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UNIVERSIDAD NACIONAL JOSÉ FAUSTINO

SÁNCHEZ CARRIÓN
FACULTAD DE INGENIERÍA AGRARIA, INDUSTRIAS
ALIMENTARIAS Y AMBIENTAL

ESCUELA PROFESIONAL DE INGENIERÍA AGRONÓMICA

TEMA
Biodiversidad de Chirimoya (Annona cherimola M.) en el Perú

Curos: FRUTALES NATIVOS

Docente: LUIS ALBERTO GOÑY AMERY

Estudiante: JESUS ERNESTO SIPAN VEGA

Ciclo: X - 2023

HUACHO - PERÚ
2023
Biodiversidad de Chirimoya (Annona cherimola M.) en el Perú

I. Resumen

La chirimoya perteneciente a la familia Annonaceae, es una planta nativa de la


región alto andina de Ecuador y Perú con gran diversidad en la provincia de Loja, en la
que podemos encontrar un gran número de poblaciones o ecotipos, con una amplia
diversidad genética, se encuentra formando densos bosques silvestres y en algunos
huertos agrícolas (Rodríguez et al., 2015).

Este exquisito fruto ya se cultivaba en tiempos de los Incas, aunque se discute la


exactitud del origen de esta especie, las últimas teorías apuntan hacia Ecuador y Perú.
Así, Alphonse de Candolle considera que lo más probable es que sea indígena de
Ecuador y quizás también de Perú. Asimismo, el Dr. Guzmán (1951) considera que el
centro de origen de esta especie está en la vertiente interandina cuyos ríos desembocan
en el Marañón a una altura comprendida entre los 2200 y los 1500 m. Debajo de los
1500 m., las condiciones climáticas se hacen sumamente precarias para mantener la vida
de las plantas que no tienen adaptaciones xerofíticas, desaparece prácticamente todo
vestigio de chirimoya (Gayoso y Chang, 2017).

Se pueden encontrar chirimoyos en estado silvestre y cultivado hacia el norte de


su zona de origen, en algunas partes del sur de México, Centroamérica y parte norte de
Sudamérica. Hacia el sur alcanza Bolivia y Argentina. La chirimoya es la única especie
del género Annona que se desarrolla en zonas subtropicales. A lo largo y ancho de la
provincia de Loja, se encuentran verdaderos bosques en estado silvestre, en donde se
puede observar a simple vista una impresionante variabilidad genética que han hecho
subsistir a dichas poblaciones pese a las inclemencias ecológicas y malos tratos del
hombre. A medida que nos alejamos de la provincia de Loja, ya sea hacia el norte como
hacia el sur, la presencia de este frutal va desapareciendo tanto en diversidad genética
como en intensidad, lo cual nos indica que la provincia de Loja, especialmente las zonas
subtropicales, pueden ser el centro genético y de origen de la chirimoya (Gardiazabal
1993).
Se conocen numerosos cultivares de chirimoya, la mayoría seleccionados en
regiones templadas. La forma de los carpelos en su exterior constituye un carácter
constante que permite reconocer los cultivares, conociéndose cinco formas principales:

Lisa, frutos que tienen la piel prácticamente lisa, ya que los bordes de los
carpelos quedan fundidos y son poco aparentes.

Impresa, el fruto presenta depresiones suaves en la piel, semejando placas que originan
Figuras con relieve. Poseen forma acorazonada y a veces algo arriñonada.

Mamillata, presentan la piel lisa en su parte media y distal, mientras que la


sección basal presenta en la piel marcas y tetillas.

Tuberculata, son frutos que poseen una cubierta fuertemente reticulada, y


cuando pequeños, protuberancias marcadas, las que se atenúan al madurar, adquiriendo
una forma más o menos redondeada o globosa.

Umbonata, estos frutos presentan piel reticulada con numerosos carpelos y


protuberancias aguzadas. Con una forma semejante a una piña (Gardiazabal 1993).

El chirimoyo es un frutal de escasa importancia a nivel mundial. A pesar de estar


muy distribuido se puede decir que su cultivo está poco difundido, existiendo de forma
comercial únicamente en Perú, España, Chile, Bolivia, Ecuador, Estados Unidos,
Colombia, Sudáfrica e Israel. En España el consumo es significativo y toda la
producción va destinada al mercado nacional debido a la escasa resistencia del fruto al
transporte. Su expansión está muy limitada debido al número reducido de variedades
comerciales disponibles, que además concentran la producción en determinadas fechas
y satura el mercado. Otra razón de su reducida difusión se debe a sus estrictas
exigencias edafoclimáticas (Gayoso y Chang, 2017).

A. cherimola es muy apreciada por el aroma y el delicado sabor de sus frutos, de


aquí que la aceptación desde el punto de vista comercial como fruta exótica sea
ampliamente divulgada a nivel internacional, existiendo marcado interés en su
expansión. La pulpa de estos frutos es utilizada en forma natural o para la producción de
jugos, batidos, helados. Su mercadeo generalmente es a escala local, regional y
nacional, raramente ocurre a nivel internacional. Sin embargo, a medida que la
chirimoya comienza a ser más conocida es objeto de mayor atención por parte de
investigadores, cultivadores y consumidores de un gran número de países (Grossberger
et al., 1999).

La valorización de los recursos genéticos de especies de frutales no es tarea fácil


e implica no solamente la investigación en áreas de la genética, ya que si se pretende
que esta valorización sea eficaz es necesario conocer, además del estado actual de los
estudios genéticos, la distribución y conservación de dichas especies. El conocimiento
sobre la diversidad es la base para la conservación y el uso eficiente de sus recursos
genéticos y es frecuentemente desconocida en determinados países y regiones (Segura
et al., 2009).

La familia Annonaceae comprende cerca de 2 500 especies agrupadas entre 130


y 140 géneros; constituidos por árboles y arbustos, distribuidos en las regiones
tropicales de América, Asia, y Madagascar. En la familia Annonaceae hay géneros que
se caracterizan por el interés económico de sus frutos, tal es el caso del género Annona
spp. que consta de aproximadamente 120 especies, de las que unas 20 se cultivan por
dicho interés. Dentro de las especies más cultivadas se encuentran la Annona cherimola
Miller, Annona squamosa, Annona muricata y Annona reticulata; originarias de Sur o
Meso-América. Desde 1982 se ha intensificado la investigación de las especies de este
género, debido fundamentalmente al descubrimiento del gran potencial de los productos
naturales que contienen, con amplia variedad de actividades biológicas, que las mismas
poseen (Franco, 2008).

De las especies anteriormente citadas Annona cherimola M. es la única


altamente adaptada a condiciones tropicales y sub-tropicales, el resto solo puede lograr
un crecimiento más eficiente en condiciones tropicales. A esta especie la Academia de
Ciencias de Estados Unidos de América le ha prestado especial atención en sus
publicaciones. Annona cherimola constituye parte de la flora natural en Centro América
y América del Sur. Sus valores medicinales y nutricionales fueron explotados por
indígenas antes del descubrimiento del Continente Americano por los europeos donde
este frutal ha sido preservado tradicionalmente; aunque aún existe desconocimiento para
su cultivo en plantaciones comerciales. A pesar de que esta especie forma parte de la
flora nativa de algunos países como Colombia, Perú, Ecuador y las Islas del Caribe, los
conocimientos técnicos en términos de plantaciones, mercadotecnia e industrialización
son insuficientes (Murillo, 2011).

II. Introducción

La chirimoya (Anona cherimoia, mill), considerada por muchos la reina de las


frutas andinas, es originaria de Colombia, Ecuador y Perú; hace parte de nuestra
biodiversidad no aprovechada y agro industrializada en la cadena frutícola regional y
nacional; posee un excelente potencial de mercado por bajísima oferta a nivel local,
regional y nacional, altos precios y gran aceptación por los consumidores por sus
características organolépticas (González, 2013).

Los bajos rendimientos en producción que se logran hoy en el país en la gran


mayoría de pequeñísimos cultivos, casi artesanales, no empresariales, son el resultado
de los inadecuados procesos de cultivo tradicional, prácticamente sin tecnología
específica, equipos, insumos y competencias laborales; fundamentalmente se observan
como limitantes y causas, el uso de ecotipos no seleccionados y probados, la
polinización natural y el desarrollo no controlado del árbol, el no uso de buenas
prácticas para definir marcos de plantación, podas, manejo de riego, sostenimiento del
equilibrio con manejo integral de suelos y protecciones, manejo de plagas y
enfermedades principalmente (Cerrón, 2004).

Es una variedad que presenta una alta diversidad de ecotipos (es una variación
asociada a la expresión FENOTIPICA, distinta por la interacción de los genes con el
medio ambiente), que difieren en forma, color, sabor, aromas, características y valores
nutricionales. Perú, así como Ecuador han avanzado a través de investigaciones con
bancos genéticos, estudiando y aislando ecotipos claves, evaluando y seleccionando y
liberando comercialmente varios de ellos de gran aceptación (Lobo et al., 2007).

En la selección de los ecotipos ofrecidos, se observa alta producción, sabor


exquisito, bajo número de semillas, alta relación Pulpa/Fruta total, el color de su pulpa,
aroma y condiciones nutritivas, la producción distribuida a lo largo del año y la
longevidad en duración de producción. En este cultivo ha de tener prioridad sobre los
procesos críticos y las causas limitantes de la producción como el manejo de la
floración, polinización, podas de formación, mantenimiento, sanitaria, equipos, manejo
de suelos, y aguas, por otro lado, el control de plagas y enfermedades que son altamente
limitantes, de esta forma se podrá asegurar una producción sostenida (González, 2013).

III. Antecedentes

3.1. Centro de origen

Gardizabal y Rosenberg (1993) señalan que la chirimoya (A. cherimola Mill.)


tiene su origen en los valles interandinos del sur de Ecuador y norte de Perú,
comprendidos entre 1500 y 2000 msnm. Esta planta es originaria de las laderas
subtropicales de los valles interandinos y afluentes del río Marañón entre Colombia,
Ecuador, Perú, hasta Bolivia.

Según Scheldeman (2002) considera los valles interandinos templados y secos


del sur de Ecuador y norte de Perú como el centro de origen de la chirimoya. La
chirimoya es una planta nativa de la región altoandina de Ecuador y Perú con gran
diversidad en la provincia de Loja, en la que se puede encontrar un gran número de
poblaciones o ecotipos, con una amplia diversidad genética, se encuentra formando
densos bosques silvestres y en algunos huertos agrícolas.

3.2. Distribución

La chirimoya se cultiva comercialmente en diferentes países como: España,


Costa Rica, Perú, Bolivia, Chile, Colombia, Estados Unidos, Sudáfrica e Israel, y en
nuestro país se puede encontrar cultivares y poblaciones como en la provincia de Loja,
específicamente en el valle de Vilcabamba donde aún sobreviven plantas silvestres y
huertos comerciales; en los valles subtropicales de la sierra como, el valle de
Guayllabamba, provincia de Pichincha es en Ecuador el cultivo comercial más
representativo, con una temperatura que oscila entre 3 y 22° C, suelo de textura franco
arenoso y con un promedio de precipitaciones anuales de 600 mm. (Feicán, 2012).

3.3. Descripción taxonómica

Según Gonzáles (2013), realiza la siguiente clasificación taxonómica de la


chirimoya:

Reino: Vegetal
División: Spermatophyta

Clase: Dicotyledoneae

Orden: Ranales

Familia: Annonaceae

Subfamilia: Annonoideae

Tribu: Annoneae

Género: Annona

Especie: A. cherimola Mill.

3.4. Descripción morfológica

Árbol

Vidal et al., (2012) menciona que el árbol de chirimoyo posee copa abierta que
alcanza un promedio de 4-10 m de altura. Es un árbol semicaduco de crecimiento
rápido, su tronco es bastante corto y en la naturaleza las plantas de chirimoya parecen
más un arbusto que un árbol. El dosel del árbol de la chirimoya es denso, con el follaje
verde oscuro. La planta de chirimoya posee corteza gruesa y lisa, o ligeramente veteada,
de color verde grisáceo y las ramas emergen de manera irregular, densas y tienden a
inclinarse. Los entrenudos son largos, de hasta 20 cm en árboles jóvenes.

Hoja

El pecíolo de la hoja es hueco en la zona de inserción con el tallo, ocultando y


protegiendo las yemas que darán origen a la próxima brotación, que puede originar
yema floral o vegetativa. La longitud del pecíolo varía de 6,0 a 12,5 mm y ligeramente
pubescente (Barrientos et al., 2004).

Yemas
Al caer la hoja las yemas que están protegidas por el peciolo comienzan su
crecimiento, teniendo la posibilidad de emitir hasta 4 brotes, los cuales permanecen en
latencia, si por algún motivo pierde un brote del mismo punto, pueden salir tres más
(Castro, 2007). Esta característica es una ventaja al dar forma al árbol, ya que nos
permite darle cualquier ángulo. Las yemas generalmente son mixtas, con flores y tallos
vegetativos (Guirado et al., 2004).

Flores

Las flores, son muy aromáticas, hermafroditas, presentan seis pétalos


amarillentos jaspeados de púrpura, son poco llamativas, solitarias o en ramilletes de dos
o tres, sobre un corto e inclinado pedúnculo inserto en las axilas de las hojas (Toro,
2009)

Fruto

El fruto de la chirimoya es un conjunto carnoso (sincarpo) de forma primitiva


con los carpelos dispuestos en espiral que se unen después de su fructificación. Cada
segmento de pulpa, es decir cada uno de los frutos, contiene una única semilla dura de
color negro en forma de judía. El fruto es cónico o en forma de corazón, alcanza entre
10 y 25 cm de longitud y hasta un máximo de 15 cm de anchura y pesa por término
medio de 250 a 800 g (Guirado et al., 2004).

3.5. Condiciones edafoclimáticas

Temperatura

El árbol de chirimoyo requiere de climas donde la temperatura oscile entre los


14-28 °C, no tolera heladas ni zonas con grandes fluctuaciones de temperatura (García
et al., 2009). Las condiciones ideales para obtener un buen cuajado de frutos son
temperaturas entre 25 y 28 °C durante la época de floración con temperaturas mayores a
30 °C junto con baja humedad relativa afecta a la fecundación al provocar pérdida de
receptividad estigmática (Orwa, et al., 2009)

Altitud
Según Orwa et al., (2009) reportan que la A. cherimola en los trópicos crece sólo
en altitudes superiores a los 700 msnm, Desarrollándose mejor entre 1200 y 1800
msnm, soportando hasta 2400 msnm.

Humedad relativa

La humedad ambiental ideal para el cultivo oscila entre 50-70 %. La saturación


permanente incide el desarrollo de organismos patógenos, mientras que si es menor a 50
% provoca reducción de receptividad estigmática (García et al., 2009)

Suelos

El chirimoyo, igual que las demás especies del género Annona que se cultivan,
se adapta a diversos tipos de suelos, como pueden ser arenosos, limo-arenosos,
arcillosos e incluso se ha visto que crecen bien en suelos pedregosos (Tacán, 2007).

3.6. Grupos varietales

a) Loevis: Los frutos de este grupo se caracterizan portener la piel lisa con los
bordes de los carpelos fundidos y poco aparentes.

b) Impressa: Los frutos presentan depresiones suaves en la piel, semejando


placas que originan figuras con relieve.

c) Umbonata: Presentan frutos con piel gruesa, reticulada, numerosos carpelos


y protuberancias pequeñas y aguzadas.

d) Tuberculata: Frutos con cubierta fuertemente reticulada y con


protuberancias, al principio marcadas pero que se atenúan al madurar.

e) Mammillata: Los frutos poseen una piel fuertemente reticulada y con


protuberancia carpelares muy marcadas (algo mayores que la Umbonata), más notorias
durante el crecimiento del fruto que en la madurez.

Esta clasificación es algo dudosa, ya que dentro de un mismo árbol aparecen


frutos de diferente rugosidad. Dentro de estos tipos se conocen muchas variedades. Las
más usadas son ‘Fino de Jete’, ‘Campa’, ‘Pacica’ y ‘Bonita’. Las variedades ‘Pacica’ y
‘Fino de Jete’ presentan una piel lisa y brillante de color verde claro. La variedad
‘Bonita’ es originaria de Califormia, y es menos lisa y de color más oscuro, lo que la
hace menos atractiva (Vidal et al., 2012).

3.7. Riego

Debido a la gran evapotranspiración de la masa foliar requiere regulares riegos;


es preciso dar una ligera labor para romper la costra originada por la presión de las
aguas. Tradicionalmente se realiza el riego a manta con una frecuencia quincenal y
descanso en invierno, aunque se recomienda el riego localizado con microaspersores
que cubran el 30-40 % del suelo a razón de 25 litros por hora (García et al., 2009).

3.8. Cosecha

La cosecha del cultivo de chirimoya en el Perú se da entre los meses de abril a


junio. La Chirimoya es un fruto compuesto de tipo subtropical que madura de 5-8 meses
después de ocurrida la polinización. Su cosecha es floreada y cada fruto se desprende
del árbol en forma manual, retirando luego el pedúnculo (Guirado et al., 2004).

 Índice: Cuando el fruto todavía está duro pero ya ha cambiado de color verde a
amarillento.
 Época: Cosechas con mayor producción comprendidas entre los meses de abril
a junio.

La Chirimoya es un fruto compuesto de tipo subtropical que madura de 5-8


meses después de ocurrida la polinización. Su cosecha es floreada y cada fruto se
desprende del árbol en forma manual, retirando luego el pedúnculo. Algunos autores
recomiendan el uso de tijeras. Otra alternativa que ha sido estudiada recientemente se
relaciona con la vellosidad que presentan los frutos durante su periodo de crecimiento y
que se desprende en las últimas etapas del desarrollo. La senescencia (muerte) y
desprendimiento de esta pilosidad ocurre antes del cambio de color, lo que significa
poder cosechar con unas dos semanas de anticipación. Se hace necesario continuar con
su estudio, para probar su validez en diferentes condiciones, en especial en cuanto a
zonas y variedades.
IV. Propuesta

El género Annona spp. presenta una amplia diversidad genética, evidenciando


los diferentes centros de origen de las especies que lo constituyen. Muchas de estas
especies son originarias de América Central y el norte de Sur América. La chirimoya
(A. cherimola) es una excepción, ya que su origen radica en la región subtropical de los
Andes. En muchas de las especies de Annona el número de cromosomas es 2n=2x=14 o
16, a excepción de la especie A. glabra que es tetraploide. Varias de las especies de este
género de la familia Annonaceae producen frutos comestibles con una pulpa altamente
valorizada, pero debido a la susceptibilidad de la piel de los frutos y al corto período de
duración de los mismos, estas especies, no ocupan actualmente un lugar destacado en el
comercio de frutas tropicales.

Con el presente trabajo es conocer las generalidades de la biodiversidad de la


chirimoya a nivel nacional

La A. cherimola-chirimoya, (del quechua chiri, «frío, fría», muya, «semillas»,


puesto que germina a elevadas altitudes) es nativa de los Andes Ecuatorianos y
Peruanos, y es considerada una de las frutas tropicales más apreciadas dentro del género
Annona spp. Presenta excelente calidad y valor comercial, siendo cultivada en los
Andes, Europa, California y regiones brasileras de clima adecuado. Posee sabor dulce y
deliciosa pulpa; se le suele denominar como la reina de los frutos subtropicales.

Se plantea que la chirimoya es una de las frutas que jugó un importante papel en
la vida de los Incas

El árbol de la chirimoya es de crecimiento lento, puede adquirir en su madurez


una altura de 7 a 8 m, presenta exuberante follaje, porte erguido y a veces ramificado. El
tallo es cilíndrico, de corteza gruesa. Su sistema radicular es superficial y ramificado,
originando dos o tres pisos a diferentes alturas, pero poco profundo. Las hojas son
simples, enteras, de disposición alterna y de forma ovada u ovada-lanceolada. Las
yemas son compuestas y pueden originar brotes mixtos (vegetativos y florales)

V. Resultados

Como en todas las especies de esta familia Annonaceae, este no es un fruto


simple sino un agregado de frutos adheridos sobre un solo receptáculo, producto de las
pequeñas flores que se fecundan por separado. Así, la chirimoya considerada como
perfecta es acorazonada y sólo se consigue en condiciones ideales de polinización
abundante y uniforme, hecha por escarabajos, como la mayoría de las especies
pertenecientes al suborden Magnoliales. La cáscara es delgada y frágil; su superficie
verde oscura, casi lisa, lleva como una red de sombras que denota los límites de cada
frutilla. El interior de la fruta, de color blanco, posee una textura carnosa, blanda,
cremosa, moderadamente jugosa, y de sabor dulce; con numerosas semillas de color
desde marrón oscuro a negro, el sabor es subácido y delicado, a veces descrito como
una mezcla entre la piña, el mango y la fresa. El número de cromosomas de la
chirimoya es diploide 2n=14, aunque también se ha reportado 2n = 16.

Es importante destacar que aún existen diversos criterios sobre la localización


exacta del centro de origen de la chirimoya, al respecto algunos autores argumentan que
la evidencia biológica de la localización exacta del centro de origen de las especies es
difícil de definir, y más si se considera que las especies de la familia Annonaceae
tienden a naturalizarse fácilmente. Algunos estudios con el empleo de marcadores
moleculares sugieren la posibilidad de Mesoamérica como segundo centro de origen de
A. cherimola.

La especie Annona cherimola se caracteriza por presentar gran diversidad,


debido a diferentes factores, dentro de estos, las características hermafroditas de la flor
y su comportamiento dicogamoprotogíneo, que promueven el cruce entre individuos o
selecciones, así como la propagación por semilla que induce alto grado de variación
genética. Todo ello, unido a la selección de los mejores frutos, inicialmente por parte de
los productores y más tarde por los investigadores, ha conllevado al establecimiento de
cultivares con propiedades más o menos fijadas.

Atendiendo a esto, un número significativo de cultivares se ha perdido. Además,


es de destacar que como la selección de los mejores cultivares se basa en indicadores
que aún están en fase de definición, tales como: calidad del fruto, rendimiento,
resistencia a plagas y enfermedades, comportamiento durante la cosecha, etc., muchas
variedades de las propuestas no son cultivadas, mientras que otras ganan en
importancia.

VI. Conclusiones

En la actualidad los frutos de anonáceas, entre ellos la chirimoya, presentan altas


cualidades organolépticas, digestivas y nutritivas, además, como especie, la Annona
cherimola Miller también es apreciada por sus propiedades medicinales e industriales
tanto en el mercado nacional como internacional. Sin embargo, aún existe
desconocimiento sobre sus características y potencialidades como planta cultivada.

La valorización de los recursos genéticos de especies de frutales no es tarea fácil


e implica no solamente la investigación en áreas de la genética, ya que si se pretende
que esta valorización sea eficaz es necesario conocer, además del estado actual de los
estudios genéticos, la distribución y conservación de dichas especies.

El conocimiento sobre la diversidad es la base para la conservación y el uso


eficiente de sus recursos genéticos y es frecuentemente desconocida en determinados
países y regiones.

La familia Annonaceae abarca a un grupo de plantas que producen frutos de


sabor exquisito, además, de su importancia económica en algunas regiones del mundo.
Está compuesta principalmente por plantas tropicales, siendo muchas de ellas nativas de
Ecuador, Perú y Brasil.

Las especies, según sus características, se agrupan en comestibles establecidas


en plantaciones comerciales, las de uso medicinal, industrial y las empleadas como
plantas exóticas y en labores de reforestación. La similitud en las especies de este
género causa a menudo confusión en la identificación popular, principalmente debido a
las denominaciones regionales

VII. Recomendaciones

 Se recomienda realizar estudios que permitan la conservación de la diversidad


de los frutales como es el caso de la chirimoya y proteger que no se pierdan estas
variedades oriundas que existen en el Perú.

 Promover mediante las intuiciones como el INIA, nuevas estrategias de manejo


para una mejor producción y firmeza de los frutos.

 Realizar estudios para identificar variedades por cada valle a nivel nacional y de
esta manera realizar el mejoramiento para la producción de este frutal de
importancia económica.

 Realizar investigaciones en las universidades que permitan realizar la


adaptabilidad de la chirimoya bajo diferentes condiciones edafoclimáticas a
nivel nacional.
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