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CRIANZA ASERTIVA

¿CÓMO CONSTRUIR UN APEGO SEGURO Y CUIDAR DE LA SALUD


MENTAL INFANTIL?
Durante mucho tiempo se ha mantenido la premisa de que los niños y las
niñas deben pasarlo mal para aprender. Dicha idea viene acompañada de
frases coloquiales como "que sufra para que aprenda" o "si no le duele, no
aprende". No obstante, en respuesta a las consecuencias de un paradigma
de crianza basado en el autoritarismo, han surgido formas de crianza
opuestas, centradas en la permisividad y, en cierto modo, en la negligencia.
Estas últimas se apoyan en premisas como "al niño no hay que ponerle
límites, eso interrumpe el libre desarrollo de su personalidad". Es muy
común tender a los extremos y es probable que esto funcione en situaciones
límites, como eliminar hábitos que son perjudiciales para la salud, pero
para la crianza no es lo idóneo. Si quiere descubrir los elementos clave para
construir un apego seguro con sus hijos, ha llegado al libro indicado. La
psicóloga y psicoterapeuta Milena González presenta en este libro la
importancia de aprender a educar desde el amor que sostiene y los límites
que protegen. El amor y los límites en la crianza van de la mano, no riñen
entre ellos. Y lo uno y lo otro es tan necesarios para la salud emocional del
niño como lo son el alimento y el sueño para su salud física.
Se basa en una relación positiva padres e hijos, ya que lo que dice uno, el
otro no lo contradice.
La comunicación es importante en todo proceso de la vida, por lo que, al
momento de inculcar al niño, desde temprana edad, los padres deben hablar
un mismo lenguaje y fomentar la convivencia en bien del menor.
Por ello, es necesario implementar una crianza asertiva, donde ambos se
comuniquen, lleguen acuerdos en todo lo que harán con sus hijos, en
términos de reglas de la casa, disciplina, etc., explicó la psicóloga Marissel
Barrios de la Policlínica San Juan de Dios en La Villa de Los Santos.
Esta debe ser basada en el amor, el respeto y la comprensión, tomando en
cuenta las necesidades del niño y lograr fortalecer un vínculo afectivo entre
padres e hijos, aclaró Barrios.
6 pasos para poner en práctica la crianza asertiva

El primer paso es que, los padres, o quienes estén a cargo de la crianza de


los niños decidan cuáles serán las reglas y normas, cuáles son los límites,
cómo establecerán la disciplina, horarios, etc. así como las consecuencias
que pueden existir si estos no son respetados. Una vez establecidas “las
reglas del juego” será fundamental que se respeten, en primer lugar, por los
padres, evitando que sean cambiantes, es decir, mantener constancia y
congruencia. Los padres o las figuras de crianza deberán ser un equipo
buscando no contradecirse en especial frente a los hijos.

Con “el plan a seguir” establecido será tarea de los padres compartirle a los
hijos el mismo; es importante que todos conozcan que se espera de ellos,
cuáles son sus tareas y obligaciones, pero también cuáles son sus derechos
y beneficios. Habrá que explicar de manera clara buscando establecer un
vínculo de comunicación abierta y afectiva entre padres e hijos.

Algunas sugerencias para lograr la crianza asertiva son:

 Establecer y respetar límites; el objetivo de los limites es ayudar a


que los niños aprendan a autorregularse, así como elegir aquellos
comportamientos que sean aceptables sobre los que no. Lo más
importante es que los padres sean los primeros en cumplir los límites
que establezcan y que en caso de que no se respeten que se sigan las
consecuencias establecidas (evitar los castigos).
 Ser flexibles; si las reglas establecidas no funcionan siempre se
pueden generar nuevas reglas, considerar también que si cambian las
condiciones pueden flexibilizarse las normas para que puedan
cumplirse.

 Promover la comunicación y la confianza; buscar conocer sus


emociones y sus pensamientos, lograr generar un espacio de dialogo
en el que todos tengan tiempo y especio para expresarse y recibir
respuestas.
 Buscar fortalecer la autoestima; los niños aprenden sobre ellos
mismos a partir de lo que otras personas les dicen de ellos; por
medio de nuestras expresiones, palabras, afecto, etc. es fundamental
reconocer sus logros y las cosas que hacen bien. Evitar enfocarnos
solo en los fracasos.

 Amor y aceptación incondicional; éstos no deben ser dependientes


de las acciones, es decir, no condicionar el afecto a que los niños
sigan o no las reglas establecidas. Cuando sea necesario corregir o
llamar la atención; evitar criticar, juzgar o culpar.

 Ser un modelo a seguir; gran parte del aprendizaje que obtienen los
niños ocurre a partir de lo que observan, por lo que es importante
tener un comportamiento que sea congruente con lo que se les dice o
pide.

Si buscamos practicar la crianza asertiva es fundamental tener presente que


ser asertivo se refiere a poder expresar nuestras necesidades, deseos,
sentimientos y opiniones de una manera clara, sin agredir o afectar a los
demás. El pensar en una crianza asertiva permite proporcionar estructura,
ayudar a la auto-regulación emocional, reconocer las emociones y
encontrar formas adecuadas de expresarlas. Incluye establecer reglas claras,
pero con la apertura de poder llegar a acuerdos. Implica congruencia entre
lo que se dice y lo que hace, y lo más importante busca una relación
positiva entre padres e hijos

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