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Recesión Cynthia Sofía Rodrigues Ruiz

Recesión: LOS ESCULTORES GRIEGOS DEL SIGLO V a.C.- Miguel Ángel Elvira Barba
La Batalla de las Termópilas que tuvo lugar en agosto del año 480 a.C. marca el inicio del
período a tratar, es un período breve, yendo este del 480 al 430 a.C., durante esta corta etapa tuvieron
lugar múltiples sucesos y además se crearon las obras presentadas en este coloquio.
Atenas sufre el ataque de los Persas, los cuales destruyen todo a su paso haciendo que la
propia ciudad se vuelva una totalmente distinta a la que era antes, esto lleva a los talleres de escultura,
que estaban situados en su mayoría en Atenas, a distribuirse por toda Grecia (islas del Egeo, Egina,
Delfos, Olimpia, Argos, incluso llegando a Italia, Sicilia).
En las islas, entre el 470 y el 450 a.C. donde se realizaban esculturas en mármol, encontramos
que las obras están caracterizadas por su suavidad, como en la obra “Estela de la niña con palomas” o
en “Estela de la exaltación de la flor”; se nos muestra un mundo ideal que ha salido de la invasión de
Jerjes y que quiere conseguir que haya un mundo perfecto. Este mundo influyó en Sicilia.
En la isla de Egina, cercana a Atenas, a finales del arcaísmo y a principios del siglo V a.C.
tuvo mucha importancia comercial y a raíz de esta importancia pudieron construir el templo de la
diosa Afaia (únicamente adorada en Egina, era una diosa guerrera y la figuraban como Atenea). Es un
templo pequeño, no contó con metopas talladas, contaba con dos frontones, el primero, el occidental
presenta la Guerra de Troya, es del 495; el frontón oriental, situado sobre la puerta principal, fue
destruido por los Persas, pero los eginetas, al volver de la guerra lo reconstruyeron en el 480, usando
figuras con más movimiento, parece que se caen, esto muestra el desarrollo con respecto al arcaísmo
final, ya sea en las musculatura y los personajes que se pelean (Heracles aparece), también se nos
presenta una figura de un guerrero que muestra su sufrimiento al estar herido de muerte. En el 455 la
isla cae en poder de Atenas y pierde importancia artística en Grecia.
En el caso de Esparta, esta nunca contó con importancia artística, tan solo contaban con una
escultura de un busto situado en el museo de Esparta denominada “Leónidas” fechado en el mismo
momento que la batalla de las Termópilas.
En Delfos tenemos “El Auriga de Delfos”, fue hallado a finales del siglo XIX, tras realizar
análisis se ha definido como que esta figura es Polizalo de Gela, un príncipe de Sicilia, que en el año
474 a. C. participa en los Juegos Píticos y que dejó allí su imagen ya que salió vencedor. Es una obra
aislada, es de bronce y presentaba una cara inexpresiva con una belleza ideal. El exvoto constaba de
un carro tirado por cuatro caballos, un adolescente a pie sosteniendo un caballo y el Auriga. El autor
de esta obra es un objeto de discusión, ya que es desconocido.
Ya en el sur de Italia y Sicilia, se nos presentan obras más tardías entre el 470 y el 455. La
primera obra “Trono Ludovisi” apareció en una villa de Roma donde había un templo dedicado a la
Venus Ericina. No se sabe su utilidad de forma concreta por lo que hay bastantes hipótesis, llevando
esto a cuestionarse la procedencia de esta creación ya que cuenta con esa suavidad propia de las
Cícladas. Aparece representado el nacimiento de Afrodita que es recogida por las Estaciones, las
figuras de los lados presentan una mujer desnuda, es una hetaira (mujer que comerciaba su cuerpo o

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su amor) que porta una flauta y otra vestida, la cual ofrece un incienso, podría estar casada ya que
cuenta con un velo. Fue llevada a Roma en el siglo II. En las manos de la flautista podemos apreciar
rasgos de restauración. En 1979 en Sicilia se encontró el “Efebo de Mozia”, el cual porta unas finas
telas. Puede ser un encargo de algún cartaginés, podría ser una representación de Hércules Melkart, el
cual debía recibir culto. Es posible que el escultor que hizo las metopas del templo de Hera en
Selinunte. Continuamos con Italia tratando la figura de Pitágoras de Regio, fue importante en el 494
llega a Regio. Le consideraban como un artista con mejor realismo que importantes escultores
griegos.
En Olimpia del 470 al 456 se realiza el templo de Zeus, encargado a Libón de Elis. El templo
es grande, sencillo, fue un templo muy impresionante, lo que más atraía la atención eran sus metopas.
Los frontones son datados en el 470, uno de los frontones representa a Apolo decidiendo quién
vencerá en el combate de los Lapitas contra los Centauros; el otro frontón aparece Zeus decidiendo
quién vencerá en una carrera de carros, si Pelope (izquierda) o Enomao (derecho). Uno de los
frontones es dinámico y otro estático, es un frontón simple, las caras simples y las ropas igual. Es
probable que el escultor fuese ateniense. Las metopas son variadas, todas representan distintas
hazañas de Heracles, se dice que son simples ya que no cuentan con cabellera.
En Argos, entre el 470 y el 450 se la considera como la única ciudad capaz de competir con
Atenas respecto a la escultura, contando con gran gama de escultores (Glauco, Dionisio, Hipatodoro,
Aristogitón, Agéladas). Los escultores de Argos se decantaron por figuras de mujeres y hombres. En
el caso de las mujeres, se representaban peplóforas, mujeres dignas, serias y severas, dándole nombre
a este período, con líneas geométricas marcadas, como la “Peplófora Ludovisi”, estas figuras
fascinaron a los romanos. Para los hombres, habían dos modelos, el estante y un planteamiento
dinámico, el “Efebo de Ligurio” nos presenta un estudio detallado de la anatomía y el “Poseidón de
Artemisión” nos muestra una figura más suave pero con mucho movimiento.
Respecto a Mirón, destacamos una serie de figurillas que nos muestran atletas en movimiento,
con intentos de crear movimiento. La primera escultura que se le atribuye es la de un corredor llamado
Ladas, esta estaba situada en un templo de Apolo de Argos. En torno al 460 hace “El Discóbolo”, es
una escultura que cuenta con grandes detalles en sus curvas, en el cabello, en la inexpresividad de la
cara, en la proporción. Tras esta obra, la siguiente obra de Mirón es “El Heracles”.
Con Ageladas de Argos, conocemos que hizo obras en movimiento “El Zeus de Itome” en el
457 a.C., se le ha atribuido (o a uno de sus coetáneos) la creación de uno de los “Bronces de Riace” ya
que el bronce A, cuenta en su interior con arcilla de Argos
El último autor Policleto, discípulo de Ageladas, crea “El Discóforo” , hacia el 455, el cual
cuenta con múltiples réplicas, 5 años después, hizo su “Hermes”, Policleto se plantea una figura que
no es estante ni tiene movimiento dinámico, crea una figura estante que levanta el talón. En el 495,
Policleto realiza “El Doríforo”, su obra culmen, representa a Aquiles, de la cual también han llegado
muchísimas réplicas, esto era la representación de un tratado escrito por el llamado “El Canon”.

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