¿Qué es una Estrategias de corrección en los trastornos de los sonidos del habla?

Las estrategias de corrección para los trastornos de los sonidos del habla, también conocidos
como trastornos fonológicos o trastornos del habla, están diseñadas para abordar dificultades
específicas que un individuo pueda tener al pronunciar ciertos sonidos del lenguaje. Estos
trastornos a menudo se observan en niños, pero también pueden afectar a adultos.

1. Evaluación Individualizada: Antes de implementar estrategias de corrección, es crucial

realizar una evaluación individualizada para identificar los sonidos específicos que
presentan dificultades para el individuo. Esto permite a los profesionales personalizar
las intervenciones.

2. Imitación y modelado: Los terapeutas pueden modelar correctamente los sonidos

problemáticos y alentar al individuo a imitarlos. Este enfoque ayuda a proporcionar un
modelo auditivo claro y permite que el individuo practique la producción correcta del
sonido.

3. Ejercicios Articulatorios: Se utilizan ejercicios específicos para fortalecer y coordinar

los músculos involucrados en la producción del sonido afectado. Estos pueden incluir
actividades que trabajan los labios, la lengua, el paladar y otros órganos articulatorios.

4. Feedback Auditivo: Proporcionar retroalimentación auditiva inmediata puede ser

beneficioso. Esto implica que el individuo escuche su propia producción y compare con
el modelo correcto, lo que ayuda a desarrollar la conciencia auditiva y mejorar la
precisión en la producción de sonidos.

5. Juegos y Actividades Lúdicas: Incorporar juegos y actividades divertidas en la terapia

puede hacer que el proceso sea más atractivo y motivador, especialmente en el caso
de niños. Estas actividades pueden adaptarse para enfocarse en los sonidos
problemáticos.

6. Terapia Focalizada en Patrones Fonológicos: Algunos trastornos fonológicos afectan

patrones específicos de sonidos en lugar de sonidos individuales. La terapia puede
centrarse en abordar estos patrones y enseñar al individuo a aplicar las reglas del
habla correctamente.

7. Tareas en Casa: Proporcionar actividades y ejercicios para realizar en casa puede

extender el proceso de corrección más allá de las sesiones de terapia. Esto implica la
participación de los padres (en el caso de niños) o del individuo mismo (en el caso de
adultos).

8. Refuerzo Positivo: Ofrecer elogios y recompensas por los logros y esfuerzos del
individuo durante la terapia puede aumentar la motivación y la participación activa.

Es importante destacar que las estrategias de corrección deben adaptarse a las necesidades
específicas de cada individuo y la consistencia en la práctica es esencial para lograr mejoras a
largo plazo. Además, la colaboración con los padres y otros miembros de la familia puede ser
crucial, especialmente en el caso de niños.

¿QUÉ SON LOS SONIDOS DEL HABLA?

Los sonidos del habla, también conocidos como fonemas, son las unidades básicas de sonido
que componen un idioma y que se utilizan para formar palabras. Estos sonidos son producidos
por la articulación de los órganos fonadores, como la lengua, los labios, el paladar y las cuerdas
vocales, entre otros. La combinación y variación de estos sonidos forman las palabras
habladas.

Es importante tener en cuenta que la cantidad y el tipo de fonemas pueden variar de un

idioma a otro. Cada idioma tiene un conjunto específico de sonidos que los hablantes nativos
reconocen y utilizan para distinguir palabras.

Existen dos tipos principales de sonidos del habla:

1. Consonantes: Sonidos que se producen al restringir o interrumpir el flujo de aire en la

boca. Estos sonidos pueden clasificarse según la manera en que se producen (por
ejemplo, oclusivas, fricativas, nasales) y según el lugar de articulación (por ejemplo,
labiales, dentales, velares).

2. Vocales: Sonidos que se producen con una abertura relativamente libre del tracto
vocal. Las vocales son esenciales para la formación de sílabas y son parte fundamental
de la estructura de las palabras. Se clasifican según su posición en la boca y la forma de
la lengua.

La correcta producción y percepción de estos sonidos son fundamentales para la comunicación

efectiva en un idioma determinado. Cuando un individuo tiene dificultades para producir
ciertos sonidos de manera clara y precisa, puede experimentar un trastorno del habla y es
posible que se requiera intervención terapéutica, como la terapia del habla, para mejorar la
pronunciación y la comunicación.