En la actualidad, los dirigentes de las empresas y encargados de la

administración del capital humano se encuentran ante la necesidad de

rediseñar constantemente la organización, frente a los cambios disruptivos que
se han dado, además de considerar la composición actual de la fuerza laboral.
Se hace necesario entonces, tener nuevos equipos de trabajo con modelos
administrativos innovadores, gestionados por líderes jóvenes con una nueva
perspectiva de gestión de negocios. En este módulo revisarás estas
perspectivas de negocio y las fuerzas que continuarán impactando a los
trabajos en el futuro.

Forma en que trabajan las empresas para eficientar sus procesos

Las doce fuerzas

Bhalla, Dyrchs y Strack (2017) mencionan que se avecina una ola de cambios,
los cuales pronto harán que la forma en que trabajamos sea casi irreconocible
para los líderes de negocios de hoy. En esta era de tecnologías en rápida
evolución, modelos de negocio, la demografía e incluso las actitudes en el lugar
de trabajo, todas cambiando constantemente, no solo son pertinentes, sino
también exponenciales en su ritmo y alcance. Las empresas, desde las nuevas
compañías hasta las grandes industrias y los negocios en línea, experimentarán
los efectos de manera trascendental y transformadora.
Durante un análisis exhaustivo del panorama laboral global, The Boston
Consulting Group identificó fuerzas, o megatendencias, que se dividen en dos
categorías: cambios en la demanda de talento y cambios en la oferta de
trabajo. En la primera categoría se abordan los cambios en la demanda de
talento, por ejemplo, la productividad tecnológica y digital, y los cambios en
las formas de generar valor comercial. En la segunda categoría se abordan los
cambios en la distribución de recursos y cambios de cultura y valores en la
fuerza laboral (Bhalla et al., 2017). A continuación, se enlistan estas
megatendencias:
Características de las doce fuerzas
Productividad tecnológica y digital
Cambios en las formas de generar valor comercial
Hemos podido ver que las empresas irán más allá de sus límites físicos,
desarrollarán plataformas para promover la colaboración entre todos los
interesados. El papel de la organización cambiará de un controlador de
recursos a un facilitador de ecosistemas y un conducto para realizar
aspiraciones individuales. Se optará por organizar equipos de trabajo
interdisciplinarios más pequeños y más ágiles, que permitan también la
innovación. Las empresas desarrollarán (y redesarrollarán) continuamente a su
gente, para que puedan estar equipados para hacer frente a la ola de cambio.
La empresa cambiará procesos, políticas y sistemas de recursos humanos para
interacciones de resolución de problemas. Utilizarán el software flexible,
basado en la nube, que reemplazará la documentación y los controles
tradicionales; recursos humanos personalizará sus interfaces con los
empleados para brindar un mejor soporte individual.
La tecnología digital y la inteligencia artificial conducirán a nuevas funciones y
categorías de trabajo, pero también a la escasez de personas con las
habilidades necesarias para cumplir esos roles, por lo tanto, deberán enfocarse
más en desarrollar habilidades digitales entre sus trabajadores actuales o
reclutando nuevos empleados.

Fuerzas de cambio que impactan

en el futuro del trabajo, para
optimizar la operación comercial

El futuro del trabajo

El futuro del trabajo está por venir. En algunas organizaciones y en varios
negocios, ya llegó. Algunos proyectan una imagen de película de ciencia ficción,
previendo la fatalidad a medida que los robots se apoderan de nuestros lugares
de trabajo, o bien que en un 50% los humanos son desplazados por la
inteligencia artificial y robots (Schwartz, Stockton y Monahan, 2017).
Y, entonces surge la pregunta, ¿podrán los seres humanos tener un trabajo en
el futuro? La respuesta a esta interrogante es sí; pero los puestos y
requerimientos serán diferentes a los que se conocen hoy en día; las personas
estarán trabajando regularmente con la inteligencia artificial o robots, siendo
un complemento para poder solucionar las problemáticas a las cuales se
enfrentará la empresa. A continuación, se presenta un gráfico que representa
de forma breve el futuro del trabajo:
Podemos observar que los detonadores del cambio son inicialmente las
tecnologías; sin embargo, la disminución de los índices de natalidad y el poder
de la demanda de los clientes también son factores determinantes. Entonces,
la estructura organizacional también cambia, por lo tanto, debe existir una
reingeniería de trabajo y una transformación de la fuerza de trabajo. Todo esto
implica que las personas tengan un aprendizaje para la vida y definan su propia
carrera. Las empresas deben rediseñar el trabajo hacia la tecnología, utilizando
nuevos modelos de estructura organizacional y los gobiernos deben
implementar nuevas políticas legales y regulatorias.

Las implicaciones del futuro del trabajo

Las oportunidades que se presentan en el futuro laboral son una oportunidad
para que las organizaciones reinventen los lugares y fuerzas de trabajo. Pero
esto implica mandatos a tres niveles; social, organizacional e individual.
Schwartz, Stockton y Monahan (2017) clasifican tres tipos de implicaciones y
describen diversas oportunidades y necesidades en cada una de ellas. A
continuación, analicemos la propuesta: