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UNIDAD IV
Integrantes:
Alvarez Yaritza 6.673.985
García Mariana
Urbano Solbey
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Las normas establecen los estándares que deben cumplirse, mientras que los
procedimientos describen cómo cumplir esos estándares a través de una
secuencia ordenada de pasos. Ambos elementos son esenciales para el
funcionamiento efectivo de una organización y contribuyen a la mejora continua.
1. Normas:
Se detallan las normas internas y externas que deben seguirse en la
organización. Estas normas pueden abarcar aspectos como seguridad,
calidad, medio ambiente, regulaciones gubernamentales, entre otros.
2. Procedimientos:
Se describen los procedimientos operativos estándar (SOP) para llevar a
cabo actividades o procesos específicos. Estos procedimientos incluyen
una secuencia ordenada de pasos, responsabilidades, recursos necesarios
y criterios de calidad o rendimiento esperados.
3. Políticas:
Se presentan las políticas organizacionales que rigen el comportamiento, la
toma de decisiones y las prácticas internas dentro de la organización.
4. Diagramas o flujogramas:
Se incluyen diagramas que representan gráficamente las etapas y las
interacciones entre ellas, lo que facilita la comprensión visual de los
procesos.
5. Descripciones de puestos:
A menudo se incorporan descripciones detalladas de los puestos relevantes
para los procesos descritos en el manual.
1. Identificación de procesos:
El primer paso es identificar todos los procesos y actividades que se llevan
a cabo en la organización. Es importante tener una comprensión clara de
las operaciones para poder documentarlas adecuadamente.
2. Documentación detallada:
Para cada proceso, se debe describir detalladamente cada paso a seguir,
los responsables de cada tarea, los recursos necesarios, los tiempos
estimados y cualquier otra información relevante. Es fundamental ser
exhaustivo en esta etapa para asegurar la comprensión y ejecución
correcta de las actividades.
3. Estandarización y normatividad:
Establecer normas y estándares para la ejecución de cada proceso. Esto
incluye definir los criterios de calidad, tiempos de ejecución, formatos de
reporte, entre otros aspectos que aseguren la uniformidad en la operación.
4. Revisión y aprobación:
Los manuales deben ser revisados por los responsables de cada área y
aprobados por la dirección antes de su implementación. La
retroalimentación durante esta etapa es crucial para garantizar la
efectividad de los manuales.
5. Comunicación y capacitación:
Una vez elaborados los manuales, es fundamental comunicarlos a todo el
personal involucrado y proporcionar la capacitación necesaria para su
entendimiento y aplicación efectiva.
Las técnicas que por lo general se emplean para recolectar información son:
Revisión bibliográfica, entrevista y observación directa.
2. Análisis de la información
¿Qué se hace?
¿Quién lo hace?
¿Cuándo se hace?
¿Con qué frecuencia?
¿Dónde se hace?
¿Por qué se hace?
¿Qué registros se emplean?
En este punto es importante realizar un análisis cuidadoso para asegurarse de no
perder ningún detalle, ni obviar ningún elemento fundamental para la ejecución de
las actividades.
Los manuales son para facilitar la información de los procesos, de forma que esta
ejecución sea eficaz. Es por ello, que deben ser redactados de forma simple.
Los manuales deben ser distribuidos a las áreas. Sin embargo, previo a ello, se
recomienda realizar una formación para notificar de los cambios a los
involucrados.
De igual forma, se resguardan los documentos originales de forma digital y/o
física. Manteniendo el control de cada una de las copias distribuidas por área.
7. Actualización de documentos
Los controles que se realizan a través de listados internos, deben especificar las
fechas de elaboración, fechas de revisión y fechas de caducidad de cada uno de
los documentos. De igual forma, se debe asegurar que los documentos obsoletos
se encuentren controlados y, que los vigentes se adapten a las actividades
actuales de la organización.