Está en la página 1de 132

perspectivas revista trimestral

de educación

Redactor-jefe: Zaghloul Morsy

Perspectivas se publica también en las siguientes


lenguas:

Inglés:

prospects
quarterly review of education
(ISSN 0033-1538), Unesco

Francés:

perspectives
revue trimestrielle de l'éducation
(ISSN 0304-3045), Unesco

Árabe:

IJJJÄJ^II^
(ISSN 0254-119 X ) , Unesco

Ruso:

nepcneKTMBbi
• aonpocu oöpaaoeaHMU
(ISSN 0207-8953), M o s c ú
Chino:

(ISSN 0254-8682), Beijing

Precio y tarifas de suscripción:


U n año: 86 francos franceses
N ú m e r o suelto: 27 francos franceses

Para estas diferentes ediciones, puede dirigir sus pedidos


al agente de venta de las publicaciones de la Unesco en
su país, quien le indicará los precios en moneda nacional.
perspectivas
Vol. X V I , n.° 2, 1986

Jalones 159

POSICIONES/CONTROVERSIAS
L a educación latinoamericana en mutación Germán W. Rama 165
La tecnología educativa en las universidades de los países
en desarrollo Raymond Ldllez 181

CUADERNO
La educación en periodo de austeridad (I):
planificación y financiamiento
~_ i

Crisis económica y crisis de la educación: algunas perspectivas


François Orivel ¿03
Reforma y planificación de la educación en u n contexto de crisis ,
económica Martin Carnoy ¿ 213
£1 financiamiento de la educación en periodo de recesión
Keith Lewin 225
£1 financiamiento de la educación con recursos no gubernamentales
Peter Williams 243
¿Puede resultar positiva la limitación de los gastos en educación?
Aldo Visalberghi 255

TENDENCIAS Y CASOS
L a evolución del gasto público en educación: 1975-1983
Ignazio Coceo y Geraldo Nascimento 265
El bilingüismo en China Yon Xuequn 273

Revista de publicaciones

Perfiles de educadores: Boutros El-Boustany 281


Reseñas 286

ISSN 0304-3053
Se ruega dirigir la correspondencia al redactor-jefe,

perspectivas
Unesco, 7, place de Fontenoy, 75700 París, Francia.

Los artículos firmados expresan la opinión de sus autores


y no necesariamente la de la Unesco.

Las denominaciones empleadas en Perspectivas y la presentación de los datos


que en ella figuran no implican, de la parte de la Secretaría de la Unesco,
ninguna toma de posición respecto al estatuto jurídico de los países,
territorios, ciudades o zonas, o de sus autoridades, ni respecto al trazado
de sus fronteras o límites.

© Unesco 1986
Se pueden reproducir y traducir los textos publicados (excepto cuando
esté reservado el derecho de reproducción o de traducción) siempre
que se indique el autor y la fuente.

Publicado por la Organización de las Naciones Unidas


para la Educación, la Ciencia y la Cultura
7, Place de Fontenoy, 75700 París.
Impreso por
Imprimerie des Presses Universitaires de France, V e n d ô m e .
Jalones
El "cuaderno" de este número prosigue la reflexión iniciada aquí
mismo hace varios años en torno a la planificación, elfinanciamiento y
la gestión de la educación. Sin embargo, si hubiera que diferenciar sus
rasgos de los de la literatura anteriormente publicada, se podría decir
que lo que aquí se examina es la planificación y el financiamiento de
la educación en un contexto de crisis económica. Pero hay una segunda
característica del "cuaderno" que es lo bastante notable como para que
se haga hincapié en ella: los problemas teóricos y prácticos abordados
por nuestros cinco colaboradores son los mismos que deben afrontar los
decisores, planificadores y administradores en todo el mundo, lo que
equivale a decir que conciernen indistintamente —aunque, naturalmente,
en distintos grados— tanto a los países en desarrollo como a los
desarrollados.

Es indudable que desde mediados los años içjo, la crisis económica


es mundial, como lo era (y sigue siéndolo) la de la educación, analizada
por Philip Coombs en una obra de gran resonancia.1 Nuestros cola-
boradores pormenorizan los signos y los efectos cada uno a su manera:
disminución de los intercambios internacionales, desequilibrio de las
balanzas de pago, estancamiento del producto interior bruto, inflación,
incremento de la deuda, alza continua del paro en los principales países
donantes, endurecimiento de las condiciones (bilaterales y multilaterales),
de ayuda al desarrollo, etc. Por todas partes se habla de severas trabas
financieras e institucionales, de prioridades, de austeridad y, en la
mayoría de los países, "la salida de ese largo túnel es apenas previsible"
según la fórmula de F. Orivel; en lo que se refiere al pasado, el periodo
de prosperidad de 1950 a 1975 se ha convertido hoy en una referencia
mítica para los economistas y los planificadores; y en cuanto al futuro,
cosa bastante más grave, todo el mundo coincide en pensar y predecir
que las condiciones excepcionalmente favorables que caracterizaron
a esa época no volverán a producirse antes de mucho tiempo.
Así pues, ahora prevalece lo económico y el financiamiento de cualquier
actividad de desarrollo se vuelve pronto problemático. Los criterios de
rentabilidad rápida, de costo-eficacia, de realismo, ganan terreno sobre
todos los otros: en todas las partes hay que realizar economías, esta-
blecer prioridades, sacrificarse y ahorrar. Por otra parte, se sabe que
los gastos más vulnerables son los sociales (salud, educación) y que
cuando es preciso arbitrar entre múltiples necesidades, es a la educación
a la que se suelen exigir los mayores sacrificios. Así, desde hace más de
un decenio, la educación se ha visto apresada en la crisis económica
mundial, que vino a agravar la suya propia desde mediados los años

Perspectivas, vol. X V I , n.* 2, 1986


Jalones

sesenta; desde hace más de un decenio, el mundo de la educación se ve


forzado, por así decirlo, a optar entre lo posible de los recursos y lo
deseable de la democratización y de la renovación, a proponer alter-
nativas, y sobre todo, a justificar y a merecer el precio que cuesta a la
comunidad. ¿A qué otros modos de financiamiento de la educación
recurrir en tales condiciones? ¿Cómo renovar, si ello es posible, los
sistemas educativos y mejorar el aprendizaje sin aumentar los costos?

En ese contexto de austeridad y de escasez, parece ante todo claro


que todos los proyectos de expansión de los sistemas educativos han de
ser reconsiderados, si no a la baja, al menos manteniendo el nivel actual
de los recursos financieros. Más aún, la consigna de los decisores es
no sólo que se han de reducir los gastos de educación, sino que se han de
hacer más cosas y mejor con unos recursos reducidos.
Esta situación objetiva, a la que se ha añadido este imperativo de
los decisores, habrá tenido al menos la ventaja de forzar la educación a
una especie de autocrítica: realizar opciones rigurosas, definir prioridades
que satisfagan del mejor modo los objetivos de eficacia y de equidad,
hacer un mejor uso de los fondos públicos, buscar, encontrar y poner en
práctica las soluciones más eficaces y menos costosas son criterios que
ningún educador (planificador, administrador o incluso docente) puede
ignorar hoy día. Estas condiciones ya las exigían las fuentes de finan-
ciamiento bilaterales o multilaterales; con la crisis, y tratándose de
fondos públicos, los responsables nacionales deben observarlas aun más
escrupulosamente.
Otra traba que evocan los colaboradores del cuaderno es la apremiante
invitación a proceder a todo reajuste que permita realizar economías.
Así, en el plano estructural, se estudia una cierta redistribución de los
recursos de un nivel de enseñanza a otro, la reducción de la duración de
tal o cual ciclo de estudios, la limitación de las repeticiones, la creación
de nuevas ramas con objeto de aligerar los ciclos y las clases, la formación
de personal docente polivalente en un periodo más corto. Por otra parte,
en cuanto a los gastos de funcionamiento, revisión de la escala salarial,
identificación y recurso a fuentes de financiamiento no públicas, insti-
tución de las tasas escolares, financiamiento parcial de los estudios
mediante un trabajo escolar socialmente productivo, etc. En lo referente
a los contenidos y los métodos, simplificación de los programas escolares,
recurso a las nuevas tecnologías de transmisión del saber, particularmente
a la informática, en la que varios autores ven una solución de porvenir
eficaz y poco costosa.
Se trata sólo de orientaciones y, más a menudo, de meras ideas que
aún no están organizadas en proyecto de acción operacional. Pero si la
mayoría de los planificadores son propensos a tomar en consideración
algunas de estas opciones y reorientaciones, si están decididos a movilizar
Jalones I6I

los recursos y las voluntades con vistas a una utilización más eficaz y,
por ende, a una rentabilidad óptima, también están decididos, en cambio,
a no ceder más allá de ciertas exigencias.
Al ser para ellos la educación una de las claves de la aceleración del
crecimiento y de la instauración de un orden social más equitativo,
consideran que los cortes en el presupuesto de la educación son peligrosos,
ya que ello puede llegar a comprometer el crecimiento a largo plazo por
unos resultados inmediatos más bien pobres. Administrar mejor, de
acuerdo, pero ello no debe entrañar en ningún caso reducciones pre-
supuestarias en los gastos de educación. A la consigna de austeridad
de los políticos, los economistas y los planificadores (los colaboradores
del "cuaderno" lo son por oficio) alegan que es preciso ante todo pre-
servar los logros de los que depende tanto el equilibrio del sistema edu-
cativo como la democratización de la enseñanza. Nadie ignora, en
efecto, que toda política de austeridad en materia de educación afectará
en primer lugar a los pobres y a los grupos desfavorecidos. Por último,
contra la consigna de la rentabilidad que esgrimen los partidarios de la
austeridad, los educadores pueden simplemente replicar que las inver-
siones en educación, a diferencia de todas las otras, son necesariamente
a medio y largo plazo.
Y como nos hace observar Carnoy, uno de los autores, "aun cuando
haya que reducir el gasto público como parte del PIB, el gasto militar,
que se lleva un significativo porcentaje del producto y es de muy dudoso
valor como inversión, sería siempre más susceptible de sufrir reducciones,
bajo un régimen de austeridad, que la educación". ¿Quién lo contradiría?*

Z. M .

Notas
i. A La crisis mundial de la educación, aparecido in 1968, sucedió en 1985 otra obra de
igual importancia, titulada The world crisis in education. The view from the eighties, de la
que ofreceremos una reseña en uno de los próximos números.
2. El "cuaderno" del número 59 completará éste con estudios de casos regionales y
nacionales.
POSICIONES

CONTROVERSIAS
La educación
latinoamericana
en mutación
Germán W . Rama

E n el período comprendido entre la posguerra y los años ochenta


América Latina registró u n ciclo de crecimiento, y fundamentalmente
experimentó u n profundo proceso de cambio en las dimensiones eco-
nómica social y cultural. E n consecuencia, la crisis de la presente
década afectó a sociedades que, en su mayoría, se encontraban en
plena transformación.
N o es posible considerar aquí la naturaleza de esta transforma-
ción, ha sido analizada en otros trabajos del autor. Basta evocar los
siguientes procesos: la población se multiplicó por 2,2, incremen-
tándose en casi 200 millones de personas; la población urbana registró
u n explosivo crecimiento a tasas de m á s del 4 % anual durante tres
décadas; las ocupaciones, antes sobre todo agrícolas, pasaron a ser
principalmente de servicios modernos y de producción industrial; las
relaciones salariales se generalizaron; el espectro de ocupaciones n o
manuales urbanas, que tienden a identificarse con sectores medios se
amplió y su número se aproximó (y ya en algunos países superó) al
correspondiente a los obreros de la industria, de la construcción y
ocupados en los servicios personales; se redujeron las posiciones de
los independientes —las clases medias residuales. E n lo educativo, se
pasó de u n m u n d o social donde dominaba el analfabetismo a otro en
que el analfabetismo —con excepción de Brasil y América Central—
tiende a ser residual entre los jóvenes, mientras que los niveles edu-
cativos medios y superiores, anteriormente elitarios, pasaron a ser
accesibles para importantes porcentajes de población.
Estas transformaciones explican que la educación haya figurado en

G e r m á n W . R a m a (Uruguay). Director de la División del Desarrollo Social en la


Comisión Económica de las Naciones Unidas para América Latina y el Caribe. Ex
director del proyecto "Desarrollo y educación en América Latina". Autor, entre otras
obras, de Educación, participación y estilos de desarrollo en América Latina y U n i -
versidad, transición, transformación.

Perspectivas, vol. X V I , n.° 2, 1986


i66 Germán W. Rama

el primer plano de las demandas y de las políticas sociales, con u n


enorme efecto de cambio cuantitativo que no tuvo su correlato ni en
creación de ciclos básicos y homogéneos de conocimiento para toda la
población, ni en emergencia de nuevas concepciones sobre los sistemas
educativos, capaces de hacer que éstos incidieran en la transforma-
ción de la calidad del conocimiento científico y en la innovación social.
E n las páginas siguientes se analizarán, en primer término, los
efectos de los cambios estructurales en los sistemas educativos, para
considerar luego los problemas con que se enfrentan dichos sistemas
hoy día. Esto se hará en la perspectiva de la necesaria innovación de
conocimientos y de formas sociales que se plantea c o m o desafío ante
el agotamiento del estilo de desarrollo predominante en la región y la
incertidumbre frente a las modificaciones en el sistema de poder
internacional y a las transformaciones de las sociedades desarrolladas
en los ámbitos científico, económico, tecnológico y organizativo.

L a proyección d e la estructura social e n la educación

Los rasgos de la transición de la estructura social ya indicados ejer-


cieron una profunda influencia en la evolución registrada por el
sistema educativo. Entre sus principales manifestaciones pueden seña-
larse las siguientes:
i. L a magnitud de la transformación y su ritmo promovieron una
intensa demanda social de educación. Esta era considerada condición
indispensable para incorporarse al m u n d o moderno, y los nuevos
puestos de trabajo fueron llenados con jóvenes educados y no con los
padres, migrantes rurales o marginales urbanos. Esto explica que en
los países de m á s intenso ritmo de cambio los jóvenes se desempeñen
en actividades distintas de los adultos de las mismas familias, unos en
servicios modernos y otros en la agricultura1 o que tengan m á s faci-
lidad para la incorporación al empleo en polos de desarrollo c o m o
San Pablo. 2 Las demandas de educación estuvieron articuladas con
migración rural, con urbanización y con ritmo de transformación, por
lo que fueron inferiores en los países m á s estabilizados en nivel alto o
bajo de desarrollo.3 U n a presión particularmente intensa fue ejercida
por sectores medios y obreros integrados, que no tenían c o m o barrera
la primaria y su poder relativo les aseguraba que el Estado respon-
diera con oferta de servicios. Por eso las mayores tasas de crecimiento,
m u y altas en la comparación internacional, se registraron en la edu-
cación secundaria y superior, que conducen a las franjas de empleo
en expansión durante la mayor parte del periodo considerado, de
mayor status y con diferencias positivas de ingresos, en relación a las
L a educación latinoamericana en mutación

ocupaciones manuales. L a población usuaria rechazó en forma siste-


mática los planes educacionales dirigidos a orientar la nueva demanda
hacia formaciones técnico-manuales, si éstas no permitían a la vez la
continuidad de estudios superiores.
2. L a demanda social, m á s que el proyecto de desarrollo o el plan,
es la que determinó la evolución de la educación. Esta demanda tuvo
las características de la estratificación social prevaleciente en cada
país: cuanto m á s integrada e igualitaria fuera ésta, m á s respondieron
las políticas educativas a la satisfacción de las necesidades básicas de
educación; cuando la estratificación era polarizada, o incluso segmen-
taria, las políticas concentraron servicios en los niveles medio y
superior, sin erradicar el analfabetismo y sin asegurar la universalidad
de la escuela. Las formas de articulación entre demanda y oferta
fueron múltiples, pero se caracterizaron porque la demanda fue m á s
satisfecha en capitales y ciudades donde residía el poder, al que tenían
acceso los grupos sociales demandantes, por canales políticos y m á s
frecuentemente administrativos. L a burocracia jugó el papel de arti-
culador y lo cierto es que la velocidad con que se expandieron los
servicios siguiendo los flujos de la población, habla de la efectividad
de u n mecanismo poco conocido.
Cada grupo formuló su demanda de acuerdo al horizonte de sus
conocimientos de la sociedad y de la cultura. Los campesinos, exi-
gidos para responder a formas técnicas de producción, informados
por comunicaciones sociales con las ciudades y afectados por ten-
dencias migratorias, tuvieron c o m o meta el conocimiento de la lengua
oficial, la alfabetización y el manejo de las operaciones matemáticas
básicas, y por tanto su reivindicación fue la escuela. E n el otro extremo,
los grupos m á s cultos o de posición superior reclamaron universidades
de alto nivel académico, cuando no sistemas de becas en el exterior y
m á s frecuentemente circuitos educativos exclusivos.
3. Los sectores medios tuvieron u n papel central en la expansión
educativa. Limitadas las alternativas de ascenso por la lentitud del
proceso de acumulación de capital y la escasa promoción por canales
políticos, la educación resultó el ascensor m á s apto durante la tran-
sición en curso. S u posición entre las cúpulas y los sectores de base,
con una enorme diferenciación interna, en la que pesan logros
educativos, les dio una perspectiva particular sobre la educación. E n
países de alta continuidad social, con sistema educativo académico
exigente surgido de una temprana modernización, la demanda fue por
la selección meritocrática en u n sistema universal y público de edu-
cación, con acceso para los sectores populares en el que tuvieran que
competir los sectores altos. E n países de estratificación social seg-
mentaria o segmentarizada — m á s aún si ésta está reforzada por la
discriminación al indígena— con vigencia histórica de circuitos
Germán W. Rama

educativos exclusivos para los grupos de cúpula pero ahora sujetos a


una expansión cuantitativa, en la etapa inicial una parte considerable
de los sectores medios apoyó el universalismo, porque les daba
acceso y era democrático; pero al sentir inseguras sus posiciones a
raíz del avance de los sectores populares, los sectores medios se
escinden: una parte apoya una segmentación que les reserva circuitos
de formación propia, cercanos a los de la cúpula y que desvaloriza los
deteriorados circuitos de formación popular (falta de recursos,
descenso de niveles técnicos por traspaso a esfera municipal, etc.), a
los que también se ven obligados a acudir los sectores medios con
bajos ingresos. E n cambio, en países con alta expansión del empleo y
de las oportunidades de movilidad social, las recientes clases medias,
"apadrinadas" desde el Estado, apoyan la universalidad del sistema
educativo, n o reivindican niveles de exigencia académica que las
bloquearían a ellas mismas y que no son indispensables en u n
mercado de empleo que a su vez sólo exige créditos formales;
apoyan entonces la incorporación de sectores populares, aunque
asegurándose que las mejores dotaciones de recursos materiales
sean concentradas en los niveles y establecimientos a los que asisten
sus miembros.
Finalmente, en otros países que registran altas tasas de crecimiento
económico junto con marcada diferenciación social habiendo partido
de sociedades con gran segmentación social y m u y bajos niveles
educativos, se registra una expansión del empleo urbano en los polos
de alto desarrollo. E n ellos domina u n capitalismo dinámico que
establece una alta competencia para logros ocupacionales y también
en cuanto a símbolos de consumo. T o d o ello determina u n enorme
esfuerzo de sectores medios y proletarios integrados en esas regiones
m á s desarrolladas para incorporarse a la educación y avanzar en ella, en
vista de las posibilidades efectivas de que actúe c o m o ascensor para los
grupos que aspiran a incorporarse al sector moderno de producción y
servicios. L a situación es cualitativamente distinta en las otras
regiones de dichos países, en las que los niveles de desarrollo son
inferiores y persisten formas de segmentación social, por lo que
coexisten diversos niveles del sistema educativo para la atención de los
distintos estratos. Incluso en los segmentos o circuitos educativos
superiores no hay una orientación definida hacia la formación instru-
mental para vincularse a los sectores dinámicos de la economía, sino
que siguen actuando percepciones de la educación c o m o u n status.
D e todo lo anterior resultan circuitos educativos m u y heterogéneos,
porque hay una línea de corte de naturaleza social y otra de tipo
regional, lo que lleva a percibir las realidades educativas en las posi-
ciones extremas de las variables modernización y clase social c o m o si
correspondieran a países diferentes.
L a educación latinoamericana en mutación

4. Las aspiraciones y demandas educativas son inseparables del


proceso de constitución de la nación c o m o comunidad política y
cultural. Desde la etapa fundacional de los países latinoamericanos la
concepción de muchos de sus m á s destacados dirigentes fue la de
sociedades republicanas y democráticas diferentes de las europeas,
por lo que enfatizaron la educación c o m o eje para la formación de la
ciudadanía. Esto se transformó en mensaje oficial y fue internalizado
por las masas; en esa etapa, en que se establecieron comunicaciones
materiales y sociales, las poblaciones adquirieron identidad y aspi-
raron a educarse, tanto para integrarse al proceso político c o m o para
adquirir u n bien que consideraban valioso y que confería a sus ojos
una dignidad de la que habían carecido: la cultura. N o en el sentido
académico o elitista de la m i s m a , sino c o m o instrumento habilitante
para comprender, actuar y no ser objetivamente inferiores. A m b o s
factores explican la incesante demanda de educación que registra
América Latina, y el hecho de que en cada proceso político que se
funda en la creación de identidades colectivas, la población se vuelca
en cruzadas o campañas alfabetizadoras, para aprender algo que saben
no tiene rentabilidad económica inmediata.
5. L a configuración asumida por los sistemas educativos está
siempre vinculada, y a veces en forma m u y estrecha, con las nece-
sidades de los sistemas políticos. E n algunos casos los desafíos de la
constitución de los estados nacionales, especialmente en países
pequeños o de integración incipiente, promovieron políticas de
educación básica con independencia de otras relaciones con la estra-
tificación social. E n otros casos la existencia de sociedades movilizadas,
especialmente en sus sectores popular y medio, en una etapa en que
el modelo económico se caracterizó por la acumulación y la concen-
tración de ingresos y en que el modelo político fue, en muchos países,
restrictivo en cuanto a participación, dio a la educación el papel de
dimensión "blanda" para la gratificación social. F u e m á s factible
brindar educación que generar empleo, distribuir ingresos o admitir
un sistema político plural al que accedieran los distintos estratos
sociales. A d e m á s la educación tiene la característica de diferir la
demanda de empleo y de ingresos, tanto en la generación de los
padres c o m o en la de los hijos que sólo a posteriori podrán saber si
las realidades coinciden con las expectativas. E n u n tercer caso, los
movimientos políticos reformistas y populistas se propusieron romper
barreras culturales que justificaban el poder de los grupos de cúpula,
y fueron m á s efectivos en la ampliación educativa que en el cambio
de las estructuras. Algunos grupos sociales —especialmente entre los
urbanos— tuvieron mayores oportunidades de movilidad ascendente
y para los otros la educación quedó abierta c o m o expectativa. E n u n
cuarto caso, sistemas democráticos mantuvieron políticas de largo
Germán W. Rama

plazo dirigidas a la cobertura integral de la enseñanza básica para


atender la formación de la ciudadanía y asegurar u n mínimo código
cultural c o m ú n en la sociedad. E n u n quinto caso, sistemas políticos
revolucionarios, aspirando a socializar en nuevos valores y por
imperativos ideológicos, confirieron gran énfasis a la educación de
adultos y de niños y jóvenes en vista a una formación socialmente
compartida.
6. L a articulación entre la política, la estructura social y la edu-
cación se expresa también a través de una malla de movimientos y
cuasi movimientos sociales, cuya actividad explica las respuestas
posteriores del sistema político. Partidos, sindicatos y organizaciones
estudiantiles reclamaron en el pasado educación para toda la sociedad
c o m o forma de liberación de grupos oprimidos y para crear condi-
ciones de transformación social. Posteriormente, durante el ciclo de la
primera integración populista o reformista llevada a cabo en beneficio
de sectores de la población urbana, cuando ésta era, sino minoritaria,
no dominante en la población total, la importancia política de esta
reivindicación, integrada en proyectos de cambio, disminuyó tal vez
en la medida en que los grupos m á s activos, por ser urbanos y
cercanos al núcleo integrado de la sociedad, obtuvieron satisfacción
a sus demandas. Pero los otros grupos subordinados, aunque carentes
de la cobertura política y del apoyo de una teoría que diera sustancia
a sus aspiraciones por vías menos aparentes (más al nivel de los
vecindarios y de las comunidades, relacionándose m á s con la adminis-
tración que con la política) crearon u n proceso continuo de demandas
cuyos efectos se aprecian en la ampliación de la cobertura de educa-
ción primaria —particularmente en los años setenta— no sólo para
estratos urbano populares sino también en zonas rurales anterior-
mente relegadas.
7. L a revisión anterior permite ubicar el proceso y perfil que asu-
mieron los sistemas educativos de la región c o m o una resultante de
las características históricas de la sociedad, de sus transformaciones
recientes, del juego de las distintas fuerzas de los grupos sociales, del
papel cumplido por las movilizaciones sociales y por los sistemas
políticos y de la presencia de proyectos societales que ubiquen a la
educación c o m o u n o de los factores claves de la transformación. E n
ese sentido la educación es uno de los espacios en los que intervienen
los actores sociales y se procesan sus conflictos y proyectos, lo que le
quita el carácter neutro que tanto corrientes pedagógicas c o m o
políticas le han pretendido asignar.
L a educación es siempre reproductora de la sociedad, pero lejos
de ser sólo una variable resultante y dependiente, en cuanto subsis-
tema social es "productora" no sólo en su c a m p o específico, el conoci-
miento, sino también de nuevas condiciones para las relaciones sociales.
La educación latinoamericana en mutación

Ninguna sociedad, ningún centro de poder son capaces de hacer de


la educación una mera agencia de reproducción social, salvo a
condición de reproducir todas las acciones sociales, es decir suprimir
la historia, lo que, es necesario convenir, es de m u y difícil logro en la
época contemporánea, y en todo caso, con costos ingentes que pueden
llevar no sólo al estancamiento sino al retroceso en el desarrollo.
E n considerable medida las teorías que definen a la educación
c o m o instrumento de la reproducción social —que no es oportuno
analizar aquí— han sido concebidas con relación a sociedades "crista-
lizadas" en u n grado elevado de desarrollo industrial y en las cuales
grupos de cúpula, en algunos casos con tradición aristocrática o
continuadores de una burguesía que revolucionó la sociedad y la
producción y en otros asimilados a sus valores, mantuvieron una
superioridad cultural y "negociaron" el proceso de movilidad social,
utilizando, entre otros elementos la progresividad y selectividad
académica de la expansión educativa.
Corresponde plantearse qué significan "reproducción" y "pro-
ducción" en sociedades sujetas a u n intenso proceso de transfor-
mación, en transición a partir de sociedades embrionarias que
evolucionan hacia u n futuro aun no definido, y en relación al cual
no hay hoy una teoría que lo anticipe (como fueron en su m o m e n t o
y para otras sociedades el liberalismo y el marxismo, por ejemplo)
con la complejidad actual de relaciones internacionales interdepen-
dientes, que provocan bruscos cambios de orientación.
Las sociedades latinoamericanas registran en mayor o menor
medida en el transcurso del último medio siglo, lo que ha sido
definido c o m o la crisis del modelo oligárquico de dominación, crisis
de la que aun no ha emergido u n nuevo modelo cuyos valores logren
internalizarse en la sociedad y promover cierto grado de consenso con
u n estilo de desarrollo. Revoluciones sociales, ciclos reformistas,
populistas y autoritarios manifestados en forma vertiginosa en los
pasados treinta años en la región (en algunos casos varios de esos
modelos se aplicaron sucesivamente en u n m i s m o país) son indica-
tivos de la inestabilidad del poder, de la precariedad de los valores del
sistema dominante y del grado de movilización de las sociedades.
Las antiguas condiciones de encuadramiento de la población rural
en el modelo de la organización de la hacienda periclitaron y ningún
modelo surgió para una población que se urbanizó vertiginosamente
y que no encontró ni formas comunitarias ni organizaciones capaces
de transmitir nuevos valores acordes con los patrones urbanos.
Los grupos de cúpula, lejos de proponer valores propicios para la
transformación estructural y asumir la integridad del proceso de desa-
rrollo, apelaron en algunos casos a ideologías preindustriales y pre-
modernas, intentando controlar las consecuencias sociales de la
Germán W. Rama

transición estructural y en su mayoría n o lograron constituir u n


modelo de referencia con los indispensables elementos de cultura
general y científica, mientras que en unos pocos casos comenzó a
emerger una sociedad con proyectos fundados en el crecimiento, la
tecnología y la transformación, amparados en la existencia de nuevas
élites sociales.
L a política y la educación fueron tal vez los factores que influyeron
en mayor medida en la innovación. L a primera, sobre la que n o cabe
extenderse en este texto, porque en los ciclos de transición es el
Estado el que tiene u n papel central en la promoción de los cambios.
L a segunda, por todo lo expuesto en las páginas anteriores, de lo que
cabe recordar sólo algunas de las dimensiones m á s significativas:
a) L a transición de u n m u n d o predominantemente analfabeto a uno
de avance educativo constituyó u n viraje en la evolución histórica
de la región, que n o se mide sólo en sus consecuencias sobre la
comunicación social y los recursos h u m a n o s , sino fundamental-
mente sobre la capacidad de analizar mensajes, optar y participar
en forma n o vicaria.
b) L a transición de u n a educación media y universitaria de élites a
una educación que abarca sectores masivos significó n o sólo el
acceso al conocimiento superior, que era una de las formas de poder
de ciertos grupos, sino también u n cambio en las relaciones entre
los grupos sociales q u e se aprecia en las que se establecen entre
las clases medias y los grupos de cúpula, pero también en la emer-
gencia de u n nuevo proletariado industrial cuya educación pro-
medio h a contribuido a modificar sus formas de organización
corporativa y a hacer m á s complejas sus propuestas de reorga-
nización social.
c) L o s sistemas educativos se constituyeron en instrumentos funda-
mentales para el acceso a la cultura. L a relación entre cultura
escolar y capital cultural familiar de los grupos superiores n o tuvo
la m i s m a significación que en las sociedades europeas, dado que
en sociedades en proceso de cambio, a veces tan profundo que
puede calificarse c o m o mutación, el capital cultural se adquiere
fundamentalmente a través de la cultura escolar. Por eso en
América Latina las grandes disputas y opciones sociales tienen
que ver con el control para el acceso y con la calidad de la cultura
escolar.
d) L o s sistemas educativos han demostrado ser m u y endebles c o m o
instrumentos de dominación ideológica, frente a los medios de
comunicación de masas (que sí la ejercen), tanto por la debilidad
ideológica de los grupos de cúpula, la carencia de elencos intelec-
tuales q u e la transformen en imágenes significativas para la
sociedad en su conjunto, c o m o por la inconsistencia existente entre
L a educación latinoamericana en mutación

esos mensajes y la práctica cotidiana. A u n siendo débil, la capa-


cidad de organización de sistemas de análisis que tienen los sistemas
educativos resulta potencialmente disruptiva, porque permite
comparar valores proclamados y práctica social, racionalidad de
medios yfinesy funcionamiento del sistema social. Pero, además,
la reproducción ideológica es impensable sin la adhesión de los
educadores a esa ideología; en los años recientes estos han mani-
festado en forma m á s frecuente las crisis y opciones de las clases
medias que los valores del establishment.
Es evidente que la educación constituyó la condición necesaria para la
incorporación de los jóvenes a ocupaciones no manuales, pero es m u y
difícil evaluar hasta qué punto los cambios en las estructuras ocupa-
cional y educativa implican modificaciones en las relaciones entre las
clases sociales.

Los problemas del desarrollo educativo

El primer problema consiste en el desarrollo desigual —y socialmente


desequilibrado— del sistema educativo. N o se ha logrado la cobertura
de toda la población en u n ciclo primario o básico de estudios, mien-
tras que los niveles secundario y terciario registraron crecimientos
espectaculares. Este fenómeno es particularmente agudo en los países
de tardía modernización y fuerte polarización sociales.
E n los modelos europeos y anglosajones y también en los países de
América Latina de temprana modernización educativa, cuando se
inició y se consolidó la educación primaria de carácter universal las
sociedades tenían u n grado de diferenciación productivo y social m u y
bajo y las relaciones sociales eran m u y jerarquizadas. E n conse-
cuencia, la meta de una educación de pocos años de duración satisfacía
requerimientos del sistema productivo en cuanto a recursos humanos,
resultaba suficiente para la comprensión de los aspectos del conoci-
miento social, que no eran complejos, y de las formas políticas y
organizativas; u n número limitado de cuadros técnicos y de genera-
listas con formación media y superior alcanzaba para las necesidades
sociales, mientras que los grupos subordinados tenían interiorizado
que no podían aspirar a esas posiciones. L a situación es radicalmente
distinta en América Latina en las recientes décadas dado que:
i. L a heterogeneidad productiva y social es enorme y se mide por
la distancia entre una planta atómica y la elaboración propia de
rústicos instrumentos de producción de un campesino, entre el post-
grado internacional y el analfabetismo, entre sectores urbanos parti-
cipando en organizaciones complejas y con niveles de ingresos simi-
74 Germán W. Rama

lares a los de ciudades de países desarrollados y sectores marginales


con trabajos precarios que consisten en aplicar fuerza física, etc. Ello
implica que las necesidades de educación son objetivamente diferentes
si se las analiza en relación con el medio laboral y social al que se
incorporarán los integrantes de cada grupo, no por aspiración propia
sino por las imposiciones de la estructura de poder prevaleciente.
2. El poder social, que incluye conocimientos de qué educación es
la necesaria para incorporarse al sector moderno, es m u y desigual
entre quienes "tienen voz" y aquellos que no la tienen o no la pueden
expresar. Y c o m o la educación es también u n bien social escaso y
cuya asignación significa beneficios y privilegios, los grupos con
mayores posibilidades de expresarse en forma efectiva sobre el Estado,
consiguieron una atención privilegiada a sus demandas de educación
media y superior, sin que se hubiera logrado la universalización del
egreso de una primaria con un mínimo de calidad y homogeneidad.
Los simultáneos requerimientos de educación básica de u n lado y
media y superior del otro, van a ser resueltos a favor de la última y al
promediar la década de 1980 no sólo la expansión de estos niveles
es m u c h o m á s alta, sino que hacia ellos comienza a canalizarse una
parte creciente de los recursosfinancierosy humanos. E n esta ten-
dencia influyeron sin duda las expectativas que generaban la urbani-
zación y la modernización, el carácter "insular" de los polos de
desarrollo o de los proyectos industriales de avanzada y la notoria
falta de prioridad real de las políticas tendientes a la modificación de
las estructuras rurales y de las condiciones sociales de los campesinos.
El segundo problema es el de la demanda incesante en el sentido de
prolongar los períodos de escolaridad, por parte de los grupos con
mayor integración y poder social relativos. E n la medida en que la
oferta de empleo es insuficiente ante la demanda de una población
urbana con tasas de crecimiento enormes, y en que existe u n mercado
de empleo segmentado, la competencia para acceder a las franjas que
deparan bienestar y status es m u y intensa. Cada grupo intenta
ubicarse en una mejor posición con la titularidad de mayor número
de años de estudio o logrando que la carrera o formación pase de nivel
medio a superior de corta duración, de éste a condición de carrera
larga y de aquí al postgrado. L a reacción de los grupos superiores ante
esa competencia es "tomar la delantera", mientras que los emplea-
dores, ante una oferta formalmente m á s calificada, exigen credenciales
educativas de mayor nivel. Al tiempo que esa competencia alargó la
escolaridad en los niveles superiores, pocas fueron las políticas de
desarrollo de la educación prescolar, cuya significación pedagógica
y en términos de equidad no es necesario reiterar, pero que se trans-
formó en necesidad urgente con la urbanización y la incorporación
masiva de mujeres de estrato popular a las ocupaciones fuera del hogar.
La educación latinoamericana en mutación

Paralelamente, otro de los efectos de la prolongación de la esco-


laridad de los grupos sociales m á s modernos fue una relativa dismi-
nución de los contenidos y de los aprendizajes en los primeros cursos
o años de la educación primaria, con el supuesto de su recuperación
en etapas superiores a pesar de que para casi la mitad de la población
escolar son los únicos que realiza.
El tercer problema es la creación o mantenimiento de u n nivel
mínimo de homogeneidad en cuanto a calidad del conocimiento en
los cursos o grados similares en el sistema educativo. Lejos de ello,
surgieron en la mayoría de los países circuitos de enseñanza no sólo
estratificados, sino de hecho segmentados. El superior, desde la pres-
colar hasta la universidad, se desarrolló en instituciones —en su
mayoría privadas— con excelente equipamiento, metodologías ade-
cuadas, nivel científico y exigencias elevadas; sus estudiantes pasan
fluidamente de uno a otro nivel; pero cada uno de esos niveles no es
accesible para los que vienen de circuitos inferiores, por las exigencias
académicas y también sociales en muchos casos. M á s abajo, varios
circuitos o corredores se superponen con una graduación de calidad
que permite los pases entre los m á s cercanos. L a infraestructura es
menos adecuada a los fines educativos, pero, fundamentalmente, los
conocimientos científicos no están incorporados o no son actualizados,
las técnicas pedagógicas no son desarrolladas, el cuerpo docente
tiene una formación mediocre y en otros casos es obsoleta, y final-
mente las exigencias de aprendizaje decrecen en la medida en que se
baja de circuito aunque ello implique la aprobación de cursos. Final-
mente, el circuito inferior se integra con escuelas rurales incompletas
o completas de maestro único, n o preparado para esa tarea, precarias
escuelas en poblaciones, favelas, villas miseria, en que el deterioro de
edificios y equipamiento expresa la privación cultural de los edu-
candos y la derrota de los educadores, ya que incluso los m á s moti-
vados carecen de formación y de instrumentos técnicos para encarar
u n tipo de educación que requeriría, entre los apoyos específicos
mínimos, jornadas de tiempo completo, servicios de alimentación y de
salud. C o m o los mejores educadores o los m á s antiguos buscan
medios m á s propicios y se desplazan hacia ellos, son los principiantes
los que tienen que abordar la tarea m á s compleja del sistema.
Lograr la igualdad de conocimientos en la totalidad de las unidades
que componen u n sistema educativo es tarea vana, pero admitir que
algunas efectivamente enseñen mientras otras sólo lo aparentan
(cuando éstas son las que atienden a los recientemente incorporados
sectores populares) constituye la frustración del proceso democra-
tizador, la reproducción de la sociedad polarizada y la pérdida de los
recursos humanos que la región necesita para su transformación.
El cuarto problema es el logro de niveles de conocimiento científico
Germán W. Rama

acordes con las necesidades del presente y los desafíos del futuro.
T o d o sistema educativo debe responder a la necesidad de integrar la
población, o al menos las nuevas generaciones, en la sociedad en que
viven, tanto nacional c o m o internacional, prepararla para asumir las
transformaciones posibles de las mismas y transmitir el tipo de cono-
cimiento que define el m o d o de producción económico, científico y
social. Para responder a esa doble función, a lo largo de la historia
los sistemas educativos se han ido modificando para establecer los ejes
de conocimiento acordes con el cambio de las sociedades y así sucesi-
vamente la asignatura eje fue pasando desde el latín a las matemáticas
y a la computación con etapas intermedias en la lengua vernácula, la
filosofía, la historia y las ciencias naturales.
E n América Latina la expansión cuantitativa se procesa a partir de
una educación que se encontraba en una etapa de formación h u m a -
nística literaria y junto a la generalización del sistema de educación
tradicional se expande u n modelo abandonado en la preguerra por los
países en los que se había originado, para desarrollar progresivamente
uno fundado en las ciencias experimentales y las matemáticas
modernas, a la vez que exponían el conocimiento de la sociedades
contemporáneas para u n alumnado que pasaba a ser la representación
de la sociedad toda.
Si bien en los sistemas educativos latinoamericanos existe con-
ciencia del progresivo desfasaje entre el conocimiento que se imparte
y el conocimiento contemporáneo, en m u y pocos casos se asumió
c o m o objetivo la transformación del conocimiento escolar para pre-
parar a los países para la sociedad industrial y menos aún para la
revolución cientificotecnológica que se está procesando en el hemis-
ferio norte. Las reformas que se aplicaron consistieron m á s en
agregación de asignaturas que en definición de ejes modernos del
conocimiento y en muchos casos la prioridad fue asignada a la
reorientación de la matrícula hacia las formaciones manuales, técnicas
o comerciales. L o anterior explica la escasa innovación en materia de
educación primaria, la incertidumbre en las orientaciones de la
secundaria, la ausencia de una orientación científica dominante en las
universidades y la omisión del conocimiento de las estructuras sociales
contemporáneas y de sus actores grupales a lo largo de todo el sistema
educativo.
El quinto problema es el de la evaluación de lo que se aprende y
de las vías para asegurar en forma planificada una evolución constante
de los sistemas educativos en relación con el medio sociocultural en
que se desenvuelven. Poco se sabe de la "calidad del producto" que
sale de cada curso, nivel o carrera y resulta sintomática la inexistencia
de pruebas nacionales o sectoriales, no necesariamente para aprobar
cursos o niveles (lo que tal vez sería necesario) sino al menos para que
L a educación latinoamericana en mutación

la propia organización evalúe la enseñanza que administra. E n los


países en que se aplican pruebas de selección para la admisión a las
universidades ellas no son posteriormente utilizadas para interrogarse
sobre la formación secundaria y se acepta c o m o u n "dato" que los
mejores puntajes invariablemente corresponden a establecimientos
privados. Mientras tanto, el análisis anterior acerca de la escasa
efectividad de los cambios educativos planificados plantea serias dudas
acerca de la pertinencia de algunas metodologías tales c o m o las
reformas integrales, que al desconocer la segmentación social y edu-
cativa propia del sistema, resultan, aún sin quererlo, pensadas para
u n sector en particular y a veces en desmedro de otros. E n ese sentido
no han sido exploradas vías de planificación que se propongan
modificar contenidos y calidad de una asignatura considerada básica
—lenguaje, matemáticas, conocimiento de la sociedad— a lo largo de
la totalidad del sistema educativo, o las relativas a la microplanifi-
cación eligiendo poblaciones meta que tienen características sociales,
culturales y económicas específicas, para modificar la eficiencia y la
calidad de la enseñanza que reciben. Siempre es necesario recordar
que sin evaluación de lo existente no pueden realizarse cambios y que
éstos sólo son significativos si son planificados y progresivos. L a ley y
el decreto de por sí no crean el conocimiento.
U n sexto y último problema significativo a considerar es el de los
educadores. L a expansión en volumen y participación relativa posi-
blemente sea la m á s alta entre todas las ocupaciones y profesiones de
la Población Económicamente Activa de la región. Pocos países tenían,
al iniciarse el proceso, u n sistema sólido de formación normalista,
casi ninguno de formación de profesores de enseñanza media, y
ninguno de formación de profesores e investigadores para las univer-
sidades, de alcance nacional. E n el caso de los maestros se realizó u n
considerable esfuerzo de profesionalización para sustituir a los educa-
dores empíricos. Sin embargo, este positivo proceso se acompañó de
otros que afectaron las expectativas. Entre ellos cabe mencionar:
a) el descenso en las remuneraciones y en la consideración social, que
afectó la selección para el ingreso en esa carrera; b) la creación de
institutos normales o equivalentes en u n n ú m e r o m u y considerable
de instituciones y puntos del territorio, que si bien facilitó el recluta-
miento de maestros en las regiones y en algunos casos permitió el
conocimiento del medio sociocultural, se realizó sin orientaciones
técnicas y controles que aseguraran la calidad; y c) en algunos países
la formación fue elevada a nivel terciario, con rasgos positivos en lo
académico, pero con una simultánea intelectualización de la formación
y desprendimiento de la práctica pedagógica en contextos socio-
culturales reales. E n el caso de los educadores de nivel medio, los
esfuerzos fueron fragmentarios, pocos países tienen u n cuerpo
Germán W. Rama

docente técnico y la carrera fue separada simultáneamente de la


normalista y de los centros de investigación y ramas de conocimiento
especializados en la universidad, funcionando c o m o educación superior
no universitaria o c o m o universitaria específicamente pedagógica, lo
que debilitó contenidos y prácticas científicas y no permitió canalizar
hacia la docencia recursos humanos de formación universitaria.
Finalmente, así c o m o la mayoría de las universidades no incorporó
la formación en ciencias básicas —manteniendo las orientaciones pro-
fesionalizantes—, no se desarrolló el nivel cuaternario ni los departa-
mentos de investigación, donde se establecerán los mecanismos
regulares de formación docente.
El problema de la formación, capacitación y actualización docente
en su triple vertiente de conocimientos específicos, del medio socio-
cultural y de pedagogía y didáctica, subsiste c o m o impedimento para
la transformación cualitativa de la educación.

América Latina registró en las tres décadas anteriores u n profundo


cambio de sus estructuras socio-ocupacionales paralelo a u n desa-
rrollo de los volúmenes de población incorporados al sistema edu-
cativo, de mayor magnitud en los niveles medio y superior, cuyas
repercusiones se manifiestan en la modificación del universo cultural
urbano.
Este ciclo de modernización fue desigual entre los países y de
naturaleza contradictoria según grupos sociales. A pesar de los
avances registrados no se logró crear una homogeneidad cultural
mínima para el desarrollo de sociedades que aspiren a tener equidad,
organización democrática y capacitación de los recursos humanos
para u n siglo xxi en el que las formas científicas y tecnológicas deter-
minarán producción y organización social. El indicador evidente es
no haber logrado que el egreso escolar sea u n fenómeno universal.
El conjunto de transformaciones finaliza abruptamente en los
años ochenta con la crisis económica de la región derivada del endeu-
damiento internacional y de las condiciones que rigen su pago.
L a crisis tiene repercusiones directas e indirectas sobre la educa-
ción, entre las cuales se pueden citar: a) el desempleo de los jóvenes
—los menores de 25 años aportan la mitad de los desocupados—
durante meses y años y sin atención con programas de formación
y capacitación; b) el desajuste entre una formación de tipo general
dirigida al desempeño de ocupaciones de tipo terciario no calificado
—oficinistas, vendedores, etc.— y la reducción drástica de este
mercado de empleo; y c) la reducción del gasto educativo — c o m o
parte de la compresión del gasto del Estado obligado a transferir al
exterior porcentajes del orden del 5% del producto nacional para el
pago de intereses— con las consiguientes limitaciones en expansión
L a educación latinoamericana en mutación

del servicio y en el deterioro de la calidad del m i s m o , en una etapa


económica en que una política de enrolamiento masivo de los jóvenes
en la educación reduciría desempleo y permitiría calificar recursos
h u m a n o s para las producciones m á s sofisticadas a abordar por
la región.
A pesar de lo anterior, una perspectiva positiva hacia el futuro
permitiría considerar estrategias innovadoras. H o y el problema n o
es incorporar a la escuela sino asegurar la permanencia y los apren-
dizajes. L a experiencia acumulada en la etapa de la expansión cuanti-
tativa permite identificar los problemas culturales del aprendizaje
y abordarlos con una propuesta de desarrollo de los conocimientos
científicos y de la sociedad contemporánea en que viven los edu-
candos. Las limitaciones para las políticas de consumo y de distri-
bución de ingresos monetarios permite hacer de la educación la
política social por excelencia, orientándola a la atención de los sec-
tores populares que no fueron aún incorporados plenamente a la
formación cultural. El reconocimiento de las ineficiencias de los
aparatos estatales permite encarar formas de delegación —pero n o
transferir los costos— de servicios educativos de base a comunidades
y grupos sociales organizados.
Finalmente, los desafíos de la crisis obligan a plantearse la recon-
versión de los sistemas educativos en eficaces "fábricas de cono-
cimientos".
L o evidente, es que la salida de la crisis no será la reconstrucción
del pasado, sino de una organización económica, social y cultural
distinta en relación a la cual la educación puede jugar u n papel
de anticipación y de preparación. •

Notas
i. J. Durston y G . Rosenbluth, "Panamá: un caso de mutación social", Pensamiento Ibero-
americano, n.° 6, Madrid.
2. F . Madeira, Os j ovens e as mudancas estructuráis no Brasil ao longo da década de JO, San-
tiago, C E P A L , 1985 (LC/R 443).
3. C . Braslavsky, Juventud y sociedad en la Argentina, Santiago, C E P A L , 1985 (LC/R 401).
L a tecnología educativa
en las universidades
de los países en desarrollo
Raymond Lallez

El presente estudio tiene por objeto investigar las tecnologías educa-


tivas que deberían y podrían introducirse en la enseñanza superior
de los países en desarrollo, principalmente en las universidades.
¿Para alcanzar qué objetivos? ¿ E n qué medida y de qué m o d o
emplearlos? C o m o hasta ahora dichas tecnologías han sido elabo-
radas, experimentadas y utilizadas principalmente en los países
desarrollados, su investigación plantea inevitablemente (como u n o
de sus interrogantes de mayor importancia) los problemas de trans-
ferencia de tecnología, problemas cuya importancia y gravedad en
campos distintos al de la educación son de sobra conocidas.
Para que los problemas planteados puedan determinarse con
claridad precisaremos ante todo lo que designaremos aquí con la
expresión "tecnologías educativas". Los "procedimientos y métodos
empleados en las distintas ramas industriales", procedimientos y
métodos cuyo estudio constituye, según la definición del diccionario,
"la tecnología". N o s interesaremos por aquéllos que la industria
y los actores de la educación han introducido en la enseñanza, los
hayan adaptado o no a ésta, c o m o son los aparatos de reproducción
y difusión del sonido (discos, magnetófonos, radio), los aparatos
que producen y difunden imágenes pero también el sonido (lo audio-
visual en todas sus variedades), las máquinas de enseñar y todo lo que
se refiere a la informática aplicada a la educación (excluyendo la
gestión administrativa de las universidades).

R a y m o n d Lallez (Francia). Profesor de ciencias de la educación en la Universidad de


París XIII. Encargado de conferencias de la Escuela Normal Superior de Saint-Cloud.
Ha sido consultor de la Unesco con ocasión de reuniones y misiones en países en desarrollo.
Autor de numerosos estudios, de los que cabe destacar L e cas T E V E C . U n e expérience
d'éducation des adultes par système multi-media y L a formation des formateurs
d'enseignants.

Perspectivas, vol. X V I , n.° 2, 1986


Raymond Lallez

R a z o n e s y objetivos

Desde una perspectiva general se considera que la tecnología edu-


cativa puede contribuir útilmente al desarrollo de la educación
—apenas hay desacuerdo al respecto—, entendido tanto en el sentido
de ampliación c o m o en el de perfeccionamiento, contribuciones que
no se excluyen entre sí.
Se puede apelar a la tecnología educativa para paliar la insuficiencia
de los recursos materiales y financieros, así c o m o la de los recursos
humanos (que m u y a m e n u d o están en función de la primera) la
cual sólo puede solventarse al cabo del tiempo relativamente largo
que exige la formación del personal docente y la instauración del
marco pedagógico y administrativo. Así ocurre, en concreto, cuando
en u n país en desarrollo se plantea el objetivo de implantar una
enseñanza que sea al m i s m o tiempo masiva y de calidad. Se calcula
que, a plazo medio, el costo inicial de las inversiones y los gastos
ordinarios de funcionamiento serán significativamente inferiores a los
que habría acarreado la instauración de una enseñanza de tipo tra-
dicional. Y , además, se goza de la doble ventaja de u n gran ahorro
de tiempo, en cuyo transcurso, de haber aguardado, la situación
no habría dejado de empeorar, y de una igualización de posibilidades
mediante la difusión de una enseñanza homogénea de calidad, c o m o
mínimo superior a la de la enseñanza anteriormente existente. El
caso de los países en desarrollo no es único. E n u n contexto diferente,
en sectores o niveles concretos de la enseñanza, y por consiguiente
no a tan gran escala, pueden presentarse situaciones de esta índole en
los países desarrollados.
El verbo "paliar" que hemos utilizado m á s arriba no debe inter-
pretarse con la connotación negativa que habitualmente implica.
Cabe, en efecto, opinar que una investigación de todos los recursos
pedagógicos nuevos que encierra la tecnología educativa puede
contribuir a mejorar la enseñanza, a hacer que progrese en términos
de calidad de forma que ningún otro medio podría reproducir o
igualar. Pensemos, entre otras cosas, en el efecto de motivación, en
los beneficios derivados de la reproducción y la explotación de lo
real, en el facilitamiento de los aprendizajes cognoscitivos. Podría,
pues, m u y bien suceder, aunque aún no sea tal el caso, que una
enseñanza masiva mediante la tecnología educativa no sólo fuese
superior a la ya existente, sino también a la que se podría implantar,
a plazo m u c h o m á s largo, por vías tradicionales. E n otros casos y a
propósito de puntos concretos, este objetivo, que denominaremos de
"plusvalía pedagógica", ya ha sido alcanzado parcialmente. E n
cualquier caso, no deben perderlo de vista quienes ponen sus espe-
L a tecnología educativa en las universidades de los países en desarrollo

ranzas en el desarrollo de la tecnología educativa y a ello dedican


grandes esfuerzos.
L a conjugación de estas dos contribuciones posibles podría suscitar
una tercera, m á s importante aún sin lugar a dudas. Para muchas
personas, la aparición y el perfeccionamiento de la enseñanza ayudada
por computadora, y especialmente por microcomputadoras convierte
en convicción a esta opinión. C o n respecto a los países desarrollados,
se trataría de u n cambio de ritmo, de una aceleración de la inno-
vación y el avance educativos; para los países en desarrollo, se trataría
asimismo de una aceleración, pero tanto del desarrollo en extensión
c o m o del desarrollo en calidad, dado que resultaría posible saltarse
etapas de dicho desarrollo, que, de otro m o d o , habría sido obligado
a recorrer.
Ahora nos preguntaremos si, y de qué maneras concretas, son
aplicables estos tres puntos a la tecnología educativa en la enseñanza
superior de los países en desarrollo.
Por lo que respecta al primer punto, no cabe afirmar que sea, en
valor absoluto, la masa de los estudiantes lo que esté en tela de juicio.
Ni su número es tan elevado ni son tan numerosos los establecimientos
de enseñanza superior c o m o para que haya que concebir una ense-
ñanza a distancia apoyada y adaptada localmente por distintas formas
de ayuda complementaria. El verdadero problema radica en la rela-
ción entre el número de estudiantes y el personal docente disponible.
A este propósito, es posible formular, sin excesivo peligro de equi-
vocarse, tres hipótesis de situación pedagógica. Conforme a la pri-
mera, que es sin duda la m á s general, la escuela superior o la univer-
sidad no dispone de u n número suficiente de profesores del nivel
necesario. Conforme a la segunda (simétrica, pero opuesta a la
primera) u n profesor titular, y por lo tanto de alto nivel, sólo enseña
a u n reducido número de estudiantes, situación paradójica de una
enseñanza relativamente costosa (algunas personas dirían incluso
que lujosa) en u n país de escasos recursos y solicitado por fuertes
demandas de otros sectores educativos distintos de la enseñanza
superior. Tercera hipótesis: en u n sector o en una disciplina consi-
derados prioritarios, en función de las necesidades, se da la imposi-
bilidad de contar al menos con u n profesor de nivel elevado, profesor
titular o equivalente. E n los tres casos, sin excluir otras soluciones o
soluciones complementarias, la tecnología educativa puede constituir
un recurso precioso. Si son excesivamente poco numerosos los pro-
fesores de una universidad, o no hay en otras, la tecnología educativa
permite difundir la enseñanza del o de los disponibles, ya sea en
distintas aulas de u n m i s m o establecimiento, ya en otros estableci-
mientos, ya al m i s m o tiempo dentro y fuera del establecimiento.
E n el caso límite de una ausencia total, u n satélite de telecomuni-
Raymond Lallez

caciones puede aportar, n o sólo la voz, sino también la imagen y


con ésta los gestos de u n profesor m u y alejado; imagen y gestos que
tienen gran importancia cuando la enseñanza no puede prescindir
del grafismo, en distintas formas, o precisa de manipulaciones, c o m o
sucede con las ciencias experimentales. Ahora bien, habida cuenta
de la situación actual de los costos y técnicas, no puede recurrirse
a ello sino excepcionalmente, quedando m á s bien reservado a diálogos
interuniversitarios, en los que unos profesores universitarios pueden
sostener, en beneficio propio y de los alumnos, una mesa redonda sin
verse obligados a largos desplazamientos. Las videocintas, los
soportes lógicos didácticos de las microcomputadoras y demás
máquinas de enseñar son m u c h o m á s útiles. Pero hoy en día ya
resulta posible facilitar el acceso de la enseñanza superior de dichos
países a bancos de datos, todos los cuales, o casi todos, están situados
en los países desarrollados.
Por lo que se refiere a lo que hemos denominado "la plusvalía"
pedagógica, ni que decir tiene que tanto en los países en desarrollo
c o m o en los desarrollados habrá que tratar de emplear en la enseñanza
los productos elaborados y los mensajes comunicados por la tecno-
logía educativa que la comporten. E n condiciones normales, dicha
"plusvalía" puede apreciarse ya sea con relación a la enseñanza
mediante técnicas tradicionales, ya sea con relación a lo que dicha
enseñanza sería, sin la tecnología educativa. E n los países en desa-
rrollo sucede que, para determinados sectores, para determinadas
disciplinas o con respecto a determinadas partes de una disciplina,
existen esas condiciones satisfactorias. Pero estamos m u y lejos de
que así sea en todas partes. Sea c o m o fuere, en la actualidad no cabe
esperar que los países en desarrollo produzcan por sí mismos, salvo
raras excepciones, la totalidad (ni siquiera la mayor parte) del
material didáctico de esa índole y calidad. Pero tienen la ventaja de
poder beneficiarse de los materiales y la experiencia de los países
desarrollados. Experiencia que les es útil, especialmente en el primer
caso, en la medida en que podrán seleccionar de entre los numerosos
productos disponibles (cintas sonoras, videocintas, soportes lógicos,
didácticos, etc.) aquellos que se sabe con certeza que aportan esa
"plusvalía". E n el segundo caso, a m e n u d o reaparecerá la noción
de "paliativo". Así, por ejemplo, si se carece de los laboratorios
precisos, podrá proyectarse la película de los experimentos y los
alumnos podrán observar y seguir su desenvolvimiento. Claro está
que esta observación del experimento n o equivale ni puede sustituir
a la práctica experimental. Pero dicho sustituto n o carece de valor,
pues va m u c h o m á s allá que las descripciones puramente verbales y
las imágenes estáticas. Estas transferencias no carecen de otros
inconvenientes, pero ya nos ocuparemos de ellos m á s adelante, a su
L a tecnología educativa en las universidades de los países en desarrollo

debido tiempo. N o olvidemos, por último, que la investigación es


una de las misiones de la enseñanza superior; que la formación para
investigar forma parte de la formación universitaria y que se adquiere
fundamentalmente mediante la participación de los estudiantes en
la investigación de laboratorio. Ahora bien, la tecnología educativa
forma parte hoy en día del arsenal de instrumentos de determinados
tipos de investigaciones. O , al menos, la rapidez y calidad de éstas
pueden acrecentarse con ello. A u n q u e no deja de presentar inconve-
nientes, c o m o también veremos m á s adelante, dichas transferencias
pueden resultar igualmente útiles a la enseñanza superior de los
países en desarrollo. Pero es evidente que todos esos préstamos nos
muestran ya c ó m o puede ayudar la tecnología educativa a las univer-
sidades del tercer m u n d o a prescindir de las etapas del desarrollo
seguido por las universidades instauradas hace m u c h o tiempo en
los países desarrollados.
A nuestro entender, en estos países, y m á s concretamente en las
universidades de Europa, la implantación y desenvolvimiento de
la tecnología educativa tropiezan (aunque de maneras menos espe-
cíficas) con los tres obstáculos principales con que topa por lo general
cualquier innovación educativa de alguna importancia. A la tecno-
logía educativa, la estructura universitaria, bastante rígidamente
definida y establecida desde hace largo tiempo, opone la fuerza de
inercia de la institución y la resistencia de la tradición. C o m o se sabe
toda innovación educativa de alguna importancia va acompañada
necesariamente, so pena de resultar ineficaz o de que la "recupere"
el tipo de enseñanza y de pedagogía instituido, de lo que a veces se
denomina "el efecto sistema", es decir, los cambios en cadena que
implica, en muchos elementos del sistema y por último en el propio
sistema, la innovación aparentemente limitada. Es bien sabido, por
otra parte, que los agentes del sistema, moldeados por éste, tienden
espontáneamente, pese a que en ocasiones tengan ideas "avanzadas"
y buena disposición de ánimo, a participar en ese conservadurismo
y ese inmovilismo. Por último, no sólo los moldea el sistema, sino que
además están preparados para él y por él. Se ven, pues, llevados a
reproducirlo. Para convertirse en agentes activos de la tecnología
educativa, no sólo les haría falta dotarse de una formación comple-
mentaria (cosa que se opone a la convicción, aún m u y extendida, de
que en lo esencial basta la formación inicial) sino, además, aprender
nuevas prácticas y comportamientos nuevos, algunos de los cuales
no pueden por menos que oponerse a prácticas y comportamientos
antiguos. Sin duda que la enseñanza superior de los países en
desarrollo no puede hurtarse totalmente a estas dificultades. Sus
escuelas superiores y universidades toman a m e n u d o por modelo
a las de los países desarrollados, especialmente las del país colonizador.
Raymond Lallez

Otro tanto sucede con el personal docente, que casi siempre ha


recibido lo esencial de su formación en los países desarrollados, y
m u y a m e n u d o en las universidades tradicionales de esos mismos
países. Así pues, las fuerzas de resistencia han sido parcialmente
importadas, de tal m o d o que la introducción y aplicación de las
innovaciones pueden exigir, también en estos casos, una estrategia
de conquista paulatina que precisa tiempo y u n proceso por etapas.
Pero ello no obsta para que la situación varíe radicalmente, y por
ello las etapas pueden ser menos numerosas y menos difícilmente
franqueables. Pues, en efecto, si bien el modelo es antiguo, la insti-
tución es reciente, y por lo tanto m á s dispuesta al cambio. A d e m á s ,
muchas universidades están aún en embrión cuando no están aún
por crear. Por su parte, el personal docente no ha tenido tiempo de
dedicarse largamente a la reproducción de su propia formación, y
c o m o ésta a m e n u d o no ha sido completada, la formación permanente
se ve menos constreñida por la formación inicial y puede adoptar
con m á s facilidad direcciones nuevas. Asimismo, cabe contar con la
juventud y el aprecio por la modernidad entre las bazas en favor de
la tecnología educativa.
Ahora bien, todo ello n o debe cegarnos y hacernos creer que
bastan las mencionadas condiciones favorables ni, sobre todo, que
dichas transferencias pueden realizarse sin peligros ni problemas.

Peligros e inconvenientes

A ú n sin adoptar el papel defiscalesen el proceso actualmente incoado


a la transferencia de las tecnologías tendentes al desarrollo econó-
mico, no por ello debe dejar de reconocerse que dicha transferencia
plantea, y con agudeza, problemas de importancia.

PROCESO A LA TRANSFERENCIA DE LAS TECNOLOGÍAS

El acta del proceso recoge dos clases principales de acusaciones.


Por una parte se achaca a las tecnologías transferidas que, en lugar
de eliminarlas, fomentan e incluso engendran distintas especies de
dependencia; por otra parte se ve en dichas tecnologías la causa
próxima o lejana (y siempre fundamental) de distintos desequilibrios,
desestabilizaciones y desórdenes, cuyo encadenamiento no resultaría
difícil de ver.
L a tecnología educativa en las universidades de los países en desarrollo

Dependencia y desequilibrios económicos

Las tecnologías importadas son intensivas por lo que al capital se


refiere y c o m o los países en desarrollo no disponen de éste, o bien lo
toman prestado en los países desarrollados a unos tipos de intereses
tales que, habida cuenta del subdesarrollo, la deuda externa se
agravará rápidamente; o bien lo invierten compañías extranjeras
cuya influencia resultará determinante sobre la orientación de la
producción y sus m o d o s , sobre las inversiones nuevas y, especial-
mente sobre las desinversiones. E n cuanto a la explotación de las
materias primas, generalmente acudirán a lo mayor y m á s fácil, y a
m e n u d o actuarán sin excesivas precauciones, hipotecando los recursos
futuros (por ejemplo, la despoblación forestal) y preparando mañanas
difíciles a la producción. Son grandes consumidoras de energía no
renovable, costosa, en países cuya dependencia energética es general-
mente m u y elevada. Se apresurarán en m u c h a menor medida a
ayudar al desarrollo de las industrias de transformación, cuyos pro-
ductos podrán competir algún día con los suyos propios en el mercado
mundial. E n los lugares en que, c o m o ocurre con frecuencia, hay que
apostar principalmente por los recursos agrícolas, introducirán una
tecnología que exija o favorezca la creación y desarrollo de un sector
moderno dedicado a los cultivos de renta, es decir, de exportación,
que respondan a las necesidades de los países desarrollados en u n
mercado cuyasfluctuacionesde u n año para otro son frecuentemente
considerables, sin que tengan sobre ellas el m á s mínimo control los
países en desarrollo exportadores. Este desarrollo exógeno acarrea
una fuerte urbanización, que n o sólo resulta costosa debido a la
infraestructura y los servicios públicos que exige, sino también por
los m o d o s de consumo y los m o d o s de vida que engendra y propaga.

Dependencia tecnológica

Es en gran medida el corolario de la anterior, a la cual a su vez


refuerza. Por ser m u y evolucionadas, las tecnologías transferidas rara
vez son real o plenamente poseídas por los países en desarrollo que
las reciben, acogen o compran. Dependencia por la necesidad de
piezas de recambio, cuya exclusividad de mercado se reservan fácil-
mente los países suministradores; dependencia debido a la necesidad
de peritos extranjeros para el montaje y la puesta en funcionamiento,
las reparaciones e incluso para el funcionamiento y el mantenimiento.
L a transferencia de tecnología puede constituir también, para los
países desarrollados, una forma de sacar el mejor partido posible de
técnicas superadas. A una dependencia tecnológica menor de los
países en desarrollo corresponde, para los países desarrollados, una
88 Raymond Lailez

garantía de menor competitividad en el mercado mundial y, por consi-


guiente, de superioridad económica.

Desestabilización y desequilibrios sociales

Se deducen igualmente de las dependencias anteriores, en especial


de la mencionada en primer lugar. El desarrollo del sector moderno,
en detrimento del sector tradicional, en el caso de que no prive a
los campesinos de sus tierras, no sólo apenas contribuye a mejorar su
situación, sino que además rebaja la calidad de su vida. C o n ello se
crea una diferenciación social, que puede ir aumentando, entre los
habitantes de las ciudades y los de las zonas rurales. Pero también
se crean otras diferenciaciones y otros desequilibrios, que pueden
aparecer también en las zonas urbanas. El éxodo rural acarrea una
urbanización rápida y grande de nefastas consecuencias sociales.
Tres fenómenos principales agravarán la situación al reforzarse
mutuamente. Y a hemos evocado anteriormente el primero de ellos:
en esos países actualmente pobres, la urbanización es demasiado
grande y demasiado rápida para que, en lo que respecta a la calidad
de la vida, puedan garantizarse las ventajas de la ciudad, es decir,
la construcción de viviendas y los distintos servicios públicos de
asfaltado, agua potable y alcantarillado, de higiene y salud, de
comunicaciones y educación. Se comprende que ese "malvivir" pueda
llevar a u n "malestar", difícilmente propicio a la armonía social.
L a urbanización sin control, y especialmente el laxismo en lo que se
refiere a la instauración, funcionamiento y desarrollo de las fuerzas
de produción, implican la destrucción o el deterioro de los lugares,
perturbaciones de todo tipo que agravan ese malvivir y ese malestar.
Por otra parte, si bien las tecnologías transferidas son intensivas en lo
que se refiere al capital, en contrapartida apenas lo son en cuanto al
empleo. D e ello resulta que la ciudad no puede ofrecer trabajo a
todas las personas que afluyen a ella, y ni siquiera a muchos de los
que encuentran alguno, empleos permanentes e ingresos regulares.
Es sabido hasta qué punto, a partir de determinado umbral y de
determinada tasa de concentración, pueden resultar socialmente
inquietantes la falta de trabajo y el desempleo. D e ello se deduce
inevitablemente un tercer fenómeno: nuevos m o d o s de vida, novedad,
situaciones, organización, distribución nueva del trabajo, nuevas
normas y nuevos valores derivados de todo ello se conjugan para
plantar en la familia tradicional fermentos de ruptura, razones de
disgregación. E n unas sociedades en las que la comunidad familiar
(más amplia que la familia nuclear) ha desempeñado siempre una
gran función, el daño causado es tanto m á s grave cuanto que afecta
con m á s fuerza a los jóvenes, que son numerosos y de los que depende
L a tecnología educativa en las universidades de los países en desarrollo

en gran medida el futuro de dichos países. N o resulta difícil ver que


todo lo que acabamos de decir no es ajeno a u n último peligro, al
que prestaremos mayor atención al examinar las transferencias de
tecnologías educativas, y que aún nos queda por examinar.

Desestabilización y dependencia cultural

Al transferir tecnologías, no se transfieren únicamente máquinas y


gestos de trabajo. Se induce asimismo todo u n conjunto organizado
de m o d o s de vida, de normas de conducta, de m o d o s de relaciones
entre las personas, de representaciones sociales, de imágenes del
m u n d o , de concepciones de la vida; todo u n conjunto, asimismo, de
aspiraciones y de deseos; en resumen, todo lo que la antropología
designa con el término "cultura". Por m u y subrepticia que sea esa
transferencia de acompañamiento, no por ello deja de ser brutal,
y si bien las reacciones son de m u y diversos tipos, no por ello dejan
de compartir el ser manifestación de graves perturbaciones culturales.
El poder y la eficacia de las técnicas, su gran dominio sobre el terreno
y sobre las personas las constituyen en apoyo sólido y vehículo, al
que resulta difícil resistirse, de una cultura notablemente distinta.
C o m o mínimo, la transferencia de tecnologías contribuye a que se
reproduzca en el plano cultural el intercambio desigual habitual en el
plano económico. Contribución, por consiguiente, a u n aniquila-
miento cultural corolario de una asimilación cultural, de una "acultu-
ración" que ocupa el lugar del diálogo mutuamente enriquecedor
entre las culturas. N u n c a total, la aculturación puede no ser lo
bastante grande c o m o para impedir no sólo toda supervivencia, sino
incluso cualquier coexistencia. Pero no puede por menos que ser
malvivida, pues en ella se expresan contradicciones culturales que
dan lugar a situaciones que llevan a u n enorme desamparo. E n
oposición a la asimilación, se puede reaccionar a ella mediante u n
rechazo total que significa repliegue en uno m i s m o en un integrismo
esterilizador, a no ser que se caiga en una liquidación cultural
general, igualmente difícil de vivir.
L a conciencia de estos peligros, la convergencia de las dudas y de
las inquietudes han hecho surgir y desarrollarse la idea de técnicas
"apropiadas" a los países en desarrollo, distintas a la vez de las
técnicas tradicionales (aunque tratando en todo m o m e n t o de no
romper totalmente con ellas) y de las técnicas m á s evolucionadas,
aunque intentan adoptar toda la modernidad compatible con el
renacimiento de una cultura nacional. D e ahí los distintos términos,
de cercanísimas significaciones, con que se las califica asimismo:
tecnologías "suaves", tecnologías "intermedias", tecnologías "alter-
nativas", y otros más. El término "apropiadas" nos parece m á s
Raymond Lallez

acertado debido al doble sentido que cabe darle: apropiado en el


sentido de "propio para", de bien adaptado; apropiado igualmente en
el sentido de "que alguien se lo ha apropiado", que lo ha hecho
"suyo", soberanamente.
H a llegado el m o m e n t o , una vez planteado el problema en todas
estas facetas suyas, de preguntarnos, por comparación, qué ocurre
con la transferencia de las tecnologías educativas que tiene lugar en
la enseñanza superior y si debe defenderse también con respecto a
éstas la idea de su necesaria "apropiación" e incitar a la investigación
inventiva de los medios para concretrarla.

CRÍTICA DE LA TRANSFERENCIA
DE LAS TECNOLOGÍAS EDUCATIVAS

Desde el punto de vista económico y social, cabe decir, considerando,


por una parte, la escasa dimensión del campo de implantación que
constituyen las universidades y establecimientos escolares superiores,
y por otra parte el costo relativamente pequeño (por lo demás
rápidamente decreciente) de la tecnología educativa, que apenas
existen las limitaciones, inconvenientes y peligros a que nos hemos
referido anteriormente. Es evidente que el equipamiento de unas
pocas universidades de dimensión media y a m e n u d o pequeña, o
incluso de la única universidad actualmente existente en el país,
apenas repercute en el presupuesto de la nación. N o interviene c o m o
factor determinante, ni incluso importante de la política económica
del país. Por otro lado, si c o m o ha mostrado la primera parte de este
estudio, sucede que la tecnología educativa, que las máquinas de
enseñar sustituyen a las personas (la tecnología educativa c o m o
"paliativo"), ello se debe a que se carece de las personas necesarias
y, en cualquier caso, su cantidad nunca sería tan grande c o m o para
figurar entre los datos del problema del empleo. L o cual resulta tan
evidente que sin duda se encontrará superflua hasta la simple mención
de lo que no constituye realmente u n problema.
Ahora bien¡, debemos prestar atención a dos cuestiones: Primero,
que lo que resulta cierto a escala del país, ya no lo es a la de la univer-
sidad. Pues, en efecto, al gasto excepcional, no repetido, de la inver-
sión inicial, hay que añadir los gastos ordinarios, unos permanentes
y otros repetidos, que implican por u n lado el funcionamiento, el
mantenimiento, las reparaciones, el desgaste y la renovación parcial
o total de los materiales y, por otro lado los costos recurrentes, que
a m e n u d o se olvidan por no ser siempre inmediata y claramente
perceptibles. D e b e revisarse, al alza, pues, el presupuesto de la
universidad, basándose en u n cálculo todo lo preciso que sea posible
L a tecnología educativa en las universidades de los países en desarrollo

de los distintos costos inventariados cuidadosamente. Dicho cálculo


puede determinar qué material adquirir. El deseo, perfectamente
natural, de no rechazar una ayuda extranjera internacional o bilateral
no debe desviar de este aspecto del problema. Pues si bien debe
realizarse paulatinamente el equipamiento, no habrá que olvidar que
muchos de esos materiales son complementarios y habrá que atender,
pues, cuidadosamente a su compatibilidad. E n segundo lugar hay
que preguntarse, c o m o contrapartida de la "plusvalía pedagógica"
que se espera, si no se correrá algún riesgo o no se topará al menos
con u n problema nuevo, al proponer a los estudiantes, a causa de la
tecnología educativa, una pedagogía bastante distinta de la que han
conocido en la enseñanza secundaria. Si lo que hemos denominado
"el efecto sistema", inherente a toda innovación verdadera, debiese
actuar de este m o d o , el problema económico adquiriría una impor-
tancia m u y diferente.
V e a m o s ahora qué ocurre con el peligro de dependencia tecno-
lógica. N o es inexistente, pero no parece que, mediante determinadas
precauciones y opciones estudiadas, tenga la dimensión del que
hemos visto o temido en los demás campos de la tecnología. Habida
cuenta del costo de las piezas de recambio y especialmente de la
lentitud de los envíos, hay que estudiar la opción entre adquirir u n
material sin duda de mejores resultados pero también m á s complejo,
y por consiguiente de ordinario m á s frágil, o u n material menos
prestigioso, pero m á s robusto, menos sensible, por ejemplo, a los
rigores de u n clima tropical. Planteando a continuación la cuestión
de los técnicos precisos para el funcionamiento, el mantenimiento
y las reparaciones de los aparatos, nos hallamos ante u n dilema
similar. A falta de competencias iniciales suficientes puede resultar
útil o incluso necesario, entre otras cosas para evitar errores costosos,
que para la instalación de los materiales y su m o m e n t o inicial de
funcionamiento se apele a peritos extranjeros. Si no va m á s allá, esta
construcción no resulta grave. Prolongada, es decir, para el fun-
cionamiento ordinario, el mantenimiento permanente y las repa-
raciones periódicas ya no es lo m i s m o . Es importante que haya
técnicos nacionales que puedan encargarse de la continuidad de
dichos servicios y para ello cabe contemplar varias soluciones. L a
primera precaución que en nuestra opinión debe adoptarse es vincular
en todo proyecto de puesta en práctica de tecnologías educativas la
cuestión del equipamiento a la del personal especializado eventual-
mente necesario para su empleo (¡cuántos materiales duermen en
oscuros almacenes!) y para su mejor empleo posible. L a formación
puede recibirse, ya sea en el extranjero (en determinados casos, el
contrato de compra puede incluir unas cláusulas de formación),
ya sea a través de u n perito extranjero, el cual prepara así su relevo.
Raymond Lallez

A m b a s soluciones no se excluyen entre sí. Y no son las únicas, y


hasta puede que tampoco las mejores. Cabe preguntarse ante todo
si no sería preferible hacer lo menos necesaria posible la presencia
(al menos la presencia a tiempo pleno) de técnicos especialistas.
L o cual equivale a pedir al personal docente y no docente de la uni-
versidad que se ocupe, mediante una formación inicial mínima
completada con una formación permanente "sobre el terreno", de
dicho funcionamiento y mantenimiento. Naturalmente, esta solución
puede ser u n elemento importante de la toma de decisiones en lo
que se refiere a la elección de los materiales. N o s hallamos cada vez
m á s en este caso con u n dilema análogo al que ya vimos anterior-
mente: resultados menores o mayor sencillez de manipulación. Es
sabido por otra parte que la formación relativa al empleo de una
tecnología, sobre todo cuando se recibe en el extranjero y especial-
mente en el ámbito de los medios de comunicación, no consiste nunca
en u n simple aprendizaje técnico, sino que incluye modelos de
empleo que no dejan de guardar relación con el ambiente socio-
cultural a partir del cual se transferirá dicha tecnología. D e ahí que
quizás conviniese crear lo más rápidamente posible unos centros
nacionales de formación en tecnología educativa con formadores
nacionales. Idéntica razón, añadida a las anteriores, puede llevar,
lo m i s m o aquí que en los restantes campos tecnológicos, a la idea de
tecnologías "apropiadas" y a la búsqueda de los medios más ade-
cuados para favorecer su invención y aplicación. C o n estas últimas
consideraciones, abordamos ya el problema de las relaciones entre
este tipo de tecnología y la identidad cultural.
Pese a la advertencia anterior, no resultará difícil convenir en que
las características puramente técnicas de esos aparatos unidas a su
implantación únicamente en el ámbito limitado de las universidades,
no tienen por qué repercutir negativamente en la identidad cultural
del país de m o d o grave. A diferencia de las tecnologías transferidas
en el ámbito de la producción, las que lo son en el de la enseñanza
superior no transforman los paisajes, no destruyen los lugares, no
crean numerosas y graves perturbaciones, no trastornan el conjunto
de las relaciones humanas de toda la comunidad nacional. Si sólo
hubiese que considerar a la tecnología educativa bajo este aspecto,
sus repercusiones culturales, en el sentido antropológico del término,
serían a la vez m u c h o menos fuertes y m u c h o menos peligrosas que
las de las restantes tecnologías. Pero su esencia no radica en sus
características técnicas y no es, pues, así c o m o se pueden apreciar y
juzgar sus efectos culturales.
N o s lo muestra enseguida una breve comparación con las tecno-
logías de la producción industrial. Intensivas en lo que respecta al
capital, éstas lo son en especial por sus necesidades de energía mate-
L a tecnología educativa en las universidades de los países en desarrollo

rial. Relativamente poco intensivas en capital y energía material, las


tecnologías educativas lo son m u c h o en lo que se refiere a la energía
intelectual. Para hacerlas funcionar, hay que alimentarlas, desde
luego, con electricidad, pero asimismo, y sobre todo, con productos
de la mente h u m a n a . Empleando términos que actualmente son de
uso corriente, en ellas se distingue perfectamente, pese a determi-
nadas relaciones que los unen, lo que pertenece al ámbito del hard-
ware y lo que atañe al del software. Pues bien, es evidente que este
último es gran portador de cultura y que su transferencia va, pues,
acompañada de una fuerte importación cultural para el país que lo
recibe. E n ello radica el peligro de aculturación, de dependencia;
en ello igualmente el peligro de provocar en la universidad el
encuentro conflictivo de dos culturas. Peligro evidente para las
disciplinas de índole literaria, artística yfilosófica.Peligro no inexis-
tente, aunque no lo parezca a primera vista, en lo que se refiere a
las transferencias de conocimientos considerados —y que en parte
lo son realmente— universales: conocimientos técnicos y conoci-
mientos científicos. Y ello por dos razones principales.
E n primer lugar, las investigaciones actuales permiten plantear
con respecto a los pueblos la hipótesis, ya verificada por la psicología
diferencial en cuanto a los individuos, de su mayor o menor predi-
lección por tal o cual tipo cognoscitivo. Al menos cabe preguntarse
legítimamente si la manera c o m o es compuesta, presentada y perci-
bida mediante una imagen o una serie de imágenes una información,
si el orden de los elementos adoptados en u n soporte lógico didáctico
para comunicar conocimientos, n o están en parte predeterminados
por la pertenencia de quienes lo conciben y realizan a una cultura
dada.
Observemos, en segundo lugar, que si bien la ciencia c o m o tal es
sin duda política e ideológicamente neutral, ello no obsta para que
suponga una concepción y una representación del m u n d o , y que
las distintas ciencias no pueden elaborarse por sí solas una teoría
de su objeto. El aprendizaje científico resultará tanto m á s fácil en
la medida en que no se opongan epistemológicamente a él unas
representaciones, de origen e índole culturales. Por lo que se refiere
a los conocimientos científicos adquiridos, relativos a tal o cual
fenómeno observado, referentes a u n ámbito concreto del saber, es
posible que se opongan, en apariencia al menos, a unas represen-
taciones míticas, unas concepciones religiosas, componentes reales,
esenciales o contingentes de las comunicaciones receptoras. D e ahí
que haya que adoptar determinadas precauciones y que se deban
prever determinadas modalidades en la transmisión de los cono-
cimientos.
Ahora bien, en nuestra opinión, las resistencias culturales a la
Raymond Lallez

racionalidad científica y técnica las exagera grandemente el etnocen-


trismo de los países del Norte; y no creemos que, bajo este primer
aspecto, pueda significar la transferencia de conocimientos u n gra-
vísimo peligro cultural. N o diremos otro tanto del segundo. Los
procedimientos normalizados y universales que deciden el valor
científico de u n conocimiento permiten que a propósito suyo tenga
lugar u n acuerdo que transciende cualquier particularismo cultural
y cualquier toma de postura ideológica previa. Pero la ciencia c o m o
tal plantea dos tipos de interrogantes cuyas respuestas no dan lugar
a ese m i s m o unanimismo. Interrogantes que resulta imposible
rechazar a medida que se eleva el nivel en que se comunican los
conocimientos, es decir, el de la enseñanza superior. Del primer tipo
son las que le preguntan por la índole y alcance délas verdades que nos
aporta, así c o m o por el futuro del conocimiento que puede prome-
ternos. Del segundo tipo son las que se refieren a su sentido y finali-
dades, al lugar y la función que puede y debe ocupar en la sociedad,
en el ámbito de la cultura y, a través de ellos, en la vida de cada cual.
Estas respuestas pueden variar según los individuos, pero difieren
sobre todo, especialmente en cuanto a las del segundo tipo, según las
comunidades culturales, mientras que en el seno de cada una de éstas
presentan numerosas y vigorosas constantes. L a imposibilidad para
el sabio, y m á s aún para el trasmisor de conocimientos, de renunciar
a su cultura, de no orientar con ella la enseñanza que difunde, puede
conducir así a dificultades y fracasos. Sería importante examinar su
índole y calcular sus peligros. Por último, si consideramos, no ya la
ciencia en general, sino conocimientos científicos concretos, resulta
m á s difícil de lo que generalmente se cree distinguir en su transmisión
entre esos conocimientos propiamente dichos y el empleo que de ellos
se hace, y, sobre todo, porque el paso de aquéllos a éste resulta en este
caso aún m á s sutil, entre esos conocimientos y la interpretación que
de ellos se hace. Ahora bien, aunque las direcciones que se dan a la
transmisión por esta doble confusión no se explican enteramente por
la pertenencia cultural de los transmisores, aparecen fuertemente
determinadas por ella. Las presentes llamadas de atención y recomen-
dación carecerían de pertinencia, no apuntarían a las transferencias
de tecnologías educativas en la enseñanza superior, si no planteásemos
la doble hipótesis complementaria conforme a la cual dicha marca
cultural puede resultar m á s especialmente fuerte en el software de
dichas tecnologías, y especialmente en el que responde a las exigencias
de una enseñanza de nivel y de tipo universitarios.
El lugar que a la imagen atribuye la tecnología educativa nos parece
la razón principal de los contrasentidos de índole cultural a que puede
dar lugar la importación del software. Por m u y depurada y escueta
que sea, la imagen en tanto que tal es polisémica. Es raro que las
L a tecnología educativa en las universidades de los países en desarrollo

palabras que la acompañan, en especial si se pretende conservarle esa


riqueza, basten para reducir suficientemente dicha polisemia ni para
evitar que el receptor tenga que escoger entre las distintas significa-
ciones posibles, cuyo código le proporciona en gran parte su propia
cultura. Vayamos m á s adelante. Se convendrá en que, atendiendo
a la gran importancia que presta a la imagen, la técnica educativa
muestra comportamientos no verbales y trata de transmitir o trans-
mite a través de éstos, sin haberlo pretendido, informaciones a cuyo
propósito los resultados de las investigaciones nos dicen que repre-
sentan la mayor parte de lo que se transmite efectivamente. Y ello
sucede cualesquiera que sean las intenciones y las creencias de los
emisores. Pues bien, hoy en día se sabe que a unos mismos comporta-
mientos se atribuye frecuentemente —en razón principalmente de
pertenencias culturales distintas— diferentes significaciones.
Así pues, es el aspecto cultural el que en nuestra opinión presenta
más peligros y m á s dificultades plantea. N i que decir tiene que las
sugerencias y propuestas que haremos no tienen otra pretensión que
aportar un punto de partida posible para un debate abierto en el curso
del cual podrán plantearse otros problemas y proponerse otras
soluciones.

¿ Q u é hacer?

Por paradójico que pueda parecer, lo que constituye la causa de esas


dificultades y de esos problemas puede aportar asimismo los medios
de superarlas y de resolverlos, al menos parcialmente. Hacer del
software el responsable principal de dichos males procedía ante todo
de que es posible disociarlo del hardware, no completamente c o m o
hemos mostrado, pero en m u y gran medida no obstante. C o n lo que
no resulta difícil de ver la contrapartida positiva de esta disociación
posible. Pues, en efecto, se eliminarían al m á x i m o los efectos de
dependencia y de contrasentidos culturales inherentes a las trans-
ferencias si el país importador de hardware se convirtiese en productor
de u n software apropiado a él m i s m o . ¿Pero bajo qué condiciones
resulta posible esta solución? L o menos que cabe decir es que son
numerosas y de difícil realización, pues la solución ideada plantea a
su vez buen número de problemas. Cierto que algunos de éstos son
entera o parcialmente solubles, aunque no podrán resolverse rápida-
mente. Y es ese tiempo de espera inevitable el que nos llevará a no
descuidar la búsqueda de medios menos satisfactorios pero m á s
actuales.
Raymond Lallez

CONDICIONES PARA PRODUCIRÉ SOFTWARE

L a producción nacional n o puede iniciarse y desarrollarse a n o ser


que se hallen reunidas varias condiciones. Requisito previo es una
formación técnica mínima, con respecto a la cual consideramos nece-
sarias las recomendaciones ya formuladas anteriormente en lo que se
refiere a la formación y el empleo de los aparatos. Requisito previo
asimismo, son unas investigaciones orientadas en varias direcciones
complementarias: investigaciones sobre el tipo de enfoque cognosci-
tivo más especialmente adecuado a la cultura nacional o regional;
acerca de los factores culturales que predeterminan la percepción y
la comprensión de los distintos tipos de mensajes comunicados por
las diversas clases de máquinas didácticas; investigaciones sobre la
semiología de la imagen en el contexto sociocultural, etc. A lo que hay
que añadir investigaciones que llevan a construir instrumentos de
evaluación adecuados a los productos que deben evaluarse. L o cual
supone evidentemente la creación de centros nacionales de investi-
gación, lo que plantea temibles problemas y requerirá tiempo. C o m o
no es posible hacerlo todo simultáneamente, habrá quefijaru n orden
de prioridades en función de u n inventario de las necesidades más
importantes y/o más urgentes.
E n lo que respecta a la estrategia de adoptar para la investigación y
el desarrollo, deben tomarse en consideración factores distintos de las
necesidades. T a n importante c o m o el inventario de éstas es el de los
recursos humanos yfinancieros.L a solución ideada para resolver los
problemas de índole cultural obliga a plantear nuevamente el pro-
blema económico. C o m o en los inicios se corre el peligro de subesti-
marlo, so pretexto de que se trata de una producción de software,
cuya materia prima está constituida por materia gris, y de tomar
demasiado tarde conciencia de su importancia, hay que prestarle una
atención especial. Para esta resurgencia hay dos tipos de razones. E n
primer lugar, se observará que dichas actividades, ya sean investi-
gaciones o producción, son m u y intensivas en trabajo h u m a n o de
elevada calificación; por ejemplo, 100 horas de tabajo por una hora de
enseñanza programada, 200 por una hora de soporte lógico didáctico.
A d e m á s , no habrá de olvidarse que en este ámbito la producción
intelectual está indisolublemente ligada a u n material de producción
relativamente costoso y que precisa también contar con sus especia-
listas propios: por ejemplo, la producción en "super 8 " , habitual-
mente clasificada entre los medios de comunicación "ligeros", cuyas
ventajas n o subestimamos (material voluminoso, cámaras automáticas
de revelado rápido, proyector con carga rápida), exige, sin embargo,
una cámara sincronizada o, si n o , u n sistema de doble banda que
L a tecnología educativa en las universidades de los países en desarrollo

combine cámara y magnetófono, la compra de una mesa de montaje,


un laboratorio de revelado, materiales fungibles y costosos. H a y que
ver si los recursos humanos y financieros que cabría atribuir a las
universidades o a los centros encargados de todas esas actividades
estarán a la altura de los medios requeridos.
El conjunto de estas condiciones podría llevar a la idea de una
puesta en c o m ú n de los recursos y los servicios, a una colaboración
interuniversitaria, nacional o multinacional, y a la búsqueda de los
medios con que realizarla. Tanto la diferencia de las ideologías c o m o
la de los sistemas institucionales pueden oponerse a ello. Ese m i s m o
conjunto podría dar una fuerza suplementaria a las razones ya cono-
cidas que militan en pro de la intervención y la elaboración de
tecnologías apropiadas.
Si bien esta solución resulta la mejor, también es aquella cuya
realización sólo puede hacerse paulatinamente y cuyos primeros
resultados tardarán m u c h o tiempo. A la espera de ello, se puede no
renunciar a poner paralelamente en práctica otros medios y aplicar
otra estrategia.

MEDIOS Y ESTRATEGIA C O M P L E M E N T A R I O S

M u c h a s de las sugerencias que se expondrán a continuación pueden


no ser únicamente de espera y sustitución. N a d a impide incluso en
que se conviertan en u n complemento de la anterior.
E n el software de los países desarrollados, no todo debe rechazarse
y no todo debe ponerse en u n m i s m o plano. Puede realizarse una
primera selección conforme a la calidad intrínseca, comprobada y
reconocida, de los materiales didácticos disponibles. E n u n segundo
m o m e n t o , unas comisiones nacionales de especialistas podrían realizar
una selección complementaria m á s afinada, guiada por algunos pará-
metros principales: comparación de los costos a calidad igual, necesi-
dades de la universidad, habida cuenta de su potencial en recursos
humanos, materiales didácticos que menos peligro presenten de
comportar la marca cultural de quienes los han concebido y realizado,
consideradas las disciplinas a que atañen tales materiales, documentos
cuya orientación, estructura y contenido estén menos predeterminados
por la pertenencia cultural de quienes los hayan concebido y pro-
ducido, software que de una u otra manera se preste a una adaptación
a los datos socioculturales nacionales (por ejemplo, gracias a la posi-
bilidad de asociar a la banda visual una banda sonora original).
Raymond Lallez

CONDICIONES COMUNES A TODAS LAS SOLUCIONES

Condiciones de índole comercial


Estas no son de fácil obtención, a causa de la dependencia económica
de los países en desarrollo y de la poca potencia (agravada por la
modestia del mercado que representan las universidades) de las armas
con que cuentan en la negociación comercial. E n cuanto a las condi-
ciones, ya se ve en qué consisten. Está claro, en efecto, que nada o
casi nada de lo que acabamos de sugerir resulta posible si el estado
del mercado condena a comprar aparatos y máquinas que sólo admiten
u n tipo de software, el que generalmente pone a la venta la misma
firma, o una de susfiliales,que construye esos aparatos y esas
máquinas. T a m p o c o hay que consentir que unos contratos leoninos
obliguen a la compra agrupada del hardware y del software inmediata
y ulteriormente necesario.

Otras opciones necesarias


L a persistencia de las limitacionesfinancierasy la relativa modestia
de los recursos impone, en nuestra opinión, opciones, además de
aquéllas cuya necesidad u oportunidad ya hemos considerado, tocante
a dos aspectos principales. Ante todo, se estará de acuerdo en que, en
esta situación, interesa tratar de utilizar al m á x i m o los recursos y
medios de que se dispone ya y los que se adquieran. L o cual supone
un inventario minucioso del potencial existente y u n serio examen de
su utilización anterior, pero plantea sobre todo u n problema de
organización y de gestión. ¿Hay que agrupar y concentrar los medios
(personas y materiales) en u n servicio c o m ú n que responda a las
demandas de los distintos departamentos de la universidad, para
conseguir el pleno empleo de unos y otros? ¿Hay que hacer de dicho
servicio u n simple almacén de materiales que tomarían prestados los
distintos departamentos? ¿ O hay, solución intermedia, que distribuir
el material ligero entre los distintos departamentos y pedir a cada
cual que administre su software propio? ¿ N o existen soluciones
mejores, habida cuenta de la posible diversidad de las situaciones
universitarias? Estas son preguntas que exigen decisiones, y por idén-
tica razón nos parece necesario otro tipo de opción: puede optarse por
distribuir por igual, aunque con cierta relación según su dimensión,
los recursos y los medios entre los distintos departamentos de la
universidad. Por el contrario, se puede decidir concentrarlos y
hacerlos así m á s eficaces gracias a la intensidad y coordinación de sus
usos, en departamentos cuyas necesidades y actividad se consideren
prioritarias. Pero a este respecto aún queda una opción por realizar:
L a tecnología educativa en las universidades de los países en desarrollo

en lugar de escoger entre disciplinas, ¿no sería acaso m á s pertinente


elegir entre funciones? Por ejemplo, en la enseñanza superior en
general, la concentración o la distribución desigual ¿se realizará en
beneficio de la formación de los alumnos, con una eventual opción
segunda por una o varias disciplinas, o en beneficio de la formación
de los formadores, principalmente del futuro personal docente?

La opción fundamental

E n este estudio, hasta el m o m e n t o hemos aplazado plantear el pro-


blema fundamental y mostrar la necesidad de una opción esencial
porque rige en amplia medida todas las demás, en especial la de las
innovaciones, de las que la tecnología educativa constituye a la vez
uno de los medios m á s importantes y uno de los contenidos asimismo
de mayor importancia. Si bien lasfinalidadesy los objetivos funda-
mentales de la enseñanza superior en general, y de las universidades
en concreto, están siendo objeto de reexamen por todas partes por
numerosas razones (modelo inadecuado por heredado o imitado de los
países desarrollados, creación de instituciones que no existían hasta
entonces, importancia de la educación entre otros tipos de la ense-
ñanza superior c o m o agente de desarrollo), la cuestión de las finali-
dades se plantea con especial gravedad a los países en desarrollo. Y ,
por otra parte, cada vez se plantea con mayor frecuencia y en u n
número cada vez mayor de dichos países. ¿ Y quién no estará de
acuerdo en que para realizar una política coherente, que pueda
garantizar su continuidad y sus objetivos, su capacidad de alcanzarlos,
en coherencia asimismo con las acciones que tienen lugar en otros
lugares, en ámbitos distintos al de la educación, hay que definir
rápidamente esasfinalidadesy esos objetivos fundamentales? •
L a educación
en periodo
de austeridad (I):
planificación
y financiamiento
Crisis económica y crisis
de la educación:
algunas perspectivas
François Orivel

L a crisis económica mundial ha rebasado ya sistemas educativos sin precedentes en la his-


hoy con creces todo u n decenio, y, para muchos toria. Pero esta esperanza corre grave peligro
países, la salida de este largo túnel es apenas de verse frustrada.
previsible. ¿Qué será entonces una crisis que Probablemente es ilusorio esperar el retorno
dura tanto cuando, según la etimología, este a una situación análoga a medio plazo, y ello
término designa un m o m e n t o crucial y breve principalmente porque la disminución genera-
en el que se decide el desenlace, positivo o lizada del crecimiento de los presupuestos
negativo, de una situación trastornada? Si la públicos de educación ha sido en gran medida
denominación convenida para caracterizar el independiente de la de la economía. Por otra
actual estado de la economía mundial no es parte, la hipotética recuperación de esta última
de las más afortunadas, no por ello deja de ser tendrá necesariamente una amplitud limitada
cierto que lo que se llama crisis abarca una fase y no será señal de una nueva expansión signi-
histórica durante la cual el crecimiento econó- ficativa de los presupuestos educativos. Dicho
mico es menos fuerte que durante la fase prece- de otra manera, la crisis de la financiación
dente, y en la que los problemas inherentes a la pública de los sistemas de enseñanza está predes-
evolución económica (inflación, paro, défi- tinada a durar, y, como las necesidades de
cits, etc.) se han hecho m á s notables. educación siguen siendo m u y importantes, es
Implícitamente, cuando asociamos crisis de de prever que poco a poco se irán introduciendo
la educación y crisis económica, damos por nuevos modos definanciación,junto con nuevas
descontada una salida próxima de ésta y, al tecnologías de transmisión del saber. Al m i s m o
mismo tiempo, de la crisis de la educación con tiempo, los sistemas formales de educación van
la inevitable referencia al afortunado periodo a adaptarse también a este nuevo contexto,
1950-1975, durante el cual u n crecimiento eco- con respuestas que variarán de unos países a
nómico mundial excepcionalmente prolongado otros, habida cuenta de las limitaciones, las
y fuerte fue motor de u n desarrollo de los necesidades y las prioridades que pueden variar
igualmente entre los distintos países.

François Orivel (Francia). Director de investigación en Algunas cifras respecto a la amplitud


el Instituto de Investigación sobre la Economía de la de la "crisis" económica
Educación (IREDU), Universidad de Dijon. Consultor
de varias organizaciones del sistema de las Naciones
Unidas. Autor de numerosas obras y artículos sobre el Aunque se trata de una forma de aprehensión
enfoque económico de los sistemas educativos, tanto en de los fenómenos económicos u n tanto reduc-
Francia como en los países en desarrollo. tora, es interesante analizar la evolución del

Perspectivas, vol. X V I , n.° 2, 1986


204 François Orivel

índice de crecimiento del producto interior Si bien adolecen de un grado no desdeñable


bruto (PIB) por habitante, antes y durante la de incertidumbre, son interesantes por cuanto
"crisis" económica (cuadro i). Podemos dis- contribuyen a relativizar el ambiguo concepto
tinguir cuatro periodos: de crisis: en efecto, al situarse en torno al 3%,
Antes de la primera conmoción del petróleo están próximas a la media mundial registrada
(1973), el crecimiento económico tendía más durante la crisis (2%) y también a la media
bien a acelerarse, tanto en los países desarro- mundial de antes de la crisis (3 a 4%). D e todo
llados como en los países en desarrollo, con un ello cabe concluir que probablemente el m u n d o
ritmo, hacia el final de este periodo, del 4 % va a salir poco a poco de la crisis, pero al
por año y por habitante. amplitud de tal movimiento no trastornará la
Entre la primera conmoción del petróleo y la situación global.
mitad de los años 80, podemos identificar El aspecto más preocupante de estos datos
dos subperiodos: el primero, de 1973 a 1980, es el referente a las variaciones geográficas.
se caracteriza por un cuasi mantenimiento del Mientras que Asia registró, en conjunto, un
crecimiento en los países en desarrollo y una índice de crecimiento del PIB más rápido d u -
caída de casi la mitad en los países occiden- rante la "crisis" que en el periodo immediata-
tales; el segundo, de 1980 à 1985, ve mante- mente anterior, el África subsahariana ve dete-
nerse la progresión de los países occidentales riorarse m á s aún su situación ya crítica. El
en su nivel de 1973-1980 mientras que los índice de crecimiento de su PIB, que era sensi-
países en desarrollo se desploman a menos blemente inferior al de las otras regiones antes
del 1%. Si reagrupamos estos dos subperio- de la crisis, pasó a ser negativo durante la
dos, el índice de crecimiento anual medio misma y lo seguirá siendo en el decenio siguiente
del PIB por habitante se acerca al 2 % , tanto si no se emprende ninguna acción de enverga-
en los países en desarrollo c o m o en las dura para invertir esta terrible tendencia. Pero
naciones industrializadas. también aquí el término de crisis es inapropiado,
El cuarto periodo (1985-1995) corresponde al puesto que no ha existido verdadero despegue
dominio de la previsión. Las cifras indicadas económico de esta región.
en el cuadro 1 deben entenderse c o m o hipó-
tesis medias, habida cuenta de las informa-
ciones disponibles.

C U A D R O I. Producto Interior Bruto por habitante. índice de crecimiento medio anual

Media
1950/ 1960/ 1965/ 1973/ 1980- Previsión
i960 1965 1973 z 980 1981 1982 1983 1984 1985 1985-1995

Países en desarrollo 2,7 3,1 4,i 3,3 o,8 — 0,7 — 0,1 2,1 0,9 3,1
África Sub-sahariana 1,3 2,4 2,0 0,5 4,1 — 4,8 — 5.4 — 5.4 — 1,7 — 0,3
Oriente M e d i o y África del
Norte 2,6 3,7 3,5 4,3 — 2,5 2,6 0,5 — 1,3 n.d. n.d.
Asia 2,3 2,4 3,2 3,5 2,5 3.4 6,0 5,3 4,5 3,3
América Latina y el Caribe 2,4 2,3 4,5 2,9 — 4,1 — 4.8 — 4,5 i,l n.d. n.d
Países industriales con
economía de mercado 2,5 4,0 3,7 2,1 0,7 — 1,0 1,5 4,3 1,8 2,8
Países productores de
petróleo con rentas elevadas n.d. n.d. 4,1 6,2 — 1,1 — 7.8 — I4.I — 6A n.d. n.d.

Fuentes: World table 1981, J o h n H o p k i n s University Press World development report, Banco Mundial, 1985.
n . d . = n o disponible.
Crisis económica y crisis de la educación: algunas perspectivas 205

C U A D R O 2. Índice de crecimiento medio anual del gasto público en enseñanza (a precios constantes)

1960/1965 1965/1970 1970/1975 1975/1980 1980/1982

Países en desarrollo 10,5 8,7 7,7 7,2 7,0


África 9,6 8,9 8,6 6,6 6,8
Asia 9,3 8,6 8,3 8,3 10,3
A m é r i c a Latina y el Caribe 12,1 8,7 5,9 6,8 4,3
Países industriales con
economía de m e r c a d o 10,7 8,0 6,8 3,6 1,2
Países productores de
petróleo 13,7 9,9 n,8 * 7,8 6,2

Fuente: J. C . Eicher, L'évolution des systèmes d'enseignement dans le monde de i960 ànos jours, Unesco, E D / E P P , 1985.

incluso intensificarlo en el periodo más reciente.


Crisis económica Estas evoluciones, diferentes en apariencia,
y presupuestos de educación esconden en realidad una convergencia de con-
junto. La disminución más brutal del crecimiento
C o m o recordábamos al comienzo de este artí- del gasto público en educación registrada en los
culo, la mengua del crecimiento del gasto países desarrollados puede explicarse por el
público en educación precedió, de manera hecho de que ya han cubierto lo esencial de sus
general, à lo que se ha convenido en llamar la necesidades y de que su índice de crecimiento
crisis (cuadro 2). demográfico es m u y débil. Esto es verdad en
E n los países desarrollados con economía de parte, sin duda. Pero, más generalmente, obser-
mercado, la caída de este índice es espectacular, vamos u n fenómeno de llegada a tope del gasto
tanto por su rapidez como por su regularidad: cuando se lo relaciona con el P N B , como si se
10,7% de i960 a 1965, 8 % de 1965 a 1970, llegase a una saturación cuando esta parte
6,8% de 1970 a 1975, 3,6% de 1975 a 1980, y alcanza el 6 % (véase cuadro 3).
sólo 1,2% al comienzo de la década de 1980. Los países que momentáneamente han sobre-
Vemos que la crisis ha precipitado el descenso, pasado ese umbral del 6 % , como América
pero éste era anterior a ella. del Norte, muestran m á s bien una tendencia
Aunque menos acentuado, el mismo fenó- a volver hacia atrás. Y a la inversa, si Asia es
m e n o puede observarse en los países en desa- la única región que registra u n crecimiento de
rrollo, donde el ritmo de crecimiento pasa de su gasto de educación no desacelerado, se debe
10,5% anual entre i960 y 1965 a 7 % a comien- a que con sólo u n 3,6% en 1982, es inequívoca-
zos de los años 80. A diferencia de los países mente la más alejada del umbral referido. Dicho
desarrollados con economía de mercado, la de otra manera, la varianza de los puntos del
crisis no aceleró la baja sino que tendió m á s P N B asignados a la educación era fuerte antes
bien a frenarla. de la crisis, pero tiende paulatinamente a
E n este orden de ideas, las tres grandes reducirse, con una convergencia en torno al
subregiones del m u n d o en desarrollo muestran umbral del 6%. N o parece tratarse de una polí-
comportamientos un tanto divergentes: si África tica deliberada de los estados, aunque algunos
se encuentra próxima a la media de los países en hayan podido hacerlo, sino de una solución
desarrollo, América Latina y el Caribe, que de compromiso sumamente ajustada entre nece-
parten de una cota m u y alta (12,1% anual sidades múltiples y apremiantes que compiten
en 1960-1965), registran la desaceleración más con la educación, ya se trate de la sanidad o de la
fuerte (4,3% en 1980-1982), mientras que Asia, protección social, de la financiación de las
que ha disminuido m u y poco su esfuerzo, parece infraestructuras, de las inversiones industriales,
206 François Orivel

C U A D R O 3. Porcentaje del P N B que se destina al gasto público en educación

1970 1975 1976 1977 1978 1979 1980 1981 1982

Mundo1'2 5,4 5,6 5,6 5,8 5,7 5,6 5,6 5,6 5,7
África2 4,1 4,8 4,9 5,1 5,i 5,0 4,8 4,9 5,2
América 6,7 6,0 6,0 6,7 6,5 6,4 6,3 6,2 6,4
Asia1 3,1 4,3 4,4 4,5 4,6 4,6 4,5 4,6 4,6
Euiopa y U R S S 5,2 5,8 5,7 5,6 5,6 5,6 5,6 5,6 5,6
Oceania 4,3 6,2 6,2 6,4 6,1 5,8 5,9 5,8 5,9
Países desarrollados2 5,9 6,1 6,0 6,3 6,1 6,1 6,1 6,1 6,1
Países en desarrollo1 2,9 3,6 3,7 3,8 3,7 3,6 3,7 3,8 4,1
África 4,1 4,8 4,9 5,1 5,i 5,0 4,8 4,9 5,2
Asia y el Pacifico1 2,3 3,2 3,4 3,5 3,3 3,2 3,3 3,3 3,6
América Latina y el Caribe 3,4 3,6 3,7 3,8 3,7 3,7 4,o 4,2 4,4
Países árabes 5,0 5,9 5,5 5,4 5,4 4,8 4,6 4,5 5,1
1. N o incluidos Kampuchea Democrática, la República Popular Democrática de Corea, la República Democrática Popular Lao
Líbano, Mongolia y la República Socialista del Vietnam.
2. N o incluida Sudáfrica.
Fuente: Unesco, Dépenses publiques d'éducation dans le monde. Tendances régionales et par pays 1970-1982, 1985.

de la investigación o de la defensa, por no halla por el contrario en la situación m á s


hablar de la amortización de la deuda pública, favorable, con el crecimiento económico m á s
que en todas partes pesa cada vez con m á s fuerte y gastos públicos débiles.
fuerza sobre los presupuestos de los estados.
L afinanciaciónde los déficits públicos mediante
el empréstito no puede practicarse indefinida- Las consecuencias de la crisis
mente, toda vez que las anualidades de amorti- sobre los sistemas educativos
zación llegan a ser de tal cuantía que la mella
que producen en la capacidad de ahorro de u n El débil crecimiento durable de los recursos
país compromete sus posibilidades de inversión públicos para educación puede producir efectos
y, por lo tanto, de crecimiento. Parece que en de tres clases: efectos sobre la demanda de edu-
muchos países es esta situación precisamente cación, que podría adaptarse también a la baja
la que impera, suscitando u n discurso casi frente a una oferta reducida; sobre los costos y
universal sobre la necesaria limitación del recurso la calidad de la educación, y sobre los sistemas
a los fondos públicos y sobre la urgencia de educativos mismos, llamados a transformarse
sanear las finanzas de los estados. E n conse- a fondo.
cuencia, las perspectivas más probables para el
gasto público en educación se presentan claras:
en gran número de países, no va a crecer m u c h o EFECTOS SOBRE LA D E M A N D A
más aprisa que el propio P N B , alrededor de
un 3 % al año, es decir a u n ritmo m á s bien Se ha observado ya que, en los países desa-
menor que durante el periodo llamado de crisis. rrollados, la generalización consumada de la
L a situación de África, cuyas expectativas de escolarización primaria, la extensión cuasi uni-
crecimiento económico son poco alentadoras versal de la escolarización secundaria, el freno
pero que admite u n esfuerzo considerable para de la expansión de las universidades y el débil
educación (5,2% en 1982) claramente superior crecimiento demográfico eran factores suscep-
al de las otras regiones en desarrollo, es sin tibles de aminorar el crecimiento de la demanda.
duda más preocupante que la de Asia, que se Sin embargo, numerosos signos hacen pensar
Crisis económica y crisis de la educación: algunas perspectivas 207

que no ocurre nada semejante. E n los Estados


Unidos, el índice de acceso a la enseñanza supe- EFECTO SOBRE LOS COSTOS
rior es dos veces más elevado que en Europa y Y LA CALIDAD DE LA EDUCACIÓN
en el Japón, sin que ello acarree, para los titu-
lados de este nivel, índices de paro en alza con El problema de las relaciones entre los inputs
relación a los no titulados. M u c h o s adultos educativos, sus costos y la calidad de la ense-
vuelven a la universidad al cabo de algunos ñanza sigue siendo una cuestión m u y poco estu-
años de vida profesional. D e m o d o general, diada y todavía hoy mal conocida. Si nos limi-
la demanda de educación por parte de los tamos a los costos recurrentes, la práctica
adultos, sea para operaciones de reciclaje, de totalidad de los sistemas educativos destina
conversión profesional o de promoción social, los 3/4 o más de sus recursos al factor trabajo,
se halla en rápida expansión en numerosos países es decir a los enseñantes. Ahora bien, a diferen-
desarrollados, sin hablar de las demandas con cia de lo que sucede en la mayor parte de las
fines culturales o de cultivo y realización per- demás ramas de la economía, el factor trabajo
sonal. E n Francia, los responsables de este área en los servicios educativos tiene una producti-
practican con resolución una política de estí- vidad que baja con el tiempo a causa de la
mulo o la formación y consideran que la recupe- continua disminución del número de alumnos
ración económica depende m u c h o del fomento por maestro en la mayor parte de los sistemas.
de la educación y de una mejor cualificación de Desde u n punto de vista pedagógico, se consi-
la m a n o de obra. dera que ello supone una mejora de los servicios
E n los países en desarrollo, la presión de la de enseñanza, aun cuando la verificación empí-
demanda es, por supuesto, más fuerte todavía, rica de este aserto no revela efectos importantes.
ya se trate de realizar el objetivo de la escola- Se admite, de un m o d o general, que la amplitud
rización primaria universal o de fomentar las del efecto pedagógico, si es que existe, es m á s
formaciones postprimarias y postsecundarias. débil que el efecto sobre los costos. D e esta
Además, el crecimiento demográfico es por sí suerte, los sistemas educativos ven aumentar
solo u n factor significativo de crecimiento de la inexorablemente los costos unitarios de sus
población escolar. servicios, c o m o puede apreciarse en el cuadro 4.
E n definitiva, es dudoso que una reducción Entre 1975 y 1981» los costos unitarios de los
de las necesidades o una menor presión de la países en desarrollo pasaron del índice 100 al
demanda sea la respuesta idónea al freno ineluc- índice 215 en el ciclo primario, del índice 100 a
table de los recursos públicos para educación. 168 en el ciclo secundario, y del índice 100 al
índice 196 en el ciclo superior. E n los países
desarrollados, el índice pasó de 100 a 190 para
primaria y secundaria juntamente, y de 100 a

C U A D R O 4. Costos unitarios según regiones y niveles de educación (unidad: dólar corriente)

Primaria Secundaria Superior

1975 1981 1975 1981 1975 1981

Países en desarrollo 48 103 106 178 426 836


Africa 41 59 225 409 2.878 3.481
Asia 33 67 6l 109 179 282
América Latina y el Caribe 84 212 235 301 764 1.718
Paises desarrollados — 868« 1.6490 2.080 3.726

a. Primaria y secundaria conjuntamente.


Fttmu: Unesco, Public expenditure on education
thein
world, regional and country trends,
1970-1982, 1985.
208 François Orivel

179 para el superior. Todos estos índices son ciarse indirectamente del de los sectores donde
superiores a la deriva inflacionista del dólar, es rápido. Tal es el caso, sobre todo, de los
que, durante este periodo, registró una inflación funcionarios, cuya productividad no es fácil
acumulada del 65%. de evaluar, y que por lo general se benefician
A este alza de los costos unitarios no parece de subidas salariales equivalentes a la media
acompañar una mejora significativa en la calidad de las observadas en los demás sectores de la
de los servicios educativos. Cierto que la veri- economía. Por lo que se refiere a los docentes,
ficación empírica de eventuales modificaciones puede observarse u n fenómeno análogo, espe-
. en los rendimientos pedagógicos de los sistemas cialmente en los países donde su estatuto los
educativos raras veces se lleva a cabo de una asimila a los funcionarios.
forma rigurosa y sistemática. Cuando se prac- U n estudio reciente sobre la evolución de las
tica, c o m o sucede en los Estados Unidos, se remuneraciones de los docentes en los países de
observa una baja tendencial de los rendimientos la O C D E 1 ha puesto de manifiesto, sin embargo,
medios, principalmente en matemáticas, lo que en términos de remuneración los ense-
bastante pronunciada para suscitar cierta in- ñantes tenían tendencia a perder terreno en casi
quietud al nivel de las autoridades m á s altas. todas partes. C o n relación a la media de las
Cuando no se practica, c o m o en Francia o remuneraciones, la pérdida sería del orden del
en otros países, se deja sentir la misma in- 30% para los maestros de primaria y del 40%
quietud en los medios interesados. Se suele para los profesores de enseñanza superior en el
creer más en una baja que en una mejora de los curso de los veinte últimos años. Esta pérdida se
resultados escolares, y aunque tales alarmas nos explica en parte por la tendencia general a una
dejan escépticos, parece prudente considerar mayor igualdad de las remuneraciones, deter-
que los resultados escolares medios, en 1985, minada a su vez por dos tipos de causas: unas
son iguales por lo menos a los de hace diez o políticas económicas deliberadamente orienta-
veinte años, y ello a pesar de u n aumento sus- das hacia este objetivo y una disminución
| tancial de los costos unitarios. D a d o el peso relativa de los empleos con remuneración más
de las remuneraciones de los docentes en el baja (agricultores y obreros). Pero parece tener
total de los costos unitarios, este alza guarda también su dinámica propia, pues este fenómeno
necesariamente relación con el aumento de los de concentración de las remuneraciones hacia
costos salariales. El fenómeno es clásico y fácil la media es más rápido para los enseñantes. H o y
. de comprender: en efecto, los progresos en la día, en los países de la O C D E , u n maestro de
productividad del trabajo son desiguales con primaria percibe una remuneración anual igual,
: arreglo a los diversos sectores de actividades; en promedio, a 1,5 veces el P N B por habitante.
a nivel de las remuneraciones, esto se traduce Esta relación sólo se sitúa en torno a 1 en países
por alzas salariales más elevadas en los sectores como Francia o los Estados Unidos.
con fuerte crecimiento de la productividad que Ahora bien, según otro estudio,2 la relación
1
en aquellos otros donde este crecimiento es débil entre las remuneraciones de los docentes y el
o nulo. Pero de todos modos, en estos últimos, P N B por habitante es sensiblemente más ele-
la falta de aumento de la productividad no tiene vada en los países en desarrollo que en los
por efecto el bloqueo de los salarios (lo que desarrollados. Alcanza, en promedio, el valor
. motivaría u n peligroso desafecto de la m a n o de de 4,1 en África y de 3,4 en América Latina.
obra hacia estos sectores); los complejos meca- Cabe predecir, pues, sin gran riesgo de error,
nismos de deducciones obligatorias y de modi- que las remuneraciones relativas de los docentes
ficaciones legales en la distribución de las en los países en desarrollo están llamadas a
rentas básicas por una parte, y de alteraciones bajar, sea cual fuere la evolución económica
en los precios relativos de los bienes y servicios futura de estos países.
finales por la otra, permiten a los sectores con Los enseñantes, naturalmente, se inclinan
débil crecimiento de la productividad benefi- a luchar contra una evolución que les es desfa-
Crisis económica y crisis de la educación: algunas perspectivas 209

vorable, y cuando la presión presupuestaria es factores m á s eficaces y menos costosos y la ;


m u y fuerte, es la parte del gasto en educación definición de prioridades que mejor satisfagan
que no va a los salarios la que se reduce. Según los objetivos de eficacia y equidad han pasado
revela un estudio de J. C . Eicher,3 el gasto en a ser condiciones que los sistemas públicos de
material didáctico puede lacanzar niveles tan educación no podrán seguir desatendiendo en
bajos como el 0,08%, en Zimbabwe, o el 0,09% lo sucesivo.
en Madagascar y en el Congo; raras veces supera
el modestísimo umbral del 3 % en los países
del África al Sur del Sahara. El aspecto m á s EFECTOS PRINCIPALES DE LA CRISIS
preocupante de esta situación es el hecho de SOBRE LOS SISTEMAS EDUCATIVOS
que, lejos de mejorarse, tiende m á s bien a
empeorar.
Las prioridades
U n a vez más, nos es mal conocida la combi-
nación óptima de factores que intervienen en Se observa hoy, en casi todas partes, u n renaci-
los procesos educativos; cabe, a pesar de todo, miento de la atención a la expansión y el fo-
hacer dos observaciones al respecto: mento de la enseñanza primaria. Verdad es que
Es dudoso que la asignación de unas propor- en comparación con los grandes objetivos de los
ciones tan débiles a los manuales y al material años sesenta que preveían la erradicación del :
didáctico constituya una distribución satis- analfabetismo antes del fin de este siglo, los
factoria de los recursos; hay efectos de u m - resultados obtenidos quedan bastante por debajo
bral por debajo de los cuales los resultados de las esperanzas. El analfabetismo aumenta de
pedagógicos se desmoronan. nuevo en valor absoluto. Al ritmo de los pro-
Existe u n fenómeno histórico y universal de gresos realizados entre i960 y 1980, algunos
sustitución del trabajo por capital según el países no escolarizarán a la totalidad de las
cual, en todo proceso de crecimiento, el nuevas generaciones antes de que acabe el
costo del trabajo aumenta con relación al siglo XXI. C o n harta frecuencia, en estos países,
de los demás factores, lo que conduce a au- la parte del presupuesto de educación asignada
mentar la parte de estos otros factores. Si en a la enseñanza primaria es inferior al 50%,
algunos sistemas educativos se produce u n yendo el resto a una exigua minoría de la
fenómeno inverso, es que los mecanismos de población que tiene acceso a los niveles secun-
asignación racional de los recursos han dejado dario y superior. D e u n m o d o general, cuando
en él de funcionar. Semejante situación no la presión presupuestaria obliga a efectuar elec-
puede menos que ser temporal si el país ciones difíciles, las soluciones de compromiso,
considerado no quiere sacrificar el porvenir inspiradas en consideraciones de eficacia y de
de su sistema educativo. equidad, consiguen favorecer a la enseñanza
Por razones que radican esencialmente en su primaria frente a los niveles siguientes y a la
carácter marcadamente público, carácter que no enseñanza general frente a la enseñanza espe-
ponemos aquí en tela de juicio, la educación cializada.
adolece de una falta de mecanismos de regula- Esta última observación se refiere a los diver-
ción y de adaptación. E n u n periodo de abun- sos esfuerzos desplegados por numerosos países
dancia de recursos, c o m o fue el caso en los para responder a la exigencia de una mejor
años 1950-1975, esta carencia no tiene d e m a - adaptación de sus formaciones al mercado de
siadas consecuencias nocivas para el funciona- trabajo, fomentando la enseñanza técnica y las
miento y el desarrollo de los sistemas educativos. formaciones profesionales. Este esfuerzo, no
Pero éste no es ya el caso actualmente, y menos obstante, resulta costoso, y las consecuencias
todavía lo será mañana. Así, una gestión más sobre el empleo son por lo general poco alenta-
rigurosa de los fondos públicos asignados a la doras. L a deseable diversificación de las forma-
enseñanza, la investigación sistemática de los ciones postprimarias responde mejor a los
210 François Orivel

objetivos de eficacia y equidad cuando el sobre- liberar recursos públicos en favor de las segun-
costo es asumido por las empresas o las fami- das, sin desautorizar, antes al contrario, los
lias, y/o cuando no se excluye a nadie de los principios antes citados.
niveles precedentes. Esta observación nos lleva Mientras que fue posible, gracias al aumento
al problema de lafinanciaciónde la enseñanza, de los presupuestos públicos de educación,
cuya evolución se encuentra hoy en un punto financiar todas las demandas, no se había
crucial. planteado realmente el problema de u n incre-
mento en lafinanciaciónprivada. Pero esa época
La financiación ya ha pasado, sin duda para m u c h o tiempo, y
lafinanciaciónpública, que sigue siendo indis-
Si en términos generales, antes de 1980, los sis- pensable, deberá concentrarse en el futuro en
temas educativos vieron que la parte de la las demandas y necesidades prioritarias.
financiación pública tendía m á s bien a aumentar,
hoy puede considerarse que este movimiento ya Las nuevas tecnologías educativas
ha cesado y que en lo sucesivo será la parte
privada de lafinanciaciónla que aumente. L a Las incitaciones a la investigación en busca de
financiación pública de la educación tiene sóli- mejoras de la productividad de los servicios edu-
dos fundamentos y responde a tres considera- cativos son hoy cada vez más fuertes. Las pre-
ciones esenciales: las necesidades sociales y siones ejercidas en este sentido por unos usua-
económicas de educación son superiores a lo rios m á s solicitados financieramente contribui-
que la sola demanda privada podría producir; rán sin duda a estas mejoras. Por su parte, los
los efectos externos de la educación (es decir, docentes no aceptarán un retroceso de sus posi-
los que van más allá del propio individuo edu- ciones relativas o, si lo hacen, será a expensas
cado o de su familia) son suficientemente impor- de su cualificación, y en este caso serán los
tantes para justificar unafinanciaciónpública, usuarios quienes adopten sus actitudes bus-
y por último, un anhelo de equidad que parte del cando soluciones de recambio.
principio de que la pobreza nunca puede cons- L a expansión de las nuevas tecnologías será
tituir u n motivo aceptable de exclusión de los más rápida allí donde el trabajo es relativamente
beneficios de la educación. más caro, es decir, en los países más desarro-
Estas condiciones no siempre prevalecen, ya llados. Se fundará en la autoinstrucción y
porque los beneficios privados obtengan pri- recurrirá a combinaciones diversas de inputs
macía sobre los beneficios sociales o porque la didácticos, desde los cursos por correspondencia
capacidad definanciaciónde las familias sea a la microinformática pasando por programas
superior al costo que ello les supone. Numerosos radiodifundidos o televisados, o también m e -
trabajos recientes han revelado que la parte de la diante videocasetes.
financiación pública es a veces de tal naturaleza Este tipo de tecnología se dirigirá preferen-
que los contribuyentes pobres participan en la temente a individuos con capacidad de autono-
financiación de la educación de hijos de fami- mía, es decir, pasada la adolescencia, si bien los
lias acomodadas. E nfin,abundan los ejemplos recientes progresos de la microinformática
en los que se ofrecen gratuitamente formaciones resultan particularmente atractivos para los más
costosas de nivel avanzado (secundario o supe- jóvenes.
rior) a familias acomodadas, sin que ello corres- E n los países en desarrollo, los medios de
ponda a necesidades apremiantes del mercado comunicación menos costosos son la radio o la
de trabajo, mientras que a familias pobres se televisión, en recepción individual o colectiva
las excluye totalmente y en gran número de la según los casos; China, por ejemplo, más pobre
enseñanza primaria. N o es difícil poner de mani- dentro de este grupo, fomenta la recepción
fiesto que, en semejantes situaciones, una mayor colectiva de los programas televisados, mientras
participaciónfinancierade las primeras puede que Brasil, m á s rico, registra u n progreso de la
Crisis económica y crisis de la educación: algunas perspectivas 211

recepción individual. El segundo ciclo de la


enseñanza secundaria general o las formaciones
universitarias n o tecnológicas se adaptan m u y
bien a este tipo de enseñanza a distancia cuyos
progresos son m u y rápidos y van, sin duda
alguna, a acelerarse.

L a educación conoció su primera revolución


tecnológica cuando se pasó del preceptor indi-
vidual a la sala de clase, lo que permitió u n
alza espectacular de la productividad de este
servicio. L o que llamamos hoy la crisis no es,
sin duda, más que una simplificación engañosa
tras la cual se está desarrollando, en profun-
didad, la segunda gran mutación de u n sector
que, lejos de hallarse amenazado, está llamado
a conocer una expansión tal vez aún insos-
pechada. •

Notas
i. F. Orivel y J. Perrot, Les rémunérations des enseignants
dans les pays de l'OCDE. Évolution comparative,
Dijon, I R E D U , 1985.
2. A . C . Edwards, Teachers' salaries in developing coun-
tries, Washington, Banco Mundial, 1985.
3. J. C . Eicher, L'évolution des systèmes d'enseignement
dans le monde de IÇ6O à nos jours. Aspects économique et
financiers, Unesco, E D / E P P , 1985.
Reforma y planificación
de la educación
en u n contexto
de crisis económica
Martin Carnoy

Los responsables de la educación del m u n d o público dedicada a educación tanto formal c o m o


entero se enfrentan hoy con presiones econó- no formal y para mejorar la calidad de la
micas que les apremian a reducir los gastos en educación generalizada, sobre todo en la escuela
educación y, al mismo tiempo, a buscar nuevas primaria destinada a poblaciones marginales.
formas de satisfacer la demanda social, que no
decrece, de una escolarización mejor y m á s
amplia. Quisiera mostrar que, en esta "crisis", D o s concepciones opuestas
el argumento que justifica la política de expan- de la educación
sión de la educación que dominara en circuns-
tancias económicas anteriores más favorables, El crecimiento económico más lento (y en algu-
no ha cambiado. L o que ha cambiado son las nas regiones incluso negativo) de los cinco años
limitaciones económicas impuestas a los plani- últimos ha acentuado los efectos de la amino-
ficadores de la educación y el contexto político- ración de la progresión del producto interior
ideológico en que se toman las decisiones rela- bruto (PIB) que venían registrándose en la
tivas a la enseñanza. Antes que sucumbir a década de 1970 en las naciones tanto importa-
las presiones que inducen a abandonar el ideal doras c o m o exportadoras de petróleo. Esto, a
de la educación generalizada cuya extensión y la postre, tenía que afectar al gasto público,
mejora cualitativa contribuirían a una mayor en particular el gasto en educación, y voy a
igualdad y participación social, los responsables demostrar que en efecto así ocurrió. Pero desde
del sector deben concebir y aplicar nuevas estra- el punto de vista de la planificación de la edu-
tegias para aumentar la proporción del gasto cación, el decrecimiento tiene implicaciones
complejas. Los recursos necesarios al desarrollo
cuantitativo y cualitativo de la escolarización e
Martin Carnoy (Estados Unidos de América). Presi- incluso de la educación no formal en los países
dente del International Development Education Com- en desarrollo precisa del crecimiento económico.
mittee de Stanford y catedrático de Economía Política Ahora bien, la inversión en educación parece
de la Universidad de Stanford. Entre sus numerosas contribuir eficazmente al crecimiento econó-
publicaciones en este campo, cabe destacar dos de sus
mico futuro (véase, por ejemplo, Becker [1964]
libros más recientes: Schooling and work in the d e m o -
y Carnoy y otros [1982]). Por lo cual, aun en
cratic state (en colaboración con Henry Levin) y T h e
state and political theory.
periodos de austeridad en el gasto público, no

Perspectivas, vol.
X V I , ii.° 2, 1986
214 Martin Carnoy

está demostrado que convenga reducir el gasto del crecimiento, sería más "rentable" poner el
en educación. acento en la participación que privilegiar la
El debatido asunto de cuál ha de ser el volu- eficacia económica.
m e n de estos gastos gana en complejidad m á s L a elección de estos objetivos y de las solu-
aún por la especial función político-económica ciones que se han de adoptar (productividad
que la escolarización desempeña en el proceso económica o movilización y participación) forma
de desarrollo. L a escolarización representa más parte de una dinámica situada en u n conflicto
que una contribución al crecimiento económico. político/económico/social dentro del cual el sis-
E n casi todas las sociedades, el número de años tema educativo y los recursos (tanto económicos
de estudios determina el mayor o menor logro como humanos) que entran en juego llegan a
material y social de los individuos [Carnoy y constituir u n importante foco de controversias.
Levin, 1976]. Políticamente se considera que el Y precisamente durante periodos de crisis
desarrollo de la enseñanza ofrece la posibilidad económica es cuando este conflicto se manifiesta
de una mayor movilidad social y una distribu- en forma de propuestas de reformas de la edu-
ción de la renta más equitativa [Carnoy y otros, cación. Cuando los fondos escasean, los partida-
1979]. E s m á s , hacer que la enseñanza se rios de la opción de la eficacia pretenden
convierta en un tal instrumento puede implicar reformar la enseñanza cortando el desarrollo de
una estrategia pedagógica (y de gasto público) la educación y promoviendo la calidad de la
m u y distinta a la concebida para promover el misma, a cuyo fin propugnan concentrar los
crecimiento económico. esfuerzos en los que ya han demostrado u n
Las concepciones de la educación como con- aprovechamiento escolar. Los defensores de la
tribución al crecimiento económico (acumula- participación aspiran a ampliar el acceso a la
ción de capital) y c o m o fuente de movilidad educación a través de la mejora de calidad de
social (equidad económica y social) se hallan los servicios escolares de aquéllos cuyos resul-
históricamente en conflicto [Carnoy y Levin, tados son más deficientes (los pobres, las mino-
1985], sobre todo por cuanto se refiere a deter- rías, los grupos marginales).
minar dónde debe ejercerse el esfuerzo educa- Así pues, sostengo que los argumentos en pro
tivo y a la clase de educación que se ha de impar- y en contra de que se desarrolle y mejore la
tir. Los defensores de la primera tesis sostienen educación para todos están condicionados prin-
que una inversión en educación con el objetivo cipalmente por dos realidades de alguna manera
específico de favorecer el crecimiento y de tal relacionadas.
forma que distribuya los recursos de una manera L a primera es económica: para la mayoría de
acertada para dicho fin constituye u n estímulo los países, es más difícil hoy conseguir recursos
decisivo a la dinámica de la acumulación de para la educación debido a la fuerte disminu-
capital en cualquier país, y que afinde cuentas, ción del crecimiento económico mundial en la
la situación de todo el m u n d o (incluso los no década de 1980 y a la financiación del déficit
escolarizados) termina mejorando. Los parti- que se utilizó para activar dicho crecimiento a
darios de la extensión de la enseñanza para partir de 1873.
promover la participación social en el proceso L a segunda es político-ideológica: decidir si
de desarrollo alegan que el crecimiento econó- se debe desarrollar y mejorar la educación o no,
mico sin la participación plena de todos los o el m o d o en que hay que reformarla, habida
miembros de la sociedad n o deja de ser u n cuenta de los reales problemasfinancierosque
desarrollo parcial. Sostienen, además, que orien- sufren muchos países, es u n debate más vasto
tando el sistema educativo hacia la participa- sobre la eficacia y la democracia. La educación
ción, la sociedad es capaz de movilizar recursos se sitúa sin duda en el centro de este debate,
sociales que reducen los costos de escolarización debido precisamente a su función crucial en el
y aumentan los rendimientos escolares. E n cierto proceso de desarrollo. H a y una contradición
sentido, alegan que, desde el punto de vista entre el papel de la escolarización en cuanto
Reforma y planificación de la educación en u n contexto de crisis económica 215

C U A D R O I. Matrícula en centros de enseñanza, por niveles, como porcentaje del grupo de edad correspondiente
1960 y 1981

Primaria Secundaria Superior

i960 1981 i960 1981 i960 1981

Países d e renta baja 80 94 18 34 2 4


C h i n a e India 90 102 21 38 4
Otros 38 72 7 19 I 2
Países d e renta m e d i a 75 I02 14 41 3 11
Importadores d e petróleo 84 99 18 44 4 13
Exportadores d e petróleo 64 106 9 37 2 8
Países d e renta alta
Exportadores d e petróleo 29 83 5 43 1 8
Países d e economías industriales d e m e r c a d o 114 101 64 90 16 37
Países europeos del Este d e e c o n o m í a planificada 101 105 45 88 11 20

Banco Mundial, World development report, 1984, N u e v a York, Oxford University Press, 1984, cuadro 25.

formación de m a n o de obra cualificada para una maria que aparecen en el cuadro 1 ocultan
economía que aspira a modernizarse (inversión, el bajo porcentaje de niños que concluyen la
eficacia económica o función reproductora enseñanza primaria. El porcentaje de matrícula
[Inkeles y Smith, 1974]) y su papel en la pro- en la escuela secundaria es u n buen indicador a
moción de la igualdad de oportunidades y en el este respecto. Dando por supuesto que entre
fomento de la movilidad social (función iguali- el 15 y el 2 0 % de los alumnos de secundaria
taria o legitimadora de la escolarización [Gi- exceden de la edad (están fuera del grupo de
roux, 1981; Apple, 1982]). edad normalmente asociado con un determinado
nivel de escolarización), se ve que en los países
de renta media sólo se matricula aproximada-
El desarrollo de la educación mente uno de cada tres jóvenes del grupo de
y la crisis económica edad correspondiente en la escuela secundaria,
lo que parece indicar que sólo el 4 0 % de los
Los datos estadísticos de que disponemos indi- escolares acaban efectivamente los estudios pri-
can que desde i960 a los primeros años de la marios. L a cifra correspondiente es m u y infe-
década de los ochenta se registró u n rápido y rior en los países de renta baja, salvo la India
considerable aumento en el volumen de los servi- y la China. El hecho de que el desarrollo de la
cios educativos puestos a disposición de los jó- educación haya sido espectacular no significa,
venes en el m u n d o . E n el cuadro 1 podemos ver pues, que la mayoría de los niños y jóvenes del
que la enseñanza primaria, secundaria y superior m u n d o esté recibiendo siquiera una educación
se extendió significativamente en todos los gru- mínima.
pos de países. N o obstante las cifras indican que U n a de las barreras m á s importantes a la
muchos países, especialmente los de baja renta continuación de la expansión es la disminución
per capita, distan de haber alcanzado una situa- del crecimiento económico mundial registrada a
ción en que la mayor parte de los niños acaben partir de 1973. Los cuadros 2 y 3 indican que
la enseñanza primaria. Pese a lo cual, estas esta disminución ha sido constante y signifi-
mismas sociedades están ampliando rápida- cativa para todos los grupos, excepto los países
mente sus instituciones de enseñanza superior. asiáticos de renta baja y media. L a China y la
Y como advierte C o o m b s [1985, p . 78-79], los India dominan el grupo asiático de renta más
altos porcentajes de matrícula en la escuela pri- baja, y a lo que se ve han sido m u c h o menos
2l6 Martin Carnoy

C U A D R O 2. Tasa de crecimiento del Producto Interior Bruto real en las economías industriales y en las de
los países en desarrollo, 1960-1983 (porcentajes)

Tasas
de crecimiento
del PIB Variación anual media en %
1980
PIB/ 1960- 1973-
cap. ($) 1973 1979 1980 1981 1982 1983

Países en desarrollo 650 6,3 5,2 2,5 2,4 1.9 1,0


Países de renta baja 250 5,6 4,8 5,9 4,8 5.2 4.7
Asia 250 5.9 5,2 6,3 5,2 5,6 5.1
China 290 8,5 5,7 6,1 4.8 7,3 5.1
India 240 3,6 4,3 6,9 5,7 2,9 5,4
Africa 250 3,5 2,1 1,3 1,2 0,5 — 0,1
Países de renta media
Importadores de petróleo 1.500 6,3 5.6 4.3 0,9 0,7 0,3
Asia del Este y Pacífico 1.110 8,2 8,6 3.6 6,7 4,2 6,4
Oriente M e d i o y Norte de
África 800 5,2 3.0 4,2 — 2,4 5,5 2,0
África Sub-Sahariana 610 5,6 3.7 5,5 3.9 I,I o,3
Europa S . 2.210 6,7 5,0 1,5 2,3 o,7 — 0,9
América Latina y el Caribe I.840 5,6 5,o 5,8 — 2,3 — 0,4 — 2,2
Países de renta media
Exportadores de petróleo I.32O 6,9 4,9 — 2,4 2,4 0,9 — 1.7
Países de renta alta
Exportadores de petróleo 14.250 10,7 7,7 7,4 0,0 — —
Países de economías industriales
de mercado IO.44O 4,9 2,8 i,3 1.3 — 0,5 2,3

Fuente: Banco Mundial, World development report, 1984, Nueva York, Oxford University Press,
X984, cuadro 2 .x.

C U A D R O 3. Crecimiento medio del PIB en las economías industriales y en las de los países en desarrollo, 1960-1995
(variación anual media en %)

1985 -1995

Hipótesis más Hipótesis más


1960-1973 1973-1979 1980-1985 favorable desfavorable

Países de renta baja


Asia 5,9 5.2 5,8 5.3 4.6
África (con excepción de
Sudáfrica) 3,5 2,1 1,7 3,2 2,8
Países de renta media
Importadores de petróleo
Exportadores de manufacturas 6,7 5,8 1,6 6,3 5.2
Otros 5,3 4,3 1,9 4,3 3,8
Países exportadores de petróleo
renta media 6,9 4,9 2,4 5,4 4,7
Países de economías industriales 4,9 2,8 1.9 4,3 2,5

Fuente: Banco Mundial, World development report, 19843 cuadro 3.1.


R e f o r m a y planificación de la educación en u n contexto de crisis económica 217

afectados por la crisis económica mundial que la década de 1980. E n todos los países, con
otras economías menores más dependientes del excepción de los exportadores de petróleo de
comercio internacional y de la inversión extran- renta media y las economías industriales de
jera. Aunque las previsiones del Banco Mundial mercado, entre 1972 y 1981 descendieron los
(véase cuadro 2) parecen indicar que los índices gastos en educación como porcentaje del gasto
de crecimiento de los países en desarrollo total, mientras que el presupuesto de defensa
mejorarán sustancialmente aun en las hipótesis aumentaba. E n la primera mitad de los ochenta,
más prudentes, dichas previsiones también pare- con los Estados Unidos a la cabeza, es probable
cen indicar que el crecimiento económico a lo que el gasto militar haya aumentado en las
largo del próximo decenio será considerable- economías industriales de mercado y el gasto
mente inferior a las tasas de 1960-1973 y podría en educación haya decrecido. Naturalmente, los
caer asimismo por debajo de las de 1973-1979. gastos de la administración central representan
A menos que los países estén dispuestos a sólo una fracción del gasto público total en
incrementar sustancialmente el porcentaje del educación, y esta fracción varía de unos países
producto interior bruto destinado a la educa- a otros. Pero las cifras del cuadro 4 parecen
ción, estas tasas de crecimiento inferiores hacen indicar una tendencia: en los años de 1970,
que pueda darse virtualmente por seguro que el mientras que en casi todos los países en desa-
crecimiento de la educación formal en el m u n d o rrollo aumentaba el gasto público (como por-
se reducirá en los diez años próximos. ¿Qué centaje del PIB y en términos reales absolutos),
probabilidad existe de que se aumente el por- el porcentaje de la educación se batió en retirada
centaje del producto bruto asignado a la educa- en beneficio del gasto militar en todo el m u n d o
ción? C o o m b s [1985, p. 141] muestra que, en en desarrollo. Para 1981, dando por supuesto
el periodo 1960-1975, el gasto público en que todo el gasto de defensa fuese financiado
educación subió regularmente en los países por la administración central, éste había alcan-
desarrollados del 4 al 6% del PIB, y, en los zado aproximadamente el 3% del PIB en los
países en desarrollo, del 2, 3 al 4%. E n 1975- países en desarrollo, una proporción del pro-
1979, sin embargo, la parte del gasto destinada ducto nacional casi tan grande c o m o el gasto
a educación, tanto en los países en desarrollo en educación.
c o m o en los desarrollados, se estacionó y L a combinación de las tasas de crecimiento
comenzó a descender ligeramente. más lentas que aparecen en los cuadros 2 y 3
E n el cuadro 4 podemos apreciar otro aspecto con el desplazamiento en el gasto de la educa-
de los problemas que arrostra la educación en ción a la defensa, que se refleja en el cuadro 4 ,

C U A D R O 4. Gastos de la administración central como porcentaje del PIB y porcentajes de estos gastos destinados
a la defensa y a la educación, 1972 y 1981

Gastos totales
(% del PIB) Defensa Educación

1981 1981 1981

Países de renta baja


con exclusión de China e India 21,0 15.4 n,4 18,3 16,4 5,9
Países de renta media 19,6 24)5 15,2 9,6 12,4 14,3
Importadores de petróleo 20,7 21,8 14.7 15,8 11,0 10,0
Exportadores de petróleo 17,2 27,8 16,3 6,2 15.4 16,6
Países de renta alta
Exportadores de petróleo 36,6 26,3 12,9 28,0 13.5 9.2
Países de economías industriales 21,7 28,3 23.4 13,6 4,3 5,1
de mercado
Fuente: Banco Mundial, World development report, 1984, cuadro 26.
2l8 Martin Carnoy

parece indicar que la expansión de la educación educación, que consideran a ésta como u n ele-
en los años de 1970 y principios de 1980 hubo mento clave para el aumento del crecimiento
de arrostrar la dificultad que suponía una pro- tanto c o m o para la consecución de una sociedad
porción decreciente de u n aumento también más igualitaria y m á s participativa, no tiene
decreciente en los recursos disponibles. Cuando nada de ineluctable. U n crecimiento económico
añadimos a esto las observaciones de C o o m b s a corto plazo más elevado es fundamental para
sobre el alza en los costos unitarios de la educa- la extensión de la educación, y la insuficiencia de
ción formal (debido tanto a la prolongación de recursos motivada por los bajos índices de creci-
la duración de la formación media de los maes- miento sólo podrá remediarse a través de medi-
tros en todos los niveles de escolarización como das de política económica que incrementen el
a la elevación del nivel de educación media índice de ahorro y la eficacia en la asignación
recibida por cada alumno en cada nueva pro- de los recursos. Pero no hay u n solo proce-
moción que llega a las aulas), la realidad econó- dimiento para estimular el crecimiento, y la
mica del desarrollo de la enseñanza es m á s austeridad en el gasto destinado a la enseñanza
bien pesimista. puede poner en peligro el crecimiento a largo
L a educación se enfrenta también con otro plazo en aras de unos resultados poco palpables
problema no tan manifiesto. El sector privado a corto plazo. A d e m á s , aun cuando haya que
(especialmente la banca) de los países desarro- reducir la parte del P I B destinada al gasto
llados está intentando convencer a los países público, el gasto militar, que se lleva una parte
en desarrollo deudores, lo m i s m o que a sus sustancial del producto y es de m u y dudosa
propias administraciones nacionales, de la nece- rentabilidad, sería siempre más susceptible de
sidad de reducir el gasto del sector público (y sufrir reducciones, bajo u n régimen de auste-
sobre todo el gasto social) para acelerar el creci- ridad, que la educación.
miento económico. El Fondo Monetario Inter- Estas opciones no se basan en principios
nacional pide a las naciones endeudadas que técnicos absolutos. Son en buena medida opcio-
emprendan programas de austeridad nacional nes políticas. C o m o son políticos también los
y de fomento de la exportación c o m o condición tipos de reforma pedagógica que suelen ir apa-
previa de la ayuda financiera a corto plazo. rejados a las decisiones a la hora de optar entre
C o m o consecuencia, el gasto social público es austeridad y expansión, o elegir entre la pri-
objeto de presiones considerables por parte de macía del gasto social o la del gasto militar.
aquellos que ven en él una causa básica de E n medida considerable, estas opciones depen-
inflación y, por ello m i s m o , u n obstáculo queden del tipo de sociedad que los países en
se opone al crecimiento económico. desarrollo aspiren a constituir. U n sistema
N o obstante, la expansión y mejora de la educativo que refleje la demanda de cualifica-
educación podrían continuar a u n ritmo m o d e - dones de alto nivel en u n periodo de "auste-
rado pero sustancial en los países en desarrollo ridad", impuesto en parte por una fracción
y en los desarrollados si las previsiones del creciente de los recursos nacionales destinada a
Banco Mundial son correctas y si las sociedades un aparato militar ultramoderno y a subven-
están dispuestas a aumentar, en vez de dismi- cionar exportaciones extranjeras y nacionales,
nuir, el porcentaje de su P I B destinado a la será u n sistema polarizado hacia una enseñanza
educación. L a cuestión capital se cifra en de calidad para unos pocos. Y u n sistema edu-
competir por los recursos públicos con dos cativo que aspire a contribuir al incremento de
poderosos enemigos políticos: los militares (y los la demanda interior y al fomento de la capacidad
medios militaristas) y aquellos que pretenden de la economía para satisfacer esa demanda,
disminuir los recursos del sector público en tenderá a consagrarse, en cambio, al mejora-
aras de la aceleración del crecimiento económico. miento y a la expansión de la enseñanza pri-
Así pues, la "austeridad" con que se enfren- maria y secundaria en beneficio de las masas
tan los planificadores y reformadores de la de los niños y aun de los adultos. Este no es u n
Reforma y planificación de la educación en u n contexto de crisis económica 219

conflicto nuevo, pero se exacerba en periodos L a educación está sujeta a tensiones internas
de crisis económica. Para entender la naturaleza creadas por las dos direcciones contradictorias
y las razones de este conflicto, es preciso c o m -que son desigualdad y democracia, que dimanan
prender mejor la función sociopolítica de la ambas de conflictos sociales y son propiciadas
escuela en las sociedades en proceso de cambio. por el destacado lugar que ocupa la educación
c o m o palestra del conflicto social. Estos movi-
mientos igualitarios y democráticos son evi-
Expansión d e la educación dentes no sólo en el entorno cultural más amplio
y conflicto político-ideológico que envuelve a la educación (y en la concepción
que tiene el maestro, el alumno y la comunidad
E n otro lugar [Carnoy y Levin, 1985], sugeri- de la educación), sino también en el reto directo
m o s que la mejor forma de entender la reforma planteado a las leyes existentes y en la instau-
de la educación es verla c o m o condensación de ración de una legislación nueva que permita la
un conflicto social m u c h o más amplio inherente sindicación del personal docente y la promoción
al proceso de desarrollo. El conflicto dimana de los derechos de los padres y de los alumnos
de u n desequilibrio de poder en el sector de la en las escuelas. (El lector puede hallar u n
producción y en las relaciones sociales y de las desarrollo m á s completo de este enfoque en
desigualdades de ingresos, riqueza y partici- Carnoy y Levin [1985]).
pación política. Estas desigualdades llevan a El Estado, que ventila gran parte del conflicto
grupos subordinados relativamente desprovistos en torno a la educación, ha llegado a ser él
de poder a luchar por una mayor igualdad, m i s m o una pieza cada vez más importante del
seguridad económica y la facultad de tomar sistema de producción [Carnoy, 1980]. L a
parte en las decisiones de carácter social que les creciente intervención del estado constituye u n
afectan. E n una sociedad democrática, el espa- ingrediente básico del conflicto social. El actual
cio para tales luchas lo facilita el propio estado dispositivo de gasto en bienestar social de
[Carnoy, 1984]. Pero aun en sociedades n o muchos países industrializados, por ejemplo,
democráticas, es el estado el foco de esos es en amplia medida el resultado de las respues-
movimientos sociales que aspiran a ampliar sus tas del estado al conflicto latente durante la
derechos y su poder sobre los recursos; la lucha, crisis económica de los años treinta y de las
sin embargo, tiende a estar menos institucio- luchas sociales de los años sesenta. H a habido,
nalizada en esos casos [Cardoso y Faletto, pues, un trasvase de recursos del sector privado
1979]- al sector estatal. L a relación entre producción e
ideología permanece estructuralmente intacta,
E n la educación pública, el conflicto social
pero su dinámica se ha desplazado especta-
se expresa en el conflicto entre reformas que
cularmente. L a índole del conflicto capital-
reproducen las desigualdades educativas reque-
trabajo ha quedado alterada con la intervención
ridas por el rendimiento social en régimen de
del estado a través del gasto público en segu-
producción jerárquicamente organizada y refor-
ridad social y asistencia sanitaria y, directamente,
mas que ofrecen igualdad de oportunidades a
en la producción y el empleo. A u n q u e todavía
fin de realizar los ideales de movilidad social,
existen en la producción contradicciones intrín-
participación democrática y garantías cons-
secas, buena parte del conflicto social relacio-
titucionales.
nado con estas contradicciones se ha desplazado
Así, la historia del desarrollo de la enseñanza
al conflicto en torno a los recursos manejados
escolar se caracteriza, en la mayoría de las
por el estado para reproducir y sostener al
sociedades, no sólo por su adaptación a la evolu-
sector privado.
ción del m u n d o de trabajo (jerárquico y desi-
gual), sino también por el impulso hacia una L a educación, c o m o servicio público, es
mayor igualdad, democratización y participa- también u n teatro de conflicto social. Si en la
ción a través de la educación y merced a ella. mayoría de las sociedades se considera al estado
220 Martin Carnoy

responsable de la justicia y la equidad en u n de la ciudadanía en una sociedad democrática


sistema de producción intrínsecamente injusto basada en la igualdad de oportunidades y en
y nada equitativo, la función ostensible de la los derechos humanos es a m e n u d o incompa-
educación consiste en mejorar la posición social tible con la preparación necesaria para el desem-
de los grupos sobordinados poniendo a su peño profesional en u n sistema jerárquico de
alcance el saber y los diplomas pertinentes que trabajo. Por una parte, las escuelas deben ense-
abren las puertas a la participación. Al m i s m o ñar a los ciudadanos a conocer los derechos que
tiempo, el estado y su sistema educativo deben, les asisten con arreglo a la ley, tanto c o m o su
por definición, garantizar la adquisición de obligación de ejercer estos derechos mediante
cualificaciones profesionales para el (jerár- la participación política. Por otra parte, las
quico) sistema de producción y su desigual escuelas deben formar trabajadores con las
división del trabajo. Esta tensión entre el hecho aptitudes profesionales y los conocimientos que
de reproducir la desigualdad y el de producir les faculten para integrarse en sistemas profe-
mayor igualdad es consustancial a la educación, sionales autoritarios y jerárquicamente orga-
c o m o lo es a todas las instituciones estructu- nizados [Inkeles, 1966]. L o cual supone una
radas según clases, razas y sexos en el seno de negación de los derechos políticos mismos que
una sociedad en conflicto. L a base de este hacen a los buenos ciudadanos.
conflicto n o es la ideología c o m o tal, sino la Por lo demás, las escuelas son instituciones
relación de la ideología con la realidad concreta conservadoras. E n ausencia de presiones exter-
de la posición social, los beneficios materiales nas que induzcan al cambio, tienden a preservar
y el poder político. las relaciones sociales existentes [Bourdieu y
D e esta manera, las reformas de la educa- Passeron, 1977]. Pero las presiones externas
ción pueden influir en las luchas que se m a n - favorables al cambio inciden constantemente
tienen en los centros de trabajo, en el estado y sobre las escuelas, incluso por intermedio de
en la comunidad, al tiempo que dichas reformas los gustos predominantes. E n periodos histó-
se sitúan en el contexto de esas luchas. Mientras ricos en que los movimientos sociales son
que las relaciones sociales son configuradas por débiles y la ideología de las potencias del
el proceso de acumulación de capital y la dinero es fuerte, las escuelas tienden a robus-
intervención del estado y de la educación debe tecer su función reproductora de una reserva
situarse en el marco de esas relaciones sociales, de trabajadores que ocuparán u n lugar en u n
el lugar y el proceso de la reproducción es tam- sistema de relaciones laborales jerárquicas y con
bién u n ámbito de conflicto social. D e interés una división desigual del trabajo. Y al contrario,
primordial es la relación que existe entre la cuando surgen movimientos sociales que impug-
lucha por unas condiciones de trabajo m á s nan estas relaciones, las escuelas oscilan en
humanas, por una distribución de las remunera- dirección opuesta hacia la igualación de opor-
ciones m á s equitativa y por u n mayor control tunidades y la promoción de los derechos
sobre las decisiones que afectan a la producción, humanos.
y la lucha concomitante por u n sistema educa- Estos cambios de orientación no son capricho
tivo m á s equitativo y m á s justo. del azar. Las presiones fuertes en una dirección
crean contradicciones que activan a fuerzas
sociales y suscitan u n fuerte movimiento en
L a crisis económica mundial dirección contraria. Así, en los países indus-
y las reformas de la educación triales desarrollados, los beneficios obtenidos
por el gran capital a expensas de la m a n o de
E n sociedades democráticas, las escuelas son obra en el sector de producción y en el estado
teatro de conflicto porque tienen la doble (sobre todo en la educación) durante las tres
función de preparar trabajadores y ciudadanos. primeras décadas de este siglo generaron desi-
L a preparación que se requiere para el ejercicio gualdades sociales y educativas que eran contra-
Reforma y planificación de la educación en u n contexto de crisis económica 221

rias a los principios de una sociedad d e m o - se tradujo en drásticas reducciones del gasto
crática. E n los cuatro decenios siguientes se público en educación, sanidad y otros servicios
pusieron en marcha vigorosos movimientos sociales. L a dinámica democrática, tan fuerte
sociales con el empeño de exigir la satisfacción durante el periodo de posguerra, había sido
de las necesidades educativas de los económi- socavada en parte por su propio éxito: se había
camente desfavorecidos en los países desarro- extendido la idea de que los problemas sociales
llados y de la masa de una juventud totalmente tendrían solución gracias a una gran masa de
desescolarizada y de los adultos en las naciones renta pública en aumento constante durante
en desarrollo. Se aprobaron leyes que daban cierto tiempo bajo el efecto de u n crecimiento
acceso a estos grupos a los recursos, programas económico regular y que parecía inagotable.
y escuelas inasequibles para ellos en el pasado. U n a vez que este crecimiento económico co-
Sin embargo, con el descenso de los índices menzó a decrecer, sin embargo, las coaliciones
de crecimiento, la inflación y la caída de los que apoyaban la expansión de los servicios
salarios reales que se iniciaron en los años sociales tropezaron con dificultades m u c h o
setenta, todo comenzó a deteriorarse. A ello mayores para mantener la dinámica igualitaria.
se añadió una crisis presupuestaria que res- D e esta manera, el gran impulso educativo
tringió más todavía la expansión de la educa- de las décadas de 1950 y i960 se orientó a una
ción. Se entabló una controversia a propósito mayor igualdad social, pero la crisis económica
de si la función del estado debe ser el aumento de principios de los años setenta yfinalesde
de la equidad e igualdad sociales o, por el los ochenta sirvió para desplazar aquel ímpetu
contrario, debía prevalecer la necesidad de hacia la formación eficaz de una m a n o de obra
aumentar la productividad para reactivar el que respondiese a las necesidades de la pro-
crecimiento. L a educación pareció perder su ducción. E n economías tan distintas c o m o son
destacada prioridad a partir del m o m e n t o en las de los Estados Unidos, Europa Occidental
que una creciente proporción de estudiantes y la República Popular de China, la consigna
procedía de medios obreros y campesinos y que, dada a las escuelas es hacer a la industria
en los países desarrollados, una población que competitiva mediante u n aumento del rigor en
envejecía tenía menos hijos en edad escolar. la enseñanza y la formación. Asistimos, pues,
Por si fuera poco, muchos de los programas a una inversión total de la tendencia de los tres
educativos y de las medidas destinados a decenios anteriores hacia la equidad educativa,
conseguir mayor igualdad y participación de- la igualdad de oportunidades y el acceso de
mocrática suponían elevados costos económi- todos a la enseñanza.
cos [Coombs, 1985]. El resultado fue que el Por consiguiente, las reformas de los años
gasto público en educación por alumno subió ochenta han apuntado hasta ahora principal-
espectacularmente y, obligados por las res- mente a una mayor eficacia del sistema educa-
tricciones presupuestarias, los gobiernos tuvie- tivo con respecto a los resultados concretos que
ron que frenar una expansión de la educación se consideran importantes para la vitalidad
que todavía no había alcanzado a los grupos económica. El mensaje implícito es que una
marginales, y, en la mayoría de los países, mejor educación n o implica u n aumento del
estaban m u y lejos de satisfacer la demanda costo unitario, sino una mejor "gestión", una
social. E n ese sentido, la expansión de la edu- mejor enseñanza estimulada por la competición
cación en el m u n d o durante los años cincuenta, y una disciplina más severa en las escuelas. Se
sesenta y principios de los setenta, en la que insiste en la necesidad de una mejor preparación
prevalecieron los ideales democráticos e iguali- de los alumnos para una vida profesional activa
tarios, contribuyó e incluso estimuló la reacción que, a todas luces, va a requerir niveles m á s y
política de reducciones en el gasto. L a lucha más altos de cualificación en tecnologías avan-
en torno a los recursos controlados por el zadas. Por lo general los recursos para financiar
estado durante este periodo de crisis económica las reformas no han sido suficientes para la tarea
222 Martin Caritoy

emprendida, y la preocupación por la igualdad esta dinámica histórica. Incluso en las presentes
en la educación y las metas democráticas de la circunstancias, cuando la exigencia de mejores
escolarización se ha visto relegada a un "plácido servicios educativos para los grupos marginales
olvido". es objeto de ataques insidiosos e indirectos por
E n este decenio, las presiones encaminadas a parte de los intereses conservadores, sólo el
hacer de las escuelas u n instrumento de repro- despliegue de las fuerzas sociales y democráticas
ducción de la m a n o de obra han adquirido pone límites a la reducción sistemática y hace
primacía sobre las que propugnan reformas costosa la batalla para la otra parte. Los plani-
democráticas e igualitarias. A u n q u e se habla ficadores y responsables que comprendan la
m u c h o de la economía, apenas se menciona a importancia que tiene para la democracia y el
la democracia en la reforma de la educación. desarrollo económico a largo plazo la educación
Pero la lucha entre las dos fuerzas todavía se de alta calidad para todos continuarán traba-
mantiene m u y activa, aun cuando la política jando por la democratización de la enseñanza y
actual parece favorecer la acumulación de ca- se resistirán a los intentos de reducir el gasto
pital a expensas de la equidad y de la partici- educativo en aras de la austeridad y de las
pación popular. ventajas económicas a corto plazo.
E n términos prácticos, esto significa que los
planificadores deben concentrar sus esfuerzos en
L a planificación de la educación la enseñanza primaria, concentrándose parti-
en la década de los ochenta cularmente en mejorar la calidad del personal
docente y en hacer disponibles para todos los
Sin duda alguna, el mensaje m á s importante libros de texto, así c o m o en la elevación de la
de este análisis para planificadores y respon- calidad de la escolarización primaria para pobla-
sables de la educación es que la "crisis" actual ciones marginales allí donde la escolarización a
de la enseñanza se sitúa en una dinámica his- ese nivel se halla ya garantizada.
tórica de conflicto entre las metas contrapuestas Significa además que debe prestarse atención
que unos y otros señalan al sistema educativo. a la mejora de la gestión escolar, no sólo en el
L a "necesidad" de frenar la expansión de la sentido de dar mejor aplicación a los recursos
educación y de ajustaría mejor a las necesidades existentes, sino en el de que los alumnos de
de una producción eficaz sólo es necesidad en escuela primaria dispongan de m á s tiempo de
la medida en que las fuerzas políticas que sos- actividad didáctica (enseñanza-aprendizaje) y
tienen ese punto de vista consiguen convencer ésta sea de más alta calidad. N o existe incompa-
al estado de que emprenda tales reformas. tibilidad alguna entre el fomento de una mejor
Al m i s m o tiempo, el impulso hacia el au- gestión de las escuelas y la democratización de
mento y el mejoramiento de la escolarización la enseñanza. Esto es lo que hemos de pregun-
para los pobres (sobre todo u n mejoramiento tarnos, ¿mejor gestión para qué y para quién?
radical de la calidad de la enseñanza primaria) M a y o r eficacia escolar es algo que a m e n u d o se
a cargo de las fuerzas de la democratización, interpreta en el sentido de que los alumnos
dista m u c h o de haber concluido históricamente. menos aventajados y m á s pobres deben ser
Son precisamente esas fuerzas las que se des- separados de los bien dotados; de que el fin
plegarán en los países en desarrollo con regí- primordial de la educación consiste en hacer
menes democráticos gracias a la función social subir las notas de unos exámenes estandarizados,
fundamental desempeñada por el sistema edu- o de que la orientación de la enseñanza debe
cativo. Los planificadores y responsables polí- "adecuarse" a los tipos de trabajo en que los
ticos interesados en la promoción de formas de alumnos tendrán probabilidad de emplearse una
educación, tanto formal c o m o no formal, y de vez que concluyan los estudios.
sistemas económicos al servicio de su sociedad Por el contrario, una mejor gestión escolar
y de sus ciudadanos harían bien en considerar con miras a la democratización apunta prefe-
Reforma y planificación de la educación

rentemente a la incorporación a las escuelas pri-


marias de todos los niños en edad escolar, así
c o m o a dotarles de maestros y de materiales Referencias
didácticos de una calidad que les capacite para
A P P L E , M . 1982. Culture and economic reproduction in
llegar a ser participantes activos en el progreso education. Londres, Routledge & Kegan Paul.
de la sociedad. Esto puede requerir la mejora B E C K E R , G . 1964. Human capital. Nueva York, National
de la nutrición de estos niños tanto c o m o la Bureau of Economic Research.
construcción de escuelas, la formación de maes- BouRDiEU, P.; P A S S E R O N J.-C. 1977. Reproduction. Beverly
tros y la enseñanza no formal para los padres Hills, Sage.
CARDOSO, F. H . ; FALETTO, E . 1979. Dependency and
de los niños. Puede requerir asimismo la movi-
development in Latin America. Berkeley, California,
lización de los alumnos de institutos y univer- University of California Press.
sidades, destinándolos a la enseñanza (especial- C A R N O Y , M . 1980. The state and political theory. Princeton,
mente en escuelas y comunidades rurales) c o m o Princeton University Press.
actividad principal durante varios años después ; L O B O , J.; T O L E D O , A . J V E L L O S O , J. 1979. Can
educational policy equalize income distribution in Latin
de su titulación.
America? Ginebra, Organización Internacional del
L o esencial radica en comprender el carácter Trabajo.
sociopolítico del proyecto educativo tanto en ; L E V I N , H . 1976. The limits of educational reform.
las sociedades desarrolladas c o m o en las que Nueva York, David M c K a y .
; . 1985. Schooling and work in the democratic
aún se encuentran en desarrollo. C o m o he state. Stanford, California, Stanford University Press.
tratado de mostrar, la crisis económica mundial ; ; N U G E N T , R . ; S U M R A , S.; T O R R E S , C . A . ;
ha condicionado el clima político en que se UNSICKER, J. 1982. The political economy of financing
ecuadra el proyecto educativo. Pero los prin- education in developing countries. E n Financing edu-
cipios que rigen la planificación de la enseñanza cational development, Ottawa, International Develop-
ment Research Council.
para la democratización de la sociedad siguen
C O O M B S , P. H . 1985. The world crisis in education: the
siendo los mismos. Sólo el proceso de avance view from the eighties. Nueva York, Oxford University
hacia dicho objetivo se ha hecho m á s difícil. Press.
L a actual crisis económica ha robustecido consi- GlROUX, H . 1981. Ideology, culture, and the process of
derablemente aquellas fuerzas que querrían schooling. Filadelfia, Temple University Press.
I N K E L E S J A . 1966. T h e socialization of competence. Harvard
valerse de la crisis para reducir la expansión de
Educational Review, vol. X X X V I , n.° 3 (verano), p. 265-
la educación y configurar el sistema educativo 283.
adaptándolo a objetivos m u y distintos. Bajo el ; S M I T H , D . 1974. Becoming modern. Cambridge,
asalto implacable de dichas fuerzas, la planifi- Harvard University Press.
cación de la enseñanza para la democratización
precisa de unos objetivos más claramente defi-
nidos y de la formulación de unas propuestas
concretas de reforma de la educación. Pero no
menos importante es la estrategia política para
la realización práctica de tales propuestas. Pues,
c o m o hemos tratado de demostrar en este aná-
lisis, el desarrollo de la educación en la década
de los ochenta requerirá, no sólo talento político,
sino competencias técnicas bien precisas. •
El financiamiento
de la educación
en periodo de recesión
Keith Lewin

E n términos generales, en la mayoría de los representación de las dimensiones principales


países en desarrollo existen dos tipos principales de las restricciones en la distribución de los
de presión para limitar los gastos de educación. recursos (véase la figura i). D e este diagrama
E n primer lugar se encuentran los factores que se desprende claramente que hay u n conjunto
influyen en el volumen total de los gastos de parámetros que repercuten tanto en la capa-
públicos y, por ende, en el conjunto de donde se cidad c o m o en la voluntad de financiar el
extrae la porción destinada al presupuesto de desarrollo de la educación. Estos parámetros
educación. E n segundo lugar están los factores interactúan de formas complejas a veces difíciles
relativos a la prioridad que se concede a la de determinar, en las relaciones de causalidad;
educación en el presupuesto nacional y que se por razones de simplificación, examinaremos
refleja en las decisiones internas con respecto aquí las manifestaciones m á s directas.
a la distribución de los recursos. N o se ana-
lizarán pormenorizadamente los gastos privados
en la educación que, si bien pueden aumentar La capacidad de financiamiento
el total de los recursos disponibles, en la m a y o - de la educación
ría de los países afectan m u y poco al gasto total
(aunque pueden tener una importancia estra- Primeramente analizaremos los factores que
tégica por motivos relacionados con las fun- restringen la capacidad definanciarel desarrollo
ciones sociales de la prestación de ese servicio). de la educación. L a recesión económica global
Los dos tipos de factores no son totalmente ha tenido por lo menos cuatro grandes conse-
independiente uno de otro, sino que interactúan cuencias en las economías de los países en
de varias formas. Para ilustrarlo basta una simple desarrollo, a saber: las reducciones en el co-
mercio internacional, el aumento de la deuda,
el incremento de las condiciones y las reduc-
Keith Lewin (Reino Unido). Profesor del Departa- ciones de la Asistencia Oficial para el D e -
mento de Educación de la Universidad de Sussex. Ha sarrollo.
realizado investigaciones en las esferas de la planifica-
ción de la educación y de la elaboración y evaluación de
programas, más concretamente en lo relativo a las cien- EL COMERCIO INTERNACIONAL
cias, la reforma de los exámenes y las relaciones entre
educación y empleo. Publicaciones recientes: Studies o n
science education in China, D o n o r agency support for L a recesión ha reducido la demanda de impor-
primary education. O u t of school learning in science taciones de los países industrializados. E n la
and technology y Curriculum quality in developing medida en que se ha estancado el mercado
countries. internacional han empeorado los términos de

Perspectivas, vol.X V I , n.» 2, 1986


226 Keith Lewin
! Hi
° ss
c gO 3
IJ AirI
E °>
C Tg
E -2
< "O
F I G . I. Capacidad y voluntad definanciarel desarrollo de la educación
Elfinanciamientode la educación en periodo de recesión 22 7

intercambio. L a recuperación ha sido m u c h o préstamos de tipos de interés variable aumentó


más lenta que después de la "conmoción del la sensibilidad al aumento a corto plazo de los
petróleo" producida a mediados del decenio tipos de interés, los cuales habían permanecido
de 1970. Las últimas cifras de crecimiento de la históricamente a niveles altos. Las reducciones
economía de Estados Unidos (mayo de 1985) en los ingresos de exportación y el elevado coste
son inferiores al 1%, lo que indica u n descenso de las importaciones de energía ejercieron pre-
tras el progreso relativamente alentador de las siones sobre la balanza de pagos de muchos
economías de los países m á s importantes des- países a partir de 1979. E n la medida en que
pués de 1983. El comercio internacional se aumentaban los tipos de interés en la mayoría
ha visto sorprendentemente afectado después de los países industrializados, en parte para
de 1979. Las exportaciones crecieron en el 1,5% controlar la inflación nacional, comenzaron a
en 1980, estancándose en 1981 y previéndose aumentar las obligaciones de u n nuevo servicio
para 1982 u n descenso del 3,6%. Tras ajustarse de la deuda, incrementándose los pagos de
al aumento del coste de los productos manufac- intereses en el 50% entre 1980 y 1982. A u n q u e
turados importantes, en 1982 los precios de esta situación afectó a algunos países m á s que
las mercancías alcanzaron sus valores m á s bajos a otros, la mayoría sufrió repercusiones en los
desde 1945 [Banco Mundial, 1983]. E n los niveles de gastos del sector público. El reem-
países no petroleros productores de materias bolso de los préstamos comenzó a absorber
primas se manifestó u n declive de los términos grandes proporciones de los fondos disponibles.
de intercambio durante el último decenio y, El servicio de la deuda en Tailandia absorbe
pese a beneficiarse de la disminución de los una proporción del presupuesto nacional mayor
precios del petróleo desde 1982, por lo general que la de la educación. L a proliferación de
no han podido recuperar las pérdidas. Pese a países que están reescalonando sus deudas para
haber disminuido la dependencia con respecto aliviar la carga que pesa en sus presupuestos
a los productos básicos y a que haya ahora ilustra la magnitud del problema. Reciente-
países que exportan abundantes cantidades de mente (septiembre de 1981), incluso Estados
productos manufacturados, hay todavía una Unidos se convirtió en u n país deudor neto.
importante minoría (particularmente de África)
que es aún m u y vulnerable a las fluctuaciones
del valor de uno o dos productos. Los efectos LA "CONDICIONALIDAD"
menos directos relacionados con la recesión del
comercio pueden también identificarse en el
E n tercer lugar, la "condicionalidad" del finan-
alza de la intensidad del capital en el proceso de
ciamiento de los préstamos se ha inclinado a
producción, al tiempo que se intensificaban las
favor del control riguroso de los gastos del
presiones destinadas a incrementar la produc-
sector público, haciéndose hincapié en el equi-
tividad y reducir los costes unitarios. C o n ello
librio de la balanza de pagos corrientes c o m o
se puede limitar el crecimiento del empleo y
condición previa para la asistencia. El entorno
la base tributaria de que se dispone para res-
en que se brindaban los préstamos y la asis-
paldar el gasto público.
tencia para el desarrollo ha cambiado en función
de la evolución de la coyuntura política de los
principales países industrializados, cuya política
LA DEUDA nacional se ha caracterizado por tratar de
contener la inflación y controlar rigurosamente
Los elevados tipos de interés y la necesidad de los préstamos del sector público. Al propio
seguir financiando los programas de desarrollo tiempo, el control estatal sobre la actividad
aumentaron considerablemente la carga de la económica se ha liberalizado, extendiéndose la
deuda en numerosos países, exacerbando la idea de que era necesario dejar los precios a su
escasez de divisas. L a fuerte progresión de los guisa, conforme a los mecanismos de inter-
228 Keith Lewin

cambio. Estos cambios se han reflejado en las desembolsos bilaterales de ayuda a la educación
condiciones exigidas para la concesión de los ascendieron a 3.394 millones de dólares en 1980,
principales préstamos y en los programas de disminuyendo después para elevarse a 2.800 m i -
ajuste estructural. Algunos países han hecho llones de dólares en 1983, lo que representa una
enormes empréstitos a principios del decenio caída de m á s del 1 7 % ( O C D E , 1984). Los
de 1980 para financiar el déficit interno del desembolsos de Francia en 1982 y 1983 repre-
sector público (hasta el punto que en algunos sentaron casi el 50% de toda la ayuda bilateral
casos excedieron el 10% del P N B ) . Las reduc- a la educación, concentrando dicha ayuda en
ciones de las finanzas externas han obligado a determinados países que tienen vínculos his-
disminuir los gastos del sector público y por lo tóricos con Francia. Puesto que la mayor parte
general han llevado aparejado u n aumento de de lafinanciaciónexterna para el desarrollo de
la inflación, lo que ha aliviado la carga financiera
la educación se brinda bilateralmente, y que
al aumentar el impuesto inflacionario. N o obs- las contribuciones multilaterales son difíciles de
tante, estamos lejos de haber llegado a u n renegociar a corto plazo, cualquier disminución
acuerdo acerca de cómo responder mejor a las del valor total de la A O D puede repercutir
presiones a corto plazo para reducir los déficits desproporcionadamente en la suma disponible
sin daño irreversible a la infraestructura que para los programas de educación. El Banco
requieren los ciclos de inversión a largo plazo. Mundial [1980] calcula que cerca del 9 % de
C o m o señala el Banco Mundial [1984], "la los presupuestos totales de educación de los
disminución de los gastos en educación y salud países en desarrollo se cubren con ayuda ex-
reduce la formación de capital humano, y al terna. Esto oculta el hecho de que los presu-
gastar menos en la infraestructura se puede puestos de u n gran número de países, parti-
dañar a plazo medio el potencial de crecimiento cularmente de África y, en especial, entre los
del país. D e hecho, estos efectos pueden sobre- más pobres, dependen en m u c h o más de la
vivir a la solución de los actuales problemas de mitad (y en algunos casos hasta el 75%) de
la deuda". algún tipo de asistencia externa. Además, como
ha señalado Weiler [1983], esta ayuda tiene u n
valor especial cuando hay escasez de divisas,
ASISTENCIA pero también de especialistas y de medios de
formación, lagunas que no pueden colmarse
inmediatamente por ninguna otra vía. C o m o
Por último, la recesión ha desembocado en
reconoce la O C D E [1984, p. 191], "la asistencia
restricciones en los niveles de la Asistencia
extranjera —conjuntamente con los derechos de
Oficial para el Desarrollo ( A O D ) , por cuanto
matrícula pagados por los usuarios (...), las
algunos de los principales donantes han sido
contribuciones de las comunidades locales y los
más reacios que antes en lo tocante a mantener
beneficios del trabajo productivo realizado den-
sus niveles de desembolso. El volumen total
tro de las escuelas— representa una de las pocas
de la A O D de los países de la O C D E se elevó
fuentes posibles de incremento de los recursos
a 27.265 millones de dólares en 1980, descen-
para la educación básica".
diendo en 1981 y volviendo a subir a 27.531 m i -
llones en 1983. Las contribuciones de la O P E P Por los motivos mencionados, la capacidad de
disminuyeron considerablemente, pasando de financiar los programas de desarrollo de la
9.690 millones de dólares en 1980 a 6.804 mi~ educación se ha reducido significativamente
llones en 1982. L a disminución de algunos de debido a las presiones que, en el mejor de los
los donantes principales fue particularmente casos, han limitado las tasas de crecimiento
marcada: el Reino Unido pasó de 2.156 millones económico a niveles modestos y, en el peor de
de dólares en 1979 a 1.601 millones en 1983, ellos, han reducido sustancialmente la cantidad
aunque la mayoría de países mantuvo los niveles real de recursos disponibles para los programas
en precios constantes, excepto en 1981. Los del sector público. C o m o la educación suele
El financiamiento de la educación en periodo de recesión 229

representar uno de los capítulos m á s impor- agobiante en la mayoría de los países en que el
tantes, su vulnerabilidad es aún mayor. número de beneficiarios de la educación ha
crecido a u n ritmo m u y superior al del creci-
miento de la economía, en particular en el sector
L a voluntad de financiar moderno donde se encuentran los empleos más
la educación codiciados y en los que los ingresos (excepto en
una minoría de países, por ejemplo, la China y
L a voluntad de los gobiernos de asignar re- la República Popular de Corea) son por lo
cursos a la educación también se ha debilitado general sustancialmente superiores a los de
de diversas formas en el último decenio. Los otras formas de actividad. Incluso en lugares
principales argumentos en pro de la inversión donde el crecimiento económico ha sido c o m -
en la esfera de la educación como factor de parable, el incremento de la productividad ha
desarrollo nacional en los decenios de i960 limitado la creación de empleos.
y 1970 se asocian a los que propugnan la teoría
del capital humano y son m u y conocidos. L a
educación, se afirmaba, conduce a un aumento MIGRACIÓN
del crecimiento económico mediante el incre-
mento de la productividad laboral. Esta postura E n segundo lugar, hay países que han sufrido
estuvo inicialmente respaldada por estudios en grandes éxodos de m a n o de obra cualificada.
los que se examinaron las correlaciones entre el Esto hace que parte de los beneficios de la
crecimiento del P N B y la prestación de servicios inversión realizada en la educación de los
de educación en varios países; comparaciones migrantes pase a los países de destino, que por
de los niveles de educación, ocupación y condi- lo general dan preferencia a la entrada de las
ción económica en cada país; estudios de los personas cualificadas. Este flujo ha ido dismi-
factores residuales necesarios para explicar el nuyendo en la medida en que en los países
crecimiento observado tras haber controlado metropolitanos ha aumentado el desempleo en
los factores tradicionales [Schultz, 1961; Deni- todos los niveles. Las tasas de rendimiento,
son, 1962; Harbison y Myers, 1964; Blaug, privadas y sociales, se han visto adversamente
1972; B o w m a n , 1980]. El análisis de la tasa de afectadas por el aumento de la demanda de
rendimiento [Pscacharoupoulos, 1973; 1980] empleos en los mercados de trabajo y la dismi-
entrañaba apoyar la propuesta de que debería nución del crecimiento del empleo total. E n
tenerse en cuenta el insumo de recursos h u m a - algunos países (por ejemplo, Sri Lanka), las
nos, en particular la educación; sobre hipótesis cuantiosas rentas transferidas por los migrantes
vinculadas a estas teorías se fundó el desarrollo se han convertido en una fuente significativa de
de la planificación de la m a n o de obra, que ingresos, que compensan en cierta medida la
influyó extraordinariamente en las inversiones pérdida de m a n o de obra producto de la migra-
en materia de educación en muchos países ción, pero estos casos suelen ser la excepción.
durante los dos últimos decenios. Existen al
menos seis razones para dudar de la existencia
de una voluntad de seguir —en materia de INTENSIFICACIÓN
inversiones— la lógica en que se basa la teoría DE LA CUALIFICACIÓN
del capital humano.
E n tercer lugar, se ha extendido la intensifica-
ción de la cualificación, con lo que aumenta el
DESEMPLEO DE PERSONAS INSTRUIDAS coste de formación de la m a n o de obra para
un nivel de empleo determinado. L a cualifi-
E n primer lugar, el desempleo de personas cación inicial que por lo general se requiere
instruidas se ha convertido en una realidad para determinados empleos ha aumentado con
230 Keith Lewin

el tiempo c o m o respuesta al exceso de la oferta aprende a obtener u n empleo en lugar de


con respecto a la demanda para categorías par- aprender a desempeñarlo.
ticulares de m a n o de obra. Esta ha sucedido
muchas veces sin que se operen cambios signi-
ficativos en la índole de los empleos que justi- DESIGUALDAD
fiquen esa intensificación sobre la base de que
se requiera u n mayor conocimiento y habili- E n quinto lugar, las diferencias entre los sis-
dades. E n tales condiciones, podría ocurrir que temas escolares en cuanto al nivel y calidad de
los empleadores se ampararan en las califica- la prestación del servicio no han hecho sino
ciones académicas para limitar el número de aumentar en muchos casos, en lugar de dis-
solicitantes, en lugar de utilizarlas c o m o una minuir. Suele ser m u y baja la proporción de
forma de adecuación al tipo de requisitos desea- escuelas que cumplen satisfactoriamente los ob-
dos. Desde u n punto de vista estrictamente jetivos educativos trazados; en Kenia, c o m o en
económico, con ello se incrementa el coste del otros lugares, se puede comprobar que existen
suministro de m a n o de obra calificada. sectores de "acción" y sectores de "apariencia".
El primero consta de escuelas bien organizadas
y eficaces con u n coste relativamente elevado y
LA OBSESIÓN DE LOS DIPLOMAS en las que los estudiantes en su conjunto, dan
pruebas de aprender de manera útil y progresan
E n cuarto lugar, y en parte c o m o resultado de para pasar al nivel superior; el segundo está
la intensificación de la cualificación y la compe- compuesto por escuelas de bajo costo, organi-
tencia para obtener empleos, la crítica se ha zadas de forma deficiente, con una asistencia
centrado cada vez m á s en la incapacidad de los irregular y u n uso ineficaz de los escasos re-
sistemas educativos para mantener la calidad. cursos, en las que son pocos los estudiantes que
A partir de sondeos empíricos, se han estable- obtienen buenos resultados y pueden acceder
cido comparaciones entre el nivel de conoci- al nivel superior [Somerset, 1982; Lewin, 1985].
mientos de los recién egresados y el de los de Si el desarrollo de la educación ha acentuado en
hace dos o tres decenios a distintas fases, ello parte la desigualdad, en lugar de reducirla, hay
pese a que los sistemas restrictivos y m u y quienes afirman que es razón suficiente para
selectivos no se pueden comparar directamente limitar las inversiones futuras. Otra solución
en cuanto a rendimiento con los sistemas masi- sería identificar y reducir los factores que
vos, que, por lo general, los han reemplazado. contribuyen a la desigualdad en la prestación
N o obstante, las comparaciones suelen ser des- de ese servicio, cuyo control está en manos de
favorables a los sistemas actuales. El argumento los ministerios de educación, para lo cual se
de los que denuncian "la obsesión de los diplo- requiere m u c h a iniciativa y voluntad política,
m a s " [Dore, 1976; O x e n h a m , 1984] se basa en combinadas con medidas eficaces.
que la calidad escolar se ha degradado como
resultado de las presiones que se ejercen sobre
las escuelas y los individuos para que éstos MERCADOS LABORALES E INGRESOS
adquierantítulosque les permitan tener acceso
a unos mercados laborales cada vez más buro- E n sexto lugar, las imperfecciones del funcio-
cráticos. El título preprofesional se ha conver- namiento de los mercados laborales de los
tido en el método más c o m ú n de acceso a los países en desarrollo han puesto en tela de juicio
empleos. L a selección se ha convertido en la la idoneidad de algunas de las hipótesis sobre
función primordial de la enseñanza, y la conse- las que se basa la teoría del capital h u m a n o .
cuencia de no utilizar apenas los sistemas de Por ejemplo, la teoría de la segmentación del
exámenes públicos ha sido la distorsión y soca- mercado laboral ha introducido otras impor-
vamiento de los objetivos de la educación. Se tantes perspectivas en la determinación de los
Elfinanciamientode la educación en periodo de recesión 231

ingresos, según la cual las remuneraciones m á s estudiante en periodos de rápida expansión. E n


altas de las personas con diplomas sólo son en la medida en que aumenta la edad media de los
parte el resultado de u n nivel superior de ins- maestros mientras disminuye el crecimiento y
trucción, correspondiendo posiblemente a una se reduce el nuevo reclutamiento de maestros,
especie de renta de situación [Carnoy, 1980]. la progresión jerárquica los salarios aumenta
Algunos análisis de las consecuencias de la automáticamente los costes. Por último, y en
educación en la productividad han sido bastante cierta medida paradójicamente, los argumentos
ambiguos, particularmente en los niveles supe- en pro de la equidad sirven tanto para justificar
riores. El análisis de la oferta y la demanda de la expansión de este servicio c o m o para rebatir
m a n o de obra instruida se ha caracterizado por su validez. Si por equidad se entiende responder
dejar al margen la contribución del sector no a una demanda real de u n servicio, matricular
formal, la del empleo tradicional y la de la mujer. m á s niños en las escuelas redundará indudable-
mente en una mayor equidad. Cuando la pres-
tación del servicio que reciben es a todas luces
FUERZAS COMPENSATORIAS inferior al de sus semejantes m á s favorecidos de
origen relativamente acomodado, ese servicio
Todos las factores mencionados suelen ir enca- puede llevar a que, en lugar de disminuir las
minados a la reducción de los presupuestos. diferencias, éstas se profundicen más.
E n rumbo opuesto existen algunas presiones
poderosas que es preciso examinar cuando se
pretende extrapolar estas consideraciones gene- Tendencias recientes
rales a la situación de cada país. Entre las m á s del financiamiento de la educación
importantes está la demanda social de educación
que, por lo general, ha aumentado a u n ritmo DOS EJEMPLOS
incluso mayor que el de la expansión de los DE PAÍSES OCCIDENTALES
sistemas de educación. Cuando a un nivel dado
se saturan las oportunidades de empleo, la L a tendencia de algunos países industrializados
demanda efectiva se traslada al próximo nivel. ha sido la de restringir los gastos públicos en
E n países de elevado índice de crecimiento materia de educación, lo cual es importante,
demográfico, al aumento de las expectativas se puesto que en el pasado los cambios de política
añade un aumento de la población de edad experimentados en el Norte presagiaban por lo
escolar, lo cual requiere aumentar los recursos general cambios de política en los países en
sencillamente para mantener los índices de esco- desarrollo. E n el Reino Unido y en los Estados
larización. Se suele recurrir a las necesidades Unidos, los gobiernos, escépticos en lo relativo
de m a n o de obra —lo que no deja de ser a la utilidad de realizar muchos gastos en edu-
cierto— para justificar la continua expansión cación, han tratado de reducir el nivel de los
de la educación. Sin embargo, cada vez se pre- gastos. Cabe discernir a este respecto cuatro
texta más la escasez de, por ejemplo, técnicos razones principales: la recesión económica ha
medios para justificar la expansión general (en limitado el incremento del ingreso estatal; los
muchas ocasiones se supera el nivel en que este elevados niveles de desempleo han absorbido
déficit es más agudo). E n muchos países el sis- grandes proporciones de los gastos del sector
tema de educación emplea la mayor cantidad social a través de los sistemas de prestaciones;
posible de m a n o de obra instruida, lo que tam- los recursos se han encaminado hacia otros
bién puede suponer una presión sobre los go- sectores del gasto público (especialmente la
biernos para que no reduzcan los gastos por defensa, cuyo incremento real del 3,4% ha
temor a reacciones políticas. L a escalada de los desangrado las finanzas); las políticas " m o n e -
costes es algo inherente a los sistemas de edu- taristas" han hecho recaer sobre los particulares
cación que mantienen los costes unitarios por ciertos gastos que antes corrían por cuenta del
232 Keith Lewin

Estado. Puede que también el descenso d e m o - ayuda social. Se han hecho grandes esfuerzos
gráfico se sume a esta lista como una justifi- para reducir las subvenciones estatales de los
cación pero la rapidez con que se la ha esgri- estudiantes y transferir una mayor parte de los
mido como una razón (como en el caso de las costes a los individuos. Se observa una res-
reducciones en la educación superior en el tricción en la prestación de educación superior
Reino Unido) indica una cómoda coincidencia y es posible que la reducción del número total
que no es del todo convincente. de instituciones educativas de este nivel llegue
Los cambios de política se pueden ver m á s al 15%. Las últimas cifras de crecimiento eco-
claramente en la educación superior en el Reino nómico han descendido a menos del 1%, si
Unido, donde los gastos de las universidades se se añade a esto el debilitamiento del dólar y
redujeron en más del 2 0 % en 1981 y la matrí- la importancia del déficit presupuestario, todo
cula del primer ciclo comenzó a declinar por parece indicar que se intensificarán las presiones
primera vez desde 1945 (anticipándose a la baja para restringir los gastos públicos en la edu-
numérica del correspondiente grupo de edad). cación. Las restricciones en ambos países se han
M á s recientemente (mayo de 1985) se adoptó concentrado hasta ahora en las esferas de la
una definición más restrictiva del grupo bene- educación no obligatoria, por ejemplo, la edu-
ficiario, lo cual puede traducirse en un des- cación superior, y la enseñanza postescolar y
censo del número de 73.000 estudiantes (13%) preescolar. Esto se explica por los obstáculos
en el próximo decenio, además de la reducción jurídicos que existen para impedir reducciones
producida después de 1981 (pese a no haberse sustanciales en el ciclo de la enseñanza obliga-
producido descenso demográfico en el grupo a toria. Sin embargo, cada vez hay más muestras
que pertenecen los estudiantes de educación de deterioro de los recursos de las escuelas en
superior). Paralelamente, se debaten activa- los sistemas centrales de educación pública y
mente los cambios en la estructura de las sub- las frecuentes protestas al respecto que realiza
venciones universitarias que restringirían la ac- el personal experimentado e interesado no care-
tividad de investigación a u n pequeño número cen de fundamento. D e manera m á s general,
de centros con méritos extraordinarios. T a m - la mayoría de los países industrializados han
bién parece probable que se produzca un cambio reducido la parte presupuestaria de los gastos
en elfinanciamientode los gastos de los estu- de educación. Entre los nueve países de que se
diantes hacia sistemas de préstamos en lugar dispone de datos estadísticos [Banco Mundial,
de las becas concedidas en función de los 1984], ocho redujeron los porcentajes presu-
recursos. A nivel de las escuelas, las recientes puestarios de educación y sólo uno los aumentó
restricciones presupuestarias han provocado u n (Australia) en el periodo de 1972-1981.
amplio descontento, traduciéndose en el dete-
rioro de los recursosfinancierosde las escuelas
estatales [ D E S , 1984] y dando lugar a movi- PAÍSES EN DESARROLLO
mientos de protesta sin precedentes por parte
de los maestros. Al mismo tiempo se incre-
E n los países en desarrollo el panorama ha sido
mentó el número de becas estatales a estu-
más heterogéneo en el último decenio, si bien
diantes de la enseñanza privada, fomentándose
parece haber ido empeorando en muchos aspec-
su desarrollo. L a parte del P N B destinada a
tos. Nuestra encuesta de 1982 [Lewin, Little
gastos de educación descendió sistemáticamente
y Colclough, 1982] revela que, de una muestra
durante la segunda mitad del decenio de 1970,
de 24 países en desarrollo, 12 habían aumentado
pasando del 6,3% en 1975/1976 a no representar
la proporción de sus presupuestos asignada a
sino el 5,3% en 1982/1983 [ D E S , 1984].
la educación y 12 la habían disminuido en el
Los gastos de defensa han aumentado siste- periodo de 1970-1978. Por término medio, las
máticamente en Estados Unidos a expensas de asignaciones habían disminuido, pasando del
los programas de salud, de educación y de 16,1% al 15,2%, a un ritmo ligeramente inferior
El financiamiento de la educación en periodo de recesión 233

al de los países industrializados. A ñnales del Estas tendencias de los gastos en educación
decenio de 1970, la parte del P N B de los países son poco halagüeñas. Coinciden con una situa-
en desarrollo asignada a la educación disminuyó ción que se produce en muchos países donde
aún más, al igual que la de los presupuestos (con excepciones notables, c o m o la China,
totales asignados a la educación. Entre 1972 Colombia y la República de Corea) la población
y 1981 había 21 países en desarrollo que habían de edad escolar sigue creciendo rápidamente.
reducido parte de los gastos en educación, El ejemplo m á s inquietante es el de Kenia,
mientras que sólo 9 la aumentaron (Banco donde parece probable que para finales de
Mundial, 1984), y tan sólo tres de estos últimos siglo el volumen actual de la cohorte de edades
figuraban en el grupo de los países en desarrollo se triplique. El considerable avance realizado
más ricos, lo que confirma las tendencias m e n - con respecto al aumento de la matrícula en
cionadas anteriormente [Lewin, Little y Col- todos los niveles —hasta el punto de que
clough, 1982; Lewin y Little, 1984; Eicher y incluso algunos de los países más pobres (Sri
Orivel, 1979; C o o m b s y Choudhury, 1981; Lanka, Tanzania y Viet N a m ) lograron impar-
C o o m b s , 1985]. Además, el gasto público por tir instrucción primaria a casi toda su pobla-
estudiante en América Latina sufrió u n des- ción), ha entrañado u n coste considerable que
censo del 45% entre 1970 y 1978. E n los cada vez es m á s difícil mantener.
presupuestos de la educación, los gastos en También ocurre que la demanda social de
partidas no salariales disminuyeron en 8 de educación sigue siendo m u y fuerte, especial-
10 de estos países. Se menciona además el mente en los países donde la "ratio de desespe-
hecho de que en 25 de los 54 países analizados ración", establecido de manera realista [Dore,
las proporciones alumno/maestro habían au- 1980], preserva una real movilidad social, aun-
mentado en el nivel primario y que 17 de éstos que sea m u y limitada. U n a mayor instrucción,
eran países africanos, donde actualmente el cuya pertinencia está determinada en gran
número de alumnos por aula suele ser superior medida por el acceso que se brinda a los empleos
a 60 y donde los maestros se encuentran en la del sector moderno, es u n fuerte incentivo
imposibilidad material de prestar la mínima individual y con frecuencia constituye una
atención a las necesidades individuales [Banco presión política irresistible. Cuando la calidad
Mundial, 1984]. Los gastos ordinarios por estu- de la educación se halla comprometida, la
diante en los diferentes niveles al parecer tam- respuesta positiva no consistirá en limitar el
bién han padecido los efectos acumulados del acceso, sino en buscar la forma de aumentar
rápido incremento de la matrícula y del estan- la calidad de los servicios ofrecidos a la mayor
camiento presupuestario. E n muchos sistemas parte de la población. El no hacerlo conducirá
africanos el gasto por niño de primaria no casi inevitablemente a empeorar el desequi-
excede anualmente los 50 dólares y al menos librio regional, étnico y geográfico, con los
un 85% de esta cifra se asigna a los sueldos de consiguientes efectos en el deterioro de la
los maestros. E n cambio, los gastos de educación igualdad.
superior por estudiante pueden ser superiores
en hasta el 100% [Banco Mundial, 1980], y su
tendencia es al aumento, con u n ritmo m á s Consecuencias de la austeridad
acelerado, puesto que los sueldos y equipos
siguen con más probabilidad las normas inter-
nacionales. L a proporción de gastos por estu- El análisis precedente de los factores que origi-
diante entre los países de la O C D E y los países nan las presiones sobre la financiación de los
en desarrollo m á s pobres aumentó de 14:1 sistemas de educación permite formular cierto
a 50:1 entre i960 y 1977, lo que indica que el número de hipótesis relativas a las posibles
trecho que los separa en materia de educación consecuencias de la reducción de la financiación
ha aumentado. en un futuro previsible. Es preciso volver a
analizar las hipótesis de expansión y crecimiento
234 Keith Lewin

en las que se basaba la planificación a la luz de


las proyecciones que indican que el nivel de DISTRIBUCIÓN PRESUPUESTARIA
financiamiento en precios constantes es todo a lo
que pueden aspirar muchos sistemas de edu- Cuando se trata de presupuestos estables o en
cación en el próximo decenio. disminución, es probable que haya modifica-
ciones en su estructura y que el equilibrio entre
el capital, los gastos ordinarios no salariales y
VULNERABILIDAD los gastos salariales, se rompa en favor de estos
DE LOS GASTOS SOCIALES últimos. Los gastos salariales deben efectuarse
a corto plazo; se pueden reducir los gastos
E n periodos de restricción, los presupuestos ordinarios no salariales, c o m o es el caso de los
de educación pueden ser las primeras víctimas, materiales escolares renovables, los edificios,
y ello por múltiples razones. E n primer lugar, el mantenimiento, los servicios de apoyo y de
los gastos del sector social se pueden controlar asesoría y los gastos de viaje; se pueden reasig-
mejor, a nivel nacional, que, por ejemplo, el nar los gastos de capital y, en particular, los
servicio de la deuda, y, por consiguiente, están presupuestados, pero no comprometidos, para
m á s expuestos a una intervención guberna- compensar los déficits del presupuesto ordinario
mental. E n segundo lugar, dado que la educa- o, sencillamente, suspenderlos. Así, por ejemplo,
ción constituye una de las principales partidas en Tailandia; en el periodo de 1977 a 1981, el
del gasto social, es en dicho sector donde hay porcentaje de los gastos de personal en el gasto
m á s posibilidades de hacer ahorros sustanciales. ordinario público de la educación aumentó de
E n tercer lugar, cuando la política económica 80,0% à 85% en la enseñanza preprimaria y
favorece la reducción del papel del Estado y primaria, de 91% à 95% en la enseñanza secun-
la limitación de los servicios correspondientes, daria general y de 52,8% a 56,3% en la ense-
es más que probable que ello repercuta negati- ñanza profesional. Los gastos en concepto de
vamente en los servicios sociales en general. materiales representan una pequeña parte del
Por último, cuando prevalece el horizonte de presupuesto ordinario, salvo en lo tocante a las
planificación a corto plazo, los sectores a largo escuelas de formación profesional, y los dere-
plazo y los beneficios a la larga serán los menos chos que cobran las escuelas pueden representar
atractivos (es más que probable que los bene- las tres cuartas partes o m á s del dinero empleado.
ficios de los cambios en la política educativa Cuando este tipo de redistribución presupues-
se manifiesten una vez transcurrido el período taria se produce de forma no planificada, c o m o
quinquenal, que es el que se suele utilizar en respuesta conveniente pero improvisada a la
planificación, y no antes). A u n q u e las presiones austeridad, los resultados pueden ser contra-
políticas pueden limitar la reducción de los producentes y los inconvenientes, sin propor-
presupuestos del sector social, tal vez no sea ción con el ahorro. El Banco Mundial [1984,
suficiente para mantener los servicios. L a c o m - p. 37] resume de manera concisa esta situación:
petencia para obtener recursos se ha intensifi- "Es de sobra conocido que los gobiernos han
cado. Las estadísticas del Banco Mundial [1984] reducido menos los gastos públicos destinados
muestran que la parte de los gastos de defensa a los programas sociales que los destinados a la
de los países de bajos ingresos se ha incremen- producción e infraestructura. Pero una buena
tado considerablemente en los presupuestos parte de los gastos sociales sirve, sin duda, para
nacionales durante el último decenio, mientras mantener las remuneraciones de los funciona-
que disminuían las asignaciones a la salud y a rios y, en ese caso, la compra de materiales y
la educación. otros efectos que serían necesarios para m a n -
tener los niveles de salud y de educación p o -
drían disminuir m u c h o más de lo que las cifras
indican."
educación en periodo de recesión 235

y 1982, aunque el aumento fue sólo del 13% en


ASIGNACIÓN DE RECURSOS el nivel secundario. Entre 1983 y 1984 el gasto
SEGÚN LOS NIVELES ordinario y de equipo permaneció constante en
Malasia en términos reales, lo que representa
E n términos de costes unitarios, la reducción de una verdadera disminución. El porcentaje del
gastos afectará m á s a la enseñanza primaria presupuesto asignado a la prestación de este
que a la secundaria y m á s a ésta que a la servicio a nivel primario disminuyó de 39,0%
superior. E n este caso los argumentos son menos a 37,2%; en el nivel secundario pasó de 34,4%
claros que en lo tocante a las dos primeras cate- a 33,4%, aunque en el caso del nivel superior
gorías. E n esencia, el razonamiento es que la aumentó de 10,4% à 13,1%. E n América Latina
mayor parte de los centros de primaria se el porcentaje medio de los presupuestos educa-
sitúan en zonas rurales, alejadas de los centros tivos asignados a la enseñanza primaria y secun-
de poder; la enseñanza secundaria es urbana y daria disminuyó entre 1970 y 1978, aunque la
es m á s probable que entre sus clientes se educación superior se viese aventajada. Paradó-
encuentren niños de padres influyentes y bien jicamente, los gastos por unidad descendieron
relacionados; las instituciones de nivel superior más rápidamente a nivel superior en este periodo
suelen mantener relaciones privilegiadas con los (el nivel primario descendió de 90 à 50 dólares
encargados de tomar las decisiones a nivel nacio- de los Estados Unidos en precios constantes;
nal y gozan de considerable prestigio y noto- el nivel secundario pasó de 166 à 82 y el nivel
riedad pública que les ayuda a proteger sus superior de 970 a 361), lo que refleja las mayores
intereses. A u n en los casos en que las reduc- tasas de incremento en la matrícula de nivel
ciones de los gastos unitarios sean análogas superior, alcanzadas sin que aumentara sustan-
en términos de porcentaje, sus consecuencias cialmente el personal docente [Heller y Cheasty,
1984]. E n todos estos casos los cambios no son
reales afectan m u c h o más al sector primario, en
tan sencillos c o m o parecen a simple vista.
el que es m u y difícil reducir la parte no salarial
de los gastos, que es mínima. Por otra parte, Existen grandes diferencias entre los países,
la necesidad de mantener los "niveles inter- siendo imposible proceder aquí a u n análisis
nacionales" de la prestación de ese servicio a más completo. Los datos disponibles indican
nivel superior es u n argumento utilizado en que la observación general que hemos presen-
defensa contra las reducciones. L a aparente tado es aplicable a una gran cantidad de
plausibilidad de ese argumento, unida a la sistemas.
"inflación tecnológica" (los costes de los equi-
pos aumentan m á s rápidamente que los índices
de los precios al consumidor), a la que es difícil ASIGNACIÓN DE RECURSOS
hurtarse si se quieren mantener centros de nivel POR SECTOR
internacional en la mayoría de las esferas de la
ciencia y la tecnología, favorece la protección
L a enseñanza de tipo escolar es en principio
de los presupuestos de educación superior en la
menos vulnerable que la preescolar, extraes-
mayoría de los países en desarrollo.
colar o postescolar de tipo no formal. El pro-
Así, las pautas de crecimiento de la matrícula blema es que estas esferas suelen brindar ser-
en muchos países han continuado favoreciendo vicios a grupos ya marginados, se organizan
a los niveles superiores. Entre 1975 y 1980 la sobre la base de u n programa relativamente
matrícula en el quinto grado en Sri Lanka temporal, el personal no suele ser permanente,
aumentó en u n 4%, mientras disminuía la del a veces dependen de aportaciones voluntarias
noveno grado y la del duodécimo (preuniversi- y por lo general se les da poca prioridad polí-
tario) crecía en el 200%. Los gastos por unidad tica. Esos servicios suelen estar fragmentados
se elevaron en el 15,5% en Tailandia en lo que desde el punto de vista organizativo y geográ-
atañe a la educación universitaria entre 1980 fico y, en consecuencia, se prestan m á s a
236 Keith Lewin

reducciones especiales, a las que únicamente se de los hombres). Esto puede combinarse con
oponen, de forma limitada, los grupos de cambios en las modalidades de la formación
interés. L a única excepción es cuando se crean del personal docente si al alumno que recibe una
programas extensivos por correspondencia o a subvención por desempeñarse como maestro
distancia a nivel nacional para satisfacer el principal de un aula se le prolonga esa fase antes
exceso de demanda y ofrecer cursos esencial- de su titulación. L a tercera opción consistirá
mente análogos a precios m u y inferiores a los de en aumentar la proporción alumno/maestro,
las instituciones tradicionales. Aunque la matrí- con lo que se reduce la demanda de maestros.
cula para el aprendizaje por cursos a distancia Todas estas opciones tienen implicaciones en lo
puede ser m u y elevada, las tasas de deserción tocante a mantener la calidad docente. También
son igualmente impresionantes. E n muchos reducen el atractivo de la enseñanza como ca-
países, la demanda de instrucción formal es tal rrera en el caso de personas capaces y motivadas
que cualquier otro tipo de sistema tiene poca cuyas perspectivas profesionales serán m u c h o
oportunidad de lograr unafinanciaciónpública mayores en otros sectores de la economía.
significativa. Cuando ésta se logra, puede que
cambie su naturaleza y se convierta en u n sis-
tema de segunda oportunidad para repetir, a RECUPERACIÓN DE LOS COSTES
precios más bajos, la instrucción formal, con la
ventaja de brindar u n plazo de reflexión a los Es posible que se desarrolle la práctica de la
que no puedan acceder a empleos en el sector "recuperación de los costes" en la medida en
moderno [Oxenham, 1985; Lewin y Jones, que los ministerios de educación pretendan
1985]. mantener la prestación del servicio educativo
sobre la base de una disminución de los recur-
sos. Son muchos los sistemas en que se cobra a
REDUCCIÓN los estudiantes unos derechos oficiales y no
DE LOS GASTOS ORDINARIOS oficiales para mantener las instalaciones esco-
lares, con lo que aumentan los gastos directos
U n a política duradera de austeridad presu- que tienen que abonar los padres incluso en los
puestaria conducirá a reducciones de los gastos sistemas en que la educación es nominalmente
ordinarios de los sistemas a través de uno de gratuita. Limitar este servicio estatal puede ir
varios mecanismos. Se trata de algo inevitable, acompañado de u n incremento de las institu-
puesto que el grueso de los gastos, por lo general ciones lucrativas del sector privado que consu-
más del 9 0 % , es de índole salarial [Heyneman, m e n los recursos de las escuelas estatales. (El
1983]. Existen tres tipos principales de posibi- incremento del sector de la enseñanza secun-
lidades. Puede ocurrir que los sueldos de los daria privada en Tanzania, que atrae a más de
maestros disminuyan en términos reales si el la mitad de la población escolarizada a ese nivel
índice de aumento es sustancialmente inferior es uno de los múltiples ejemplos de estas ten-
al de la inflación. (En 1980 los sueldos de los dencias.) Si bien esto puede aumentar el gasto
maestros disminuyeron en Sri Lanka hasta global sin ningún coste directo para el presu-
el 8 0 % de su valor de 1952, mientras que los puesto nacional, son profundas sus implica-
ingresos agrícolas habían aumentado por en- ciones con respecto a la equidad ya que el
cima del 100%.) L a segunda posibilidad con- ingreso real per capita de más de la mitad de los
sistirá en aumentar la proporción de los jóvenes países de África es inferior al de hace 10 años;
maestros sin experiencia o interinos haciendo como ha señalado el U N I C E F [1984], un des-
que trabajen por sueldos bajos (y quizás aumen- censo del 2 % al 3 % del ingreso medio puede
tar la proporción de las mujeres que aportan traducirse fácilmente en u n descenso del 1 0 %
u n segundo ingreso a la familia y quizás estén al 15% de los ingresos de los grupos más pobres
dispuestas a trabajar por sueldos inferiores a los y en una reducción incluso mayor del ingreso
Elfinanciamientode la educación en periodo de recesión 237

disponible. También puede desvirtuar los obje- recursos para desarrollar los servicios educa-
tivos de la educación, ya que éstos no aumentan tivos y mejorar la calidad; la política de auste-
directamente las oportunidades de obtener ridad presupuestaria puede repercutir negativa-
empleo en el sector moderno, dada la natura- mente en el papel de la educación a medio y
leza de la demanda privada de educación. largo plazo en el desarrollo nacional, que son
desproporcionadamente graves; es posible que,
a falta de una acción concertada para evitarlas,
DEPENDENCIA DEL DONANTE se produzcan graves consecuencias, con fre-
cuencia involuntarias, que afecten a la calidad
Es probable una política de restricción presu- de la educación y a la prestación equitativa de
puestaria rigurosa aumente la dependencia de este servicio; por consiguiente, urge desarrollar
la asistencia externa para la innovación y el estrategias planificadas que regulen el nivel de la
perfeccionamiento de los programas. E n casos financiación y que preserven los logros de los
extremos, esto puede conducir a que la mayoría dos últimos decenios.
de los presupuestos de equipo y de desarrollo
caigan bajo algún tipo de control externo. Esta
situación puede suscitar muchos problemas rela- ENFOQUE GLOBAL
cionados con las condiciones en las que se otorga DE LA PLANIFICACIÓN
esa financiación. Multiplica las dificultades de
coordinación entre los insumos previstos para L a primera conclusión fundamental es que los
mantener y mejorar la calidad. Puede desviar planificadores de la educación deben conocer
las energías de los buenos administradores las concepciones y las hipótesis en que se basa
apartándolas del objetivo concreto, pero esen- la política macroeconómica y tratar de influir
cial, de brindar servicios eficaces a las institu- en ellas, así c o m o adquirir una profunda c o m -
ciones. Puede ser m u y fuerte la tentación de prensión de la sensibilidad de los sistemas a los
participar en proyectos de prestigio financiados cambios de insumos. Esto entraña concebir
externamente y centrados en grupos m u y peque- su propia función con una perspectiva inter-
ños, con lo que suelen surgir interrogantes sobre sectorial que permita esgrimir argumentos con-
el alcance del apoyo permanente a unos sistemas vincentes en pro del financiamiento de la edu-
que sólo pueden beneficiarse marginalmente de cación cuando haya una fuerte competencia
determinados insumos a corto plazo. Se pueden para conseguir recursos. L a planificación global
compartir las reservas de Weiler [1983] acerca es u n proceso político, administrativo y buro-
del uso de la ayuda educativa, en la que él ve crático y un ejercicio técnico para lograr que los
una "legitimación compensatoria" para apoyar insumos y los resultados sean óptimos. Repren-
los objetivos de política exterior de los donantes senta u n proceso de negociación mediante el
y aplazar los cambios internos en lugar de fo- cual se equilibran las presiones sobre la capa-
mentarlos. U n a mayor confianza en la finan- cidad y la voluntad de asignar recursos E s
ciación externa puede aumentar estas posi- esencial que los planificadores utilicen eficaz-
bilidades. mente argumentos que disipen todo tipo de
descontento que se haya producido en el pasado
con los resultados de las inversiones educativas.
Preservar los logros Existen pruebas de los efectos positivos de la
educación, en determinadas condiciones, en la
El análisis a que hemos procedido demuestra productividad agrícola, en algunos tipos de
que el contexto en que se inscrible la planifi- trabajos del sector no formal, en la fecundidad,
cación de la educación en la mayoría de los la salud y la nutrición, y es preciso darles mayor
países se caracteriza por lo siguiente: es pro- difusión y continuar corroborándolas. A b u n d a n
bable que sea m á s difícil que antes obtener las pruebas de la importancia de la instrucción
238 Keith

para el desarrollo de las facultades no cognosci-


tivas. E n todo el espectro político se reconoce RECUPERAR LA INICIATIVA
que se trata de facultades capitales para el
desarrollo de los sistemas económicos m á s L a segunda conclusión provisional que puede
productivos. Es preciso combatir en todos los sacarse es que los factores estructurales pueden
frentes las distorsiones que surgen con la susti- ser m á s importantes de lo que han sido en la
tución de los objetivos de desarrollo en los evolución de la distribución de los recursos.
sistemas escolares sujetos a poderosas presiones Por comodidad administrativa, y a la vista de
socioeconómicas externas (por ejemplo, las los diferentes tipos de gastos es una posibilidad
relacionadas con las condiciones de acceso a real con resultados tal vez no voluntarios, pero
las escasas oportunidades de empleo). N o es no forzosamente imprevisibles. L a asignación
posible vencerlas con políticas estrechas que de recursos durante la recesión no es sencilla-
pretenden que los problemas radican única- mente la inversión de las pautas de crecimiento,
mente en las instituciones que prestan esos y cabe afirmar que mientras m á s burocratizada,
servicios. El error de algunos planificadores de jerárquica y centralizada sea la toma de deci-
la educación en el pasado consistió en ofrecer sión, y mientras m á s rápidamente se realicen
panaceas que respondían con demasiada faci- las asignaciones, mayor será la probabilidad de
lidad a los caprichos de la demanda social y no que el asesoramiento de especialistas desempeñe
estaban integradas a medidas destinadas a u n papel secundario en la formulación de las
otras prioridades de desarrollo. También se políticas y no se tome en cuenta en la aplicación
hacía demasiado hincapié en la educación c o m o de las reducciones presupuestarias.
si fuera u n bien de inversión al que podría El análisis de sensibilidad, basado en la
darse u n tratamiento similar a las demás formas comprensión promenorizada del efecto cuali-
de inversión, sin u n criterio m á s equilibrado tativo de la reducción de los recursos es decisivo
del desarrollo que permitiera valorar si se para mejorar la eficacia interna, la cual valora
satisfacían otras necesidades que las puramente los aspectos cualitativos de los resultados.
materiales. Las exigencias de m á s servicios Puede ser oportuno y administrativamente
educativos y de mayor calidad, sólo por su valor conveniente reducir las asignaciones por viajes
intrínseco, se desoyeron con demasiada fre- del personal de asesoría y apoyo así c o m o los
cuencia porque contribuían al consumo no recursos concedidos a las escuelas para mate-
productivo, aunque, desde luego, la finalidad riales impresos y mantenimiento de los edificios,
de muchas inversiones industriales en última pero, ¿se puede afirmar que esas medidas sólo
instancia sólo podría justificarse del m i s m o tendrán u n efecto mínimo sobre los resultados?
m o d o , es decir, con el incremento del consumo (incluso en el contexto relativamente próspero
de bienes y servicios. Cabría considerar que del Reino Unido, en u n informe reciente
muchos de los bienes y servicios de este tipo realizado por el Cuerpo de Inspectores de su
tienen menos prioridad que resolver las necesi- Majestad, se subrayó que, c o m o resultado de
dades de educación que podrían brindar satis- las restricciones, los locales de las escuelas se
facciones superiores a las que ofrece la adqui- habían deteriorado hasta tal punto que la
sición de electrodomésticos de dudosa utilidad. calidad del aprendizaje se había resentido,
E n todo caso, clasificar esos bienes en la cate- confesión sin precedentes tratándose de u n
goría de "consumo" parece bastante arbi- organismo gubernamental [ D E S , 1985]. Conge-
trario, ya que las ventajas se perciben a m á s lar las oportunidades de innovación y la promo-
largo plazo y poseen aspectos cualitativos que ción de los maestros capaces c o m o forma de
pueden favorecer el desarrollo individual y la recompensarlos por su rendimiento ejemplar
participación activa en las prioridades del desa- acarrea consecuencias potencialmente desas-
rrollo nacional. trosas para el estado anímico del individuo. Si
existen efectos iniciales sobre la calidad de la
Elfinanciamientode la en periodo de recesión

instrucción, donde los determinantes funda- sectores, y en ciertos campos, el catálogo de


mentales de la calidad son la motivación, la costosos desaciertos es m u c h o m á s impresio-
competencia y la inspiración que los maestros nante. N o es difícil encontrar otros ejemplos
pueden aportar, una vez satisfechas las necesi- de programas de inversiones masivas en la agri-
dades materiales mínimas, es preciso dar prio- cultura, en los sistemas de irrigación, en las
ridad a la preservación de la infraestructura industrias básicas nacionales y en la fabricación
h u m a n a que hace posible la prestación de ese de bienes para sustituir las importaciones que
servicio [Colclough, Lewin y O x e n h a m , 1986].
no han podido hacer frente a las necesidades de
Por ejemplo, quizás sea menos pernicioso dejar desarrollo. Puede que los cambios de política
que se eleven las proporciones alumno/maestro en estas esferas hayan sido m á s frecuentes que
que reducir al mínimo los servicios de asesoría en el caso del desarrollo de la educación, lo
profesional. Para abordar el análisis de sensibi- que refleja a veces profundos desacuerdos con
lidad para recuperar la iniciativa, será preciso respecto a los objetivos de desarrollo. Para
establecer criterios claros con los que medir el impugnar las críticas sobre los gastos de edu-
efecto, en lugar de seguir suponiendo vagamente cación conviene razonar en términos compara-
cuales son estos criterios en los diferentes siste-
tivos y corregir ciertos malentendidos sobre las
mas. E n la mayoría de los casos cabría incluir repercusiones positivas de estos gastos. Así, se
los criterios de equidad, los indicadores de la puede observar que la exportación de trabaja-
calidad de la enseñanza y las medidas m á s dores ya formados no siempre constituye una
convencionales de la eficacia interna y externa. pérdida neta (Sri Lanka se ha beneficiado, c o m o
ya hemos dicho de los ingresos de los repatria-
dos, trabajadores que han adquirido la pro-
EVITAR UNA DISMINUCIÓN fesión o el oficio en el propio sistema educativo);
DE LOS RECURSOS es posible que las tasas de rendimiento hayan
descendido, aunque sean por lo general aún
Son pocos los países que han escapado a las m á s elevadas que las de otras inversiones del
presiones económicas en los gastos del sector sector público; los costes se pueden controlar
público. Incluso países que parecían estar bien si se parte de la idea de que la planificación no
a cubierto, por ejemplo Singapur, están pade- está dominada por consideraciones políticas; en
ciendo los efectos de la incapacidad de la comparación con el pasado, las oportunidades
economía mundial para salir de la recesión de éxito escolar y el aprovechamiento entre
desde el comienzo del decenio de 1980. E n grupos comparables han mejorado en muchos
principio, están bien definidas las posibilidades sistemas, y son cada vez más los alumnos que
que se presentan a los países que siguen recono- adquieren alguna instrucción básica y nociones
ciendo la importancia que tiene para el desa- de lectura, escritura y cálculo; la calidad de los
rrollo el mantenimiento de servicios educativos sistemas de enseñanza poco costosos se puede
y la mejora de su calidad. Estas consisten en mejorar de m o d o sorprendente sin que los
evitar una disminución de los recursos mediante niveles del coste unitario alcancen los de las
argumentos convincentes a favor de las inver- instituciones m á s privilegiadas. L a pretendida
siones en educación; adaptarse a las limitaciones incapacidad de las inversiones en educación
aumentando la eficacia de los sistemas educa- para dispensar los beneficios del desarrollo está
tivos; aumentar el gasto global alentando el estrechamente vinculada a la falta de realismo
incremento de los gastos no gubernamentales. en la evaluación de lo que era posible lograr.
Los argumentos en favor de la primera opción Por ejemplo, la redistribución de los ingresos
ya han sido parcialmente enumerados en este no está básicamente en función del rendimiento
artículo. L a contribución del desarrollo de la educativo y es poco probable que n o afecte
educación a la satisfacción de las necesidades m u c h o a los cambios que se producen única-
no es más ambigua que la de muchos otros mente en la distribución de la calificación de la
240 Keith Lewin

población activa, para poder observar el efecto racional desde el punto de vista individual, de
de las mejoras de la educación en la economía pagar un aprendizaje de mala calidad a sus hijos,
será preciso u n lapso de tiempo superior al lo cual, desde el punto de vista colectivo, sólo
clásico ciclo presupuestario anual. contribuirá a aumentar las oportunidades de
movilidad social de cierto número que casi
siempre será el m i s m o . C o n ello quizás sólo se
MEJORAR LA EFICACIA logre una redistribución y no un aumento de las
oportunidades. Reformar el sistema de subven-
Aumentar la eficacia de los sistemas debe ser ciones penalizando a los que se benefician indi-
una prioridad. Es menester que los planificadores vidualmente de la educación gratuita, parti-
se interesen por la relación coste/eficacia, por la cularmente en los niveles superiores en que los
utilización eficaz del personal y de las insta- costes y las recompensas suelen ser más elevados,
laciones materiales, etc., pero sin olvidar diver- puede parecer adecuado. Esto sólo podrá lo-
sos aspectos del proceso escolar y de los insumos grarse de manera equitativa cuando la subven-
cualitativos, ya que éstos son, en última ins- ciones sean calculadas en función de los
tancia, los que diferencian las escuelas de recursos financieros, ya que, de lo contrario,
"fachada" de las dinámicas. Puede haber cierta pueda exacerbarse la tendencia tradicional de
flexibilidad en lo que atañe a mejorar el uso matricular en la educación superior a los que ya
m á s eficaz de los recursos si se pasa revista de son privilegiados. Solicitar y aceptar cada vez
nuevo los sectores de donde proceden los costes más subvenciones de entidades donantes (supo-
unitarios más elevados y puede que se justifique niendo que ello sea posible) entraña el peligro
la transferencia de fondos desde esos sectores de hacer el proceso de desarrollo cada vez más
a los que operan a niveles de coste más bajos. dependiente, lo que puede conducir a una con-
Puede que no se justifiquen las hipótesis fusa amalgama de apoyo al proyecto considerado
actuales acerca de los beneficios relativos que sin la debida coordinación y puede que sea
supondría el mantener elevados diferenciales difícil o imposible intergralo ulteriormente a los
de coste en determinados sectores de la educa- presupuestos ordinarios una vez haya cesado la
ción superior y de la capacitación técnica y ayuda. H a y margen suficiente para u n mayor
profesional. Es preciso tener en cuenta los nivel de la contribución comunitaria a los costes,
beneficios realizados en materia de equidad y aunque a este respecto habrá que ponderar cui-
de calidad a la hora de realizar análisis tradi- dadosamente las iniciativas con respecto a los
cionales de las necesidades de m a n o de obra. criterios de equidad.
Los planificadores pueden desempeñar un papel
decisivo en la elaboración y perfeccionamiento
de los métodos de evaluación de todos estos EL PAPEL DE LOS PLANIFICADORES
factores.
El alcance de estas sugerencias varía según cada
país. Para hallar una respuesta eficaz a los desa-
LA TRANSFERENCIA DE LOS COSTES fíos que impone u n contexto de austeridad pre-
supuestaria, se requiere:
Son cada vez más los países en los que se pro- Encomendar una función macroeconómica a
duce u n aumento del gasto global tras la los planificadores de la educación para que
transferencia de los costes a fuentes privadas. integren activamente la planificación de la
Es preciso examinar esta cuestión atentamente, educación en el proceso de toma de deci-
puesto que a todas luces puede repercutir adver- siones a nivel nacional, en lugar de confinar
samente en la equidad, al impartir la educación dicha planificación a una función puramente
en función de los recursos personales. Esto ejecutiva.
puede llevar a los padres a tomar la decisión, Familiarizarse con las características estructu-
Elfinanciamientode la educación en periodo de recesión 241

rales de los presupuestos con elfinde identi- Essex (Connecticut), Consejo Internacional para el
Desarrollo de la Educación. ( M i m e o . )
ficar, anticipar y aislar los efectos no intencio- D E S . 1984. Repon by Her Majesty's inspectors on the
nales de lasfluctuacionespresupuestarias con effects of local authority expenditure policies on educational
respecto a las orientaciones fijadas. provision in England. Department of Education and
Aplicar técnicas sistemáticas de análisis de sensi- Science, Londres, H M S O .
bilidad para esclarecer las decisiones políticas D E N I S O N , E . F . 1962. The sources of economic growth in
the United States and the alternatives before us. N u e v a
y controlar continuamente su aplicación. York, Comité para el Desarrollo Económico, informe
Completar la evaluación cuantitativa de los n.° 13.
resultados y los factores mediante la c o m - D O R E , R . P . 1976. The diploma disease. Londres, U n w i n
prensión cualitativa del proceso educativo a Education.
nivel institucional para destacar las implica- . 1980. Desperation ratios and pressure groups in
the selection process. E n Selection for post primary
ciones de las decisiones nacionales sobre la education in developing countries, Department of Educa-
enseñanza y el aprendizaje. tion in Developing Countries, Institute of Education,
Si la comunidad de planificadores ya ha tomado Universidad de Londres.
en cuenta estas consideraciones, debo discul- E I C H E R , J. C ; O R I V E L , F . 1979. L'allocation des ressources
parme ante los colegas. Pero si, c o m o sospecho, à l'éducation dans le monde. Paris, Unesco.
H A R B I S O N , G . H . ; M Y E R S , C . A . 1964. Education, manpower
se trata de ideas que se mencionan con fre- and economic growth. Nueva York, M c G r a w Hill.
cuencia en las conferencias profesionales, que se H E L L E R , P . S.; C H E A S T Y , A . 1984. Sectoral ajustment in
suelen debatir en reuniones oficiosas, y que de government expenditure in the 1970's: the educational
vez en cuando figuran en informes oficiales de sector in Latin America. World Development, vol. XII,
n.° 10.
escasa difusión, entonces sigo afirmando con
H E Y N E M A N , S . 1983. Improving the quality of education
toda libertad su importancia, habida cuenta de in developing countries. E n Education and develop-
la dificultad de las condiciones con que hade ment: views from the World Bank. Washington, Banco
enfrentarse el desarrollo de la educación en Mundial.
muchos países durante el próximo decenio. • L E W I N , K . M . 1985. Quality in question; a new agenda
for reform in developing countries. Comparative Edu-
cation, vol. X X I , n.° 2.
; LITTLE, A . ; COLCLOUGH, C . L . 1982. Adjusting
to the 1980s; taking stock of educational expenditure.
E n Financing educational development, Ottawa, Centro
Referencias de Investigaciones para el Desarrollo Internacional.
; L I T T L E , A . W . 1984. T h e cost effective use of
BANCO MUNDIAL. 1980. World development report. educational Resources. D o c u m e n t o elaborado para la
Washington. Novena Conferencia de Ministros de Educación de los
. 1983. World development report. Washington. Países de la C o m m o n w e a l t h , Londres, Secretaría de
. 1984. World development report. Washington. la C o m m o n w e a l t h .
B L A U G , M . 1972. T h e correlation between education and ; J O N E S , R . 1985. Learning about science outside
earnings. W h a t does it signify? Higher Education, vol. I, school; literature review and bibliography. Estudio
n.° 1. solicitado por la Secretaría de la C o m m o n w e a l t h ,
B O W M A N , M . J. 1980. Education and economic growth; an Londres.
overview. E n T . King (dir. publ.), Education and ORGANIZACIÓN DE COOPERACIÓN Y DESARROLLO E C O N Ó -
income, documento de trabajo n.° 4 0 2 , Washington, M I C O S . 1984. Coopération pour le développement, exa-
Banco Mundial. men 1984, Paris, O C D E .
C A R N O Y , M . 1980. Segmented labour markets in education O X E N H A M , J. (editor). 1984. Education Versus qualification.
work and employment. Paris, Unesco/IIPE. Londres, U n w i n Education.
CoLCLOUGH, C . L . ; L E W I N , K . M . ; O X E N H A M , J. C . P. . 1985. Kearning about science outside school.
1986. Donor agency support for primary education. Informe elaborado a solicitud de la Secretaría de la
International Journal for Education and Development, C o m m o n w e a l t h , Londres.
vol. V I , n.° 1. P S A C H A R O P O U L O S , G . 1973. Returns to education: aninter-
C O O M B S , P . H . 1985. The world crisis in education: the national comparison. N e w York, Elsevier.
view from the eighties. N u e v a York, Oxford University . 1980. Returns to education: an updated review.
Press. E n King, T . (dir. publ.), Education and income,
; C H O U D H U R Y , K . 1981. World trends and prospects documento de trabajo n.° 4 0 2 , Washington, Banco
for educational costs and expenditures 1960-2000. Mundial.
242 Keith Lewin

S C H U L T Z , T . W . 1961. Investment in human capital.


American Economic Review, n.° 51.
S O M E R S E T , H . C . A . 1982. Examination reform: the Kenya
experience report. Documento mimeografiado elaborado
para el Banco Mundial, Brighton (Sussex), Instituto
de estudios de desarrollo.
U N I C E F . 1984. La situation des enfants dans le monde,
1984. Paris, Aubier-Montaigne.
W E I L E R , H . N . 1983. Aid for education: the political
economy of international co-operation. Educational
development, Ottawa, IDR.C-MR.84e.
El financiamiento
de la educación
con recursos
no gubernamentales*
Peter Williams

L a escasez de recursos para la educación se de la educación, emprendidos y publicados por


plantea en todos los países y no solamente en el Banco Mundial y, en especial, en el reciente
los menos desarrollados. E n todas las naciones libro de Psacharopoulos y Woodhall, Educa-
hay programas para desarrollar la educación o tion for development: an analysis of investment
mejorar su calidad que no han podido ultimarse choices,1 y en las publicaciones y actividades e m -
por falta de recursos adicionales; también exis- prendidas bajo los auspicios de la Secretaría de
ten muchos programas en otros sectores de la la Commonwealth, en Londres, que preparó la
actividad socioeconómica en los que se podrían documentación sobre el tema para la Novena
utilizar con provecho los recursos obtenidos Conferencia de Ministros de Educación de la
gracias a una gestión más eficaz de la educación. Commonwealth, celebrada en Nicosia, Chipre,
Desde u n punto de vista analítico, el catálogo en 1984, y que, conjuntamente con el Instituto
de medidas para solucionar la insuficiencia de de Desarrollo Económico del Banco Mundial,
recursos es tan válido para Estados Unidos como organizó u n seminario subregional en Botswana
para los países menos desarrollados. en 1985, sobre lafinanciacióncomunitaria de las
E n este artículo m e referiré brevemente a las escuelas.2
opciones susceptibles de compensar la escasez
de recursos para la educación; luego m e ocuparé
con más detalle de lafinanciaciónprivada de la C ó m o remediar la escasez
educación y, por último, examinaré el potencial de recursos en la educación
que ofrece lafinanciacióncomunitaria. Para ello
m e basaré en los trabajos sobre financiamiento Del m o d o más sencillo cabe decir que los go-
biernos se enfrentan con u n problema de finan-
ciamiento de la educación cuando los recursos
Peter R . C . Williams (Reino Unido). Director del de que disponen son insuficientes para permi-
Programa de Educación del Grupo sobre Desarrollo de tirles respetar sus compromisos y realizar los
lo Recursos Humanos, Secretaria de la Commonwealth.
demás objetivos que puedan haberse fijado.
Ex profesor especialista en educación en los países en
desarrollo en el Instituto de Educación de la Universidad
de Londres. Autor de muchas publicaciones sobre la * Las ideas expresadas en este artículo son las del autor
educación en los países en desarrollo y la financiación de y n o reflejan de ninguna manera la postura oficial de
la educación. la Secretaría de la C o m m o n w e a l t h .

Perspectivas, vol.
XVI, n.» 2, 1986
244 Peter illiams

Siempre con u n lenguaje m u y sencillo, resulta una reducción deliberada del servicio escolar.
obvio que las tres opciones básicas de cualquier Por otra parte, esos países conocen m u y bien el
gobierno que deba solucionar su insuficiencia recurso de reducir los programas de expansión
de recursos son las siguientes: bajo la presión de las dificultades financieras.
Limitar los servicios que ofrece o piensa ofrecer Otra posibilidad sería transferir parcialmente
en términos cuantitativos, ya sea reduciendo (o incluso por secciones enteras) los servicios
el servicio en su conjunto o dejando parte del educativos al sector privado. L o s gobiernos
sistema a la gestión y financiamiento privados, podrían decidir desentenderse, por ejemplo, de
o bien, en términos cualitativos, invirtiendo la enseñanza preescolar y dejarla en m a n o s de
recursos de m e n o s calidad por alumno. las comunidades y los organismos voluntarios,
Hacer funcionar el sistema de forma m e n o s one- o pedir que las empresas industriales y comer-
rosa, sin que sea en detrimento de la calidad ciales se responsabilicen de la formación pro-
ni de la cantidad: comprando artículos m á s fesional. Las escuelas, y la responsabilidad de
baratos, evitando el despilfarro, utilizando su gestión, podrían ser privatizadas y confiadas
con mejores resultados los artículos que ya a las iglesias, a otras organizaciones religiosas o
forman parte del sistema o comenzando a a las autoridades o comunidades locales. Recien-
utilizar tecnologías educativas diferentes y temente, ha habido en Pakistán cierto grado de
m á s eficaces. privatización al ser desnacionalizadas algunas
Movilizar recursos adicionales. categorías de escuelas religiosas. Se podría lograr
Consideremos estas opciones con m á s deteni- u n efecto análogo si los gobiernos redujeran sus
miento. Deseamos aclarar que nuestra intención propias actividades y pidieran a los organismos
consiste sencillamente en enumerar las distintas privados y voluntarios que asumiesen la tarea
posibilidades, sin trazar ningún plan de acción del desarrollo d e la educación, facilitando al
determinado. m i s m o tiempo las gestiones pertinentes.
A su vez, las reducciones pueden ser de
carácter cualitativo: n o reducir el n ú m e r o d e
REDUCCIÓN plazas en el sector gubernamental de la educa-
DE LOS SERVICIOS EDUCATIVOS ción y reducir los insumos por plaza. Podrían
(DISMINUCIÓN DEL PRODUCTO construirse edificios de m e n o r calidad, utilizar
DE LA EDUCACIÓN) u n mobiliario m e n o s duradero y encuadema-
ciones m á s baratas para los libros de texto. U n a
L a educación puede reducirse en términos cuan- forma m u y c o m ú n de reducir los costos es des-
titativos, reduciendo el n ú m e r o real de estu- preocuparse de las cosas esperando obtener
diantes en la escuela y clausurando escuelas y buenos resultados por casualidad pero sin creer
aulas. Este proceso puede resultar penoso in- demasiado en ello. Las aulas resultan pequeñas
cluso para los países relativamente desarro- a fuerza de recibir cada vez m á s niños sin
llados que sufren una disminución demográfica, aumentar las asignaciones presupuestarias, o
temporal o n o , pues exige el cierre de institu- bien, al disminuir los sueldos de los docentes
ciones o de aulas a nivel local, donde las fuerzas en términos reales, los m á s calificados renuncian
políticas pueden tener m u c h a influencia. Se es- a sus puestos y son sustituidos por u n personal
pera que en el próximo medio siglo varios países sin calificaciones ni experiencia. D e b e admitirse
en desarrollo, especialmente en Asia, alcancen que m u y a m e n u d o la expansión de la educación
u n punto de equilibrio o vean disminuir la p o - se ha financiado dejando que las cosas evolu-
blación de edad escolar. Pero en 1985 existen cionen de esa manera, es decir, que en cierto
m u c h o s países pobres con servicios insuficientes sentido ha sido a expensas de la remuneración
que esperan que su población de edad escolar de los docentes. Puede que la pérdida de la
aumente considerablemente durante u n periodo calidad no resulte simplemente del reemplazo
bastante largo. E n esos países resulta impensable de docentes calificados por otros m e n o s capaci-
Elfinanciamientode la educación con recursos no gubernamentales 245

tados. Los docentes m á s calificados pueden los docentes se lograría por medio de una mejor
reaccionar a sus sueldos bajos faltando a las elaboración de los horarios, lo que permitiría
clases o aceptando u n segundo empleo fuera de formar un número mayor de alumnos en menos
la escuela, con lo que disminuye la eficacia de tiempo y mediante una mayor utilización de las
su función principal. aulas y los laboratorios a lo largo de la semana
y del año escolar. L a elaboración m á s eficaz de
los horarios y la fusión de escuelas y clases, que
REDUCCIÓN DE LOS COSTES entraña una enseñanza de muchos niveles al
m i s m o tiempo, figuran frecuentemente en los
Si se quiere mantener el rendimiento del sistema órdenes del día de los responsables a nivel na-
de enseñanza pública en términos cuantitativos cional o internacional, tratando de utilizar con
y cualitativos sin movilizar por ello recursos más provecho los recursos de que disponen.
financieros adicionales, es necesario mejorar la Probablemente haya muchos sistemas de educa-
eficacia del sistema. H a y cuatro procedimientos ción formal en cuyo presupuesto pueda aho-
posibles. El primero consiste en utilizar la capa- rrarse el 1 0 % y hasta el 1 5 % , gracias a tales
cidad de negociación de los gobiernos y sus medidas.
procedimientos m á s eficaces para adquirir a Por último, entre estas posibilidades, están los
menos precio los materiales educativos. Por cambios en la tecnología de la educación. M e
ejemplo, comprando al por mayor o buscando refiero a transformaciones radicales de la tecno-
suministros m á s baratos. logía, puesto que la reorganización de los hora-
E n segundo lugar, se trata de evitar el despil- rios, la rotación de las clases, la utilización cada
farro. U n a vez identificados los casos más obvios vez menor de los internados, etc., pueden de-
de desembolsos inútiles (por ejemplo, la ilumi- sembocar en cambios tecnológicos. Pienso, por
nación de salas que no se utilizan o la remunera- ejemplo, en la introducción de la enseñanza a
ción, por error de los servicios de pagos, de distancia a gran escala, de la que nos dan u n
docentes inexistentes), la identificación del "des- ejemplo las nuevas universidades abiertas de
pilfarro" se hace más subjetiva. Ciertos analistas Tailandia e Indonesia, o el proyecto de ense-
considerarán superfluo el internado para los ñanza por televisión, abandonado por el m o -
estudiantes, mientras que para otros es algo mento, en Costa de Marfil. Otra serie de op-
esencial en algunas circunstancias y a veces m u y ciones radicales consistirá en la reorganización
conveniente; otros considerarán innecesario el de la educación en forma autodidacta utilizando
comedor y los uniformes escolares, como el pago módulos de aprendizaje, la enseñanza mutua,
de u n sueldo completo a los empleados que los auxiliares didácticos, etc., c o m o una alterna-
asisten a cursos de formación en el empleo o el tiva al sistema tradicional basado en el maestro y
sueldo excesivo del personal auxiliar, etc. N o la clase. U n o de los ejemplos m á s conocidos es
debe sorprender que en muchísimos países se el proyecto llamado "Impacto", que actual-
pueda lograr u n 1 0 % de reducción en el pre- mente se lleva a cabo en Asia.
supuesto gracias a la eliminación del despilfarro
y de servicios innecesarios, sin que ello reper-
cuta en el rendimiento y el impacto de la MOVILIZACIÓN
enseñanza. DE RECURSOS SUPLEMENTARIOS
Los medios a los que más a m e n u d o se recurre
son los que reducen los costes unitarios m e - Aparte de las señaladas, ¿qué posibilidades de
diante una utilización más intensiva de los d o - aumentar los recursos de la educación le quedan
centes y de las instalaciones y equipos princi- al Ministerio de Educación? Cuando hablamos
pales, distribuyendo así los costes relativamente de escasez grave de recursos, partimos de la
fijos en u n número más amplio de unidades de hipótesis de que la economía y las rentas públi-
producción. U n a utilización m á s económica de cas han de aumentar (lo que por desgracia no es
246 Peter Williams

cierto en todas partes) y que la educación reci- externos, con el Banco Mundial y los bancos
birá los beneficios que le corresponden en razón regionales de desarrollo c o m o principales pres-
de ese aumento. El problema es que en muchos tamistas internacionales de capital para la edu-
países en desarrollo el ritmo inherente a los cación. D e todas maneras, en el momento actual,
costes de la educación suele aumentar a m e n u d o no aumenta la asistencia externa para la educa-
m á s rápidamente que el conjunto del gasto p ú - ción, y lasfinanciacionescon bajos intereses, del
blico. H a y varias razones para ello, aparte del tipo de las que ofrece la Asociación Interna-
hecho de que la demanda de educación aumenta cional de Desarrollo, resultan cada vez m á s
a medida que aumentan los ingresos. U n factor escasas. Los propios prestatarios manifiestan
es que el aumento de los sueldos de los docentes ciertas reservas hacia los préstamos externos. A
está asociado a su nivel de calificación; como éste veces, los países temen las consecuencias de las
se mejora de m o d o constante, sus remunera- deudas exteriores, consideran desfavorables los
ciones aumentan también. Otro factor es la procedimientos de ciertos donantes; no les agrada
curva ascendente de los gastos ordinarios a m e - el principio de "condicionalidad" cuando se trata
dida que ascienden los escalones del sistema de de organismos externos que intentan interferirse
educación. Por razones obvias vinculadas a la en los asuntos políticos de los países que soli-
logística de la expansión de la educación a través citan el préstamo aunque m u y poca relación con
del tiempo, ese crecimiento se acentúa en los el objetivo principal de este último. A veces, los
niveles secundario y superior, los más caros del gobiernos dudan de la eficacia de algunos de los
sistema de educación formal. proyectos para los que se ha obtenido una finan-
D o s de las posibilidades restantes más evi- ciación —sobre todo cuando la financiación se
dentes han sido prácticamente excluidas en la destina a proyectos de inversión e importa-
mayoría de los países. Según la primera, los ciones, mientras que lo que necesita el sistema
gobiernos redistribuyen los recursos existentes de educación es que se garantice el funciona-
en beneficio de la educación, asignándole u n miento y el mantenimiento.
mayor porcentaje de los gastos totales. Algunos Queda entonces el sector no gubernamental
países, c o m o la India con su nuevo gobierno, se como principal fuente de financiación, ya se
han comprometido recientemente a aumentar trate de organizaciones o de particulares. Entre
los gastos de la educación. Pero la India, en las organizaciones dispuestas a financiar a la
cierto sentido, es u n caso excepcional. E n la educación figuran las empresas que ocasional-
mayoría de los países, los servicios educativos ya mente administran sus propias escuelas de en-
reclaman una proporción elevada de los gastos señanza general, pero que también imparten
públicos y pronto han de aumentar también las muchos cursos de formación profesional; las
exigencias de otros sectores, por ejemplo, los iglesias y las asociaciones voluntarias que a
servicios sanitarios y sociales, las actividades m e n u d o fundan y financian escuelas y los orga-
directamente productivas, la defensa y la segu- nismos de beneficiencia que pueden contribuir
ridad, etc. L a segunda posibilidad consiste en la a lafinanciaciónde escuelas y colegios o apoyar
creación de impuestos adicionales para consa- a los particulares que colaboran con ellas. " L a
grar a la educación parte del dinero obtenido de comunidad", cuyo papel en la educación se dis-
ese m o d o ; a veces pueden crearse incluso i m - cutirá en la tercera sección, comprende algunas
puestos especiales para destinarlos a la educa- de esas organizaciones. Los individuos contri-
ción. Por razones perfectamente comprensibles, buyen a la educación por medio de los derechos
los ministerios de finanzas suelen oponerse a de matrícula o "tarifas de usuarios", como sue-
este tipo de impuestos. len denominarse en la literatura actual sobre la
Los préstamos nacionales constituyen otra planificación de la educación. Por lo general,
opción para lograr los ingresos. Sin embargo, habida cuenta de la extensión de la educación y
estos préstamos destinados a los proyectos de de que se ha generalizado el acceso a cualquier
educación suelen ser menos frecuentes que los nivel de enseñanza, los derechos de matrícula
Elfinanciamientode la educación con recursos no gubernamentales 247

han sido reemplazados por subvenciones públi- L a distinción entre gestión pública y privada es,
cas, aunque hay países, c o m o Malawi y China, tal vez, primordial, puesto que la propiedad y la
en los que siguen vigentes los derechos, incluso administración de la escuela, en circunstancias
en el nivel más universal, es decir, la escuela normales, llevan implícito el derecho de dirigir
primaria, y la tradición de cobrar por los estu- su orientación. D e b e m o s observar que, incluso
dios superiores sigue bien arraigada en un país la propiedad y la administración, pueden estar
c o m o es Estados Unidos. separadas entre sí. H a habido casos en que las
autoridades educativas locales cedieron a igle-
sias y organismos voluntarios la administración
Financiación privada de la educación de sus escuelas, c o m o sucedió en Ghana y
Nigeria en los años cincuenta y sesenta, además
E n todos los países, gran parte de la actividad de otros casos en los que los gobiernos han ejer-
educativa no corre a cargo de los gobiernos. L a cido un control efectivo en la administración de
financiación pública de las escuelas es sólo una escuelas que pertenecían a intereses privados.
parte de los recursos totales asignados a la edu- L a gestión y lafinanciaciónson también fun-
cación. Por consiguiente: ciones distintas, tal c o m o se advierte claramente
incluso en el sistema de escuelasfinanciadaspor en los casos en que se enfrentan los sectores
el Estado, en las que el gobierno sufraga todos privado y público. E n muchos sistemas, las
los costes de la educación e imparte una en- escuelas y los colegios públicos reciben un por-
señanza gratuita, los particulares participan centaje considerable de dinero privado a través
en la financiación a través del lucro cesante de los derechos de matrícula que de los estu-
cuando los niños asisten a la escuela (o de diantes. E n otros casos, en las escuelas de pro-
servicios perdidos por sus padres en la granja piedad y administración privada, el gobierno
familiar, en el hogar, etc.) y a través del pago paga a veces los costes de funcionamiento y los
de los alimentos, uniformes, transportes, etc.; sueldos de los docentes. Por ejemplo, en el
incluso en las escuelas estatales se pueden exigir sistema británico de educación pública, hay
derechos a los particulares; escuelas propiedad de las iglesias que reciben
existen escuelas privadas dirigidas y adminis- una asistencia voluntaria y tienen una mayoría
tradas por intereses no gubernamentales y de miembros de la iglesia en su órgano rector,
financiadas principalmente con las cuotas de pero cuyos gastos de funcionamiento en su tota-
los particulares; lidad, y el 85% de los gastos de equipo son sufra-
la educación extraescolar privada está organi- gados por las autoridades públicas. Es cierto que
zada por empresas que imparten formación y no pueden tomarse c o m o norma estas escuelas
por otras organizaciones no gubernamentales en las que se mezcla lo público y lo privado; es
que brindan diversas actividades recreativas más frecuente que las escuelas que pertenecen y
y actividades de formación profesional que son administradas por el estado también estén
permitirán a los alumnos ganarse la vida; totalmentefinanciadaspor él y no reclamen nin-
los libros, periódicos, medios de comunicación guna remuneración a los estudiantes. E n el polo
de masas y otras experiencias vitales consti- opuesto, hallamos escuelas privadas cuyos gastos
tuyen fuentes de un aprendizaje informal que también son sufragados por el sector privado a
cada individuo prosigue en función del tiempo través de los derechos de matrícula pagados por
disponible y de su propio ritmo. los alumnos.
El tema de la mayor ¡parte de los debates sobre Cuando se habla de contribuciones privadas a
el papel del sector privado en la educación es la las escuelas públicas solemos pensar en los
escolarización formal, que incluye las contribu- derechos de matrícula. Sin embargo, se ha
ciones individuales a las escuelas que pertenecen señalado que los padres y los estudiantes costean
al estado y que éste administra y, en segundo su educación en forma de lucro cesante o de
lugar, las contribuciones a las escuelas privadas. tiempo que podrían haber utilizado para realizar
248 Peter Williams

otras tareas. El gobierno que desee reducir los destaca como se debería: hacen falta más estu-
gastos públicos puede delegar la responsabilidad dios de casos sobre la manera práctica de solu-
de algunos servicios en el sector privado, como cionar el problema.
por ejemplo la compra de libros de texto y de Es necesario decidir de qué m o d o se pueden
ropa en lugar de suministrar uniformes escolares equilibrar esas situaciones. Cuando la educación
gratuitos, la alimentación, el alojamiento y el no es universal y otorga importantes beneficios
transporte. E n los sistemas más generosos de privados a los que tienen acceso a la misma, se
asistencia estatal, es posible pensar en u n go- podrían imponer derechos de matrícula pero, al
bierno que brinde a los estudiantes todo u n m i s m o tiempo, con la condición de que los
servicio social en forma de alojamiento, alimen- estudiantes necesitados reciban ayudas por m e -
tación, atención sanitaria, transporte, becas y dio de becas o de préstamos. Los partidarios de
otras prestaciones, además de los servicios es- los préstamos alegan que, por necesitado que
trictamente docentes. L a privatización de los pueda hallarse u n estudiante cuando ingresa en
servicios no docentes señalados es lo primero en la enseñanza secundaria o superior, en u n sis-
que piensan los gobiernos cuando se enfrentan tema m u y selectivo, dicho estudiante está desti-
con dificultades financieras. nado a formar parte de los sectores privilegiados
El pago de "tarifas de usuarios", normal- de la sociedad en virtud precisamente de su
mente en forma de derechos de matrícula, es la acceso a la educación; por consiguiente, resulta
forma principal que adoptan las contribuciones lógico conceder préstamos para sufragar el pago
privadas suplementarias a las escuelas guberna- de los derechos, ya que el préstamo podrá ser
mentales. Puesto que la educación ofrece ven- reembolsado con los ingresos que produzca
tajas que los individuos pueden recibir, sería más tarde. Sin embargo, a juzgar por la expe-
lógico pedirles que contribuyan financieramente riencia de los países en desarrollo, hasta el m o -
en el m o m e n t o presente para recoger el fruto mento, los préstamos no han sido m u y popu-
más tarde. Esto ocurre especialmente cuando lares. Los estudiantes los aceptan de buen grado
la educación proporcionada por el estado debe cuando contribuyen a facilitar el acceso a la
ser racionada. Desde este punto de vista, los educación, pero cuando hay que pagar a la vez
derechos de matrícula parecen razonables, aun- derechos de matrícula y préstamos, el efecto
que además tengan otras ventajas. Reducen los combinado de ambas medidas resulta m á s duro
gastos del gobierno y aumentan así los beneficios que el sistema anterior que se pretende reem-
sociales de la educación. Reducen la demanda de plazar. Cuando los reembolsos son mayores que
servicios superfluos y pueden contribuir a u n los ingresos esperados, los estudiantes suelen
reparto eficaz de los recursos entre los distintos resistirse a aceptar préstamos e incluso a ingre-
tipos de enseñanza y dentro de las instituciones sar en la enseñanza superior. D e b e reconocerse
educativas. también que, desde el punto de vista de los
gobiernos, es difícil recuperar completamente el
Los argumentos en contra de los derechos de
dinero prestado. E n los grandes países resulta
matrícula se basan en el hecho de que, en algu-
problemático mantener los registros al día y
nos casos, pueden ser la causa de que se invierta
localizar a los que recibieron préstamos y deben
demasiado poco en educación, cuando algunos
devolverlos. Otra dificultad es que en épocas de
de los aspectos importantes de esta última no
gran inflación, los reembolsos valen cada vez
pueden ser sufragados, al menos en su totalidad,
menos en términos reales y, de esa manera,
por los individuos. E n segundo lugar, se puede
ningún fondo de rotación puede ser reabaste-
alegar que el pago de los derechos es injusto y
cido. Por todas esas razones los préstamos no se
una fuente de regresión, pues pesa más dura-
han popularizado demasiado: siguen siendo in-
mente en los estudiantes pobres. Además, esos
teresantes en teoría, pero su aplicación práctica
derechos suelen ser difíciles de cobrar desde el
es limitada. A m i parecer, vamos hacia una
punto de vista administrativo yfinanciero.Estas
extensión progresiva de la fórmula de préstamos
desventajas son m u y reales y a veces no se las
Elfînanciamientode la educación con recursos no gubernamentales 249

(o de becas reembolsables, que en el fondo es lo servicio, el usuario ejerce una presión sobre el
mismo) como u n medio para los gobiernos proveedor para que reduzca los costes del ser-
de superar situaciones de gran penuria. Pero no vicio que suministra, en este caso, la educación.
solucionarán lo esencial del problema de la El otro m o d o de participación del sector
insuficiencia de recursos y tal vez no sea realista privado en la educación —además del dinero
suponer que el pago de derechos (más los prés- privado que se paga por utilizar las escuelas
tamos) en la enseñanza superior podrá utilizarse públicas—• consiste en impartir su propia edu-
parafinanciarlos niveles inferiores de la educa- cación. Q u e esta situación sea aprobada o no
ción, a pesar de que los cálculos sobre lo que por los gobiernos dependerá en gran medida
puede ser posible resulten matemáticamente co- de la tradición nacional del país de que se trate.
rrectos. Es necesario y urgente asesorar en forma M u c h o s países en desarrollo con una profunda
práctica a los gobiernos sobre las consecuencias tradición católica (algunos países latinoameri-
políticas y administrativas de los préstamos a canos y las Filipinas, por ejemplo) tienen vastos
estudiantes a fin de que tomen las decisiones sistemas de escuelas, colegios y universidades
más acertadas. ¿Quién ha de administrar los privadas, administradas predominantemente por
préstamos? ¿ E n qué condiciones funciona la la autoridad religiosa. E n muchas partes del
evaluación de los recursos del estudiante? ¿Qué m u n d o la educación se inició bajo los auspicios
se sabe acerca de los coeficientes de reem- de la religión, y la tradición ha continuado. Las
bolso? ¿Qué soluciones se ofrecen a las mujeres, escuelas que pertenecen a las autoridades reli-
a los estudiantes que prosiguen sus estudios en giosas pueden formar parte del sistema nacional
el extranjero, a los graduados sin empleo, etc.? de educación, y el gobierno puede a su vez
Cualquier gobierno que piense tomar medidas patrocinarlas mediante la concesión de becas o
en este campo deberá tener una idea m u y clara pagando las remuneraciones de los docentes y
de sus posibilidades de aplicación y ser capaz de haciendo que la enseñanza que se imparte en
saber si vale la pena realizar desembolsos im- ellas sea prácticamente gratuita. Son varios los
portantes. argumentos a favor de la educación adminis-
A pesar de la frecuencia con que se menciona trada de forma privada. Por ejemplo, el derecho
en las obras sobre elfinanciamientode la edu- de los individuos y los grupos a elegir en m a -
cación, la fórmula "bonos de educación", ésta teria de educación, o que las escuelas privadas
sólo se aplica a pequeña escala y con carácter pueden ser más eficaces por tener una mayor
experimental en los países desarrollados. L a responsabilidad para con sus usuarios. El hecho
idea de un subsidiofinancieroen forma de bono de liberar al gobierno de los gastos de educa-
que recibe todo niño en edad escolar es total- ción, del todo o en parte, se presenta también
mente irreal en la situación de los países en desa- c o m o una ventaja importante.
rrollo. Administrativamente sería imposible, y D e todas maneras, cuando se afirma que la
desde el punto de vistafinancieroes también mayor parte de los servicios educativos tienen
difícil imaginar que baste el valor de un bono que ser asumidos por el sector privado, se
para comprar una plaza en la escuela en países plantean varios problemas difíciles. E n el pasado
en los que son muchos los niños que siguen hubo m u c h o despilfarro por la competencia
estando hoy día excluidos de la escolarización. entre escuelas de denominaciones diversas. A
D e b e m o s tener presente que, en todo caso, los nivel local, varios de estos centros cumplen a
bonos responden al objetivo básico de aumentar veces la misma función, y muchos no llegan
la eficacia de las asignaciones, aunque es poco al nivel mínimo de rentabilidad. Es cierto que
probable que influyan en la solución de los una mayor variedad de administraciones esco-
problemasfinancierosde la educación, aunque lares permite una mayor gama de posibilidades
se sostenga al respecto, c o m o puede sostenerse a los padres que pueden permitírselo, pero para
sobre cualquier otro método definanciaciónpri- muchas familias, la asistencia a la escuela m á s
vada, que por el solo hecho de pagar por u n próxima es la única opción posible desde el
250 Peter Williams

punto de vista material. Cuando no existe u n El equilibrio entre educación pública y pri-
sistema escolar uniforme, las autoridades tienen vada ha evolucionado a lo largo de las últimas
m á s dificultadas para verificar que todos los décadas en beneficio de la primera, al aceptar
niños están escolarizados. El sistema de zonas los gobiernos nuevas responsabilidades en m a -
de captación para cada escuela desaparece, y con teria de educación, buscando la manera de
él la obligación para la escuela de aceptar a los lograrlo.3 El Banco Mundial y otros organismos
niños de su vecindario. Cuando la educación sugieren que podría producirse u n movimiento
sólo puede obtenerse pagando derechos, la hacia la educación privada, aunque hasta el
escuela tiende a convertirse en u n privilegio momento no haya muchas pruebas de que real-
sólo al alcance de los que pueden pagárselo, con mente se produce. Las razones son obvias: tanto
lo que se produce una desigualdad de oportu- por convicción como por conseguir u n amplio
nidades de acceso. Teóricamente es posible apoyo político, los hombres públicos han uti-
proponer mecanismos compensatorios y de re- lizado la supresión de los derechos de escola-
distribución tales c o m o becas para los niños ridad como uno de los elementos principales
pobres, pero en la práctica muchos países poco de su plataforma política.
desarrollados carecen de la capacidad adminis- D e todo ello debemos concluir que, si bien
trativa necesaria al buen funcionamiento de esos la enseñanza privada continúa teniendo una
mecanismos. Otra razón m u y importante que fuerte demanda, son m u y pocos los casos reales
hace que muchos gobiernos se opongan a la de privatización. Por cada país con u n modesto
escolaridad privada, es el miedo a las divisiones programa de desnacionalización de escuelas po-
sociales pueden producirse. Para los países que demos mencionar muchos m á s en los que el
intentan promover el sentido de la unidad na- Estado se hace cargo de las escuelas. Habrá que
cional, el sistema uniforme de escuelas tiene evitar toda tendencia a subestimar las difi-
ventajas obvias. cultades y posibles inconvenientes de la priva-
L a calidad de la enseñanza privada en los tización y de la escolarización de pago.
países en desarrollo es sumamente variada. Al- D e todas maneras, a medida que aumenta la
gunas escuelas privadas suelen tener u n nivel competencia en el acceso a una enseñanza de
m u y elevado y ser las m á s solicitadas del país. buena calidad, se va recurriendo cada vez más a
Están patrocinadas por la clase acomodada, profesores del sector privado para completar
cuyos hijos compiten por ingresar en las mejores la enseñanza pública. Cada vez hay más críticas
instituciones del sistema escolar del Estado. D e a la educación pública, sobre todo después de
esta manera, hay capitales africanas en las que que se ha unlversalizado y sus recursos han
los padres pueden inscribir a sus hijos en es- disminuido. Los sueldos del personal docente
cuelas primarias caras con el fin de facilitar su se han deteriorado y muchos han buscado u n
acceso a las m á s prestigiosas escuelas secun- segundo empleo, a m e n u d o en la enseñanza
darias estatales. E n el Reino Unido, los padres privada. El fenómeno de los profesores parti-
envían a sus hijos a los internados privados de culares se ha extendido m u c h o en Asia Meri-
nivel secundario para facilitar su ingreso en las dional y en América Latina y se está difun-
mejores universidades. E n el otro extremo del diendo en numerosas partes del m u n d o .
espectro, en la mayoría de los países hay escuelas Al mismo tiempo se presentan posibilidades
privadas sumamente pobres cuya existencia se de cooperación entre los sectores público y pri-
debe simplemente a la deficiencia del servicio vado. Los gobiernos pueden hallar maneras de
público en materia de educación. Suelen tener fomentar u n servicio educativo independiente
m u y poco valor pedagógico y su supervivencia durante cierto tiempo, mientras se desarrolla el
puede explicarse por la falta de información al sistema público. L a iniciativa privada puede esti-
respecto entre los padres. Se puede percibir mularse para que contribuya a completar tempo-
una tendencia a cerrarlas entre las autoridades ralmente las oportunidades en materia de educa-
educativas. ción, hasta que se generalice el sistema público.
Elfinanciamientode la educación con recursos no gubernamentales 251

Resumiendo, resulta claro que los gobiernos forma a toda la población de u n sector determi-
de todos los credos políticos buscarán maneras nado que actúa colectivamente por medio de las
alternativas definanciarla educación y pedirán organizaciones? Si bien la acepción más usual
asistencia al sector independiente, incluidas las del concepto de comunidad es la geográfica, el
familias. N o cabe, sin embargo, esperar d e m a - término "comunidad" también puede referirse
siadas cosas demasiado pronto. Cada país pro- a los subgrupos étnicos, raciales o religiosos
cederá a su propio ritmo; una fuerte presión estrechamente unidos de una población y que
sobre los gobiernos para que privaticen la edu- no viven necesariamente juntos, aunque orga-
cación resultaría contraproducente para los que nicen las escuelas para conservar la identidad
creen que hace falta recurrir en mayor medida a de su grupo y sus valores. Sin embargo, el tér-
un sistema que permita recuperar los costes. mino de "comunidad" se utiliza en general para
designar a u n grupo amplio que abarca a todos
los individuos de una localidad, presuponiendo
Financiación comunitaria la existencia de intereses sociales, económicos y
de las escuelas culturales comunes dentro del grupo. Los es-
fuerzos comunitarios podrán movilizarse a tra-
Varios autores parecen poner sus esperanzas en vés de amplias organizaciones de la comunidad,
lafinanciacióncomunitaria como posible fuente tales c o m o los comités para el desarrollo de
de recursos adicionales para la educación. Psa- las aldeas.
charopoulos y Woodhall" sugieren que "podría L a distinción establecida entre gestión y fi-
crearse u n sistema rural de enseñanza primaria nanciamiento privados se aplica también a las
en el que el gobierno central ofrezca la estruc- comunidades. E n muchos países se espera que
tura administrativa (...) mientras que la c o m u - las comunidades contribuyan colectivamente a
nidad local asumiría el coste de los docentes, de la construcción de escuelas que se convertirán
los edificios, de los equipos y de los libros". Y en escuelas públicas. Se trata de u n esfuerzo
añaden: "Las comunidades locales ya cubren financiado por la comunidad, lo que no significa
los costes de uno o más de esos elementos en que la escuela sea propiedad de la comunidad
muchos países, y el grado y la variedad de la ni que esté administrada por la misma. C o n
participación de la aldea en ciertos países de- m u c h a frecuencia los habitantes de una loca-
muestra que la inversión educacional no necesita lidad están dispuestos a trabajar juntos, por
depender enteramente de la financiación del medio de sus organizaciones y asociaciones
gobierno central." comunitarias, para construir u n nuevo edificio
U n a razón importante del interés que des- escolar o añadir u n nuevo centro recreativo a la
pierta lafinanciacióncomunitaria de las escuelas escuela existente, ya sea respondiendo a u n
radica tal vez en el hecho de que se considera llamamiento del gobierno, ya sea sencillamente
que es u n mecanismo alternativo al sistema forzando al gobierno para que intervenga en el
impuesto y administrado por el estado que per- ámbito escolar. Las comunidades obtienen ven-
mite la organización y expresión de los intereses tajas concretas de tales actividades.
de la población en materia de educación; ade- Son variadas las formas de apoyo comunitario
m á s , se basa esencialmente en la cohesión social al sistema de escuelas públicas. Las m á s co-
y el altruismo, y no en el egoísmo privado. Vere- munes son las contribuciones en metálico y en
m o s , no obstante, que esto no es siempre real- trabajo. Luego será posible invertir más dinero
mente cierto. y esfuerzos con objetivos específicos, tales c o m o
Al examinar las posibilidades, es importante la construcción de laboratorios o la instalación
hacer una serie de distinciones claras. E n primer de campos deportivos. L a participación colec-
lugar, es preciso definir el término "comuni- tiva en los gastos de funcionamiento puede
dad". ¿Incluye ésta todas las instituciones pri- limitarse al mantenimiento. A veces se pide a
vadas sin fines lucrativos o se refiere en cierta la comunidad que recaude dinero con motivo
252 Peter Williams

de acontecimientos especiales, c o m ofiestases- blecimientos ni impida proceder a ciertas op-


colares, días abiertos al público, etc., y a que ciones que puedan presentarse más tarde en el
suministre equipos especiales para la escuela. desarrollo del sistema público. Al suministrar
Otro tipo de participación será la organización fondos públicos, los gobiernos querrán estar
de escuelas administradas por la comunidad. seguros de que los criterios de ingreso de los
E n este caso, la escuela es independiente desde alumnos son equitativos y el nivel de instruc-
el punto de vista de la propiedad y la adminis- ción, aceptable. Los padres pueden necesitar
tración: se ha fundado por iniciativa de indivi- protección contra la explotación y las discrimi-
duos de la localidad o de grupos voluntarios que naciones, además de gozar de las garantías
se ocupan de su mantenimiento. Los gobiernos corrientes en materia de sanidad y seguridad.
pueden acoger positivamente la independencia Pero tales precauciones no han de ser excesivas.
y la autonomía que implica una gestión c o m u - N o se debe frustrar el entusiamo de las c o m u -
nitaria de las escuelas, en parte porque significa nidades reprimiendo sus esfuerzos de auto-
u n ahorro para el suministro gubernamental de nomía.
servicios sociales y también por lo que tienen Conviene observar que el esfuerzo comuni-
de valor social el esfuerzo y la iniciativa privada. tario colectivo tiende a ser más fácil en las zonas
U n gobierno puede apoyar activamente a las rurales, cuya población es más homogénea que
escuelas comunitarias de m u y diversas maneras. la de las ciudades, donde la población es hete-
Por ejemplo, a través de la financiación: el rogénea y contiene muchos migrantes de dife-
gobierno ofrece contribuciones c o m o contra- rentes orígenes que también son m u y móviles.
partida del coste de los edificios o de los sueldos E n esas condiciones de inestabilidad demográ-
de los docentes. Son muchas las formas que fica resulta m u y difícil crear una conciencia
puede adoptar la contribución gubernamental. colectiva o sancionar a los que no contribuyen
Los gobiernos pueden contribuir en especie, con la cuota que corresponde al coste de u n
suministrando, por ejemplo, ciertos insumos servicio comunitario. D e hecho, los ejemplos
imprescindibles (cemento, ventanas y estruc- más notables de esfuerzo comunitario, tales
turas metálicas) cuando las comunidades cons- c o m o los de Kenya y Nigeria relatados por
truyen las escuelas. También pueden financiar Ayot y Lillis6 y por Igwe, revelan la existencia
los laboratorios y las aulas especiales y facilitar de una autoridad comunitaria habilitada para
los equipos necesarios. E n otros casos, los go- imponer multas u otras sanciones a los que no
biernos proporcionan a las escuelas comunitarias contribuyen a la empresa con el pago total de
un profesor especializado o un director. A d e m á s su cuota. L a contribución puede ser en dinero
de esta asistencia en forma de dinero o de o en trabajo: lo importante es que los habitantes
elementos concretos, los gobiernos pueden pres- tengan la capacidad de establecer sus propias
tar asesoramiento y servicios en la etapa de contribuciones a una tarea comunitaria. Por lo
desarrollo (planos de construcción y servicios general es algo que no resulta posible en las
de supervisión) y, m á s tarde, asesoramiento ciudades, por lo que es necesariofijarimpuestos
pedagógico por medio de sus inspectores esco- locales que reemplacen a las contribuciones en
lares y equipos encargados de la elaboración de metálico o en especie (sobre todo en forma de
programas de estudio. trabajo).
Al m i s m o tiempo, es posible que los gobiernos También es m á s fácil movilizar los esfuerzos
deseen obtener ciertas garantías y controlar el de la comunidad para la construcción de es-
proceso, sobre todo si la escuela comunitaria cuelas o instalaciones que para costear los gastos
debe integrarse m á s tarde en la red de escuelas de funcionamiento de la escolaridad. L a cons-
públicas. Si este último es el objetivo final, es trucción es u n esfuerzo que se hace de una vez
m u y importante la ubicación del local con res- por todas y que puede exigir poco tiempo y
pecto a la red escolar, siendo fundamental que producir unos resultados tangibles. A m e n u d o
la escuela no duplique las tareas de otros esta- es posible despertar el entusiasmo necesario para
El financiamiento de la educación con recursos no gubernamentales 253

tareas breves, puesto que la relación directa tinadas a la construcción de las escuelas en las
entre los esfuerzos de construcción y el goce de zonas rurales de los países en desarrollo, aunque
las instalaciones de la escuela resulta m á s mani- sea menos correcto al referirnos a los costos de
fiesta. N o ocurre así con los esfuerzos a largo funcionamiento. Es poco frecuente el fenómeno
plazo necesarios para mantener una escuela, lo de la autoimposición de contribuciones en m e -
que necesita recursos año tras año durante u n tálico o en forma de trabajo por parte de las
periodo m u y largo. E n algunos casos la c o m u - comunidades destinadas a la construcción o al
nidad puede "donar" a una escuela las rentas mantenimiento de las escuelas, y lo será aún
de bienes de propiedad colectiva, c o m o un menos en la medida en que las formas tradicio-
cafetal; este tipo de financiación tiene ventajas nales de la acción social cedan su puesto a la
evidentes. economía monetaria. Las escuelas harambee de
D e ello puede concluirse que existe el peligro Kenya no pueden considerarse absolutamente
de que las escuelas administradas por la c o m u - típicas de lo que es posible realizar en la
nidad apenas se distingan de las privadas, excep- mayoría de los países. E n el Seminario Regional
tuado el hecho de que no tienen fines de lucro de la Commonwealth, celebrado en Gaborone
y que suelen estar dotadas de u n comité repre- en junio de 1985, se vio claramente que lo
sentativo de administración. Conviene deter- predominante en la tendencia contemporánea
minar si el esfuerzo de haber contribuido colec- de la financiación comunitaria de las escuelas
tivamente a la construcción del edificio y a los en África central y meridional tomaba la forma
gastos de capital confiere a los contribuyentes sobre todo de una ayuda comunitaria colectiva
el derecho de reservar plazas para sus hijos en en apoyo de las escuelas creadas por sus gobier-
esa escuela. Cuando se construye la escuela con nos. 6 Son m u y raros los casos de escuelas no
el esfuerzo de todos, pero hay que pagar dere- gubernamentales creadas y mantenidas con el
chos de matrícula para sufragar sus gastos, esfuerzo comunitario.
puede ocurrir que sólo los sectores más ricos Esta es una de las muchas contradicciones
de la comunidad obtengan todos los beneficios inherentes al sistema de escuelas comunitarias.
de la escuela, a pesar de que sea toda la c o m u - El problema de la desigualdad dentro de las
nidad la que ha procedido a construirla colec- comunidades ya ha sido evocado. Otro problema
tivamente. E n otras palabras, hay escuelas lla- es la desigualdad entre comunidades cuando
madas "comunitarias" en las que la mayoría los gobiernos deben apoyarse excesivamente en
de los miembros de la comunidad no disponen los esfuerzos propios de la comunidad, ya que,
de los medios para asistir a ellas. en ese caso, el apoyo gubernamental irá a los
E n sentido estricto, la "financiación c o m u - que están m á s capacitados para realizar ese
nitaria" es un término que debería reservarse a esfuerzo, con lo que las comunidades pobres
la auténticafinanciacióncolectiva, cuando se ha serán las m á s perjudicadas. H a y u n caso tam-
realizado una tarea conjunta y cuando casi ha bién en que, por lo menos en algunos países,
desaparecido el vínculo entre contribución y la prosperidad de las escuelas comunitarias se
beneficios. L afinanciacióncomunitaria entraña debe en gran medida a su aislamiento. El orgullo
una redistribución en la comunidad y cierta y la rivalidad entre comunidades pueden esti-
aceptación colectiva de la responsabilidad de mular profundamente los esfuerzos comunita-
la educación de los niños de las familias menos rios hasta tal punto que la creación de escuelas
aventajadas. Si el ingreso a las escuelas se de este tipo puede provocar divisiones sociales
reserva a los que pagan unos derechos o contri- en ciertas circunstancias. H a y ejemplos en que
buyen con dinero al fondo c o m ú n , resulta menos la principal motivación para la creación de una
correcto hablar de financiación comunitaria de escuela comunitaria es el deseo de no asistir
las escuelas. E n este sentido estricto, tal vez sea con los otros a una misma institución estatal.
adecuado hablar de financiación comunitaria Los problemas principales planteados en esta
cuando nos refiramos a las contribuciones des- sección sugieren que la financiación comuni-
254 Peter Williams

taria de escuelas no es u n remedio tan sencillo 3. Psacharopoulos y Woodhall, op. cit., cuadro 6-3, p. 132.
4. Psacharopoulos y Woodhall, op. cit., p. 162.
c o m o muchos ingenuamente consideran. H a y
5. H . Ayot y K . Lillis, "Communityfinancingof schools:
grandes dificultades en la institucionalización issues from Kenya" (documento preparado para el
de la acción comunitaria y, a medida que la Seminario Regional de la Commonwealth con especial
cohesión de la comunidad local se fragmenta referencia a África meridional, Gaborone, junio
c o m o resultado del proceso de urbanización, de 1985).
6. Véase nota 2 punto b) supra.
será cada vez m á s difícil iniciar una acción
7. Véase "Community resources for schools in developing
comunitaria diferente de la actividad oficial del countries: the issues" (documento preparado por la
gobierno a nivel local. N o obstante, es evidente Secretaria de la Commonwealth para el Seminario
que la comunidad representa u n valioso recurso Regional de la Commonwealth, Gaborone, Botswana,
para la educación cuyo aprovechamiento óp- junio de 1985).

timo debería estudiarse a fondo. 7 Harían falta


dos condiciones previas: cierto tipo de autoridad
colectiva, más fuerte que una simple autoridad
moral, y cierta forma de organización comuni-
taria. Convendría especificar los resultados
concretos esperados de este esfuerzo, así c o m o
los beneficios que puede producir a corto plazo.
Por otra parte, es evidente que la tarea no debe
ser desmesurada y adecuarse a las capacidades
de la comunidad. A menos de contar con el
apoyo de poderosas organizaciones, resulta di-
fícil crear, sólo con los esfuerzos comunitarios,
escuelas secundarias e instituciones técnicas, y
m u c h o menos institutos de enseñanza superior.
Por último, los esfuerzos comunitarios tendrán
tanto m á s éxito cuanto m á s apoyo reciban de
organismos externos de índole religiosa, polí-
tica, comercial o de otro tipo. •

Notas
i. G . Psacharopoulos y M . Woodhall, Education for
development. An analysis of investment choices, Oxford
University Press para el Banco Mundial, 1985.
2. Véase en particular: a) P. Williams, "Locating untapped
resources for Education", en Commonwealth Secretariat
(1984) —Resources for education and their cost-effective
use, Londres, Secretaría de la Commonwealth (docu-
mentos y otros materiales sobre este tema de la Novena
Conferencia de Ministros de Educación de la C o m m o n -
wealth, Nicosia, Chipre, julio de 1984); b) Financiación
Comunitaria de Escuelas de las Secretarías de la
Commonwealth (1985), Informe del Seminario Regio-
nal de la Commonwealth con especial referencia a
Africa meridional, Gaborone, Botswana, 12 al 19 de
junio de 1985, Londres, Secretaría de la C o m m o n -
wealth.
¿Puede resultar positiva
la limitación de los gastos
en educación?
Aldo Visalberghi

Pocos términos parecen cuadrar tan bien con educativo y en tanto que valor formativo, apenas
la tradición pedagógica c o m o el de "austeridad". ha tenido eco.
Tanto en las civilizaciones de Occidente c o m o Pero el financiamiento de la educación se ha
en las de Oriente, los manuales para la educa- visto afectado por u n planteamiento diferente:
ción de los aristócratas y los herederos del trono en esta esfera, diversas tendencias de pensa-
y los tratados sobre la formación de los jóvenes miento han surtido u n efecto sinérgico. L a
burgueses propugnan un estilo de vida modesto teoría del capital h u m a n o , la preocupación social
y condenan el lujo y la opulencia. Vittorino da por la igualdad de oportunidades, la acción
Feltre, el pedagogo más destacado del Renaci- positiva por una educación de compensación y
miento italiano, llegó a proscribir todo tipo de la búsqueda de la excelencia, que exige u n
calefacción artificial (¡en el norte de Italia!), ambiente favorable, se cuentan entre los prin-
además de predicar la moderación en el comer cipales factores que han favorecido la aceptación
y la modestia en el vestir. E n casi todos los de presupuestos de educación pública cada vez
países, los principios prácticos de la enseñanza m á s elevados y los sacrificios de la familia para
popular y universal del siglo xix y del siglo xx ofrecer a los hijos mejores oportunidades de
exaltaban la frugalidad y la economía como vir- formación. L a explosión demográfica, principal-
tudes de primer orden. E n cambio... mente después de la segunda guerra mundial,
E n cambio, la idea de que u n fuerte consumo no dejó de multiplicar el efecto conjunto de
es casi una obligación individual si se pretende estos factores. Cuando la crisis petrolera y otros
fomentar el desarrollo económico, no ha calado factores internacionales adversos pusieron en
m u y hondo en las mentalidades a lo largo de peligro la hacienda pública en la mayoría de
los últimos decenios; desde u n punto de vista los países, cesó la tendencia a aumentar los
gastos de educación, fenómeno que fue sólo u n
aspecto de la crisis m á s general del "estado
Aldo Visalberghi (Italia). Profesor de ciencias de la benefactor" o "estado de asistencia social".
educación en la Universidad "La Sapienza" de Roma. Pero los gastos de educación difieren de la
Presidente del Centro Europeo de Educación, con sede mayor parte de las asignaciones públicas de
en Frasean (Italia). Autor de John D e w e y , Espe- asistencia social porque son, hasta cierto punto,
rienza e valutazione (John Dewey, experiencia y eva-
u n tipo de inversión especial, a diferencia de
luación), Scuola aperta (La escuela abierta), Educa-
los subsidios de desempleo, las pensiones y la
zione e divizione del lavoro (Educación y división del
trabajo), Scuola e cultura di pace (Escuela y cultura
ayuda a la vejez, los servicios de salud gratuitos.
de paz), Educazione e condizionamento sociale (Edu- Es verdad que las cosas no son tan sencillas.
cación y condicionamiento social) y Pedagogía e scienze L a teoría del "capital h u m a n o " ha sido acer-
dell'educazione (Pedagogía y ciencias de la educación). bamente criticada (volveremos sobre este punto),

Perspectivas, vol. X V I , n.° 2, 1986


256 Aldo Visalberghi

y los servicios médicos gratuitos de buena las inversiones privadas y públicas en la educa-
calidad pueden contribuir a una mayor produc- ción. A u n si las teorías acerca del "capital
tividad. D e u n m o d o general, el gastar en u n h u m a n o " son sólo parcialmente válidas, la edu-
buen sistema escolar en lugar de gastar en cación debería ser una de las mejores inversiones
bienes de consumo o fábricas para producirlos a largo e incluso a medio plazo.
(tal vez contaminados) puede interpretarse Analicemos brevemente la paradoja: el clima
c o m o una conducta de austeridad, en el sentido de austeridad en que vivimos se parece m u c h o ,
en que asocia la acepción educativa y de pre- en realidad, a u n clima de pobreza. Nuestro
supuesto público del término. El "espíritu de superávit es tan pequeño que debemos limi-
capitalismo" individualista relacionado por M a x tarnos a contadas inversiones a corto plazo.
W e b e r con la "ética protestante" podría en- E n la esfera de la educación, por ejemplo, se
contrar una forma colectiva, nueva, y conec- tiende a fomentar la formación profesional a
tarse con una ética social y política moderna. fin de satisfacer las necesidades más urgentes de
E n este artículo nos proponemos ilustrar la m a n o de obra, según u n reflejo de miopía bas-
tesis siguiente: la austeridad puede y debe de- tante corriente en los debates contemporáneos.
sempeñar u n papel educativo positivo, con Por otra parte, cabe pensar que la teoría del
consecuencias sociales y políticas (principal- "capital h u m a n o " es básicamente falsa. N o
mente internacionales) positivas, pero esto sólo puede afirmarse que las correlaciones entre el
es posible en ciertas condiciones, nada fáciles ingreso per capita y el nivel de instrucción
de lograr. C o n todo, hay síntomas de una evo- (tanto entre naciones c o m o entre individuos)
lución en el buen sentido con respecto a las sean causales, ya que la educación es u n deter-
actitudes de los jóvenes, la conciencia política minante básico de la prosperidad, pero m á s
y el avance tecnológico. E n consecuencia, po- bien en sentido inverso, es decir que los estu-
demos esperar que la austeridad en los países dios (en particular los estudios prolongados)
desarrollados se oriente hacia el establecimiento son sobre todo un lujo y un símbolo de posición
de mejores relaciones internacionales, los valores social que las personas acomodadas se esfuerzan
de paz y el respeto ecológico del planeta. por dar a sus hijos.
L a primera aserción es evidentemente falsa
por lo que atañe a las sociedades avanzadas
L a austeridad como comportamiento y sólo parcialmente cierta, c o m o demostra-
"de ahorro" remos más adelante, en cuanto a los países en
desarrollo.
L a austeridad no es pobreza. L a gente verda- L a segunda es algo más seria y congruente.
deramente pobre carece de recursos suficientes Es una advertencia contra el exceso de simpli-
para la mera subsistencia y, con m á s razón, ficación. U n precursor de la teoría del capital
para invertir con miras al consumo y al bie- h u m a n o , Theodore W . Schultz [i960] declaró
nestar futuros. El comportamiento h u m a n o ins- que "el aumentar en tal medida la parte de
pirado por u n principio de "austeridad" es recursos atribuidos a la educación puede haber
otra cosa. Es una elección deliberada entre el perseguido objetivos culturales de varias m a -
consumo y el ahorro que supone, por lo c o m ú n neras que no pueden considerarse como 'con-
(excepto en el caso del agricultor que padece sumo', o puede haber sido determinado por la
hambre a fin de no consumir el grano necesario política con fines que parecen ajenos a la
para la siembra, y algunos otros casos) reorien- 'inversión'. A u n q u e esto fuera cierto, no ex-
tar la producción hacia los bienes de capital, cluiría la posibilidad de que el rendimiento de
por oposición a los bienes de consumo. los recursos asignados a la educación fuera
Esta evidencia sirve de punto de partida a elevado simplemente como una consecuencia
una aserción algo paradójica: u n "clima de favorable de los propósitos, cualesquiera que
austeridad" debería producir u n aumento de fueran, que motivaron el aumento considerable
¿Puede resultar positiva la limitación de los gastos en educación? 257

de los recursos dedicados a la educación". instrucción. Ahora bien, la palabra nivel tiene
L a crítica prestó poca atención a estos argu- un doble significado: se refiere tanto a las tasas
mentos y el debate prosiguió con diversas varia- de asistencia escolar c o m o a la calidad de la
ciones sobre temas conocidos, pero también educación.
nuevos. Existen interrelaciones complejas entre D e todos modos, tanto las tasas de asistencia
bienestar social y educación, según otros. Sin c o m o la calidad de la educación exigen inver-
duda existe una influencia recíproca. Pero la siones públicas o privadas, o de ambos tipos.
teoría del "capital h u m a n o " ha descuidado, porPero las m á s de las veces la inversión pública se
lo c o m ú n , el hecho de que la educación es necesita principalmente para una orientación
principalmente algo que favorece el éxito m a - correcta y una optimización del rendimiento.
terial y social. Es verdad que u n análisis de Veamos el problema de los individuos super-
costo-beneficio de la educación en 32 países dotados procedentes de medios socioculturales
[Psacharopoulos, 1973] demostró que el rendi- m á s bien pobres. Cada vez se reconoce m á s
miento de las inversiones en educación no sólo "que los grupos racial o culturalmente distintos
es conveniente sino que, en muchos casos, o las categorías menos favorecidas de la pobla-
particularmente en los países en desarrollo, lo ción constituyen la reserva m á s importante de
es m á s que las inversiones en capital físico, y talentos no explotados, y se realizan esfuerzos
que el rendimiento social es siempre superior especiales para remediar esa situación. Varios
al privado, en particular con respecto a la edu- países tratan de mejorar los métodos que se
cación primaria. Pero tales análisis no demues- utilizan para identificar a los superdotados en
tran que gastar m á s en la educación secundaria esas categorías de la población; otros se esfuer-
y superior sea realmente rentable. zan por adaptar sus sistemas educativos. El
Tanto en los países desarrollados c o m o en los interés de que es objeto ese grupo, denominado
países en desarrollo, se observa u n fenómeno de en los Estados Unidos "los desfavorecidos
"sobreeducación" del tipo "efecto trinquete". superdotados", se debe, a m e n u d o , a una
Tal fenómeno es particularmente visible en la preocupación en favor de la igualdad de opor-
administración pública, donde la "obsesión por tunidades en el campo de la educación"
los diplomas" requiere una multitud de califi- [Passow, 1984].
caciones escolares para obtener u n empleo, en El desarrollo cultural y económico n o es
cuya búsqueda se afanan los estudiantes (y sus posible sin estimular la inteligencia creativa de
familias). Cuesta creer que este fenómeno tenga la infancia y la juventud m á s allá de los límites
el menor sentido económico. de la atención familiar y de las iniciativas pri-
E n todo caso, los expertos que analizan los vadas, sumamente selectivas. Pero es una e m -
posibles efectos de la "sobreeducación" niegan presa costosa. Sería posible asignarle dinero de
que después de la escolaridad básica, las inver- otras empresas educativas costosas pero m u c h o
siones en educación puedan tener u n rendi- menos productivas, tales c o m o la atención espe-
miento negativo [Foster, 1965]. cial para los niños impedidos o inadaptados.
D e hecho, en los últimos 20 años la economía L a pedagogía avanzada tiende a abordar ambos
de la educación se ha convertido en u n campo aspectos del problema de los "niños excepcio-
de investigación cada vez más complejo [Blaug, nales" y trata de resolverlo a través de modelos
1968; 1978] pero es difícil negar que la educa- sumamenteflexiblesbasados en las caracterís-
ción tenga correlaciones positivas y probable- ticas sociales e individuales. ¿Podemos eliminar
mente efectos causales con respecto al creci- uno de los grupos c o m o hicieron los nazis?
miento económico y el desarrollo. Esta expre- ¿ Q u é tipo de humanidad será el producto
sión doble no es redundante: crecimiento signi- futuro? Si nos negamos a ahorrar dinero e n
fica expansión linear y desarrollo quiere decir favor de una inversión "económica" en los
enriquecimiento estructural. Es probable que superdotados debemos aceptar gastar m á s en
ambos estén m u y vinculados con el nivel de educación en el nuevo clima de "austeridad".
258 Aldo Visalberghi

forma progresiva c o m o permanente. Las acti-


L a sociedad postindustrial, vidades prácticas deben integrarse en el
sociedad de la información currículo, no tanto con fines profesionales
directos, sino por su interés pedagógico.
Las reflexiones formuladas acerca de la interre- Todos los alumnos deben tener oportunidad
lation entre la austeridad y las inversiones de familiarizarse con las nuevas tecnologías,
acertadas, principalmente en "capital h u m a n o " , en especial las tecnologías de la información
pueden matizarse aún m á s en relación con los y la informática, ya que vivimos en una
impresionantes cambios sociales que se están sociedad de información, en la que las per-
produciendo en todas las sociedades adelan- sonas que desempeñan actividades en ese
tadas. Se están transformando en sociedades campo (incluidos el arte, la literatura, la
postindustriales porque tanto el ingreso c o m o televisión, asesorías, etc.) tienden a ser una
el trabajo se concentran en los sectores terciarios mayoría de la población activa.
y n o en la agricultura y la industria. Esta evo- ¿Cuáles podrían ser las consecuencias de tales
lución se explica por los nuevos adelantos cien- tendencias para una política de "austeridad"
tíficos y tecnológicos. E n tanto que en el proceso en materia de educación? C o n todos los peli-
de industrialización clásico la tecnología tendía gros que entraña el "elitismo", la tendencia que
a despojar al trabajo de sus características salta a la vista es el desarrollo "espontáneo"
humanas, haciendo del hombre u n apéndice de de las tecnologías de la información dentro y
la máquina, hoy en día la electrónica y las fuera de la escuela, en la actualidad bastante
ciencias de la información siguen una trayec- caótico y sumamente costoso para la sociedad
toria diferente, y hasta opuesta: ahora la ten- en su conjunto. ¿Se puede controlarlo, quizás
dencia es a utilizar operaciones controladas arti- planificarlo de manera que pueda representar
ficialmente en todas las intervenciones humanas una buena inversión y reducir las diferencias
que no sean "estrictamente humanas" (es decir, socioculturales en lugar de acentuarlas, como
creativas, originales, de evaluación, etc.). El parece ocurrir actualmente?
primer resultado es una gran cantidad de bienes Tal vez sea necesario explicar esta última
y servicios a precio m á s bajo y el segundo, u n pregunta. E n primer lugar, las microcomputa-
coeficiente de desempleo en aumento, princi- doras y las computadoras personales se difunden
palmente entre los jóvenes y las mujeres. El cada vez m á s entre las familias pudientes, donde
tercero es una demanda creciente de personas a m e n u d o son accesibles a los niños. Estos
altamente calificadas y en particular de personas pueden jugar con ellas, llegar a dominar algunos
creativas, capaces de readaptarse rápidamente lenguajes y la programación.
a nuevas situaciones y de abordar problemas no
Si en la escuela se imparten cursos faculta-
previstos.
tivos de informática, e incluso obligatorios, es
E n esta trama de elementos contradictorios, probable que su rendimiento sea mejor que el
parece que se vislumbran algunas tendencias en de los otros debido a que están familiarizados
el campo de la educación, a saber: y motivados. Los alumnos que no hayan tenido
Conciliar la excelencia y la equidad, porque una experiencia de ese tipo, libre y lúdica,
necesitamos competenciasflexiblesy de alto considerarán la instrucción c o m o algo externo
nivel, pero también cierto grado de h o m o - y su rendimiento medio será m u y inferior.
geneidad, especialmente entre los m á s ins- L a escuela debe "compensar" tal desigualdad
truidos. El fantasma de la tecnocracia sólo de oportunidades, pero la tarea no resulta fácil.
podrá ser ahuyentado por el desarrollo de la Entre las propias escuelas la distribución de
democracia, a fin de controlar y orientar los oportunidades y equipo es m u y desigual. Parece
cambios tecnológicos. que en varios países las microcomputadoras y
Destacar la importancia de la educación general las computadoras personales, así c o m o los do-
(no sólo intelectual) para todos, tanto en centes dispuestos a utilizarlas, sólo se encuen-
¿Puede resultar positiva la limitación de los gastos en educación? 259

tran en las escuelas de los sectores sociocultu- gracias a una mayor sagacidad en las inversiones
rales superiores. y a una compleja "acción de discriminación
E n países c o m o Italia, donde la mayor parte positiva".
de los indicadores educacionales (excepto quizás Los efectos educativos y, por ende, econó-
el gasto público per capita) revela una acusada micos de tales inversiones parecen halagüeños,
disparidad entre el norte y el sur, el equipo al menos en una perspectiva internacional y,
electrónico está aún m á s desigualmente distri- particularmente, si se toman en consideración
buido. U n a investigación reciente encargada por los dos puntos siguientes: a) se debería instituir
el Ministerio de Educación y realizada en casi rápidamente la enseñanza de la informática para
un 80% de las escuelas públicas reveló que, evitar que se forme u n nuevo abismo entre
a nivel de la enseñanza obligatoria, el porcentaje países desarrollados y países en desarrollo en
de computadoras de todo tipo existentes en el un ámbito tan sensible; y b) "la enseñanza de
sur no llegaba a u n tercio del ya modesto por- las lenguas extranjeras mediante la computadora
centaje del norte (1,5% y 5%). A nivel de la será pronto plenamente eficaz" [Orivel, 1985].
enseñanza secundaria superior, el 24% de las Así pues, podemos concluir que "las reduc-
escuelas del sur estaban dotadas de computa- ciones que se aplican a los presupuestos de
doras, en contraste con el 41% en el norte educación, y, particularmente, la disminución
[ C E N S I S , 1985, p. 94-101]. Si se tomara en de la contribución gubernamental, hacen tanto
cuenta el número y calidad de las computadoras m á s urgente u n mejor uso de los recursos atri-
de cada escuela, así c o m o la competencia de los buidos a este sector" [Orivel, 1985].
maestros en su uso, la desproporción sería pro-
bablemente m u c h o mayor. Las asociaciones y
clubs de informática también están m u c h o m á s Posibilidades sectoriales
desarrolladas en el norte. U n programa reciente y complejidad global
de capacitación en el servicio en la esfera de la
informática organizado por el Ministerio y des- Pero además de esta necesidad de invertir de
tinado a los profesores de matemáticas y física manera m á s precisa, especialmente en esferas
de la enseñanza secundaria superior se propone prometedoras como las nuevas tecnologías y las
volver la situación más equitativa, al igual que ciencias de la información, el clima de "austeri-
los planes de financiación para dotar a las dad" en la educación debe incitar a la reflexión
escuelas de computadoras de calidad. Ahora acerca de la evolución social y económica actual.
bien, ¿cuál es el impacto de estas modestas E n primer lugar, tomemos el caso de las crisis
iniciativas?. E n algunos países (los Estados interrelacionadas del llamado "Estado social"
Unidos, el Reino Unido, Francia y la República y de los presupuestos públicos, que revelan, las
Federal de Alemania) se desarrollan programas m á s de las veces, un déficit y un endeudamiento
más avanzados y completos. Pero aún allí, según crecientes. U n efecto colateral es la creciente
la mayor parte de las evaluaciones realizadas demanda de personal administrativo y de conta-
por expertos, es improbable que puedan con- bilidad. E n los Estados Unidos, según las
trarrestar las diferencias del medio económico últimas cifras disponibles, m á s del 25% de los
y cultural, al menos allí donde éstas son m u y estudiantes de letras y ciencias humanas se
acentuadas, c o m o es el caso de Italia. especializan en administración de empresas
Pese a esta reserva, la "alfabetización" y la [Zucconi, 1985]. Esto significa que, pese a los
enseñanza de la informática parecen promete- esfuerzos de "derregulación", el intrincado
doras para las inversiones inspiradas por u n mecanismofiscaly de seguridad social requiere
auténtico espíritu de "austeridad". E n los casos especialistas m u y cualificados para administrar
en que la financiación de la educación es sobre asuntos tan complicados. Los expertos en la
todo una competencia del Estado, se puede materia están mejor pagados o perciben ingresos
reducir la heterogeneidad y mejorar la calidad superiores a los de la mayoría de los investí-
2Ó0 Aldo Visalberghi

gadores en la rama de las ciencias e incluso de examinamos es también, c o m o el anterior, u n


la tecnología. Ningún sistema de computadoras ejemplo de la complejidad del problema. E n
puede disminuir la magnitud de la nueva buro- educación, todo lo que se haga debe evaluarse
cracia privada y pública de este tipo. Esos en función del probable impacto educativo y
gastos parásitos adicionales no podrán reducirse social. A guisa de ejemplo, los cambios c o m o el
a menos que se emprenda una acción conjunta que acabamos de mencionar producirían desem-
en cuanto a la automatización de operaciones pleo entre los conserjes, guardianes y el personal
administrativas, política fiscal y organización de limpieza. También en este caso sería preciso
de los servicios. adoptar medidas globales y democráticamente
U n a política de austeridad encaminada a maduras.
optimizar la inversión debe inspirarse en el U n a técnica m u c h o m á s difundida para
principio de que todo despilfarro de energía en ahorrar fondos públicos en la administración
tareas artificiales es perjudicial para nuestras escolar, así c o m o en los servicios sociales en
sociedades y para su calidad de vida. Si inver- general, se basa en distribuir su costo entre los
timos primordialmente en preparar algunas usuarios a una tasa diferencial, que varía desde
personas para defender a las empresas e indi- la exención completa al pago de la tarifa total,
viduos de las pretensiones delfiscoy/o (ya que según el nivel de ingreso de las familias. Parece
ambas tareas son en gran medida intercambia- un procedimiento fácil y m u y equitativo, pero
bles) para sacar lo m á x i m o posible a los contri- aun aquí es preciso adoptar u n enfoque global.
buyentes, la operación es, a todas luces, una Semejante política de gastos en servicios educa-
inversión sin futuro. Y si se realiza a expensas cionales y sociales supone clasificar — m á s o
de los estudios científicos y humanistas, la menos oficialmente— a las familias según sus
distorsión resultante representará una desvia- niveles de ingreso. E n varios países sabemos por
ción de una perspectiva futura de crecimiento experiencia lo difícil que resulta hacerlo, incluso
y desarrollo verdaderos. Desde luego, sería confinesúnicamentefiscales,lo frecuentes que
necesario analizar y probar mejor esta hipótesis, son las consecuencias injustas y lo discutible
que se presenta aquí sólo para ilustrar la índole que es, en la esfera de la educación, la práctica
compleja del problema que examinamos. de clasificar a los niños según la riqueza de la
Ahora bien, al margen de esos problemas familia de que provengan.
m u y generales de legislación económica y orien- Provisionalmente, se podría llegar a la si-
tación profesional, existen, por supuesto, varias guiente conclusión: ahorrar dinero en los gastos
maneras posibles, y aparentemente sencillas, de públicos, e incluso en los privados, suele ser
ahorrar dinero en la administración escolar. m u y difícil, sobre todo cuando se está habituado
Por ejemplo, u n campo que cabría explorar en a u n cierto m o d o de consumo. L a forma más
ese sentido es el de los servicios internos, c o m o peligrosa de hacerlo es reducir las inversiones
la limpieza y el mantenimiento. Los estudiantes, para el futuro, práctica que es, desgraciadamente,
supervisados por sus maestros y algunos exper- la más fácil y al m i s m o tiempo la más contra-
tos, podrían hacer funcionar directamente algu- dictoria por lo que atañe al concepto de auste-
nos de esos servicios, c o m o ocurre ya en la ridad. Para los gastos de educación el problema
mayor parte de las escuelas japonesas. Pero aún es aún más complejo, ya que las inversiones de
en esta materia la elección no es simple. Está en este tipo son, por fuerza, a largo o medio plazo
función de la atmósfera social y cultural en (en efecto, las inversiones a corto plazo son
general. Si la sociedad se orienta hacia el rentables casi exclusivamente en función de las
reconocimiento del trabajo manual, incluso anteriores). Por lo tanto, el intento de limitar
el más humilde, c o m o un deber social para todos, las inversiones a largo plazo en este campo es
ese tipo de comportamiento de austeridad podría aún más peligroso que en otros.
introducirse por su valor educativo, y no sólo Por otra parte, la educación no sólo es una
por la necesidad de ahorrar dinero. El caso que inversión en términos meramente económicos:
¿Puede resultar positiva la limitación de los gastos en educación? 261

es también una inversión en cultura, democra-


cia, ciudadanía, paz, calidad de vida (tanto del
individuo como de la sociedad). T o d o lo que
hacemos en relación con la educación entraña
una pluralidad de consecuencias, la mayoría de
las cuales dependen, además, de circunstancias
sociopolíticas más generales, c o m o ocurre en
los breves ejemplos expuestos.
Esto no significa que no podamos reducir en
cierta medida los gastos de educación. L a aus-
teridad es un valor en educación en la medida en
que se aplica con inteligencia y se comprende
con claridad. Pero lo importante es que no
debe adoptarse ninguna decisión sin realizar
un cuidadoso análisis previo de numerosas
variables independientes y dependientes. L a
vida de las próximas generaciones depende de
lo que hagamos en nuestras escuelas y en la
sociedad en su conjunto. •

Referencias
B L A U G J M . 1968. Economics of education: selected readings.
Harmondsworth, Penguin.
. 1978. Economics of education: a selected annotated
bibliography. Oxford, Fergamon.
C E N S I S (Centro Studi Investimenti Sociali). 1985.
XIX rapporto sulla situazione sociale del paese. Milán,
Franco Angeli.
F O S T E R , P . 1965. T h e vocational school fallacy in develop-
ment planning. E n C . A . Anderson y M . J. B o w m a n
(reds.), Education and economic development, Chicago,
Aldine, p . 142-163.
O R I V E L , F . 1985. Economics of educational technology.
E n International Encyclopedia of Education, vol. Ill,
Oxford, Pergamon, p . 1554-1565.
P S A C H A R O P O U L O S , G . 1973. Returns to education: an inter-
national comparison. San Francisco, Jossey-Bass.
. 1981. Returns to education: an updated interna-
tional comparison. E n Comparative Education, p . 17
y 321-341.
P A S S O W , A . H . 1984. L a educación de los superdotados. E n
Perspectivas, vol. X I V , n.° 2 , p . 181-193.
S C H U L T Z , T . W . i960. Capital formation by education. E n
Journal of Political Economy, vol. L X V I I I , n.° 6.
T A R A N T E L L I , E . 1984. L'ipotesi del salto generazionale :
l'eredità délia crisi del '68 e le trasformazioni produttive
e del mercato del lavoro. E n B . Vertecchi (red.), La
scuola italiana Verso il 2000, Florencia, L a N u o v a
Italia, p . 13-20.
Z U C C O N I , V . 1985. I ragazzi dell'85 nelTAmerica che
cambia. E n La Repubblica, diciembre 27 y 30.
TENDENCIAS Y CASOS

z
La evolución
del gasto público
en educación: 1975-1983
Ignazio Coceo y Geraldo Nascimento

El gasto público mundial en educación corres- parado de los datos expresados en dólares, en
pondiente a 1983 se ha estimado en unos 630 mil precios corrientes. E n las comparaciones inter-
millones de dólares de los Estados Unidos. nacionales, es preferible expresar los gastos
C o m o comparación, cabe referirse a las evalua- de educación en porcentaje del Producto Nacio-
ciones efectuadas por otros autores1 en cuanto nal Bruto ( P N B ) . E n el cuadro 1 vemos que,
al gasto militar (706 mil millones) y el gasto para el m u n d o en su conjunto, los gastos
en sanidad (540 mil millones). Este orden de públicos en educación representan u n por-
prioridad es, m á s o menos, el que prevalece centaje prácticamente constante del P N B . 2 D e
en una gran mayoría de países. Â falta de hecho, esta media mundial resulta considera-
poder verificar aquí los eventuales cambios de blemente afectada por el peso que representan
las prioridades en la asignación de los recursos los países desarrollados, que, por su parte,
públicos en periodo de austeridad económica, mantienen un valor constante de 6,1%. El por-
podemos tratar de exponer los principales centaje correspondiente a los países en desa-
aspectos de la evolución de los recursos asigna- rrollo es m u y inferior (4% en 1983). Por otra
dos a la enseñanza. parte, hay que destacar que su evolución
Del total del gasto mundial, la parte de los durante el periodo más reciente (1975-1983) fue
países en desarrollo fue de u n poco más del bastante m á s ñoja que la de años anteriores
14% en 1983, frente al 12% de 1975 y el 9% a 1975.
de 1970. El gasto en educación por habitante Este hecho es particularmente llamativo en
en estos países experimentó u n crecimiento Asia y el Pacífico y en África. Claro que el
proporcional m á s elevado que en los países porcentaje experimenta u n aumento en los
desarrollados, pasando de 14 dólares en 1975 años 80, pero este aumento es m u c h o menos
a unos 30 dólares en 1983. N o obstante, este fuerte que en el periodo 1970-1975. Los países
último valor no representa aún más que una de América Latina y el Caribe, pese a una baja
exigua fracción de lo asignado en los países importante en 1983 (debida esencialmente a u n
desarrollados (465 dólares). descenso del porcentaje en el Brasil), parece
N o s vamos a volver a plantear aquí todos que a partir de 1975 vienen asignando a la
los problemas relacionados con el análisis c o m - educación una parte cada vez más elevada de
su P N B ; de las tres regiones en desarrollo,
África ha sido siempre la que dedica m á s a
este capítulo.3
Ignazio Coceo (Italia) y Geraldo Nascimento (Bra-
sil) trabajan en la División de Estadísticas Relativas Las medias expuestas en el cuadro 1 pueden
a la Educación que existe en el seno de la Oficina de verse, de hecho, grandemente afectadas por
Estadísticas de la Unesco. el peso de algunos países incluidos en el conglo-

Perspectivas, vol. X V I , n.» 2, 1986


266 Ignazio Coceo y Geraldo Nascimento

merado de la región. Por ejemplo, Argelia, P N B a educación, con un aumento del número
Egipto y Nigeria representan alrededor de 50% de los que ofrecen u n porcentaje superior al
de los gastos de educación en África; Brasil y 4,5% en las otras dos clases, como contrapar-
México, el mismo porcentaje en América Latina tida. Sin embargo, Asia y el Pacífico sigue siendo
y el Caribe; la China, la India y Arabia Saudita, la región donde el número de países (13 de 31)
alrededor del 45% de Asia y el Pacífico, y los con u n porcentaje inferior al 3% es relativa-
Estados Unidos, más del 35% del total de los mente importante. África es la única región
países desarrollados. Afinde evitar este incon- en desarrollo en la que la mayoría de los países
veniente, puede examinarse, en el interior de (25 de 44) gasta más del 4,5%; y es preciso
cada región, la distribución de los países según añadir que once de ellos gastan más del 6%.
los valores del porcentaje del gasto en educa- E n general no se advierte correlación signi-
ción con relación al P N B (cuadro 2). E n 1983, ficativa entre el nivel de gasto con relación al
estos valores son superiores a u n 4,5% en P N B , por una parte, y el de escolarización por
76 países, frente a 57 en 1975. Esencialmente, es la otra. Además de las razones inherentes a las
en las tres regiones en desarrollo donde se diferencias de costo por alumno, la evolución
aprecia u n descenso del número de países en del nivel de escolarización depende asimismo
las dos clases que dedican menos del 4,5% del del sinfín de factores sociales, económicos y

C U A D R O I. El gasto público en educación como porcentaje del P N B

1970 1975 1980 1981 1982 1983

Mundo 5,4 5,6 5,6 5,6 5,7 5,7


Países desarrollados 5.9 6,1 6,1 6,1 6,1 6,1
Países en desarrollo 2,9 3,6 3,7 3,8 4,1 4,0
Africa 4,1 4,8 4,8 5,1 5,2 5,3
Asia y el Pacífico 2,3 3,2 3,3 3,3 3,6 3,6
América Latina y el Caribe 3,4 3,6 4,° 4,2 4,4 4,0

Fuente: Departamento de Estadística de la Unesco.

C U A D R O 2. Distribución de los países según porcentaje del gasto público en educación con relación al P N B

Número De 3% De 4,5%
de Menos a menos a menos 6% en
países Año de 3% de 4,5% de 6% adelante

Mundo 134 1975 38 39 28 29


1983 27 31 40 36
Países desarrollados 33 1975 2 6 12 13
1983 3 4 12 14
Países en desarrollo 101 1975 36 33 16 16
1983 24 27 28 22
Africa 44 1975 10 17 9 8
1983 5 14 14 II
Asia y el Pacífico 3i 1975 18 7 2 4
1983 13 6 8 4
América Latina y el Caribe 26 1975 8 9 5 4
1983 6 7 6 7

Fuente: Oficina de Estadística de la Unesco.


L a evolución del gasto público en educación: 1975-1983 267

culturales propios de la historia de cada país. ha sido m u c h o más acentuada en la enseñanza


N o obstante, en el contexto global en que se secundaria. C o n manifiesto retraso en 1975 en
sitúan estas observaciones acerca del gasto en comparación con las demás regiones, los coefi-
educación, es menester dar también una breve cientes de escolarización en la enseñanza secun-
ojeada a la evolución de la escolarización en la daria en los países de África vienen experimen-
enseñanza primaria y en la secundaria. tando u n rápido avance en años recientes.
E n 1983, el coeficiente bruto de escolariza- Ilustran bien este fenómeno las cifras del cua-
ción* en la enseñanza primaria sobrepasaba el dro 4: en 1975, 36 países de África tenían
90% en 93 países, de los 134 considerados en un coeficiente inferior al 20% y otros 5 países
el cuadro 3, situación en claro progreso con un coeficiente comprendido entre 20 y menos
relación a 1975. L a evolución, no obstante, de 40%; en 1983 no hallamos ya más que
aparece bastante diferenciada en las tres regiones 25 países en el primer grupo y, en el segundo,
en desarrollo. E n América Latina y el Caribe, su número pasa a 12.
con un nivel de escolarización ya alto en 1975, Para concluir estos breves comentarios sobre
casi todos los países alcanzan hoy coeficientes los coeficientes de escolarización, observaremos
superiores al 90%. E n Asia y el Pacífico, los también el importante avance de la enseñanza
progresos llevados a cabo en materia de escola- secundaria en Asia y el Pacífico y en América
rización a este nivel parecen tanto más impor- Latina y el Caribe: 9 países de la primera región
tantes cuanto que se trata de la región donde el y 8 de la segunda alcanzan hoy coeficientes
porcentaje del gasto en educación con relación superiores al 60%.
al P N B es más bajo. E n cambio, por lo que C o m o ya hemos advertido, si bien n o cabe
a África se refiere, cabe preguntarse si el nivel hablar de una relación estricta entre nivel de
de escolarización primaria, así como, por otra gasto y escolarización, la distribución del gasto
parte, su evolución entre 1975 y 1983, se hallan público por grados de enseñanza nos da, sin
en consonancia con el importante esfuerzo embargo una indicación del orden de prioridad
financiero realizado en favor de la educación, concedido al desarrollo de cada tipo de ense-
tal como antes indicábamos. El coeficiente de ñanza (cuadro 5).
escolarización en la enseñanza primaria es toda- E n los países desarrollados, considerados
vía inferior al 50% en 10 países africanos globalmente, no se ha registrado ningún cambio
(frente a 13 en 1975) y, guardando las propor- importante en esta distribución en todo el
ciones, diríase que la evolución de los coeficiente periodo 1975-1981, si no es un ligero aumento

C U A D R O 3. Distribución de los países según el coeficiente bruto de escolarización en la enseñanza primaria

Número De 50% De 70%


de Menos a menos a menos 90% en
países Año de 50% de 70% de 90% adelante

Mundo 134 1975 18 15 18 83


1983 13 12 16 93
Países desarrollados 33 1975 — — 33
1983 — — 33
Países en desarrollo 101 1975 18 15 18 50
1983 13 12 16 60
África 44 1975 13 10 6 15
1983 10 8 8 18
Asia y el Pacífico 31 1975 5 3 7 16
1983 3 3 5 20
América Latina y el Caribe 26 1975 — 2 5 19
1983 — 1 3 22
Fuente: Departamentode Estadística de la Unesco.
268 Ignazio Coceo y Geraldo Nascimento

C U A D R O 4. Distribución de los países según el coeficiente bruto de escolarización en la enseñanza secundaria

Número De 20% De 40%


de Menos a menos a menos 60% en
países Año de 20% de 40% de 60% adelante

Mundo 134 1975 48 23 27 36


1983 34 26 24 50
Países desarrollados 33 1975 — I 2 30
1983 — — 2 31
Países en desarrollo 101 1975 48 22 25 6
1983 34 26 22 19
África 44 1975 36 5 3 —
1983 25 12 5 2
Asia y el Pacífico 31 1975 7 10 11 3
1983 7 9 6 9
América Latina y el Caribe 26 1975 5 7 11 3
1983 2 5 11 8

Fuente: Oficina de Estadística de la Unesco

C U A D R O 5. Distribución en porcentajes del gasto público en educación por grados de enseñanza

Enseñanza Enseñanza Primaria y Enseñanza No


primaria secundaria secundaría superior clasificadas

Países desarrollados 1975 72 23 5


1981 , 70 25 5
Países en desarrollo 1975 41 26 67 19
1981 40 23 63 20 17
Africa 1975 39 30 69 22 9
1981 31 37 68 21 II
América Latina y el Caribe 1975 39 23 62 22 16
1981 40 15 55 24 21
Asia y el Pacífico 1975 44 30 74 14 12
1981 43 31 74 13 13

Nota: además de los países indicados en la nota 2, están excluidos los siguientes: enÁfrica, Egipto; en Asia, China, Jordania, Nepal
y Sri Lanka.
Fuente: Dépenses publiques d'éducation dans le monde. Tendances régionales et1970-1982,
par pays. Unesco , París, 19S2

en el gasto destinado a la enseñanza superior. superior, sigue absorbiendo alrededor del 20%
E n las regiones en desarrollo, por el contrario, de los recursos disponibles para educación,
observamos cambios significativos. E n África, lo que parece excesivo teniendo en cuenta el
donde el objetivo de la escolarización primaria reducido número de estudiantes inscritos en
universal dista aún de ser alcanzado en muchos este tipo de enseñanza.
países, la parte del gasto destinada a la ense- E n América Latina y el Caribe, al contrario
ñanza primaria ha disminuido fuertemente, y que en África, se aprecia una marcada dismi-
en 1981 no representaba m á s que el 31%, nución del porcentaje del gasto asignado a la
m u c h o menos que en las otras dos regiones. enseñanza secundaria, que no recibe m á s que
El esfuerzo se ha concentrado sobre todo en la el 15% en 1981. Sin embargo, estas cifras
enseñanza secundaria, que pasa del 30 al 37% requieren, por nuestra parte, dos observaciones.
del presupuesto; en cuanto a la enseñanza E n primer lugar, es preciso advertir que la pro-
La evolución del gasto público en educación: 1975-1983 269

porción del gasto que no se desglosa por grados orden de magnitud en las tres regiones en desa-
de enseñanza es bastante elevada y ha a u m e n - rrollo y se mantuvieron bastante estables entre
tado. Y en segundo lugar, cabe suponer razo- 1975 y 1981. Comprobamos, no obstante, que
nablemente que la enseñanza secundaria pri- los costos de las enseñanzas secundaria y supe-
vada, de especial importancia en esta región, ha rior en África son m u y elevados. E n 1981,
continuado su expansión pese a recibir cada con relación a la enseñanza primaria, el costo
vez menos subvenciones de los gobiernos. de la enseñanza secundaria es 7 veces m á s
E n Asia y el Pacífico, la distribución del elevado en África, mientras que en las otras
gasto por grados de enseñanza se mantiene dos regiones esta proporción es aproximada-
estable y parece mejor equilibrada, con la mente de una vez y media. E n lo que respecta
concesión de una neta prioridad a la enseñanza a la enseñanza superior, el gasto por estudiante
primaria y la asignación de una parte relativa- en África es 57 veces m á s cuantioso que el
mente débil a la enseñanza superior. gasto por alumno de enseñanza primaria, frente
El análisis de los costos unitarios nos permite a 8 veces en América Latina y el Caribe y sólo
apreciar mejor las diferentes limitaciones e 4 en Asia y el Pacífico.
implicacionesfinancierasque han caracterizado Aparte de cierta inconsistencia de los datos
el desarrollo educativo en las distintas regiones. estadísticos utilizados y del mayor o menor
E n realidad, la expresión "costo unitario" es papel del gasto privado en la enseñanza, que
impropia: se debería hablar m á s bien de gasto no se ha tomado en cuenta en estos cálculos,
público por alumno. Este indicador se calcula, la amplitud de estas diferencias se explica en
en efecto, dividiendo el gasto público en educa- gran parte por causas estructurales propias
ción por el número de alumnos, tanto de las del sistema educativo de cada país, difícilmente
escuelas públicas como de las privadas. Los modificables al menos a corto plazo. Pero
costos unitarios pueden ser más elevados, pues, también es cierto que algunas opciones de
que los que aparecen el el cuadro 6, según sea política educativa pueden, en muchos casos,
la importancia del sector privado. motivar u n despilfarro considerable de los
Para facilitar el análisis comparado, se expre- recursos.
san los costos unitarios en relación con el P N B Si el nivel relativamente alto de los sueldos
por habitante. Los costos unitarios de la ense- del personal docente guarda una relación
ñanza primaria son m á s o menos del m i s m o directa con el costo de la enseñanza secundaria,

C U A D R O 6. Costos unitarios en porcentajes del P N B por habitante

Enseñanza Enseñanza Primaria y Enseñanza No


primaria secundaria secundaria superior clasificadas

Países desarrollados 1975 — — 20 47 24


1981 — — 21 48 27
Países en desarrollo 1975 10 22 13 88 18
1981 11 19 13 88 20
África 1975 13 69 20 886 29
1981 10 67 18 572 27
América Latina y el Caribe 1975 17 19 9 61 14
1981 8 12 9 67 16
Asia y el Pacífico 1975 11 20 13 60 18
1981 12 20 14 50 19

Nota: además de los países indicados en la nota 2, están excluidos los siguientes: en África, Egipto; en Asia, China, Jordania, Nepal
y Sri Lanka.
Fuente: Dépenses publiques d'éducation dans le monde. Tendances régionales et par pays, 1970-1982, Unesco, Paris, 1985.
270 Ignazio Coceo y Geraldo Nascimento

también es preciso señalar la importancia de las en costos unitarios excesivos. Pero es menester
subvenciones a los estudiantes de la enseñanza abordar asimismo la cuestión del nivel del
superior (becas de estudio y servicios sociales), gasto público en educación bajo dos aspectos
que, en algunos países africanos, superan incluso a la vez: por u n lado, la prioridad concedida
la masa salarial del personal docente. Se trata, a la educación con relación a otros sectores
en este caso, de opciones políticas m á s o menos financiados por el estado, y, por el otro, la
justificadas que, en periodo de restricción pre- distribución de los recursos disponibles entre
supuestaria cuando menos, pueden y deben los diferentes tipos de enseñanza. C o m o la edu-
revisarse. Observamos, por lo demás, a este cación absorbe una parte generalmente m u y
respecto que los costos unitarios de la enseñanza importante de los fondos públicos, podría darse
superior en África han descendido apreciable- un cuestionamiento del papel del estado en la
mente entre 1975 y 1981. financiación de los servicios educativos. Si esto
E n América Latina y el Caribe, la sensible puede justificarse en parte para algunas formas
disminución (del 19% al 12%) del gasto público de enseñanza, costosas y reservadas en realidad
por alumno en la enseñanza secundaria guarda a las capas m á s favorecidas de la población,
relación, sin duda, c o m o antes señalábamos, hay que preguntarse en cambio sobre su opor-
con la "privatización" de este tipo de enseñanza tunidad en el caso de la enseñanza básica, prin-
y, al m i s m o tiempo, con la reducción de las cipalmente en los países que aún están lejos
subvenciones concedidas a las escuelas priva- de haber alcanzado la escolarización universal.
das. Estas dos tendencias podrían parcialmente Por otra parte, es difícil concluir que la apor-
atribuirse a la crisis económica. Advertimos, tación del estado en la financiación de la
no obstante, que los recursos públicos por educación deba reducirse cuando uno se para
estudiante de la enseñanza superior han a u m e n - a considerar la cuantía de las inversiones mili-
tado ligeramente. tares en algunos países. •
Si, en el caso de África, parece necesaria y
deseable la disminución de los costos unitarios
de las enseñanzas secundaria y superior, en
América Latina y el Caribe la baja de los costos
en la enseñanza secundaria podría acarrear un Notas
deterioro de la calidad de la enseñanza.
E n Asia y el Pacífico no se registró ningún 1. Ruth Leger Sivard, World military and social expendi-
tures 198;, Washington, World Priorities, 1985.
cambio importante en los costos unitarios
2. Las informaciones ofrecidas en el cuadro 1 provienen
durante el periodo que nos ocupa, aparte de de los datos reales, así c o m o de las estimaciones,
un ligero descenso en lo que atañe a la enseñanza relativos à 156 países. L o s países no incluidos son,
superior. Si tenemos en cuenta el importante en África, Africa del Sur, y, en Asia, K a m p u c h e a
desarrollo de la escolarización en esta región Democrática, República Popular Democrática de Corea,
República Democrática Popular Lao, Líbano, Mongolia
y el nivel relativamente bajo todavía del
y Vietnam.
esfuerzo público, a primera vista no parece 3. Otro indicador importante es la relación entre los
que el gasto en educación haya resultado afec- gastos en educación y el gasto público total. Su análisis
tado por este periodo de crisis. conduce m á s o menos a las mismas conclusiones que
Estas pocas cifras dan una idea general el análisis del porcentaje con relación al P N B . A título
informativo, el gasto de funcionamiento correspon-
acerca de la evolución reciente del gasto público diente a la educación c o m o porcentaje del presupuesto
en educación y de las principales diferencias de funcionamiento del estado representa, por término
que existen a este respecto entre determinados medio, un 23 % en África, un 18 % en América Latina
grupos de países. E n tiempos de restricción y el Caribe y un 14% en Asia y el Pacífico.
presupuestaria, resulta indispensable aplicar 4. L o s coeficientes brutos de escolarización en la ense-
ñanza primaria y en la enseñanza secundaria se calculan
una gestión rigurosa del gasto en educación y tomando en cuenta la duración de la enseñanza en
revisar las opciones políticas que se traducen cada país. Coviene recordar que estos coeficientes
L a evolución del gasto públi

están, por definición, "sobreevaluados" en la medida


en que ponen en relación el número de alumnos matri-
culados, sea cual sea la edad de estos, y la población de
un grupo de edad determinado con arreglo a la dura-
ción de la escolaridad.

Bibliografía
U N E S C O . Dépenses publiques d'éducation dans le monde:
tendances régionales et par pays, 1970-1982. Paris,
Unesco, 1985.
. Anuario estadístico 1985. París, Unesco, 1985.
El bilingüismo en China*
Yan Xuequn

China es u n país socialista unificado, multina-


cional y multilingue, con 55 nacionalidades m i - Tipología del bilingüismo
noritarias que soponen aproximadamente el
6% de la totalidad de la población y están dise- El primero es el de aquellas nacionalidades
minadas en grandes distritos que cubren más minoritarias que utilizan tanto su lengua nacio-
del 50% de la superficie total del país. Se estima nal como el chino, situación que depende en
que esas 55 nacionalidades tienen 84 lenguas gran medida del lugar de residencia. E n gene-
habladas y 27 lenguas escritas. Las zonas en ral, el empleo del chino es más frecuente entre
las que viven las nacionalidades minoritarias en las nacionalidades que viven en el interior que
comunidades homogéneas y aquéllas habitadas entre las que habitan zonas fronterizas. Si toma-
por diversas nacionalidades minoritarias son m o s c o m o ejemplo las nacionalidades zhuang,
casi siempre colindantes o bien se entremezclan. dong, buyi, bai y naxi, no sólo los sectores culti-
Aveces esas poblaciones se encuentran más dis- vados de la población dominan el chino además
persas. Así, la utilización de las diversas len- de sus lenguas nacionales, sino que también lo
guas habladas y escritas presenta una panorá- hablan muchos trabajadores y campesinos. Si
mica sumamente compleja. L a Constitución de se comparan las zonas en que conviven diversas
la República Popular de China estipula que nacionalidades minoritarias con otras en las
todas las nacionalidades minoritarias tienen que éstas constituyen comunidades homogé-
pleno derecho a usar sus propias lenguas neas, el número de personas que hablan chino
habladas y escritas, y para garantizar ese dere- es mayor en las primeras que en las segundas.
cho, se han elaborado distintos planes y adop- Por ejemplo, la mayoría de la población Yi
tado diversas medidas. L a mayor parte de esas que habita en comunidades homogéneas las
minorías tienen su propia lengua, que es el zonas montañosas de Liang shan únicamente
medio de comunicación diaria, pero la nacio- conoce su lengua, en tanto que buena parte de la
nalidad H a n , cuya economía y cultura están población Yi que convive con los Hans en las
más avanzadas, constituye la mayoría de la provincias de Yunnan, Guizhou y Guangxi,
población total y se encuentra repartida por domina el chino. E n cuanto a los D o n g que
todo el país, por lo que todas las nacionalidades
minoritarias utilizan el chino en mayor o
* A la largo de este artículo, cada vez que el autor alude j
menor grado. E n general, el monolingüismo
al idioma chino, se refiere a la forma normalizada escrita '•.
predomina actualmente entre las nacionalidades con caracteres cuadrados que utiliza sobre todo la
minoritarias, pero está cobrando gran auge el población H a n , y a la forma oral que se conoce habitual-
bilingüismo, esto es, la utilización del chino mente en Occidente c o m o mandarín (en China recibe
además de sus lenguas maternas. Las situa- la denominación de Han yu o lengua de los H a n , asi ;
c o m o pu tong hua o lengua corriente).
tiones pueden clasificarse, grosso modo, en
El presente texto se ha redactado a partir de u n a
cuatro tipos. ponencia que se presentó e n u n simposio organizado
por la Oficina Regional de la U n e s c o para África,
B R E D A , con sede en Dakar, el Simposio Regional de la
Unesco sobre M é t o d o s de Enseñanza y Programas de
Formación de Personal Docente en el U s o de las L e n -
guas Nacionales y Programas de Formación de Maestros
Y a n X u e q u n (República Popular de China). Profesor en el E m p l e o de las Lenguas Nacionales y Maternas
del Instituto Central Meridional para las Minorías en la Enseñanza y la Cultura (Nairobi, 28 de m a y o - i de
Nacionales, Wuhan. junio de 1985). [Nota de la redacción.]

Persptctivas, vol.X V I , n.» 2,1986


274 Yan Xuequn

conviven con los H a n , son muchos los que nan la lengua dai, y son m u y numerosos los
conocen su lengua nacional y el chino, siendo H a n de Tongbiguan, distrito de Yingjiang, que
m á s abundantes en las zonas septentrionales que conocen el idioma jingpo.
en las meridionales. Debido al prolongado y L a cuarta situación es la de las nacionalidades
frecuente contacto con las H a n , cada vez es que tienen dos o más idiomas hablados simultá-
mayor el número de personas de algunas nacio- neamente por algunos de sus miembros. Por
nalidades minoritarias que dominan tanto su ejemplo, los yugu hablan el yugu oriental o el
lengua nacional como el chino. El bilingüismo, occidental, y una minoría conoce los dos. Los
por ejemplo, es m u y frecuente en la actualidad jingpo hablan tanto el jingpo como el zaiwa; por
entre los jóvenes de las poblaciones M a o n a n y lo general, la comunidad jingpo utiliza el
Mulao. L a situación es distinta entre los gelao, jingpo y la comunidad zaiwa, el zaiwa, pero
la mayoría de los cuales han pasado a utilizar el hay personas de una u otra comunidad que
chino, en tanto que una minoría sigue hablando conocen los dos. E n muchas familias los padres
la lengua gelao entre ellos y recurren al chino pertenecen a comunidades distintas y, por con-
cuando trata con los H a n . siguiente, todos los miembros de la familia ha-
La segunda situación es la de algunas nacio- blan las dos lenguas. Además, las situaciones de
nalidades minoritarias que conocen su propia bilingüismo varían en algunas nacionalidades en
lengua nacional y la de otra nacionalidad mino- función del medio ambiente, y se emplean
ritaria vecina. E n algunas regiones de China, diversas lenguas distintas además de la propia.
ciertas nacionalidades están diseminadas en Los pueblos dawoer y ewenke viven en la R e -
zonas m u y extensas y ejercen mayor influencia gión Autónoma de Mongolia Interior. Los indi-
que otras, por lo que sus lenguas son habladas viduos de una u otra nacionalidad que habitan
también por algunas nacionalidades vecinas en las zonas de pastoreo emplean habitualmente
con una población menor. Así, al sur de Y u n - el idioma mongol además del suyo, en tanto que
nan, los dai tienen la mayor población de todas los que viven en las ciudades o en las proximi-
las nacionalidades minoritarias de la región y dades de los H a n suelen emplear el chino.
viven en comunidades homogéneas. Muchas Algunos mongoles residentes en la provincia de
personas pertenecientes a las nacionalidades Qinghai conocen el tibetano, mientras que otros,
próximas jingpo, achang, lahu, w a , banglong y que residen en Xinjiang, hablan las lenguas
bulang conocen también la lengua dai, además uighur o kawakh. Los gelao próximos a los yi,
de sus propias lenguas. E n Xinjiang tiene amplia en la provincia de Guizhou, utilizan la lengua
difusión la lengua uighur, por lo que muchas yi, y en tanto que los gelao de Guangxi, que
personas de nacionalidad kazakh, mongola, conviven con las nacionalidades zhuang y he
khalkhas y xibo la hablan también. L a mayor miao, hablan el zhuang o el miao.
parte de las poblaciones m e n b a y luoba de la E n la Constitución de la República Popular
región del Tibet conocen igualmente la lengua de China se afirma que cada nacionalidad es
tibetana, que se utiliza en la enseñanza primaria. libre de usar y fomentar su propia lengua. El
L a tercera situación es la de la población H a n gobierno ha adoptado una serie de medidas para
que vive en regiones de nacionalidades mino- que ese derecho sea efectivo:
ritarias y que emplea tanto el chino como las Los organismos nacionales autónomos de cual-
lenguas propias de esa nacionalidades. Por ejem- quier rango deben usar en el ejercicio de sus
plo, los H a n del distrito de Lixian de la Prefec- funciones una o varias de las lenguas habladas
tura Autónoma Tibetana de Aba, provincia de y escritas de gran difusión entre las naciona-
Sichuan, llevan viviendo entre la población lidades locales.
tibetana y qiang desde antes de la liberación Siempre que se precise una traducción, hay que
(1949) y hablan, por tanto, el chino y el tibe- disponer de intérpretes o de textos traducidos
tano. Muchos habitantes H a n de las proximi- a las lenguas de las nacionalidades minori-
dades de Mangshi, provincia de Yunnan, domi- | tarias.
El bilingüismo

Se han realizado estudios de las lenguas de las


nacionalidades minoritarias para ayudarlas a EL MODELO DE MONGOLIA INTERIOR
crear o reformar su lengua escrita.
Se publican diarios, revistas y libros en las len- Se ha instaurado aquí u n sistema de educación
guas de las nacionalidades minoritarias. nacional relativamente completo que abarca las
Se han empezado a difundir programas de radio escuelas primarias, las de enseñanza media y
en las lenguas de las nacionalidades minori- algunas facultades de las universidades, en el
tarias. que el mongol es la lengua de enseñanza. L a
E n la enseñanza escolar o en las actividades de enseñanza bilingüe se practica en escuelas en las
alfabetización se emplean libros de texto escri- que la lengua de enseñanza es el mongol, por
tos en las lenguas de las nacionalidades mino- tratarse de la lengua materna de los alumnos.
ritarias. Ahora bien, para los niños de las ciudades de
Al personal administrativo de nacionalidad H a n Huhhot y de Turnóte, que únicamente hablan
que trabaja en las regiones habitadas por chino, la Región Autónoma de Mongolia ha
nacionalidades minoritarias se le ha dado faci- introducido la enseñanza en mongol en los tres
lidades para aprender las lenguas locales, así primeros años de la enseñanza primaria, tras
c o m o a los pertenecientes a esas nacionali- los cuales pasan a recibir una educación bi-
dades para aprender el chino. lingüe en mongol y chino.

Las enseñanzas bilingües EL MODELO TIBETANO

L a enseñanza de lenguas en las regiones de El tibetano, que es la lengua materna de los


China pobladas por nacionalidades minoritarias niños, se utiliza en la enseñanza en las escuelas
se ajusta a varios modelos. primarias, y el chino se enseña del 4 . 0 al 6.° curso.
L a enseñanza secundaria dura siete años, el pri-
mero de los cuales se dedica a iniciar a los
EL MODELO DE YANBIAN alumnos en el chino para que puedan recibir
toda la enseñanza en esa lengua durante el
E n la Prefectura Autónoma Coreana de Yanbian segundo año, que equivale al primer curso de
se ha instaurado u n sistema nacional completo las escuelas ordinarias de enseñanza media. L a
de enseñanza, que empieza en los jardines de lengua tibetana se enseña en todos los cursos, y
infantes, continúa en las escuelas primarias e la transición a la enseñanza bilingüe se efectúa
institutos de enseñanza media y llega hasta las en los primeros años, alcanzando su plenitud en
universidades y colegios mayores. Para la ense- todos los años siguientes.
ñanza se emplea el coreano, que es la lengua
materna de los alumnos. Asimismo se presta
atención a la enseñanza del chino, para lograr EL MODELO DE XINJIANG
una "educación bilingüe". Cuando en 1952 se
creó esa Prefectura Autónoma, en el Reglamento Muchas personas pertenecientes a las nacionali-
del Gobierno Popular se estipuló expresamente dades minoritarias que viven en U r u m q i , Yili,
que éste debía servirse de la lengua coreana Tacheng y algunas otras zonas de Xinjiang
como medio principal en el ejercicio de sus fun- meridional dominan el chino. El uighur, el
ciones, sin abandonar por ello el chino. Así pues, kazakh y otros idiomas nacionales (lenguas m a -
tanto el coreano c o m o el chino son lenguas ofi- ternas de los alumnos) se utilizan c o m o lengua
ciales de la Prefectura Autónoma de Yanbian y, de enseñanza en las escuelas primarias, en las de
desde entonces, viene practicándose el bilin- enseñanza media y en algunas universidades y
güismo. colegios mayores. Al mismo tiempo se fomenta
276 Yan Xuequn

la enseñanza del chino en las escuelas de todos nacionalidad zhuang de Guanxi, en tanto que la
los niveles. Actualmente, además de los cursos Oficina de Educación de Liang Shan ha e m p e -
de lengua china que se imparten en las escuelas zado a elaborar los planes de enseñanza de len-
primarias de Xinjiang, se han creado cursos gua yi para las escuelas primarias y los primeros
preparatorios preuniversitarios de chino en los cursos de las de enseñanza media. C o n carácter
establecimientos de enseñanza superior para in- de prueba se ha realizado u n "programa de
tensificar el estudio de esa lengua por parte de enseñanza de la lengua dai en las escuelas pri-
los estudiantes de nacionalidades minoritarias y marias nacionales" en la Prefectura Autónoma
contribuir así, de paso, a la educación bilingüe. de Jingpo y Dehong Dai (provincia de Yunnan).

EL M O D E L O SUDOCCIDENTAL EL M O D E L O DE LA CAMPAÑA
DE ALFABETIZACIÓN
E n las provincias meridionales y sudoccidentales
de China, es frecuente que diversas nacionali- Este es el modelo que se aplica cuando una
dades vivan juntas o en comunidades h o m o - nacionalidad que no tiene un idioma nacional
géneas entremezcladas, debido a lo cual el chino c o m ú n proyecta utilizar una lengua nacional
tiene una amplia difusión en la mayoría de las c o m ú n escrita, o cuando una nacionalidad cuyos
ciudades y pueblos e incluso en las zonas rurales, dialectos presentan grandes diferencias y que
y diversas nacionalidades utilizan frecuente- carece de lengua escrita se propone crear y uti-
mente los dialectos locales del chino como medio lizar u n dialecto nacional regional y una lengua
de comunicación en sus relaciones con los escrita con miras a erradicar el analfabetismo y
miembros de otras nacionalidades en la ense- generalizar la educación o instaurar una educa-
ñanza primaria. Se ha ido produciendo una ción bilingüe. Así, por ejemplo, la lengua yi
transición gradual de la enseñanza prioritaria tiene seis dialectos y docenas de variantes lo-
del chino a la de distintas lenguas nacionales. cales; la nacionalidad yao tiene tres lenguas
E n el primer año de la escuela primaria única- diferentes, cada una de ellas con diversos dia-
mente se enseñan éstas, y, a partir del segundo lectos, m á s las variantes locales. Todas estas
año de la escuela primaria c o m ú n se utilizan situaciones deben estudiarse m á s a fondo para
libros de texto en chino. Todos los institutos de resolver los problemas que plantea la educación
enseñanza media tienen u n alumnado integrado bilingüe de esas nacionalidades.
por diversas nacionalidades y, por consiguiente, Las formas que adopta la educación son
todas las asignaturas se enseñan en chino, con múltiples, y sus efectos, desiguales. Debido a
excepción de unas cuantas escuelas medias na- ello, surgen frecuentemente defectos o insufi-
cionales o de escuelas normales en las que se ciencias. Los problemas incesantes de los alum-
enseña una determinada lengua nacional como nos de nacionalidades minoritarias que apren-
asignatura independiente. Las autoridades de den chino son la mala pronunciación, la expre-
educación de la Región Autónoma de Guangxi sión incorrecta y las faltas gramaticales y de
Zhuang y la Oficina de Educación de la Prefec- lógica al redactar. Estos problemas obedecen
tura de Liangshan (provincia de Sichuan), tras fundamentalmente a interferencias lingüísticas
haber abandonado el sistema unitario de en- y a los hábitos propios de sus lenguas maternas.
señanza del chino en las escuelas primarias que Cada idioma tiene sus propias peculiaridades,
se seguía antaño, han hecho grandes esfuerzos y sus tres elementos principales, la pronuncia-
por dar mayor auge a las lenguas nacionales y ción, la gramática y el vocabulario, forman todos
han instaurado u n nuevo sistema de enseñanza ellos parte de u n sistema coherente difícilmente
bilingüe. Está previsto hoy día que la lengua trasladable. E n general, la mala pronunciación
zhuang se utilice hacia 1990 en la enseñanza en provoca faltas tales c o m o la sustitución, la
todas las escuelas primarias de las regiones de superposición, la confusión y las alteraciones de
El bilingüismo en China 277

la elocución. E n la lengua uighur, por ejemplo, intermedios y a la semántica y la estilística en


no hay diferenciación de tonos, pero sí acen- los cursos superiores.
tuación, de m o d o que ésta suele sustituir a
aquélla. E n el idioma mongol tampoco existe
la diferenciación de tonos, por lo que cuando Las investigaciones necesarias
los estudiantes mongoles aprenden chino, pro-
nuncian la palabra china gujià (esqueleto) c o m o Entre el chino y todas las lenguas de las nacio-
gùjià (evaluación), jieshi (explicar) c o m o jiéshi
nalidades minoritarias existen diferencias en el
(sólido) y mai (comprar) c o m o mai (vender). sistema fonético, la sintaxis, el vocabulario, la
Asimismo, cuando los jiarong leen los caracteres morfología, la retórica y el orden de las palabras.
chinos, pronuncian las consonantes simples Es necesario efectuar u n estudio comparativo
como consonantes compuestas, por ejemplo, que aclare las similitudes y las diferencias que
ckéngdu (capital provincial de Sichuan) c o m o presentan entre sí, sin olvidar las características
chéng ndu, o bien agregan u nfinalconsonantico comunes de las distintas lenguas, así c o m o los
a una vocalfinal,y así bèimu (bulbo de fritilaria) rasgos distintivos de cada una de ellas. Por
se convierte en bèimuk. A d e m á s , en la lengua yi
consiguiente, debe prestarse atención a los aná-
de Guizhou n o existen consonantes nasales lisis y estudios comparados de los idiomas y
finales, por lo que cuando los estudiantes yi deberían llevarse a cabo las siguientes inves-
aprenden chino no distinguen entre gonggong tigaciones:
(suegro de la mujer) y gugu (tía paterna). E n U n a descripción de la función de comunicación
el idioma buyi no existen los sonidos aspirados, de las distintas lenguas a cargo de especia-
lo que impide distinguir entre bizi (nariz) y listas en lingüística, con el objeto de fomentar
pizi (cuero). Podríamos añadir otros ejemplos. descripciones m á s precisas, sistemáticas y
E n lo que respecta al orden de las palabras, completas en los libros de texto bilingües y
cuando los estudiantes shuang y tong aprenden darles mayor difusión.
a hablar chino, todos ellos pronuncian honghua Estudios de psicolingüística en los que se pon-
(flor roja) como huahong (manzana silvestre gan de manifiesto las características princi-
china con hojas de pera), en tanto que los pales de la adquisición de la primera y la
estudiantes mongoles dicen vofàn chi (alimentos segunda lengua por parte de los niños y, en
ingiero) en lugar de wo chi fan (ingiero alimen- particular, el aprendizaje espontáneo de la
tos). Los qiang de la Prefectura Autónoma lengua por los niños migrantes.
Tibetana de A b a (provincia de Sichuan) y los Investigaciones psico-sociológicas en las que se
jiarong, siguiendo la norma de sus lenguas m a - examinen los fenómenos de aculturación, en-
ternas, suelen hablar chino de una manera culturación y deculturación, sobre todo en lo
deformada. relativo a los contractos o las contradicciones
Pero, c ó m o explicar hasta qué punto en la entre las lenguas escritas y las lenguas orales.
vida real las nacionalidades minoritarias tienden U n a investigación sociolingüística de las lenguas
a trasladar al chino las características de pro- principales en relación con las lenguas se-
nunciación, gramática y vocabulario de sus cundarias y dependientes o aquéllas que están
lenguas maternas. Evidentemente, es inevitable en vías de desaparición.
que sufran esa interferencia lingüística al apren- U n a investigación de los requisitos culturales
der chino. Nuestra labor consiste en tratar de previos de los distintos idiomas, las varia-
reducirla y eliminarla, analizando su origen y ciones geográficas y sociales de los mismos y
hallando el m o d o de corregirla. E n términos el desarrollo del lenguaje de los distintos
generales, la interferencia lingüística que se niveles de edad en los diversos sistemas
produce en el aprendizaje del chino parece lingüísticos.
afectar sobre todo a la pronunciación en los U n estudio sobre los efectos de los distintos
cursos inferiores, a la gramática en los cursos modelos aplicados en los programas de en-
278 Yan

señanza bilingüe que fomente la investigación coexistencia de todas las nacionalidades que
intercultural en materia de lingüística c o m - constituyen el país. Pero una sola lengua na-
parada. cional no basta, en la fase actual de desarrollo,
Actividades encaminadas a mejorar los métodos para ningún país o nacionalidad del m u n d o .
de enseñanza bilingüe, y estudios sobre la Es importante dejar que las lenguas nacionales
utilización del lenguaje técnico en la ense- se desarrollen libremente, pero el bilingüismo
ñanza multilingue y sobre el proceso de es la tendencia del m u n d o de nuestros días.
transmisión de la aptitud para la lectura de China cuenta con múltiples nacionalidades dis-
una lengua a otra. persas en vastas zonas de su territorio. E n la
Elaboración de una descripción general de la mayoría de esas regiones conviven distintas
lengua que se va a enseñar, así como de libros nacionalidades, en tanto que, en otras, los indi-
de texto, diccionarios y una serie de métodos viduos de una misma nacionalidad viven en
pedagógicos adecuados. comunidades homogéneas. Debido a ello, las
L a situación en China es bastante complicada situaciones de bilingüismo que se han ido ori-
en lo que respecta a las nacionalidades minori- ginando históricamente ofrecen una panorámica
tarias, ya que no sólo hay grandes diferencias intrincada y compleja. Para poder desarrollar
de población de unas y otras, sino también de la educación nacional, elevar el nivel de la
desarrollo socioeconómico. Por ejemplo, los ciencia y de la cultura y continuar la tarea de
mongoles, uighur, tibetanos y coreanos repre- reconstrucción necesaria para alcanzar las cua-
sentan poblaciones bastante numerosas que han tro modernizaciones, es preciso que puedan
utilizado sus propias lenguas nacionales durante utilizarse a la vez las lenguas nacionales y el
siglos. Los planteamientos y métodos para resol- chino. L a diversidad y pluralidad de idiomas
ver los problemas del bilingüismo en esas nacio- se consideran en China como u n tesoro. El
nalidades han de ser m u y distintos a los e m - bilingüismo puede obedecer a razones políticas
pleados para nacionalidades m u c h o menos n u - o sociales como las guerras, las migraciones
merosas, c o m o los achang, benglong y dulong, o el exilio, o pueden deberse a migraciones
que carecen de una lengua escrita propia. L a internas provocadas por catástrofes naturales
situación de los dai, jingpo, lisu, lahu, w a , hani como terremotos, epidemias o hambre, o bien
y yi es distinta de la de los zhuang, tong, miao puede estar condicionado geográficamente en
e yso. H a y que atender especialmente a aquéllas zonas extremadamente frías en las que la
nacionalidades que tienen únicamente una len- población se encuentra m u y dispersa. Ahora
gua hablada y que no conocen el chino, y el bien, necesitamos "la unidad en la diversidad".
primer paso para ello parece ser la elaboración Nuestro objetivo es que el Estado adopte una
de u n alfabeto o de símbolos fonéticos que legislación en materia de educación bilingüe que
puedan utilizarse para la alfabetización o la garantice u n rápido desarrollo de la educación
enseñanza de la lengua en la primera fase de la entre las nacionalidades minoritarias, gracias
enseñanza primaria, c o m o preparación para a u n intenso fomento de la enseñanza bilingüe,
llevar a cabo estudios m á s detallados sobre el que ponga fin cuanto antes a las limitaciones del
problema que plantea la difusión del bilin- actual sistema nacional de educación por medio
güismo. de unas leyes efectivas. Confiamos en que esas
leyes serán elaboradas conjuntamente por la
Comisión de Nacionalidades y la Comisión de
L a Constitución de China garantiza el uso de Legislación del Congreso Nacional Popular y
las lenguas maternas a las diversas nacionali- que se presentarán al Comité Permanente del
dades minoritarias. Se han formulado políticas Congreso para que las examine, apruebe, pro-
y adoptado medidas para solucionar los conflic- mulgue y haga cumplir.
tos que provocan las diferencias de lenguas y
evitar una asimilación nacional forzada, dando H o y en día que las situaciones de bilingüismo
a todos el mismo trato y preservando la amistosa son tan frecuentes en China y tanto el chino
El bilingüismo

como las lenguas nacionales se utilizan en la


comunicación y en las actividades educativas,
es imperioso realizar estudios comparados de
las lenguas nacionales y del chino para deter-
minar lo que tienen de c o m ú n en sus medios
de expresión, así como las particularidades de
cada una. Gracias a ello, la lingüística compa-
rada experimentará u n gran avance en China.
Es preciso, asimismo, tener en cuenta que la
lingüística comparada en China es una disciplina
que se ocupa de las similitudes y las diferencias
de pronunciación, vocabulario, gramática y re-
tórica entre distintas lenguas, y de las teorías y
los métodos para compararlas. H o y por hoy,
la investigación debería centrarse en las formas
contemporáneas de las lenguas nacionales y del
chino, así como en sus relaciones de intercam-
bio, interferencia y reciprocidad. Evidente-
mente, también pueden efectuarse estudios para
comparar las lenguas nacionales de China y
los idiomas extranjeros. E n nuestros días, la
transmisión de informaciones entre distintos
grupos lingüísticos se ha convertido en un fac-
tor esencial del desarrollo de las fuerzas sociales
productivas. L a lengua es también u n recurso
social. El empleo de las lenguas ha ido cobrando
mayor auge. L a relación entre la lingüística y
la vida social, así c o m o la ciencia y la tecnología,
se estrecha cada vez más. Por ello es vital para
nosotros dar u n mayor impulso a la lingüística
comparada en China. •

Bibliografía
M A X U E L I A N G , D A I Q I N G S H A . Several problems in the bilin-
gual research of China's nationality regions.
U N E S C O . Simposio de la reunión de expertos sobre la ense-
ñanza de los idiomas en un contexto bilingüe o plurilingüe
y multicultural. 1977.
SOCIEDAD PARA LA ENSEÑANZA DEL CHINO DEL INSTITUTO
PARA LAS MINORÍAS NACIONALES. Simposio de la Cuarta
Conferencia Académica.
Y A N X U E Q U N . An introduction to China's contrastive
linguistics.
Revista de Perfiles de educadores
BOUTROS EL-BOUSTANY

publicaciones (1819-1883)

D o m i n a d o por los turcos desde comienzos del


siglo xvi, el M e d i o Oriente registra u n verdadero
Renacimiento cultural a partir de mediados del xix,
pese a los acontecimientos que durante dicho periodo
le trastornan.1 Este Renacimiento prospera a favor
de las relaciones comerciales, políticas y culturales
entre Oriente y Occidente, que sin duda habían
sido entabladas m u c h o tiempo antes de esa fecha
pero que no dan verdaderamente sus frutos hasta
el siglo pasado.
Los precursores del Renacimiento cultural busca-
ban antes que nada el fomento de la lengua nacional
árabe, durante m u c h o tiempo desatendida por los
turcos, haciéndola apta para transmitir los nuevos
saberes en que se fundaba el progreso técnico y social
de los países europeos. Esta voluntad de transmitir
tales conocimientos a sus pueblos inclinó natural-
mente a los precursores a conceder a los problemas
de la educación u n lugar privilegiado en sus activi-
dades, convencidos c o m o estaban de que el progreso
de los pueblos de Oriente M e d i o dependería en
amplia medida del grado de educación de sus
ciudadanos.
Entre los precursores que se consagraron a los
problemas de la educación figura Boutros El-Bous-
tany, llamado con toda justicia Maestro y Padre del
Renacimiento.2 A u n q u e no dejó obras específicas
con la exposición de su pensamiento pedagógico,
éste se halla presente no obstante en la mayoría
de sus publicaciones que tratan de la educación
tradicional dispensada por la escuela tanto c o m o de
la educación difusa que deparan las lecturas, los
viajes o las asociaciones especializadas. A partir de
estas ideas dispersas, no parece imposible reconsti-
tuir el pensamiento pedagógico de Boustany, con
harta frecuencia desdeñado por los investigadores,
que no han retenido m á s que los aspectos patriótico,
político, social y científico de su obra.3

LUGAR DE LA EDUCACIÓN
EN LA OBRA DE BOUSTANY

El problema de la educación domina la obra de


Boustany. L a educación es el instrumento por exce-
lencia para formar el espíritu del hombre y librarle
de "la ignorancia, causa de todos los males que cun-
den en Oriente".4 Es el medio en virtud del cual se
infunde la unión en las almas jóvenes a fin de desa-
rrollarlas y prepararlas para formar una nación uni-
ficada, fundada en principios sólidos que resistan a
las pasiones confensionales.6 E s , por último, el único

Perspectivas, vol. X V I , n." 2, 1986


282 Revista de publicaciones

medio que se conoce para combatir el feudalismo6 hombre sea "ilustrado" acerca de todos los principios
y efectuar pacíficamente cambios técnicos y políticos que cimentan una nación fuerte y digna, y esto no
en la sociedad.7 "El Maestro Boutros", escribe M i - puede hacerse sin la educación, que, c o m o vemos,
chail Sawaya, "no hizo en toda su vida otra cosa que es parte indisoluble de la teoría social de Boustany.
responder a una voz interior que le repetía: tú has
nacido en este siglo para efectuar reformas, para EL PENSAMIENTO PEDAGÓGICO
construir y para dar".8 Reforma, construcción y don DE BOUSTANY
confluían para él en la enseñanza, lo único que podía
contribuir a reformar la sociedad. Para exponer su pensamiento, el autor no utilizaba
uno, sino varios términos, según las circunstancias o
FUENTES DEL PENSAMIENTO PEDAGÓGICO los matices que quería expresar. Así, cuando hablaba
DE BOUSTANY de la educación del hombre en general, empleaba
el término Ta'alim, que significa enseñanza,13 pero
N o se puede captar con cierta precisión el pensa- cuando se dirigía a la nación para exhortarla a
miento de u n hombre si no conocemos el contexto ensanchar el campo de su saber, empleaba o bien
social, político y cultural en que ha vivido y escrito. el término Tahsil-el-'Ulüm (aprendizaje de las cien-
Por ello nos parece conveniente, antes de abordar cias) o bien el término Tastif (cultura). Y cuando se
el análisis del pensamiento pedagógico de Boustany, dirigía a la minoría culta solía emplear la expresión
recordar que el siglo xix, en Oriente, fue pródigo en Nachr~el-ma'ärif (difundir el saber).14 Pero por todos
acontecimientos que trastornaron las estructuras estos términos y fórmulas, empleados por él en
sociales, políticas, culturales y económicas. distintas ocasiones, no entendía m á s que una sola
Boustany se hizo esta pregunta: ¿por qué los ciuda- cosa: formar al ciudadano. El término Tarbiya, que
danos de u n m i s m o país "que beben la misma agua, significa "educación o pedagogía", jamás lo emplea
respiran el m i s m o aire y hablan la m i s m a lengua se Boustany en otro sentido que no sea el de indicar la
matan y destruyen entre sí"?8 Según él, la causa de actividad ejercida por los padres para educar a sus
todos estos males era la ignorancia, fuente de discor- hijos en familia.16 D e esta manera, su pensamiento
dia y de fanatismo religioso, que había hecho de los pedagógico está elaborado en una terminología algo
ciudadanos u n "juguete fácil" en manos de los diferente de la que prevalece en nuestros días.
extranjeros que buscaban el m o d o de desarticular a
la nación para infiltrarse en ella.10 D e ahí la necesidad Necesidad de la educación
de instruir a los ciudadanos para poner fin a las L a educación le es necesaria al hombre, puesto
discordias y fundar una nación fuerte gracias a su que "todo ser h u m a n o , desde que viene al m u n d o ,
propia unión. 11 depende enteramente de los cuidados de los demás.
D e esta suerte, el pensamiento pedagógico de Este ser no puede satisfacer sus necesidades ni
Boustany es el fruto de una meditación sobre la comprender lo que sucede a su alrededor sin el
situación general del país y descansa en una concep- concurso de los otros. N o puede en m o d o alguno
ción nacionalista y social que elaboró a lo largo discernir por sí solo lo que le es útil y lo que le es
de toda su vida. perjudicial. Si en ese primer estado al ser h u m a n o
Enseñaba que el hombre es u n ser social que no se le abandonara a sí m i s m o perecería sin remedio,
puede vivir aislado, pues necesita de los demás para ya que sus fuerzas físicas son aún demasiado débiles
sobrevivir. Los hombres que viven en comunidad para soportar la dureza de la vida, y sus fuerzas
tratan siempre de formar u n gobierno para conjurar intelectuales se hallan aún en las tinieblas para poder
los peligros externos e internos. El gobierno es ele- guiar sus pasos".16
gido por el pueblo y debe ponerse al servicio de éste. Se trata, en otras palabras, de la socialización del
El gobierno extrae su fuerza del "espíritu del siglo" niño. Pero esta socialización sólo puede ser obra de la
que es el conjunto de principios por los que se rigen propia sociedad y efectuarse en el seno de la misma.
las naciones y que tienen su origen en las actividades Boustany rechaza, así, toda posibilidad para el ser
de los sabios, de los pensadores y de los dirigentes de h u m a n o de alcanzar el conocimiento por sus propios
las naciones. ¿ Y c ó m o capta el gobierno el "espíritu medios sin el concurso de la sociedad, c o m o pretende,
del siglo"? Esta tarea incumbe a los sabios, a los en el siglo xil, elfilósofoandaluz Ibn-Tofail, en su
pensadores y al pueblo m i s m o . Ahora bien, para que relatofilosóficoH a y y ben Yakzàn. 17
el pueblo pueda cumplir con este menester del que
dependen su vida y su prosperidad, necesita ser El aprendizaje
instruido.12 E n opinión de Boustany, el ser h u m a n o adquiere sus
Estas ideas constituían la base de todas las activi- conocimientos progresivamente merced a la imita-
dades sociales y nacionales de Boustany. Pensaba ción, la experiencia y el juicio. Conoce los objetos
que el fin último del hombre es fundar una nación. sensibles por medio de sus sentidos y de su intelecto,
Para que ésta viva y prospere es preciso que el establece relaciones entre los objetos percibidos por
Revista de publicaciones 283

los sentidos y forma conceptos. L a vida en sociedad el espíritu del siglo".18 Por esta fórmula, entendía
le enseña a conocer los m o d o s de la vida social a fin de todos los conocimientos acumulados y disponibles
que sepa acomodarse a ella. Este aprendizaje se de su tiempo. Y es este m i s m o enfoque, por lo
desarrolla bajo la vigilancia de la sociedad y merced demás, el que le movió a emprender su proyecto de
al esfuerzo personal que despliega cada ser h u m a n o enciclopedia.
para llevarlo a buen término. L a disposición al E n el "Discurso sobre la educación de la mujer",
aprendizaje no es la m i s m a en todos: los hay que Boustany menciona, n o obstante, los conocimientos
están m u y dispuestos a aprender mientras que otros que debe adquirir ésta. L a mujer, dice, debe conocer
lo están menos. ¿ D e dónde proviene esta diferencia? todo aquello que pueda ayudarla a cumplir su función
D e la constitución misma de la persona que hace que social con desenvoltura, haciéndola digna de una
unos se muestren m á s inclinados a adquirir las sociedad civilizada, y a continuación enumera, por
ciencias que otros; proviene también del clima: algu- este orden: la religión, la lengua materna, la lectura,
nos pueblos están m á s dotados para adquirir las la escritura, la ciencia de la educación de los hijos,
ciencias que otros; se explica, finalmente, por el las artes domésticas, la grografía, la historia y la
medio socioeconómico en que vive la persona: los aritmética.
hijos de los medios cultivados aprenden m á s fácil- Este bosquejo induce a pensar que el contenido
mente que los hijos de los medios obreros. de la educación era para él esencialmente funcional:
Tales diferencias imponen a los educadores el deber el ser h u m a n o debe aprender todo aquello que le
de realizar esfuerzos especiales para ayudar a los hace falta para desempeñar convenientemente su
menos dotados a recuperar su retraso y repartir función social.
así equitativemente las oportunidades educativas
entre todos. Los medios de aprendizaje
Los medios que facilitan el aprendizaje son m ú l -
Condiciones del aprendizaje tiples. El-Boustany los enumera del m o d o siguiente:
Se requieren algunas condiciones para que el apren- La escuela. Boustany fundó la Escuela Nacional a
dizaje de las ciencias pueda alcanzar los resultados fin de mostrar c ó m o se debe emplear este medio
esperados por la sociedad. para la adquisición de conocimientos. L a organizó
L a primera condición es la existencia de una doble apoyándose a la vez en su experiencia y en sus convic-
motivación personal y social. Si no hay motivación, ciones. Volveremos a ello m á s adelante.
al ser h u m a n o le resulta difícil aprender, puesto que Los discursos y las conferenciasfiguranentre los
las fuerzas intelectuales se hallan en estado de sueño. "grandes medios y los mejores" para la transmisión
L a inteligencia h u m a n a sólo despliega sus esfuerzos de los conocimientos. Según él, son m á s eficaces
cuando persigue u n fin determinado cuyo interés cuando se organizan periódicamente por iniciativa
procura u n placer más fuerte que el esfuerzo exigido. de clubes o de asociaciones culturales.19 El propio
T o d o aprendizaje, pues, debe guiarse por la moti- Boustany recurrió con frecuencia a este medio en el
vación. marco de las asociaciones científicas que fundó
Después de la motivación viene el esfuerzo perso- entre 1847 y 1876,20 en su Escuela Nacional, donde
nal para la adquicisión del saber. N o puede realizarse reunía a todos los alumnos una vez a la semana,
nada en la vida sin sacrificio; el qué exige la adquisi- en sesión plenaria, para darles orientaciones, y, final-
ción del saber es la renuncia a todo acto que pueda mente, en el marco de la Escuela Evangélica D o m i -
obstaculizar esta adquisición. Así, según Boustany, nical, que presidió durante 20 años y donde predicaba
no es posible conciliar saber y vicio; en cambio, todas las semanas.
saber y virtud se completan de suerte que la virtud Los medios de información, c o m o los periódicos y
es condición necesaria al ser h u m a n o para animarle revistas especializados, nacionales y extranjeros, que
a dominar el saber y perseverar en el esfuerzo. contribuyen a dar a conocer a los lectores los últi-
L a libertad, cuya función consiste en crear el m o s descubrimientos de la ciencia h u m a n a .
clima favorable para elflorecimientoy expansión de la Los viajes, por el país y fuera de él, y la correspon-
inteligencia, es también una condición necesaria para dencia con los sabios y los centros de investigación,
la adquisición del saber. Cuando la inteligencia se para mantenerse informado de los últimos descubri-
encuentra sojuzgada, el despotismo trae c o m o conse- mientos y pedir consejo, constituyen el último medio
cuencia la ignorancia, puesto que mata la motivación de aprendizaje.
y el esfuerzo.

El contenido de la enseñanza MATERIALIZACIÓN DEL PENSAMIENTO:


LA ESCUELA NACIONAL
¿Qué es lo que hay que aprender? Boustany no define
los contenidos del aprendizaje. E n diversas ocasiones, L a vida de Boustany, c o m o h e m o s visto, era m u y
en sus discursos y sus artículos, exhorta a sus conciu- fecunda en proyectos cuya finalidad era siempre
dadanos a aprender todas las "ciencias exigidas por ampliar los conocimientos de sus conciudadanos o
284 Revista de publicaciones

profundizarlos; peio su mejor proyecto en esta Esta descripción pone de relieve algunos aspectos
dirección es, con m u c h o , la "Escuela Nacional" fun- de la Escuela, pero olvida otros que también son
dada en 1863. 21 ¿Por qué esta escuela, y por qué importantes y que encontramos en el Reglamento
este nombre? interior de la Escuela elaborado por el propio Bous-
Boustany fue testigo presencial de las luchas confe- tany y cuyos puntos principales son los siguientes:26
sionales que sobrevinieron en el Bar-ech-Cham " L a Escuela no es una escuela confesional sino una
entre 1840 y i860 y que concluyeron en matanzas escuela nacional y laica, que admite alumnos de
entre cristianos, drusos y musulmanes. Conmovido diferentes confesiones y razas sin distinción ni
por estos acontecimientos que "dispersaron las fami- discriminación;
lias, desgarraron el país y lo destruyeron", en sep- " L a Escuela contrata su profesorado entre personas
tiembre de i860 dirigió u n llamamiento a los ciuda- competentes, sin tener en cuenta para nada su confe-
danos exhortándolos a "olvidar sus discordias, a des- sión, su raza o su nacionalidad;
pertarse y a unirse para realizar el interés c o m ú n "dentro de la Escuela, es total la igualdad entre los
de la nación".22 alumnos, los profesores y el director de la Escuela
A este llamamiento siguieron otros diez, destinados y su familia: comerán juntos los mismos platos a la
todos ellos a fundar una doctrina nacional para misma mesa;
apartar a sus conciudadanos de las pasiones confe- "el número de alumnos en la clase no debe exceder
sionales. U n a vez lanzados sus llamamientos, se ocupó de las capacidades del maestro;
Boustany en crear una institución que encarnara su "los programas impartidos en la Escuela deben
doctrina nacionalista. Según él, la educación debe responder al 'espíritu del siglo';
ser impartida por la nación, dejando de considerár- "la Escuela es universal y enseña en principio todas
sela u n deber de la Iglesia hacia sus fieles, c o m o las lenguas conocidas a condición de ser reclamadas
decretó el Sínodo Maronita celebrado en Louairé por seis alumnos c o m o mínimo; pero reserva a la
en 1736: es preciso separar "la Iglesia del Estado".23 lengua árabe una especial atención porque es la
L a educación será así nacional, y no comunitaria. lengua de la Patria y porque de ella depende el logro
Estaba convencido de que una Escuela era el medio de los alumnos en todos los terrenos;
m á s favorable para "sembrar el grano de la unión " L a Escuela debe disfrutar de una entera libertad
y del amor en las almas de los jóvenes que todavía y de una entera independencia."
son puras. Ese grano crecerá con esas almas jóvenes, Este reglamento hace destacar cuatro ideas maes-
y será la Nación la que coseche el fruto".24 Dio tras de Boustany.
c o m o emblema a su "Escuela Nacional" la fórmula El laicismo: la Escuela no es ya confesional sino
siguiente: "El amor a la Patria forma parte de la laica, basada en principios nacionales y accesible
Fe". L a Escuela se basaba en principios nacionales y
a todos los ciudadanos, sean alumnos o profesores;
estaba abierta a todos, sin distinción de confesión
L a igualdad entre toda la población de la Escuela:
ni de raza. E n eso diferia de las demás escuelas de
alumnos, profesores y director gozan de los mismos
aquel entonces, que eran en su mayoría comunitarias,
derechos y deben cumplir los mismos deberes;
reservadas casi en exclusiva a losfíelesde la comuni-
L a libertad y la independencia son indispensables
dad que las dirigía. Estaban, por ejemplo, las escuelas
para facilitar el aprendizaje;
de los maronitas, las de los católicos griegos, las de
El contenido de la enseñanza debe responder a las
los ortodoxos griegos, etc., además de las escuelas
de misiones extranjeras latinas, anglosajonas y eslavas necesidades reales de la Patria.
que hacían propaganda de sus países de origen. Comentando el reglamento, Youssef K . Khoury
escribía: "Boustany tenía el afán de que su escuela
E n medio de este caos escolar, Boustany describía fuera enteramente nacional, de suerte que los alumnos
así su propia realización: que la frecuentaban no se sintieran extranjeros en su
" L a Escuela Nacional —dicer—, está situada en propia Patria y sacaran provecho de la enseñanza
uno de los mejores barrios de Beirut, sus edificios se recibida en la escuela. Por otra parte, Boustany des-
cuentan entre los m á s hermosos de la ciudad y gozan plegó grandes esfuerzos para fomentar el amor a la
de u n clima sano. Está circundada de vastos terrenos, Patria en los corazones de sus alumnos a fin de que
con árboles verdeantes que hacen grato el ir y venir el día de mañana fuesenfielesa ella, dispuestos al
de los alumnos (...). sacrificio cuando se lo exigiera."27
"Las lenguas que en ella se enseñan son el árabe, Boustany se atuvo a este reglamento durante todo el
el turco, el francés, el inglés, el latín, el griego, asi periodo en que funcionó su Escuela, es decir de 1863
c o m o cualquier otra lengua conocida, siempre que lo a 1878. Asistían a la Escuela alumnos de diferentes
reclamen seis alumnos c o m o mínimo (...). confesiones, razas y nacionalidades. Se enseñaban en
" L a Escuela admite alumnos de todas las confe- ella las lenguas anteriormente mencionadas, así c o m o
siones, de todas las razas, sin distinción. Respecta las distintas ciencias entonces conocidas, a saber: la
su creencia y no obliga a nadie a abrazar otra fe que aritmética, la geometría, la historia, la geografía, el
la de sus padres."2S comercio, el derecho civil, el derecho musulmán, las
Revista de publicaciones 285

ciencias físicas, la asistencia médica. 28 L o s manuales que alumbra los espíritus para librarlos de la igno-
escolares eran redactados por el propio Boustany o por rancia, fuente de no pocos males que Oriente padece
los profesores. Estos manuales se caracterizaban por todavía hoy.
su sencillez y su claridad. A d e m á s , Boustany reunía a Khalil A B O U - R J A Ï L I
los alumnos en pleno una vez por semana para tratar Departamento de Ciencias
en debate las materias estudiadas en la escuela o para de la Educación
la orientación nacional y social. Universidad Saint Joseph
Según diversos testimonios, la Escuela alcanzó u n Beirut, Líbano
éxito considerable y se ganó el respeto de la m a y o r
parte de los hombres de su época, y ello por tres
razones:
Boustany quería que la población de su Escuela fuera
Notas
el reflejo de la Nación. L o s estudiantes, pese a la 1. Citemos, entre otras, las guerras del Jazzar, bajá de
diversidad de sus confesiones y de su educación, Acca, a comienzos del siglo; la expedición militar
habrían de ser hermanos por el hecho de pertenecer de M o h a m e d Ali, gobernador de Egipto (1830-1840);
a la m i s m a Nación. Esta diversidad no tendría la matanza de cristianos por drusos y musulmanes
influencia alguna sobre sus estudios ni sobre su (1840-1860); la insurrección campesina de Kesrowan
vida en sociedad, pues habrían de contarse entre la bajo la dirección de Tanios Chahine (1858).
élite de la Nación. 2. Boustany nació en la aldea de Debbiyé en el Chouf,
Por su competente profesorado, formado por los pre- en enero de 1819. Cursó sus estudios primarios en la
cursores del Renacimiento, que gozaban de gran escuela del pueblo donde llamó la atención de su
prestigio entre la población. maestro, el padre Michail El-Boustany, por su des-
Por el contenido de los programas de enseñanza, ins- pierta inteligencia. Este le recomendó al obispo de
pirados directamente en las necesidades reales de la Saida y de Beit-ed-dine, Abdallah El-Boustany, quien
sociedad.
le envió, a la edad de once años, a la escuela de Ain-
L a originalidad de la "Escuela Nacional" estriba en
Warqa, la más célebre de la época, para que prosiguiera
el hecho de haber sido la única basada en una doctrina
en ella sus estudios. Pasó en esta escuela diez años y
nacional de inspiración laica, en u n periodo en que las
aprendió varias lenguas extranjeras, entre ellas francés'
escuelas confesionales y extranjeras (latinas, anglosa-
italiano e inglés. E n Beirut, entró en relación con los
jonas y eslavas)florecíanen el país y descarriaban el
Misioneros Protestantes Norteamericanos, con los
espíritu de los ciudadanos con su propaganda. S u
influencia en el sistema de educación del Líbano fue que colaboró estrechamente hasta su muerte, acaecida
también considerable, ya que sirvió de modelo para la en mayo de 1883. Este periodo fue el más fecundo de
fundación de cierto n ú m e r o de escuelas nacionales su vida. E n los ámbitos social y político, fundó
frente a las escuelas confesionales y extranjeras. asociaciones con miras a constituir una elite nacio-
nal y lanzó una serie de llamamientos a la unión
Por otra parte, lo que merece aún nuestra atención en su revista Nafir Sourya. E n el terreno de la educa-
es ese conjunto de normas pedagógicas inscritas en u n ción, enseñó primero en las escuelas de los Misioneros
reglamento y que siguen siendo válidas en la educa- Protestantes, en Abey, antes de fundar su Escuela
ción de nuestros días: proporción de alumnos por Nacional sobre una base laica. Entre tanto redactó
maestro; igualdad entre el profesorado y los alumnos y publicó manuales escolares y diccionarios. E n la
a fin de crear u n ambiente de familia dentro de la esfera cultural y científica, editó una revista bimen-
escuela, y conformidad de los programas de ense- sual, dos diarios y una enciclopedia, la primera que
ñanza con las necesidades reales de la sociedad. veía la luz en lengua árabe, pero que quedó inconclusa.
Además de todas estas actividades acometió con Ali
El auténtico valor del pensamiento pedagógico de Smith, de la Misión Americana, una traducción
Boustany es, c o m o vemos, que no haya dejado de ser de la Biblia que tampoco se concluyó.
fuente de inspiración tanto para el Líbano c o m o para 3. Véase por ejemplo: Fouad Ephrem El-Boustany, Le
todos los países del Oriente árabe. U n siglo después Maître Boutros El Boustany, Serie Al-Rawäih, Beirut»
de su muerte, acaecida en 1883, los pueblos de Publications des Lettres Orientales, 1950; Michail
Oriente, y sobre todo el pueblo libanes, entienden Sawaya, Le Maître Boutros El-Boustany, Beirut, Pu-
que habrían podido evitar o superar m u c h o s de los blications de la Librairie El-Boustany, 1963; Jean Daï,
problemas en que están inmersos desde los años cin- Le Maître Boutros El-Boustany, tesis de doctorado
cuenta si hubieran permanecidofielesal pensamiento presentada en la Universidad Americana de Beirut, no
de Boustany. Siempre que se habla de reforma de la publicada.
Nación acude a la memoria el mensaje pedagógico de 4. Este es el lema de todos los autores del Renacimiento,
Boustany. T o d a reforma nacional pasa por la reforma citado por Z . K . Lyvine, La pensée sociale et politique
de la educación, c o m o tan a m e n u d o repitió Boustany moderne au Liban, en Syrie et en Egypte, traducción
en sus discursos y sus escritos: la educación es la luz árabe, Beirut, Dar Ibn Khaldoun, 1978, p. 78.
286 Revista de publicaciones

5. Michaïl Sawaya, op. cit., p. 78.


6. Loutsky, L'histoire moderne des pays arabes, octava
edición árabe, Beirut, 1985, p. 167. Reseñas
7. Z . K . Lyvine, op. cit., p . 13.
8. Michail Sawaya, op. cit., p. 33. SALIR D E L C Í R C U L O VICIOSO
9. Boutros El-Boustany, Nafir Sourya, n.° 1, 29 de NUTRICIÓN - SALUD
octubre de i860.
RENDIMIENTO ESCOLAR
10. Boutros El-Boustany, op. cit., n.° 9, 14 de enero
de 1861. James P. G R A N T
11. Ibidem. The state of the world's children 198$
12. Estas ideas aparecen expresadas en los artículos de
El-Jinan, revista fundada por El-Boustany el 1.° de Unicef, Nueva York, 1984
enero de 1870. El análisis del contenido de esta
Ronald C . ISRAEL y Joanne P. N E S T O R T I G H E
revista los debemos a Léon Zulundig, que cita
Nutrition education: the state-of-the-art review
Z . K . Lyvine, op. cit., p. 69 y 70.
and analysis of the literature
13. Véase Boutros El-Boustany, "Disours sur l'éducation
de la f e m m e " , 14 de diciembre de 1849, en Actes Serie de Educación sobre Nutrición
de l'Association Syrienne, Beirut, 1852. Unesco, París, 1984
14. Véase Boutros El-Boustany, "Discours sur les sciences
chez les Arabes" (Introducción), 15 de febrero de 1859. Odin K . K N U D S E N
15. "Discours sur l'éducation de la f e m m e " , op. cit. Economics of supplemental feeding
16. Ibidem. of malnourished children:
17. Ibn Tofail (1100-1185), sabio árabe de Andalucía, leakages, costs, and benefits
nacido en la provincia de Granada (España) y muerto W o r l d B a n k Staff W o r k i n g Paper n.° 451
en Marrakech (Marruecos). Cultivó la medicina, las Banco M u n d i a l , Washington, 1981
matemáticas, la filosofía y la poesía. Entre sus obras
filosóficas se cuenta el relatofilosóficoHayy ben Ernesto P O L L I T T
Yakzän, en el que Ibn Tofail intenta conciliar la filo- La nutrición y el rendimiento escolar
sofía con la religión. Hayy, solo en una isla deshabi-
Serie de Educación sobre Nutrición, n.° 9
tada, llega por sus propios medios y su fuerza intelec-
Unesco, París, 1984
tual a adquirir todos los conocimientos.
18. Discours sur la société et la comparaison des coutumes Abdun N00R
arabes et étrangères, Beirut, Imprenta Al-Ma'ärif, Education and basic human needs
1869.
W o r l d B a n k Staff W o r k i n g Paper n.° 450
19. "Discours sur les sciences chez les Arabes", op. cit.
Banco M u n d i a l , Washington, 1981
20. Boustany había colaborado en la fundación de tres
asociaciones científicas: la Association Syrienne (1847-
1852), la Association Scientifique Syrienne (1868) y la E n los últimos años, h a n aparecido cinco monografías
Association Secrète (1875); él era en realidad el que, consideradas en conjunto, arrojan m u c h a luz
"Padre Espiritual" de las mismas, que orientaba sus sobre esa trama urdida por los hilos de tres variables
actividades hacia fines nacionales: independencia del estrechamente relacionadas: el estado de nutrición, el
país, libertad de expresión, apertura de escuelas, etc. estado de salud y el rendimiento escolar. Colectiva-
Para estas asociaciones pronunció principalmente los m e n t e , las monografías ofrecen también u n sinfín de
discursos sobre la educación de la mujer (1849) y métodos para modificar las consecuencias frecuente-
sobre la ciencia entre los árabes (1859). m e n t e negativas q u e se derivan del entramado de
21. Véase Fouad Ephrem El-Boustany, Le Maître Boutros relaciones entre esas tres variables. E n otras palabras,
El-Boustany, Beirut, 1952 (segunda edición), p. 75 las monografías en cuestión nos ayudan a deshacer
(Serie Al Rawäi', n.° 22). una tela de araña q u e , para m u c h o s niños vulnerables,
22. Nafir Sourya, n.° 1, 29 de septiembre de i860. es en realidad una trampa funesta.
23. Nafir Sourya, n.° 10, 22 de febrero de 1861. El estudio de Ernesto Pollitt, La nutrición y el ren-
24. Véase Fouad Ephrem El-Boustany, op. cit., p. 76. dimiento escolar (1984), es u n minucioso análisis del
25. Informe escrito por El-Boustany y publicado en su grado en que la desnutrición (concomitante o anterior
revista El-Jinän, vol. IV, 1873, p. 62. a la escolarización) inhibe el aprovechamiento escolar
26. Ibidem; véase además Jean Daï, op. cit., p. 43 a 49. de u n niño. E n él se pasa revista a u n extenso surtido
27. Youssef K . Khoury, op. cit., p. 53. de trabajos de investigación en apoyo de la principal
28. Véase Michail Sawaya, op. cit., p. 37. conclusión del autor: la protección del estado de
nutrición del niño durante sus primeros años de for-
mación y de vida escolar se traducirá en una mejora de
Revista de publicaciones 287

su capacidad de estudio y en u n descenso significativo dices de abandono escolar debidos al sentimiento dé


en los coeficientes de desaprovechamiento escolar. inutilidad que provoca la educación combinado a las
El informe del Unicef de 1985, The state of the exigencias de m a n o de obra temporera infantil pueden
world's children, describe el m o d o en que se puede ser reducidos si la escolarización formal se reestructura
establecer una red de seguridad mínima que proteja de m o d o que refleje los comportamientos y aspira-
los cuerpos y las mentes en crecimiento de los niños m á s ciones de su clientela potencial.
vulnerables del m u n d o . A través de una serie de estu- Los programas de alimentación complementaria
dios de casos, se insiste en la importancia de algunas son desde hace ya tiempo u n medio bien conocido de
técnicas sencillas y de bajo costo que pueden ejercer mejorar el estado de nutrición de las mujeres embara-
una profunda influencia en el desarrollo de la capa- zadas, de las madres lactantes y de los niños en edad
cidad física, intelectual y social de todos los niños. preescolar y escolar. L a monografía de Odin Knudsen,
E n Nutrition education: state-of-the-art (1984), Economics of supplemental feeding of malnourished
Ronald C . Israel y Joanne P . Nestor Tighe examinan children: leakages, costs, and benefits (1981), analiza
estudios de casos que documentan el empleo de estra- algunos de los aspectos económicos de tales progra-
tegias de educación y comunicaciones para mejorar la m a s . D e especial pertinencia para cuantos se interesan
salud y la nutrición. C o n gran fuerza de convicción, por la relación triangular entre nutrición, salud y
sostienen los autores que la educación sobre nutrición rendimiento escolar, es una reseña de diversos estu-
debe ser considerada c o m o u n método de interven- dios que elucidan las relaciones existentes entre las
ción por derecho propio; y, en efecto, se dan ejemplos mejoras en el desarrollo cognoscitivo conseguidas m e -
de estrategias de comunicación dirigidas a las madres diante la alimentación complementaria, la participa-
que dieron c o m o resultado una mejora del estado de ción escolar y los ingresos de los adultos.
nutrición de los niños sin otras acciones complemen- Estos son los principales temas abordados en las
tarias. cinco monografías. Sin embargo, su verdadera impor-
E n Education and basic human needs (1981), A b d u n tancia radica en lo que globalmente nos enseñan
N o o r traza las líneas básicas de una estrategia para acerca de tres cuestiones clave: la índole de la relación
llegar a los casi 500 millones de seres humanos de todo triangular, los métodos para proteger a los niños
el m u n d o que hoy aparecen clasificados c o m o "los vulnerables de los efectos virtualmente perniciosos de
pobres absolutos" y que, en medida considerable, dicha relación y las implicaciones políticas del pro-
viven fuera del alcance de la educación formal. El blema. Pasemos a considerar cada una de estas cues-
procedimiento (educación básica) representa una clave tiones por separado.
para desenredar esa urdimbre en la que traman sus
hilos la salud, la educación y la escolarización, y ello
LA ÍNDOLE DE LAS RELACIONES
en dos vertientes importantes. E n primer lugar, es
NUTRICIÓN - SALUD - ESCOLARIDAD
u n plan alternativo que pone a contribución simultá-
neamente medios de la enseñanza formal clásica y de Las pruebas presentadas son bastante concluyentes:
la educación no formal para inculcar a los individuos la malnutrición precoz, grave y crónica es u n "factor
el saber, las actitudes, los valores y las competencias de riesgo educativo" (en palabras de Pollitt) y, c o m o
técnicas o profesionales que se precisan para satis- tal, se asocia con el bajo rendimiento escolar, con
facer equitativamente las necesidades humanas bási- deficiencias intelectuales, con la repetición de cursos
cas. Así, allí donde el procedimiento se pone en y con el abandono escolar. A u n q u e la malnutrición se
práctica, las madres tienen oportunidad de adquirir, a acompaña casi siempre de graves carencias sociales y
través de cauces no formales, diversos conocimientos económicas, contribuye de por sí al bajo rendimiento
relacionados con el cuidado y protección de sus hijos, escolar y a los elevados coeficientes de desaprovecha-
todo ello mediante la enseñanza interpersonal y miento de capacidades y aptitudes. L a mala salud, en
comunitaria, tanto c o m o por conducto de los medios general, también parece constituir u n fuerte factor de
de comunicación social y de transmisión popular tra- riesgo, aunque las pruebas que nos brinda la investi-
dicional. Se utilizan canales de comunicación que se gación no sean tan contundentes. Los niños vulne-
refuerzan mutuamente, lo que aumenta su eficacia, y rables que corren u n peligro mayor son aquéllos cuya
se fomentan las estructuras de apoyo requeridas para malnutrición precoz, grave y crónica se da en u n
promover el cambio en los contextos de la familia y entorno físico m u y expuesto a las enfermedades con-
de la comunidad. Así, la educación básica aumenta tagiosas y cuyo medio social no depara oportunidades
las probabilidades de que el entorno de un niño tenga de aprendizaje. Y a la inversa, los niños vulnerables
resultados positivos desde el punto de vista de la menos expuestos tienen u n historial nutricional aná-
salud, la nutrición y el aprendizaje. E n segundo lugar, logo pero posteriormente pasan a u n entorno salu-
la educación básica permite luchar contra el pro- dable donde se estimulan sus capacidades de apren-
blema del desaprovechamiento en las escuelas, ha- dizaje y se satisfacen sus necesidades básicas de
ciendo la educación m á sflexibley m á s adaptada a las carácter social y afectivo. El hecho de que este riesgo
necesidades de los m á s desfavorecidos. Los altos ín- pueda mitigarse mediante u n tratamiento parece
288 Revista de publicaciones

indicar que la malnutrition crónica no basta para miento escolar esta reducción del nivel de acti-
explicar una ulterior deficiencia educativa. L a natura- vidad; puede que los niños se protejan desarrollando
leza del entorno social también desempeña u n impor- mecanismos compensatorios durante las horas de
tante papel en la configuración del proceso de desa- clase.
rrollo de la persona y en el aprendizaje. L a contribución de K n u d s e n a este debate es
N o es preciso esperar a que nazca u n niño para especialmente importante porque nos ayuda a en-
paliar los posibles retrasos educativos derivados de la tender hasta qué punto pueden prolongarse en el
malnutrición; el estado de nutrición de la madre del tiempo las consecuencias de una mala salud y una
niño y los periodos entre dos nacimientos pueden nutrición deficiente. Cita diversos resultados de in-
también modificarse. L a investigación consultada vestigaciones para mostrar la complementariedad que
indica que los niños que nacen con peso inferior al existe entre escolarización y aptitud, en la medida en
normal (a consecuencia de la malnutrición materna) que la productividad marginal de la escolarización
se ven de cuatro a seis veces m á s expuestos a las suplementaria depende de la aptitud preescolar. S u
deficiencias mentales o físicas que los que vienen al argumento se apoya en dos estudios. Investigaciones
m u n d o con el peso normal. U n o de los estudios, por llevadas a cabo en Colombia pusieron de manifiesto
ejemplo, pone de manifiesto que aproximadamente que niños con una malnutrición entre leve y moderada
u n tercio de los niños nacidos con peso insuficiente podían mejorar sus tests de aptitud a los 43 meses de
presentaban u n desarrollo motor y u n funcionamiento edad cuando se les mejoraba la nutrición. Datos pro-
neurológico deficientes a la edad de cinco años. Todos cedentes de Chile indican que niños con desnutrición
los niños estudiados tenían, a esa m i s m a edad de grave podrían haber mejorado sus resultados en los
cinco años, unos cocientes de inteligencia más bajos tests de aptitud preescolar si la malnutrición precoz
que el grupo testigo formado por niños que nacieron (en combinación con infecciones) n o se hubiera pro-
con peso normal. Los suplementos de alimentación ducido. El ciclo está claro: la malnutrición precoz
para las madres gestantes constituyen, por supuesto, reduce la aptitud preescolar, que a su vez reduce la
uno de los medios de reducir la frecuencia de naci- aptitud del niño para el aprovechamiento escolar y la
mientos de criaturas con inferioridad de peso. Otros permanencia en la escuela. Este déficit escolar se tra-
estudios han llegado a conclusiones análogas y han duce en el adulto en una baja productividad y en
relacionado igualmente el "síndrome del niño con escasos salarios.
insuficiencia ponderal" (propensión a deficiencias
Sin embargo, el alto nivel de abandono escolar,
físicas o mentales) con los hábitos de procreación de
c o m o varios de los autores indican, n o pueden tra-
las madres. C u a n d o los niños nacen a intervalos m u y
tarse c o m o u n simple problema educativo individual.
breves o en el seno de familias numerosas, las pruebas
Es una crisis nacional con enormes ramificaciones
realizadas indican cocientes de inteligencia inferiores,
para todo país que aspire al desarrollo social y econó-
hecho demostrado documentalmente por varios es-
mico. N o o r resume con acierto el valor de la educa-
tudios.
ción en el contexto del desarrollo. Desde el punto de
C o m o señala la monografía del Unicef, en muchos vista de las actitudes, la educación mejora notabla-
casos la malnutrición no es causada por la falta de mente la capacidad de una sociedad para cambiar y
alimentos, sino por u n número repetido de enferme- aceptar ideas nuevas. T a m b i é n tiene u n valor fun-
dades infecciosas que desperdician calorías, hacen cional para la satisfacción de necesidades básicas
disminuir el apetito y eliminan principios nutritivos "esenciales" (por ejemplo, u n estado de salud y de
arrastrados por los vómitos, diarreas y suspensión de nutrición aceptable y unos ingresos suficientes) al
la lactancia. Así, el mal estado de salud resultante impartir los conocimientos imprescindibles para sa-
también limita la aptitud del niño para beneficiarse tisfacerlas. El beneficio de la educación para la so-
de la instrucción. E n las comunidades pobres, los ciedad radica en que capacita a los individuos para
niños llegan a estar enfermos del 30 al 75% del identificarse con su cultura en mutación y para asumir
tiempo. Los efectos de la enfermedad a ese nivel son en ella u n papel constructivo. L a participación elec-
acumulativos. L a enfermedad y la malnutrición cons- toral, el ahorro, las prácticas de planificación fami-
tantes significan que el niño carece de energía para liar, los hábitos de trabajo, la receptividad a las nuevas
jugar, explorar, buscar o recibir estímulos, lo que es ideas y la disciplina son elementos fomentados por la
vital para el desarrollo de las aptitudes físicas, m e n - educación. E n uno de los estudios citados, por ejem-
tales o sociales, y, posteriormente, para poder c o m - plo, se demuestra que los agricultores que habían
pletar la escolaridad. Los niños con baja absorción asistido durante cuatro años a la escuela primaria
calórica, ya sea por alimentación deficitaria o por tenían por término medio una producción 13,2% más
enfermedad, sólo logran u n estado de equilibrio ener- elevada que la de los n o escolarizados.
gético mediante reducciones del nivel de actividad, lo
Los efectos de las inversiones en educación son
que origina una inmensa pérdida de oportunidades de
tanto sociales c o m o económicos. L a escolarización de
aprendizaje. Hasta la fecha, no se ha recogido ninguna
la mujer actúa c o m o una poderosa fuerza en la
información específica acerca de c ó m o afecta al rendi-
reducción de la mortalidad infantil. El Banco Mundial
Revista de publicaciones 289

ha revelado que las inversiones tanto en enseñanza parte responsables una malnutrition endémica y la
primaria c o m o en cuidados sanitarios producen u n abundancia de enfermedades contagiosas.
rendimiento económico de hasta el 25%: u n indice
superior al de la mayor parte de las inversiones en Las campañas educativas
bienes materiales. Es m á s , cuando se rehabilita a El informe del Unicef y la monografía sobre educa-
niños gravemente desnutridos, puede preverse u n ción relativa a la nutrición ofrecen u n rico caudal de
10% de aumento en las ganancias sólo por el cambio información y de ejemplos acerca de c ó m o se han
en desarrollo cognitivo. U n 45% m á s de aumento se planeado y llevado a la práctica campañas generali-
obtiene gracias a la mayor capacidad del niño para zadas para mejorar el estado de salud y de nutrición.
participar en las actividades escolares y beneficiarse L a mayoría de estas campañas suponían la aplicación
de ellas. E n cuanto a los niños con malnutrition entre de estrategias de marketing social. D e estos casos se
moderada y leve, estos incrementos se reducen a la desprenden varias lecciones. Para empezar, una estra-
mitad, lo que de todos m o d o s constituye u n cambio tegia de promoción multisectorial es el procedimiento
m u y apreciable. m á s susceptible de provocar el cambio. Por ejemplo,
Sin embargo, sólo alrededor del 20% de la pobla- si el objetivo de la campaña es fomentar una mejor
ción del m u n d o en desarrollo está alfabetizada. Sólo lactancia materna (y con ello mejorar el estado de
la mitad de los que inician la escuela primaria llegan nutrición de los lactantes), deben examinarse y, en
al cuarto grado, que constituye u n umbral en materia algunos casos, modificarse muchos factores: política
de alfabetización. Los que repiten curso representan del gobierno, salud y prácticas higiénicas de las fami-
una media del 15 al 20% del total de plazas escolares. lias, actividades del sector privado y comportamientos
Los problemas del desaprovechamiento son, pues, de los trabajadores en cuanto a salud e higiene, entre
urgentes y graves. L a tarea m á s urgente con que han otros. El que las campañas tengan éxito depende de
de enfrentarse los planificadores es la de prevenir estos que se sepa hacer una selección de mensajes basados
elevados coeficientes de desaprovechamiento m e - en u n conocimiento perfecto de las actitudes, creencias
diante estrategias eficaces en materia de nutrición y y hábitos locales. Es indispensable la participación de
salud. Las cinco monografías exploran varios caminos expertos en programación de los medios de comuni-
prometedores para deshacer esta intrincada trama. cación, análisis de la resistencia a los mensajes y
control de la respuesta a los mismos. T a m b i é n requie-
ren las campañas el pleno respaldo de los dirigentes
C Ó M O PROTEGER políticos y la movilización de todas las redes de c o m u -
A LOS NIÑOS VULNERABLES nicación que contribuyan a crear una demanda de
innovación. L a información presentada por los medios
Los cinco enfoques expuestos a grandes lineas en los de comunicación social constituye u n importante
siguientes párrafos ilustran la diversidad de estrate- complemento, pero nunca u n sustituto suficiente de
gias que pueden aplicarse para mejorar el rendimiento las demostraciones prácticas directas a cargo de
escolar de niños vulnerables a causa de una mala agentes sanitarios especializados.
salud y una nutrición deficiente. Estos procedimientos
El éxito de toda campaña depende de que, además
no son mutuamente excluyentes, y, m u y probable-
de los mensajes con fines concretos, se transmita u n
mente, producirán mejores resultados utilizados en
mensaje general: que la responsabilidad fundamental
combinación.
respecto a la salud debe ser asumida por el propio
individuo. C u a n d o las campañas promueven acciones
La educación compensatoria que los destinatarios pueden llevar a cabo fácilmente
Tanto Pollitt c o m o Knudsen demuestran la necesidad por sí mismos, hay muchas probabilidades de que la
de habilitar programas compensatorios específicos repercusión sea grande.
destinados a remediar los efectos de la desnutrición El informe del Unicef se interesa especialmente
antes del ingreso en la escuela primaria. Sin estos por el uso de las comunicaciones de masas para di-
programas, los índices de desaprovechamiento serán fundir cuatro métodos relativamente sencillos y nada
elevados, ya que los niños n o podrán beneficiarse caros que permiten a los padres reducir el índice de
óptimamente de la instrucción. Los programas que mortalidad infantil a la mitad: control del crecimiento,
combinan los suplementos alimenticios, los cuidados rehidratación oral en caso de diarrea, lactancia m a -
sanitarios y la educación tienen la repercusión m á s terna y vacuna contra seis enfermedades (sarampión,
significativa sobre el desarrollo. Cuanto más precoz difteria, tos ferina, tétanos, polio y tuberculosis). Los
sea la intervención y cuanto m á s tiempo participe el cuatro métodos salvan vidas gracias a la protección
niño en tales programas polivalentes, mayor será el del crecimiento del niño. Tienen u n efecto directo
beneficio para el desarrollo. D e esta manera, los pro- sobre el rendimiento escolar al reducir la frecuencia
gramas preescolares integrados pueden m u y bien de las deficiencias mentales y físicas. Cuentan asi-
tener una repercusión significativa en los coeficientes m i s m o con unas posibilidades incomparables para su
de desaprovechamiento escolar, del que son en buena difusión generalizada mediante campañas en virtud
290 Revista de publicaciones

de varias características: se prestan a una fácil difu- ejemplo), y la instrucción se imparte de m o d o que
sión; se basan en una información sencilla y práctica; contribuya a reforzar las actividades de otros sectores,
no son caros y su ámbito de aplicación es universal; c o m o la construción de sistemas de abastecimiento de
no dependen de una evolución profunda de los valores aguas. Se insiste m u c h o en la conveniencia de impar-
y, n o obstante, pueden conducir a cambios especta- tir los conocimientos prácticos indispensables para la
culares. comunicación, para mejorar la calidad de vida (nutri-
U n a campaña amplia y completa debe contar ción, higiene, planificación familiar, entre otras cosas)
también con estrategias para garantizar a las madres y para aumentar los ingresos. L a educación básica
el apoyo moral y afectivo de las personas que desem- posee una capacidad formidable para reducir el desa-
peñan u n gran papel en su vida: maridos, suegras, provechamiento escolar, al dotar a las madres y a sus
vecinos, representantes políticos y jefes espirituales. hijos de los conocimientos y actitudes que se requie-
Sin este apoyo, las madres n o tendrán la confianza ren para eliminar los problemas de salud y nutrición
necesaria para arriesgarse a probar ninguna inno- que conducen a la repetición de cursos y al abandono
vación. de la escuela. T a m b i é n neutraliza el problema del
desaprovechamiento dando otros medios de adquirir
La alimentación complementaria las aptitudes básicas a aquellas personas que, por unas
Knudsen, Pollitt y el Unicef examinan la eficacia de razones u otras, abandonan prematuramente la es-
la alimentación complementaria c o m o instrumento cuela.
para mejorar el estado de nutrición. Pollitt prosigue el
estudio de esta relación un paso m á s allá examinando La difusión de conocimientos
los efectos del complemento alimenticio sobre los de medicina preventiva elemental
rendimientos escolares. Se analizan tres tipos de inter- C o m o señala el Unicef, sólo la medicina preventiva
vención: a nivel de la madre, a fin de reducir el riesgo elemental hace posible una auténtica revolución en
de nacimiento de niños faltos de peso; a nivel del el desarrollo del niño. A u n q u e la malnutrición tiene
lactante o del niño en edad preescolar, con objeto de
muchas causas, aparte de las situaciones de miseria y
facilitar el pleno desarrollo cognitivo, y a nivel del
de hambre, la frecuencia de las enfermedades infeccio-
niño escolarizado, a fin de contrarrestar las carencias
sas es probablemente la m á s importante de todas.
nutritivas m á s corrientes (anemia por falta de hierro)
Estas entrañan una reducción en el consumo de ali-
o las dificultades de aprendizaje motivadas por h a m -
mentos, pérdidas de principios nutritivos básicos,
bre temporal o a corto plazo. L a investigación no es
alteraciones metabólicas, desequilibrios hormonales
concluyeme con respecto al método que produce unos
rendimientos m á s elevados. Cabe pensar que todos y alteraciones del sistema inmunitario. Consecuencia
ellos tienen validez en determinadas circunstancias de todo ello, en términos de rendimiento escolar, es
aunque los datos no avalen unas conclusiones firmes. una reducción de la actividad, dificultades de apren-
U n o de los resultados, sin embargo, merece especial dizaje y una m e n g u a de la creatividad.
atención porque corrobora la necesidad de la alimen- El alcance de esta información sobre medicina
tación complementaria en el contexto de proyectos preventiva depende del despliegue y del apoyo perma-
integrados de educación compensatoria. E n términos nente que se brinde a los agentes de divulgación
de aptitudes cognitivas y rendimiento escolar futuro, sanitaria, quienes, tras u n periodo de formación rela-
los efectos reparadores o preventivos de los progra- tivamente breve, deben hallarse en disposición de
m a s que ofrecen alimentación complementaria sólo iniciar a las poblaciones rurales en técnicas que les
durante los primeros años de vida son aleatorios. ayuden a reducir la malnutrición y la mortalidad
Tales programas dejan de tener efecto sobre el infantil aproximadamente a la mitad. Obviamente,
desarrollo mental del niño una vez que éste llega a la estos agentes deben contar con el respaldo de unos
escuela. servicios médicos eficientes que intervengan cuando
haga falta.
La educación básica
¿DISPONEMOS DE MEDIOS
N o o r propugna que los planificadores de educación PARA MODIFICAR
básica consideren a la familia c o m o unidad destina- LOS DATOS DEL PROBLEMA?
taria. E s , pues, la familia, antes que el individuo, la
que debe adquirir el conjunto de técnicas elementales, Las cinco monografías nos permiten comprender
cualquiera que sea la acepción de esta expresión, lo mejor los factores que hacen peligrar a u n niño en el
m á s pronto posible. E n este modelo se integran las plano educativo. Entre ellos se cuentan la malnutri-
actividades de educación formal y no formal a fin de ción presente y pasada, la insuficiencia de peso al
crear mensajes de refuerzo que permitan a los desfa- nacer, el limitado estímulo social y afectivo, las enfer-
vorecidos satisfacer sus necesidades esenciales. Se medades infecciosas, el orden de nacimiento del niño
emplean sistemas de prestación de servicios ya exis- en relación con sus hermanos (algunos estudios
tentes y que funcionan bien (escuelas y clínicas, por hablan de ventajas para los "benjamines" mientras
Revista de publicaciones

que otros indican lo contrario) la duración de los


periodos entre dos nacimientos, el estado de salud y
de nutrición de la madre durante el embarazo y
durante la lactancia y el nivel de educación de la
misma. Existen diversos procedimientos para ate-
nuar el riesgo que corre el niño condenado a vivir
en tales circunstancias. Nosotros hemos analizado
cinco: la educación compensatoria, las campañas
públicas, la alimentación complementaria, la educa-
ción básica y la difusión de conocimientos de medi-
cina preventiva elemental. L o importante, sin e m -
bargo, es darse cuenta de que estos procedimientos
se hallan al alcance de la mayoría de los países en
desarrollo que n o cuentan con gran ayuda exterior.
Por ejemplo, la Organización Mundial de la Salud
estima que tres cuartas partes del total del gasto
sanitario de los países en desarrollo se destina a
procurar asistencia médica relativamente cara a unos
pocos núcleos urbanos y ciudades. U n a transferencia
relativamente ligera de este gasto podría ampliar
el radio de los servicios espectacularmente. E n Perú,
esto significa que el número de médicos que han de
formarse en los cinco próximos años podría reducirse
en u n 25%, lo que permitiría que u n millón m á s de
asistentes sanitarios pasara a atender a las comuni-
dades pobres. D e m o d o análogo, Knudsen aporta
pruebas convincentes en apoyo de la justificación eco-
nómica de los programas de alimentación comple-
mentaria, que producen leves mejorías en los índices
de mortalidad, pero aumentos m á s sustanciales en la
productividad, esquema bastante clásico, por otra
parte. Noor estima que los gastos suplementarios
necesarios para que la educación básica llegue hasta
las familias que viven en la pobreza absoluta equi-
valen m á s o menos a una séptima parte del gasto
global actual en educación. Mediante la redistribu-
ción de los recursos existentes y la adopción de méto-
dos m á s rentables, la educación básica podría gene-
ralizarse sin necesidad de gastos adicionales. El
Unicef evalúa el coste de la vacunación infantil contra
seis enfermedades infecciosas en 5 dólares por niño.
Pese a lo cual, son menos del 20% los niños del m u n d o
en desarrollo que están protegidos.

E n suma, n o nos enfrentamos principalmente con


obstáculos económicos en nuestros esfuerzos por que
los niños saquen el mayor partido de la escolarización,
con independencia del estado de salud y de nutrición
pasado o presente. Es, sobre todo, una cuestión de
voluntad política. Para salir u n día del círculo vicioso
de nutrición-salud-resultados escolares, será preciso
formar nuevas alianzas entre los diversos sectores.
L a creación de u n consenso profesional y de coali-
ciones activas que generen una voluntad política
debe constituir u n primer paso.
Beryl L E V I N G E R
Director Ejecutivo Adjunto
Programa C A R E
(Estados Unidos de América)
Publicaciones de la Unesco: agentes generales de venta

A L B A N I A : N . Sh. Botimeve Nairn Frasheri, T I R A N A . B U L G A R I A : Heraus, Kantora Literatura, bd. Rousky 6,


A L E M A N I A (Rep. Fed.): S. Karger G m b H , Karger SOFIJA.
Buchhandlung, Angerhofstr. 9, Postfach 2, D-8034 B U R K I N A F A S O : Librairie Attie, B . P . 64, O U A G A D O U -
G E R M E R T N G / M Ü N C H E N . "El Correo" (ediciones ale- G O U . Librairie catholique "Jeunesse d'Afrique",
mana, inglesa, española y francesa): M . Herbert OUAGADOUGOU.
Baum, Deutscher Unesco-Kurier Vertrieb, Besait- C A N A D A : Renouf Publishing Company Ltd., 61 Sparks
strasse 57, 5300 BONN. Para los mapas cientí- Street, O T T A W A , Ontario K i P 5A6.
ficos: Geo Center, Postfach 800830, 7000 STUTT- C O L O M B I A : Instituto Colombiano de Cultura,
GART 80. Carrera 3 A , n.° 18-24, B O G O T A .
ANTILLAS NEERLANDESAS: Van Dorp Eddine N . V . , C O N G O : Librairie populaire, B . P . 577, BRAZZAVILLE;
P. O . Box 200, W I L L E M S T A D (Curacao, N . A . ) . Librairies populaires de Pointe-Noire, L o u b o m o ,
ARABIA SAUDITA: Dar Al-Watan for Publishing and Nyaky, Makabana, O w e n d o , Ouesso et Impfondo.
Information, Olaya Main Street, Ibrahim Bin Su- Commission nationale congolaise pour l'Unesco,
laym Building, P . O . Box 3310, R Y A D . B . P . 493, B R A Z Z A V I L L E .
ARGELIA: Institut pédagogique national, 11 rue Ali C O S T A D E M A R F I L : Librairie des Presses de l'Unesco,
Haddad, A L G E R . Libros: E N A L , 3 boulevard Zi- Commission nationale ivoirienne pour l'Unesco,
rout Youcef, A R G E L . Para las revistas solamente: B . P . 2871, A B I D J A N .
E N A M E P , 20 rue de la Liberté, A R G E L . Ôflîce C O S T A R I C A : Librería Cooperativa Universitaria,
des publications universitaires (OPU), Place Ciudad Universitaria "Rodrigo Fació", S A N JOSÉ.
Centrale Ben Aknoun, A L G E R . C U B A : Ediciones Cubanas, O'Reilly n.° 407, L A H A -
ARGENTINA: Librería El Correo de la Unesco, B A N A . Solamente "El Correo de la Unesco": Empresa
E D I L Y R S . R . L . , Tucumán 1685, 1050 B U E N O S C O P R E F I L , Dragones n.° 456 e/ Lealtad y C a m -
AIRES. panario, L A H A B A N A 2.
AUSTRALIA: Publicaciones: Educational Supplies Pry., C H E C O S L O V A Q U I A : S N T L , Spalena 51, P R A H A I {Ex-
Ltd.,P. O . Box 33, BROOKVALE 2100, N . S . W . Publi- posición permanente); Zahranicni literatura, 11,
caciones periódicas: Dominie Pty., Ltd., Subscrip-Soukenicka, P R A H A I. Únicamente para Eslovaquia:
tions Dept., P. O . Box 33, BROOKVALE 2100, Alfa Verlag, Publishers, Hurbanovo, nam. 6,
N . S . W . Subdepósito: United Nations Association of 893 31, BRATISLAVA. Para la distribución de El
Australia, P. O . Box 175, 5thfloor,Ana House Correo: P N S - U E D , Jindrisska 14, P R A H A I.
28 Elizabeth street, M E L B O U R N E 3000. Hunter CHILE: Bibliocentro, Ltda., casilla 13731, Constitu-
Publications, 58A Gripps Street, Collingwood, ción n.° 7, SANTIAGO (21). Editorial "Andrés
VICTORIA 3066. Bello", Av. R . Lyon 946, casilla 4256, SANTIAGO.
AUSTRIA: Buchhandlung Gerold and Co., Graben 31, C H I N A : China National Publications Import Cor-
A-ion W I E N . poration, West Europe Department, P. O . Box 88,
B A H A M A S : Nassau stationers Ltd., P. O . Box N 31-38, BEIJING.
NASSAU. CHIPRE: " M A M " , Archbishop Makarios 3rd Avenue.
BAHREIN: The Arabian Agencies and Distributing P. O . Box 1722, NICOSIA.
Co., Al Mutanabi St., P . O . Box 156, M A N A M A . D I N A M A R C A : Munksgaard Export and Subscription
B A N G L A D E S H : Bangladesh Books International Ltd., Service, 35 Norre S0gade, D K 1370 K O B E N H A V N K .
Ittefaq Building, 1 R . K . Mission Road, Hatkhola, E C U A D O R : Todas las publicaciones: Casa de la Cultura
D A C C A 3. Ecuatoriana, Núcleo del Guayas, Pedro Moncayo y
BARBADOS: University of the West Indies Bookshop, 9 de Octubre; casilla de correos 3542, GUAYAQUIL;
Cave Hill Campus, P. O . Box 64, B R I D G E T O W N . Casa de la Cultura Ecuatoriana, Avenida 6 de
BÉLGICA: Jean D e Lannoy, 202, avenue du Roi, diciembre n.° 794, Casilla 74, QUITO. Periódicos
1060 BRUXELLES, C C P 000-0070823-13. solamente: D I N A C U R Cía. Ltda., Santa Prisca
BENIN: Librairie Nationale, B. P. 294, P O R T O Novo; n.° 296 y Pasaje San Luis, Ofic. 101-102, Casilla
Ets. Koudjo Joseph, B. P. 1530, C O T O N O U ; Librai- 112-B, Q U I T O ; Libros solamente: Librería Pomaire,
rie Notre Dame, B . P. 307, C O T O N O U . Amazonas 863, QUITO; Nueva Imagen, 12 de
BIRMANIA: Trade Corporation n.° (9), 550-552 Mer- Octubre 959 y Roca, Edificio Mariano de Jesús,
chant-Street, R A N G O O N . QUITO.
BOLIVIA: L O S Amigos del Libro, casilla postal 4415, EGIPTO: Unesco Publications Centre, 1 Talaat Harb
L A P A Z ; A V . de las Heroínas 3712, casilla postal 450, Street, E L CAIRO.
COCHABAMBA. E L SALVADOR: Librería Cultural Salvadoreña, S. A . ,
B O T S W A N A : Bootswana Book Centre, P . O . Box 91, calle Delgado, n.° 117, apartado postal 2296,
GABORONE. SAN SALVADOR.
BRASIL: Fundacäo Getúlio Vargas, Serviço de Publi- ESPAÑA: Ediciones Líber, apartado 17, Magdalena,
caçôes, caixa postal 9.052-ZC-02, Praia de Botafogo 8, O N D Á R R O A (Vizcaya); D O N A I R E , Ronda de
188, R I O D B J A N E I R O ( G B ) . Outeiro 20, apartado de correos 341, L A C O R U Ñ A ;
Librería Al-Andalus, Roldana i y 3, S E V I L L A - 4 ; B A N G A L O R E 560001; 3-5-820 Hyderguda, H Y D E -
M u n d i Prensa Libros, S. A . , Castelló, 37, apar- R A B A D 500001. Subdepósitos: Oxford Book and
tado 1223, M A D R I D - I ; Librería Castells, Ronda Stationery C o . , 17 Park Street, C A L C U T T A 700016
Universidad 13, B A R C E L O N A 7. y Scindia House, N E W D E L H I I I O O O I ; Publications
ESTADOS U N I D O S D E A M É R I C A : Unipub, 20s East Unit, Ministry of Education and Culture, Ex. A F O
42nd Street, N E W Y O R K , N . Y . 10017. Para pedidos Hutments, D r . Rajendra Prasad Road, N E W
de libros y revistas: Unipub, P . O . Box 1222, A N N D E L H I IIOOOI.
A R B O R , M I 48106. Únicamente "El Correo" en INDONESIA: Baratara Publishers and Booksellers,
español: Santularia Publishing Company Inc., 29 Jl. Oto Iskandardinata III, Y A K A R T A ; Indira P . T . ,
575 Lexington Avenue, N E W Y O R K , N . Y . 10022. 37 Jl. D r . S a m Ratulangi, Y A K A R T A P U S A T .
ETIOPÍA: Ethiopian National Agency for Unesco, I R Á N : Commission nationale iranienne pour l'Unesco,
P . O . Box 2996, A D D I S A B E B A . Seyed Jamal Eddin Assad A v . , 64th Str., Bonyad
FruPlNAS: National Book Store Inc., 701 Rizal Bdg., P . O . Box 1533, T E H E R A N ; Kharazmie P u -
Avenue, M A N I L A . blishing and Distribution C o . , 28 Vessal Shirazi
FINLANDIA: Akateeminen Kirjakauppa, Keskuskatu 1, Street, Enghélab Avenue, P . O . B o x 314/1486,
00100 HELSINKI 10. Suomalainen Kirjakauppa Oy, TEHERAN.
Koivuvaarankuja 2, 01640 V A N T A A 64. IRLANDA: The Educational Company of Ireland Ltd.,
FRANCIA: Librairie de l'Unesco, 7, place de Fontenoy, Ballymount Road, Walkinstown, D U B L I N 12.
75700 PARIS (CCP 12598-48). ISLANDIA: Snaebjörn Jonsson & Co., H . F. Hafnar-
GABON: Librairie Sogalivre, LIBREVILLE, PORT- straeti 9, REYKJAVIK.
G E N T I L y FRANCEVILLE; Librería Hachette, B.P. ISRAEL: A . B . C . Bookstore Ltd., P. O . Box 1283,
3923, LIBREVILLE. 71 Allenby Road, T E L Aviv 61000.
G H A N A : Presbyterian Bookshop Depot Ltd., P. O . ITALIA: L I C O S A (Librería Commissionaria Sansoni
Box 195, A C C R A . Ghana Book Suppliers Ltd., S.p.A.), via Lamarmora 45, casella postale 552,
P. O . Box 7869, A C C R A . The University Bookshop 50121 FIRENZE; F A O Bookshop, Via délie Terme
of Cape Coast. The University Bookshop of Legon, di Caracalla, 00100 R O M A .
P . O . Box 1, L E G O N . JAMAHIRIYA ÁRABE LIBIA: Agency for Development of
GRECIA: Grandes librerías de Atenas (Elefthe- Publication and Distribution, P. O . Box 34-35,
roudakis, Kauffman, etc.); John Mihalopoulos TRIPOLI.
& Son S . A . , International Booksellers, 75 H e r m o u JAMAICA: Sangster's Book Stores Ltd.,P. O . Box 366,
Street, P . O . B . 73, T H E S S A L O N I K I ; Commission 101 Water Lane, K I N G S T O N ; University of the
nationale hellénique pour l'Unesco, 3 rue Akadi- West Indies Bookshop, Mona, K I N G S T O N .
mias, A T H È N E S . JAPÓN: Eastern Book Service, Inc., 37-3 Hongo
GUADALUPE: Librairie Carnot, 59 nie Barbes, 3-chome, Bunkyo-ku, T O K Y O 113.
POINTE-A-PITRE. JORDANIA: Jordan Distribution Agency,P. O . Box 375,
G U A T E M A L A : Comisión Guatemalteca de Cooperación AMMAN.
con la Unesco, 3. a avenida 13-30, zona 1, apartado K E N Y A : East African Publishing House, P . O .
postal 244, GUATEMALA. Box 30571, NAIROBI. Africa Book Service Ltd.,
GUINEA: Commission nationale guinéenne pour Quran House, Mfangano St., P . O . Box 45245,
l'Unesco, B . P . 964, C O N A K R Y . NAIROBI.
H A I T Í : Librairie " A la Caravelle", 26, rue Roux, K U W A I T : The Kuwait Bookshop C o . Ltd., P. O .
B.P. n i , PORT-AU-PRINCE. Box 2942, K U W A I T .
H O N D U R A S : Librería Navarro, 2 . a avenida, n.° 201, L E S O T H O : Mazenod Book Centre, P. O . M A Z E N O D .
Comayagüela, T E G U C I G A L P A .
L Í B A N O : Librairies Antoine, A . Naufal et Frères,
H O N G K O N G : Federal Publications ( H K ) Ltd.,
B . P . 656, BEYROUTH.
2 D Freder Centre, 68 Sung W o n g Toi Road,
T o k w a w a n , K O W L O O N ; Swindon Book C o . , 13-15, LIBERIA: Cole & Yancy Bookshops Ltd., P. O .
Box 286, MONROVIA.
Lock Road, K O W L O O N . H o n g K o n g Government
Information Services, Publication Section, Basker- LIECHTENSTEIN: Enrocan Trust Reg., P. O . Box 5,
ville House, 22 Ice House street, H O N G K O N G . SCHAAN.
H U N G R Í A : Akadémiai Könyvesbolt, Váci u . 22, B U - L U X E M B U R G O : Librairie Paul Brück, 22, Grand-Rue,
D A P E S T V ; A . K . V . Konyvtárosok Boltja, Népkoz- L U X E M B O U R G . Para "El Correo": 202, avenue du
társaság utja 16, B U D A P E S T V I . Roi, 1060 BRUXELLES.
I N D I A : Orient Longman Ltd.: Kamani M a r g , Bal- M A D A G A S C A R : Commission nationale de la République
lard Estate, B O M B A Y 400038; 17 Chittarajan démocratique de Madagascar pour l'Unesco,
Avenue, C A L C U T T A 13; 36a Anna Salai, M o u n t B . P. 331, ANTANANARIVO.
Road, M A D R A S 2 ; 5-9-41/1 Bashir Bagh, H Y D E R A - M A L A S I A : Federal Publications Sdn Bhd., Lot 8238
B A D 50001 (AP); 80/1 Mahatma Gandhi Road, Jalan 222, Petaling Jaya, SELANGOR. University
of Malaya Co-operative Bookshop, K U A L A L U M - PAÍSES BAJOS: Keesing Boeken B . V . , Hogehilweg 13,
P U R 22-11. 1101 CB AMSTERDAM (BOX 1118, 1000 B C A M S -
M A L A W I : Malawi Book Service, Head Office P . O . T E R D A M ) . Publicaciones periódicas: D & N - F A X O N
Box 30044, Chichiri, B L A N T Y R E 3. B. V . , Postbus 197, 1000 A D A M S T E R D A M .
M A L Í : Librairie populaire du Mali, B . P. 28, B A M A K O . PAKISTAN: Mirza Book Agency, 65 Shahrah Quaid-
M A L T A : Sapienzas, 26 Republic Street, V A L L E T T A . i-Azam, P. O . Box 729, L A H O R E 3; Unesco Publi-
M A R R U E C O S : Todas las publicaciones: Librairie " A u x cations Centre, Regional Office for Book Develop-
Belles Images", 281, avenue M o h a m m e d - V , R A B A T ment in Asia and the Pacific (ROBDAP), 39 Delhi
(CCP 68.74). Únicamente "El Correó" (para el Housing Society, P. O . Box 8950, K A R A C H I 29.
cuerpo docente): Commission nationale marocaine P A N A M A : Distribuidora Cultura Internacional, Apar-
pour l'éducation, la science et la culture, 19, rue tado 7571, Zona 5, P A N A M A 5.
Oqba, B . P . 420, A G D A L - R A B A T ( C C P 324.45); P A R A G U A Y : Agencia de Diarios y Revistas, Sra.
Librairie des écoles, 12, avenue Hassan-II, C A S A - Nelly de García Astillero, Pte. Franco n.° 580,
B L A N C A ; Société chérifienne de distribution et de ASUNCIÓN.
presse ( S O C H E P R E S S ) , angle rues de Dinant et PERÚ: Librería Studium, Plaza Francia 1164, Apar-
Saint-Saëns, B . P . 683, C A S A B L A N C A 05.
tado 2139, L I M A . Librería La Familia, Pasaje
M A R T I N I C A : Hatier Martinique, 32, rue Schoelcher, Peñaloza 112, apartado 4199, L I M A .
B . P. 188, 97202 F O R T - D E - F R A N C E . POLONIA: Ars Polona-Ruch, Krakowskie Przedmies-
M A U R I C I O : Nalanda C o . Ltd., 30 Bourbon Street, cie 7, 00-068 W A R S Z A W A ; ORPAN-Import, Palac
PORT-LOUIS.
Kultury, 00-901 W A R S Z A W A .
M A U R I T A N I A : G R A . L I . C O . M A . , I, rue du Souk X ,
P O R T U G A L : Días & Andrade Ltda., Livraria Portugal,
avenue Kennedy, N O U A K C H O T T .
rua do Carmo 70, LISBOA.
M É X I C O : S A B S A , Servicios a Bibliotecas, S. A.,Insur-
R E I N O U N I D O : Government bookshops: 49 High Hol-
gentes Sur n.° 1032-401, M É X I C O 12, D . F . ; Li-
brería "El Correo de la Unesco", Actipán 66, born, L O N D O N W C I V 6 H B ; 80 Chichester Street,
BELFAST B T I 4JY; 258 Broad Street, B I R M I N G H A M
(Insurgentes/Manacar), Colonia del Valle, 03100
MÉXICO, D . F. B I 2 H E ; 50 Fairfax Street, BRISTOL B S I 3 D E ;
13a Castle Street, E D I N B U R G H E H 2 3AR; Brazen-
M O N A C O : British Library, 30, boulevard des Moulins,
mose Street, M A N C H E S T E R M 6 0 8AS. Publicaciones
MONTE-CARLO.
periódicas y otras publicaciones: H M S O Publica-
M O Z A M B I Q U E : Instituto Nacional do Livro e do Disco
tions Centre, 51 Nine Elms Lane, L O N D R E S S W 8
( I N L D ) , avenida 24 de Julho 1921, r/c e i.° andar,
MAPUTO.
S D R ; Third World Publications, 151 Stratford
Road, B I R M I N G H A M B U I R D . Para los mapas
N E P A L : Sajha Prakashan Polchowk, K A T H M A N D U .
científicos: McCarta Ltd., 122 Kings Cross Road,
NICARAGUA: Librería Cultural Nicaragüense, calle
L O N D R E S W C I X 9 D S . Para colocar pedidos:
15 de Septiembre y avenida Bolívar, apartado 807,
H M S O , P. O . Box 276, L O N D R E S S W 8 5 D T .
M A N A G U A ; Librería de la Universidad Centro-
americana, Apartado 69, M A N A G U A . REPÚBLICA Á R A B E SIRIA: Librairie Sayegh, immeuble
N Í G E R : Librairie Mauclert, B . P . 868, N I A M E Y . Diab, rue du Parlement, B . P. 704, D A M A S .
N I G E R I A : T h e University Bookshop of Ife. T h e Uni- REPÚBLICA D E C O R E A : Korean National Commission
versity Bookshop of Ibadan, P . O . Box 286, for Unesco, P. O . Box Central 64, SEOUL.
I B A D A N . T h e University Bookshop of Nsuka. T h e REPÚBLICA D E M O C R Á T I C A A L E M A N A : Librerías inter-
University Bookshop of Lagos. T h e A h m a d u Bello nacionales o Buchhaus Leipzig, Postfach 140,
University Bookshop of Zaria. 701 LEIPZIG.
N O R U E G A : Todas las publicaciones: Johan Grundt REPÚBLICA D E M O C R Á T I C A D E L Y E M E N : 14th October
T a n u m , Karl Johans gate 41/43, O S L O I. Univer- Corporation, P. O . Box 4227, A D E N .
sites Bokhandelen,Universitetssentret,P. O . B . 307, REPÚBLICA D O M I N I C A N A : Librería Blasco, avenida
Blindem, O S L O 3. Únicamente "El Correo": A / S Bolívar n.° 402, esq. Hermanos Deligne, S A N T O
Narvesens Litteraturjeneste, Box 6125, O S L O 6. DOMINGO.
N U E V A Z E L A N D I A : Government Printing Office Book- REPÚBLICA FEDERAL ISLÁMICA COMORES: Librairie
shops: Retail Bookshop-25 Rutland Street, Mail M A S I W A 4, rue Ahmed Djoumoi, B. P. 124,
Orders-85 Beach Road, Private Bag C . P . O . , MORONI.
A U C K L A N D ; Retail-Ward Street, Mail Orders- REPÚBLICA UNIDA DEL CAMERÚN: Le secrétaire géné-
P. O . Box 857, H A M I L T O N ; Retail-Cubacade World ral de la Commission nationale de la République
Trade Center, Mulgrave Street (Head Office), Mail fédérale du Cameroun pour l'Unesco, B . P . 1600,
Orders-Private Bag, W E L L I N G T O N ; Retail-159 H e - Y A O U N D E ; Librairie aux Messageries, avenue de
reford Street, Mail Orders-Private Bag, C H R I S T - la Liberté, B . P . 5921, D O U A L A ; Librairie aux
C H U R C H ; Retail-Princes Street, Mail Orders-P. O . frères réunis, B . P. 5346, D O U A L A ; Centre de Dif-
Box 1104, D U N E D I N . fusion du Livre Camerounais, B . P . 338, D O U A L A ;
Librairie des éditions Clé, B . P. 1501, Y A O U N D E ; U R U G U A Y : E D I L Y R Uruguaya, S. A . , Maldonado
Librairie Saint-Paul, B . P. 763, Y A O U N D E . 1092, MONTEVIDEO.
REPÚBLICA UNIDA D E TANZANÍA: Dar-es-Salaam VENEZUELA: Librería del Este, Av. Francisco de M i -
Bookshop, P. O . Box 9030, D A R - E S - S A L A A M . randa 52, Edif. Galipán, apartado 60337, CARACAS;
R H O D E S I A D E L S O T : Textbook Sales (PVT) Ltd., Dilae C A . , Alfadil Ediciones S.A., Avenidas Los
67 Union Avenue, SALISBURY. Mangos. Las Delicias, Apartado 50304, Sabana
R U M A N I A : A R T E X I M , Export-import, Piata Scien- Grande, C A R A C A S .
teii n.° 1, P. O . Box 33-16, 70005, BUCARESTI. YUGOSLAVIA: Jugoslovenska Knjiga, Trg. Repu-
S E N E G A L : Librairie des 4 vents, 91, rue Blanchot, blike 5/8, P. O . B . 36, 11-001 B E O G R A D ; Drzavna
B . P. 1820, D A K A R ; Librairie Clairafrique, Zalozba Slovenije Titova C . 25, P. O . B . 50-1,
B . P . 2005, D A K A R . 61-000 L J U B L J A N A .
SEYCHELLES: N e w Service Ltd., Kingstate House, ZAIRE: La Librairie, Institut national d'études poli-
P. O . Box 131, M A H É . National Bookshop, P. O . tiques, B . P. 2307, KINSHASA; Commission natio-
Box 48, MAHE. nale zaïroise pour l'Unesco, Commissariat d'État
SIERRA L E O N A : Fourah Bay, Njala University and chargé de l'éducation nationale, B . P. 32, KINSHASA.
Sierra Leone Diocesan Bookshops, F R E E T O W N . Z A M B I A : National Educational Distribution Co. of
SINGAPUR: Federal Publications (S) Pte. Ltd. N o . 1 Zambia Ltd., P. O . Box 2664, L U S A K A .
Times Jurong, 2 Jurong Port Road, SINGA- Z I M B A B W E : Textbook Sales (PVT) Ltd., 67 Union
PORE 2261. Avenue, H A R A R E .
S O M A L I A : Modern Bookshop and General, P. O .
Box 951, M O G A D I S C I O .
SRI L A N K A : Lake House Bookshop, Sir Chittampalam
Gardiner Mawata, P. O . Box 244, C O L O M B O 2.
S U D Á N : Al Bashir Bookshop, P. O . Box 1118,
KHARTOUM.
SUECIA: Todas las publicaciones: A / B C . E . Fritzes
Kungl. Hovbokhandel, Fredsgatan 2, Box 16356,
103 27 S T O C K H O L M 16. Publicaciones periódicas:
Wennergren-Williams A B , Box 30004, S-104 25
ESTOCOLMO.
SUIZA: Europa Verlag Rämistrasse 5, 8024 Z Ü -
RICH. Librairie Payot, 6, rue Grenus, 1211 G E -
NÈVE 11; y también en L A U S A N A , B E R N A , B A L E ,
VEVEY, M O N T R E U X , NEUCHÂTEL y ZURICH.
SURINAME: Suriname National Commission for
Unesco, P. O . Box 2943, PARAMARIBO.
TAILANDIA: Nibondh and Co. Ltd., 40-42 Charoen
Krung Road, Siyaeg Phaya Sri., P. O . Box 402,
B A N G K O K . Suksapan Panit, Mansion 9, Raj damnern
Avenue, B A N G K O K ; Suksit Siam Company, 1715
Rama IV Road, B A N G K O K .
T C H A D : Librería Abssounout, 24 Av. Charles de
Gaulle, B . P. 388, N ' D J A M E N A .
T O G O : Librairie évangélique, B . P. 378, LOMÉ.
Librairie du Bon Pasteur, B . P. 1164, L O M É . Li-
brairie universitaire, B . P. 3481, L O M É .
TRINIDAD Y T A B A G O : National Commission for
Unesco, 18 Alexandre Street, St. Clair, T R I -
NIDAD W . I.
TÚNEZ: Société tunisienne de dimisión, 5, avenue de
Carthage, T U N I S .
T U R Q U Í A : Haset Kitapevi A . S., Istiklâl Caddesi
n.° 469, Posta Kutusu 219, Beyoglu, ISTANBUL.
U G A N D A : Uganda Bookshop, P. O . Box 7145, K A M -
PALA.
U R S S : Mezhdunarodnaja Kniga, Ul. Dimitrova 39,
M O S K V A I I 3095.
Boletines de suscripción perspectivas
Para suscribirse a la edición francesa, inglesa, árabe También puede usted enviar el bono de suscripción a
o española de Perspectivas, basta llenar el formulario la Unesco, P U B / C , 7, place de Fontenoy, 75700 París
que se encuentra a continuación y enviarlo por correo, (Francia), adjuntando la cantidad correspondiente
acompañado de un cheque o giro postal en su moneda bajo forma de bonos internacionales de libros Unesco,
nacional, al agente de venta de su país cuya dirección de envío postal internacional o de cheque en una
figura en la lista que se da alfinaldel número. moneda convertible cualquiera.

Al agente de venta de m i país (o a la Unesco, P U B / C , 7, place de Fontenoy, 75700 París, Francia):


Deseo suscribirme a Perspectivas (4 números por año).

• Edición árabe
D Edición española D 1 año: 86 F
D Edición francesa
• Edición inglesa

Adjunto la cantidad de (gastos de envío incluidos)

(Para conocer la tarifa en moneda local consulte usted al agente de venta de su país.)

Nombre

Dirección

(Se ruega escribir a máquina o con letras de imprenta)

Firma

Al agente de venta de m i país (o a la Unesco, P U B / C , 7, place de Fontenoy, 75700 París, Francia):


Deseo suscribirme a Perspectivas (4 números por año).

D Edición árabe
D Edición española D 1 año: 86 F
D Edición francesa
D Edición inglesa

Adjunto la cantidad de . . (gastos de envío incluidos)

(Para conocer la tarifa en moneda local consulte usted al agente de venta de su país.)

Nombre

Dirección.

(Se ruega escribir a máquina o con letras de imprenta)

Firma
E n los números precedentes
perspectivas
Jan Harding Las jóvenes y las mujeres en la
Vol. X V , n.° 3, 1985 (55) enseñanza científica secundaria y superior: son
POSICIONES/CONTROVERSIAS pocas las escogidas
Lillian Weber y Hubert Dyasi Dominio del
Brian Holmes La educación comparada y su lenguaje y observación del medio: requisitos para
evolución el acceso a la ciencia de los grupos no dominantes
Tamas Kozma Planificación de la educación y Samuel Tunde Bajah U n a encuesta sobre las
conflictos de intereses concepciones de la ciencia en Nigeria
Orlando Hall R. La educación ambiental en Costa Rica
CUADERNO Evgeny Golovinski y Dobri Lazarov U n programa
TENDENCIAS Y EXPERIENCIAS experimental de enseñanza integrada de las ciencias
EN EDUCACIÓN DE ADULTOS naturales en Bulgaria
Reinhold E. Lob U n caso de educación ambiental
Konrad T. Elsdon Educación de adultos: progresos no formal orientada hacia la acción
y problemas Jeanne Damlamian, Malcolm Hadley y Laurie
John Ryan Algunos problemas clave de la Wayburn D e los científicos al público: la
alfabetización comunicación de los resultados de las investigaciones
Saleh Ahmed Azab L a campaña nacional de ecológicas
alfabetización de adultos en el Iraq
Lei Hengmin La educación de los trabajadores en China TENDENCIAS Y CASOS
Manuel Gracia Navarro y Juan Carlos López
Eisman L a educación de adultos en Andalucía Antonio Falcan Vernis y Ricard Pérez Alemany
Serge Wagner Analfabetismo y alfabetización de El Centro Experimental Castell de Sant Foix de
adultos en el Canadá Barcelona
Silvije Pongrac Desarrollo de la enseñanza por Gilberto Calvo U n a experiencia Unesco-Unicef de
correspondencia en Yugoslavia educación preescolar no formal en Chile
L a Cuarta Conferencia Internacional sobre la
Educación de Adultos
Vol. X V I , n.° 1, 1986 (57)
TENDENCIAS Y CASOS
POSICIONES/CONTROVERSIAS
L a Unesco y la educación para la paz
Erik Raymaekers y Myriam Bacquelaine U n a Angela Little Aprender y trabajar, en lugar de
educación integrada de base para el desarrollo rural instruir y emplear
Zoltán Báthory Problemas de descentralización en la
elaboración de programas escolares: el caso de Hungría
Vol. X V , n.° 4, 1985 (56)
CUADERNO
POSICIONES/CONTROVERSIAS
EL JUEGO EN LA EDUCACIÓN (i):
Merrelyn Emery ¿Otra apasionante revolución del JUEGO Y DESARROLLO COGNOSCITIVO
aprendizaje? Réplica a C . Kupisiewicz y a
M . A . White Rimmert van der Kooij y Henriëte Posthumus Meyjes
Mary Alice White Primera contrarréplica. Por una Situación actual de la investigación sobre el niño
concepción menos estrecha del aprendizaje y el juego
Czeslaw Kupisiewicz Segunda contrarréplica. Los Lauro de Oliveira Lima Niveles estratégicos de los
medios de comunicación en la enseñanza: juegos
¿"panacea" o simples auxiliares del maestro? Jerome Bruner Juego, pensamiento y lenguaje
Chalva Amonachvili El juego en la actividad de
CUADERNO aprendizaje de los escolares
Karen Zelan T e m a s ocultos y "trucos": los
LA CIENCIA PARA TODOS: primeros libros de lectura
EN Y POR EL MEDIO AMBIENTE André Michelet El maestro y el juego
J. David Lockard L a enseñanza de las ciencias y de TENDENCIAS Y CASOS
la tecnología: elementos de u n cuadro de la situación
Christian Souchon Reflexiones sobre los nuevos Daniel N. Sifuna L a enseñanza primaria profesional
enfoques en la enseñanza de las ciencias en Kenya: une evaluación
Wynne Harten Las jóvenes y la enseñanza de las Natela Imedadze Aspectos psicológicos del
ciencias al nivel primario: sexismo, estereotipos y aprendizaje del ruso como segunda lengua en la
remedios escuela nacional georgiana

También podría gustarte