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UNIVERSIDAD DE MENDOZA

Facultad Ciencias de la Salud


Licenciatura en Psicología

Orientación y Terapia Familiar


Intervención y Tratamiento Sistémico
Velazquez Herrera Florencia
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Curso: 4º año. Año: 2015
Prof. Lic. Jorge Fernández Moya
Orientación y Terapia Familiar
PROGRAMA ANALÍTICO:

Unidad 1: La familia a través de la historia.

Las primeras investigaciones. Escuela paternalista y maternalista. Salvajismo, barbarie y civilización.


Familia consanguínea, punalua, sindiásmica, forma intermedia de familia patriarcal, monogámica. La familia
en los siglos XVI y XVII. Familia, hogar y comunidad. Madres hijos y nodrizas. Amor sexual individual. La
familia nuclear. Últimas transformaciones. La familia, hoy, tipos.

Bibliografía:

Goldfarb, Ruth. En Fernández Moya, Jorge y colaboradores. “En busca de resultados, una introducción
a las Terapias Sistémicas. III Edición. Tomo I. Capítulo 7. Editorial Universidad delAconcagua. Mendoza.
2010.

Unidad 2: Diagnóstico o evaluación sistémica.

Definición. Pre-entrevista. Primera entrevista. Diagnósticos necesarios. Objetivo, pertinencia y


precisión del diagnóstico. Diagnóstico: ¿De qué? ¿Con qué objetivo?

Diagnóstico etiológico, funcional y estratégico. Diagnóstico de problemas. Diagnóstico de los circuitos


interaccionales. Diagnóstico intrapsíquico. Diagnóstico de relaciones familiares. Diagnóstico de
características personales del paciente. Diagnostico de la resistencia. Diagnostico del nivel de distress.
Diagnóstico de la motivación del paciente. Diagnóstico de la gravedad de una situación. Diagnóstico de
etapas, procesos y niveles de cambio.

Cuando la consulta la realiza una persona, una pareja, una familia y/o una organización (escuelas,
juzgados, trabajos, etc.)

Bibliografía

Fernández Moya, Jorge y colaboradores. “En busca de resultados, una introducción a las Terapias
Sistémicas”. III Edición. Tomo I. Capítulo 12. Editorial UDA. Mendoza. 2010.

Unidad 3: Familia Disfuncional.

Concepto. Discriminación self – objeto. Murray Bowen y la teoría de los sistemas familiares. Salvador
Minuchin y la teoría familiar estructural. Patología de las fronteras, de las alianzas, de los triángulos y de las
jerarquías. Crisis evolutivas normales no resueltas.

Bibliografía

Sabah, Beatriz. En Fernández Moya, Jorge. “En busca de resultados, una introducción a las Terapias
Sistémicas. III Edición. Capítulo 11. Editorial UDA. Mendoza. 2010.
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Unidad 4: El modelo Estructural de Salvador Minuchin.

La familia como matriz de identidad. Concepto de estructura, límites, holones o subsistemas, mapas,
reglas, desarrollo, evolución. Características de la familia según ciclo vital. Espontaneidad del terapeuta,
coparticipación, planificación y cambio. Cuestionando del síntoma, de la estructura y/o de la realidad.

Bibliografía:

Sabah, Beatriz. En Fernández Moya, Jorge y colaboradores. “En busca de resultados, modelos clínicos
de abordaje”. III Edición. Tomo II. Capítulo 17. Editorial Universidad del Aconcagua. Mendoza. 2010.

Unidad 5: El modelo Estratégico de abordaje de los problemas.

Definición. El modelo MRI. Supuestos básicos. Formación de problemas (más de lo mismo, terribles
simplificaciones, síndrome de utopía, paradojas). Cómo se resuelven los problemas (cambio de primer y
segundo orden). Los conceptos centrales de la propuesta del MRI. Maniobrabilidad. Motivación. El marco
del tratamiento. La postura del paciente. El consultante y su contexto. Elección del sistema para trabajar. La
primera entrevista. Las entrevistas de proceso.

Bibliografía:

Fernández Moya, Jorge. “En busca de resultados, modelos clínicos de abordaje”. III Edición. Tomo II.
Capítulo 13. Editorial Universidad del Aconcagua. Mendoza. 2010.

Fernández Moya, Jorge. “Después de la pérdida. Una propuesta terapéutica para el abordaje de los
duelos”. 2º Edición. Editorial Universidad del Aconcagua. Mendoza. 2012.

Unidad 6: Epistemología de la complejidad.

El modelo narrativo. Transformaciones narrativas en terapia. Intervenciones en narrativa.


Transformación de la historia narrada. Las preguntas. Tipos de preguntas: circulares, reflexivas y
recontextualizantes.

El modelo de la Terapia centrada en soluciones. Origen. Criterios para construir metas. Guía para
elecciones terapéuticas. Caminos para construir soluciones.

Bibliografía

Fernández Moya, Jorge y colaboradores. “En busca de resultados, modelos clínicos de abordaje”. III
Edición. Tomo II. Capítulos 15 y 19. Editorial Universidad del Aconcagua. Mendoza. 2010.

Unidad 7: Los modelos clínicos de abordaje de la familia.

Los modelos más empleados. Los fundamentos básicos de cada uno. Las semejanzas y las diferencias.
Las ventajas y las desventajas de los distintos modelos. Porqué y para qué establecer las diferencias.

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Bibliografía

Fernández Moya, Jorge. “En busca de resultados, modelos clínicos de abordaje”. III Edición. Tomo II.
Capítulo 21. Editorial Universidad del Aconcagua. Mendoza. 2010.

Intervención y Tratamiento Sistémico


PROGRAMA ANALÍTICO:

Unidad 1: Intervenciones o Maniobras de la Terapia Estratégica


Bibliografía:

Fernández Moya, Jorge. “En busca de resultados, Modelos clínicos de abordaje”. Capítulos 14. Tomo
II. III Edición. Editorial UDA. Mendoza. 2010.
Unidad 2: Intervenciones o maniobras de la Terapia Estructural.
Bibliografía:

Fernández Moya, Jorge y Sabah, Beatriz. “En busca de resultados, Modelos clínicos de abordaje”.
Capítulos 18. Tomo II. III Edición. Editorial UDA. Mendoza. 2010.
Unidad 3: Intervenciones de la Terapia centrada en soluciones.
Bibliografía:

Fernández Moya, Jorge. “En busca de resultados, Modelos clínicos de abordaje”. Capítulos 16. Tomo
II. III Edición. Editorial UDA. Mendoza. 2010.
Unidad 4: Intervenciones de la Terapia narrativa.

Bibliografía:

Fernández Moya, Jorge. “En busca de resultados, Modelos clínicos de abordaje”. Capítulos 20. Tomo
II. III Edición. Editorial UDA. Mendoza. 2010.
Unidad 5: Resultados y Ética.
Resultados en psicoterapia. ¿Por qué? ¿Para qué? Síntesis. La ética. Criterios para una teoría de la
terapia. Ética y responsabilidad. Los derechos de los pacientes en psicoterapia.

Bibliografía:

Fernández Moya, Jorge. “En busca de resultados, Modelos clínicos de abordaje”. Capítulos 24 y 25.
Tomo II. III Edición. Editorial UDA. Mendoza. 2010.

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La Familia

Definición de Familia.

“La familia es un sistema organizado cuyos miembros unidos por relaciones de alianza y/o
consanguinidad sustentan un modo peculiar y compartido de leer y ordenar la realidad, utilizando
información de adentro y fuera del sistema y la experiencia actual-histórica de cada uno de sus
miembros”.

Concepto de familia funcional.

La diferencia entre familia funcional y disfuncional se advierte cuando de hace foco en:

ö La capacidad de la familia para resolver problemas.


ö El clima emocional de la familia.
ö La capacidad para cambiar, en el curso del ciclo vital de la familia.
ö La capacidad para regular la proximidad y la distancia en las relaciones intrafamiliares.
ö La formación de fronteras generacionales funcionales.

Virginia Satir afirma que las familias que funcionan bien resuelven los problemas con diverso grado de
éxito, evitan paralizar o fijar sus procesos interacciónales. Los conflictos ejercen un efecto positivo, ya que
estimulan los cambios de desarrollo necesarios. No hace falta un chivo emisario que con sus síntomas resulte
el portavoz denunciante de la disfunción existente. John Weakland, refiere que son aquellas capaces de
abandonar las conductas que les han resultado ineficaces, y formularse creativamente nuevas estrategias,
registrar y aprender del fracaso. En una familia funcional, la estabilidad y la flexibilidad están equilibradas y
tienen que ser constantemente renegociables.

Tres esferas de tereas en las cuales una familia funcional tiene la posibilidad de funcionar con eficacia:

 Esfera de las tareas básicas: satisfacer necesidades materiales de la familia.


 Espera de las tareas de desarrollo: relacionada con el ciclo vital.
 Espera de las tareas arriesgadas: se pone de manifiesto la capacidad de la familia para resolver crisis
imprevistas.

Virginia Satir propuso algunas reglas de comunicación que garantizan la funcionalidad de la familia:

ö Las transacciones que son iniciadas deben ser terminadas


ö Las preguntas se formulan con claridad y se responden con claridad
ö La hostilidad y los conflictos son reconocidos e interpretados
ö Los miembros tienen conciencia de sí mismos y de cómo son percibidos por los demás
ö Cada miembro es capaz de expresar opiniones diferentes sobre los demás y de comunicas esperanzas,
temores y expectativas.
ö Se admite la diferencia de opiniones.
ö Los miembros son capaces de elegir entre varias alternativas de la conducta.
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ö Los mensajes que se envían mutuamente son enunciados con claridad y la conducta es coherente con él.
ö La diferencia entre los sentimientos manifiestos y los mensajes comunicados es mínima.

Tipos de familias.

Según el proceso por el cual la familia define la relación (Jackson):

En todos los sistemas, por lo tanto en todas las familias, se lleva a cabo un intercambio constante de
mensajes relacionales, que tienden a mantener una cierta estabilidad, constancia y permanencia por lo tanto
es probable que pueda caracterizarse una familia por las acciones o maniobras que emplea, para definir la
relación. Jackson clasifico a las familias o las relaciones de estas en cuatro tipos sobre la base de las cuales
son las transacciones empleadas para definir la naturaleza de la relación. Estas cuatro categorías son:

 Una relación satisfactoria estable: puede definirse como una relación en la que ambas partes llegan al
acuerdo explícito de que una o la otra controla la relación o áreas de la relación. Se dice que una persona
controla la relación cuando es la que inicia la acción, decide que acción ha de iniciarse o establece que
áreas de la relación serán controladas por la otra persona.
 Una relación satisfactoria inestable: aparece cuando dos personas definen su relación durante un
periodo en que las fuerzas internas y externas propician o estabilizan un periodo de inestabilidad y el
acuerdo se establece, considerando esta falta de estabilidad. Estos periodos son lo bastante frecuentes
como para que la relación sea inestable, a pesar de lo cual, los periodos estables son satisfactorios para
ambas partes. Es una característica de cualquier relación nueva o modificada ya que las partes deben
definirla progresivamente hasta llegar a una definición compartida de la relación.
 Una relación insatisfactoria inestable no se llega a un acuerdo implícito-explicito acerca de quién
controla la relación o que áreas dentro de ella. Se caracteriza por la necesidad de redefinir la relación en
cuanto se llega a definirla, de modo que los periodos estables son breves y los inestables prolongados.
 Una relación insatisfactoria estable: las partes han acordado no discutir sobre quien está a cargo de la
relación, no se atreven a expresar su insatisfacción con respecto a la relación, ni a reconoces esas señales
en la otra parte. La relación es estable porque los problemas que podrían hacerla inestable se evitan y es
insatisfactoria porque muy poco es lo que se da o se recibe. Se trata de una relación retraída y distante.

Según el modelo circumplejo de Olson: son tres dimensiones de la conducta familiar que surgieron para
describir la dinámica familiar.

 Cohesión: demasiada proximidad desemboca en un apego excesivo y la carencia excesiva de proximidad


se traduce en desapego.
 Adaptabilidad: representa el grado de flexibilidad y cambio del sistema familiar. Capacidad de un
sistema matrimonial o familiar para cambiar su estructura de poder, las relaciones de los roles y las reglas
de relación frente a tensiones situacionales y de desarrollo.
 Comunicación: es una dimensión facilitadora, decisiva para el movimiento de las otras dos dimensiones,
que permite a la pareja y a las familias compartir sus necesidades y preferencias al relacionarse con la
cohesión y adaptabilidad.

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Según la configuración de la familia de Salvador Minuchin: Según la composición de la flia:

ö Familia de Pas de Deux: familia con la emancipación de algunos hijos o por el fallecimiento, también
matrimonio sin hijos en las últimas etapas de la vida o hermanos solos. Llevan una vida en la que la
dependencia de cada uno de ellos respecto del otro es sumamente intensa.
ö De tres generaciones: constitución por la existencia de abuelos, padres y nietos o por la inclusión de tíos.
ö Con soporte: cuando los padres salen a trabajar y permanecen muchas horas fuera de la casa, es preciso
delegar autoridad, por ejemplo: pedirle a un hijo que en ausencia de sus padres se haga cargo.
ö Acordeón: cuando uno de los progenitores permanece alejado del hogar por lapsos prolongados de
tiempo. La familia crea y mantiene, un doble juego de reglas según esté o no incorporado ese miembro.
ö Cambiantes: aquellas familias que pierden el sistema de apoyo del contexto amplio el cual desarrollan su
vida diaria. Por ejemplo cambian constantemente de domicilio.
ö Huéspedes: cuando los sistemas judiciales de asistencia a menores permiten que un niño pase a formar
parte de una familia para su cuidado, durante un determinado periodo, el niño es un miembro temporario,
como también la familia adquiere una estructura temporal. Otro caso un estudiante de intercambio.

En relación con el estado de desarrollo:

ö Con padrastro o madrastra: un padre adoptivo puede no integrarse a la nueva familia con un
compromiso pleno o la unidad original puede mantenerlo en una posición periférica.
ö Con un fantasma: la familia que ha sufrido una muerte o un abandono puede tropezar con problemas
para reasignar las tareas del miembro que falta. Se trata en familias en transición.

Otros tipos de familias:

ö Familia psicosomática: uno de sus miembros puede presentar un desorden primario como disfunción
biológica (diabetes, asma, etc.) El componente psicosomático radica en la irritación emocional del
síntoma ya existente. En cambio se trata de un desorden secundario cuando no es posible demostrar una
disfunción desde la predisposición física. El elemento psicosomático aparece por la transformación de
conflictos emocionales en síntomas somáticos.
ö Familias descontroladas: cuando no se pueden aceptar las diferencias o la autoridad, no se respetan las
reglas y la tolerancia es mínima, no se hace experiencia del compromiso, pueden manifestarse en los
hijos como trastornos de conducta y en la pareja como maltrato en cualquiera de sus formas.

Los cambios en los sistemas familiares pueden ser: estructurales (familias extensas a nuclear);
evolutivos (de familia nuclear a uniparental); o conductuales (crisis adolescentes)

Construyendo la funcionalidad de la familia.

La adaptabilidad de una familia depende de su capacidad para crear un equilibrio flexible entre una
situación excesivamente cambiante que se traduce en sistemas caóticos y una situación excesivamente estable
que se presenta como sistemas rígidos.

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La flexibilidad de la familia es importante y necesaria para garantizar los cambios y el desarrollo que se
produce en todas las situaciones, sean estas de crecimiento y/o envejecimiento, considerando todas las
condiciones contextuales y ambientales que siempre están en proceso de cambio.

La funcionalidad familiar se define por la manera en que la familia se adapta a los cambios.

La comunicación es matriz de la organización y por ende hace la estructura de un sistema. Por lo tanto
es facilitadora de las posibilidades de cambio y de aceptación al medio.

Ciclo vital de la familia.

ö El periodo de galanteo

ö El matrimonio y sus consecuencias

ö El nacimiento de los hijos y el trato con ellos

ö Las dificultades matrimoniales del periodo intermedio

ö El retiro de la vida activa y la vejez

Homeostasis, morfoestasis y morfogénesis.

homeostasis es la combinación de dos tendencias propias de los sistemas que resultan necesarias para la
supervivencia. Se trata de la tendencia a mantenerse en un estado estacionario, al mismo que se plantea de
manera complementaria la tendencia a la transformación o cambio, lo que hace al equilibrio del sistema. Es
el estado interno relativamente constante de un sistema que se mantiene mediante la autoregulación, en otras
palabras es, cambio relativamente constante del sistema.

Morfoestasis es la capacidad de un sistema de mantener su estructura en un ambiente cambiante.

Morfogénesis se refiere a la formación y desarrollo de las estructuras de un sistema.

Crisis familiares.

Llamamos crisis a una situación de cambio inminente, una situación que se encuentra en un punto, en
una instancia en la cual el cambio es inevitable, y que dependiendo de cómo transcurran los acontecimientos,
se podrá mejorar o empeorar la situación original.

Pittman III: cada crisis es única, se puede agrupar en categorías, basadas en la naturaleza del estrés:

ö Crisis evolutivas o de desarrollo.

ö Crisis por sucesos inesperados.

ö Crisis de cuidado

ö Crisis estructurales: familias con un miembro alcohólico, violento, adúltero. Que siempre amenaza al
sistema. Estas familias funcionan de esta manera de vez en cuando, en respuesta a misteriosas fuerzas.

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La familia a través de la historia

La familia es un elemento activo, que nunca permanece estacionario, sino que va pasando de una
forma inferior a otro superior a medida que la sociedad va evolucionando.

Morgan reconstituyendo llagó a concluir que existió un estado primitivo de promiscuidad sexual en el
cual cada mujer pertenecía igualmente a todos los hombre y todos los hombres pertenecían igualmente a
todas las mujeres. La humanidad salió del estado de promiscuidad en una época muy temprana y atravesó 4
estadios antes de llegar a la familia monogámica.

ö La familia consanguínea: el matrimonio se producía entre hermanos y hermanas, todos los que
pertenecían a la misma generación eran, por eso, esposos y esposas. Quedaban excluidos ascendientes y
descendientes. (salvajismo)

ö La familia punalua: hermanas (incluidas primas hasta de 3º) eran esposas de un grupo de
hermanos, todos se llamaban hermanos: punalua, “compañero íntimo”. Luego la prohibición del comercio
sexual entre hermanos. A partir de acá nació la gens, se constituía por un grupo cerrado de parientes
consanguíneos por línea materna que no podían casarse unos con otros. (salvajismo)

ö La familia sindiásmica: el hombre tenía una mujer principal y era para ella el esposo principal,
pero sin cohabitación exclusiva. Aparecen entre el límite del salvajismo (apropiación de elementos de la
naturaleza ya hechos) y la barbarie (aparece la ganadería y la agricultura; aprenden a producir a partir de la
naturaleza). La descendencia se contaba por línea femenina, ya que no había exclusividad no se podía
determinar el padre. Al hombre le correspondía brindar los alimentos y los instrumentos de trabajo.

A medida que aumentaba la producción de bienes, nació la idea de riqueza y el deseo de heredarlo. Al
hombre le daba una posición mayor. Entonces nació el derecho paterno, el hombre necesitaba asegurarse de
la paternidad para poder transmitir los bienes y con esto perdían el derecho inmemorial de poseer a todas las
mujeres. La mujer se vio degradada, convertida en servidora, esclava de lujuria.

Pre patriarcal: incorporación de esclavos, absolutismo autoridad paterna, no la poligamia.

ö La familia monogámica: forma familiar propia de la civilización (época de industria y arte), el


matrimonio empieza a basarse en condiciones económicas. Nada tenía que ver la familia con el juego de
afectos y lazos amorosos. El adulterio y la prostitución fueron dos instituciones que nacieron junto con este
tipo de familia. Las partes no cerraban el trato, a esto se agrega la indisolubilidad del matrimonio. Tres
valores: económico, traiciones, y el sacramento. Aislamiento emocional. Indiferencia a los hijos.

Fines del siglo 18, principios del 19 aparece la familia como un acuerdo entre hombre y mujer. Emerge
la elección de la pareja y el sentimiento como valor social, nace el amor romántico. El amor y el sexo
tomaron rumbos diferentes. El oleaje de sentimientos se produjo en tres áreas: el amor romántico, el amor
materno y la domesticidad. Sigue siendo productora y reproductora, con vínculo indisoluble, características
patriarcales. Ahora se privilegia el bienestar afectivo y material de los hijos. La idea de la familia como
unidad y como unida se convierte en un valor principal.
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Otros cambios más adelante fueron: flexibilidad en los roles, los hombres participan en la crianza de
los hijos, las madres salen a trabajar; ahora el valor, la dicha esta en el desarrollo y crecimiento personal de
todos los miembros. Desdibujamiento de los límites generacionales, generando acercamiento peligroso entre
padre e hijos.

Debemos considerar:

ö Familia nuclear: madre-padre e hijos

ö Familia de origen: la familia en la que han crecido y se han educado cada uno de los miembros.

ö Familia política: la familia de origen del cónyuge.

ö Familia extensa: familiares.

ö Familia compuesta: no parientes

ö Familia adoptante

ö Familia ensambladas: segundas nupcias

ö Familias uniparentales

ö Familia homosexual.

ö Familias mixtas: profesan diferentes religiones, son de distintas razas, o diferentes ambientes
sociales.

FAMILIA DISFUNCIONAL

La familia disfuncional tiene serias dificultades para resolver problemas. Sus procesos interaccionales
se encuentran paralizados y fijos. Se sitúa los problemas existentes en un individuo. Se evitan los conflictos.
Se niega que exista problema alguno. Repiten estrategias de resolución de conflictos que resultan ineficaces.
Culpan a alguien. De esta manera dichos conflictos no estimulan el desarrollo y la transformación de la
familia, sino su rigidez y poca capacidad de cambio. Se observa con regularidad un desdibujamiento de las
fronteras generacionales, la suspensión de la organización jerárquica y la formación de una triangulación
patológica. Alteración comunicativa. Los síntomas son reacción de un organismo (sistema sometido a
tensión). Estabilizan a la familia y denuncian su disfunción.

Discriminación self-objeto.

Concepto de identidad: en el transcurso del desarrollo vital de cada persona, se formula un concepto de
self (sí mismo) que posibilita diferenciar la identidad de los individuos y la propia autonomía.

El self se definiría, en este sentido, como el conjunto de todas las ideas y percepciones del propio ser,
producidas en el transcurso del desarrollo individual, e integradas relativamente en un todo funcional que se
percibe como tal.

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La terapia sistémica confronta la percepción del otro y la de uno mismo, esto mejora la discriminación
self-objeto de cada uno de los miembros de la familia.

Murray habla de la masa indiferenciada perceptible entre el self y el objeto y menciona que la identidad
de un individuo se suprime, en pro de evitar un conflicto colectivo.

Minuchin se refiere al apego excesivo (dificultad para definir roles y funciones e incapacidad para
estructurar sus relaciones.) y al desapego excesivo familiar excesivo (marcando aislamiento entre los
miembros de la familia, carencia de una estructura jerárquica y una demarcación demasiado fuerte de los
limites individuales).

Murray y la teoría de los sistemas.

Elaboro y reformulo ocho conceptos separados que incorporó en una teoría familiar. Define a la
enfermedad como un desorden del sistema emocional. Algunos de los conceptos son:

ö Diferenciación del self: implica que la conducta está determinada por el sistema intelectual.

ö Triángulos los sistemas de dos personas en momentos de estrés se hace inestables y la tendencia es
intentar incorporar una tercera persona.

ö El sistema emocional de la familia nuclear

ö El proceso de proyección familiar: potencial deteriora de un hijo

ö El corte emocional, tienen que ver con la relación entre la pareja y sus familiares de origen.

ö El proceso de transmisión multigeneracional

Minuchin y la teoría familiar estructural.

La teoría se basa en una serie de premisas y de prioridades conceptuales claramente definidas. Son tres
supuestos principales.

El hombre no es el amo de su propio destino, opera dentro de un contexto social, y es el contexto el que
define las restricciones dentro de las que la conducta individual debe existir.

La vida psíquica del individuo no es enteramente un proceso interno. En lugar de ello, hay una
integración sin fin entre individuo y contexto.

El contexto tiene una estructura. La estructura de la familia es evidente si se examinan tres


dimensiones:

ö características organizacionales: como se organizan los sub-sistemas, estos no solo son definidos por
sus miembros sino también por su función. Además los limites que protegen la diferenciación del
sistema. La organización se afirma sobre la libertad de cada subsistema de la interferencia de otros
subsistemas.

ö el modelado de las transacciones a través del tiempo como una medida del desarrollo interno del
sistema
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ö la respuesta del sistema al estrés: dos intentos de adaptación, una que lleva al encaje, la otra al
aumento de rigidez. El énfasis esta puesto sobre las partes que encajan juntas en un modelo
organizacional particular. Lo patológico es en aquellas familias que frente al estrés incrementan
rigidez de sus pautas de transacción y de sus fronteras y evitan explorar alternativas, o son renuentes a
hacerlo.

Patologías

ö De las fronteras: Las perturbaciones en los sistemas se generan cuando las conductas de fronteras de
quienes participan en los subsistemas se vuelven inadecuadamente rígidas o débiles y de este modo,
estorban un intercambio de información con los sistemas circundantes.

ö Patología de alianza: puede definirse a las alianzas como una desviación de conflictos o designaciones
del chivo expiatorio y coaliciones intergeneracionales inadecuadas. Ejemplo, los padres que manifiestan
ausencia de conflicto entre ellos, pero están unidos contra un hijo o subsistema.

ö Patología de triángulos: la alianza equivocada, se puede presentar en función de triángulos perturbados.


Acá encontramos:

 triangulación (dos progenitores en conflicto intentan ganar apoyo o simpatía del hijo contra el
otro)

 coalición progenitor hijo (intensa proximidad del hijo al progenitor favorito)

 las tríadas desviadoras (los padres tomas al hijo como chivo emisario, los padres se asocian para
gobernarlo)

ö Patologías de jerarquías: inversión de jerarquías de poder.

El modelo cuadrimensional: Modelo de evaluación detallada de un sistema familiar de Fishman

 Presiones evolutivas contemporáneas: detectar puntos de inestabilidad porque son momentos en los que
las reglas estructurales de la familia no se sostienen. “Las fluctuaciones creadas por las presiones
evolutivas pueden dar lugar a un estado disipante, que es formado y mantenido por condiciones de falta
de equilibrio conducentes a una nueva estructuras”. Cuando surge el síntoma, esta familia queda atascada
y organizada en torno al síntoma, de modo tal que los miembros de la familia no pueden satisfacer las
necesidades de su propio desarrollo. La importancia de la primera dimensión es que la misma le informa
al terapeuta sobre las tareas de desarrollo con las que las familias están luchando con este conocimiento.
El terapeuta puede diseñar y conducir el tratamiento necesario para ayudar a la familia a lograr sus metas
evolutivas.

 La historia: del sistema, los antecedentes individuales y familiares que pueden aportar una información
esencial respecto de las opciones para la terapia. Procura comprender la historia del problema
presentando las medidas que ha tomado la familia para tratar de resolverlo, la intervención presente y las
pasadas y las condiciones orgánicas y clínicas.

 La estructura: el terapeuta debe determinar que constituye, efectivamente, la familia. Es decir, la


estructura de relaciones importantes que deberían incluirse en el tratamiento. Evalúa una estructura
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familiar sobre la base de la proximidad y distancia entre los miembros del sistema, en un momento dado
del desarrollo de la familia.

 El proceso: la búsqueda de patrones de interacción en el sistema. Hay dos tipos de patrones: los que el
terapeuta ve operar dentro del sistema y los propios patrones de respuestas del terapeuta. Los primeros
consisten en patrones tales como la intrincación o la dispersión del conflicto, que el terapeuta observa.
Los segundos incluyen el ámbito más complejo de las respuestas subjetivas del propio terapueta, tanto al
intervenir en el sistema como al distanciarse de este. También debe evaluar la influencia que tiene sobre
su propio contexto profesional y familiar.

La evaluación (diagnostico) en la terapia sistémica.

El diagnóstico es un resultado, una evaluación representa un proceso permanente durante el cual es


posible y necesario realizar los cambios posibles que posibiliten dejar atrás la disfuncionalidad para llegar a
mantener la funcionalidad deseada, pero no permanente. Los terapeutas que piensan en la familia, realizan la
“evaluación”, de manera simultánea con muchas de sus intervenciones

Mientras el terapeuta escucha cuáles, evalúan múltiples situaciones. Al mismo tiempo que reconocen
las características más destacadas de los participantes, los circuitos que mantienen el “problema”, el nivel de
motivación de cada uno de ellos, las características de la atención de los más motivados (estilo y proceso de
elaboración), también de manera simultánea reconocen la “gravedad” del “motivo de consulta”.

La/s persona/s con motivación para consultar por sí misma o por otro las reconocemos como
consultantes. Cuando están preocupados por los inconvenientes, la conducta o el estado de otra persona
miembro de la familia o no, a dicho sujeto lo llamaremos paciente identificado.

En muchos casos todos se encuentran preocupados por un mismo motivo, tienen una preocupación
definida y descripta de manera compartida pero es muy frecuente, sobre todo cuando la consulta es por niños,
por púberes o por adolecentes que nos encontremos ante dos problemas diferentes, uno, el definido por los
adultos y otro, el que define el adolescente.

Cuando una persona desea realizar una consulta es conveniente obtener información que además de sus
datos, tales como: apellido y nombre, edad, sexo, estado civil, domicilio, con quien o quienes convive, nivel
de educación alcanzado y actividad que realiza. Nos permite saber que la consulta se realiza por propia
iniciativa, o bien por consejo de familiares o amigos y/o ha sido un profesional quien realizó la derivación.

¿Quién llamó para pedir la entrevista?, ¿quiénes son citados?, ¿quiénes concurren a la entrevista? Son
preguntas con las cuales podemos conocer quién es la persona con mayor motivación, o preocupación por la
solución del problema. Con la información obtenida en la pre-entrevista, nos encontramos en mejores
condiciones, y más preparados para iniciar el primer contacto con quienes asistan a la consulta.

Al conocer la edad de los miembros que la componen, podremos identificar cuál ha sido la última crisis
evolutiva por la que han atravesado, y cómo ha sido resuelta. Al identificar las edades podremos suponer en
qué etapa de la socialización de los hijos se encuentra la familia, al advertir el género y la distribución en la
fratría podremos pensar en algunas características de la relación entre los miembros.

La entrevista inicial.
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HALEY propone algunas etapas por las que debería atravesar una primera entrevista para que el
proceso resulte completo:

 Etapa social
 Etapa de planteo del problema
 Etapa de las interacciones de los consultantes
 Etapa en la cual se definen los cambios deseados
 Etapa de cierre
 Etapa de conclusiones

Para FISH el objetivo principal de esta primera entrevista consiste en la colección de una completa y
adecuada información sobre los factores que resultan esenciales para comprender cómo funciona el sistema
del consultante. Debemos recabar información sobre:

 ¿Cuál es el problema
 La naturaleza de la enfermedad o problema
 ¿Cómo se está intentando solucionar dicho problema?
 ¿Cuáles son los objetivos mínimos del consultante?
 ¿Cuál es la actitud y lenguaje del mismo?
 ¿Cuáles son los valores, las creencias y la cultura del/los consultante/s y/o del paciente?

La información debe ser descriptiva de las conductas, de manera que se pueda realizar una evaluación
conductual, para establecer con la mayor precisión posible y de manera consensuada en qué contextos, ante
qué situaciones, a partir de qué estímulos, con qué intensidad de éstos, con qué frecuencia se presentan, qué
tipos de conductas (motoras, fisiológicas y cognitivas), relacionadas con qué otras variables del organismo y
cuáles son los cambios que pueden ocurrir en todas las oportunidades en que se presentan.

El diagnóstico al considerarlo en el marco de una epistemología sistémica, constructivista, los


“diagnósticos” que rotulaban al Paciente Identificado fueron en principio rechazados. La manera tradicional
y/o habitual de realizar un diagnóstico psiquiátrico (entrevistas clínicas, “pruebas a la respuesta de los
medicamentos indicados”, etc.) o psicológico (baterías de test psicométricos y proyectivos) estigmatizaban.

A todos los conocimientos sobre los consultantes y sus problemas, sobre los recursos y sus
potencialidades los podemos incluir en la evaluación o diagnóstico. Necesitamos ser mucho más que el
nombre de una enfermedad (diagnóstico etiológico) para definir el “problema” y contribuir a su resolución.
La evaluación o diagnóstico debe ser siempre el resultado de un proceso.

ZEIGG postula que la palabra diagnóstico le resulta peyorativa, ya que le infiere la presencia de una
patología y/o debilidad; en cambio el término “evaluación” es más amplio, pues incluye tanto los puntos
fuertes como débiles.

CASABIANCA refiere que entiende el diagnóstico como una herramienta evaluativa del operador, que
es dable utilizar en distintos momentos del proceso de cambio terapéutico. El diagnóstico son hipótesis que
construyen entre el terapeuta y paciente/consultante, a partir de datos aportados e interpretados por ambos.

HIRSCH Refiere:
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1° - Los diagnósticos están respaldados por mucha investigación y se han convertido en el lenguaje
creciente universal en que son comunicadas las investigaciones sobre eficacia.

2° - la asistencia a problemas "psíquicos" ha pasado muy rápidamente de ser una cuestión bastante
privada entre consultantes y terapeuta a ser un tema de salud pública. Si la asistencia es vista solamente como
una prestación médica, en el sentido de que s cubierta por el sistema de salud, aparece la pregunta de cuáles
son las enfermedades curadas, mejoradas o evitadas mediante la intervención profesional. Surge la pregunta
acerca de cuál es el tratamiento más eficaz. Se hace inevitable tener un sistema de clasificación de las
perturbaciones que permita a su vez comparar las intervenciones con el fin de ver cuál de ellas es más eficaz.
Tenemos que contar con un sistema de clasificación de los problemas, enfermedades, constelaciones, etc. que
justifique nuestra intervención y nos habilite para aplicar el procedimiento más adecuado; esto vuelve al
diagnóstico inevitable.

3° - Es necesario tener establecido el procedimiento más eficaz para atender una problemática
determinada que atienda a los consultantes.

¿Diagnóstico para qué?

1) La gente consulta por problemas. Los problemas no son tan clasificables como las patologías, pero
se trata de un orden conceptual diferente, más complejo y que permite sistematizar mejor las posibilidades de
abordaje.

2) Hay muchos tipos diferentes de problemas.

3) Hay problemas que no dependen de patologías, pero pueden dar lugar a ellas si no se resuelven.

4) La organización por problemas permite articular las acciones interdisciplinarias: la formulación del
problema guía la secuencia, jerarquía e interacción de las intervenciones de las diferentes disciplinas.

Evaluación (de que?, para que?)

SÍNTOMA: manifestación subjetiva de enfermedad.

SIGNOS: evidencia objetiva de enfermedad.

CUADRO CLÍNICO: conj. de síntomas y signos que permiten caracterizar una enfermedad o un síndrome.

SÍNDROME: conj. de síntomas y signos que se presentan de manera simultánea y caracterizan clínicamente
un estado morboso.

El "diagnóstico sistémico" siempre será parte de un proceso; puede y debe ir cambiando hacia la
solución de un problema. La evaluación de todos y cada uno de los puntos que vamos a desarrollar se
realizan de manera simultánea, lo que plantea una dificultad que se resuelve con estudio, responsabilidad,
entrenamiento y perseverancia.

Dado que co-construye con los consultantes, sus observaciones, sus intervenciones siempre están
sujetas a la aceptación de los consultantes. Si éstos no reconocen como válidos nuestros aportes, debemos
desandar camino y reorientarnos en búsqueda de otro que resulte aceptable para nuestros consultantes.

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Tipos de diagnósticos

1. Diagnóstico etiológico: Propio de la medicina. Conjunto de signos y síntomas, que junto a


diferentes análisis nos permiten pensar y concluir que al mostrar algunos signos clásicos y específicos,
llamados patognómicos certificarán la presencia de una determinada enfermedad. En el área de la
psicoterapia, no son habituales y frecuentes. Las consultas se realizan por problemas y sólo algunos están
vinculados a patologías.

2. Diagnóstico Funcional: Resulta de considerar el diagnóstico etiológico y los recursos con que
cuenta o dispone cada paciente, su familia y la red social a la que pertenece. En el área de potencialidades es
de suma importancia, para ser reconocidas y desarrollarlas y/o estimularlas que pasen a ser el objeto de la
rehabilitación que se desea realizar. Entendemos por potencialidad no desarrollada a la presencia de algunas
características de las personas que resultan facilitadoras (motivación, interés necesidad, perseverancia, etc.)
de un mejor futuro.

3. Diagnóstico estratégico, estructural, constructivista: Según HIRSCH para que un diagnóstico


sea estratégico es necesario:

1 - Una descripción de los circuitos de interacción que mantienen el síntoma y que se destacan como
indicadores precisos que sirven como señales claras del camino a seguir.
2 - Un reconocimiento de los recursos del Consultante, del Paciente Identificado y del Terapeuta, ya
que se trata de trabajar construyendo sobre las potencialidades que todos ellos poseen.
3 - Implica además poseer un plan, una estrategia acerca de cómo resolver la queja y/o el motivo de
consulta, considerando la motivación existente y la maniobrabilidad.

La mayoría de los recursos son aprendidos en las interacciones familiares, nuestro trabajo debe
contemplar la inclusión de aquellos más significativos. Es importante conocer y realizar un diagnóstico de los
recursos del paciente, de la familia y/o de la red social. Se trata de todas aquellas capacidades que pueden
utilizar para lograr el cambio deseado.

El diagnóstico estructural es “terapéutico “

 Cuando incluye una propuesta terapéutica destinada a alterar la homeostasis.


 Debe generar una crisis que lleve al sistema familiar a elaborar una organización diferente, mejor para
su funcionamiento.
 La Terapia Estructural combina elementos de la terapia estratégica y de la existencial.
 Cuando evoca la terapia existencial, lo hace para cuestionar la realidad que la familia describe y acepta.
 Las técnicas de la Terapia Familiar Estructural llevan a reorganizar la familia mediante el
cuestionamiento de su organización
El diagnóstico constructivista es terapéutico cuando el/los consultante/s junto al terapeuta construyen
de manera consensuada la definición del/los problema/s, de la/s meta/s, y también construyen juntos las
soluciones.

4. Diagnóstico de problema: Llamaremos Dificultad a todas aquellas situaciones que pueden


resolverse con el sentido común. Las personas nos encontramos frente a una dificultad cada 5 a 6 min; la
mayor cantidad de ellas las resolvemos adecuada y satisfactoriamente. Para poder superar estas dificultades,

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siempre intentamos realizar alguna “cosa” (cogniciones, sensaciones, sentimientos, verbalizaciones,
acciones, etc.) con el objetivo de resolver la dificultad.

Los problemas serán entonces el resultado de tratar de resolver una dificultad con intentos de solución
que fallan o fracasan. Hay 3 maneras o mecanismos por los cuales las dificultades se transforman en
problemas:

a) La Terrible Simplificación es el resultado de actuar como si la dificultad no existiese por lo


que se posterga la acción que debería emprenderse para resolver la dificultad. P.ej. deseo adelgazar
pero siempre estoy postergando tanto la dieta como la actividad física.
b) El Síndrome de Utopía es el producto de anticipar acciones tendientes a resolver una
dificultad que se encuentra en el campo de lo posible. Las acciones se desarrollan antes de que la
dificultad se presente de manera real.
c) Las Paradojas se plantean cuando dificultades y soluciones intentadas se encuentran en
diferentes niveles lógicos. Es frecuente que los pacientes que asisten a consulta, expresen que ya han
consultado a otros profesionales, que fueron medicados, pero que como no les gusta tomar remedios
sólo tomaban un cuarto o medio.

¿Cómo definir (diagnosticar) consecuentemente un problema? Cuando los pacientes se comunican para
solicitar una entrevista y ofrecen una mínima información, “sus primeras verbalizaciones”, lo llamaremos:
queja inicial. Conocida la queja indagaremos por qué realizan la consulta ahora, en este momento. Deseamos
conocer cuánto ha sido el tiempo transcurrido desde que se iniciaron el/los problema/s y el momento de la
consulta. Periodos cortos de tiempo nos dicen que la motivación existente, de la preocupación por la
búsqueda de una salida, una solución. Largos periodos nos indican lo contrario, además indican tiempo de
sufrimiento y malestar.

Es muy importante conocer cuál es la historia del problema y también cuál es la circunstancia actual
que los llevó a tomar la decisión de que debían consulta lo antes posible. En el intercambio de opiniones y
pareceres entre el terapeuta y el consultante, nuestras preguntas se van a orientar hacia las soluciones
intentadas todo aquello que pensaron, hicieron para contribuir a la resolución de la dificultad ahora
transformada en problema. También será de suma importancia conocer cuáles con las actitudes y las
opiniones de las personas significativas que se vinculan con quien tiene un problema.

Las conductas de todos los participantes tendientes a resolver “el problema”, constituyen una cadena de
interacciones, que se llevan a cabo de manera sucesiva o simultánea por el propio afectado y/o por todos
aquellos que están involucradas, que observadas y comprendidas de manera integradas la llamamos circuito.
Este circuito está formado por conductas del sufriente (P.I.) y de aquellos que se encuentran a su alrededor
(familia, amigos) todos con la intención y el deseo de resolver el problema.

5. Diagnóstico del circuito interpersonal o interaccional: El “circuito interaccional” son las


interacciones que se repiten entre 2 o más personas de manera habitual, que responden a reglas o pautas que
definen la relación entre esas personas. En todas las familias se establecen tipos de circuitos interaccionales,

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constituidos por acciones y/o conductas (interacciones) que resultan propias de esa organización porque
responden a las reglas propias (idiosincrásicas).

Cuando nos referimos a interacción, hablamos de la “acción entre personas, se pone énfasis en procesos
observables de acción recíproca en el aquí y ahora, por lo cual el comportamiento del individuo adquiere
forma y significado”.

6. Diagnóstico de circuitos intrapsiquicos: Es la combinación de ideas, pensamientos,


sentimientos que de manera recurrente se presentan en las personas cuando analizan los hechos y las
atribuciones que sobre éstos es posible hacer. Se puede separar o vincular estos hechos y/o estos significados.

Es un proceso normal, habitual, que tiene por objeto darle un sentido a todo cuanto sucede. Todas las
personas y de manera permanente intentamos encontrar explicaciones a los acontecimientos. Hacemos
atribuciones acerca de las cosas o acerca de quienes participan en ellas, también adjudicamos significados a
esas acciones o a la falta de ellas.

Las atribuciones y los significados son exclusivos de quien los piensa y siente. No necesita contar con
el consenso de las otras personas, protagonistas pasivos de este circuito intrapsíquico; la posibilidad de
diferencias y desacuerdos será muy grande.

En este circuito se puede incluir a otras personas; si las preguntas están dirigidas a esos otros, se puede
incluso dialogar “mentalmente”, se pueden hacer preguntas acerca de lo que se desea saber, pero el problema
es que también se imaginan las respuestas que ese otro “imaginario” nos podría ofrecer.

No necesitamos su opinión, nos alcanza con la opinión que le hemos adjudicado. Hemos logrado
“adivinar” el pensamiento. El “Síndrome del Eco” ha quedado instalado; se formulan preguntas, y se
construyen sus respuestas, también se imaginan los resultados. Síndrome del Eco: situación por la cual una
persona prescinde de las opiniones que no coinciden con su propia visión de las cosas. Sólo necesita escuchar
su propia voz (eco) para saber que las cosas son tal como las piensa.

7. Diagnóstico de las relaciones familiares: Sea una consulta individual, de pareja, o de familia es
muy importante conocer cuál es el contexto mínimo del que proviene nuestro/s consultante/s. Será importante
conocer quiénes son los miembros que conviven en el domicilio, etc. Estos datos nos permitirán formularnos
algunas hipótesis que deberemos constatar con nuestros consultantes. Con los datos obtenidos en la pre-
entrevista, complementados con los aportados por los consultantes podremos conocer cuál es la etapa del
ciclo vital de la familia por la que se encuentra transitando. Evaluaremos en la familia, que cosas no han
posibilitado realizar el cambio; también si se trata de una “crisis x” o es una “crisis y”.

8. Diagnóstico de las características del consultante:

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POSTURA: La consulta puede ser iniciada en 2 tipos de situaciones, que se definen y caracterizan por
la “postura” en que se coloca la persona que consulta. La postura nos permite considerar cuáles son las
creencias y cuáles son los valores que posee el paciente, éstos reflejan cómo piensa, cómo siente y
cómo actúa la persona que solicita una consulta. Saber cuál es la postura del cliente nos permite
determinar las directrices necesarias para encuadrar una sugerencia, de modo que se probable que él la
acepte.

LA POSICIÓN Y EL LENGUAJE:

I. Forma del consultante de considerarse a sí mismo. Puede considerarse víctima de lo que el otro hace o
deja de hacer, a quien designa como P. I. Se ubica en una posición de dependencia o de complementariedad
inferior. O por el contrario puede considerarse el “hacedor y ejecutor” de todas las acciones en su mundo y
que los demás esperan cómodamente que el piense, haga y/o deshaga.
II. Valores. Al tiempo que verbaliza cómo se considera a sí mismo, muestra sus “valores”, las
capacidades o condiciones que poseen las “cosas” importantes, admirables, para él. O bien las cualidades y/o
características de lo que le resulta prescindible, criticable, desechable.
III. Creencias. Ligada a los valores, son los fundamentos en y con los cuáles ha construido sus valores.
IV. Visión del mundo. Como vemos el mundo es diferente para cada persona, estas diferencias se apoyan
en los aprendizajes realizados en el proceso de socialización. Los hay optimistas y los hay pesimistas.

EVALUACIÓN DE LA POSTURA DEL PACIENTE: El terapeuta ha de estar atento a la postura del


paciente en relación con su dolencia y en relación con el tratamiento y/o terapeuta. Es importante escuchar la
exacta formulación de las frases de los pacientes.

LA UTILIZACIÓN DE LA POSTURA DEL PACIENTE PERMITE: Conocer y utilizar bien la


postura del consultante será de gran utilidad para evitar resistencias, sortearla y/o disminuirla. El terapeuta
debe aceptar el o los relatos de los consultantes, también las afirmaciones, y reconocer en la narrativa los
valores que posea. Reconocer, aceptar y utilizar la postura del paciente y/o de los consultantes facilita y/o
aumenta la motivación, las personas se sienten confirmadas y reconocidas, y la consecuencia inmediata e
inevitable que estimula la colaboración del paciente.

ESTILO DE ATENCIÓN DEL CONSULTANTE Y/O DEL P.I: Será importante que podamos
reconocer si la atención está orientada hacia lo externo (el mundo circundante, lo que los demás dicen o
hacen, lo que se encuentra de moda, etc.) o bien la atención está dirigida hacia lo interno (sus propias ideas,
propios pensamientos, propios sentimientos, propias vivencias.

Simultáneamente trataremos de reconocer si la atención de la persona tiene tendencia a focalizarse y


nos pide que hablemos de un tema por vez. O bien que se ubique en un estilo difuso de atención, cuando
hablan mezclan los temas. El estilo de atención del paciente y/o del consultante, puede también tender a
captar, lo que se dice de manera literal, tal como lo expresan las palabras dichas o escritas. Otros en cambio
tienen un vocabulario y una manera de plantear sus cosas ricas en imágenes visuales, auditivas y son
proclives a construir metáforas, su estilo es metafórico.

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ESTILO DE PROCESAMIENTO: Es importante considerar cuál es la característica más destacada del
estilo de procesamiento de nuestro consultante, ya que deberá ser la manera en la cual deberemos construir
nuestra narrativa.

Un consultante puede ser lineal, cuando procesa la información de un dato por vez, lo hace en
secuencia lineal, necesita definir que es primero, que va segundo y continúa en tercer lugar y así
indefinidamente. O puede procesar la información en mosaico, considera los datos provenientes de
diferentes fuentes y en un orden indistinto, procesa la información tomando datos de aquí y de allá sin ningún
orden previo.

El estilo de procesar la información puede ser amplificador, usando expresiones como todo, nada,
siempre, nunca, etc. O reductor, minimiza sentimientos, sensaciones y/o las explicaciones o comentarios que
ofrecen los otros.

POLARIDADES: Es importante conocer si oscilan en el marco de estas posibles polaridades:

 Intrapunitivo o Extrapunitivo:

Intrapunitivo: persona que asume como propias todas las responsabilidades de una situación o un
problema cualquiera, siempre dice “es mi culpa” cuando algo sale mal.

Extrapunitivo: persona que no asume ninguna responsabilidad sobre los acontecimientos, debido a la
seguridad que tiene de que es otro el responsable que ocasiona y/o mantiene el/los problema/s. Siempre la
culpa es de otro.

 Receptor/Absorbedor o Emisor/Dador:

Receptor/Absorbedor: persona que vive de lo que otro produce, de lo que otro genera; personas
dependientes de las decisiones u opiniones de otros.

Emisor/Dador: es aquel que en forma permanente se encarga de generar energía, buenas ondas,
trabajos, ideas, proyectos.

 Buscador/Explorador o Retractor/Evitador:

Buscador/Explorador: anda tras la solución, no descansa hasta no encontrar una alternativa razonable a
su problema.

Retractor/Evitador: es alguien que espera, que evita la posibilidad de enfrentar un problema,


espacialmente se mantiene distante o se aleja.

 Complementariedad Superior/Complementariedad Inferior: Dos tipos de formas de interactuar. Desde


una posición de complementariedad superior, quien se coloca arriba intenta siempre controlar y definir la
relación con la otra persona. Desde una posición de complementariedad inferior, quien se mantiene abajo
acepta la propuesta.

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ESTILO ATRIBUCIONAL DEL/LOS CONSULTANTE/S: Se entiende por estilo atribucional a los
patrones que habitualmente poseen y emplean las personas para describir, explicar, narrar los
acontecimientos cotidianos, propios o de terceros. Estas atribuciones realizadas por nuestros interlocutores
que percibimos a partir y a través del lenguaje, están relacionadas con los planteos que los pacientes hacen
acerca del origen de las dificultades, de las soluciones intentadas y, en definitiva, de los problemas.

SOCIALIZACION Y FRATRIA: en la familia es muy importante la constelación fraterna, el mini


escenario y los protagonistas de la socialización de cualquier niño. Deberíamos informarnos acerca del orden
de los nacimientos, genero de los hermanos, cuál fue el momento del nacimiento de cada hermano en la
historia familiar, características de los hermanos, programa familiar que tienen el consultante, etc. Algunas
pautas en la socialización de una familia se reiteran y se asemejan. Por lo tanto podemos pensar algunas
teorías acerca de cómo funciona una persona de acuerdo al lugar que ha ocupado en la fratría.

SOCIALIZACION Y AMBIENTE. RURAL O URBANO. BARRIO CERRADO: es de mucha utilidad


saber el lugar de nacimiento y residencia del consultante, las costumbres son diferentes, las formas de
realizar procesos.

9. Diagnóstico de la motivación del paciente: La motivación es fundamental, representa la energía


necesaria y básica para que se produzca el cambio, para que el mismo continúe en un mismo nivel durante
todo el proceso necesario y que no pierda, ni disminuya la intensidad hasta que los consultantes obtengan lo
que han venido a buscar en la terapéutica. De la motivación debemos conocer:

 ¿A qué? Y relacionar la motivación con los objetivos posibles, considerando los recursos
existentes, las potencialidades y los tiempos disponibles y necesarios para que el cambio se
produzca.

 ¿Qué objetivos busca al consultar? Existe una relación entre lso objetivos y la motivación
necesaria.

 ¿para que cree que servirá la terapia? Conocer la relación de la fantasia del proceso y la utilidad
de lo que cree que va obtener.

 ¿Qué espera que haga el terapeuta?

 ¿Cómo espera o supone que el terapeuta debe comportarse durante el tratamiento ?.

10. Diagnostico de la Resistencia: la resistencia al tratamiento o a la influencia del terapeuta es


inevitable. La resistencia al cambio debe verse y comprenderse como una señal del paciente o de los
consultantes a la estabilidad en que se encuentran. Siempre resulta un indicador de lo que genera en los
pacientes las intervenciones del terapeuta. También si la dirección de las mismas se encuentran en las
expectativas de los consultantes, o si no es para nada, ni para nadie acertada. Puede ser de utilidad para
aliarnos a la resistencia y operar con ella, o sea en su dirección.

11. Diagnostico del nivel de Distress: se denomina distress al grado o nivel de sufrimiento mental,
que puede tener origen en propios conflictos o en los conflictos de seres queridos. Y que se puede expresar
como ansiedad, angustia, depresión, llanto, desesperanza o desdicha. Deberemos discriminar cuáles son las
variables que dependen de propios recursos y cuales son las que dependen de los recursos de otros; lo que
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nos permite relacionar de manera directa la cantidad y la calidad de la motivación disponible. Este chequeo
también será posible realizar cuando investiguemos cuáles han sido las soluciones intentadas, y a cargo de
quien han estado dichos intentos, por qué han fracasado, durante cuánto tiempo se mantuvieron exitosas y
con qué intensidad se practicaron.

12. Diagnostico de la gravedad de una situación : se debe considerar, y esto será posible si
consideramos:

 Habilidad de afrontamiento: permite comprender cómo el tratamiento hace impacto en un paciente.

 Severidad: índice de impedimento agudo (indica cuán bien los métodos de afrontamiento mantienen la
ansiedad y el malestar apartados para que no incapaciten a una persona de su funcionamiento social y
personal) se priorizan los problemas de acuerdo al grado de interferencia en su vida cotidiana.

 Proceso de resolución de problemas: pre-contemplación, contemplación, preparación, acción y


mantenimiento

 Personalidad: representa una descripción de patrones recurrentes y dinámicos.

 Complejidad: se refiere a una conducta que se mantiene com patrón a lo largo de situaciones no
relacionadas y disimiles. Los ciclos conductuales se mantienen en ausencia de reforzadores visibles y
cuyas consecuencias son de malestar ansiedad, culpa, aislamiento social.

 Reactancia: indica la mayor o menor probabilidad individual de resistir la pérdida de control


comprendida como amenazante. Describe la intensidad de las esfuerzos dirigidos a resistir la influencia
externa.

13. Diagnostico del momento de la consulta y etapa de cambio : cuando se realiza la consulta,
quienes asisten a la misma pueden encontrarse en diferentes momentos personales de la necesidad de
cambiar.

14. Diagnostico social: un modo de ampliar la comprensión del comportamiento humano sobre el
que se focaliza una distinción, identificando vínculos y relaciones entre las conductas individuales t sus co-
relatos familiares, comunitarios y culturales. El ejercicio de considerar la mutación de las condiciones de vida
de las personas y la integración de estas a su complejo medio de interacciones, ha de abrir las posibilidades
de impacto positivo en la calidad de vida de la gente. Por lo que la actitud de integrar el diagnostico social a
cualquier apreciación de la conducta de un individuo puede considerarse una práctica no solo responsable,
sino una herramienta eficaz para promover el bienestar de las personas.

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Cómo hacer para lograr el cambio

El cambio puede ser el producto de poseer gran motivación, en segunda instancia tener necesidad de
que el cambio se produzca, y por ultimo será sentir desesperación por lograr que algo de lo que importa
cambie.

El diamante de Ericsson, está formado por cuatro aristas y por el punto que resulta del cruce de sus ejes
o diagonales, dando lugar a cinco principios.

1. Utilización: se trata de un concepto central, significa que los terapeutas debemos utilizar lo que trae
el consultante.

2. Meta, un para qué: el consultante debe traer un fin lo que posibilitará dirigir el proceso terapéutico
hacia la meta elegida. Tener metas nos indicara cuanto y de qué manera nos aproximamos y por
supuesto si hemos llegado a ella.

3. Cortar a la medida: la meta debe ser cortada a la medida de quien consulta, debe encajar con su
estilo particular

4. Envolver como regalo: la solución ofrecida, para lo cual se puede emplear una metáfora, una
anécdota.

5. Proceso: una vez cortada y envuelta la propuesta se debe establecer un proceso en el tiempo para el
que se necesita cierta ceremonia o ritual que tenga más sentido.

El marco del tratamiento

Llamamos así a todas las variables que deben ser consideradas por quienes propones y llevan a cabo un
tratamiento psicoterapéutico, que están condicionadas por múltiples circunstancias, por ejemplo: el lugar en
el que se realiza la práctica, el acuerdo explicito o no de quien se debe someter a dicho tratamiento, el
momento en que se lleva a cabo, etc.

El terapeuta siempre define el marco de la terapia. No necesariamente significa que lo más indicado
sean sesiones de terapia familiar conjunta, sino que se debe trabajar con el circuito interaccional que le dé al
terapeuta una mayor capacidad de maniobrabilidad para conducir el tratamiento. El terapeuta elegirá trabajar
considerando el subsistema de impacto en primer lugar y de ser posible, citará a toda la familia conviviente,
como una forma de lograr la mayor información necesaria y definir con precisión el circuito interaccional
mínimo que sostienen el problema y con el cual se debe trabajar.
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Terapia Estratégica

La terapia familiar debe ser considerada una herramienta para abordar e intentar contribuir a la
resolución de los problemas por los que somos consultados.

Un sistema es dinámico porque puede ser descrito de forma tal que refleje la naturaleza funcional del
sistema real. Que expresada como una descripción posible, que realiza un observador-operador, que resulta
arbitraria, en tanto y en cuanto se trata de una entre tantas posibles.

El terapeuta estratégico consultado tendrá entonces la posibilidad de ofrecer otras descripciones, es


decir otra alternativa funcional que pueden aparejar cambios en la dinámica de las interacciones y en la
estructura del sistema.

Definiciones y alcances.

TE es un modo manifiestamente directivo de hacer terapia, que responde a los principios de la


cibernética. Los problemas familiares son vistos, por lo tanto, como la expresión de esquemas de esa
organización que por alguna razón (ej: crisis no resueltas) se han transformado en disfuncionales. Lo mas
frecuente en la familia es que:

 Las fronteras generacionales sean difusas

 Existan triángulos patológicos en la familia.

 Exista una confusión en las jerarquías entre los miembros de la familia.

 Surjan perturbaciones en el contexto del ciclo de vida familiar.

El terapeuta escucha la queja o primeras verbalizaciones y siempre debe ofrecer algunas respuestas
acerca de cuánto ha comprendido a quienes consultan. Los terapeutas seremos considerados veraces, críbles
cuando nuestras propuestas sean aceptadas y convalidadas por quienes han venido a la consulta. Es probable
que uno no admita algunas definiciones propuestas.

Nuestro trabajo consiste, por lo tanto, en co-construir la mayor cantidad de opciones posibles que
posibiliten la resolución del problema planteado en la consulta. La tarea del terapeuta es ofrecer alternativas
que permitan solucionar o resolver lo que preocupa y/u ocupa a nuestros consultantes.

Definido un problema consensuado, comenzamos a co-construir las metas (objetivos terapéuticos


mínimo a lograr), entendiendo que explícitamente debemos acordar donde se desea llegar; cuales son los
beneficios que se desea obtener con la consulta (ya sea individual, de pareja o una terapia familiar) y cuáles
son los cambios mínimos que permitirán a quienes consultan expresar su satisfacción.

El terapeuta comienza escuchando las quejas, luego se indaga acerca de por qué consultan en ese
preciso momento. Así, se comienza a co-construir un motivo de consulta que, debe ser consensuado. De la
misma manera, se acuerdan o construyen las metas (que serán los logros a obtener) de la terapia y se
comienza el trabajo sobre las soluciones posibles.

La queja si es dinámica, descriptiva, nos sugeriría que estamos pensando en términos funcionales, lo
cual nos permitirá plantear interacciones alternativas que modifiquen la conducta; a estas interacciones
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tendientes a modificar el comportamiento las llamamos estrategias. El clínico co-construye con quienes lo
consultan desde el inicio del tratamiento y diseña con ellos un enfoque particular, una solución a la medida
de cada problema. Los terapeutas influyen sobre el sistema interpersonal con el objeto de producir cambios
positivos; hacen hincapié en la teoría del cambio y en los medios para inducirlo, de modo que, como el
trabajo se realiza de manera conjunta, se disminuya la resistencia que pudieran tener quienes consultan,
quienes pueden, además, sostener los cambios producidos, ya que se trata de un cambio propio.

ESTRATEGIA: red de operaciones cognitivas del sistema terapéutico que tiene en cuenta los recursos
disponibles del sistema consultante, evalúa los efectos de las acciones, anticipa las posibles consecuencias de
las diversas alternativas y da lugar a la toma de decisiones que conducen al logro del objetivo terapéutico al
menor costo.

El síntoma es visto como salida, como un intento de solución posible. Pero cuando no es exitoso, nos
damos cuenta de que se transforma en una trampa, ya que el portador del síntoma se encuentra en el marco
(dentro) de una secuencia interaccional con personas significativas y le cuesta o no puede dejar de actuar
manifestando su queja. Eso lleva a que las otras personas, que se defienden o justifican, mantengan sus
conductas, lo cual crea un circuito cerrado que representa más de lo mismo para todos. El recorte de la
realidad que sostiene la conducta de ese momento impide modificar la secuencia de interacciones sin recurrir
al síntoma. Este le resulta útil al portador, ya que con el logra mantener una interacción, aunque ello implique
permanecer enfermo.

La TE de Jay Haley

Propone 5 teorias a partir de las cuales se puede co-construir un argumento básico para el diálogo, una
escenografía o un telón de fondo para que los consultantes visualicen la cotidianeidad de sus vidas, y
represente un marco de referencia para la construcción de consenso con los consultantes. Tanto para definir
el problema que los aflige, de una meta posible de ser alcanzada y de la solución esperada. Argumento o
guion, escenarios claramente definidos, para que allí se desarrolle el proceso terapéutico.

Teoría del ciclo vital: las familias se vuelven disfuncionales cuando no pueden desarrollar nuevas
reglas que resulten adaptativas al nuevo estado en que se encuentran. El terapeuta junto a los consultantes
puede co-construir nuevas reglas o nuevos modos de funcionar, lo que instala normas consensuadas que
hacen a un funcionamiento diferente por todos aceptado.

Teoría de las jerarquías: los sistemas son estructural y funcionalmente jerarquizados, hay síntoma
cuando la jerarquía es difusa. Si es posible se deberá citar al grupo conviviente. Al terapeuta se le otorga una
posición de jerarquía, de experto. Se trata de una capacidad otorgada por los consultantes, que nos puede ser
retirada cada vez que no damos muestra de cuánto y cómo comprendemos la circunstancia por la que pasan
quienes consultan. Cualquier fallo terapéutico genera una decepción, una desconfianza en el consultante.

Teoría de los triángulos: cuando las interacciones que definen la queja se piensan en un circuito
integrado por tres o más personas, aparecen uno o más triángulos. Estas interacciones pueden ser reales o
virtuales. Por lo tanto, los actores y las relaciones de nuestra escenografía se amplia y, por ende, las analogías
posibles facilitaran que se mantengan o no ciertas conductas.

Teoría del síntoma como protección: en el problema hay involucrada una intención de cuidar, de
proteger a alguna persona de la familia; es conocido y aceptado que los miembros de una familia se cuidan,
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se protegen entre sí, hacen diversos sacrificios y renuncias. La construcción (el síntoma como cuidado)
puede resultar incongruente en sí misma. Pero semejante lealtad es generalmente aceptada y para el terapeuta
es una oportunidad que da pie para proponer una redefinición que, de ser aceptada, pone en evidencia el
circuito en el que está instalado el síntoma y modifica la concepción que se tiene del problema y/o de las
acciones que se llevan a cabo para solucionarlo, aunque solo mantienen el problema.

Teoría de la estabilidad: explica las razones por las cuales un problema se mantiene en el tiempo y
como el sistema actúa para mantener dicha estabilidad, como no cambiar a pesar de la necesidad, o como la
existencia de un problema en el sistema contribuye a estabilizar muchas o todas las variables de ser
modificadas. Nos permite describir y entender, de manera circular, como se forma y como se mantiene un
problema.

La terapia comunicacional – estratégica del MRI (mental research institute)

La TE proviene de la terapia de la comunicación, que se basa en los sistemas cibernéticos y en la teoría


de la retroalimentación, y se relaciona estrechamente con la teoría de la información y la de los juegos. El
acento terapéutico y diagnostico se pone en el aspecto funcional de los síntomas de la familia y del individuo.
Las metas son: modificar las secuencias, las reglas y el significado de la interacción familiar.

¿Cómo se forman los problemas?

MRI plantean que el cambio es la aparición de una desviación con respecto de alguna norma. El
cambio resulta necesario para restablecer la norma. El cambio deseado se verifica mediante la aplicación de
lo contrario de lo que produjo la desviación. Si esta acción es correcta resulta insuficiente, la aplicación de
“más de lo mismo” da lugar al efecto deseado.

Una persona deprimida o con depresión

La familia y/o amigos por sentido común tratan de “contagiar” optimismo, haciendo esfuerzos
para que el afectado vea las cosas con optimismo, con alegría

Esta ayuda genera una exigencia: que el afectado tenga sentimientos positivos de alegría y no
de tristeza y pesimismo que en ese momento son propios y adecuados. Pero...

… la ayuda no consigue aliviarlo; más bien aumentan la tristeza original, que se mezcla con:

Un sentimiento personal de fracaso, de ingratitud hacia quienes lo aman y desean ayudarlo

Esto es lo que constituye la verdadera depresión.

Este cuadro ejemplifica lo que sucede cuando alguien se deprime. También se hace visible el circuito
interaccional y el circuito intrapsíquico mantenedores de la depresión.
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La misma complicación puede visualizarse en la génesis de numerosos problemas humanos, en los que
el sentido común indicaría que el modo de contrarrestar un hecho doloroso o perturbador pasa por introducir
su contrario en la situación.

En determinadas circunstancias, pueden surgir problemas como mero resultado de un intento


equivocado de cambiar una dificultad existente. Son todos intentos de realizar cambios que en tales
circunstancias, o bien constituyen a acentuar el problema, o bien constituye en sí mismo el propio problema.
Es necesario, entonces, distinguir entre los términos dificultades y problemas.

Las dificultades son un estado de cosas indeseables que se intenta resolver mediante algún acto de
sentido común. Son situaciones de la vida, indeseables, pero por lo general corriente, con respecto a la cual
no existe solución conocida y que hay que saber conllevar durante cierto tiempo.

Los problemas son pensados, creados y mantenidos como la resultante de enfocar mal (concebir de
manera equivocada el origen de la dificultad), o de actuar de una manera inadecuada en el intento de resolver
las dificultades. Llamamos, entonces PROBLEMA, a la situación que resulta de querer resolver una
dificultad con más de una solución intentada y fallida. No existen en la realidad, ya que la salida es por donde
hemos entrado y sólo es necesario retroceder o andar en la dirección opuesta. Puede tratarse o bien de
situaciones que se presentan como insolubles, o bien de crisis, entre otras.

Tres modos de enfocar mal las dificultades:

ö Terrible simplificación: negación del problema, entonces no se actúa.

ö Síndrome de utopía: La posibilidad de ver e intentar aplicar una solución donde no hay ningún problema
real. Tres modos: introyectiva (objetivo utópico > fracaso ineptitud), aforismo (sueños/esperanza > no
llevan a cabo un cambio o no llegan a puerto), y proyectiva (encontrada la verdad > cambiar el mundo).

ö Paradoja: la acción que es emprendida para resolver el problema se lleva a cabo en un nivel equivocado.
Estructura análoga.

¿Cómo se resuelven los problemas?

La mayor parte de las dificultades que se presentan se resuelven de manera espontanea. Pero cuando no
son exitosos, la dificultas se transformará en un autentico problema. Los sistemas tienen dos modos de
cambiar:

Cambio de primer orden: cuando los parámetros individuales varían de manera continúa y la estructura
del sistema no se altera. Cambio dentro de la misma estructura. EJ: En una pesadilla se hacen muchas cosas
dentro del sueño, pero ningún cambio dentro del sueño podrá finalizar la pesadilla. Son fluctuaciones
menores de un estado a otro, dentro de los límites de un comportamiento que ya están fijos. (Sentido común)

Cambio de segundo orden: cuando el sistema cambia cualitativamente y de una manera discontinua.
Cambio del cambio. EJ: despertarnos de la pesadilla, no constituye ya parte del sueño, sino que se trata de un
cambio a un estado completamente distinto. Refijar las reglas, transformar los límites. (Problemas)

La propuesta de Casabianca y Hirsch.

Velazquez Herrera Florencia


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Conceptos centrales

1. Consideración de la conducta – problema en el contexto : ¿cuál es el circuito de interacciones que


mantiene el síntoma por el cual se consulta? Este circuito es un producto de las observaciones realizadas,
que el terapeuta debe reconocer y diferenciar entre dos circuitos, uno interpersonal y otro intrapsíquico.
¿Cuáles son las acciones llevadas a cabo por el paciente para resolver sus preocupaciones? Y conocer
cuáles son las teorías o las creencias sobre las cuales se sustentan o se explican las conductas que
mantiene el paciente, incluidas las soluciones intentadas. Las teorías elaboradas nos van a precisar el
modo de acción; mientras que la falta de ellas, los valores y las creencias sobre los que es preciso co-
construir.

2. Subsistemas de intervención o de impacto : persona o grupo que tiene mayor motivación o necesidad de
que se produzca un cambio, es importante incluir a la persona que pide la consulta. La TE nos permite
trabajar con el subsistema más afectado, más motivado, teniendo en cuenta el principio de totalidad, que
establece que el cambio de uno de los subsistemas implica siempre y necesariamente un cambio en el
resto del sistema.

3. Capacidad para influir o maniobrabilidad : la posibilidad y la capacidad de poder influir es de


significativa importancia, ya que a través de ellas podrá definir un problema consensuado y propiciar el
cambio necesario. La capacidad de influir es un fenómeno interaccional que se aprecia como la
posibilidad de ejercer poder (tomar decisiones). Este poder, esta atribución es otorgada
complementariamente por los otros (subsistemas de impacto) en relación con quien debe ejercerla (el
terapeuta). La motivación del cliente es la fuerza motora. Libertad de actuar según este lo considere
conveniente. Esto implica “la posibilidad de emprender acciones dotadas de propósito, a pensar de los
obstáculos o inconvenientes que se presenten.

4. Supuesto de potencialidad no desarrollada: la tarea del terapeuta consiste en crear en forma conjunta un
contexto tal que permita a los pacientes lograr acceso a sus capacidades y recursos no usados hasta ahora.

5. Organización estratégica: serie de conceptos y recursos que debe poseer y considerar el terapeuta cuando
comienza el proceso conjunto con el sistema consultante y que posibilitará construir sobre bases firmes el
sistema terapéutico, cuya meta será obtener el objetivo acordado.

6. Tres niveles para la construcción y tres componentes en cada nivel:

Se definen tres niveles en la interacción consultante-terapeuta. A su vez, tienen 3 componentes en los


miembros del sistema terapéutico (cognitivo, afectivo y, conativo).

Consultante Terapeuta

Cognitivo Queja Motivo de consulta

Afectivo Grado de perturbación Disposición a influenciar

Conativo Tipo de demanda Tipo de acción terapéutica

Velazquez Herrera Florencia


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 Co-construcción del problema: queja inicial que trae, e implica lo que él percibe que tiene que
modificar (componente cognitivo), acompañado por un malestar profundo (componente afectivo) y
una demanda especifica de lo que está dispuesto a hacer o recibir (componente conativo).

 Co-construcción de la meta: con el terapeuta pueden percibir y acordar como leve mejoría, alcanzable
en plazo determinado (cognitivo), satisfacción con los probables logros (afectivo), la meta se convierte
en directriz (conativo).

 Co-construcción de las soluciones: es un producto del trabajo realizado entre los miembros del sistema
terapéutico. El subsistema de impacto, por ser el que mayor motivación posee, se transforma en el
operador válido de las propuestas del terapeuta. El terapeuta debe ser capaz de desbloquear las
acciones y trabajar desde las potencialidades a través de: persuadiéndolo de realizar conductas
diferentes (conativo) incrementando la dificultad de acción, de manera tal que el propio sistema
imagine, piense en poner acción otras alternativas (cognitivo) y modificando la percepción misma del
problema, en el sentido de las repercusión afectiva, y que en consecuencia, modifique las acciones
tendientes a resolverlo. (afectivo)

Pacientes difíciles

Los pacientes que inician un tratamiento por coacción a partir de la derivación: comprador fingido.

Los pacientes que tratan de imponer condiciones que resultan inaceptables para la terapia: restrictivos

Motivación del terapeuta.

La motivación del terapeuta está relacionada con: El marco teórico, circunstancias personales, y
características del paciente.

Etapas de entrevista

Etapas por las que debería atravesar las primeras entrevistas para que el proceso resulte completo:

1. Etapa social. 4. Etapa de definición de los cambios deseados.

2. Etapa de planteo del problema 5. Etapa de cierre

3. De las interacciones de los consultantes 6. Etapa de las conclusiones

La tercera entrevista: mantiene la dirección establecida por el acuerdo entre los consultantes y el
terapeuta.

Entrevista final: el objeto, cuando el tratamiento a sido un éxito, es consolidar los logros obtenidos y
prevenir recaídas en los viejos intentos de solucionar las dificultades que se tendían a mantenerlas o
agudizarlas. Si el proceso fracasó es necesario realizar un cierre que permita que el paciente pueda en el
futuro intentar una nueva consulta.

La entrevista control: lo ético es comunicarse para conocer la evolución, y no para citar y/o generar una
nueva consulta que haga posible pensar en el deseo de que el terapeuta se quiere ganar una consulta, lo cual
generaría resistencia.
Velazquez Herrera Florencia
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Intervenciones

Técnica, el conjunto de procedimientos y recursos del que se sirve una ciencia, arte o habilidad. Posee
conocimientos teóricos y prácticos para desarrollar cierta actividad. Las acciones del terapeuta (técnica) por
las cuales propone y propicia el cambio hacia quienes lo consultan, las llamamos intervenciones o maniobras.

Se llama maniobras a todas aquellas acciones que realiza el terapeuta y que están dotadas de un
claro propósito. Pueden ser descriptas, tienen una razón, tienen un para qué; por lo tanto se pueden
explicar. Estas acciones se realizan o llevan a cabo desde el primer contacto que los consultantes
mantienen con el terapeuta, ya sea una conversación personal o un llamado telefónico.

Las maniobras están dirigidas a la modificación de las conductas, definidas como el problema que se
desea modificar y que en general son motivo de la queja o consulta. Se trata de alcanzar un acuerdo mínimo
sobre el cambio desea, que debe ser especifico, concreto y observable como conducta. El terapeuta se asume
y reconoce como directivo. Debiendo aceptar la cosmovisión del mundo y el recorte de la realidad que hace/n
el/los consultante/s. las acciones representan el modo en que los terapeutas nos unimos a los consultantes con
el objeto de construir de manera conjunta un diagnostico sobre el cual asentar una propuesta terapéutica.

El diagnostico estratégico es terapéutico cuando incluye:

 Una descripción de los circuitos de interacción que mantiene el síntoma, y destacan los indicadores que
sirven como señales del camino a seguir

 Un reconocimiento de los recursos del consultante, se trata de trabajar construyendo sobre las
potencialidades que ellos poseen.

 Poseer un plan, acerca de cómo resolver la queja y/o el motivo de consulta, considerando la motivación
existente y la maniobrabilidad.

El diagnostico estructural es terapéutico cuando incluye:

 Una propuesta destinada a alterar la homeostasis, debe generar una crisis que lleve a la familia a elaborar
una organización diferente para mejor funcionamiento.

 Realinea las estructuras significativas con el propósito de producir cambios en el sistema como un todo.

 Cuando evoca a la terapia existencia: lo hace para cuestionar la realidad de la familia con una orientación
al crecimiento.

 Llevan a reorganizar la familia mediante el cuestionamiento de su organización. Las maniobras apuntan


a: el síntoma, la estructura y/o la realidad.

El diagnostico constructivista es terapéutico cuando el o los consultantes junto al terapeuta construyen


de manera consensuada la definición del/los problemas, de las metas y también construyen
consensuadamente las soluciones.

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El diagnostico narrativo cuando se consideran las vivencias de los relatos, se favorece la percepción
del mundo cambiante en el tiempo, cuando al usar el mundo subjetivo se presupone y se ofrecen significados
implícitos que generen perspectivas múltiples, empleando un lenguaje coloquial para describir vivencias
intentando construir nuevos relatos, desde una postura reflexiva que permita apreciar los actos
interpretativos, generando el sentido de autoría y re-autoría de la propia vida al contar y volver a contar la
propia historia, con la concepción de que las historias se coproducen e incorporando el yo y el tu.

El diagnostico en la terapia centrada en soluciones será terapéutico cuando consideremos los criterios
para construir metas definidas, que deben ser:

ö Positivas: ¿qué va a hacer en vez de eso?

ö Proceso: ¿Cómo va a llevar a cabo esa tarea?

ö Presente: el cambio debe ser ahora, desde este momento.

ö Practicas: ¿es posible esa meta?

ö Especifica: ¿qué tan especifico será?

ö Control del consultante: ¿Qué hará cuando ocurra eso?

ö En el lenguaje del consultante

Todo comportamiento programado del terapeuta debe ser considerado una intervención; los
comportamientos que no son programados también influyen en quienes consultan. Por ello, se debe ser tan
cuidadoso con todo lo que se dice y también con lo que se deja de decir.

Intervenciones Terapia Estratégica

Maniobras generales

Las acciones a desplegar por un terapeuta estarán dirigidas a encontrar un tema para poder co-construir
el problema, las metas y las soluciones. Las maniobras generales son aquellas que se emplean cuando el
terapeuta desea comunicar alguna postura de tipo general, con el objeto de preparar el terreno para una
maniobra posterior más específica. Estas pueden sintetizarse:

 No apresurarse: no aceptar como mal el síntoma, la queja deber ser precisada, recortada y redefinida.
Tomarse todo el tiempo que sea necesario para conocer el sistema. Luego de haber transformado la queja
en problema, de haber acordado las metas y de haber trabajado en una redefinición que ha cambiado el
marco en el cual fue originalmente descripto el problema. Se emplea generalmente en la primera sesión y
es, por lo tanto, una maniobra general de comienzo.

 Los peligros de una mejoría: se debe pensar en los riesgos que representan los cambios que desea
realizar. Se trabaja sobre los riesgos del cambio, preguntándole al paciente si se halla en condiciones de
reconocer los peligros inherentes a la solución de su problema. Puede ser definida como connotación
positiva del síntoma. Se formula cuando el terapeuta ha redefinido el marco del problema y ha pasado a
ser parte de como ellos piensan que son las cosas.

Velazquez Herrera Florencia


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 Un cambio de dirección: maniobra que hace el terapeuta cuando varia su propuesta, cambia su postura,
modifica su idea directriz y/o su estrategia y al hacerlo, le ofrece al cliente una explicación acerca de
dicha variación, que incluye las razones de su nueva orientación, basadas en una visión equivocada por
no haber considerado determinados datos que resultan relevante. Se emplea cuando el terapeuta empieza
a discernir con los consultantes y no se da cuenta del fenómeno. Esto sucede cuando el consultante insiste
en subestimas o rechazar el camino que le ofrece el terapeuta o cuando el cliente lo acepta pero después
muestra no ser productivo.

 Como empeorar el problema: tener conciencia acerca de como, cuando y de que manera el paciente y el
subsistema de impacto mantienen el síntoma dentro de un circuito de interacciones, resulta de utilidad
para registrar lo que no se debería mantener. Por lo tanto, se trata de una maniobra general de
finalización, que el paciente deberán recordar como lo que no se debe realizar, si se desea evitar el
resultado insatisfactorio. Se emplea cuando el cliente, se ha resistido a anteriores sugerencias o se ha
mostrado reticente a probar algo nuevo. Como consecuencia, los elementos contrarios (aquellos que el
terapeuta espera que haga) resultan más fáciles de captar y de seguir. Ya no se le dice al paciente lo que
hay que hacer o dejar de hacer, solo se menciona de manera implícita.

 Adquirir y mantener la credibilidad, la confianza y la maniobrabilidad.

Son maniobras de comienzo cuando se intenta:

 Reflejar y responder con empatía explicita a lo que el paciente o los consultantes comunican en forma
verbal y preverbal.

 Determinar con exactitud las variables que hacen a un encuadre óptimo para cada consultante.

 Las primeras preguntas se formulan a quien pidió el turno.

 Se debe considerar la certeza de datos obtenidos de la pre-entrevista.

 La alianza terapéutica se realice con quien o quienes nos garanticen la continuidad del proceso
terapéutico y del cambio. Propiedad llamada totalidad.

 Se debe tratar de que los consultantes sean muy precisos en sus descripciones y/o relatos, mientras que el
terapeuta tratar de ser amplio, general y lo más ambiguo posible, no arriesgando conceptos que lo puedan
comprometer en su maniobrabilidad.

Antes de intentar cualquier maniobra se debe conocer cuál es para nosotros el circuito interaccional.
Pero también debemos identificar y verbalizar cual es el circuito intrapsíquico, que cada uno de los miembros
tiene para sí y que sostiene la conducta disfuncional.

Velazquez Herrera Florencia


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Maniobras específicas.

Con nuestras acciones facilitaremos la expresión de las ideas, pensamientos, fantasías, ilusiones
(cogniciones), de las emociones y los sentimientos de cada uno de los consultantes y también de las
conductas y los comportamientos que se relacionan de manera directa o indirecta con el problema por el que
consultan. Para las diferentes etapas, deferente maniobras; para distintos objetivos, distintas acciones. Por lo
tanto, hay maniobras para recolectar información, para precisar objetivos, para proponer los cambios, para
trabajar con quienes sintonizan rápidamente con las pautas a modificar, para quienes poseen una marcada
resistencia.

Dos tipos de maniobras con nombre: cuando las verbalizaciones del terapeuta propone o promueven
pensamientos, sentimientos y/o acciones diferentes en la sesión, las llamamos DIRECTIVAS. Por el
contrario, cundo intenta que estos pensamientos, sentimientos y/o acciones se produzcan en el periodo entre
una sesión y la siguiente, se las llama TAREAS. En ambos casos implica una acción que debe ser llevada a
cabo, o bien acciones que serán rechazadas o evitadas.

1. Directivas

Llamamos así a las verbalizaciones del terapeuta tendientes a que el consultante desarrolle ciertas
clases específicas de acciones que directa o indirectamente impliquen una incomodidad con la persistencia de
la solución intentada. En casi todos los casos se apoyan en reformulaciones o redefiniciones. A través de
estas el terapeuta solicita información acerca del problema, de las metas, trabaja en soluciones.

 Directivas imperativas: una directiva formulada en tono imperativo puede resultar una orden, cuya
aceptación será posible si la construimos y verbalizamos, además, con firmeza y calidez. Para ello
debe encontrarse colocado por los consultantes en una clara posición de complementariedad
superior. (“usted debe hacer lo siguiente…”)

 Directivas persuasivas: expresada desde una complementariedad inferior, el terapeuta se coloca en


la postura de hacer una sugerencia, intentando mostrar la validez de la propuesta, con el propósito
de que el paciente se convenza de la misma. (“me parece que sería conveniente que haga x cosa…”)

 Directivas dubitativas: el terapeuta tiene una certeza, pero sabe que si la plantea como tal genera
resistencia, por lo tanto la plantea como una duda. La certeza debe ponerla el paciente. (“ alguna
gente aconsejaría que en su caso… no sé si ello es lo más adecuado”

 Directivas generando expectativas: necesario cuando la motivación es escasa y, por lo tanto, no


contamos con maniobrabilidad. (“se me ocurre algo que… pero no, olvídelo, no es para usted –o no
es el momento adecuado-“)

 Directivas cuando se destacan solo ciertos comportamientos: el terapeuta exaltar con sus
verbalizaciones aquellas conductas que considera positiva. (“que bn!, ¿cómo se le ocurrió eso?...”)

 Directivas cuando se desafía al consultante: para emplearla debemos tener certeza de que el
paciente es proclive a desafiar las propuestas. (“en casos así, siempre que la gente tenga recursos, lo
que no sé si es su caso, lo conveniente podría ser..”)

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 Directivas cuando se generaliza, luego se precisa y posteriormente se cambia: se puede, por
ejemplo, preguntar sobre lo que el paciente haría en una situación como la que se describe, y antes
de que el paciente conteste, se propone cambiar de tema, dejando una idea sembrada.

 Directivas cuando se cuentan historias o anécdotas: todos los relatos, todas las historias nos
permiten rescatar alguna relación interaccional.

 Directivas cuando se hace una propuesta negociadora: hace propuestas para co-construir, pero no
todas las proposiciones que realiza son tomadas al pie de la letra. Estas permiten lograr que los
consultantes acepten algunas de sus propuestas como resultado de desechar otras.

 Directivas cuando recurrimos a la paradoja: pensada y muy bien elaborada, la intención es que el
paciente no pase a la acción de las cosas que siente o piensa. Es decir no los transforme en una
conducta.

 Directivas, el silencio: en un sentido analógico, el silencio puede dar lugar a que nuestro
interlocutor piense, sienta y/o lleve a cabo acciones, con el valor agregado de ser propio producto,
ya que al no haber sido verbalizado, no será posible resistencia alguna de parte de quien consulta.
Seguramente generaremos mayor expectativa, una mejor atención, una mayor concentración y hasta
motivación ante la verbalización. El silencio y una actitud de comprensión les ofrece a los pacientes
confianza y son una forma de transmitir respeto, consideración, confirmación. Puede también ser
dado como una tarea pidiendo que no se hable de x tema.

El terapeuta prepara con propuestas generales (directivas) el cambio para un referencia especial que
llamamos redefinición, y que al cumplir su objetivo se denomina reestructuración. Realizada esta (cambian
las conductas en los consultantes), le seguiremos apoyando con mas directivas para consolidar la nueva
visión de nuestros consultantes cuando se cierra el proceso terapéutico y en las sesiones de control.

2. Redefinición-reestructuración-reencuadre-desencuadre:

Redefinición es el producto de un proceso en el que se van uniendo, porque se suman, se multiplican o


potencian entre sí, directivas de distinto tipo que facilitan, predisponen, motivan, sugieren, y/o propician el
cambio. La operación mediante la cual el terapeuta ofrece un nuevo sentido. Están dirigidas a la naturaleza
del problema, y al, significado de la solución intentada.

Cuando el paciente acepta este nuevo sentido, experimenta un cambio en la vida del problema en
cuanto a la pena, el dolor, el fastidio o la agresión. Se experimenta así, una reestructuración.
Reestructuración (reencuadre) significa cambiar el propio marco conceptual o emocional en el cual se
experimenta una situación, y situarlo dentro de otra estructura que aborda los hechos correspondientes a la
misma situación concreta, igualmente bien o inclusive mejor, cambiando así el sentido de los mismos. Lo que
cambia es el sentido atribuido a la situación y no los hechos correspondientes a esta. Desencuadre: cuando
se anula o arrojan dudas sobre los marcos de referencia o significados atribuidos a una situación preocupante
hasta ahora.

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Podemos reencuadrar o desencuadrar a partir de unir lo que estaba separado o de separar lo que estaba
unido. Lo llamamos separación o vinculación, y se basa en la propensión natural de las personas a trazar
distinciones (separa) y/o realizar asociaciones (vincular). Con estas dos operaciones podemos generar todos
los elementos con los cuales construimos significados adjudicables a los hechos, y de esta forma, podemos
armar un nuevo marco de referencia o encuadre.

La metáfora constituye unos de los métodos más ingeniosos y agradables para redefinir, reformular,
desencuadrar o reencuadrar la concepción del problema y las soluciones intentadas que traen los pacientes.
La observación y el chequeo de la interacción disfuncional básica permitirán encontrar un símil, una
metáfora de lo que los consultantes plantean como problema. Tres formas pueden emplearse: analogías
(cuando algo se asemeja a otra cosa, abordamos las cosa cuando el algo genera resistencia). Encuadre
metafórico (explicación con otros términos y con otro tema) y metáfora (se narra una historia que tiene
implícita la imagen que queremos que el paciente haga propia, esta historia se caracteriza por la descripción
de una acción que tiene principio, medio y final. Con ello se ofrece una comprensión de su situación y se le
formula una propuesta de solución al motivo de consulta). Cuando utilizamos metáforas, proponemos dos
acciones, una maniobra general (adquirir y mantener la credibilidad, la confianza) y la maniobra especifica
(metáfora)

3. Connotación positiva.

Al hacer una evaluación positiva de lo que la situación permite, el terapeuta construye con la familia el
sentido que ha tenido el síntoma o la conducta disfuncional, considerada patológica. La connotación positiva
del síntoma tiende a modificar el sistema de valores de la familia, de los consultantes y por consiguiente su
modelo de mundo. Cuando el significado y la evaluación de una conducta cambian, los miembros de la
familia deben reaccionar necesariamente de un modo diferente con respecto a esta conducta.

4. Prescripción del síntoma:

Si del resultado de una primera entrevista hemos podido consensuar con los consultantes de cuánto y
cómo el síntoma forma parte habitual, cotidiana y normal de las interacciones del sistema, seguramente
podremos convenir que no cambiar “por ahora” es conveniente, con dicha verbalización estaremos
contradiciendo su propia epistemología; es decir, la concepción que tienen y traen del problema que los
aqueja. Si asi sucede, hemos estado trabajando desde directivas paradójicas. Pero como se elaboran con el
objeto de modificar la epistemología del paciente identificado y de su familia, se transforma en una
redefinición.

El terapeuta prescribe, insta, promueve a la familia y/o al paciente individual a que continúe haciendo
exactamente lo que consideran sintomático. Prescribir con éxito significa que el terapeuta se anticipa a lo que
sucederá. Por lo tanto, si quienes reciben la prescripción están preparados y/o conocen lo que va a suceder,
obviamente se modificará el contexto y también la configuración familiar.

La prescripción puede ser parcial, y esto implica un pedido explicito de que se mantenga o exagere una
conducta identificada como problema. Para prescripción del síntoma debemos valernos de componentes:
afectivo (se le pide que se deprima), cognitivo, conativo, significativo-simbólico (debe tender a bloquear una
posible interpretación que mantenga o agrave el síntoma) y, contextual (la prescripción se hace teniendo en
cuenta el contexto del paciente.
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5. Tareas.

Se reconoce como tareas aquellas actividades concretas que el terapeuta solicita u ordena. Se asigna
para promover el cambio, vale decir, para activar nuevas pautas de transacción. Son deberes para hacer en la
casa, se deben alcanzar en el periodo que transcurre entre una sesión y la siguiente.

El objetivo de las tareas será sostener la intensidad de las intervenciones o directivas realizadas durante
la sesión. Representan la posibilidad y la oportunidad de que las energias cognitivas, afectivas y conativas se
canalicen de un modo coherente con el desarrollo de las entrevistas realizadas y de las nuevas alternativas
que estas generen a partir de las directivas y/o redefiniciones ofrecidas, es decir las reestructuraciones para
los consultantes. Las finalidades es que la gente se comporte de manera diferente, identificar la relación
terapeuta-paciente y extender la relación fuera del consultorio, y obtener información.

Se deben dar tareas cuando: el problema es muy focal, es muy difuso, el problema es de entrenamiento,
hay estrés, hay miedos-obsesiones, hacen falta pautas para niños.

Algunas de las tareas de formula (llaves maestras) son:

★ El ritual de escribir, leer y quemar

★ La tarea de la pelea estructurada

★ Haga algo diferente.

Las tareas se dan según la respuesta del paciente, la misma se evalúa en la primera sesión:

 Se la respuesta es directa > tareas directas

 Si la modifica > tareas que pueden ser modificadas

 Si es opuesta > tareas vagas

 Si no cumple > no se le asignan tareas

Por otra parte, Hugo Hirsch clasifica las tareas en:

 Preparatorias: objeto es testear la motivación, además motivan, lo comprometen, y si no lo hacen nos


ofrece la información de la falta de motivación y compromiso.

 Directas: su cumplimiento lleva al logro del objetivo buscado. Se imparten cuando el consultante expresa
control sobre el problema.

 Indirectas: se solicitan con la esperanza de que, al ser llevadas a cabo, generen a su vez el
comportamiento necesario para resolver el problema.

 Metafóricas: llevan a un cambio de conducta en un área relacionada simbólicamente con la queja. Son
útiles cuando el paciente está muy motivado, pero necesita animarse con logros solapados, incluidos para
sí mismo.

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 Paradojas: acciones que el terapeuta demanda con el objeto de disminuir el síntoma, se acude a estas
tareas cuando las directivas generan resistencia, su motivación es escasa y hay poca maniobrabilidad del
terapeuta. Evitan confrontar al paciente. Se elaboran y se ofrecen al paciente para ser cumplidas por lo
menos un tiempo (directiva paradójica se ordena para que haga lo contrario)

 Ordalías: requieren gran motivación; la premisa fundamental es lograr que el síntoma resulte más difícil
de mantener que de abandonar. La tarea del terapeuta consiste en construir una ordalía adecuada al
problema, que a la vez resulte más severa que el problema mismo. Requisitos: que provoque una zozobra
igual o mayor que el problema, que beneficie a la persona, debe ser algo que la persona pueda ejecutar,
no debe causar daño.

Terapia centrada en las soluciones.

Las terapias centradas en las soluciones deben ser consideradas propuestas provenientes de los modelos
derivados del constructivismo.

La TCS tiene como premisa básica el hecho de que las personas son saludables. Las personas tienen la
capacidad para construir soluciones que pueden mejorar sus vidas; premisas que se relacionan con el
concepto de potencialidad no desarrollada. Por lo tanto la terapia ayuda a mejorar la vida de las personas
focalizándose en las soluciones y no en el problema.

No podemos cambiar nuestro pasado, pero podemos cambiar nuestras metas. Dado que las personas
pueden estar estancadas repitiendo patrones pasados a causa de que centran demasiado tiempo y energía en
sus problemas, la meta de la terapia es cambiar el foco tan prontamente como se pueda hacia soluciones en el
presente que van a sostener metas más saludables y felices en el futuro. Hablar del problema mantiene el foco
en el problema, de modo que el cambio terapéutico implique un cambio a hablar de soluciones.

Criterios para construir metas bien definidas:

ö Positivas: ¿qué va a hacer en vez de eso?

ö Proceso: ¿Cómo va a llevar a cabo esa tarea?

ö Presente: el cambio debe ser ahora, desde este momento.

ö Practicas: ¿es posible esa meta?

ö Especifica: ¿qué tan especifico será?

ö Control del consultante: ¿Qué hará cuando ocurra eso?

ö En el lenguaje del consultante

Guía para elecciones terapéuticas:


Velazquez Herrera Florencia
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 Si funciona no lo arregles, elige más de eso.

 Si funciona un poco, elige construir sobre eso.

 Si nada parece funcionar, elige experimentar, incluyendo la imaginación milagrosa.

 Elige abordar cada sesión como si fuera la última. El cambio comienza ahora, no la semana próxima.

Caminos para construir soluciones:

 Foco en las metas

 Foco en las soluciones

 Foco en la excepción

 Elecciones o espontaneidad

 Pequeños cambios llevan a grandes cambios.

 Cada solución es única.

 Las soluciones evolucionan fuera de las conversaciones.

 El lenguaje es nuestra realidad.

Intervenciones de la Terapia centrada en las soluciones

La maniobra que representa la mejor expresión del modelo, se trata de la pregunta del milagro que se
plantea: “Bien supongamos… que sucediera un milagro..” Imagine que esta noche sucede un milagro y que
mientras usted duerme, el problema que lo ha traído a la consulta se resuelve:

 ¿Cómo lo sabría?

 ¿Qué habría cambiado?

 ¿Qué vería a la mañana siguiente que fuera diferente?

 ¿Qué le indicaría que fue un milagro?

 ¿Cómo lo notaria su pareja, su familia?

Se trata de una pregunta, que como maniobra se realiza en la primera entrevista con el objeto de
contribuir a que el consultante y el terapeuta a entender que genero de soluciones pueden ser aptas para ellos,
dadas las expectativas de los consultantes. Podemos decir que se trata de una maniobra general de comienzo,
ya que las respuestas darán las bases sobre las cuales podremos co-construir el problema y las soluciones.
Ubica al cambio en el futuro.la esperanza es mayor, siempre y cuando se realicen las acciones necesarias y
adecuadas para que los milagros se produzcan. Otra intervención en la TCS son las tareas de formula (llave
maestras)

Terapia Estructural

Velazquez Herrera Florencia


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Minuchin, nació en Entre Ríos, en 1922, de flia judía, Médico. Con objetivo de hacer su especialidad
en 1960 trabajo con jóvenes delincuentes buscando alternativas que fueran efectivas en la rehabilitación de
los mismos. Los jóvenes con los que trabajaba provenían de flia desorganizadas, pobres y con múltiples
problemas. En 1965 comenzó a dirigir la clínica de guía infantil de Filadelfia, en donde desarrolló la terapia
familiar estructural e investigó en flia con niños diabéticos, asmáticos y con anorexia nerviosa.

La terapia estructural se ocupa desde sus inicios en las pautas, en los aspectos de la relación que
mantienen el síntoma (psicopatología), más que de las causas que pudieron haberlo originado. Pensando que
lo puede cambiar son los factores contemporáneos, interpersonales que mantienen el cuadro psicopatológico,
se concentra en trabajar sobre las estructuras familiares disfuncionales.

Es única en su énfasis en el proceso que hemos llamado “liberación social”, proceso por el cual un
sistema social es cambiado de una manera tal, como para crear alternativas que permitan responder en forma
saludable. Mientras más alternativas haya en un sistema, mayor será la libertad individual para elegir
respuestas que conduzcan a su propio crecimiento.

Familia: “un sistema abierto en transformación, es decir que constantemente recibe y envía descargas
de y desde el medio extrafamiliar y se adapta a las diferentes demandas de las etapas del desarrollo que
enfrenta”. Funciones básicas de la flia:

ö Protección psicosocial de sus miembros con relación a la alimentación, socialización y la protección en


general. (Función interna)
ö Acomodación respecto de la cultura y la transmisión a sus miembros de la misma. (Función externa)
ö Identidad de sus miembros: desarrollo de sentido de pertenencia y separación en la participación en
contextos extrafamiliar.
ö Capacidad de cambio y de continuidad. Esto configura la identidad familiar que se va modificando, pero
que a la vez permite continuar siendo la misma flia.

Las familias representan sistemas abiertos que continuamente enfrentan demandas de cambio. Cuando
un miembro de la familia desarrollo un síntoma: paciente identificado, la meta terapéutica será reestructurar a
la familia para liberar a los miembros, de tal modo que crezcan y se relacionen con pautas no patológicas.

La estructura familiar: “conjunto de demandas funcionales que organizan los modos en que interactúan
los miembros de una flia". Las pautas de interacción son configuradas en la búsqueda de la satisfacción de las
demandas de cada miembro de la flia configuran un modo de funcionamiento familiar, “así se hacen las
cosas”. Los límites permiten la delimitación de funciones. Al modificar un modo desacoplado de
funcionamiento familiar con personas desconectadas girando en sus orbitas individuales, estas empiezan a
relacionarse, a integrarse; cada individuo del grupo podrá ser más atento a como las personas están
interrelacionadas.

Reestructurar significa modificar las reglas de la relación, lo que implica modificar las fronteras o
límites de los subsistemas, que de rígidos o difusos deberán pasar a ser claros, modifican el enmarañamiento
o desapego familiar. O sea, que se trabaja para que las cercanías y/o distancias dentro del sistema familiar y
el manejo de la información con el contexto de la familia se funcional.

Hay una estructura familiar saludable cuando la flia. se organiza de manera apropiada, por lo que sus
fronteras serán claramente marcadas. El sistema familiar como un todo regulará la frontera que los circunda,
Velazquez Herrera Florencia
40
según los factores sociales, culturales y económicos. Las fronteras de los subsistemas están delimitadas por
las reglas que definen quien participa en el subsistema y como. La flia necesita de una estructura viable para
desarrollar sus tareas esenciales: poyar la individualización, al mismo tiempo que proporciona un sentimiento
de pertenencia.

Cuando un miembro de la flia desarrolla un síntoma y deviene en paciente identificado, el problema


básico será la inhabilidad de la flia para crecer y adaptarse al cambio. Así, la meta terapéutica será
reestructurar a la flia para liberar a los miembros, de tal modo que crezcan y se relacionen con pautas no
patológicas. Las tareas de reestructuración pueden producir estrés, porque las tareas que da el terapeuta
transgreden reglas que han conservado a la flia unida dentro de ciertos límites. Si la flia responde a la
intervención como totalmente novedosa, esta indagación se ha convertido en reestructurante. Las
operaciones reetructurantes:

ö Captar las pautas transaccionales de la flia: puede utilizar la técnica dramatización, la flia actúa alguna
forma en la que resuelven los conflictos.
ö Recrear canales d comunicaº: reconducir a un miembro a que hable con el otro, en vez de acerca de él.
ö Señalamiento de los límites: negociación entre miembros y subsistemas sobre autonomía e
independencia.
ö Acrecentamiento del estrés: frente al conflicto el terapeuta bloquea las pautas transaccionales preferidas
desarrollando el conflicto implícito.
ö Utilización de los síntomas: se combate la tendencia fliar a centralizarse en el portador del síntoma.
ö Asignación de tareas: con tareas los miembros pueden desenvolverse y actualizan el área que necesitan
desarrollar.
ö Manipulación del humor: pista de lo admisible en un flia, ya que acompaña sus transacciones.
ö Apoyo, educación y guía: el terapeuta las estimula y las instrumenta.

En la terapia estructural, el terapeuta:

ö Es activo y directivo, guía el cambio y crea crisis tratando de modificar el equilibrio familiar.
ö Reencuadra los síntomas como parte integral del funcionamiento familiar.
ö En las puestas en acto, el terapeuta dirige explícitamente a los miembros de la flia a involucrarse en una
actividad particular.
ö Se relaciona con empatía, calidez y cuidado. La confianza en el terapeuta es de vital importancia.
ö Es líder dirigido a metas, proyectando objetivos y defiende el beneficio de cada uno de los miembros
contra el sistema estructurado destructivamente, para demoler un conjunto de reglas que impiden a los
miembros relacionarse.
ö Desafía, confronta, bloquea, usando técnicas que causan desequilibrio, permite al grupo movilizar sus
recursos subutilizados y mejorar su habilidad para enfrentarse con el estrés y el conflicto.
ö Analiza el campo transaccional en el que se relaciona con ella

ö Elaborando hipótesis sobre las pautas y diseñando un mapa de la flia. “Un mapa familiar es un esquema
organizativo, no representa la riqueza de las transacciones de la flia. Es estático, mientras que la flia. está
en constante movimiento. Pero el mapa constituye un dispositivo útil que le permite al terapeuta
organizar el material de diverso tipo que obtiene. El mapa le permite formular hipótesis acerca de las
Velazquez Herrera Florencia
41
áreas, en el seno de la flia, que funcionan correctamente y acerca de otras áreas donde no ocurre lo
mismo. También le ayuda a determinar los objetivos terapéuticos”.
ö Obtiene datos y diagnostica experimentalmente en el proceso de asociarse con la flia.
ö la única estructura familiar inmediatamente accesible al terapeuta es la estructura disfuncional. Una de las
tareas que enfrentará será la explorar las áreas de posible flexibilidad y cambio, como así también las
alternativas estructurales que han permanecido inactivas y que pueden ser activadas por las preguntas del
terapeuta.
ö Acompaña en la crisis.
ö Reconoce el predominio de determinados temas familiares y participa conjuntamente con los integrantes
en su exploración; siguiendo los caminos de la comunicación, descubriendo cuales están abiertos y cuáles
son bloqueados. Cuando traspasa los umbrales familiares debe estar alerta ante los mecanismos de
estabilidad del sistema.

Umbarger, plantea la terapia como un cambio en espiral.

1. Se cuestiona la homeostasis.
2. Provocando una crisis que desencadena conductas nuevas.
3. Habilitando las conductas
4. Se producen cambios en el estado de ánimo y la imaginería de las personas.
5. Posibilitación.
6. Se crean secuencias interactivas nuevas
7. Morfoestasis.

Mapa estructural gráfico: símbolos empleados

Limites

----------------- límites claros

…………….. limites difusos

___________ límites rígidos

Alianza

Sobreinvolucración

Afiliación débil

Conflicto ………………….

La única estructura familiar inmediatamente accesible al terapeuta es la estructura disfuncional. Una de


las tareas que enfrenta será la de explorar las áreas de posible flexibilidad y cambio, como asi también las
alternativas estructurales que han permanecido inactivas y que pueden ser activadas por las preguntas del
terapeuta. El cambio se produce por un cuestionamiento de la percepción de la realidad del grupo familiar,

Velazquez Herrera Florencia


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porque se les proporciona posibilidades alternativas que les parecen adecuadas y se las ensaya en la sesión,
con tareas en la casa y de eso modo aparecen nuevas relaciones que se refuerzan a si mismas.

Unión y acomodación son los términos en que se desenvuelve el mismo proceso. La unión se utiliza
cuando se pone el acento en las acciones que realiza el terapeuta, tendientes a relacionarse con los miembros
de la flia, el acomodamiento enfatiza las adaptaciones del terapeuta tendientes a lograr la alianza.

La terapia no puede lograrse sin la unión, pero ésta no tendrá éxito sin la reestructuración. La unión
puede utilizarse como una técnica reestructurante. En estas, el terapeuta se convierte en actor de la obra fliar.
En la reestructuración, opera como director y como actor. Crea escenarios, esclarece temas y lleva a los
miembros de la flia a improvisar, dentro del marco de los límites impuestos por el drama fliar.

La asociación es el proceso por el cual se establece el sistema terapéutico, sin el cual la reestructuración
no puede producirse y todo intento de alcanzar objetivos fracasará.

Las operaciones de mantenimiento requieren la confirmación activa y el apoyo de los subsistemas,


apoyar el potencial y la fuerza de cada individuo, confirmar a la persona y cuestionar la función en el núcleo
familiar. Este tipo de apoyo puede ser reestructurante, porque otras partes de la flia. pueden verse obligadas a
acomodarse al terapeuta.

El rastreo, técnica de asociación, consiste en el planteamiento de preguntas que puedan clarificar lo que
está en juego, la realización de comentarios aprobados, o estimular para que pueda amplificar un punto. El
terapeuta se ubica como parte interesada y pregunta.

Mimetismo, utilizado para acomodarse a un estilo familiar y/o sus modalidades afectivas, por medio
de distintas operaciones implícitas y espontaneas, como la similitud de posturas, de expresiones, de
experiencias, que pueden ser utilizadas con finalidades especificas.

El diagnostico es una hipótesis de trabajo desarrollada por el terapeuta a partir de sus experiencias y
observaciones relacionadas con el proceso de asociación con la flia. y con la respuesta de la flia al terapeuta.
Al evaluar, el terapeuta toma en cuenta seis áreas:

1. La estructura familiar, las pautas transaccionales preferidas y las alternativas disponibles.


2. Flexibilidad que tiene el sistema y su capacidad de elaboración y reestructuración.
3. La resonancia del sistema fliar y su sensibilidad ante las acciones individuales de los miembros.
4. El contexto de la vida de la flia analizando las fuentes de apoyo y de estrés.
5. El estadío de desarrollo que la flia esta transitando, como así también su rendimiento en las tareas
apropiadas para esa etapa. Esto es, el ciclo de la vida fliar, crisis, distintos tipos y modos de tratar con las
mismas.
6. La manera en que los síntomas del paciente identificado son utilizados para el mantenimiento de pautas
preferidas por la flia.

El diagnóstico interaccional recopila información de significados del material presentado, lo que dice la
flia y como lo dice, su tono de voz, las relaciones frecuentes, etc. Posibilita la captación de pautas repetitivas
y alternativas, y se modifica constantemente a medida que la flia va asimilando al terapeuta, se acomoda a él
y reestructura o resiste las intervenciones reestructurantes. Es inseparable de la prognosis (conocimiento
anticipado del acontecimiento de un hecho)
Velazquez Herrera Florencia
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Generalmente, las flias desean que el problema se resuelva sin interferencia con sus pautas
transaccionales. Consecuentemente, los acuerdos sobre la naturaleza del problema y los objetivos del cambio
en un primer momento estarán limitados pero los cambios esperados en el paciente serán mostrados como
dependientes de la modificación fliar.

Holón es el término con el que se denomina a la unidad de intervención, que siempre es un holón
(individuo, la flia nuclear, flia extensa y la comunidad): es un todo y una parte al mismo tiempo.

La parte y el todo se contienen recíprocamente en un proceso continuado de comunicación e


interrelación. La flia nuclear es un holón de la flia extensa y esta de la comunidad, y así, cada todo contiene a
la parte, y cada parte contiene el programa que el todo impone.

El holón individual incluye el concepto del sí mismo en contexto, contiene los determinantes
personales e históricos del individuo, como así también los aportes del contexto social.

Dentro de la flia, tres unidades poseen significación, además del individuo:

El holón conyugal se constituye con la unión de las personas con un proyecto compartido de formar
una flia. Las pautas de interacción que se van elaborando suelen ser implícitas y, una vez establecidas,
gobiernan el modo en que cada uno de los cónyuges se experimenta a sí mismo y experimenta al compañero
dentro del contexto matrimonial.

El holón parental incluye la crianza de los hijos y las funciones de socialización. Los adultos tienen la
responsabilidad de cuidar, proteger y socializar a los niños; pero también poseen derecho a tomar decisiones
que atañen a la supervivencia del sistema total. Este subsistema se modifica a medida que el niño crece y sus
necesidades cambian.

El holón fraterno constituye para un niño el primer grupo de iguales en el que participa. Los hijos se
apoyan entre sí, se divierten, se atacan, elaboran sus propias pautas de interacción para negociar, competir y
cooperar. Promueve, por un lado, sentimiento de pertenencia al grupo, y por otro lado, su individualidad,
vivenciada en el acto de elegir y de optar por una alternativa dentro de un sistema.

Intervenciones de la Terapia Estructural

Las maniobras generales de comienzo son aquellas que orientan y facilitan la relación con los
consultantes.

Velazquez Herrera Florencia


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1. Co-participación.

La terapia familiar consiste en entrar en co-participación con la familia, experimentar la realidad como
sus miembros la viven y envolverse en las interacciones repetidas que dan forma a la estructura familiar y
plasman el pensamiento y la conducta personal. Esta coparticipación debe ser instrumentada para poder
convertirse en un agente de cambio que obre dentro de las reglas del sistema familiar. El terapeuta asume el
liderazgo de la entrevista y del proceso terapéutico.

Co-participación: acuerdos más o menos explícitos para librar de síntomas a quien es su portador en la
familia, reducir el conflicto y la tensión para la familia como un todo y aprender nuevos modos de superar
dificultades. Entran en coparticipación dos sistemas sociales para un propósito específico y por un plazo
determinado. Resulta equivalente a la co-construcción del problema, las metas y las soluciones.

El terapeuta asume como directivo, por lo que queda a cargo de conducir el proceso, es un líder
autoritario. Debe ser visto y considerado como instrumento de cambio de los modos de interacción. Co-
participar con una familia es hacer saber a sus miembros que el terapeuta los comprende y trabaja con ellos y
para ellos. La co-participación se puede realizar desde tres posiciones:

De cercanía: desde esta posición el terapeuta realiza una intervención de manera constante confirma
todos los aspectos posibles de ser confirmados. Y se ocupa de que todos los miembros presentes reciban esta
confirmación, necesaria para sobrellevar la pena, el dolor, la tristeza y hasta el enojo que produce una
situación difícil de soportar. Entienden la confirmación como redefiniciones que inevitablemente modifican
el marco conceptual que los miembros de la familia poseen hacia el paciente, o bien hacia su conducta, o
hacia las motivaciones que subyacen a estas. Confirmar, significa devolverle a otro la imagen que tiene de sí
mismo, privilegiando aquellos aspectos en los que es posible que sean considerados de alguna otra manera
posible.

Intermedia: el terapeuta co-participa como un oyente activo, neutral. Asiste a la gente para que le
cuente lo que le pasa. Esta se llama rastreo.

Distante: hace papel de director. En muchas ocasiones las familias, pero más frecuentemente las
parejas que consultan, asisten con el deseo de que el terapeuta funcione como arbitro de sus diferencias.

2. Planificación.

Los terapeutas deben hacer algunas consideraciones desde el momento en que recibimos los primeros
datos de una familia. En ese momento inevitablemente pensaremos hipótesis considerando la clasificación de
la familia: según composición, el estado de desarrollo, u otros tipos.

Considerar las características es de fundamental importancia, ya que intervenciones similares


seguramente tendrán repercusiones según las características de la familia.

El terapeuta lleva a delante el proceso de reestructuración mediante siete maniobras:

1. Capta las pautas interaccionales

Velazquez Herrera Florencia


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2. Delimita los subsistemas

3. Aumenta el estrés en las distintas situaciones.

4. Utiliza el síntoma

5. Asigna tareas

6. Manipula el humor

7. Apoya, ayuda y dirige.

Maniobras específicas

Transformar la estructura familiar, la intervención del terapeuta puede desequilibrar el sistema por
medio de tres tipos de cuestionamientos: del síntoma, de la estructura y de la realidad.

Cuestionamientos del: desarrollo técnicas Características

Observación de las
Escenificación (busca interacciones
La flia ha
que la flia interactúe
individualizado a un Organización interaccionales
para ver la realidad
miembro como fuente
como ellos la ven) Propone interacciones
del problema. Relatan
las soluciones alternativas
intentadas y los
Enfoque (el T selecciona y organiza los datos entro de un
fracasos. EL PROB.
esquema que les otorga sentido, elabora un foco y una
EN LAS PAUTAS DE
meta, lo que incluye la estrategia para lograrlo)
INTERACCION. La
Síntoma: tarea del T es Repetición del mensaje
REENCUADRAMIENTO cuestionar la
definición del Repetición de acciones
problema que tiene la isomorfas
flia. Reencuadrar la
concepción, moviendo Logro de intensidad Modificación del tiempo
(permanencia de una interacción)
a los miembros a (¿Cómo hacer llegar el
buscar respuestas mensaje) Cambio de la distancia
diferentes. (cambiando la posición de ellos)

Resistencia a la presión de la
flia. (el no hacer lo que la flia quiere,
no ser absorbido por el sistema)

Cuestionamientos del: técnicas Características

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Distancia psicológica
Fijación de fronteras (nadie debe hablar por el otro, c/u cuenta su historia, cambia la
(tiende a regular los posición de los miembros –cambia de lugar-)
subsistemas)
Duración de la interacción (dar tareas, practicar interacciones)

Alianza con un miembro de la flia


(para reordenar las posiciones jerárquicas)
Desequilibrio de las
jerarquías (el mero Alianza alternante
ingreso del T modifica (atribuir a c/ subsistema conoci// diferentes y complementarios, con
Estructura:
la estructura, cuestiona lo que se evita la competencia por la jerarquía)
REESTRUCTURACION la distribución del poder
y vinculo entre los Ignorar a miembro
(ej: si no quieres hablar vamos a trabajar solo con tus padres)
miembros)
Coalición vs. Otro miembro (provoca tensión)

Enseñanza de la
complementariedad (se Cuestiona el problema (problema individualizado por
cuestiona la idea integral interaccional), el control lineal (y el modo de recortar los
de la jerarquía, la secesos.
epistemología)

Cuestionamientos del: técnicas Características

Constructos cognitivos (todo cambio en Símbolos universales


la estructura cambia la visión del mundo y
viceversa. El T debe tener una concepción Verdades familiares
pluralista de la realidad para ofrecer a la
familia concepciones diferentes del mundo, Consejo especializado
modificando frontera de lo conocido) (explicación diferente de la realidad)

Realidad: Paradojas. Intervenciones basadas en


Intervenciones paradojas (utilizada en la aceptación y el desafío. (rta opuesta)
REENCUADRAMIENTO resistencia al cambio, si hay sensibilidad
Directas. Basadas en el desafío
por directivas o situación de crisis, NO) (sugerencia directa para que una persona
cambie y produzca una rta paradójica en otro)

Insistencia en los lados fuertes de la familia. (Toda flia tiene elementos positivos,
sondear estos recursos es esencial, mostrarlo a la flia puede ser una modificación en
la visión de la realidad.) se observa las respuestas del paciente, lo positivo
individualizado y se muestran alternativas de interacciones.

La supervisión.

Velazquez Herrera Florencia


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La supervisión es un modo de formar T eficaces y complejos, siendo fieles a su propio ser. Se busca
que los supervisados sean espontáneos, co-participativos, que puedan utilizar distintos aspectos de sí mismo
como respuesta ante diferentes contextos sociales. Las supervisiones son isomórficas con el modo
terapéutico, se expanden los grados de libertad y de instrumentación del terapeuta.

Se le inquiere al terapeuta acerca de lo que hizo, de lo que pensó que hizo y del grado en que lo que
hizo fue o no útil para la familia, de tal manera que esto es un dialogo experimental que demanda aprender a
controlarse en su condición personal como instrumento terapéutico.

Intervenciones contextuales.

Conceptos básicos:

1. Reunir a los miembros del sistema

2. Generar metas y planificación del tratamiento.

3. Abordar las pautas disfuncionales

4. Establecer una nueva organización y mantenerla.

5. Terminar la terapia

En el contexto escolar, lo ideal es mantener la coparticipación intensificada entre la familia y la


escuela, con una clara definición de los roles. Es conveniente que el terapeuta reafirme y confirme a la
familia e incluya a otros miembros de la red para que ayuden (maestras del aula, particular, etc) asimismo,
debe explorar las actitudes de los padres hacia la escuela y las autoridades, favoreciendo el consenso; buscar
determinar lealtades, conflictos y planes ocultos en la interfase escuela-familia; determinar si el problema
puede ser manejado por la familia únicamente y así esclarecer los limites y los roles; intervenir estableciendo
una alianza padres-escuela, a favor del crecimiento del consultante.

Con respecto al contexto laboral, se ayuda al paciente a establecer límites apropiados entre el trabajo y
la vida privada. Además, es básico tener en cuenta si existe un isomorfismo entre el contexto familiar y el
laboral, por ej: la evitación del conflicto.

También se considera el contexto hospitalario para intervenir, cuando un paciente es hospitalizado y se


consulta a un terapeuta este debe evaluar los diferentes sistemas intervinientes. En primer lugar, determinar
quién es el responsable de la consulta y del paciente; si la misma se realiza por internación o por delito, cual
es el médico derivante, y por qué consulta. Ahora bien si el terapeuta cuenta con el apoyo institucional, tiene
que reorganizar el contexto hogareño para el regreso del paciente y promover que las autoridades, servicio
social, etc, ayuden a los familiares para que el paciente retorne a un ambiente más rico del que salió.
Asimismo, en todo caso hospitalizado el T tiene que evaluar ciertos aspectos como la gravedad, la
cronicidad, el riesgo social del núcleo o del individuo, sus condiciones de vida, el aislamiento o el apoyo
social y su capacidad económica, de manera tal que la intervención resulte eficaz.

Modos de intervenir en los triángulos en las familias.

Velazquez Herrera Florencia


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Bowen, pensó que los ciclos de proximidad y distanciamiento eran provocados por estados internos de
ansiedad de separación y de ansiedad de ser absorbidos. Los ciclos proximidad-distancia se sucedían en el
tiempo de manera predecible. El vinculo entre estos ciclos y los triángulos se advierten con claridad cuando
nos preguntamos hacia quien (o hacia qué) se dirigen las personas cuando se distancian de alguien con quien
habían mantenido una relación intima.

Fogarty, en toda relación una persona tiene tres opciones de movimiento: puede acercarse a la otra
persona, alejarse de ella o quedarse inmóvil. Lo que causa el movimiento es el incremento del nivel de
excitación emocional ante el comportamiento de la otra persona o ante su percepción del estado emocional de
la otra persona. La excitación emocional del individuo, justo con el movimiento reactivo que suscita,
constituye el combustible que alimenta la activación de los triángulos. De hecho, cada vez que existe tensión
en una diada empiezan a operar las fuerzas emocionales de un modo tal que se produce un triangulo
relacional estabilizador.

Los triángulos son un mecanismo de evitación cuyo propósito es eludir la incomodidad. EJ: comienzo
matrimonial, primer hijo, las esposas son más madres que esposas, entonces el marido, maneja la perdida
entregándose al trabajo.

Importancia clínica de los triángulos.

Los triángulos promueven el desarrollo de síntomas en el individuo. Quedar aprisionado en un


triangulo es generador de tensión, y provoca un sentimiento de indefensión y desesperanza. Es probable que
una persona emocionalmente atrapada en un triangulo sufra cierta pérdida de función. La importancia clínica
de los triángulos se relaciona a seis factores:

1. Cuando el triangulo cambia, pueden salir a luz los conflictos conyugales.

2. Contribuyen a la cronicidad de los síntomas en el individuo y del conflicto en la relación.

3. Conspiran contra la resolución de los problemas, distracción estabilizadora.

4. Bloquean la evolución funcional de una relación en el tiempo, detienen la evolución del ciclo vital.

5. No tratado puede ser vehículo de una rebelión vs. La terapia.

6. Atrapan a las personas, privándolas de la posibilidad de elegir y asegurando la persistencia de su


comportamiento disfuncional.

La psicoterapia pretende descubrir los hilos vulnerables y dañados de los individuos y sus relaciones,
desenredarlos de las marañas de sus triángulos entrelazados y volver a tejerlos entre sí, con relaciones más
fuertes entre individuos que funcionan mejor y son mas autónomos. También busca complejizar el modelo,
convirtiendo la terapia en un enrejado donde el foco se desplaza libremente hacia atrás y hacia delante entre
las vidas interiores de los individuos, las relaciones personales diádicas en las que esos individuos están
involucrados, y los triángulos relacionados que rodean y complican esas diadas.

Autoexamen

Velazquez Herrera Florencia


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El terapeuta debe reforzar la capacidad de sus pacientes de reconocer que culpar al otro por el problema
sin comprender la propia contribución, perpetúa la disfunción relacional y los priva de la posibilidad de
aliviar sus sufrimientos. Cuando se culpa al otro, se entrega todo el poder al otro. El T ayuda a las personas a
ver que pueden cambiar el papel que desempeñan en un proceso. El autoexamen puede ser falso cuando el
paciente se culpa de todo, es impotente o se auto-denigra; a más culpa, menos capacidad de centrarse en el yo
y más conflictos relacionales implícitos o explícitos.

Lo que el triangulo no es…

Los triángulos son diferentes a las triadas. Un grupo de tres no es necesariamente un triangulo. En una
triada cada miembro se siente libre sin dejarse determinar por los otros. Pueden los tres interactuar de uno a
uno dependiendo de la situación. La relación puede ser distante o intensamente comprometida. Cada uno
puede asumir una posición personal sin imponerla a los demás.

El hecho de estar en un triangulo ( y no en una triada) se experimenta internamente como una sensación
de ansiedad, una interrupción del fácil fluir de la conversación, un preguntarse constantemente que decir o
silencio incomodo. El flujo de movimiento de avances y retrocesos tiende a ser limitado; el clima emocional
es rígido y con frecuencia muy intenso. El verdadero problema consiste en estar en un triangulo, no es
reconocerlo y permanecer en él por tiempo indefinido.

El proceso emocional interpersonal.

Las personas tienen necesidad de autonomía y conexión, cuya motivación configura el espacio
relacional interpersonal. Así, el proceso emocional interpersonal esta constituido por varios elementos:

1. Los estados individuales de excitación emocional, la vulnerabilidad, puede aumentar o disminuir según el
motivo de la vida.

2. Las diferencias individuales en la capacidad de las personas para controlar su excitación emocional.

3. Las variaciones en la importancia de la relación específica y el nivel de apego que le es propio.

4. Diferencias individuales de sensibilidad en cuanto a ciertas formas de conducirse o expresar los


sentimientos.

5. La posibilidad de actuar sobre el proceso relacional interpersonal se desprende de la idea de


diferenciación.

¿Cómo el T puede reconocer las señales de que puede ser aprisionado en un triangulo?

 Cuando no sabe que más preguntar.

 Cuando tiene la sensación de que el tiempo transcurre lentamente

 Cuando se siente irritado y sin ganas de ver al paciente

Terapia Narrativa

Velazquez Herrera Florencia


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Sluzki: “nuestro mundo se constituye en y a través de una red de relatos o narrativas múltiples. Esta
ecología de relatos con diferentes niveles de dominancia en diferentes momentos y en diferentes contextos,
establecen los marcos a través de los cuales nos volvemos conscientes de nosotros mismos y de los otros,
establecemos prioridades, reclamamos o rechazamos deberes y privilegios, establecemos normas acerca de
conductas apropiadas o inapropiadas, atribuimos significados, y ordenamos los hechos en el tiempo. Desde
esta perspectiva, el lenguaje no es representacional; lo que llamamos “realidad” consiste y se expresa en las
descripciones que uno hace de los hechos, gente, ideas, sentimientos y experiencias. Estas descripciones, a
su vez, evolucionan a través de interacciones sociales configuradas a su vez por estas descripciones; el
discurso produce los encuadres dentro de los cuales la acción social tiene lugar”

La terapia narrativa se centra en lo atípico: esto es, en lo que la persona ve como atípico. Nos mueve a
examinar lo atípico minuciosamente: porque por medio de lo poco común las personas pueden escapar de las
historias que determinan sus percepciones y, por ende sus vidas. Cuando las descripciones estereotipadas de
la experiencia son reexaminadas en busca de nuevos detalles, devienen menos influyentes, seguras y estables.
La terapia narrativa fomenta la emergencia de narrativas ricas a partir de descripciones aisladas o
incompatibles, que no son consideradas erróneas ni limitadas sino pobres o raras.

Los T narrativos afirman que los clientes construyen su pasado mediante historias que ellos cuentan en
el presente. No hay realidad; sino historias que nosotros contamos de la realidad. Una de las maravillas de las
narraciones es que son abiertas, en curso, no terminando nuca. Así como nuestra historia cambia, igual
cambiamos nosotros.

La narrativa es un sistema constituido por actores o personajes, guion y contextos, ligados entre sí por
la trama narrativa, es decir, por un conjunto de conectores lógicos explícitos o implícitos que establece la
relación entre actores, guion y contexto de modo tal que todo cambio en los actores cambia el guion, todo
cambio en el contexto cambia la naturaleza del guion y los actores. A su vez, este conjunto (actores, guion,
contexto y trama) posees colorolarios morales, interpersonales y comportamentales. Estos colorarios, a su
vez reconstituyen, reconfirman, solidifican, la historia, y forman, por lo tanto, parte del sistema “narrativa”.

El pensamiento se caracteriza por buenas historias que ganan la credibilidad gracias a su realismo. Por
la superficie narrativa se produce el contacto con el exterior mediante procesos comunicacionales que
constituyen la relación y, de esa forma, el núcleo de la identidad puede modificarse incorporando nuevos
elementos o desprendiéndose de otros. El tiempo interviene de un nodo decisivo: en etapas tempranas de la
vida la identidad posee una permeabilidad que luego pierde. La narrativa mantiene casi inalterada su
capacidad de modificarse, sin perder su condición de espacio flexible, abierto a toda clase de transacciones.
No es infrecuente considerar la identidad como el último baluarte del individuo, su más solidad defensa y la
mejor garantía de su supervivencia.

Mientras más grave es la patología, más implicada esta en ella la identidad y más pobre resulta la
correspondiente narrativa.

La narrativa individual se construye, pues, basada en fantasmas que elaboran imaginariamente la


experiencia vivida en diálogos con las ideologías sociales. De una encrucijada tan rica y compleja nacen
Velazquez Herrera Florencia
51
múltiples narraciones que se ramifican penetrando los diversos espacios relacionalmente significativos de la
vida del sujeto.

La construcción de la identidad nace de la misma encrucijada, precediendo al surgimiento de la


narrativa. Narraciones excesivamente invadidas de identidad son un factor predisponente para la
disfuncionalidad.

Las narrativas tanto desde la narrativa como desde su núcleo de identidad, participan de un sustrato
emocional común, así como de un mismo troquelado epistemológico y de una verificación pragmática
mutuamente coherente.

Las personas generalmente adscriben significado a su vida convirtiendo sus vivencias en relatos, y que
esos relatos dan forma a sus vidas y a sus relaciones. También afirmamos que la mayoría de las
conversaciones con uno mismo, se ajustan al menos a los requisitos más elementales de un relato: tiene
planteamiento, nudo y desenlace. Por lo tanto la narrativa no se limita a los textos literarios.

Un modo narrativo de pensamiento ofrece:

1. Máxima importancia a las vivencias de las personas.

2. Favorece la percepción de un mundo cambiante mediante la colocación de las experiencias vividas en la


dimensión temporal.

3. Invoca el modo subjuntivo al desencadenar presuposiciones, establecer significados implícitos y generar


perspectivas múltiples.

4. Estimula la polisemia y uso del lenguaje coloquial, poético y pintoresco en la descripción de vivencias y
en el intento de construir nuevos relatos.

5. Invita a adoptar una postura reflexiva a apreciar la participación de cada uno en los actos interpretativos.

6. Fomenta el sentido de autoría y la re-autoría de la propia vida y de las relaciones de cada persona al
contar y volver a contar la propia historia.

7. Reconoce que las historias se coproducen e intenta establecer condiciones en las que el objeto se
convierta en autor privilegiado.

8. Introduce consistentemente los pronombres yo y tú en la descripción de los eventos.

Para que toda esta tarea resulte, los T deberán construir narraciones terapéuticas construidas como
historias liberadoras. Para esto debe recurrir a la desconstrucción de nuestras viejas historias y la
construcción de unas nuevas. La narrativa alienta a los clientes a experimentar un sentido de autoría en su re-
contar las historias de sus vidas, sino también les permite protagonizar sus narrativas nuevamente
construidos.

Cuando nuestras narraciones están fuertemente impregnadas por el problema solemos cometer el sesgo
de elegir mayormente aspectos que lo perpetúan, personalizan y rigidizan, maximizándolo y minimizando
Velazquez Herrera Florencia
52
nuestra capacidad de elegir otros que faciliten un relato diferente, en el cual lograremos una puntuación de
los hechos distinta, contrapuesta a las puntuaciones dominantes propias de la descripción saturada por el
problema.

La tarea del terapeuta consiste en facilitar la generación de nuevos significados a partir de estos
acontecimientos extraordinarios, los cuales pasaran a formar parte de la nueva narración. Lo cual se realiza
formulando dos tipos de preguntas, preguntas de influencia relativa.

 Aquellas que apuntan a describir la influencia del problema en la vida de los sujetos.

 Aquellas que apuntan a describir la influencia de las personas y sus cercanos, en la vida del problema.

White, 5 etapas del proceso terapéutico:

1. Hacer preguntas de conjunción para conocer a las personas que se han presentado en la terapia como
elementos separados del problema y para definir sus competencias.

2. Hacer preguntas relativas al problema y a la experiencia del cliente al respecto, poniendo atención en la
externalización del problema, hablando de él como si se tratara de una cosa que está separada del cliente
y de su vida.

3. Hacer preguntas con influencia relativa, que tienen el fin de externalizar el problema, esto es, llevar a los
miembros de la familia a vivir el problema como externo a ellos en cuanto personas. Algo externo que
influencia fuertemente en sus vidas.

4. Hacer preguntas que revelen los resultados únicos, es decir, que busquen episodios en los que el
problema no ha podido influir en la vida de las personas de la familia. Los resultados únicos son los
episodios de vida que contradicen (pasado real) la descripción saturada del problema ( la historia
dominante), o que no pueden ser previstos a partir de la lectura de la historia dominante (futuro
imaginario).

5. Construcciones de historias alternativas, que tienen como objetivo de construir un nuevo paisaje de la
conciencia, sobre la base de los resultados únicos presentes en el paisaje de las acciones.

Intervenciones de la Terapia Narrativa

Las intervenciones en la narrativa se fundamentan en el lenguaje. Se formulan preguntas potenciales


que posibiliten identificar las acontecimientos extraordinarios en un patrón temporal. Los interrogantes que
surgen motivan a los miembros a ejercer una práctica del significado.

La práctica se inicia cuando el terapeuta escucha con respetuosa atención a la persona. Con esta
propuesta del T es posible que el consultante realice su relato.

Intervenciones generales.

Velazquez Herrera Florencia


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1. Bautizar el problema

Posibilita que se defina como problema y no como enfermedad.

2. Emplear un lenguaje externalizador

Con el cual el problema sea considerado como una consecuencia o un efecto producido por algún
aspecto de la vida cotidiana. El objetivo es que la persona se distancie de sus problemas y ayudar a
concebirlos como producto de las circunstancias no de su personalidad o psicología.

3. Considerar los aspectos políticos y sociales.

Considerar estos aspectos ofrece importantes y conocidos ejemplos de que los abusos se encuentran
insertos en las paradojas del poder social lo que le permitirá a las personas liberarse de la culpa y la
autocensura.

4. Realizar preguntas de influencia relativa

Apuntan a: la influencia que el problema ha tenido y tiene en la vida de la persona. Y la influencia que
la persona ha tenido y tiene en la vida del problema.

5. Desconstrucción de desenlaces inesperados

Conocidas las excepciones, el T debe visualizar la posibilidad de ampliarlas, que a partir de ahora,
deberían pasar a ser posibles, reales, frecuentes.

6. Invitación para asumir una postura

Cuando ha llegado a este momento, representa una encrucijada para el consultante. Debe asumir la
postura de mantener aquello que lo ha venido preocupando o, desde ahora le dará lugar a la excepción, que es
una alternativa posible, porque ya ha sido experimentada.

7. Uso de documentos terapéuticos.

Documentos escritos, de su propia autoría o creados por el consultante. Se trata de tareas que propone
el T para apoyar la postura asumida. La confección o la lectura de: memorandos, cartas, declaraciones, listas,
ensayos, contratos o certificados. Se utiliza para consolidar el progreso porque la palabra escrita es más
permanente que la hablada y porque, en la sociedad occidental, goza de mayor autoridad.

8. La terapia continúa. Narrar y re-narrar

9. Uso de testigos externos.

Para aumentar el compromiso es necesario un público, ya sea familia, otro paciente o escribiendo un
libro o diario personal.

10. Re-membrar.
Velazquez Herrera Florencia
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La idea es que puedan volver a ser miembros de grupos de familiares o amigos con los que habían
dejado de frecuentar.

11. La terminación de la terapia se produce cuando el consultante decide que su relato de sí mismo es
suficientemente rico para abarcar su futuro.

Se construye conjuntamente entre terapeuta y familia un relato alternativo, plausible, usando elementos
de una o más historias que la familia trajo consigo al venir a terapia. Cada relato o narrativa alternativa se
estructura alrededor de un mito o tema culturalmente disponible. Al mismo tiempo que las narrativas se
transforman, la historia original que contiene el problema pierde su predominio, y el problema se redefine; se
convierte en un no-problema o incluso en una bendición encubierta. El problema en una nueva presentación
se vuelve accesible a soluciones, o deja de ser el foco; se disuelve.

El objetivo del terapeuta es facilitar tal cambio en relatos específicos o en la relación entre ellos. Los
terapeutas intentaran generar un clima de conservación que facilite cambios de consenso: mantendrán una
actitud de empatía al sufrimiento y las dificultades de la familia y de interés y curiosidad sobre sus ideas;
favorecerán una postura optimista de connotaciones positivas; y contribuirán activamente a guiar la
conservación terapéutica hacia cambios en la narración colectiva.

El proceso y contenido de la conservación se entreteje con contribuciones de todos los participantes.


Muchos T siguen un esquema basado en los siguientes elementos, generalmente en secuencia si bien de
manera interpretada.

Encuadrar el encuentro

Generar y representar los relatos dominantes

Favorecer relatos o relaciones entre relatos alternativos.

Realzar las nuevas historias.

Afianzar los nuevos relatos.

Las transformaciones o cambios, son el producto de redefinir la concepción que los consultantes tienen
de aquello que los aflige y/o de las soluciones intentadas para resolverlo, y que se pueden evidenciar como
quejas, lamentos, síntomas o cambios de conducta.

Las transformaciones pueden ser un producto del cuestionamiento del síntoma, y/o de la estructura y/o
de la realidad.

El problema que se ha traído a la consulta puede vivenciado y relatado como interno (propio problema)
o externo (de los demás, o por algo que piensan, sienten o hacen)

Simultáneamente la gestión (las acciones posibles y necesarias de llevar a cabo para la solución del
problema) pueden reconocerse como propias acciones o como acciones que deben ser emprendidas por otros,
razón por la cual los problemas pueden quedar sin resolver y/o ser resueltos de otra manera, obteniendo otros
resultados viables, pero no como esa persona deseaba que fuera resuelto el problema.

Velazquez Herrera Florencia


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Semejanzas y diferencias entre los modelos sistémicos

TE de Haley TE del MRI TCS TES TN

En la disfunción de la familia,
Como se organiza la
en la alteración de jerarquías, El relato, sobretodo
Proceso de interacción que Se centra en las familia y como
Foco de análisis dificultad para generar reglas la descripción del
mantienen los consultantes. soluciones establecen y mantienen
acordes y funcionales para el problema
las jerarquías.
ciclo que transitan.

Modificar el circuito
Pensar en primera Modificar la estructura Modificar la
mantenedor del problema,
Posibilitar y promover que la instancia nuevas familiar, para que la narrativa dominante,
Objeto de cambio redefinir la concepción que
organización sea funcional. soluciones y luego misma vuelva a la creando relatos
se tiene del mismo, o las
actuar. funcionalidad alternativos.
soluciones intentadas.

Las acciones debe ser


llevadas a cabo para
Miembros con mayor La familia conviviente
Foco de intervención El subsistema de impacto. encontrar la solución y El/los consultantes
motivación y persona significativas.
partir de ellas sostener
el cambio logrado.

Lugar del cambio En el ámbito natural Fuera de la sesión Periodo entre sesiones En la sesión En la cotidianeidad

Las directivas, las


Sugerencias, redefiniciones redefiniciones, la Cuestionar el síntoma, 10 pasos, desde
Pregunta del milagro,
Maniobras prescripciones, las ordalías y connotación positiva del la realidad y la bautizar hasta relato
tareas de formula.
los rituales síntoma, la prescripción del estructura. satisfactorio
síntoma y las tareas.

Distribución de
aprox 10, inter variable. - de 10, inter variable. No es terapia breve
sesiones

Función del cambio El T busca y mantiene el Desde una postura de baja El cambio será el El cambio está Que se modifique el
máximo control intensidad, sugiriendo, busca resultado de destinado a que la flia relato de manera
administrativo, énfasis en el logro de cambios mínimos búsquedas de no requiera del síntoma que sea
suficientemente rico
para su nueva manera
hacer explicito lo implícito. y progresivos. alternativas. para abarcar el
de funcionar.
futuro.
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Ética y psicoterapia

Las ciencias del comportamiento abordan el bien y el mal desde la teoría de la personalidad. Las tres
teorías que más han influido son: el aprendizaje social, el desarrollo cognitivo y la teoría psicoanalítica.

La teoría del aprendizaje social: se basa en como aprendemos procesos complejos de conducta social.
La persona moral es la que simplemente se ajusta a las normas culturales y ha absorbido las normas de la
sociedad y de sus padres. La mejor manera de estudiar la moral es observar las técnicas de refuerzo que se
han usado, los tipos de castigo y los modelos que se usan o se han empleado.

La teoría del desarrollo cognitivo: hay tres etapas del desarrollo del juicio moral:

1. Restricción moral: en niños menores de 7 u 8 años. Los valores son absolutos, hay cosas correctas e
incorrectas y el castigo es el resultado cuando alguien ha sido malo: realismo moral.

2. A partir de los 8 años y dura hasta los 12, el niño es más independiente y se preocupa por la justicia del
castigo.

3. Desde los 12 años, relativismo moral: la lealtad es hacia los padres. Se escucha otros puntos de vistas.

La teoría psicoanalítica subraya que la moralidad se basa en la identificación con lo padres. La


conciencia es lo mismo que el superyó y se desarrolla aproximadamente a los 5 o 6 años. El bien y el mal son
las reglas paternas que absorbe el niño y su rta a estas reglas arbitrarias. El superyó es punitivo, y el yo existe
para traer alguna clase de razón a la conducta. El ELLO funciona como la reserva de emociones, pasiones e
impulsos libres de trabas.

Ética moral y responsabilidad.

Ética, moral y responsabilidad son dos condiciones que nunca debe dejar de lado un terapeuta que es
consultado para iniciar, continuar o acelerar un proceso de cambio. También para resolver, reconducir, una
crisis a veces inevitable, como las crisis vitales o accidentales.

Temas, sobre los que debemos reflexionar:

1. Un intercambio justo.

2. Control de la información

3. El sentido de propia responsabilidad del T.

4. La competencia, que lo debe llevar a sentirse en permanente capacitación

5. El correcto empleo de normas morales y legales.

6. Las declaraciones públicas que realiza.

7. La confidencialidad de todo cuanto maneja.

8. El bienestar del que consulta.


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9. Las relaciones con otros colegas.

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