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UNIVERSIDAD DE LAS FUERZAS ARMADAS “ESPE”

DEPARTAMENTO CIENCIAS DE LA VIDA

CARRERA DE INGENIERÍA AGROPECUARIA

EXTENSION SANTO DOMINGO

PERÍODO : Octubre 2018 – Febrero 2019

ASIGNATURA : Producción de rumiantes

ALUMNOS : Armijos Hernan; De la Cruz Danilo, Sánchez Juan, Condo

Dayana; Porozo Jayerlin; Moreno Karol; Macas Marjorie;

Arias Yadira

NIVEL : Sexto

DOCENTE : Dr. Félix Valdivieso

FECHA : 21 -01- 2019

TEMA : “Estrés térmico, su efecto en las reses rumiantes, efecto del


calor en el estrés térmico”

SANTO DOMINGO – ECUADOR


I. INTRODUCCIÓN

Los bovinos son animales de sangre caliente por tal razón deben
mantener constante su temperatura corporal. Gracias a los mecanismos
de regulación térmica de que disponen, estas hembras se muestran en
general más tolerantes al frío que al calor o, dicho de otro modo,
mantienen la homeotermia más fácilmente con temperaturas bajas que
con las altas, de donde se infieren pérdidas de productividad más
prontas y acusadas en el segundo caso que en el primero (Nogal, 2015).

Si a la subida de la temperatura ambiental (TªA) se une el abundante


calor producido a resultas de la intensa actividad metabólica que
caracteriza a las vacas lecheras, más difícil aún les resulta a estas
hembras mantener el equilibrio térmico, prueba evidente de su especial
sensibilidad al calor ambiental (Nogal, 2015).

II. OBJETIVOS

II.1. Objetivo general

 Investigar sobre el estrés térmico, su efecto en las reses rumiantes, efecto


del calor en el estrés térmico.

II.2. Objetivos específicos

 Determinar las consecuencias que provoca el estrés térmico en la crianza


de rumiantes.
 Conocer los diferentes mecanismos que se pueden aplicar en ganadería
para evitar el estrés térmico.
 Determinar los efectos directos e indirectos que ocasiona el estrés
térmico en rumiantes y como afecta a la producción.
III. MARCO TEÓRICO

III.1. Estrés calórico en bovinos


La temperatura del ambiente y los niveles de humedad pueden producir estrés a su
ganado, lo cual puede afectar el desempeño y la salud (Beltrán, 2018).

Aún un estrés calórico leve puede tener efectos significativos en el corto plazo sobre la
productividad. También puede haber un impacto sobre la salud y la fertilidad en
general. Las vacas de mayor productividad se ven más afectadas porque ellas generan
más calor mientras digieren el alimento adicional necesario para una mayor producción
de leche (Beltrán, 2018).

Las vacas también se ven más afectadas durante ciertos períodos críticos. Apenas un 10
% de las inseminaciones en ganado bajo estrés calórico producen preñeces y las vacas
bajo estrés en el inicio de la lactancia, acusan una fertilidad disminuida 2-3 meses
después,debido a daño en el desarrollo folicular (Beltrán, 2018).

III.2. Manejo
 Proporcione sombra y ventilación adecuada.
 Optimice el suministro de agua.
 Suministre alimento durante los períodos más fríos al final de cada día. Asigne 33%
del alimento diario en la mañana y 67% en la tarde.
 Instale aspersores de agua en el patio general y a lo largo del comedero. Utilice
aspersores de gotas grandes y ventiladores para garantizar la evaporación del agua.
III.3. ¿Qué es el stress calórico?
Los bovinos al igual que todos los mamíferos, son animales homeotermos, es decir,
organismos que a pesar de las fluctuaciones en la temperatura ambiental son capaces de
mantener relativamente constante la temperatura corporal. Esta capacidad es esencial
para una multitud de reacciones bioquímicas y procesos fisiológicos asociados con el
normal metabolismo; incluso, también es de interés para el funcionamiento del tejidos
cerebrales (Páez, 2016).

El calor corporal total procede de tres fuentes básicas que son, en orden de importancia,
el metabolismo normal, el medio ambiente y la actividad física y productiva.

La vaca usa el 60-65% de la energía consumida diariamente en la producción de carne o


de leche y el 35-40% es convertida en calor (Páez, 2016).

Cuando el animal requiere disipar el calor emplea dos tipos de mecanismos: la


transmisión que es responsable del 75% del calor disipado por el bovino utilizando los
sistemas de radiación, conducción y convección, y la vaporización que es responsable
del restante 25% del calor disipado utilizando los sistemas de transpiración o sudoración
y de expiración o jadeo (Páez, 2016).

Los bovinos poseen un sistema de


sudoración deficiente frente a otras
especies como el hombre y el caballo, en
los cuales es muy eficiente. La disipación
de calor por la excreción de heces y orina
no es relevante

El primer punto crítico se ha denominado


termoneutralidad que corresponde a la temperatura ambiental de 18ºC en la cual el calor
corporal está en equilibrio (Páez, 2016).

El segundo punto crítico es el rango de temperatura ambiental entre los 6ºC y los 21ºC
denominado zona de confort o comodidad térmica, entendida ésta como la zona en la
cual la vaca obtiene por los mecanismos termorreguladores normales, el ajuste de la
temperatura interna sin gasto alguno de energía adicional (Páez, 2016).
En cambio, cuando la temperatura excede los 27ºC, aún con niveles bajos de humedad,
la vaca se encuentra por fuera de la zona de confort y empieza a presentar (Páez, 2016).

Además, relacionado con este asunto, desde los años 60 se dispone de un Índice de
Temperatura Humedad, ITH. El aumento de cada punto en el ITH por encima de los
18o C significa en ganado de leche:

• Disminución de 0,26 kilos de leche por día

• Disminución del consumo de 0,23 kilos de forraje por día

• Incremento de 0,12ºC en la temperatura corporal de la vaca.

III.4. Nutrición
Las estrategias nutricionales se asocian al hecho de que las vacas consumirán menos
alimento (Contexto ganadero, 2014).

 Aumente la proporción de concentrado a forraje dentro de una dieta balanceada.


 Aumente la densidad energética de la ración utilizando grasas de sobrepaso.
 A pesar de que las vacas estarán consumiendo menos materia seca, de todos modos,
necesitarán la misma cantidad de minerales. Aumente los niveles de estos elementos
claves y suminístrelos en una forma altamente disponible.

III.4.1.Incorporar zinc

Respecto al zinc, es “esencial para el funcionamiento normal de los intestinos de los


animales. El estrés por calor durante el verano hace que el tracto intestinal sea más
permeable a sustancias tóxicas y que se produzcan inflamaciones y otros trastornos
asociados” (Agrovoz, 2018).

III.4.2.Más potasio

En concreto, “el manejo de la dieta para disminuir los efectos del estrés calórico es
particularmente importante en países como la Argentina, donde la ganadería se lleva a
cabo, en gran medida, de forma extensiva” (Agrovoz, 2018).
III.5. Impacto económico

Se estima que hasta un 10% de la variabilidad en la producción es consecuencia de


factores climáticos como la temperatura. La disminución de la producción en
situaciones de stress por calor se debe a que el consumo de alimento disminuye,
mientras que la necesidad de energía del animal aumenta. (Salvador, 2017)

Además, es stress por calor reduce la concentración de proteína y grasa de leche, inhibe
la conducta de rumia y causa inmunodepresión, aumentando la incidencia de algunas
enfermedades. Finalmente, el estrés por calor reduce drásticamente los índices
reproductivos, ya que al disminuir la síntesis y liberación de las hormonas LH y GnRH,
inhibe la ovulación y expresión de la conducta de estro. Por cada unidad de índice de
temperatura u humedad (ITH) por encima de 72, la producción de leche disminuye en
0,2 kg por vaca y día. (Salvador, 2017)

III.6. Efectos del estrés calórico

Los efectos del estrés calórico sobre el animal pueden ser de dos tipos:

 Directos

Son las alteraciones del metabolismo para acomodarse al incremento de calor, con
repercusión hormonal, las cuales afectan directamente el inicio de la actividad ovárica.

 Indirectos

Ocurre una alteración de la calidad y cantidad del alimento. Entre los factores que
influyen el grado de afección por estrés calórico se pueden mencionar: raza, estado
fisiológico, nivel de producción láctea, edad, color de la piel, exposición al ambiente y
variación propia de los animales. (Agrovoz, 2018)

III.7. Efecto sobre los hábitos de pastoreo

En medios térmicos elevados los bovinos tienden a reducir su producción de calor


mediante anorexia voluntaria. Esta reducción del consumo de alimento como
mecanismo para reducir la carga térmica se refleja consecuentemente en su conducta de
pastoreo, ya que, al pastar menos, reducen tanto el consumo de alimentos (la
fermentación a nivel ruminal y la digestión generan calor) así como la actividad
muscular desplegada en la búsqueda de los mismos. Estos animales cambian sus hábitos
de pastoreo, realizando éste en horas de la noche donde las temperaturas son más
frescas. Este efecto de la radiación solar en la conducta del pastoreo sobre los bovinos
es importante pues indica la necesidad de suministrar buen pasto nocturno a los
animales que tienen que soportar temperaturas diurnas de 27°C o más, o suministrarles
potreros con sombras (preferiblemente naturales de árboles) en el caso que la variación
de temperatura entre el día y la noche sea inferior a 11°C (Salvador, 2017).

III.8. Efecto sobre la nutrición

Aparte de disminuir la nutrición si disminuye el pastoreo, la vaca con estrés calórico


tiende a perder más saliva y minerales como sodio y potasio, además de la posible
acidosis ruminal por el efecto de perdida de saliva (Salvador, 2017).

Primeramente, se debe adecuar el horario de alimentación procurando servir con más


frecuencia y evitando las horas cálidas, cuando el ganado no consume alimento. Se ha
observado que desde las 10.00 a 17.00 horas, las vacas que sufren de estrés calórico no
se acercan al comedero; sin embargo, si se provee sombra, brisa y ventiladores los
animales consumen más sus alimentos.

III.9. Efecto sobre el crecimiento

Las altas temperaturas ambientales disminuyen


el apetito, reducen la ingestión de alimentos y
horas de pastoreo por lo cual el animal se ve
afectado indirectamente en cuanto a
crecimiento por no cubrir sus requerimientos
nutricionales. Además aunque no se ha
demostrado, parece que hay una relación
directa entre la temperatura rectal y la respiración con el peso del animal y la tasa de
crecimiento. Los becerros de los animales de origen tropical son más pequeños y con
una tasa de crecimiento menor que los becerros de los animales de origen templado.
Pero, si estos últimos nacen en clima tropical su tamaño es más pequeño que el de sus
homólogos en condiciones tropicales y su tasa de crecimiento menor. Además, aparte de
la disminución en la tasa de crecimiento medido a través del peso vivo, también se ha
encontrado una disminución en la talla (Agrovoz, 2018).

III.10. Efectos sobre la producción

El estrés calórico afecta negativamente la rentabilidad y viabilidad económica de la


actividad ganadera de un país. El mayor impacto económico se aprecia en la producción
y la reproducción (Bedolla, 2008).

III.10.1. Repercusiones del estrés calórico

Las repercusiones del estrés calórico en las vacas lecheras es sobre:

 La productividad del animal.


 La aptitud reproductiva y,
 La salud de las vacas.

A medida que el calor ambiental se aproxima a la temperatura corporal (37,5-39,5ºC)


los mecanismos de disipación de calor no evaporativos (radiación, conducción y
convección) pierden efectividad y se reduce a la evaporación como única y principal
forma de disipar el calor generado por la vaca (Bedolla, 2008).

III.10.2. Efectos del Estrés calórico en la producción

El estrés calórico influye negativamente en la productividad y la fertilidad del ganado


lechero de alta producción. El índice de concepción en los meses de invierno supera el
45%, pero durante el verano cae a menos del 20% en establos que no utilizan sistemas
para enfriar las vacas. En verano se incrementa el intervalo entre partos, lo que reduce la
eficiencia económica de la producción, a la vez que crea una estacionalidad indeseable
en el abastecimiento de leche al mercado. El calor veraniego afecta negativamente el
contenido de grasa y proteína en la leche, y hace aumentar el conteo de células
somáticas, lo que disminuye significativamente la calidad de la leche. La pérdida anual
de leche debido a la influencia del período caluroso del verano, es de unos 500 kg por
vaca, en promedio (Bedolla, 2008).

III.10.3. Estrés calórico-producción de leche

En la producción de leche se ha comprobado un efecto negativo en todas las etapas de


producción, aunque en formas y proporciones diferentes. La vaca lechera es
particularmente sensible al clima cálido. Por lo que es evidente su efecto en la
disminución del consumo de alimento y del nivel de producción. Estrategias Para las
vacas lecheras, la principal estrategia para reducir el calor corporal es la reducción
voluntaria del consumo de materia seca (Bedolla, 2008).

Los rendimientos lácteos disminuyen de un 50 a un 75% a temperaturas superiores a


26,5°C con vacas Holstein y superiores a 29,5°C con vacas Jersey y Pardo Suizo. No se
notan efectos negativos en vacas Brahman a temperaturas del orden de los 32°C. La
temperatura crítica para el descenso en la producción láctea radica entre 21 y 26,5°C
para las vacas Holstein y Jersey y entre 29,5 y 32°C para las vacas Pardo Suizo
(Agrovoz, 2018).

III.11. Efecto sobre la fertilidad

El estrés por calor afecta los índices reproductivos del ganado al reducir la calidad del
semen en machos debido a sobrecalentamiento de la piel del escroto. El estrés térmico
también compromete el sistema inmune; vacas lecheras son más propensas a mastitis y
metritis durante el verano debido al crecimiento bacteriano en ambientes y tejidos a
altas temperaturas y a la reducción de la inmunidad. El estrés por calor también produce
efectos negativos durante la preñez; como resultado de la reducción del flujo sanguíneo
al útero, se observa una reducción del volumen placentario, reducción del tejido fetal,
partos tempranos, terneros débiles con bajo peso al nacimiento o muertos y baja calidad
del calostro. Por lo tanto el manejo de estrés por calor debe ser enfocado tanto a las
vacas lecheras de alta producción como a las vacas secas (González, 2016).

La temperatura afecta la reproducción en vacas notablemente, pudiendo bajar de 75% a


10% en la eficiencia reproductiva del rebaño. La causa de mayor merma en la
reproducción se debe a fallas en la implantación del embrión, ya que la vaca con stress
calórico presenta vasodilatación periférica (para disipar calor) por lo cual el aporte
sanguíneo a los órganos como el útero disminuye. Además cualquier tipo de stress
determina liberación de Prostaglandinas y entre ellas la PgF2 a la cual tiene efecto
luteolítico y agrava más el cuadro de infertilidad.

Aunado a esto, la hipertermia crónica puede disminuir el peso al nacer de los becerros,
puede también prolongar el curso del parto natural lo cual puede resultar en becerros de
viabilidad sub-óptima, reduce en forma notoria la tasa de concepción, disminuye la
cantidad y calidad del eyaculado e incrementa la mortalidad embrionaria. Los machos
también son afectados en su eficiencia reproductiva por el efecto de stress calórico.
Aunque bovinos, caprinos, ovinos y bufalinos tienen mecanismos de disipar calor en el
escroto, a medida que aumenta la temperatura ambiental se ve disminuida la
espermatogénesis, y aumenta el porcentaje de atipias y de espermatozoides muertos.

Excelente: Toros que montaron con erección total del pene y eyaculación completa.

Bueno: Toros que montaron con erección total del pene, pero no eyacularon en el
primer intento

Deficiente: Toros que no montaron con o sin interés sexual (Román, 2014).
III.12. Estrés calórico y lactancia

Cuando el estrés de calor se ejerce en la mitad de la lactancia, se afecta la persistencia


de la misma: en vacas paridas a comienzo del invierno, el nivel de producción hacia el
décimo mes de la lactancia es 63% de la producción pico, comparado con sólo 58% en
vacas paridas a principios del verano, y que no fueron enfriadas durante esta estación.
(Bedolla, 2008).

III.12.1. Métodos para combatir el estrés calórico


 Prevención o disminución de la radiación solar
 Sombra
 Uso de Materiales de aislamiento térmico
 Blanqueo de techos
 Refrigeración directa (del ganado)
 Duchas / Mojando de alguna manera
 Ventilación - Combinación de duchas y ventilación
 Refrigeración Indirecta (del ambiente)
 Nebulización / Cooler - Aire Acondicionado (Bedolla, 2008).

III.12.2. Prevención o disminución de la radiación solar

El estrés calórico en las vacas lecheras incide directamente en la producción láctea que
las mismas puedan llegar a tener, por lo que es muy importante brindar las condiciones
más adecuadas a estos animales. Hay que evitar la radiación directa, mediante la
sombra, proporcionada por los árboles nativos y exóticos (Bedolla, 2008).
III.13. Índice de temperatura y humedad

Índice Temperatura-Humedad (ITH) Frank Wiersma, en Tucson (Arizona), desarrolló


un índice denominado “Índice Termo Higrométrico” (ITH) en donde estableció 5 zonas
de confort o de riesgo para las vacas de leche (Salvador, 2017).

El ITH se calcula de la siguiente manera:

HR
ITH=0 , 81∗T ° + ∗( T ° −14 , 4 ) +46 , 4
100

 Hasta un ITH del 72% las vacas no están en riesgo de estrés por calor
 72% y 78% las vacas ya tienen un estrés leve,
 79% y 89% las vacas lecheras entran en un estrés severo,
 90% y 98% las vacas entran en un estrés muy severo
 Por encima de 98% las vacas mueren de golpe de calor (Bedolla, 2008).

III.14. Estrategias para minimizar el efecto del estrés calórico

En la estrategia para minimizar los efectos del estrés en donde podría provocar
rendimientos bajos ya sea ganado que es solo para leche, para carne o el de doble
propósito en el cual debe existir estrategia para asegurar altos rendimientos, debido a
eso es la denominada zona de confort donde los animales no tienen que activar sus
mecanismos de termorregulación, pero en áreas cálidas como en el trópico donde la
temperatura promedio es de 27-28°C, el animal tiene que disipar calor activando sus
mecanismos como son (Salvador, 2017):
1. Radiación: Está en relación con la superficie del animal y depende de la postura
del animal; si está encogido, pierde menos calor que si está estirado. Este
mecanismo no es muy importante.
2. Convección: Se transmite el calor a otro cuerpo distante sin necesidad de
calentar el medio que los separa; también depende de la postura del animal y la
velocidad del aire.
3. Conducción: Aquí hay pérdida de calor al entrar en contacto la superficie del
animal con una superficie fría dependiendo entonces del área de contacto del
animal, la diferencia entre temperaturas y el tiempo que está el animal en
contacto.

4. Evaporación: Potencialmente, la evaporación del agua es el medio más


importante de disipación térmica. A 33°C un gramo de agua gasta al evaporarse
aproximadamente 580 calorías. La evaporación del agua desde la piel y la
superficie respiratoria da cuenta de la mayor parte del calor perdido por el
animal (Salvador, 2017).

III.15. Sombras y ventiladores

La instalación de sombras en los comederos y bebederos implica gastos extras, pero


ayuda a mantener la producción, tanto de ganado de carne al igual que el ganado lechero
(Román, 2014).

Si bien lo ideal es tener sombra natural, una opción muy útil es armar estructuras con
malla plástica de media sombra con 80 % de densidad y orientadas de norte a sur, a fin
de lograr una superficie cubierta de cuatro metros cuadrados por animal. “Todos los
animales deben tener acceso libre a la sombra y a los bebederos, que tienen que contar
con agua en cantidades y calidades óptimas” (Román, 2014).

En la utilización de ventiladores otro método que permitirá evitar el efecto negativo y


perjudicial del estrés calórico es la combinación de ventiladores con nebulizadores o
con picos aspersores, en los corrales de espera y en los comedores, donde, a pesar del
hacinamiento se podrá alcanzar un descenso en la temperatura de 5 a 8 grados (Román,
2014).
IV. Conclusiones
 El estrés calórico desencadena alteraciones agudas y crónicas en las reacciones
fisiológicas y en el comportamiento de los animales. desencadena serios problemas
reproductivos que influyen en la disminución de la fertilidad lo cual afecta el
potencial para desarrollar un embrión viable.
 El estrés por calor aumenta los requerimientos energéticos del ganado puesto que la
energía es derivada a mecanismos de termorregulación mediante el aumento de
frecuencia respiratoria, jadeo y transpiración.
 La principal medida para evaluar el estrés por calor es mediante la determinación del
Índice de Temperatura y Humedad (ITH);que combina la temperatura ambiental y la
humedad relativa (HR) del aire y es asociado a cambios en la frecuencia respiratoria,
temperatura corporal y nivel de producción.
 El estrés calórico baja considerablemente la producción de la ganadería lechera ya
que los rendimientos lácteos disminuyen de un 50 a un 75% a temperaturas
superiores a 26,5°C con vacas Holstein y superiores a 29,5°C con vacas Jersey y
Pardo Suizo, por ello es importante saber controlar este tipo de estrés con la
utilización de diversos mecanismos como sombra, refrigeración directa, duchas, y
ventilación.
V. Recomendaciones
 Proveer sombra y protección de la radiación solar directa en las áreas de
alimentación/pastoreo, patios de espera y en la lechería. Los árboles son excelentes
medios de protección debido a que aumentan el enfriamiento por medio de la
evaporación de agua desde las hojas
 Agua limpia y fría debe estar siempre disponible bajo sombra o en zonas protegidas
de la radiación solar. El agua debe estar cercana al lugar donde se encuentra el
ganado con suficiente espacio para que todos los animales tengan acceso.
 El uso eficiente de ventiladores y aspersores de agua en los patios de espera, área de
comenderos y túneles de enfriado, ayudan a aliviar el estrés por calor.
 Minimizar el tiempo en los patios de espera si es que no se proveen medidas básicas
reducción de calor tales como sombra o se incluyen aspersores y ventiladores en el
diseño de los patios.
 Evitar manejos estresantes como castraciones, vacunaciones, arreo y transporte
durante las horas de mayor calor.
VI. Bibliografía
Agrovoz. (04 de Febrero de 2018). Obtenido de
http://agrovoz.lavoz.com.ar/ganaderia/cambio-climatico-como-armar-las-dietas-
para-contrarrestar-el-estres-calorico-en-el-ganado
Bedolla, C. (2008). Estres calorico en lacatancia. Obtenido de
https://www.monografias.com/trabajos93/efectos-del-estres-calorico-
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produccion-y-reproduccion-del-ganado-lechero.shtml
Beltrán. (2018). Obtenido de https://www.contextoganadero.com/blog/estres-calorico-
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Contexto ganadero. (2014). Estres calorico en bovinos. Lectura rural de la realidad de
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González, P. (2016). Estrés por calor en ganado lechero. Obtenido de
https://www.consorciolechero.cl/industria-lactea/wp-content/uploads/2016/12/
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Nogal, Á. (2015). Obtenido de
http://www.infocarne.com/bovino/estres_calorico_vacas_lecheras.htm
Páez, M. (2016). Sitio Argentino de produccion Animal. Obtenido de
http://www.produccion-animal.com.ar/etologia_y_bienestar/bienestar_en_bovin
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Román, L. (2014). Estrés térmico en rumiantes. Obtenido de
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Salvador, A. (2017). Agritotal. Obtenido de http://www.agritotal.com/nota/efectos-del-
estres-calorico-en-vacas-lecheras/

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