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RIMAS

LIBRETO
1. Tiene el elefante Quico
la trompa de metro y pico,
RECOPILACIÓN unos enormes colmillos
y orejas como soplillos.
DE
RIMAS

HENRRY QUISPE TICLLASUCA


RIMAS RIMAS
2. Esta es la liebre Canela, 3. Amarillo es el patito,
que corre que se las pela, También lo es el limón,
no gana para zapatos Amarillo es el pollito
y tropieza todo el rato. Que sale de su cascarón.
RIMAS RIMAS
5. Delante: a proa, detrás: a popa,
4. El sol es de oro, derecha: a estribor, izquierda: a babor,
La luna es de plata, arriba: el mástil, abajo: el ancla,
en el centro: el timón y el que no lo sepa:
Y las estrellitas brillantes al tiburón.
Son de hojalata.
RIMAS RIMAS
7. Treinta días trae septiembre
6. En mi cara redondita Con abril, junio y noviembre
tengo ojos y nariz, De veintiocho sólo hay uno
y también una boquita Y los demás, treinta y uno.
para hablar y para reír.
RIMAS RIMAS
8. Estaba la pájara pinta 9. Sabe, si alguna vez tus labios rojos
sentada en su verde quema invisible atmósfera abrasada,
que el alma que hablar puede con los ojos,
limón también puede besar con la mirada.
con el pico recoge la rama
con la rama recoge la flor.
RIMAS RIMAS
11. A la víbora, a la víbora,
10. Mi muñeca se llama Sabrina, a la víbora de la mar,
es muy linda y camina. por aquí pueden pasar.
Los de adelante corren mucho,
De rubio cabello, los de atrás se quedarán, rán,ran
mi muñeca es un destello.
RIMAS RIMAS
12. Oh, mar, enorme mar, corazón fiero 13. Fuego de divino rayo,
De ritmo desigual, corazón malo, dulce llama sin ardor,
Yo soy más blanda que ese pobre palo esfuerzo contra el desmayo,
Que se pudre en tus ondas prisionero. consuelo contra dolor,
¡alumbra tu servidor!
RIMAS RIMAS
14. Hilo de oro, hilo de plata, que jugando al 15. Este que ves, engaño colorido,
ajedrez me decía una mujer qué lindas hijas que del arte ostentando los primores,
tenéis. Que las tenga o no las tenga, yo las sabré con falsos silogismos de colores
mantener; con el pan que Dios me ha dado ellas
comen, yo también. es cauteloso engaño del sentido.
RIMAS RIMAS
16. El sol es de oro, 17. Cultivo una rosa blanca
la luna es de plata, en junio como enero
y las estrellitas para el amigo sincero
brillantes
que me da su mano franca.
son de hojalata.
RIMAS RIMAS
18. A la rueda, rueda, 19. Soy un alma desnuda en estos versos,
de pan y canela, alma desnuda que angustiada y sola
va dejando sus pétalos dispersos.
vístete pronto
y ve a la escuela
RIMAS RIMAS
20. Canta pájaro amante en la enramada
21. A un panal de rica miel
selva a su amor, que por el verde suelo
no ha visto al cazador que con desvelo dos mil moscas acudieron
le está escuchando, la ballesta armada. que por golosas murieron
presas de patas en él.
RIMAS RIMAS
22. Del luto de mi noche 23. En el muro quedaron los tatuajes del juego
mi ángel funesto el tiempo me comía, pero no me doblego
tejió un velo pesado, siento a pesar de todo frutal desasosiego
tupido y denso
y el código de agobios lo dejo para luego.
más que las sombras
que en los hondos abismos
eternas moran.
RIMAS RIMAS
25. Sus curvados dedos al mover ligeras,
24. El monito está cantando, como leves armas de traidores filos,
se balancea en una rama. tejen las arañas cual las hilanderas
sus hamacas tenues de irisados hilos.
Su mamá lo está llamando
para que se vaya a su cama.
RIMAS RIMAS
26. Yo palpito tu gloria mirando sublime 27. La princesa está triste… ¿qué tendrá la princesa?
noble autor de los vivos y varios colores! Los suspiros se escapan de su boca de fresa,
que ha perdido la risa, que ha perdido el color.
¡Te saludo si puro matizas las flores! La princesa está pálida en su silla de oro,
¡Te saludo si esmaltas fulgente la mar! está mudo el teclado de su clave sonoro;
y en un vaso, olvidada, se desmaya una flor.
RIMAS RIMAS
29. Florecen las campanas musicales congojas
28. Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla,
y un huerto claro donde madura el limonero; y en la fuente una nube crepuscular se estanca.
mi juventud, veinte años en tierras de Castilla;
El árbol de la niebla deja caer sus hojas
mi historia, algunos casos que recordar no quiero.
ungiendo los caminos de una tristeza blanca.
RIMAS
30. Al llegar la medianoche
y romper en llanto el niño
las cien bestias despertaron
y el establo se hizo vivo…
y se fueron acercando
y alargaron hasta el niño
sus cien cuellos, anhelantes
como un bosque sacudido.

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