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PROCESO DEL USO DE MEDICAMENTOS QUE DEBEN SER PRESCRITOS POR MÉDICOS U OTROS
PROFESIONALES AUTORIZADOS
- Entonces, cuando se trata de uso de medicamentos que deben ser prescritos por un profesional, el uso
racional implica responsabilidades de:
- Profesional prescriptor
- Profesional farmacéutico
- Paciente y/o su cuidador
PROCESO DEL USO DE MEDICAMENTOS QUE PUEDEN ADQUIRIRSE SIN PRESCRIPCIÓN (VENTA LIBRE)
- En este caso, el uso racional de los medicamentos recae, principalmente, en el usuario y muy
excepcionalmente, se agrega la responsabilidad del profesional farmacéutico.
- Este proceso se denominaría automedicación.
- Pero es necesario recalcar que el usuario siempre debe ser un integrante activo del proceso de uso de
medicamentos.
Ministerio de Salud
Políticas, leyes, normas, vigilancia cumplimiento de leyes y normas. Satisfacción en la atención. Educación de la
población.
Universidades que forman a profesionales de salud
Profesionales que cumplan normas y leyes y que siempre traten de buscar el uso racional. Educación de la
población.
Productores de medicamentos
Elaborar medicamentos de buena calidad. No promocionar indebidamente
Medios de comunicación
Educar, informar, no alarmar y no promocionar indebidamente
- Es así que algunas de las causas de uso irracional pueden ser de responsabilidad del profesional prescriptor,
porque:
- Indicó medicamentos cuando el problema de salud podía corregirse sin ellos.
- Prescribió un medicamento errado (principio activo, forma farmacéutica, costo)
- Estableció un período de uso inadecuado.
- No informó adecuadamente al paciente
- Otras causas de uso irracional pueden ser de responsabilidad del profesional que dispensa, porque:
- Entregó medicamentos de insuficiente calidad.
- Dispensó el medicamento errado (principio activo, forma farmacéutica)
- Recomendó cambiar el medicamento
- No informó adecuadamente al paciente
- Y finalmente el uso irracional pueden ser de responsabilidad del usuario de medicamentos, porque:
- No cumplió con las instrucciones dadas por los profesionales .
- Porque decidió, por motivación propia, cambiar el medicamento.
- Recomendó a otra persona que usara los medicamentos que él recibe.
- Porque decide usar un medicamento sin prescripción, por recomendación de otras personas.
Y ESPERO QUE.....
Aprovechando algunos de los conceptos vistos en esta clase, ustedes se conviertan en promotores del uso
racional de medicamento
Automedicación
La automedicación es la utilización de medicamentos por iniciativa propia sin ninguna intervención por parte
del médico (ni en el diagnóstico de la enfermedad, ni en la prescripción o supervisión del tratamiento).
La automedicación responsable puede ser conveniente si se utiliza para tratar síntomas menores como por
ejemplo el dolor, la fiebre, la acidez de estómago, el resfriado, etc. y durante un tiempo limitado. De hecho
existen medicamentos que no necesitan receta médica para comprarlos en la farmacia. Aun así, que un
medicamento no requiera receta para su dispensación, no quiere decir que sea inocuo y no pueda resultar
perjudicial en determinadas situaciones puesto que no deja de ser un medicamento. Por este motivo, delante
de cualquier duda debe consultar con el médico.
Un caso diferente seria la automedicación con medicamentos que requieren receta médica para su
dispensación y que por lo tanto deben ser prescritos por un médico. Esta práctica está desaconsejada. Un
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ejemplo seria tomar antibióticos sin prescripción médica ante la sospecha de una infección. Los antibióticos no
se deben tomar nunca por iniciativa propia y sin la supervisión de un médico.
La automedicación sin control médico o farmacéutico compuerta una serie de riesgos para la salud que en
muchos casos son desconocidos por los ciudadanos:
Estos riesgos se pueden evitar siguiendo unos consejos básicos sobre la automedicación:
1. No tome ningún medicamento que deba ser prescrito por un médico, sin su previa supervisión.
2. Pida consejo al farmacéutico en caso de necesitar medicamentos que no requieren receta médica para su
dispensación.
3. En caso de embarazo, lactancia materna, enfermedades crónicas o si se trata de niños, consulte siempre al
médico antes de tomar ningún medicamento.
4. La automedicación debe tener una duración razonable. Si los síntomas continúan o su estado empeora
consulte a su médico.
5. Informe a su médico/s de todos los medicamentos que toma o ha tomado (también hierbas medicinales,
vitaminas, suplementos dietéticos, homeopatía, etc.).
6. Lea y conserve el prospecto de todos los medicamentos. Es importante saber qué se toma, porque sólo toma
y como y cuando se debe tomar
7. Conserve los medicamentos en su embalaje original. Éste contiene información importante como la
caducidad, el lote, si se debe guardar en nevera, etc. Además el embalaje protege el medicamento y garantiza
su adecuada conservación.
8. Evite el consumo de alcohol cuando esté tomando medicamentos porque puede afectar a su capacidad de
reacción por ejemplo en la conducción de vehículos o en la realización de otras actividades peligrosas.
El organismo humano acoge billones de microorganismos, nuestro cuerpo convive con protozoos, hongos y
bacterias que en algunos casos son beneficiosos, como por ejemplo la flora intestinal normal.
Los antibióticos son fármacos que se utilizan tanto en medicina humana como veterinaria para la profilaxis y el
tratamiento de las enfermedades infecciosas producidas por bacterias. Aunque los primeros antibióticos se
descubrieron hace más de setenta años, su uso como medicamentos para el tratamiento de las infecciones no
se generalizó hasta los años 40.
El uso de los antibióticos se ha convertido muy popular gracias a que se ha demostrado que son medicamentos
eficaces y seguros. Esto ha hecho que durante mucho tiempo hayan estado utilizando de forma incluso
indiscriminada. Los antibióticos son una excelente arma terapéutica pero, mal utilizados, podrán consecuencias
negativas, tanto para la salud individual como para la salud pública. Partiendo de la base de un diagnóstico
cuidadoso, el buen uso de los antibióticos incluye la selección del agente más adecuado, a la dosis correcta y
durante un periodo de tiempo apropiado para eliminar las bacterias patógenas de forma rápida y efectiva.
El uso inadecuado de los antibióticos viene definido, básicamente, por tres situaciones: sobreutilización, mala
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utilización y infrautilización Esta situación proporciona un medio idóneo para el desarrollo de mecanismos de
adaptación de las bacterias que se traducen, en la práctica, en el desarrollo de resistencias bacterianas.