La macroeconomía estudia el funcionamiento global de la economía, esto como un
conjunto integrado en la que se explica la evolución de los agregados económicos observando el conjunto del país o la región estudiada. A conjunto integrado nos referimos al estudio de las variables económicas agregadas. Siendo útil porque nos permite analizar la mejor forma de conseguir los objetivos económicos de un país, teniendo en cuenta que la política económica es la mejor herramienta para alcanzar una estabilidad en precios, el crecimiento económico, aumento de empleos y mantener una cifra de pagos sostenibles y equilibrados. La macroeconomía observa y estudia la ley de oferta y demanda de un país, es decir, la oferta agregada de bienes y servicios de un país y la demanda agregada como el consumo total de un país. Teniendo en cuenta este contexto es importante emparejar los ítems de los que se ocupa la macroeconomía en el país como lo son la productividad, la inflación, el desempleo, las cuentas públicas, el crecimiento económico a largo plazo y los ciclos económicos. Un ejemplo de estudio macroeconómico en el país es el sueldo mínimo legal en el que el país este encargado de hacer un cálculo en base a la canasta familiar y otros factores de consumo, ajustándolo en función a los ítems de apoyo y a la inflación económica del país. El impacto económico negativo que dejo la pandemia (COVID-19) generaron efectos en la economía colombiana, principalmente en el mercado laboral, cuyos resultados de agosto 2020 revelaron la diminución de 2.4 billones de trabajadores formales e informales, teniendo una tasa de desempleo elevada al 16.8% con respecto al 2019. En el 2019 el PIB creció un 3.3%, impulsando por la demanda interna. El PIB del segundo trimestre de 2020 decreció un 15.47% en términos anuales, reflejando el impacto de las medidas de contención de la pandemia afectando la producción y la demanda agregada. En 2019 las autoridades monetarias mantuvieron una moneda expansión para facilitar la consolidación de la recuperación. A partir de la última semana de marzo de 2020 se inició una nueva etapa de impulso de la política monetaria a través de reducciones de las tasas de interés entre varias medidas, con la intención de garantizar liquidez, apoyar el flujo de crédito a las empresas y los hogares y dar alivios a los deudores. El déficit externo aumentó en 2019 y alcanzó el 4,3% del PIB debido, principalmente, al desequilibrio comercial que produjo la caída de las exportaciones La política monetaria mantuvo en 2019 una expansión moderada para posibilitar el fortalecimiento sostenido de la recuperación económica. La tasa de interés de intervención se mantuvo en un 4,75% entre marzo de 2018 y febrero de 2020. A partir de marzo de 2020 las autoridades La junta directiva del Banco de la República redujo la tasa de interés de intervención en siete ocasiones sucesivas entre marzo y septiembre, acumulando una reducción de 300 puntos básicos hasta situarla en un 1,75%. Además, se redujo el encaje de las cuentas corrientes (del 11% al 8%) y de los depósitos a plazo (del 4,5% al 3,5%) y se determinó la inversión forzosa de estos recursos en bonos de solidaridad para nutrir al FOME. La situación del mercado laboral en mayo de 2020 fue calificada como catastrófica cuando la tasa de desempleo alcanzó el 21.4%. Las consecuencias de las medidas de aislamiento provocaron en el mercado laboral la destrucción de 4.9 millones de puestos de trabajo, A partir de marzo el Gobierno tomó medidas para proteger el empleo: prohibió el despido de trabajadores en entidades públicas y en las privadas inicialmente lo supeditó a la revisión del Ministerio de Trabajo, y suspendió durante tres meses la obligación de cotizar al sistema de pensiones. En mayo creó el Programa de Apoyo al Empleo Formal (PAEF), que paga a todas las empresas el 40% salario mínimo (350.000 pesos) durante cuatro meses. Se estima que esta medida beneficiará a 6,5 millones de trabajadores y tendría un costo de 0,9% del PIB. De forma complementaria el gobierno reconocerá a cada empresa el equivalente al 25% del salario mínimo para el pago de la prima semestral en junio y diciembre de 2020 por cada empleado formal. En agosto los resultados del mercado laboral muestran una tendencia favorable. El desempleo alcanza un 16,8%, cifra que es 6 puntos porcentuales mayor que la del mismo mes 2019, pero inferior a las registradas entre abril y junio de 2020.Para asegurar que la liquidez siguiera fluyendo a la economía, entre febrero y diciembre de 2020, el Banco emitió 31,1 billones de pesos. La mayoría de esos recursos se entregaron de forma permanente o a plazos largos, de modo que el sistema financiero pudiera contar con liquidez estable que le permitiera dar crédito a los agentes económicos. La intervención del Banco inyectó recursos líquidos para garantizar la adecuada liquidez en este mercado, y de esa manera contribuir a la estabilidad del sistema financiero. Los pronósticos de crecimiento económico para este año son bastante pesimistas. Teniendo en consideración la incertidumbre actual que no permite reflejar cómo terminará el año, todas las entidades han presentado proyecciones negativas y tasas que no son comunes en nuestra economía. Las medidas anteriormente mencionadas sumadas a la reactivación económica, la racionalización de costos dentro de las compañías, la recuperación de cartera, la reactivación de las cadenas productivas, las medidas y ayudas del gobierno como los diferentes subsidios y el día sin IVA, se han traducido en un alivio en la situación de liquidez de las empresas. Para el 2020 estimamos que la economía colombiana cerrará el año con una caída alrededor del -8%. Para el 2021 el resultado final será positivo tanto por factores estadísticos como por la evolución que ya empieza a registrarse donde las caídas en los sectores que vienen operando dentro de una nueva realidad, se han moderado. En estas condiciones el crecimiento podría estar alrededor del 5%. Con estas tasas es importante anotar dos grandes temas. De un lado nos demoraremos al menos dos años en recuperar los niveles de 2019. Pero, más importante aún está el interrogante sobre cuánto tardará el país en retornar a la trayectoria de crecimiento que habíamos logrado en los últimos años. Allí la respuesta es menos optimista y podríamos hacer referencia a 4 o 6 años. La pérdida de valor económico de la sociedad será gigantesca, solo en 2020 podemos hablar de más de 80 billones de pesos, llegando a una nueva base para los crecimientos futuros acumulativa que nos llevará a perder unos 140 billones en 3 años. Difícilmente recuperaremos estas pérdidas, que por supuesto tendrán profundos efectos en las metas sociales. La longitud y tamaño de la crisis, sin embargo, dependerá de las acciones que tomemos desde el sector público y desde lo microeconómico. Desde la política pública se requieren acciones de choque que apunten al salvamento de las empresas y la conservación del empleo y así evitar una pérdida del tejido empresarial que nos haría postergar aún más una reactivación sostenida de la economía. Pero igualmente se requieren políticas estructurales que le den certeza al empresariado nacional y extranjero que Colombia es un país en recuperación. Y desde lo empresarial el reto es mantener la confianza y continuar creando empresa. En conclusión a pesar de todas las medidas que se han generado para que la economía siga fluyendo y sus indicadores aumenten positivamente, es claro que la pandemia genero impactos de gran magnitud que nos llevara 4 años aproximadamente para retomar y llegar a parte de lo que era para inicios del 2019; todo este se ve reflejado en el diario vivir, en los precios elevados en la canasta familiar, el índice de desempleo; el ahorro ha disminuido notablemente por la tasa de interés tan baja en productos como el CDT o en las cuentas de ahorro, las personas no quieren invertir por la experiencia de perdidas cuando inicio la PANDEMIA se vieron afectados sus ahorros y disminución o perdidas como en las fiduciarias, cesantías, ETC. Y aunque el banco de la república ha ido aumentando las tasas paulatinamente en las personas sigue existiendo el temor a pérdidas o a un confinamiento que vuelva a afectar la economía del país. Imagen 1. La anterior imagen refleja el análisis anterior con respecto a la macroecomia en el país. Fuente: COLOMBIA: BALANCE 2020 Y PERSPECTIVAS 2021
Sergio Clavijo: En ese año ha sido de altibajos al principio el crecimiento se
pronosticaba similar al E.E.U.U, elevándose de 5.5% y al 7.5%. Lastimosamente el país se desplomado, mientras que en E.E.U.U y Europa se ha mantenido inalterado 5% en ambos años (2019 y 2020) Contribuyeron a esto la caída de precios de petróleo, la falta viajes tanto de turismo como de negocios que se redujo entre un 25% y 50%, el desempleo y subiendo y el estancamiento de exportaciones que ha caído entre 16% y 14%. Más el endeudamiento y la desvalorización del peso, el que gane las elecciones la tendrá muy complejo para llevar adelante el país. Desafortunadamente la situación no parece mejorar y aunque se está abriendo el comercio aun no da lo suficientes dividendos para al menos mejorar la situación, más devaluación del peso el país no está en una situación muy favorable.
Encuentre Cifras de Desempleo de Colombia en El Año 2017 y Compárelo Con Las Cifras de Desempleo de Los Países de La OCDE en El Mismo Período de Tiempo