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Expediente: 2011-24149-49-AAC
Departamento: Cochabamba
En revisión la Resolución de 22 de agosto de 2011, cursante de fs. 119 a 120, pronunciada dentro de
la acción de amparo constitucional interpuesta por Gabriel Riva Carrillo contra César Pedro Adrián,
Fiscal de Materia de Sacaba del departamento de Cochabamba.
Dentro la denuncia interpuesta por Noemí Oliveira Borja contra el accionante y Gregorio Rojas
Vásquez por la presunta comisión de los delitos de falsedad material e ideológica y uso de
instrumento falsificado, el Fiscal de Materia, ahora demandado, ejecutó un “supuesto”
mandamiento o requerimiento de secuestro el 30 de junio de 2011 a horas 18:00, y sin haber
previamente puesto en su conocimiento dicha orden se procedió a secuestrar su vehículo marca
Toyota con placa de circulación 1134-ALR, color rojo, el cual es su instrumento de trabajo, medio de
vida de él y de toda su familia, y teniendo además los papeles originales como garantía de un crédito
con una entidad financiera, la cual cancela trabajando con la propia movilidad. Emergente de dicho
secuestro se nombró como depositaria a una persona desconocida, incumpliendo de ese modo con
el mandato del art. 186 párrafo segundo del Código de Procedimiento Penal (CPP), ocasionando con
ello su indefensión. El argumento de dicho proceder por parte del Fiscal señalado, es que
secuestraron el vehículo referido como un elemento de investigación por los supuestos delitos antes
referidos.
Señala que mediante memorial de 11 de “junio” de 2011, solicitó ante el Fiscal, ahora demandado,
se le designe como depositario del vehículo secuestrado de acuerdo a lo establecido en el referido
art. 186 párrafo segundo del CPP, y sin embargo, a la fecha no lo hizo. Indica que, no está objetando
el secuestro del vehículo, sino que está solicitando se le nombre como depositario del mismo.
El Fiscal referido no observó los principios fundamentales de carácter personal, puesto que, nunca se
le ha notificado al accionante con la orden de secuestro y cuando solicitó se le nombre depositario,
se le negó dicha petición, ello en mérito a una mala interpretación del artículo antes citado, del cual
se entiende que debió habérsele nombrado como depositario o se debió haber dejado sin efecto el
secuestro.
Señala la lesión de sus derechos al debido proceso, en su vertiente del acceso a la justicia; al trabajo,
a la defensa y a la “seguridad jurídica”, citando al efecto los arts. 46, 48, 109 y 115 de la Constitución
Política del Estado (CPE).
I.1.3. Petitorio
César Pedro Adrián, Fiscal de Materia de Sacaba, presentó su informe por escrito, cursante de fs. 114
a 117, en el que fundamentó lo siguiente: a) El secuestro del vehículo no fue ordenado de oficio, sino
a petición de la denunciante en la causa penal que se sigue contra el ahora accionante; b) El
accionante no puede decir que no tenía conocimiento del secuestro indicado, porque desde que
prestó su declaración informativa el 6 de abril de 2011, tenía todo el derecho y la responsabilidad
como parte denunciada de acceder a los actuados del cuaderno de investigación, además que el 12
del citado mes y año, se le notificó con la denuncia, en cuyo otrosí tercero, se solicitó el referido
secuestro; c) Por memorial de 11 de julio de 2011, el ahora accionante, solicitó el cumplimiento del
art. 186 apartado segundo del CPP, pidiendo que se lo designe como depositario del vehículo
secuestrado dentro del proceso penal antes referido, en contra de él y otro, por la presunta
comisión de los delitos de falsedad material e ideológica, así como uso de instrumento falsificado,
previstos y sancionados en los arts. 198, 199 y 203 del Código Penal (CP); d) Por requerimiento de 12
de julio de 2011, Tatiana Magariños Toranzos, Fiscal de Materia, en suplencia legal del fiscal ahora
demandado, requirió manifestando que “…Se tiene presente lo manifestado por esta parte y estese
a los antecedentes de las investigaciones…” (sic) por lo que la solicitud de designación de depositario
no fue negada por la autoridad demandada, no contando ésta, con legitimación pasiva en la
presente demanda; e) La orden de secuestro fue librada por requerimiento expreso debidamente
fundamentado de 16 de junio de 2011; es decir, dieciocho días hábiles antes de la ejecución del
secuestro, tiempo por demás para ponerse en conocimiento de cualquier actuado; f) El
requerimiento de 16 de junio de 2011, no sólo ordenó el secuestro de manera fundamentada, sino
que dispuso que el vehículo quede en custodia del investigador asignado al caso, que no es lo mismo
que designar depositario y menos se trata de una persona desconocida; g) La vulneración de
derechos y garantías constitucionales dentro de un proceso penal en etapa de investigación debe ser
denunciada vía control jurisdiccional, la cual es competencia del Juez de Instrucción, ello de acuerdo
a los arts. 54 incs. 1) y 2), y 279 del CPP; y, h) En el presente caso el depósito deberá ser resuelto por
el Juez competente en razón a que los documentos que presentó el accionante en la causa penal
para demostrar su titularidad y propiedad del aludido vehículo y solicitar su designación como
depositario, son precisamente los documentos que se los considera y presume fraguados o
falsificados y sobre los que recae la presente investigación de falsedad material e ideológica.
Noemí Olivera Borja, mediante su abogado “solicita lo que corresponda en derecho” (sic).
I.2.4. Resolución
El Juez Tercero de Partido Mixto y de Sentencia Penal de Sacaba del Distrito Judicial -ahora
departamento- de Cochabamba, constituido en Juez de garantías mediante Resolución de 22 de
agosto de 2011, cursante de fs. 119 a 120, denegó la acción de amparo constitucional, bajo los
siguientes fundamentos: 1) Los arts. 128 y 129 de la CPE, conceden a las personas el derecho de
reclamar por la vía del amparo los actos contra los derechos constitucionales cometidos por los
servidores públicos, siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata
de los derechos y garantías restringidos, establecidos por ley y que estén a su alcance; y, 2) En el
proceso penal seguido en contra del ahora accionante y otro, del cual emergió la presente acción
tutelar, se hizo conocer al Juez de Instrucción cautelar que ejercía las funciones de control
jurisdiccional, la investigación de los delitos denunciados, en la forma prevista por el art. 54 inc. 1)
del CPP, modificado en parte por el art. 1 de la Ley 007 de 18 de mayo de 2010. De donde resulta
que el accionante tenía a su alcance los medios legales inmediatos para poder corregir las
resoluciones del Fiscal, ahora demandado y no acudir directamente al Juez de garantías.
Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; la
Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional conformó la Sala Liquidadora Transitoria,
posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de la liquidación de
las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de diciembre de 2011,
modificada por la Disposición Transitoria Segunda del Código Procesal Constitucional vigente desde
el 6 de agosto de 2012. Con la referida competencia, se procedió al sorteo de la presente causa,
dictándose Resolución dentro de plazo.
II. CONCLUSIONES
II.1. El contrato de compraventa de 18 de enero de 2007, indica que Gregorio Rojas Vásquez y
Noemí Olivera Borja -notificada como tercera interesada en la presente demanda tutelar-
adquirieron el vehículo minibús, marca Toyota, con placa de circulación 1134ALR, modelo 1991, tipo
Hiace, color rojo, de su propietario Mario Edgar Zambrana Vargas (fs. 50 a 51).
II.3. El Testimonio 774/2010 de 12 de noviembre, señala que Mario Edgar Zambrana Vargas
otorgó poder a Noemí Olivera Borja a efectos de vender, transferir, manejar, hipotecar, etc., el
vehículo señalado supra (fs. 52 y vta.)
II.4. Por memorial de 25 de noviembre de 2010, Noemí Olivera Borja interpuso denuncia ante el
Fiscal de Materia de Sacaba contra Gregorio Rojas Vásquez y Gabriel Riva Carrillo por la presunta
comisión de los delitos de falsedad material e ideológica y uso de instrumento falsificado, por la que
se indica que la denunciante y el primero nombrado como denunciado, su ex concubino, adquirieron
el vehículo descrito en la Conclusión II.1 de la presente Sentencia Constitucional Plurinacional. Sin
embargo, el referido ex concubino en complicidad con el segundo denunciado, ahora accionante,
procedieron a fraguar la transferencia de dicho vehículo y registrarlo a nombre de éste. En el otrosí
tercero de dicho memorial de denuncia se solicitó el secuestro del referido vehículo, encomendando
su ejecución a un funcionario judicial en base al art. 295.11 del CPP, y que se la nombre a ella
como depositaria. En la misma fecha, el Fiscal de Materia Marco Quiroga, emitió requerimiento,
indicando que se tenía por presentada dicha denuncia; sin embargo, no concedió lo solicitado en el
referido otrosí tercero (fs. 56 a 58 vta. y 59).
II.5. El informe de 13 de diciembre de 2010, emitido por Juan Carlos Pizarro Toledo, investigador
asignado al caso, dirigido a Marcos Quiroga entonces Fiscal de Materia, sugirió que se proceda al
secuestro del vehículo, solicitado por la denunciante, también sugirió la emisión de citaciones para
los denunciados (fs. 64 y vta.).
II.8. Por memorial de 24 de mayo de 2011, presentado por la denunciante, ésta volvió a reiterar
requerimiento de secuestro de vehículo ya referido. El cual fue nuevamente concedido a través de
decreto de 25 de igual mes y año, suscrito por Cesar Pedro Adrian, Fiscal de Materia -ahora
demandado- (fs. 90 a 91).
II.10. Por documento manuscrito se indica que el 7 de julio de 2011, a horas 20:00 se hizo
presente en la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), el policía Mario Mercado
Gutiérrez, dependiente del Organismo Operativo de Tránsito de Quillacollo, quien a horas 18:30 de
la misma fecha capturó el vehículo ya referido, trasladándolo a dicha dependencia, indicando que se
procedió luego a su secuestro en virtud del requerimiento de 16 de junio de 2011, emitido por el
Fiscal ahora demandado, dicha actuación se realizó en presencia de Guillermo “Rebollo” Rodríguez
(conductor y/o propietario), Noemí Olivera Borja (denunciante) y su abogado, y el efectivo policial
Juan Carlos Pizarro Toledo (investigador asignado al caso) (fs. 96).
II.11. Por memorial presentado el 11 de julio de 2011, el accionante solicitó la aplicación del art.
186 párrafo segundo del CPP, a efectos de que se le nombre depositario del vehículo secuestrado.
Habiendo la Fiscal de Materia Tatiana Magariños Toranzos, en suplencia legal del Fiscal ahora
demandado, dictado decreto de 12 del mismo mes y año, indicando: “REQUIERE: A lo principal; Se
tiene presente lo manifestado por esta parte y estése a los antecedentes de las investigaciones” (sic)
(fs. 103 a 104).
La acción de amparo constitucional, conforme establece art. 128 de la CPE, señala que tendrá lugar:
“…contra los actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona
individual o colectiva, que restrinjan, supriman, o amenacen restringir o suprimir los derechos
reconocidos por la Constitución y la ley”. Asimismo, el art. 129.I de la citada Norma Suprema
establece: “La Acción de Amparo Constitucional se interpondrá por la persona que se crea afectada,
por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo a la
Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o recurso
legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados”.
En el mismo sentido el art. 51 del Código Procesal Constitucional (CPCo) establece:”La Acción de
Amparo Constitucional tiene el objeto de garantizar los derechos de toda persona natural o jurídica,
reconocidos por la Constitución Política del Estado y la Ley, contra los actos ilegales o las omisiones
indebidas de las y los servidores públicos o particulares que los restrinjan, supriman o amenacen
restringir o suprimir”.
II. Excepcionalmente, previa justificación fundada, dicha acción será viable cuando: 1. La protección
pueda resultar tardía. 2. Exista la inminencia de un daño irremediable e irreparable a producirse de
no otorgarse la tutela”.
Al respecto, se tiene a bien citar la SCP 0587/2012 de 20 de julio, que señala: “Esta acción es de
naturaleza subsidiaria y extraordinaria; es decir, no forma parte de los recurso o medios de
impugnación ordinarios previstos por la legislación procesal, pudiendo activarse solo en caso de
haberse agotado los recursos o mecanismos de defensa judicial previstos en la jurisdicción ordinaria,
cuya finalidad primordial es evitar la consumación de una amenaza latente o la restitución de los
derechos fundamentales y garantías constitucionales vulnerados por persona particular o servidor
público.
Si bien la acción de ampro constitucional tiene un amplio espectro de protección; ésta, únicamente
será viable siempre y cuando no existan otros mecanismos de defensa extraordinarios y específicos
previstos para la defensa de determinados derechos, por cuanto en caso de existir las vías idóneas y
especiales tendentes a tutelar los derechos invocados, deben activarse ellas y no así el amparo
constitucional…”.
Al respecto el art. 54 inc. 1) del CPP, señala: “Los jueces de instrucción serán competentes
para: 1) El control de la investigación, conforme a las facultades y deberes previstos en este Código”.
El art. 189 del CPP, indica: ”(Devolución). Los objetos secuestrados que no estén sometidos a
incautación, decomiso o embargo, serán devueltos por el fiscal a la persona de cuyo poder se
obtuvieron tan pronto como se pueda prescindir de ellos.
En caso de controversia acerca de la tenencia, posesión o dominio sobre una cosa o documento,
para entregarlo en depósito o devolverlo, se tramitará un incidente separado ante el juez
competente y se aplicarán las reglas respectivas del proceso civil”.
De ello se entiende que ante la negativa del Fiscal de Materia, de designar como depositario de un
bien secuestrado a aquel que lo solicite, la misma debe ser reclamada ante el Juez de Instrucción de
la causa, mediante la interposición de un incidente, siendo dicha autoridad la competente, como lo
señalan los citados artículos, toda vez que ejerce el control de la investigación de la causa.
La SC 112/2010-R de 10 de mayo, señala: “Teniendo en cuenta que si bien la presente acción fue
interpuesta cuando la autoridad demandada se encontraba ejerciendo las funciones de Fiscal de
Distrito a.i., en su informe cursante a fs. 47 a 48 alega haber reasumido sus funciones de Fiscal de
Materia en la División contra Delitos de índole Económico y Financieros de la Fuerza Especial de
Lucha Contra el Crimen, por lo que antes de entrar a desarrollar consideraciones de fondo con
relación al recurso planteado corresponde recordar que este Tribunal, ya en la SC 0325/2001-R de
16 abril, con relación a la legitimación pasiva estableció que ´…para la procedencia del Amparo
Constitucional es ineludible que el Recurso sea dirigido contra el sujeto que ejecutó el acto ilegal o la
omisión indebida, es decir el agraviante´. En ese entendido, un recurrido carece de legitimación
pasiva cuando no se da esta coincidencia, así la SC 0410/2001-R de 8 de mayo: ´…no se presenta la
coincidencia que tiene que darse entre la autoridad que presuntamente causó la violación a los
derechos y aquella contra quién se dirige la acción´.
Ahora bien, revisada la normativa citada en el Fundamento Jurídico III.3 del presente fallo, se tiene
que el accionante no agotó la vía ordinaria a efectos de lograr que sea nombrado depositario del
vehículo que él señala que es propietario, sino que directamente acudió a la jurisdicción
constitucional, quitando así a la autoridad ordinaria competente la posibilidad de analizar su
situación y de corregirla si su caso lo ameritaba. Dicha autoridad competente ante quien el
accionante debió previamente acudir para activar la jurisprudencia constitucional era el Juez de
Instrucción en lo Penal al que el Fiscal de Materia puso en conocimiento el respectivo inicio de
investigaciones emergentes de la denuncia interpuesta contra Gregorio Rojas Vásquez y Gabriel Riva
Carrillo. Al no haber procedido de ese modo el accionante y de acuerdo al Fundamento Jurídico III.2
de la presente Sentencia Constitucional Plurinacional, se establece claramente que el accionante no
agotó la vía ordinaria, por tanto, no es posible ingresar al análisis de fondo de la presente acción
tutelar.
POR TANTO
El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo previsto
en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve CONFIRMAR la
Resolución de 22 de agosto de 2011, cursante de fs. 119 a 120, pronunciada por el Juez Tercero de
Partido Mixto y de Sentencia Penal de Sacaba del Distrito Judicial -ahora departamento- de
Cochabamba; y en consecuencia, DENEGAR la tutela, con la aclaración de que no se ingresó al
análisis de fondo de la problemática planteada.