El Período de Rosas en Argentina: Características y Legado

El período de Rosas en Argentina representa una etapa significativa en la

historia del país sudamericano, caracterizada por el autoritarismo, las guerras
civiles y la consolidación de un modelo de gobierno particular. Juan Manuel de
Rosas, figura central de este período, dejó un legado duradero que influyó en la
configuración del estado argentino moderno.

Juan Manuel de Rosas emergió como una figura política dominante en

Argentina a partir de la década de 1820. Su ascenso al poder estuvo marcado
por su liderazgo en las luchas entre unitarios y federales, dos facciones políticas
enfrentadas por el control del país. Rosas, identificado con el federalismo,
defendía un modelo de gobierno más descentralizado y autoritario, en
contraposición a los unitarios, partidarios de un estado centralizado y liberal.

Durante su gobierno, que se extendió desde 1829 hasta 1852, Rosas impuso un
régimen autoritario caracterizado por el culto a la personalidad, la represión
política y el control absoluto sobre la vida política y social del país. Su lema
"¡Mueran los salvajes unitarios!" simbolizaba la polarización política y la
violencia que caracterizó a este período.

Una de las facetas más destacadas del gobierno de Rosas fue su papel en las
guerras civiles argentinas, especialmente en la llamada "Guerra del Litoral" y la
"Guerra de la Confederación". Estos conflictos enfrentaron a las provincias
federales lideradas por Rosas contra las provincias unitarias, apoyadas por
potencias extranjeras como Francia y el Reino Unido. Aunque Rosas logró
mantenerse en el poder durante gran parte de este período, su gobierno
terminó en 1852 con su derrocamiento en la batalla de Caseros.

El legado de Rosas en la configuración del estado argentino moderno es objeto

de debate y controversia. Si bien algunos sectores lo consideran un defensor de
la soberanía nacional y la identidad nacional, otros lo ven como un dictador
sanguinario que violó los derechos humanos y reprimió brutalmente a sus
oponentes políticos.

En conclusión, el período de Rosas en Argentina fue una etapa turbulenta y

controvertida en la historia del país. Su gobierno autoritario y su papel en las
guerras civiles dejaron un legado complejo que aún hoy sigue siendo objeto de
análisis y reflexión en la historiografía argentina.