Está en la página 1de 5

FILOSOFIA DE LA CIENCIA (Epistemología) Curso 2020

Prof. P. José Luis Morillo sdb


Est. Sem. Gonzalo Bayarres

Thomas KUHN (1922-1996): la estructura de las revoluciones científicas1

Junto a Imre Lakatos, Paul Feyerabend y Larry Laudan, Thomas Kuhn forma parte de
aquellos epistemólogos post-popperianos que han desarrollado sus teorías siempre con mayor
contacto con la historia de la ciencia. Efectivamente, a través de un agudo estudio de la historia de
la ciencia, el norteamericano Kuhn ha mostrado que el desarrollo de la investigación científica no se
realiza según los modos hipotizados por Carnap (método inductivo-deductivo) y Popper (método
hipotético-deductivo).
La publicación en 1962 de su obra La estructura de las revoluciones científicas 2, marcó
una nueva etapa en la filosofía de la ciencia del siglo XX y en los estudios de la ciencia en general,
porque Kuhn también ha influido sobre sociólogos e historiadores de la ciencia. Si bien, como en el
caso de la La lógica de la investigación científica de Popper, no tuvo éxito inmediato dado el auge
que en ese momento tenían las teorías popperianas como alternativa auténtica a la “concepción
heredada”3 y que, en 1973, Popper publicaba su segunda gran obra de metodología científica
Conjeturas y Refutaciones. Por otro lado, la célebre polémica de 1965 en Londres entre Popper y
Khun recién fue conocida por el gran público en 1970.
Kuhn ha dado a la ciencia, con su teoría epistemológica, una nueva batería de conceptos
claves que ya han sido incorporados al lenguaje científico: el más noto es el de paradigma, pero
también, ciencia normal, anomalía, revolución científica, ciencia extraordinaria.

a. El papel de la comunidad científica

Lo que Kuhn propone en su famoso libro de 1962 es un enfoque de cómo debe realizarse
“una reconstrucción racional” del quehacer científico. El fin es explicar el comportamiento de los
científicos y su práctica real que les permita obtener una empresa exitosa.
Para él, la ciencia es eminentemente una práctica comunitaria, por lo que ubica en el
primer nivel el rol de la comunidad científica. ¿Cómo entiende Kuhn a ésta? Como un grupo
especial constituido por científicos de una determinada disciplina que han compartido un
aprendizaje, que tienen formas similares de entender y resolver los problemas que la investigación
diaria les plantea a los que un lenguaje común les permite comunicarse entre sí sin riesgo a se
malentendidos. Esta comunidad no sólo tiene a su cargo la producción de nuevo conocimiento en el
área de su especialidad sino que también le corresponde el entrenamiento y la formación de los
nuevos profesionales.
1
Para este tema seguimos a: Glavich, E. E. Ibáñez R. R. Lorenzo M. R. y Palma H. A., Notas introductorias a la
filosofía de la ciencia. La tradición anglosajona, Buenos Aires, Eudeba, 1998.
2
Kuhn, Thomas S., La estructura de las revoluciones científicas, México, Fondo de Cultura Económica, 1971.
3
Es la manera como entendieron la naturaleza de las teorías científicas los autores del positivismo lógico o del Círculo
de Viena. A la teoría de la ciencia defendida por ellos se la llamó «concepción estándar» y luego «Received View».
Desde su punto de vista, la estructura de la ciencia se pone de manifiesto en las teorías, que se interpretan como un
cálculo lógico o un sistema axiomático. Por consiguiente, las teorías son conjuntos de leyes teóricas y de leyes
empíricas; las primeras, mediante reglas de correspondencia se relacionan con los hechos, y las segundas son
generalizaciones empíricas de hechos; las leyes empíricas, por lo demás, han de poder deducirse lógicamente de las
teóricas. Las leyes teóricas se fundamentan en el método hipotético-deductivo, de modo que son confirmadas o
desconfirmadas por la contrastación de hipótesis. Los elementos fundamentales de esta concepción son:
1) la distinción, y a la vez correspondencia, entre términos teóricos y observacionales o empíricos o distinción teórico-
observacional;
2) el establecimiento de principios teóricos o axiomas, de donde parte la demostración de cualquier enunciado o
teorema, y
3) el recurso al cálculo lógico con que se relacionan deductivamente todos los enunciados de la teoría.
En un principio se consideró ideal una estructura propiamente axiomática entre todos los enunciados de la teoría, que
resultó difícilmente aplicable a las ciencias empíricas. Este modelo de ciencia, basado excesivamente en criterios
sintácticos, no tenía en cuenta los aspectos sociales e históricos de la investigación científica y de la misma ciencia.
Críticas posteriores y dificultades de variada índole obligaron a abandonar paulatinamente este modelo en favor de una
concepción semántica de las teorías científicas.
FILOSOFIA DE LA CIENCIA (Epistemología) Curso 2020
Prof. P. José Luis Morillo sdb
Est. Sem. Gonzalo Bayarres

Los científicos comparten toda una serie de conocimientos pero también una variedad de
prácticas educativas, metodológicas y de comportamientos que los identifica como miembros de un
grupo determinado. Por estas características esta comunidad se aísla y es público y juez de su
actividad. Los científicos escriben para sus colegas, no para el público en general.
Otra característica es que estos grupos son esencialmente conservadores y dogmáticos. En
efecto, la enseñanza que recibe el científico en general no se propone que éste sea crítico, sino más
bien se lo entrena con manuales o libros donde frente a cada dificultad se busca que el estudiante
practique la resolución de problemas ya dados para que después sea capaz de aplicar las mismas
fórmulas a nuevas situaciones planteadas por la investigación. La aplicación de categorías y
fórmulas extraídas de ejemplos ya estudiados o resueltos a nuevos problemas es la base de la
actividad científica, y es por esto que los científicos son en general reacios a cambiar sus puntos de
vista y teorías frente al primer problema irresoluble que surja y parezca falsarla.
Como no puede existir una iglesia sin dogmas, compara Kuhn, o un partido sin ideología,
así no se puede dar una comunidad científica sin un paradigma.

b. Paradigma y ciencia normal

Kuhn dice que una comunidad científica es tal en la medida en que comparte un
paradigma. La palabra paradigma tiene en su obra múltiples significados, pero podríamos decir que
sus principales características eran el ser el modelo de acción, una metodología de investigación y,
sobre todo, una manera de ver el mundo.
La primera noción de paradigma4 (1962) fue considerada como sugerente pero un tanto
confusa y criticada por su vaguedad. Mastermann distinguió hasta 21 sentidos diferentes en La
estructura, agrupables en tres grandes grupos:
1. aspecto filosófico (o metafísico), que daría la imagen del mundo y las creencias básicas
de los científicos sobre lo que sea la realidad: sería el caso del atomismo, del mecanicismo. De la
matematización de la realidad, del evolucionismo, del fenomenalismo, etc.
2. aspecto sociológico, ligado a la estructura y a las relaciones internas y externas de la
comunidad de científicos que detentan un mismo paradigma: este conlleva un aspecto institucional,
tanto desde el punto de vista nacional como internacional (sociedades, publicaciones, manuales,
congresos, academias, etc.) que permite discernirlo con respecto a otros paradigmas rivales.
3. aspecto propiamente científico, ligado a los problemas ya resueltos y a los principales
ejemplos que son explicados gracias a su utilización..

Como producto de estas críticas, Kuhn se vio obligado a reformular esta noción
fundamental en la Posdata que hizo a La estructura en 1969. En ésta, distingue un primer uso del
concepto donde paradigma es la constelación de compromisos del grupo. Una “matriz disciplinaria”
que incluye:
1. generalizaciones simbólicas: conjuntos de definiciones y leyes válidas para la disciplina.
Por lo general sus leyes están formalizadas;
2. modelos heurísticos, es decir, ciertos modelos de cómo interpretar la realidad de tal
forma que el científico pueda identificar dónde hay un problema o enigma a resolver y
cuáles son la soluciones aceptables para su comunidad;
3. ciertos valores tales como coherencia, predictibilidad, sencillez, exactitud, etc., tenidos
en cuenta a la hora de evaluar una teoría;
4. un conjunto de problemas resueltos que son ejemplos compartidos a partir de los cuales
el estudiante descubre una forma de ver un nuevo problema dentro de la disciplina en
cuestión. La práctica rutinaria sobre esos problemas genera en el científico una
4
Es común encontrar a muchos autores que hablan de un primer Kuhn, el de la Estructura (1962) y un segundo Kuhn
que revisaría muchas de sus posiciones centrales, luego de las críticas recibidas, a partir de la misma Posdata a su libro
(1969), y que es la que normalmente se sigue.
FILOSOFIA DE LA CIENCIA (Epistemología) Curso 2020
Prof. P. José Luis Morillo sdb
Est. Sem. Gonzalo Bayarres

capacidad de ver dos situaciones como similares y análogas y, por lo tanto, resolverlas
de manera parecida.
Este último aspecto del paradigma es el que nuestro autor considera central, y muchas
veces se refiere a paradigma como idéntico a ejemplos compartidos. Este aprendizaje no se lleva
adelante sólo por la transmisión de generalizaciones aceptadas por el grupo sino también (y
fundamentalmente) en los mecanismo del proceso mismo. El estudiante en su práctica cotidiana de
resolución de problemas no incorpora sólo categorías o palabras sino que al lincorporarlas en su
funcionamiento, en su contexto, en toda una red de analogías y similitudes, adquiere también una
manera ver las cosas, de organizarlas y percibirlas: “…contempla la situación a la que se enfrenta
como un científico en la misma Gestalt que otros miembros de su grupo de especialistas”.

“La práctica científica implica generalizaciones que presuponen un lenguaje, la


adquisición de dicho lenguaje lleva consigo conocimiento de la naturaleza. En el
proceso de aprendizaje (resolución de problemas) se adquiere lenguaje y
conocimiento a la vez, aparecen como dos caras de la misma manera”.5

El paradigma, según esto, excede el concepto tradicional de teoría científica y funciona


como un conjunto de prácticas y categorías compartidas por un grupo de científicos en un momento
dado y que les permite a éstos organizar y conocer le mundo de una determinada manera (aquí
también la teoría precede a la observación). Mientras este modelo de trabajo y de ver la realidad
está vigente nos hallamos en lo que Kuhn denomina “ciencia normal”.
En la ciencia normal el paradigma vigente dirige las investigaciones y es el marco en que
se desarrolla la actividad de la comunidad científica. La actividad se centra en la resolución de
problemas, que pueden ser tanto de tipo teórico como experimental. Existe una confianza en que el
paradigma compartido provee de los instrumentos metodológicos, conceptuales, etc., necesarios
para resolver cualquier enigma.

c. La ciencia: ¿una historia de revoluciones?

Con los conceptos de comunidad científica y paradigma, Kuhn defiende una visión más
sociológica del trabajo científico. Esto determinaría una visión estática de la ciencia que daría
categorías para estudiar la ciencia y los grupos de científicos en un momento dado pero no su
evolución, sus rupturas y sus cambios. Es el momento de encontrar cuál es la dinámica histórica del
conocimiento científico. Para ello Kuhn propone analizar la historia de la ciencia no como una
sucesión acumulativa de descubrimientos y adelantos o como una alternancia entre ensayo y error,
sino como un recorrido discontinuo, con rupturas que dejan atrás paradigmas establecidos y crean
otros nuevos. Por lo tanto, en la historia de la ciencia, como en toda historia, es necesario hablar de
revolución.
La posición del paradigma parecería más estable en el caso de las ciencias duras, mientras
no tan definitivo en las ciencias sociales donde más de un paradigma luchar por la hegemonía.
Mientras los científicos trabajan dentro de un paradigma se puede hablar de progreso en
cuanto se profundiza s se complejiza más lo conocido: se completa el “rompecabezas”. Sin
embargo, tarde o temprano se presentan determinados hechos que no pueden ser explicados dentro
del paradigma, es decir surgen enigmas para los cuales el modelo no tiene respuesta. Esto es lo que
se llama anomalía. Ahora bien, la presencia de una anomalía puede querer decir dos cosas: o bien
los científicos no encontraron la manera de insertar lo nuevo en su marco conceptual, o bien, que es
el marco conceptual que no logra dar cuenta de la realidad empírica a la que refiere.
A diferencia de lo que consideraría un falsacionista ingenuo (para quien la presencia de
una anomalía ya falsa la teoría) la comunidad científica tiende a ser conservadora, y para ello,
5
Kuhn, Thomas S., ¿Qué son las revoluciones científicas?, Paidós, 1989.
FILOSOFIA DE LA CIENCIA (Epistemología) Curso 2020
Prof. P. José Luis Morillo sdb
Est. Sem. Gonzalo Bayarres

convive con anomalías proponiendo hipótesis ad hoc6 con la esperanza que el posterior desarrollo
permitirá hallar la solución. En caso que no la encuentre y la anomalía persiste, el consenso en torno
al modelo comienza a romperse pues no logra completar el rompecabezas. El paradigma entra en un
período de crisis y surgen diversas propuestas de solución y modelos alternativos, ante todo, porque
los científicos que, habían adquirido acríticamente el paradigma, se hacen conscientes de él y
buscan salvarlo.
Si tal esfuerzo no logra resultados, el probable que se busque una nueva teoría que se
imponga a las demás constituyendo un nuevo paradigma y también una nueva comunidad científica
a su alrededor. Es el momento pre-paradigmático. Si en algún momento, aparece un libro o un
descubrimiento o experimento concluyente que fortalece una de las teorías en discusión. Se inicia
un período de conversión de los hombres al nuevo modelo, con características similares a la
conversión religiosa. Implica un salto de uno a otro paradigma el cual se transforma en ciencia
extraordinaria hasta que la comunidad científica la acepte como nueva ciencia normal.
Lo que caracteriza una revolución científica es la profunda alteración del conocimiento que
se da en el lenguaje mismo, que se exterioriza cuando un informe observacional sólo es posible de
formular alterando el lenguaje tradicional de una comunidad científica dada. Las revoluciones
tienen un carácter holístico ya que implican una redefinición de la conexión entre términos del
lenguaje y la naturaleza y un reordenamiento de las similitudes y diferencias entre las categorías y
objetos.
En cuanto significa un cambio de mundo que requiere una conversión, queda cancelada
toda comparación posible entre paradigmas. Esto es así porque los paradigmas son
inconmensurables. Los hechos ya no son los mismos y, literalmente, se “inauguran nuevos hechos”.
Frente a las críticas recibidas sobre la inconmensurabilidad entre paradigmas Kuhn
reafirma la imposibilidad de encontrar en un lenguaje una descripción adecuada para traducir una
categoría de otro lenguaje. Si la traducción la taxonomía o clasificación, fracasa en su objetivo. La
traducción entre palabras o conceptos equivalentes es imposible. Cada palabra tiene horizontes de
intencionalidad, es decir, un sinnúmero de significados que sólo pueden ser delimitados en el
contexto que los comprende. Una traducción perfecta entre paradigmas no puede realizarse, aunque
esto no quita que existan científicos bilingües, capaces de pensar en ambas lenguas.

d. Elección, veracidad y progreso de las teorías científicas

En la elección entre teorías no sólo intervienen procesos de tipo lógico-matemático, sino


también la persuasión. La elección se hace en base a valores que son enseñados y aprendidos y no
hay reglas de elección.
Una teoría es mejor que otra si resuelve más enigmas, no quiere decir que sea más
verdadera. Verdad y demostración tienen un valor intrateórico, dentro del paradigma vigente y no
tiene sentido aplicar esas categorías a la comparación entre teorías porque nunca sabemos si todos
los hablantes entienden lo mismo.
Para entender el proceso científico, entonces, hay que entender el fenómeno de la
comunicación parcial. No hay progreso en un sentido finalista sino que se “evoluciona” en
complejidad y profundidad a partir de lo que conocemos. El progreso es ateleológico, en cuanto la
ciencia se desarrolla a partir de ciertos estadios pero no tiene hacia ningún objetivo (verdad,
verosemejanza, u otro)

6
Hipótesis que se acepta sin ninguna confirmación experimental, por la sola finalidad de hacer coherente una teoría y
evitar su refutación mediante la observación y la experimentación Popper las llama estratagemas convencionalistas y,
llevado por su refutacionismo, exige no salvar por su medio a una teoría. La metodología científica, no obstante, que se
inspira en un refutacionismo menos radical, admite el recurso a las hipótesis ad hoc mientras no se las acepte sin
contrastarlas. Este tipo de hipótesis forma parte del conjunto de hipótesis, hipótesis auxiliares y cláusulas ceteris
paribus y otras que globalmente se ponen a prueba en una contrastación.
FILOSOFIA DE LA CIENCIA (Epistemología) Curso 2020
Prof. P. José Luis Morillo sdb
Est. Sem. Gonzalo Bayarres

Se suele entender, por lo menos en la tradición epistemológico de raíz neopositivista, el


progreso científico como un proceso acumulativo de conocimientos, que tendría como meta la
verdad (se crea como alcanzable o como “idea regulativa” aunque inalcanzable).
Kuhn distingue dos formas de desarrollo de la actividad científica: un desarrollo progresivo
dentro de la ciencia normal (paradigma), acumulativo en el sentido de que se va armando
progresivamente el “rompecabezas”; y otro tipo de desarrollo no progresivo, es decir, no
acumulativo entre un paradigma y otro. Este último tipo se da en la forma de rupturas, de
discontinuidades, dada la inconmensurabilidad entre paradigmas.
Casi al final de La Estructura, Kuhn llama la atención sobre lo siguiente: “ya es tiempo de
hacer notar que hasta las páginas finales de este ensayo, no se ha incluido el término ‘verdad’ salvo
en una cita de Francis Bacon”. A renglón seguido propone entender el desarrollo de las ciencias
como un proceso no “hacia” algo sino como un proceso “desde” lo que conocemos. Y el criterio
para elegir entre teorías sería interno a la comunidad científica en función de la experiencia y
soluciones disponibles a esos enigmas.
Con su reconstrucción de la actividad científica, Kuhn cuestiona seriamente la división de
contextos tal como ciencias formales y ciencias fácticas, y abre la posibilidad de interpretar la
ciencia valorando la necesidad de aportes de las ciencias sociales. Su propuesta, para ser sólida, no
sólo necesita de la historia, sino de la sociología, de la psicología y teorías del aprendizaje, de la
antropología y de la lingüística. Las consecuencias que dichos estudios realizados en las últimas
décadas han tenido para la concepción tradicional de la ciencia no han sido lo suficientemente
incorporados a los debates estrictamente epistemológicos.

También podría gustarte