Está en la página 1de 1

Inicio Nosotros 3 Afiliación 3 Servicios Actualidad y De interés 3 Solicitudes 3 Centro de Arbitraje 3 La Cámara, Caracas y sus historias 3 Cámara Activa

s historias 3 Cámara Activa Contacto

CARACAS SE MODERNIZÓ CON LOS TRANVÍAS ELÉCTRICOS


7 Nov 2022 | Crónicas de la Ciudad

El desarrollo del sistema masivo de transporte público en la ciudad de Caracas se acerca a los 120 años. A nales del año 1906, los poco más de
cien mil habitantes que tenía la capital venezolana, comenzaron a hacer planes para movilizarse en modernos vehículos eléctricos, servicio que
Administrar el consentimiento
estuvo en actividad entre 1907 y 1947.
La empresa Tranvías Eléctricos de Caracas comenzó a hacer pruebas con sus
vagones marca Stephenson en octubre de 1906 e inició operaciones al sur de la ciudad,
entre las estaciones de Las Flores y El Valle, el 15 de enero de 1907, marcando así un
hito en la historia del transporte urbano en Venezuela.

Antes de este novedoso sistema, la población caraqueña empleó los tranvías de


tracción animal, guiados por un cochero que se encargaba de tratar muy bien a los
caballos, los llamaba por su nombre, les daba instrucciones de avanzar o detenerse y
les colocaba grandes piezas de gruesa tela de colores para protegerlos de la lluvia, así
como cascabeles en los arneses, los cuales hacía sonar cuando los carros se
aproximaban a las estaciones.

Pero con la entrada del siglo XX, la electricidad acabó con el negocio. Las empresas
Tranvías Bolívar y Tranvías Caracas, fundadas en las dos últimas décadas del siglo XIX.
La primera cubría la ruta entre la plaza Bolívar y Palo Grande, y luego abrió otra línea
de circulación entre Caño Amarillo y Quebrada Honda, mientras que la segunda
ofrecía servicios entre La Pastora, Puente Hierro, El Paraíso y Palo Grande, se vieron
El 15 de enero de 1907, se inauguró en Caracas el sistema de obligada a cerrar, e incluso pusieron en la venta los animales. Comenzó así una nueva
transporte de tranvía eléctrico. La primera ruta fue entre Los
Flores (Puente Hierro) y El Valle. etapa en el transporte colectivo capitalino.
Al iniciar actividades en 1907, la compañía Tranvías Eléctricos de Caracas ordenó 30 tranvías eléctricos. Eran modelos con escaleras de ocho
peldaños para acceder y las dimensiones adecuadas para recorrer las curvas cerradas de las angostas calles de la ciudad: 7,3 metros de largo por 1,6
metros de ancho.

Tan orgullosos estaban los caraqueños de las bondades de su nuevo sistema de transporte, que desarrollaron una suerte de “cultura del tranvía”,
al igual que ocurrió a nales del siglo XX, cuando abrió operaciones el Metro de Caracas.

Las empresas a cargo de los tranvías los mantenían pulcros y en perfecto estado de funcionamiento. Operadores y colectores siempre estaban
muy bien uniformados. El pasaje mínimo tenía un costo de 0,25 céntimos (medio) y la ruta que llegaba hasta la parroquia foránea El Valle tenía
tarifa de un real o 0,50 céntimos.

A continuación, ofrecemos interesante reportaje, publicado en la edición de la revista “El Cojo Ilustrado” del 1 de julio de 1908, en el cual se
ofrecen interesantes detalles técnicos de los equipos, dirección de o cinas y de orden administrativo de la compañía que manejaba las operaciones
de los tranvías caraqueños.

“Publicamos hoy diversas fotografías de los edi cios y líneas de los Tranvías Eléctricos de Caracas. Esta Empresa representa un progreso efectivo
en el ornato y en la comodidad del trá co de la capital; y durante los meses que tiene funcionando han podido apreciarse las numerosas ventajas
que ofrecen y la ausencia de inconvenientes que se hubieran podido tener.

No siendo posible usar los tranvías ordinarios en las angostas calles de Caracas fue preciso
construir unos especiales.
Cada tranvía de Caracas tenía una ruta especí ca y la central
estaba ubicada en la plaza Bolívar.
El edi cio construido por la Empresa en la Avenida Este consta de las o cinas de la Compañía, una sala de maquinarias; un vasto salón con
diversos baños para el uso de los empleados de las líneas; un depósito para los carros y vastos talleres.

En la sala de maquinarias están montados los tres generadores de la corriente directa, que es la que mueve los carros. Cada generador es de 150
kilowatts y la corriente sale con una tensión de 550 voltas; posee dos motores distintos –uno movido por la corriente que viene de El Encantado, y
otro que usa como combustible el petróleo crudo– cada uno de 240 caballos de fuerza. Además de los dos tipos de motor, la estación generadora
está provista de una batería de acumuladores, que consta de 260, con una capacidad su ciente para mover los carros dos horas en el caso fortuito
de un accidente en las maquinarias. De este modo la estación resulta compleja; pues está montada con su ciente maquinaria de reserva para
remediar cualquier obstáculo y evitar toda interrupción del servicio.

Los depósitos tienen un espacio su ciente para contener 30 carros, con una fosa debajo de dos de las vías para el examen y composición de los
frenos y motores de éstos. Los talleres están compuestos de carpintería, salón para la pintura de los carros, herrería y taller de mecánica. En este
último están montados 2 tornos, máquina de taladrar, ruedas de esmeril, prensa hidráulica para quitar las ruedas, etc.

La vía permanente y las líneas aéreas están construidas con el mejor material y con los últimos adelantos de la industria.

No siendo posible usar los carros ordinarios en las angostas calles de Caracas fue preciso construir unos especiales; pero después de muchos
estudios se ha logrado obtener un tipo adecuado a las necesidades de la ciudad, y elegante al mismo tiempo. Están construidos de una madera de
la India, «Teak», la cual es a prueba contra los insectos. Cada carro está provisto de dos motores de 75 caballos de fuerza los dos; y en vista de las
fuertes pendientes de las calles, tienen un freno eléctrico, además del freno de mano. Los fabricantes de los carros son Milnes Voss & C°. de
Inglaterra.

La Junta directiva de la Compañía está compuesta de los señores Doctor Nicomedes Zuloaga, Edgar A. Wallis, Albert Cherry y E. H. Ludford,
Gerente. El capital de la empresa es de Bs. 5.000.000.
El señor Wallis había concebido desde años atrás, el proyecto de dotar a Caracas de una línea
de Tranvías eléctricos; pero las di cultades eran numerosas; entre otras la de adquirir de las
Compañías existentes el derecho para poner por obra el pensamiento. Adquirió, sin embargo, en
1903, la mayor parte de las acciones del «Tranvía Bolívar», y de hecho quedó administrando esta
Empresa. En 1906 adquirió las que le faltaban. Había comprado ya en 1905 el activo del «Tranvía
Caracas» y el del ferrocarril de El Valle.

Como las sendas concesiones que tenían estas Empresas eran distintas, hubo de alcanzar del
Ejecutivo Federal y del Distrito la uni cación de estas varias concesiones en una sola, en la cual
Antes del novedoso sistema de tranvías eléctricos, la
población caraqueña se transportaba, entre 1882 y resultó el público bene ciado, tanto por la disminución del precio del pasaje, como por la
1907, en tranvías de tracción animal, guiados por un
cochero. comodidad y presteza del nuevo servicio. Luego el señor Wallis obtuvo en Europa el capital
necesario para realizar el útil proyecto que había concebido.
En los empeños y afanes de su empresa el señor Wallis ha tenido un colaborador activo, e caz e inteligente en el señor Ludford, notable
ingeniero electricista, que ha intervenido en los trabajos de instalación y construcción con una competencia y acuciosidad incansables. El señor
Ludford es al presente gerente de la Empresa.

La dirección del trá co está encomendada al señor Eugenio Mendoza, el cual, con múltiple actividad e inteligencia ha logrado hacerlo cada día
más regular y satisfactorio”.

0 comentarios

La Cámara de Caracas
Fundada el 22 de noviembre de 1893

    

© 2022 Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas | Rif: J-31175605-1 | Todos los derechos reservados
Teléfono (0212) 571-3222
Diseñado por JhonGuevara

También podría gustarte