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Deliberación y Participación

Ciclo IV
Tema Nº 03
Lic. César Castillo Reyes
cesarcastillo19@hotmail.com
La Participación y bien común
Actualmente participar dentro de nuestra comunidad se nos dificulta más, debido a la dinámica social que
hoy estamos viviendo y un individualismo en aumento. Sin embargo, de continuar con esta poca
participación ciudadana, podría llevarnos a una sociedad en decadencia, y eso se traduce en una menor
calidad de vida.

Desde que nacemos formamos parte de un grupo social: la familia, y estas familias a su vez se organizan
para generar una comunidad, que con el tiempo crece. Esta sociedad se va organizando de acuerdo a sus
valores de convivencia y a los acuerdos que se vayan generando (reglas y normas), con el fin de buscar un
bienestar general, lo que comúnmente conocemos como bien común. Desde el momento que formamos
parte de una sociedad somos seres políticos porque por naturaleza nos asociamos con otras personas en la
polis o comunidad política (ciudad, estado, país). Algo interesante que pasa al vivir en sociedad es que
buscamos subsistir, pero al ser seres políticos buscamos, principalmente, los rasgos morales del ser
humano. Y es que solo en la comunidad política el hombre alcanza la plenitud, entendida como felicidad; es
decir, el fin del hombre es ser feliz y lo logrará practicando la virtud.

Sin embargo, muchas veces nos olvidamos que formamos parte de un todo y que nosotros tenemos el
poder de decir si o no, ya que nuestro actuar afecta a todos los miembros. Nos dejamos llevar por el
conformismo y por la desconfianza hacia los servidores públicos y hacia las demás personas. ¡Y no hacemos
nada! Olvidamos que nosotros llevamos a cabo un “pacto social ese contrato social que como personas
organizadas establecimos de manera voluntaria para formar una sociedad, una institución llamada Estado.

La participación en la vida pública es un deber irrenunciable porque somos personas, y como personas
somos a la vez individuos (únicos, irrepetibles, libres…) y sociales (que se desarrollan en la relación con
otros), y no podemos renunciar a ninguno de estos dos aspectos. Participar en la vida pública es trabajar
por el bien común. Ese bien que solo se consigue con la colaboración de muchos, como la paz, la
solidaridad, las infraestructuras, la seguridad, la conservación del medio ambiente, la justicia, la educación,
la fiesta, la memoria, los valores, el arte, los derechos humanos… aquello que disfrutamos porque otros
ponen de su parte, y a veces solo valoramos después de perderlo.

Entonces una de las definiciones más aceptadas en la comunidad Internacional es que “La participación es
la capacidad para expresar decisiones que sean reconocidas por el entorno social y que afectan a la vida
propia y/o a la vida de la comunidad en la que uno vive” (Roger Hart, 1993).

Desde una perspectiva colectiva, el concepto participación aparece como aquella intervención que
requiere de un cierto número de personas cuyos comportamientos se determinan recíprocamente. De
acuerdo a esto, participar es sinónimo de intervención colectiva.

Tipos de participación

La Participación Ciudadana
La participación ciudadana se entiende como la intervención de los ciudadanos en la esfera pública en
función de intereses sociales de carácter particular. Es decir se entiende La Participación Ciudadana como
un espacio de diálogo entre el Estado, los titulares de un proyecto y la ciudadanía que permite y facilita a la
ciudadanía intervenir de manera directa en las decisiones públicas.
La Participación Política
La participación política es un elemento esencial de los sistemas democráticos. Se define como toda
actividad de los ciudadanos que está dirigida a intervenir en la designación de los gobernantes y/o a influir
en los mismos con respecto a una política estatal. Las actividades en que se articula la participación política
pueden ser legales o ilegales, de apoyo o de represión.

La Participación Social
La participación social implica la agrupación de los individuos en organizaciones de la sociedad civil para la
defensa y representación de sus respectivos intereses, por ejemplo grupos de inmigrantes, discapacitados,
…que buscan el mejoramiento de las condiciones de vida o defensa de intereses. La participación social es
uno de los componentes más importantes de la construcción de la democracia y, a través de ella, se
contribuye a asegurar el cumplimiento de otros derechos.

La Participación Comunitaria
La participación comunitaria es el conjunto de acciones desarrolladas por diversos sectores comunitarios,
en la búsqueda de soluciones a sus necesidades específicas. Se encuentra unida al desarrollo comunitario
de un sector o un grupo comunitario y tiene como eje el mejoramiento de las condiciones de vida en la
comunidad.
Una de las características de la participación comunitaria es que busca mejorar el bienestar de los
miembros de la comunidad en función de valores que le son propios, para que la mejora pueda ser
sostenible en el tiempo.

Por Bien común se entiende, como aquello que es compartido por y de beneficio para todos los miembros
de una comunidad; en sentido general, no solo físico o económico.

El bien común abarca al conjunto de aquellas condiciones de la vida social, con las cuales los seres
humanos, las familias y los colectivos pueden lograr con mayor plenitud y facilidad su propia perfección.
En esta concepción el bien común no es la suma de los bienes de cada uno de los miembros de la sociedad
ya que ese bien es indivisible y solo con la colaboración de todos puede ser alcanzado, aumentado y
protegido.
Afecta a la vida de todos. Exige la prudencia por parte de cada uno, y más aún por la de aquellos que
ejercen la autoridad. Posiciones fuertemente influidas por este punto de vista han sido incorporadas en las
constituciones y legislaciones de numerosos países.
Parece seguir entonces que sería el deber común general o adecuar la acción de todos y cada uno (por lo
menos, dentro de ciertos límites) a la preservación u obtención de ese bien común: “Si toda comunidad
humana posee un Bien Común. Corresponde al Estado defender y promover el Bien Común de la sociedad
civil, de los ciudadanos y de las instituciones.

Es genuino y auténtico, porque el término BIEN quiere decir que da satisfacción a las necesidades del ser
humano en su entera naturaleza espiritual, moral y corporal, proporcionándole la paz, la cultura, y todo lo
necesario para el desenvolvimiento pleno de la existencia.
Es COMÚN, porque pertenece a todos: es de todos y para todos. El bien común no promueve la ventaja de
un grupo o clase alguna , sino el beneficio de todos , cualquiera que sea el carácter o la función que las
comunidades o personas realicen en la sociedad, no se puede excluir a nadie de los beneficios del bien
común argumentando nacionalidad, sexo, religión, raza, convicción política , religiosa o posición social . Los
no nacidos y las generaciones del futuro no deben ser excluidos de los bienes y recursos que necesitarán. El
bien común ocupa una posición superior a los intereses particulares porque es preeminente.
El bien común es un elemento fundamental de la estructura de toda comunidad; sin ese bien, sin las
garantías a los derechos fundamentales y sin democracia participativa, decae el perfeccionamiento de la
sociedad.
El bien común implica paz, es decir, estabilidad y seguridad de un orden justo. Supone, por tanto, que la
autoridad garantiza por medios honestos, la seguridad de la sociedad y la de sus miembros. El Bien Común
fundamenta el derecho a la legítima defensa individual y colectiva.
En definitiva son cuatro los elementos que constituyen el Bien Común:
1. Las condiciones sociales de paz, justicia y libertad.
2. Un conjunto de bienes materiales, educativos, éticos.
3. Equidad en el reparto de esos bienes.
4. Una adecuada organización social.

Características del bien común


Es objetivo
Es uno de los principios que rigen la vida social que es preciso tener siempre presente. Es también uno de
los conceptos más desgastados y ambiguos, pues se lo confunde con bienestar, o calidad de vida. Pero
estos conceptos centran el fin de la sociedad en el individuo autónomo y nada tienen que ver con el
concepto de Bien Común.

Deriva de la naturaleza humana


El concepto de Bien Común “está íntimamente ligado a la naturaleza humana. Por ello no se puede
mantener su total integridad más que en el supuesto de que, atendiendo a la íntima naturaleza y
efectividad del mismo, se tenga siempre en cuenta el concepto de la persona humana”

Redunda en provecho de todos


El Bien Común está siempre orientado hacia el progreso de las personas: ‘el orden social y su progreso
deben subordinarse al bien de las personas y no al contrario’ Este orden tiene por base la verdad, se edifica
en la justicia, es vivificado por el amor. Deben proceder necesariamente sin quebranto alguno del orden
moral y del derecho establecido, procurando armonizar sus derechos y sus intereses con los derechos y los
intereses de las demás

La sociedad se ordena a la persona,


En consecuencia, el bien de la persona está por encima (es la razón de ser) del Bien Común. Pero el
hombre, como individuo, se ordena al Bien Común: el Bien Común está por encima del bien individual. El
bien de la persona no se alcanza sino en su trascenderse en la búsqueda del Bien Común.
Sencillamente, no pueden oponerse Bien Común y bien de la persona: la persona que se cierra en su
individualidad frustra su propio bien, a la par que frustra la posibilidad de la consecución del bien de los
demás.
Abarca a todo el hombre
Abarca a todo el hombre, es decir, tanto a las exigencias del cuerpo como a las del espíritu. De lo cual se
sigue que los gobernantes deben procurar dicho bien por las vías adecuadas y escalonadamente, de tal
forma que, respetando el recto orden de los valores, ofrezcan al ciudadano la prosperidad material y al
mismo tiempo los bienes del espíritu
Obliga al Estado
La razón de ser de cuantos gobiernan radica por completo en el Bien Común. De donde se deduce
claramente que todo gobernante debe buscarlo, respetando la naturaleza del propio Bien Común y
ajustando al mismo tiempo sus normas jurídicas a la situación real de las circunstancias
Corresponde al Estado defender y promover el Bien Común de la sociedad civil, de los ciudadanos y de las
instituciones intermedias.
Obliga al ciudadano
Todos los individuos y grupos intermedios tienen el deber de prestar su colaboración personal al Bien
Común. De donde se sigue la conclusión fundamental de que todos ellos han de acomodar sus intereses a
las necesidades de los demás, y deben enderezar sus prestaciones en bienes o servicios al fin que los
gobernantes han establecido, según normas de justicia y respetando los procedimientos y límites fijados
por el gobierno
El bien común es un elemento fundamental de la estructura de toda comunidad; sin ese bien, sin las
garantías a los derechos fundamentales y sin democracia participativa, decae el perfeccionamiento de la
sociedad.
Así el bien común es también fin común.
Actividad
Escribe un ensayo sobre cómo sería la participación y la búsqueda del bien común ahora que estamos en
emergencia sanitaria como producto de la pandemia.

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