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Introducción

El trabajo como base fundamental de la generación de riqueza de las naciones,


del bienestar y desarrollo de las sociedades, es una de las labores más comunes
en el día a día del ser humano ya que constituye un aspecto sustancial para
garantizar su subsistencia, satisfacer necesidades y alcanzar metas gracias a la
remuneración monetaria que recibe a cambio.
Con este trabajo se pretende precisar porque el trabajo es considerado un hecho
social, para ello se van a estudiar conceptos básicos como el significado de
“Hecho Social”, los elementos que la componen, su clasificación, definición de
“Contratos de trabajo”, tipos, características, clasificación y elementos que lo
componen. También se analizará lo que dictan algunos artículos de la LOTTT (Ley
Orgánica del Trabajo, Trabajadores y Trabajadoras) acerca de estos aspectos.
Se espera que esta investigación sirva como modesta guía al lector para
comprender la importancia que tiene el trabajo en el desarrollo social y humano y
al mismo tiempo entienda los motivos por los cuales debe ser apreciado y
recompensado en la justa medida.
Conclusión

La realización de esta investigación permitió entender porque el trabajo es una


actividad muy importante tanto en la vida de los seres humanos como individuos
como en la sociedad en general, esto se debe a que le permite a las personas
recibir una remuneración a cambio que garantice su subsistencia y le proporciona
un poder adquisitivo que le permite comprar bienes, pagar servicios, satisfacer
necesidades de salud o alimentaria, de vivienda o de educación, ademas de
sentirse útil, escalar económicamente en la sociedad o dentro de una
organización, lo cual genera bienestar emocional. Al mismo tiempo el trabajo
desempeñado individual y colectivamente contribuye al desarrollo de una
institución, organización, empresa o cualquier tipo de unidad productiva y esto a
su vez es el grano de arena que impulsa el desarrollo de un país.
Es por ello que el trabajo debe apreciarse como un hecho social que abarca desde
la persona en su condición unitaria hasta la persona como elemento integrante de
una comunidad y en ese sentido debe ser valorado y recompensado.
El Estado, considerando que el trabajo es el motor que activa la economía y al
mismo tiempo ejerce una influencia económica y emocional sobre las personas,
tiene un papel fundamental y definitivo en esa valoración ya que tiene la potestad
para que a través de intrumentos legales pueda impulsar ese reconocimiento y
estimular a que las recompensas sean equitativas al esfuerzo (físico, económico o
intelectual) que cada individuo realiza.

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