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EL PERDÓN EN LA FAMILIA
MASTER DE FAMILIAS INVIERNO
ESQUEMA DIARIO
CATEQUESIS COMÚN2
1
La catequesis de buenos días se imparte en la capilla, tras el ofrecimiento del
día, antes del desayuno. Normalmente la impartirá un seminarista u otra persona.
2
La catequesis común la imparte un solo monitor para todos los niños.
3
En la catequesis por grupos tratamos de concretar lo aprendido en la catequesis
común a la edad y la situación familiar propia de cada niño. Se trata de que
identifiquen lo aprendido con su propia familia.
4
El resumen de lo hablado es preferible que sea de manera participativa, que
sean los propios niños los que vayan recapitulando lo aprendido, con nuestra
ayuda si hiciese falta.
5
La pequeña manualidad, siempre algo muy sencillo, tiene la finalidad de repetir
lo aprendido de una forma visual, para afianzarlo. Además, lo expondremos en
algún lugar de la casa en el que los padres puedan ver qué tema han tratado sus
hijos y cómo lo han hecho, para que, además de estar informados, puedan
trabajar el tema con ellos si quieren. También de esta manera pueden ser
conscientes del trabajo que hacemos con ellos.
DÍA 1: COMO EL HIJO PRÓDIGO, SOMOS PERDONADOS
1. Presentación:
a. Cada niño dice cosas que no hace bien por las cuales recibe el
perdón en su familia. ¿Qué cosas nos perdonan en nuestra
familia? Cuando me porto mal, cuando pego a mi hermano,
cuando no ayudo, etc.
b. El monitor recoge lo que dicen los niños y les pregunta cómo
se sienten cuando son perdonados en su familia: se sienten
bien, aliviados, queridos, etc.
c. Cada niño realiza un propósito para cambiar aquellas cosas
que no hace bien. Ha de ser lo más concreto posible (VER
ANEXO II).
a. El monitor les ayuda a que cada niño comente las cosas por
las que puede pedir perdón a los padres. Cuantas más cosas
vayan diciendo, más les va a ayudar a recordar y a darse
cuenta de más cosas.
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QUEBRANTARRISAS, EL ROMPEFAMILIAS
Quebrantarrisas era un pequeño duende que trabajaba en la oficina
rompefamilias. Al llegar a la oficina, recibió el encargo de la semana: acabar
con la familia Sánchez, siempre tan felices. Pobrecillos, cuando
Quebrantarrisas recibía un encargo, nunca fallaba.
Se acercó hasta su casa, y, escondido bajo la mesa de la cocina, esperó
hasta que el papá y la hija mayor recogieron los platos, y… ¡Doble
zancadilla! ¡Todos los platos rotos! Y comenzó la gran discusión. Se
acusaban el uno al otro de la zancadilla, y la mamá, al ver el desastre,
comenzó a echarles una gran bronca. Entonces, Quebrantarrisas siguió con
su plan. Fue a la habitación del bebé y pellizcándole, le hizo llorar. Y más
discusiones. Papá Sánchez durmió al niño, pero Quebrantarrisas volvió al
ataque y le volvió a pellizcar. De nuevo estalló la discusión entre los papás:
que si no sabes dormir al bebé, que si la culpa es tuya…
Quebrantarrisas se fue de la casa satisfecho y frotándose las manos por
un trabajo bien hecho: en unos días ya no quedaría nada de aquella familia.
Sin embargo, unas semanas después, Quebrantarrisas recibió en la
oficina un informe. La familia Sánchez seguía entre las familias más felices.
El duende rompefamilias no daba crédito y decidió investigar el caso. Se
acercó a la familia y les observó durante todo el día. Descubrió que cada
noche la familia Sánchez se reunía a rezar el Padrenuestro. Sin embargo,
antes de acabarlo, después de decir “perdona nuestras ofensas como
también nosotros perdonamos a los que nos ofenden”, dejaban un rato de
silencio, y abrazándose decían todos juntos: “Porque nos queremos, nos
perdonamos. Perdonar es una forma de amar”. Y después de eso,
acababan de rezar todos juntos.
Quebrantarrisas, muy sorprendido y decepcionado, volvió a su trabajo,
sabiendo que nunca iba a poder cumplir su trabajo de acabar con la familia
Sánchez.
ANEXO VII: EL PADRENUESTRO
Las frases se pueden pegar en una pared, y una vez que esté
ordenado, se pueden colorear las frases que hablan del perdón.