correcto de los signos
lingüísticos no se obtiene por definiciones
ostensivas, ni pinturas lógicas, ni puede
encontrarse tratando de imponer modelos
ideales a lo que sucede en la realidad.

• EL SIGNIFICADO debe buscarse en la vida


cotidiana: el significado que adquieren las
palabras surge de su uso.
• El significado de las palabras es comprendido
dentro de los juegos de lenguaje de la
comunidad a la que pertenecen.
• El lenguaje es un juego reglado que forma parte
de una actividad o de una forma de vida.
• Los juegos del lenguaje se guían de acuerdo con
las reglas que los usuarios del lenguaje hayan
pactado, y son estas normas las que confieren
sentido a las palabras.
• Lakoff y Johnson abandonan el objetivismo: la realidad
debe ser vista como una estructura única en términos
de las entidades, las propiedades y las relaciones que
la componen.
• Estas estructuras son externas e independientes del
sujeto cognoscente. Para los objetivistas los símbolos

"se hacen significativos en una y únicamente una forma


a través de una correspondencia con entidades y
categorías ya sea en el mundo existente o en mundos
posibles."
Lakoff, G. (1987), op. cit. pags. 159 – 160
• Los símbolos adquieren su significado en
la medida en que establecen una relación
convencional con los objetos del mundo.

• Se conciben como un espejo del mundo


A los signos verbales se les han asignado dos tipos distintos de
significado:

• El literal o de diccionario que da cuenta del conocimiento esencial,


de las propiedades esenciales de las entidades y las categorías que
esas palabras designan. Este siempre se ciñe a la realidad.

• El no literal o enciclopédico alude a características contingentes de


las entidades que esas palabras designan, dentro de esta categoría
se incluye la metáfora.

• Se considera que este tipo de expresiones no es objeto de estudio


de la semántica, sino de disciplinas como la pragmática que se
ocupan de los significados asignados por el hablante.
• Lakoff y Johnson optan por la visión experiencialista: el
conocimiento del mundo depende de la experiencia

• El pensamiento surge de la experiencia corpórea.

• Se comparten no sólo las experiencias del mundo, sino


también, las convenciones a través de las cuales son
nombradas.

• El lenguaje es producto de la experiencia del mundo, de


la experiencia social.
• Lakoff y Jhonson diferencian las realizaciones lingüísticas
estándar de aquellas que no lo son.
• Sus diferencias se explican a partir de valores socio -
culturales diferentes, dominancia de grupos en las
culturas y usos lingüísticos distintos, dados los contextos
en los cuales se emplea la lengua.
• Los procesos de cognición se explican a partir de la
experiencia corporal, la experiencia socio – cultural y los
conocimientos acumulados que dan origen a la
imaginación.
“El retórico utiliza la metáfora para guiar la
mente de su interlocutor hacia dónde él
quiere que vaya. (...) La metáfora pertenece
a la teoría de la manipulación, en efecto a la
política de la mente.”
“Usted es uno de los intelectuales más
alumbrados de nuestra América. ¿A qué perder el
tiempo con el pasado? Vea, doctor, aquí en el
Paraguay el hombre más alumbrado que tenemos
es el farolero de la ciudad. Enciende y apaga
quinientas mil velas al año. Hasta él sabe que el
porvenir es nuestro pasado.”
Roa Bastos, A. (1977: 224)
Desde hace más de veinte años eres mi fide-indigno
secretario. No sabes secretar lo que dicto. Tuerces
retuerces mis palabras. Te dicto una circular a fin de
instruir a los funcionarios civiles y militares sobre los
hechos cardinales de nuestra Nación. Ya les he enviado la
primera parte, Señor. Cuando la lean, esos bestias
iletrados creerán que les hablo de una Nación imaginaria.
Te estás pareciendo a esos ampulosos escribas, los Molas
y los Peñas, por ejemplo, que se creen unos Tales de
Mileto y no son más que unos tales por cuales.
Roa Bastos, A. (1977: 224)
• Las metáforas plantean una suerte de isomorfismo entre
dos áreas de experiencia:

• Así una discusión, incluso una conversación, puede


entenderse en términos de una guerra, de ahí la
presencia de expresiones cotidianas como:

• Lo atacó todo el tiempo


• Destruyó todos sus argumentos
• Una vez descubrió cuáles eran sus debilidades, acabó con él
• Cuando se conversa con ella siempre hay que tener claras las
estrategias.
De manera similar nos expresamos cuando
hablamos de los deportes:
• Después de 90 minutos logró vencer a su
adversario.
• Fue una lucha cuerpo a cuerpo.
• Cada disparo al arco fue mortal.

• En el mundo de los deportes, al igual que en las


discusiones y la guerra, se ataca, se contraataca,
se vence, se destruye, se aniquila al adversario.
Hablando de futbol El Tiempo tituló hace unos
días: Santa Fe: derrota corta. Al interior del artículo
se dice: Santa Fe (…) no fue ni el sólido equipo que
venció a un pobre Cali ni el voluntarioso que
sucumbió frente a Tigres (…) Más adelante se
señala: en el otro arco, Leandro Castellanos detuvo
dos remates a quemarropa (…) y con eso evitó que
el daño fuera mayor. (…) Libertad, en dos ocasiones
más, no tuvo puntería.”
Hace unos días, en tarde de sol brillante, tomé un
taxi a la carrera. Lo manejaba una mujer, como por
mitad del kilometraje de su vida. Uno no es muy
imaginativo para iniciar una charla … y antes de
hablar sobre la decisión de Obama de atacar a Irak,
o la de Uribe de atacar a Santos, o de la paz, o de la
ambición de los políticos por los grandes puestos,
que son temas de moda, lo usual es referirse al
estado del tiempo. Así que después de mi silencio
mudo de unos 200 pesos de recorrido, rompí el
hielo.
Qué día tan esplendoroso, ¿no? Dije poniendo cara
feliz
Qué esplendoroso ni qué hijuep…ta –respondió la
mujer, como si le hubiera nombrado a la que la
puso a marcar kilometraje en este mundo–. ¿No
ve que esto es un horno el hijuep…? Bogotá es una
ciudad fría, aquí no tiene por qué quemarse uno…
el que quiera calor que se vaya para Melgar … -
dijo, encendida.
Pero, señora, el solecito hace falta … Y el
calentamiento global ha cambiado el clima, nos
toca ajustarnos y tolerar un poco.
El calentamiento global de la taxista fue peor.
Claro, eso dice la gente: tolerar. Pero esto es una
mier… Yo odio el calor, pero aquí se suben y dicen:
‘ña, ña, ña’ – y hacía voces de niña - , ‘¡qué día tan
bonito! ¡qué día tan esplendoroso!’
Qué bonito ni qué hijuep…El sol me da en la cara…
y me toca poner este chal en el vidrio.
Lo puso pero enseguida reaccionó violentamente y
lo tiró al asiento del copiloto mientras decía:
Pero tampoco, porque no me deja ver el espejo … Y
la gente con esas frasecitas maricas.
Tranquila, cálmese … ¿Y si trabaja de noche? – le
dije con voz de arrullo.
¿De noche? ¿Quiere que me maten? ¿Sí? Con esta
inseguridad tan (ya se sabe la palabra, que no es
‘esplendorosa’)
Aquí se estaba acabando la carrera y el tema
estaba caliente … Pero me animé a
preguntarle si nunca sonreía.
¡Pues no tengo ánimo! Dijo, más seria que
político sin cuota burocrática
Váyase por la sombrita – le dije y salí
corriendo (…)
Luis Noé Ochoa, El Tiempo 16 de agosto de
2014, p.30

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