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Un sistema económico es una forma de organización de la economía que una


sociedad lleva a cabo para gestionar y administrar los recursos de los que
dispone.

En palabras más sencillas, un sistema económico es el conjunto de reglas que


rigen la economía de una zona geográfica. En función de las características del
sistema económico podemos diferenciar dos grandes tipos. Aquellos que otorgan
mayor poder al Estado y aquellos que otorgan más importancia a la libertad de
elección de los individuos.

Sobre esta línea, podemos decir que los dos grandes tipos de sistemas son el
capitalismo y el socialismo. El primero de ellos propone, principalmente, la
libertad de mercado y la defensa de la propiedad privada. El segundo, que
llamamos socialismo, propone todo lo contrario. Es decir, la regulación del
mercado y la defensa de la propiedad colectiva.

Se llama sistema económico a la forma en la que se organiza la actividad


económica de una sociedad, la producción de bienes y servicios y su distribución
entre sus miembros. Cada sistema económico se caracteriza por su ordenamiento
jurídico que especifica el régimen de propiedad y las condiciones de contratación
entre particulares. Es el estado el que elabora e impone ese ordenamiento jurídico
y se reserva para sí ciertos ámbitos y formas de actuación. El sistema económico
sirve por tanto para determinar qué agentes y en qué condiciones podrán adoptar
decisiones económicas.

Objetivo de un sistema económico


La economía, atendiendo a su origen, es una ciencia que estudia la
administración de recursos escasos. Esto es, tenemos unos recursos limitados y
debemos gestionarlos para la consecución de unos objetivos. Objetivos entre los
que podemos encontrar la satisfacción de nuestras necesidades, que van desde las
más básicas hasta las más complejas.

Por tanto, con esto en mente, podemos deducir que un sistema económico es un
conjunto de reglas que definen la forma en que una sociedad gestiona y
administra esos recursos que, como ya hemos dicho, son limitados.

Los principales problemas a los que intenta dar respuesta son:

 Qué bienes y servicios debemos producir y en qué cuantía


 Cómo producimos esos bienes y servicios
 A quién se destina la producción
 Cómo realizar los tres pasos anteriores para que el sistema sea estable y
sostenible
 Cómo, teniendo en cuenta estos cuatro puntos, generamos crecimiento
económico.

Sistemas económicos según exista o no propiedad privada


 Economía capitalista: También denominada economía libre o de mercado. Son
economías en que los individuos y las empresas llevan a cabo la producción y el
intercambio de bienes y servicios mediante transacciones en las que intervienen
precios y mercados.
 Economía socialista o planificada: Defienden el intervencionismo del Estado en
la economía. En su estado más puro, exigen la sustitución de la propiedad
privada por la colectiva en los medios de producción, cambio y distribución; del
mismo modo, pide la distribución igualitaria de la riqueza y la eliminación de las
clases sociales. El socialismo generalmente se asocia a una economía
planificada, aunque existen excepciones.

Qué es el capitalismo
El capitalismo puede definirse como el sistema económico
basado en el libre mercado, la propiedad privada de los
medios de producción y el aumento de capital. Es el mercado
el mecanismo encargado de asignar de forma eficiente los
recursos escasos y el capital es la fuente utilizada para
generar riqueza.
El sistema capitalista está basado en la titularidad privada de
los recursos productivos: pertenecen a personas y no a
organizaciones públicas como el Estado. La economía tiene
como objetivo el estudio de la mejor manera de satisfacer
las necesidades humanas con unos recursos limitados de
los que se disponen y, en este sentido, el capitalismo
considera al mercado como el mecanismo más óptimo para
llevarlo a cabo.
De esta forma, el capitalismo ve necesaria la promoción de
la propiedad privada y la competencia. Los factores
imprescindibles de la producción son el capital y el trabajo: el
sistema capitalista propone que el trabajo se proporcione y se
vea recompensado con salarios monetarios, siendo aceptado
por los empleados libremente.
Origen del capitalismo
Economía libre o economía de libre mercado son otros
términos utilizados para denominar el capitalismo desde sus
orígenes. Pese a que el comercio y los mercaderes existen
desde el surgimiento de las primeras civilizaciones, el sistema
capitalista apareció en Europa a partir del siglo XIII.
El capitalismo sustituyó al feudalismo como sistema
económico en la mayor parte del mundo. Antes del sistema
capitalista, el trabajo estaba considerado como una obligación
derivada de los vínculos de servidumbre feudal, como
obligación socio-moral del propio sujeto hacia su comunidad o
de la esclavitud.
Por ello, el capitalismo surgió como proposición del trabajo a
cambio de sueldos (capital), eliminando las ideas feudales de
esclavitud o servidumbre.
¿Qué es el capitalismo?
El capitalismo es el sistema socioeconómico imperante en Occidente después
de la caída del feudalismo medieval, y dominante en el mundo entero en la
actualidad del siglo XXI. Es un sistema propio de las sociedades industriales
burguesas.

Sus dos rasgos principales y definitorios son: la propiedad privada de


los medios de producción y el libre ejercicio económico. Su nombre proviene
de la idea del capital, esto es, del rol central del dinero en las relaciones de
producción y de consumo.

El capitalismo propone que el dinero marque la medida del intercambio de bienes


y servicios, y que sea obtenido de diferentes formas:

 Como remuneración del trabajo, en el caso de los trabajadores.


 Proveniente de las rentas, en el caso de los propietarios.
 Como resultado del riesgo y la inversión, en el caso de
los empresarios o emprendedores.
Para que todo ello sea posible, es necesario que exista la propiedad privada, y
que el ejercicio productivo y comercial sea libre, o sea, que cada quien invierta en
lo que quiera y coseche los frutos o las pérdidas que el mercado le depare.

En las sociedades capitalistas, por lo tanto, las relaciones de producción y trabajo,


y de consumo de bienes y servicios, están determinadas respectivamente por un
sistema salarial y un sistema de precios. De esa manera, los individuos consumen
lo que la cantidad de dinero que producen les permite.

La sociedad entera funciona, entonces, buscando obtener un beneficio, esto es,


un ingreso económico mayor a los egresos, que permita un excedente de capital
(con el cual consumir, invertir o ahorrar).

En el capitalismo es central la “autorregulación” del mercado que marca la


relación entre la oferta y la demanda: los productos más demandados (y por ende
más escasos) encarecen, mientras que los menos demandados (y por ende más
abundantes) se abaratan. Esta idea es objeto de numerosos debates. A menudo
es conocida como la “mano invisible” del mercado.

Fuente: https://concepto.de/capitalismo/#ixzz8HLWWDjVt

Características del capitalismo


El capitalismo puede caracterizarse de la siguiente manera:

 Propone el capital como medida de relación económica, y su obtención


mediante la libertad económica y la explotación de la propiedad privada. Para
ello es fundamental que esta última sea permitida y protegida por el Estado.
 El capitalismo es el sistema económico propio de las sociedades industriales y
burguesas, y su aparición marcó el final del feudalismo.
La burguesía (los comerciantes y más tarde los industriales) desplazó a la
aristocracia (los terratenientes de ascendencia noble) como la clase
social dominante.
 Se sostiene en base a la idea de oferta y demanda: los bienes y servicios son
demandados por su público consumidor, y ofertados por sus productores.
Dependiendo de cómo se dé esa relación, los productos serán más o menos
costosos y más o menos abundantes.
 En tanto sistema, el capitalismo promueve la competencia y recompensa el
riesgo, el emprendedurismo y la innovación, lo cual se tradujo en el siglo XX en
un desarrollo tecnológico desenfrenado. Al mismo tiempo, permite y
recompensa la especulación y la usura, permitiendo la generación
de ganancia a partir de la deuda, el interés y otras actividades improductivas.
Características del capitalismo
Entre las características que definen al sistema capitalista se cuentan las
siguientes:

 Capital y trabajo. En el capitalismo, el trabajo es entendido como producción y


fuente de riqueza, al igual que el capital. El capital se convierte, por tanto, en un
medio para la producción en sí mismo (inversión), y no solo en un fin.
 Propiedad privada de los medios de producción. Los medios de producción
están mayoritariamente en manos del sector privado que, al velar por sus
intereses, promueve el desarrollo empresarial.
 Apropiación privada de la ganancia. Las ganancias obtenidas por la actividad
productiva y comercial pertenecen al sector privado, lo que no le exonera de sus
obligaciones tributarias.
 Competencia. La competencia es necesaria en el sistema capitalista y funciona
como un estímulo de la producción y el crecimiento económico. Funciona a través
de la oferta y demanda de bienes y servicios.
 Movilidad social. El capitalismo promueve la movilidad social gracias a la libertad
laboral inherente al sistema.
 Participación limitada del Estado. El Estado siempre debe intervenir como
garante de los derechos ciudadanos. Sin embargo, su grado de participación
puede ser mayor, como ocurre actualmente en la mayoría de los países.

Origen e historia del capitalismo


El capitalismo no siempre ha operado de la misma forma en que hoy lo hace.
Aunque sus inicios formales datan del siglo XVI y XVII, hubo importantes
antecedentes en diversos momentos y lugares de la historia.

Su antecedente más directo se ubica hacia el final del Medioevo, a medida que
surgía de la sociedad feudal una nueva clase social dominante: la burguesía, cuya
actividad comercial permitía la acumulación de dinero u otros activos (mercancía,
y después maquinaria), lo cual es un rasgo fundamental para el surgimiento de la
lógica capitalista.

El origen del capitalismo estuvo fuertemente determinado por la expansión de


la industria textil inglesa a partir del siglo XVII, gracias a la masificación del trabajo.
En el siglo XVIII, con las primeras máquinas artesanales, comenzó el modo
industrial de producción.

El surgimiento de los primeros Estados-nación y la Revolución Industrial fueron


elementos clave en la instauración en Europa del nuevo sistema.

El espíritu del capitalismo clásico de la época fue comprendido por el economista y


filósofo escocés Adam Smith (1723-1790). Fue plasmado en su La riqueza de las
naciones (1776), de donde surgió el fundamento central del libre mercado, que
aconsejaba la menor intromisión del Estado posible.

Sus ideas fueron luego parte de la filosofía del Liberalismo del siglo XIX, época
que presenció el desarrollo del sistema de fábricas, y el gigantesco éxodo de las
regiones rurales a las urbanas que éste ocasionó, dando origen así a la clase
obrera o proletariado.

En adelante, el capitalismo sufrió enormes cambios en su modo de


funcionamiento, impulsado por las catástrofes económicas del siglo XX y sus
dos guerras mundiales. Además, la constante innovación tecnológica que marcó la
segunda mitad de ese siglo, hasta que el capitalismo se volvió global de inicios
del siglo XXI.

El origen del capitalismo

El siglo XVI se considera la fecha de inicio de la Edad Moderna. Es


posible que esto lleve a más de uno a la siguiente pregunta: ¿Se
considera moderno lo que ocurrió hace 500 años? Deberíamos decir
que sí, ya que aquel momento supuso un cambio en la mentalidad
de la gente, que comenzó a mostrar una actitud muy similar a la
actual y, por tanto, también en el sistema económico, creando una
nueva era y una organización que ha perdurado por encima de los
cambios ocurridos a lo largo de los siglos. Asimismo, sería lícito
pensar que primero se transformó el sistema económico y que eso
supuso un cambio de mentalidad.

Por tanto, en el siglo XVI se produjo el Big Bang de la economía


actual, momento en que se creó un nuevo esquema económico que
ha perdurado hasta la actualidad. Se trata de una época de gran
interés, puesto que, de la misma manera que los físicos buscan una
mejor comprensión mediante el estudio de lo ocurrido en las
primeras fracciones de segundo de la historia del universo, el
análisis económico de los sucesos de ese siglo nos puede ayudar a
conocer más a fondo las características internas del sistema
capitalista.

Los conceptos de "capitalismo" o "empresa multinacional", a pesar


de definirse y alcanzar notoriedad en el siglo XIX, surgieron, en
realidad, cinco o seis siglos atrás. Sabemos que, en el siglo XIII, en
varias ciudades del norte de Italia, se utilizaban con un significado
similar al actual y que en base a ello se desarrolló el principal
sistema económico de Europa, teniendo en cuenta que Europa era
entonces el eje de la economía mundial.

Florencia, Michel Wolgemut, Wilhelm Pleydenwurff,1493.

A juicio de Sombart, Florencia poseía, entre los siglos XIII y XV,


numerosos rasgos de una ciudad capitalista, sobre todo en lo que
se refiere al ensalzamiento de conceptos como el tiempo o el dinero.
De esta forma, era común que el propietario de un terreno alquilara
dicho terreno a un tercero para que éste cultivara la huerta y
vendiera las verduras en el mercado. Lo que hoy en día nos resulta
tan habitual, en aquel entonces sólo ocurría en algunas ciudades del
norte de Italia; en los demás territorios de Europa los campesinos
cultivaban la tierra para su autoconsumo, entregando una parte a su
señor.

El sistema capitalista comenzó a extenderse en el ámbito del


comercio, seguido de la creación de la banca, adentrándose
posteriormente en la producción de productos y la adquisición de
materias primas, siendo la agricultura el último paso de esta
expansión. Asimismo, cabe mencionar que inicialmente fue un
fenómeno de naturaleza urbana, es decir, que se dio en las
ciudades, y que posteriormente se extendió fuera de ellas de
manera progresiva. Esto se debe, en parte, a ciertas actividades
que se ejercían mejor fuera de las ciudades, tales como las
ferrerías, puesto que las ciudades carecían de agua y minerales
suficientes para la obtención del hierro.

Florencia poseía, entre los siglos XIII y XV, numerosos rasgos de


una ciudad capitalista, sobre todo en lo que se refiere al
ensalzamiento de conceptos como el tiempo o el dinero
Entre las principales características de este sistema económico
resaltaba su desvinculación de toda moral o religión,
concediéndoles el protagonismo a los empresarios y los
trabajadores. El Estado emitía leyes que protegían los intereses
individuales de las empresas, por encima de los intereses colectivos
de los ayuntamientos o gremios. Esto no quiere decir que el Estado
organizara la economía, sino que simplemente garantizaba unas
condiciones jurídicas mínimas a las operaciones mercantiles.

En este nuevo sistema, la unidad productiva básica era la empresa


y su principal objetivo la obtención de beneficio, a diferencia del
sistema feudal donde la unidad productiva básica era la familia,
cuyo propósito no era el beneficio sino el autoconsumo. Quizá esta
sea la razón por la que en los comienzos del sistema capitalista la
mayoría de las empresas estuvieran formadas por familias.

Como podemos ver, el capitalismo supuso un cambio de mentalidad


notable, de manera que los conceptos que prevalecerán en la mente
de muchas personas a partir de este momento serán: hacer dinero,
suerte, racionalidad, prudencia, seguridad, aprovechar el tiempo, el
concepto de que el tiempo es oro o, como decía Jacob Fugger a
quienes aconsejaba que abandonaran los negocios, "Intentar ganar
dinero mientras se pueda".

En cuanto al ámbito social, desde mediados del siglo XV hasta


finales del siglo XVI la población europea aumentó
considerablemente, y si a esto le añadimos las malas cosechas que
se dieron en aquella época, el efecto fue una considerable
acentuación de la pobreza, así como el azote de la hambruna en el
pueblo llano.

Ferrería de Mirandaola.

¿Qué ocurrió en el País Vasco de la época?


Entre los principales empresarios de la época se encontraran
personas relacionadas con la siderurgia y la construcción naval

Como en la mayor parte de la Europa occidental, la nueva


estructura capitalista se extendió en el País Vasco a principios del
siglo XVI, con predominio del comercio en el litoral y de las
actividades productivas en el interior. No obstante, en esta época
prevalecen entre nosotros dos actividades económicas: la
construcción naval y la siderurgia.
No hay que olvidar que la construcción naval, a pesar de ser una de
las principales actividades del siglo XVI, ya se venía desarrollando
en el País Vasco desde los siglos XI y XII, gozando de un merecido
prestigio internacional. En el caso de la siderurgia, los modestos
artesanos guipuzcoanos eran a su vez empresarios, y se ubicaban
en pequeños pueblos, invirtiendo allí su dinero, mientras que en
Bizkaia dependían de los créditos de grandes comerciantes
bilbaínos.

No es, por tanto, producto del azar que entre los principales
empresarios de la época se encontraran personas relacionadas con
la siderurgia y la construcción naval, tales como los oñatiarras
Tobalina y Larrinaga, al igual que Campiacelay y Lazarraga. Cabe
mencionar al oñatiarra Idigoras que, entre otras actividades, ejerció
de fabricante de fuelles, así como a Andrés de Alzola, que se dedicó
a la industria forestal para la fabricación de carbón a partir de la
madera, mineral que posteriormente se utilizaba en la siderurgia y la
construcción naval. También podemos incluir en esta lista a los tíos
de Martín López de Isasi: Antonio, Martin, Francisco y Cristóbal.

BIBLIOGRAFÍA

- ALBERDI LONBIDE, X., ARAGÓN RUANO, A. (1998). «La


construcción naval en el País Vasco durante la Edad Media», in
Itsas Memoria. Revista de Estudios Marítimos del País Vasco 2: 18.
San Sebastián: Untzi Museoa-Museo Naval.
- AZPIAZU ELORZA, J. A. (1999). Un mercader en el reino de
Felipe II: El eibarrés Martín López de Isasi. Eibar: Ayuntamiento de
Eibar.
- AZPIAZU ELORZA, J. A (1990). Sociedad y Vida Social Vasca
en el Siglo XVI: Mercaderes Guipuzcoanos, Tomo II. San Sebastián:
Edición Fondo Cultural Kutxa.
- BRAUDEL, F. (1976). El Mediterráneo y el mundo mediterráneo
en la época de Felipe II, Tomo II. Madrid: Ediciones Fondo Cultura
Económica.
- BRAUDEL, F. (1984). «Las estructuras de lo cotidiano: Lo
posible y lo imposible», in Civilización material, economía y
capitalismo, siglos XV-XVIII, Tomo I. Madrid: Alianza Editorial, S.A.

Ventajas del capitalismo


El capitalismo ofrece una gran capacidad de producción y de innovación.

En general, las ventajas del capitalismo tienen que ver con su gran capacidad de
producción y de innovación, especialmente en el marco de
una sociedad altamente industrializada, lo cual para muchos es en sí mismo una
señal de progreso. En todo caso, podemos resumir las ventajas del capitalismo en
los siguientes puntos:

 La libertad comercial y de emprendimiento. El capitalismo es un sistema que fomenta


y recompensa la innovación, el riesgo y el emprendimiento, de modo que permite una
inmensa movilidad económica, lo cual trae consigo diversas formas de producción de
bienes y servicios.
 La capacidad para la acumulación. Al sostenerse en la propiedad privada, el
capitalismo permite la acumulación de bienes o de capitales, de manera tal que luego
se puedan invertir grandes sumas de dinero en iniciativas consideradas meritorias: en
la investigación científica, por ejemplo, o simplemente en hacer más dinero todavía.
 El efecto democratizador del capital. Comparado con sistemas previos, como
el feudal, en que el estatus de nacimiento determinaba el acceso a la riqueza (la
sangre noble o la sangre plebeya), el capitalismo propone un sistema que sólo
entiende de dinero: quienes lo tienen y quienes no, sin distinguir entre nobles y
plebeyos (categorías inamovibles, de por vida), sino entre pobres y ricos (categorías
que, en principio, pueden cambiar). Esto permite una mayor redistribución de la
riqueza que en los sistemas feudales.
 Mayores facilidades de consumo. El capitalismo suele ir acompañado de sociedades
de alto consumo de bienes y servicios, ya que su dinámica de autorregulación del
mercado (oferta y demanda) fomenta la competencia entre los productores y
comercializadores por conquistar el público consumidor. Esto significa que los
consumidores tienen, idealmente, una variedad de productos y servicios de los cuales
elegir, y esto permite una gran libertad de consumo.

Desventajas del capitalismo


En el capitalismo existe una gran diferencia en el acceso a oportunidades de progreso.
La otra cara de la moneda del capitalismo suele centrarse en sus efectos más o
menos incontrolables sobre el medio ambiente, y su desigualdad de oportunidades
sociales en un sistema centrado en el capital. Podemos resumir las desventajas
del sistema en las siguientes:

 Estragos ecológicos. El capitalismo es indisociable de la producción industrial, y esta


última, al menos como se ha venido ejecutando en los últimos dos siglos, ha tenido
un impacto brutal sobre el medio ambiente, cuyo ejemplo más tangible es el cambio
climático. La explotación indiscriminada de los recursos naturales es insostenible a
largo plazo.
 Fomento del individualismo. La idea de que cada quien debe generar el dinero para
pagar todo lo que quiera es una idea atractiva cuando se está en la cima, pero
aterradora para quienes están en el fondo de la sociedad. La cultura del individualismo
no suele preocuparse por el bienestar colectivo, y eso a menudo entra en conflicto con
dinámicas de control social que necesitan la colaboración y la solidaridad de
los ciudadanos.
 La desigualdad económica. Si bien el capitalismo permite la movilidad de clases
sociales, es decir, las clases no están determinadas de manera inamovible como en
tiempos feudales, las personas que nacen pobres tienen muchas menos
oportunidades que quienes nacen en la clase media o alta, y esto propicia que las
clases sociales se estanquen. Las personas con más capacidad de compra acceden a
más y mejores bienes y servicios, reciben mejores oportunidades y pueden por ende
aspirar a mejores trabajos y remuneraciones, creando una brecha entre pobres y ricos
que a menudo puede ser imposible de saltar.
 El consumismo. La sociedad de consumo construida por el capitalismo industrial
requiere de una masa consumidora que esté constantemente comprando nuevos
servicios y productos, para mantener la rueda productiva andando. Esto creó una
cultura del consumismo o consumo irresponsable, en la que se consume mucho más
de lo que se necesita, especialmente bienes de baja calidad y poca duración, lo cual
no sólo empobrece a la población y la distrae de objetivos más satisfactorios a largo
plazo, sino que produce toneladas de desechos mensuales.

El papel del Estado en el capitalismo


La principal tarea del gobierno según el capitalismo es controlar los fallos de
mercado. Además, debe evitar que el sistema derive en situaciones de abuso y
debe fomentar la competencia. Bajo este concepto existen diferentes tipos de
sistema derivados, como el capitalismo monopolístico, el capitalismo financiero o
el neocapitalismo.

En ese sentido, la escasa presencia e influencia del poder político en el mercado


destaca especialmente, pues permite a propietarios o empresarios operar con un
alto grado de libertad e independencia para la consecución de beneficios. Con
estos, los empleadores logran la reinversión en las empresas y el pago a los
trabajadores. Al mismo tiempo, supone la reducción de poder que el estado tiene
en el día a día financiero y empresarial. Dando, de este modo, mayor peso a los
agentes privados y ocupándose de la supervisión de los mercados.

Los defensores de la privatización de los medios de producción a menudo


argumentan que la empresa privada es por lo general mejor gestora del control y
dirección que el estado. Al cual, la burocracia o sus muchas responsabilidades
impiden desarrollar esta tarea de manera eficiente. Además de que cuando una
empresa es pública son los ciudadanos los que cargan con las posibles pérdidas
resultado de una mejorable gestión. En cambio, cuando es privada, es la propia
empresa la que asume todo el riesgo.

Los liberales defienden que en un mercado en el que hay competencia, las


empresas son capaces de mejorar los productos y servicios, cambiando
la estructura de costes para poder ofrecer más calidad a precios más reducidos.
Reducir el papel del estado y su injerencia en los mercados es una de las bases del
capitalismo y de la economía occidental más reciente.

Capitalismo de estado
El capitalismo de Estado es una denominación utilizada para referirse a los sistemas
económicos en los que el Estado realiza actividades económicas mediante empresas
estatales (incluidos los procesos de acumulación de capital, gestión centralizada y trabajo
asalariado), o cuando existen agencias gubernamentales corporativas (organizadas según las
prácticas de gestión empresarial) o de empresas públicas, como las empresas que cotizan en
bolsa en las que el Estado tiene acciones de control.1 El alcance del concepto varía según los
autores y corrientes políticas, sociológicas y económicas.
El capitalismo de Estado es utilizado por varios autores en referencia a una economía
capitalista privada controlada por un Estado, es decir, una economía privada que está sujeta a
la planificación económica y al intervencionismo. También se ha utilizado para describir las
economías controladas de las grandes potencias durante la Primera Guerra Mundial.3
Alternativamente, el capitalismo de Estado puede referirse a un sistema económico donde
los medios de producción son de propiedad privada, pero el Estado tiene un control
considerable sobre la asignación de crédito e inversión.4 Este fue el caso de los países
de Europa occidental durante el consenso de posguerra y de Francia durante el período del
dirigismo posterior a la Segunda Guerra Mundial.5 Otros ejemplos incluyen Hungría bajo Viktor
Orbán, Rusia bajo Vladímir Putin, Singapur bajo Lee Kuan Yew6789 y Turquía bajo Recep
Tayyip Erdoğan, así como dictaduras militares durante la Guerra Fría y regímenes fascistas
como la Alemania nazi.10111213
El capitalismo de Estado también se ha utilizado (a veces de manera intercambiable con el
capitalismo monopolista estatal) para describir un sistema en el que el Estado interviene en la
economía para proteger y promover los intereses de las empresas a gran escala. Noam
Chomsky, un socialista libertario, aplica el término 'capitalismo de Estado' a la economía de
los Estados Unidos, donde las grandes empresas que se consideran "demasiado grandes
para caer" reciben rescates gubernamentales financiados con fondos públicos que mitigan la
asunción de riesgo de las empresas y socavan el mercado leyes, y donde la producción
privada es financiada en gran parte por el Estado a expensas del público, pero los propietarios
privados obtienen las ganancias.141516 Esta práctica se contrasta con los ideales tanto
del socialismo como del capitalismo del laissez-faire.17

Hablamos de capitalismo de Estado para referirnos al fenómeno que se produce


cuando, en un sistema económico con funcionamiento capitalista, el Estado opera
como un agente económico a través de empresas que le pertenecen o que gestiona
de manera directa o indirecta; esta intervención del Estado puede ser en
determinados sectores de la economía o abarcar toda la realidad económica.
Puede funcionar, o no, a través de monopolios estatales. En todo caso supone una
intervención de un agente económico que no está en igualdad de condiciones con los
demás (si los hay) por lo que afectará de manera muy negativa a la libre competencia.
Este fenómeno se ha producido de manera frecuente a lo largo de la Historia; ya en la
Edad Moderna con el mercantilismo el Estado tenía un papel importantísimo en la
realidad económica. Sin embargo en este artículo vamos a centrarnos en la época
más actual en la que existe un verdadero sistema capitalista.
Algo que podría confundirse, porque tiene puntos en común, con este capitalismo de
estado es el Keynesianismo, que propugna la intervención del Estado para impulsar la
economía a través del gasto público y la generación de déficit público.

¿Qué funciones debería desempeñar el Estado, en el contexto de las


sociedades capitalistas? A grandes rasgos, cabe señalar que las ideas
de los economistas relativos a esa cuestión han girado en torno a dos
grandes perspectivas generales contrapuestas.

Por una parte, las doctrinas del liberalismo han contemplado al Estado
como un elemento ajeno a la economía de libre mercado, fundamentada
en el respeto a la libertad individual de consumidores y empresarios, y en
la propiedad privada de los recursos. A partir de ciertos supuestos, se
considera que el mercado autorregulado puede proporcionar las
soluciones globales más satisfactorias a los diversos problemas de
naturaleza económica, tanto en el campo de la asignación, como en el de
la distribución de unos recursos escasos. Sobre esa base se recomienda
la inacción, al suponerse que toda interferencia que desvíe a la economía
de mercado de “los carriles que le marcan la competencia y el
mecanismo de precios”[1] resultaría ineficaz; y, aunque fuera eficaz,
impondría en todo caso una seria restricción a la libertad. Su fundamento
moral, como dice M. Bunge, es “la libertad del individuo, que incluye su
derecho a disponer libremente de su fortuna”.[2] Bajo esa perspectiva,
quedan proscritas todas las interferencias que perturben el adecuado
funcionamiento del mercado y las regulaciones externas salvo, claro
está, las relativas al establecimiento y salvaguarda de los derechos de
propiedad, y aquellas que garanticen la dinámica competitiva y la
operatividad del mercado.

Por otra, las doctrinas partidarias del intervencionismo fundamentan


teóricamente el mayor protagonismo del Estado en la supervisión de los
asuntos económicos “privados” en la incapacidad del mercado para
garantizar una senda de crecimiento económico estable con pleno
empleo, paralela a una eficiente asignación de los recursos, y a una
distribución socialmente aceptable de la renta y de la propiedad. Por todo
ello, se acepta que la política pública es necesaria “para guiar, corregir y
complementar al mercado en algunos aspectos”,[3] según establecen
R.A. Musgrave y P.B. Musgrave, al objeto de alcanzar la estabilidad
social y el bienestar individual. Con su ejecución se pretende alterar, bajo
ciertas condiciones, los comportamientos de los individuos, introduciendo
los incentivos adecuados; o bien, intervenir directamente sobre el
sistema de mercado, con la finalidad de mejorar la eficiencia asignativa,
propiciar la estabilidad macroeconómica, y/o conseguir una mayor justicia
social en el reparto de la renta y la riqueza. Debe destacarse que esas
políticas intervencionistas se integran dentro del marco estructural de las
economías de mercado, a diferencia de las políticas de planeación
central, aplicadas en otros sistemas económicos, y que se fundan en una
dirección centralizada y en el cumplimiento de sus directrices, fijadas en
un plan económico.

El propósito de este trabajo es exponer los diversos planteamientos que


han sido desarrollados en el pensamiento económico, desde la época de
A. Smith hasta nuestros días, en relación con las tareas y el papel a
desempeñar por el Estado dentro del ámbito reseñado.

Fuente: https://concepto.de/ventajas-y-desventajas-del-capitalismo/#ixzz8HRLS9VrK

Fuente: https://concepto.de/capitalismo/#ixzz8HLpFFpAI

Fuente: https://concepto.de/capitalismo/#ixzz8HLWZpZYW

Perspectivas
Las perspectivas del desarrollo de un estado o las políticas del gobierno deben direccionar
para incrementar la accesibilidad en tanto el desarrollo sostenible debe concebirse como un
proceso armónico, en donde la explotación de los recursos naturales, la gerencia de las
inversiones, la orientación de los cambios tecnológicos y las transformaciones institucionales
deben tener correspondencia con las necesidades de las futuras generaciones
Pilares del capitalismo
El capitalismo se basa en los siguientes pilares:
• Propiedad privada, que permite a las personas poseer bienes tangibles, como tierras y viviendas,
y activos intangibles, como acciones y bonos.
• Interés propio, por el cual las personas persiguen su propio bien, sin considerar las presiones
sociopolíticas. No obstante, el comportamiento descoordinado de esos individuos termina
beneficiando a la sociedad como si, según aseveró Smith en 1776 en La riqueza de las naciones,
estuviera conducido por una mano invisible.
• Competencia, la cual, gracias a la libertad de las empresas para entrar y salir de los mercados,
maximiza el bienestar social, es decir: el bienestar conjunto de productores y consumidores.
• Un mecanismo de mercado que determina los precios de forma descentralizada mediante
interacciones entre compradores y vendedores; los precios, a su vez, asignan recursos, que
naturalmente buscan la mayor recompensa, no solo por los bienes y servicios sino también por los
salarios.
• Libertad de elección con respecto al consumo, a la producción y a la inversión: los clientes
insatisfechos pueden comprar productos diferentes; los inversores, emprender proyectos más
lucrativos, y los trabajadores, dejar su empleo por una mejor remuneración.
• Intervención limitada del Estado, para proteger los derechos de los ciudadanos privados y
mantener un entorno ordenado que facilite el correcto funcionamiento de los mercados.
Las diversas formas de capitalismo se distinguen por el grado en que funcionan esos pilares. En las
economías de libre mercado, o de laissez-faire, los mercados operan con escasa o nula regulación.
En las economías mixtas, donde se combinan los mercados y el Estado, los primeros tienen un
papel dominante, pero están regulados en mayor medida por el segundo, para corregir sus fallas,
como la polución y la congestión de tránsito; promover el bienestar social, y por otras razones,
como la defensa y la seguridad pública. Actualmente predominan las economías capitalistas
mixtas.
Ejemplos de países capitalistas
Algunos ejemplos de países que aplican el sistema capitalista de la manera más
pura son:

 Alemania
 Australia
 Canadá
 Emiratos Árabes Unidos
 Estados Unidos
 Francia
 Japón
 Hong Kong
 Irlanda
 Nueva Zelanda
 Reino Unido
 Singapur

"Capitalismo". Autor: Equipo editorial, Etecé. De: Argentina. Para: Enciclopedia


Humanidades. Disponible en: https://humanidades.com/capitalismo/. Última edición: 23
enero, 2023. Consultado: 30 octubre, 2023.

Fuente: https://humanidades.com/capitalismo/#ixzz8HctrzdoO

Fuente: https://humanidades.com/capitalismo/#ixzz8HctnwS9p
Así, en Estados Unidos y en el resto de países que siguen este modelo, la libertad
económica y de mercado es la base del resto de las estructuras políticas y
jurídicas, pues todo está enfocado a ese modelo económico que, en resumidas
cuentas, tiene al dinero en el centro.

Además de Estados Unidos, otros países capitalistas son Japón, Alemania, Italia,
Suecia u Holanda.

La primera potencia económica del mundo, Estados Unidos, es una economía capitalista,
en la que las empresas dedicadas a la inversión y gestión de los grandes patrimonios son
las que dominan el panorama económico. Sus decisiones, actuaciones y, también, sus
problemas, tienen grandes repercusiones, como se vio con la quiebra de Lehman
Brothers, que supuso el principio de la crisis financiera mundial.

La situación actual del capitalismo


Allí donde el sistema de libre mercado ha sobrevivido, la situación ha cambiado
y el capitalismo sigue existiendo. Pero, los medios de producción siguen
estando en manos de los individuos.

Mientras que todas las personas, organizaciones y clientes siguen dependiendo


del Estado para satisfacer las necesidades básicas de la población y garantizar
que servicios como la sanidad, la educación y la provisión de necesidades
sociales básicas estén al alcance de todos.

Sin embargo, todos los individuos, organizaciones y clientes están más o


menos agobiados por un Estado práctico que está sujeto a restricciones
financieras básicas. Y así poder garantizar que el Estado satisface las
necesidades básicas de la población y pone a disposición de todos servicios
como la asistencia sanitaria, la educación y las necesidades sociales básicas.

En otras palabras, lo que tenemos ahora no es una economía puramente de


libre mercado, sino una economía mixta. Entre los sistemas capitalista y
socialista, con un mercado libre pero un Estado.
En las zonas donde continuaba un régimen de libre mercado la situación ha ido
evolucionando, sigue existiendo el capitalismo pero se ha atemperado, en mayor o
menor grado según veremos, a través del Estado del bienestar en el que los medios
de producción están en manos privadas pero todos, empresas y consumidores, están
sometidos a una importante presión fiscal con la que el Estado atiende necesidades
básicas de sus ciudadanos, garantizando para todos el acceso a servicios como la
sanidad, la educación y la cobertura de las necesidades sociales básicas.
Esto hace que, hoy en día, no existan economías puras de libre mercado sino que se
ha llegado a un encuentro entre el sistema capitalista y el socialista
creando economías mixtas que son de libre mercado pero matizadas con la
intervención del Estado.

El sistema capitalista se aplica en diversos grados:

 En Estados Unidos, el libre mercado está tan arraigado que


prácticamente todo -no sólo los medios de producción, sino también las
actividades sociales, culturales y de investigación- se deja a las ideas
privadas. Y no hay garantías comunes, por ejemplo, en el ámbito de la
sanidad.
 En los países del Estado de confort de Europa existe un sistema de
producción capitalista. Pero el Estado conserva la producción de
ciertos bienes y, sobre todo, garantiza a la población un nivel de vida
mínimo en ámbitos como la sanidad y la educación.
 En China, han pasado de una economía dirigida marxista a un
capitalismo casi bárbaro.
 Sin embargo, los países subdesarrollados y en vías de desarrollo con
sistemas diferentes no pueden imaginar cómo serían si alcanzaran ese
desarrollo económico.
Titulo: 9 Ejemplos de Capitalismo: Características y tipos
Autor: Antonio
URL: https://wikiejemplos.com/capitalismo/
Fecha de creación: 03/11/2021
Fecha última actualización: 27/10/2021

¿Qué es el socialismo?
Se denomina sistema socialista a un tipo de organización económica en donde
los recursos económicos son propiedad de toda la población y en los que no tiene
lugar la propiedad privada. el socialismo se caracteriza por limitar al extremo la
propiedad privada e intentar planificar la economía desde un punto de vista centralizado.
El socialismo es una corriente filosófica de pensamiento económico, social y
político, así como un conjunto diverso de teorías políticas, movimientos y
sistemas socioeconómicos que en dicho pensamiento se han inspirado.

Todas ella tienen en común la defensa de la propiedad pública, colectiva o


cooperativa de los medios de producción de la sociedad, en lugar de su
propiedad en manos privadas. Además, propone la planificación y organización de
la vida social y económica desde las fuerzas que componen al Estado.

Es decir, se trata de un conjunto de modelos filosóficos, políticos, sociales y


económicos cuyo objetivo es construir una alternativa al capitalismo y a la
acumulación de capitales y de propiedad privada que lo caracteriza. Esto con el
deseo de construir una sociedad sin clases, percibida como una sociedad más
justa y con una distribución más justa de las riquezas.

No hay, sin embargo, una forma única de socialismo. Ni siquiera hay un consenso
respecto de qué es exactamente o cómo se debería implementar en lo político,
social o económico.

Así, existen formas más radicales (que suelen llamarse comunistas) que proponen
la abolición de la propiedad privada, y otras en cambio que proponen la
convivencia con la economía de mercado, aunque bajo formas de control y espíritu
social. Lo mismo ocurre en lo político con el respeto a la democracia y a la
diversidad de los partidos: hay quienes proponen la dictadura del proletariado, y
otros que defienden la socialdemocracia.

Características del socialismo


Si bien los rasgos del socialismo pueden variar enormemente de acuerdo a su
puesta en práctica, generalmente se consideran como sus características las
siguientes:

 Debilitamiento de la propiedad privada en favor de modelos sociales o


comunitarios de propiedad, especialmente en lo referido a los medios de
producción (fábricas, por ejemplo).
 Modelo económico que apunta a la producción, más que en la generación y
acumulación de capitales y está dirigido por el Estado.
 Aplicación de diversos métodos de redistribución de la riqueza,
como impuestos a los que más tienen y planes de ayuda para quienes menos
tienen, para tratar de uniformar económica y socialmente a la sociedad.
 Empoderamiento del Estado que, dependiendo del caso, puede o no ir en
detrimento de la democracia y de los partidos políticos.
 Fuerte intervención del Estado en los asuntos económicos y sociales.
 En las variantes más utópicas, plantea la sociedad sin clases sociales: ni
pobres ni ricos, sino una gran masa trabajadora autogestionada.
Ventajas del capitalismo
Entre las ventajas del capitalismo destacan:

 El libre comercio, que permite al acceso a una amplia variedad de bienes y servicios.
Asimismo, se procura que la oferta y la demanda determinen los precios del mercado,
llegando a un punto en el que los demandantes deberían poder ser capaces de satisfacer
sus necesidades.
 Se promueve la igualdad de oportunidades. Para el capitalismo, aunque la diferencias
socioeconómicas siempre existirán, una persona de bajos ingresos no está impedida de
escalar en la sociedad.
 El capitalismo suele estar ligado, en general, no solo a las libertades individuales, sino
también aquellas de índole social, como el derecho a votar y a manifestar ideas políticas.
 Se respeta la propiedad privada. Es decir, los individuos no deben vivir con el temor de que
sin justificación, el Gobierno se apropie de sus bienes. Un caso excepcional podría ser el de
una expropiación por fines de un interés público. Pero en este escenario el expropiado
recibe una compensación económica.
 Se fomenta la innovación, pues no se limita la capacidad de las personas para crear ideas
de negocio y generar riqueza.

Desventajas del capitalismo


Sin embargo, el capitalismo también tiene desventajas:

 Se privilegia el bienestar individual, que en ocasiones puede chocar con el interés


colectivo.
 Se suele dejar en segundo plano el tema de la desigualdad. Esto puede ser peligroso pues,
de agrandarse mucho la brecha o diferencias socioeconómicas en un país, se podría
generar un conflicto social.
 No se le suele dar prioridad el tema del medio ambiente. Es decir, se da más importancia a
la productividad que al cuidado del ecosistema. Esto puede traer consecuencias a futuro.
Afortunadamente, pueden surgir alternativas de mercado que sirvan para enfrentar el
problema del calentamiento global, por ejemplo, negocios sostenibles que justamente
busquen atraer a clientes preocupados por reducir la contaminación.
 No se prioriza el abastecimiento de bienes y servicios básicos a la población, siendo
comercializados como cualquier otra mercancía, lo que hace que un sector de la población
aún no pueda acceder a un mayor nivel de vida.
 Se pueden dar abusos en el mercado laboral, explotando a trabajadores que no tienen el
mismo poder de negociación que sus empleadores.

José Francisco López, 10 de julio, 2020


Ventajas y desventajas del capitalismo. Economipedia.com
Fuente: https://concepto.de/socialismo/#ixzz8HLYblwYZ

Qué es el socialismo
El socialismo es una doctrina sociopolítica y económica basada en la distribución
de la riqueza y la justicia social. Propone para ello que el Estado participe en la
economía regulando los medios de producción.

Esta ideología se expresa en corrientes muy diversas, que abarcan desde las
moderadas y democráticas, como la socialdemocracia, hasta las expresiones más
radicales y autoritarias, como el comunismo.

El término socialismo empezó a ser usado a comienzos del siglo XIX, en su


sentido moderno, para referirse en Inglaterra a los seguidores de Robert Owen y,
en Francia, a los seguidores del Conde de Saint Simon.

Los planteamientos de ambos surgieron como respuesta al capitalismo industrial y


a sus desigualdades sociales. Owen proponía organizar la producción y la
propiedad de bienes mediante cooperativas de trabajadores, mientras Saint-Simon
pretendía refundar la sociedad y su desarrollo económico según los principios de
la ciencia.

Poco después, se alzó la corriente más influyente del socialismo en la historia, la


expuesta en las ideas de Karl Marx y Friedrich Engels, también conocida
como marxismo.

Características del socialismo


 Aspira a la igualdad social y cree que el Estado es responsable de garantizarla.
 Politiza y moviliza a la sociedad, especialmente en torno al concepto de clase
trabajadora.
 Tiene nexos ideológicos con otras filosofías políticas como el liberalismo, la
democracia y el republicanismo.
 Abarca diversas tendencias de la izquierda política, algunas democráticas (centro-
izquierda o socialdemocracia) y otras autoritarias (ultraizquierda).
 En su origen, y en versiones radicales, aprueba propuestas y programas
revolucionarios.
 Tiene vocación universalista, por lo que se opone a los nacionalismos.
 En la práctica, los Estados socialistas han tendido a la concentración de poderes.
 En el siglo XX, los gobiernos socialistas procuraron estatizar los medios de
producción, con lo que establecieron economías de planificación centralizada.

Historia del socialismo


El socialismo nació como movimiento en el seno de la sociedad industrial,
aunque su filosofía posee antecedentes muy anteriores. Se pueden rastrear ideas
socialistas o comunistas en textos tan antiguos como los escritos sobre
la República de Platón (c. 427-347 a. C.), en las prácticas comunitarias de los
primeros cristianos, o en la forma de organización socioeconómica del Imperio
Incaico (1438-1533).

El uso del término “socialista” con el sentido contemporáneo data de alrededor de


1830. Se usó para describir al ala más radical de los diversos movimientos y
filosofías políticas nacidos durante los estallidos revolucionarios del siglo
XVIII, que asociaban al capitalismo naciente los malestares sociales de la época,
en especial los seguidores de Robert Owen y Henri de Saint-Simon.

Algunos más pragmáticos y otros más idealistas, estos movimientos compartían


visiones mayormente agrarias del socialismo, y fueron bautizados con ese nombre
por Pierre Leroux en su artículo Del individualismo y el socialismo en Revue
encyclopédique de 1833.

Con la Ilustración, que abogaba por el uso de la razón humana en la


comprensión y el mejoramiento de la sociedad, nació el primer socialismo
moderno, industrial, que hoy en día conocemos como socialismo clásico. Sus
dos cunas fueron Francia e Inglaterra. Aunque carecieron de un cuerpo de ideas
en conjunto, contaron con importantes pensadores y militantes que allanaron el
camino para la llegada en el siglo XIX del marxismo.

El socialismo marxista revolucionó para siempre el modo de comprender la


sociedad y la historia. A su vez, le dio al socialismo una teoría unificadora y de
espíritu racional, “científico” en palabras del revolucionario alemán Federico
Engels (1820-1895). Desde entonces, el socialismo o comunismo cobró vigencia
dentro de numerosos partidos y organizaciones obreras de Europa.

Alcanzó su apogeo político a inicios del siglo XX, con la Revolución Rusa de
1917 que, bajo la conducción de Vladimir Ilych Lenin (1870-1924), puso fin para
siempre a la monarquía zarista. Así se fundó el primer país socialista (marxista-
leninista) de la historia, la Rusia soviética, que después se convirtió en la Unión de
Repúblicas Soviéticas Socialistas (URSS).

Los acontecimientos de Rusia avivaron los sentimientos reaccionarios europeos.


Así, fueron utilizados para justificar ideológicamente el nacimiento del fascismo, un
movimiento político dictatorial y fundamentalmente anticomunista, que
desencadenó la Segunda Guerra Mundial.

Al término de la guerra a mediados del siglo XX el mundo asumió formalmente


la división en dos bloques, a lo largo de lo que se llamó la Guerra Fría: el
bloque capitalista liderado por Estados Unidos e Inglaterra, y el
bloque comunista o socialista liderado por la URSS y China, que tras
la Revolución Comunista China (1949) había instaurado su propia visión del
socialismo, el maoísmo.

Eventos semejantes ocurrieron en otras naciones del mundo, como Vietnam (la
Revolución de Agosto de 1945), Corea (tras la Guerra de Corea de 1950-1953),
Cuba (la Revolución cubana de 1959), Camboya (tras la Guerra Civil Camboyana
de 1967-1975), entre otros.

Nacidos en la violencia, muchos de estos regímenes dictatoriales estuvieron


involucrados en guerras, o cometieron genocidios y atrocidades en nombre del
“hombre nuevo” o de la sociedad utópica futura.

Sin embargo, hacia el término del siglo XX, y sobre todo tras la disolución de la
Unión Soviética en 1991, la mayoría de los países socialistas se habían sumergido
en la crisis y se habían visto obligados a reinventarse y asumir más o menos
formalmente una economía de mercado. La última década del siglo XX anunció la
muerte del socialismo y el supuesto “Fin de la historia”, en palabras del pensador
japonés Francis Fukuyama.

Aun así, un nuevo experimento político tomó el título de “Socialismo del


siglo XXI”, un término del economista alemán Heinz Dietrich Steffan. Comenzó a
ganar renombre mundial gracias a su evocación en el V Foro Social Mundial por
parte del entonces presidente venezolano, Hugo Chávez Frías (1954-2013), en el
marco de su autodenominada Revolución Bolivariana.

Sistemas econó micos: Socialismo

AutorHumberto Calzada

25/06/2019

El socialismo es un sistema económico y político populista basado en la propiedad


pública (también conocida como propiedad colectiva) de los medios de
producción. Esos medios incluyen la maquinaria, herramientas y fábricas utilizadas
para producir bienes que tienen como objetivo satisfacer directamente las
necesidades humanas. Comunismo y socialismo son términos generales que se
refieren a dos escuelas de pensamiento económico de izquierda; ambos se
oponen al capitalismo, pero el socialismo es anterior al "Manifiesto comunista", un
folleto de 1848 de Karl Marx y Friedrich Engels, por unas pocas décadas.

Sistemas económicos; Socialismo

En un sistema puramente socialista, todas las decisiones legales


de producción y distribución son tomadas por el gobierno, y los individuos
confían en el estado para todo, desde alimentos hasta atención médica. El
gobierno determina los niveles de producción y precios de estos bienes y
servicios. Los socialistas sostienen que la propiedad compartida de los recursos y
la planificación central proporcionan una distribución más equitativa de bienes y
servicios, y una sociedad más equitativa.

La propiedad común bajo el socialismo puede tomar forma a través del gobierno
tecnocrático, oligárquico, totalitario, democrático o incluso voluntario. Los ejemplos
históricos más destacados de países socialistas incluyen la antigua Unión
Soviética y la Alemania nazi. Ejemplos contemporáneos incluyen Cuba,
Venezuela y China.

Debido a sus desafíos prácticos y su pobre historial, el socialismo a veces se


conoce como un sistema utópico o de "post- escasez", aunque los partidarios
modernos creen que podría funcionar si solo se implementa adecuadamente.
Argumentan que el socialismo crea igualdad y proporciona seguridad: el valor de
un trabajador proviene de la cantidad de tiempo que trabaja, no del valor de lo
que produce, mientras que el capitalismo explota a los trabajadores en beneficio
de los ricos.

Los ideales socialistas incluyen la producción para el uso, en lugar de con fines
de lucro; una distribución equitativa de la riqueza y los recursos materiales entre
todas las personas; No más compras competitivas y ventas en el mercado; y libre
acceso a bienes y servicios.
Orígenes del socialismo

El socialismo se desarrolló en oposición a los excesos y abusos del individualismo


liberal y el capitalismo. Bajo las primeras economías capitalistas de finales del
siglo XVIII y XIX, los países de Europa occidental experimentaron una producción
industrial y un crecimiento económico compuesto a un ritmo rápido. Algunos
individuos y familias se enriquecieron rápidamente, mientras que otros se
hundieron en la pobreza, creando desigualdad de ingresos y otras preocupaciones
sociales.

Los primeros pensadores socialistas más famosos fueron Robert Owen, Henri de
Saint-Simon, Karl Marx, Friedrich Engels y Vladimir Lenin. Fue principalmente
Lenin quien expuso las ideas de los socialistas anteriores y ayudó a llevar la
planificación socialista al nivel nacional después de la Revolución bolchevique de
1917 en Rusia.

Tras el fracaso de la planificación central socialista en la Unión Soviética y la


China maoísta durante el siglo XX, muchos socialistas modernos se ajustaron a
un sistema regulador y redistributivo elevado, a veces denominado socialismo de
mercado o socialismo democrático.

https://www.rankia.mx/blog/como-comenzar-invertir-bolsa/4293118-sistemas-economicos-
socialismo

Historia[editar]
La influencia de la Ilustración y el socialismo utópico[editar]
Inglaterra fue una de las dos cunas del socialismo «utópico». Existieron dos causas
importantes que dan al socialismo utópico inglés su carácter peculiar: la revolución industrial,
con su cortejo de miserias para el desarrollo del Proletariado británico, y el desarrollo de una
nueva rama de la ciencia: la economía política, concepto asociado a la búsqueda de dominio
titular de las ciencias políticas.
En Francia tuvo un carácter más filosófico que en Inglaterra. Su primer representante fue el
conde Henri de Saint-Simon, considerado por Engels el creador de la idea en estado
embrionario que sería utilizada por todos los socialistas posteriores.89 Propuso la Federación
de Estados Europeos, como instrumento político para controlar el comienzo y desarrollo de
guerras. Al mismo tiempo Charles Fourier, concibió los falansterios (comunidades humanas
regidas por normas de libre albedrío e ideologías económicas socializadas).
Henri de Saint-Simon contrastó la doctrina liberal del individualismo que enfatizaba el valor
moral del individuo mientras enfatizaba que las personas actúan o deberían actuar como si
estuvieran aisladas unas de otras. Los socialistas utópicos originales condenaron esta
doctrina del individualismo por no abordar las preocupaciones sociales durante la Revolución
Industrial, incluida la pobreza, la opresión y las grandes desigualdades en la riqueza.
Consideraban que su sociedad dañaba la vida comunitaria al basarla en la competencia.
Presentaron el socialismo como una alternativa al individualismo liberal basado en la
propiedad compartida de los recursos.90 Saint-Simon propuso la planificación económica, la
administración científica y la aplicación del conocimiento científico a la organización de la
sociedad. Por el contrario, Robert Owen propuso organizar la producción y la propiedad a
través de cooperativas.9091

Los debates entre los socialistas clásicos[editar]


Poco después aparece la teoría comunista marxista que desde una teoría crítica
del comunismo, desarrolla una propuesta política: el «socialismo científico». Karl Marx postula
en una de sus obras la diferenciación entre «valor de mercado» y «valor de cambio» de una
mercancía y la definición de plusvalía, siendo estas sus mayores contribuciones a la economía
política; no obstante, los economistas modernos no utilizan estos conceptos del mismo modo
que lo hacen los seguidores de la escuela marxista del pensamiento económico,
argumentando que la teoría expuesta por Marx no contempla la interacción total de la ciencia
económica y se ve parcializada por el comunismo. Entre los socialistas hubo una muy pronta
división entre marxistas y anarquistas los cuales eran la esencia más cercana a la ideología
marxista. El marxismo como teoría recibió muchas críticas, algunas de ellas constituirán
durante muchas décadas la base ideológica de la mayoría de partidos socialistas. Más tarde,
a raíz de la Revolución rusa y de la interpretación que le dio Lenin, el leninismo se convertiría
en foco de admiración de los partidos comunistas, agrupados bajo la III Internacional.
La teoría marxista se construye conjuntamente con el anarquismo. El anarquismo se podría
inscribir dentro de los conceptos tempranos del socialismo, que como ideal busca que las
personas decidan sobre sus vidas libre e independientemente; la abolición del Estado y de
toda autoridad; exaltando al individuo. Poco después de que Mijaíl Bakunin y sus seguidores
se unieran en 1868, la Primera Internacional se polarizó en campos encabezados por Marx y
Bakunin. Las diferencias más claras entre los grupos surgieron sobre sus estrategias
propuestas para lograr sus visiones. La Primera Internacional se convirtió en el primer foro
internacional importante para la promulgación de ideas socialistas. «Que la libertad sin el
socialismo es el privilegio, la injusticia; y que el socialismo sin la libertad es la esclavitud y la
brutalidad».92
La meta del socialismo es construir una sociedad basada en la igualdad,
la equidad económica, la iniciativa personal, la cooperación moral de un individuo, eliminando
las compensaciones estratificadas por esfuerzo, promoviendo estructuras políticas y
económicas de distribución como por ejemplo el seguro social.

El socialismo en el siglo XX[editar]


"La anarquía económica de la sociedad
capitalista tal como existe hoy es, en mi
opinión, la verdadera fuente del mal. [...]
Estoy convencido de que hay solamente un
camino para eliminar estos graves males, el
establecimiento de una economía socialista,
acompañado por un sistema educativo
orientado hacia metas sociales. En una
economía así, los medios de producción son
poseídos por la sociedad y utilizados de una
forma planificada. Una economía planificada
que ajuste la producción a las necesidades
de la comunidad, distribuiría el trabajo a
realizar entre todos los capacitados para
trabajar y garantizaría un sustento a cada
hombre, mujer, y niño. La educación del
individuo, además de promover sus propias
capacidades naturales, procuraría
desarrollar en él un sentido de la
responsabilidad para sus compañeros-
hombres en lugar de la glorificación del
poder y del éxito que se da en nuestra
sociedad actual."93
—Albert Einstein, "¿Por qué el socialismo?",
1949

El socialismo alcanzó su apogeo político a finales del siglo XX en el bloque comunista de


Europa, la Unión Soviética, estados comunistas de Asia y del Caribe.
Durante la segunda mitad del siglo XX fue de gran importancia para el llamado bloque
socialista (conjunto de los países controlados por la Unión Soviética tras la contraofensiva en
el frente oriental durante la Segunda Guerra Mundial), donde la URSS impuso sistemas de
gobierno socialistas dependientes.
En la década de 1920, el comunismo y la socialdemocracia se habían convertido en las dos
tendencias políticas dominantes dentro del movimiento socialista internacional,40 con el
socialismo mismo convirtiéndose en el movimiento secular más influyente del siglo XX.41
Mientras que el surgimiento de la Unión Soviética como el primer estado socialista nominal del
mundo condujo a la asociación generalizada del socialismo con el modelo económico
soviético, algunos economistas e intelectuales argumentaron que en la práctica el modelo
funcionaba como una forma de capitalismo de Estado424344 o una economía administrativa o de
mando no planificada.4546
Tras la Segunda Guerra Mundial, la tensión militar-ideológica entre el bloque socialista,
encabezado por la Unión Soviética, y el capitalista, encabezado por Estados Unidos,
desembocó en un enfrentamiento político que se conocería como Guerra Fría. Se conoció de
ella extraoficialmente y fue la competencia por la superioridad en todos los aspectos y lograr
así el dominio completo (pero no directo) de la mayor cantidad de países. Culminó con la
disolución política de la URSS, tras una crisis agravada por su situación económica y política y
fuertes presiones externas, acompañada de una pronunciada crisis en los demás estados
socialistas, principalmente los europeos.

El socialismo del siglo XXI[editar]


Artículo principal: Socialismo del Siglo XXI

El socialismo del siglo XXI es un concepto que aparece en la escena mundial en 1996, a través
de Heinz Dieterich Steffan.94 El término adquirió difusión mundial desde que fue mencionado
en un discurso por el entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez, el 30 de enero de
2005, desde el V Foro Social Mundial. Dieterich argumentó que tanto
el capitalismo industrial de libre mercado como el socialismo del siglo XX en forma
de marxismo-leninismo no han logrado resolver problemas humanitarios urgentes como
la pobreza, el hambre, la explotación del trabajo, la opresión económica, el sexismo,
el racismo, la destrucción de los recursos naturales y ausencia de
una democracia verdaderamente participativa. El socialismo del siglo XXI tiene elementos
socialistas democráticos, pero se interpreta principalmente al revisionismo marxista.95
En el marco de la Revolución Bolivariana, Chávez señaló que para llegar a este socialismo
habrá una etapa de transición que denomina como Democracia Revolucionaria. Hugo Chávez
expresó «Hemos asumido el compromiso de dirigir la Revolución Bolivariana hacia el
socialismo y contribuir a la senda del socialismo, un socialismo del siglo XXI que se basa en la
solidaridad, en la fraternidad, en el amor, en la libertad y en la igualdad» en un discurso a
mediados de 2006. Además, este socialismo no está predefinido. Más bien, dijo Chávez
«debemos transformar el modo del capital y avanzar hacia un nuevo socialismo que se debe
construir cada día».
Los partidos socialistas y las ideas siguen siendo una fuerza política con diversos grados de
poder e influencia en todos los continentes, encabezando gobiernos nacionales en muchos
países de todo el mundo. Hoy, muchos socialistas también han adoptado las causas de otros
movimientos sociales como el ambientalismo, el feminismo y el progresismo.48

Ventajas del socialismo


Entre las ventajas que presenta el socialismo, conviene resaltar las siguientes:

 Los medios de producción son de propiedad pública, por lo que sus beneficios, en
teoría, se revierten a la sociedad.
 Se elimina el privilegio del bienestar individual, primando el interés general y el
bienestar colectivo.
 Está muy centrado en conceptos como la desigualdad. En otras palabras, promueve
sociedades más igualitarias, donde no existan diferencias notables en los niveles de
renta de la población.
 El socialismo tiene muy en cuenta las necesidades del individuo. Por ello,
contempla herramientas que garantizan el acceso a un nivel básico de vida.
 El socialismo está muy comprometido con la clase obrera. Por ello, aboga por la
regulación del mercado laboral, así como la protección del individuo, impidiendo la
explotación laboral y la vulneración de los derechos de los trabajadores.
 De la misma forma, el socialismo está muy comprometido con el medioambiente.
En cierta forma, también por su enemistad con el capitalismo. Por ello, aboga por
una menor producción, con el fin de hacer sostenible el crecimiento.

Desventajas del socialismo


De la misma forma que lo que comentamos puede ser una ventaja, también podría
ser una desventaja si lo miramos desde el punto de vista de un defensor del
capitalismo.
Por ello, conviene resaltar sus desventajas, entre las cuales se encuentra el afecto
adverso que se produce en el caso de que alguna de las políticas anteriores no
funcionase:

 Entre las primeras desventajas, la eliminación de la propiedad privada podría


eliminar los incentivos con los que cuenta el empresario para invertir. Lo que
podría llevarnos a una situación de menor bienestar, por la huida de los capitales.
 Privilegiar el bienestar general, por otro lado, también podría mermar la economía.
En este sentido, la defensa de una sociedad igualitaria, al no primar tanto la
meritocracia, podría espantar el talento y el capital humano.
 Las desigualdades, como decíamos al inicio, en ocasiones son herramientas que,
para el capitalista, permiten el desarrollo y la libre competencia. En este sentido,
una constante lucha por eliminar las desigualdades, a largo plazo, también podría
fomentar la huida del talento.
 Garantizar el acceso universal a los servicios básicos tiene un coste. Esa mayor
presión fiscal, con el fin de sufragar el mayor coste del Estado, podría espantar la
inversión extranjera y, de la misma forma, el capital.
 Asimismo, la defensa de la clase obrera, en ocasiones, se hace en detrimento del
empresario. Esto podría desincentivar la llegada de empresas y, por ende, la
creación de empleo.
 De la misma forma, la sobrerregulación del mercado laboral puede echar del
mercado formal a muchos empleados, que comienzan a trabajar en el sector
informal. Ello, con menos derechos y menor retribución, entre otros aspectos.

Ventajas del socialismo.


Distribución de la riqueza.

Uno de los puntos principales por los que la gente mira este modelo con
cierto anhelo se debe a esta idea de que se forma una estructura justa en el
que todos comparten la riqueza y la prosperidad. Esto ayudaría a
reducir las disparidades de ingresos que provocan malestar social y
conflictos. En teoría, también se lograría una mayor cooperación global,
ya que la gente tendría interés en trabajar juntos para la mejora de todos.

Recursos para necesidades.

En las sociedades socialistas, en lugar de asignar los bienes y servicios en


función de quién tiene más dinero, los recursos se asignan en función de
las necesidades de cada individuo. Esto significa que todos tienen acceso
al mismo número y tipo de recursos, independientemente de su riqueza.
Además, como estas estructuras no dependen del beneficio para motivar a
la gente, hay menos incentivos para explotar a los demás. En
consecuencia, se tendría una población más igualitaria y justa que una
capitalista.

Servicios de primera necesidad gratuitos.

La asistencia sanitaria y la educación son gratuitas. Esto no sólo beneficia


al individuo, sino también a la sociedad en su conjunto. En muchos países
en la actualidad existe el problema de la falta de seguros médicos para
gran parte de la población. En este aspecto, la sanidad suele ser cara y
difícil de conseguir, mientras que la educación suele ser inexistente o
prohibitiva. En cambio, en el modelo socialista se busca darle acceso a las
personas a servicios que son considerados como un derecho universal.

Seguridad económica.

En los modelos actuales, los individuos suelen verse obligados a competir


entre sí para ganarse la vida. Esto a menudo conduce a la inseguridad
económica, ya que la gente puede perder su trabajo y sus ingresos de
repente. En cambio, en este sistema, todos tienen garantizado un
empleo y unos ingresos. Esto proporciona a los individuos estabilidad,
lo que reduce su ansiedad sobre su futuro financiero.

Igualdad.

En el capitalismo, algunas personas son mucho más ricas que otras. Esta
disparidad entre ricos y pobres puede provocar problemas sociales, como
la pobreza y la desigualdad de la riqueza. En cambio, en el socialismo
todos los ciudadanos son iguales. Esto elimina la posibilidad de que la
desigualdad social surja de las diferencias de riqueza y todos empiezan en
la misma posición y se mantienen así.

Desventajas del socialismo.


Ha fracasado históricamente.

Históricamente, ha sido una ideología sin éxito. A pesar de que se diga lo


contrario, muchas sociedades que han aplicado políticas orientadas a esta
corriente han experimentado otro tipo de problemas, lo que a menudo ha
provocado un descenso general de la calidad de vida de quienes viven bajo
estos regímenes.

Suelen ser muy susceptibles de sufrir un colapso económico, ya que la


intervención del gobierno en el mercado provoca un exceso de producción
y fluctuaciones de precios que pueden sumir fácilmente a una sociedad en
el caos, eso sin contar los niveles de corrupción que surgen cuando el
poder se encuentra centralizado y los recursos se reparten sin
considerar la sostenibilidad económica a largo plazo.

Si bien la premisa de una sociedad viviendo con esta ideología es muy


atractiva, la evidencia sugiere que este ideal es casi imposible de alcanzar
e incluso puede conducir a tener los efectos contrarios que propone. En la
actualidad se tiene una combinación de políticas socialistas, capitalistas y
con otras corrientes de pensamiento, ya que una idea completamente
pura suele fracasar.

Falta de innovación y competitividad.

Una de sus principales contras es la falta de competitividad e innovación.


Bajo este modelo, no se permite que las empresas sean propiedad o estén
operadas con fines de lucro, lo que inhibe la competencia y la creatividad.
Esto suele traducirse en bajos niveles de productividad e
innovación, lo que puede obstaculizar el crecimiento económico.
Además, los empresarios a los que no se les permite ganar dinero son
menos propensos a arriesgar su dinero en nuevos negocios o ideas. Esto
puede conducir a un estancamiento del progreso tecnológico.

No hay motivación para superarse.

No ofrece una recompensa o un incentivo para que la gente trabaje duro.


La mayoría de las personas en el capitalismo son recompensadas por sus
esfuerzos de forma monetaria. Sin embargo, el socialismo cambia las
formas, ya que la gente puede ser pagada con diversas formas de
beneficios sociales en lugar de dinero. Esto puede ser una gran desventaja
porque es posible generar individuos perezosos y desmotivados. Además,
también cabe la posibilidad de que no haya suficientes prestaciones
sociales para todos, generando insatisfacción.

Sistemas económicos son inestables.

Los sistemas socialistas suelen desmoronarse debido al estancamiento


económico o a la inestabilidad política. Cuando hay pocos incentivos para
que la gente trabaje duro, las empresas se resienten y la economía se
tambalea. Además, cuando el gobierno se vuelve demasiado poderoso o
corrupto, puede recurrir al autoritarismo o al totalitarismo, lo que podría
conducir a la pobreza masiva y a la opresión.

Esto puede dar lugar a elevados impuestos y a la intervención del


gobierno en la economía, lo que ahoga el crecimiento empresarial y por
ende, también las oportunidades de crecimiento personal y colectivo.
Incluso con buenas intenciones es posible que las cosas salgan mal, ya que
por ejemplo, los subsidios son un gran apoyo para muchas familias y
hasta para las industrias, pero si no se regulan y se reparten sin parar, va
a llegar un momento en que el dinero se va acabará y solo se terminará
con personas dependientes del dinero del gobierno e incapaces de
valerse por si mismas para generar algo.

Hasta ahora hemos visto que el socialismo tiene muchos pros que lo
convierten en una opción atractiva para muchas personas. Sin embargo,
también hay algunas contras que hay que tener en cuenta antes de tomar
una decisión sobre si apoyarlo o no como sociedad. En general, es una
idea interesante con mucho potencial, pero debe ser evaluada
cuidadosamente antes de ser implementada en cualquier país o
comunidad.

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Recomendado
Positivos

 El socialismo es útil para rescatar del más grande atraso a sociedades que
producen con sistemas ya obsoletos, como el modo de producción asiático,
sociedades feudales, caciquiles, o sometidas al colonialismo o
neocolinialismo. Tal es el caso de China, Vietnam, Birmania, Nepal, Afganistán
(antes de que mujaidines y talibanes lo liberaran). Una vez superado el atraso,
muchos de estos países deciden abandonar el socialismo dogmático o
implementar una economía mixta. Pero es evidenre que el socialismo los hizo
superar en pocos años un retraso de siglos.
 En países ya desarrollados sirve para dar a cada persona una oportunidad
real de tener una vida plena y exitosa. Educación y prestaciones de
vanguardia son sólo algunas de las ventajas. Ese es el caso de Islandia,
Noruega, Finlandia y Suecia. Cabe aclarar que hay formas de socialismo que
no requieren que se suprima el capitalismo. Socialismo no es anti capitalismo,
ni siquiera el comunismo chino lo es. Capitalismo y socialismo son fases
sucesivas, no antagónicas. Y como ya lo demuestran China y los
escandinavos, capitalismo y socialismo pueden coexistir.
 El socialismo real de la URSS llevó al ex imperio ruso a ser una súper potencia
mundial en todos los aspectos, con una calidad de vida muy superior a la de
la Rusia zarista. Esto a cambio de tolerar un estado autoritario.
 El socialismo y la socialdemocracia ayudan a países como Francia, España,
Italia, Alemania a mitigar los efectos del capitalismo salvaje y las ideologías
de ultraderecha. Cuando los pueblos ya están hartos de sus dificultades
eligen un gobierno y un parlamento socialistas. Al cabo de un tiempo votan a
la derecha y botan a los socialistas. Luego se arrepienten y eligen de nuevo a
los socialistas… así es la alternancia.
 Una economía socialista típica del siglo XX estaba libre de algunas de las
peores desventajas de nuestro capitalismo a ultranza. No había obsolescencia
programada. La prioridad era industrializar y satisfacer las necesidades
básicas de toda la población. Así que los recursos naturales eran explotados
más racionalmente y el desperdicio de recursos era casi desconocido. No se
permitía el desperdicio de alimentos. De hecho en la Alemanua comunista, si
el estado detectaba que la gente no consumía todo su alimento les recirtaba
la ración. Así que todos se comían todo. En nuestro capitalismo la priorudad
es la utilidad y el consumismo. Si la gente ta ni quiere comer más tira a la
basura sus alimentos, y si las empresas no pueden sacar provecho de sus
mercancías perecederas prefieren tirarlas. No impirta si millones de personas
están muriendo de hambre.
¿Cuáles son los aspectos negativos del socialismo?

CEO en Madison (2016–presente)10meses

El socialismo es un sistema económico y político en el que los medios de producción,


como las fábricas y las empresas, son propiedad y están controlados por el gobierno o
la comunidad en su conjunto, en lugar de propietarios individuales. Si bien el
socialismo pudiera tener, en teoría, algunos aspectos positivos, como el potencial de
reducir la desigualdad económica y proporcionar cierta seguridad para los necesitados,
también tiene muchos aspectos negativos. Algunos que se me ocurren son:

 La reducción de la eficiencia económica: debido a que el gobierno, y no los


individuos, toma decisiones sobre cómo se asignan y utilizan los recursos, el
socialismo puede generar ineficiencia y reducir la productividad.
 Falta de innovación: en los sistemas socialistas suele haber menos incentivos
para que las personas innoven y creen nuevos productos y servicios porque
las recompensas no son tan grandes como en un sistema capitalista.
 Libertad personal limitada: en un sistema socialista, el gobierno tiene más
control sobre la vida y la toma de decisiones de las personas. Esto puede
conducir a una falta de libertad e independencia personal.
 Falta de incentivos: en un sistema socialista, es posible que las personas no
tengan los mismos incentivos para trabajar duro y tener éxito porque las
recompensas se distribuyen de manera más uniforme. Esto puede conducir a
una falta de motivación y esfuerzo.
 Altos impuestos: Para financiar la propiedad y el control del gobierno de los
medios de producción, el socialismo a menudo requiere altos impuestos. Esto
puede ser una carga para las personas y las empresas, y puede desalentar el
crecimiento económico.
En general, si bien el socialismo tiene algunos beneficios potenciales (en teoría),
también tiene algunos aspectos negativos que pueden afectar la libertad y las
oportunidades económicas de las personas.

Francisco Coll Morales, 29 de marzo, 2021


Ventajas y desventajas del socialismo. Economipedia.com

Papel del estado


Una economia centralizada o socialista depende de las decisiones del estado. El estado
planifica la oferta y la demanda, sin saber con certeza que ocurrira en el futuro. El
estado planifica las necesidades laborales. El estado define los precios de los insumos y
los productos. El estado decide sobre como se distribuyen los productos y servicios.
Todo esto no funciona en la vida real porque le quita la habilidad a los agentes
economicos para reaccionar ante la realidad. Elimina la correccion de los precios que te
da el libre mercado donde la oferta y la demanda no estan paralizadas por un
planificador central. El libre mercado hace todo mas transparente, mas visible, mas
comprensible y mas adaptado a las necesidades y oportunidades.

Estado socialista

Un estado socialista es aquel que se declara constitucionalmente dedicado a la


construcción del socialismo.

Está estrechamente relacionado con la estrategia política del socialismo de


Estado, un conjunto de políticas gubernamentales dirigidas a la creación de
una economía socialista en un solo país (esto es, una economía
centralizada, planificada y que aplica un modelo de distribución de bienes de
consumo con el criterio igualitario). Por otra parte, el término Estado obrero se usa
para distinguir a un Estado donde la clase trabajadora controla la maquinaria del
Estado pero no se ha establecido aún una economía socialista.

Este concepto se distingue del de Estado socialdemócrata o socioliberal, que


generalmente se refieren a un Estado democrático liberal presidido por un partido
electo por sufragio y que procura aplicar modelos redistributivos de justicia social,
sin que persiga el desarrollo del socialismo.

La frase Estado socialista es utilizado en algunas ocasiones por marxistas-


leninistas para referirse a un Estado bajo el control de un partido de vanguardia
que organiza los asuntos económicos, sociales y políticos hacia la construcción
del socialismo. Esto a menudo incluye por lo menos la nacionalización de los
sectores estratégicos de la economía, operada normalmente de acuerdo con
un plan de producción, al menos en las principales esferas productivas y sociales.
Bajo la definición leninista -determinada por las condiciones materiales de la Rusia
de los años 1920, el Estado socialista preside una economía capitalista
estatal estructurada sobre la acumulación del capital dirigida por el Estado con el
objetivo de aumentar las fuerzas productivas del país y promover la revolución
socialista en todo el mundo, con la meta eventual, a largo plazo, de la construcción
de una sociedad comunista.

La mayoría de las teorías asumen la democracia generalizada como principio


básico de un Estado socialista, entendida como la participación democrática de los
trabajadores en todos los niveles de la administración estatal y económica,
mientras que estas teorías varían en el grado en que consideran deben ser
delegadas las decisiones de planificación económica en los funcionarios públicos y
especialistas administrativos. Los Estados que carecen de democracia pero cuya
economía está en gran medida en manos del Estado fueron denominados
por León Trotski como Estados obreros degenerados o deformados.

Estado socialista

Estado de la sociedad socialista, parte política de la superestructura sobre la base económica


del socialismo. El Estado socialista es un nuevo tipo de Estado que adviene en sustitución del
Estado burgués y como resultado de la revolución socialista. El proceso de formación de la
superestructura socialista ocurre en el transcurso de todo el período de transición del capitalismo al
socialismo. El Estado del período de transición es la dictadura del proletariado. Es socialista por
sus fines y objetivos, pues sirve de medio para la construcción del socialismo. A medida que la
sociedad socialista se desarrolla, cambian las funciones del Estado socialista; liquidadas las clases
explotadoras, desaparece la función de aplastar su resistencia y se desarrollan en todos los
aspectos las funciones principales del Estado socialista: las concernientes a la organización
económica y a la educación y cultura. Al constituirse el sistema socialista mundial, el Estado
socialista, junto a las funciones de luchar por la paz y defender el país, asume una nueva función
exterior, la de desarrollar la colaboración fraternal con los países socialistas. Con la victoria
completa y definitiva del socialismo, al entrar la sociedad en el período de la construcción del
comunismo, en todo el frente, el Estado de la dictadura del proletariado, se transforma en Estado
de todo el pueblo, órgano de expresión de la voluntad del pueblo entero. El Estado socialista es un
instrumento para consolidar el socialismo y transformar gradualmente la sociedad socialista en
comunista. La extinción del Estado significa que todas las instituciones del Estado socialista y toda
la organización política de la sociedad socialista se van convirtiendo gradualmente en autogestión
social comunista. Para que el Estado se extinga por completo, es necesario establecer una
sociedad comunista desarrollada en el interior del país y llegar, también, a la victoria y a la
consolidación del socialismo en el plano internacional.

Fuente: https://concepto.de/socialismo/#ixzz8HR73xF6K

Ejemplos de países socialistas


1. China. Es un país asiático en el que rige un socialismo con partido único, el Partido
Comunista Chino, desde 1949 (año en el que este partido triunfó frente al Partido
Nacionalista Chino tras una guerra civil). Desde entonces la vida política, social y
económica de China fue variando de acuerdo a cada gobierno hasta llegar a lo que se
conoce hoy como “socialismo con características chinas”. Entre sus particularidades
se destacan la apertura de mercado, el unipartidismo, el control estatal y la falta de
libertad de prensa. No obstante, muchos estudiosos coinciden en que, en la
actualidad, China mantiene elevadas cifras de desigualdad social, que se
evidencian en los niveles de vida de la ciudad y las zonas del interior.
2. Vietnam. Es un país asiático con un gobierno de tipo socialista liderado por el Partido
Comunista de Vietnam, que funciona como partido único desde 1976 con bases
marxistas-leninistas, y con una economía abierta desde 1986. En la actualidad no
posee tensiones políticas de ningún tipo, ni desórdenes sociales.
3. Cuba. Es un país socialista con partido único, el Partido Comunista de Cuba, desde
1959. Adhiere a las ideas marxistas-leninistas y fue mutando con el tiempo. Algunas
de las características actuales de la organización política y económica cubana son el
unipartidismo, el control estatal de la administración y la economía, el control de la
prensa y los medios de comunicación y una apertura controlada de la economía.
4. Laos. Es un país asiático con un gobierno socialista de partido único (Partido Popular
Revolucionario de Laos) desde 1975. Entre sus características se destacan: el
unipartidismo, el control estatal, la falta de libertades individuales y la prohibición de la
libertad de prensa.
5. Corea del Norte. Es un país asiático con un gobierno socialista con forma de
dictadura desde 1945. Prima el unipartidismo, la estatización y el control sobre la
economía y la administración. que carece de bolsa de valores, apoya muchos
programas sociales y la economía es estatal.
6. Ecuador Durante el gobierno del Ex presidente, Rafael Correa (2007-2017),
este país suramericano también se rigió bajo los preceptos del
“Socialismo del Siglo XXI”, pero con características propias: Difería de la
estatización de los medios de producción, y del socialismo tradicional,
aún cuando la economía del país era impulsada por el Estado.
7.

"Países socialistas". Autor: Equipo editorial, Etecé. De: Argentina. Para: Enciclopedia de
Ejemplos. Disponible en: https://www.ejemplos.co/15-ejemplos-de-paises-socialistas/.
Última edición: 31 agosto, 2022. Consultado: 16 octubre, 2023.

Fuente: https://www.ejemplos.co/15-ejemplos-de-paises-socialistas/#ixzz8Hd5jRG9u

Fuente: https://www.ejemplos.co/15-ejemplos-de-paises-socialistas/#ixzz8Hd5S2bEj

Qué es una economía mixta?


Una economía mixta es un modelo económico intermedio, que busca un
equilibrio entre el libre mercado del capitalismo y el intervencionismo
estatal de la economía planificada socialista. Para esto, se delega en el mercado
la asignación de los recursos, pero se permite al Estado regular su
funcionamiento.

La idea de un modelo económico mixto surgió a finales del siglo XIX, como parte
de diferentes propuestas político-económicas, como el Socialismo Democrático o
el Liberalismo Social, o de posturas económicas como las de John Stuart Mill
(1806-1873). Sin embargo, con el nombre de “economía mixta” el modelo
apareció en la Inglaterra del siglo XX, específicamente en la década de 1930,
primero como parte de las propuestas del socialismo cristiano y después del
partido laborista.

En buena medida, la economía mixta surgió en las naciones occidentales como


una estrategia para lidiar con las problemáticas sociales inherentes al libre
mercado, con el fin de evadir que la influencia local del marxismo y
del comunismo creciera y propiciara alzamientos revolucionarios. Sin embargo, el
éxito de la economía mixta en Europa sentó las bases para el estado de
bienestar que duró, al menos en el Reino Unido, hasta la llegada al poder de
Margaret Thatcher (1925-2013) en 1979.

Es importante mencionar que no existe un modelo único de economía mixta, sino


que cada país o región lo adapta e implementa de una manera particular.
Entre los componentes y las estrategias de los que dispone este tipo de modelos
intermedios figuran los subsidios, impuestos, regulaciones y otras estrategias de
intervención gubernamental, así como la propiedad pública de bienes y empresas.
Al mismo tiempo, se implementa un respeto irrestricto por la propiedad privada y
por las libertades individuales, entre ellas la libertad económica.

Existen muchas y muy distintas variantes de la economía mixta, como el


keynesianismo, el desarrollismo, el estado de bienestar, entre otras. En la
actualidad, la gran mayoría de las naciones funcionan bajo algún tipo de
sistema económico mixto.

Ver además: Política económica

Características de una economía mixta


Los modelos de economía mixta no son siempre iguales, ni se rigen por un
lineamiento universal. Sin embargo, entre los rasgos comunes de este tipo de
modelos figuran:

 Economía social de mercado. La producción y el intercambio económico


tienen como base la libertad económica y la iniciativa privada, es decir, la
relación entre la oferta y la demanda, pero al mismo tiempo el Estado cuenta
con estrategias de protección para los sectores más necesitados.
 Convivencia de la propiedad privada y la pública. La propiedad privada es
plenamente respetada, aunque se procura impedir el monopolio y la
desigualdad extrema. Asimismo, existen propiedades públicas, como empresas
estatales y propiedades comunitarias, que compiten con la iniciativa privada.
 Mecanismos parciales de planificación económica. El Estado cuenta con
diferentes mecanismos para intervenir en la economía, como barreras
arancelarias, subsidios, controles de precios y demás. Con ellos se busca
encauzar la economía hacia el bienestar común, sin ejercer un control directo y
total como ocurre en las economías planificadas.
 Justicia social y estado de bienestar. El Estado hace esfuerzos para la
distribución de la riqueza y la lucha contra la desigualdad, y tiene en general un
espíritu económico más o menos progresista.

Fuente: https://concepto.de/economia-mixta/#ixzz8HLc6THr8

Fuente: https://concepto.de/economia-mixta/#ixzz8HLcBOl1s

¿Qué es la economía mixta?


Un sistema económico mixto es aquel en el que el estado interviene para
regular su funcionamiento, pero la asignación de recursos se resuelve
mediante las leyes de la oferta y la demanda o lo que es lo mismo mediante
la interacción de vendedores y consumidores

Es decir, una economía mixta mezcla elementos de las economías capitalistas


como el derecho de propiedad privada, el libre comercio y la privatización de
empresas, con elementos de las economías planificadas como la regulación,
el estado del bienestar y la redistribución de la riqueza a través de impuestos
y subvenciones para establecer una sociedad más equitativa.

En las economías mixtas, existe un cierto nivel de libertad económica para


que el sector privado pueda decidir el uso del capital y buscar beneficios. Al
mismo tiempo, el gobierno puede intervenir en algunas actividades
económicas e industrias cubriendo los fallos del mercado.

Por tanto, en un sistema económico mixto coexisten el sector privado y


el sector público.
Actualmente, la mayoría de las naciones del mundo funcionan con algún
tipo de sistema de economía mixta. Dependiendo del país, este sistema
estará más cerca de una economía capitalista o de una economía planificada,
pero siempre tendrá un porcentaje de ambas.

Por ejemplo, España es un país que cuenta con un sistema económico mixto,
ya que deja la propiedad de los medios de producción en manos
mayoritariamente privadas, pero incorpora elementos como las
subvenciones a la agricultura y la ganadería, la regulación de ciertas
industrias y la propiedad pública parcial o total de algunos sectores como la
sanidad, la defensa nacional y la educación.

Características de la economía mixta


1. Coexistencia de los sectores privado y público

La coexistencia de los sectores público y privado es la característica más


destacada de la economía mixta. En la economía mixta, funcionan tanto las
empresas del sector público como las del sector privado. El beneficio será el
objetivo principal de las empresas del sector privado. Por el contrario, las
empresas del sector público son entidades centradas en el bienestar social.

2. Existencia de empresas mixtas

Las empresas mixtas son aquellas empresas cuyo capital proviene tanto del
Gobierno como de inversores privados.

3. Intervención del estado en la economía

Una economía mixta permite que algunos sectores funcionen libremente o


con muy pocas restricciones, tal cómo lo harían en una economía de
mercado. Sin embargo, en otros sectores, como la industria del motor o la
farmacéutica son regulados de forma muy estricta ya que se debe cumplir
con una serie de procesos y con unos estándares mínimos de calidad que
garanticen la seguridad.

4. Propiedad privada
En la economía mixta, las empresas privadas y los individuos tienen derecho
a poseer, utilizar y proteger la propiedad privada.

5. La seguridad social y el estado del bienestar

La presencia de la seguridad social es una especie de híbrido entre una


economía de mercado, en la que no se proporciona ninguna ayuda, y una
economía planificada, en la que los ingresos los proporciona únicamente el
gobierno. Gracias a la seguridad social, los grupos más desfavorecidos de la
sociedad como son los discapacitados, los desempleados y los ancianos,
pueden seguir hacia delante y no quedar desamparados como si que
quedarían en una economía de mercado

6. Protección de los derechos de los consumidores

Al igual que en las economías de mercado, el consumidor es libre de


comprar cualquier producto que desee. Ahora bien, en las economías mixtas,
gracias a la actuación del gobierno, los derechos de los consumidores están
protegidos y los precios de los productos son regulados para que no sean
explotados por empresas privadas.

7. Protección de los derechos laborales

El gobierno también protege los derechos laborales de los trabajadores. Por


ejemplo, algunas de las medidas adoptadas para proteger estos derechos
son el salario mínimo interprofesional o los convenios colectivos.

8. Ley de la oferta y la demanda

Los precios de los bienes y servicios son determinados por las fuerzas del
mercado. Sin embargo, el gobierno puede regular algunos bienes. Por
ejemplo, la mayoría de los países incrementan el precio de las bebidas
alcohólicas y de los cigarrillos mediante impuestos especiales para
desincentivar su consumo. Lo contrario también puede suceder, por ejemplo
durante la crisis del coronavirus, la mayoría de los países han eliminado el
impuesto a las mascarillas para reducir su precio.

Ventajas de la economía mixta


Combinando las características de la economía de mercado y de la economía
planificada, un sistema económico mixto conlleva ventajas de ambos lados.

1. Asignación eficiente de los recursos

En el sector privado, los recursos se asignan de forma eficiente allí donde


más se necesitan. De este modo, se pueden satisfacer mejor las necesidades
de los clientes.

2. Incentivos para la innovación y la eficiencia de la producción

En un mercado libre con competencia, las empresas que pueden producir de


forma más eficiente son recompensadas con mayores beneficios. De esta
manera, las empresas destinan parte de su capital a la innovación con el
principal objetivo de mejorar sus productos y de conseguir una mayor
eficiencia en sus métodos de producción. Gracias a esta guerra continua
entre las empresas, los clientes siempre van a recibir el mejor valor por lo
que han pagado.

3. Apoyo del gobierno

El sector público en una economía mixta alivia las desventajas de una


economía de mercado. Las empresas privadas podrían descuidar algunos
sectores que son esenciales para la sociedad debido a su baja rentabilidad.
En estos casos, la intervención del gobierno permite apoyar estos sectores
clave, como la educación, la defensa y la industria aeroespacial, a través de
subvenciones o mediante la creación de empresas públicas. Por ejemplo, si
nos fijamos en la educación, está no sólo proporciona un beneficio directo al
estudiante, sino que también proporciona un beneficio indirecto a la
sociedad. Una sociedad con educación y estudios se traduce en empleados
más productivos y eficientes lo que reduce el coste de los bienes y servicios
para las empresas

Gracias a la intervención del gobierno también se regulan los monopolios


que se daban en la economía de mercado a través de las famosas leyes
antimonopolio que prohíben toda clase de contactos entre compañías que
tengan por objeto distorsionar el libre juego de la competencia. Por ejemplo,
todas las empresas eléctricas contactan y se unen para fijar un precio muy
alto a la electricidad. Su objetivo final, por tanto, es proteger a los
consumidores de tácticas abusivas por parte de estas empresas.

4. Se reducen las desigualdades entre ricos y pobres

Las economías mixtas se apoyan en el estado del bienestar para reducir las
desigualdades entre ricos y pobres. Este estado del bienestar suele
financiarse a través de los impuestos ya que son una herramienta eficaz para
reducir la desigualdad mediante la redistribución de los ingresos. De esta
manera, las personas más ricas pagarán una mayor cantidad de impuestos
que las personas con menos recursos. El gobierno destinará todo este dinero
recaudado a diferentes programas con el objetivo de ayudar a las personas
que tienen rentas más bajas. Por ejemplo, proporcionándoles servicios
gratuitos como la sanidad y la educación, viviendas de protección oficial,
subsidios para desempleados o cualquier otro programa que tenga como
objetivo ayudarles.

Gracias al estado del bienestar se supera uno de los principales


inconvenientes de una economía de mercado pura, la cual solo premia a los
más competitivos o innovadores y deja a un lado a los grupos más
desfavorecidos.

Desventajas de la economía mixta


Una economía mixta también puede asumir todas las desventajas explicadas
en ambos sistemas económicos. Sólo dependerá de las características en las
que la economía mixta haga hincapié.

1. Falta de apoyo gubernamental

Si la economía goza de demasiada libertad, los grupos desfavorecidos como


los ancianos no recibirán suficiente apoyo del gobierno. Por el contrario, si la
economía ve una excesiva intervención del gobierno, las empresas se verán
desincentivadas para producir de forma eficiente. Es crucial para una
economía mixta encontrar un equilibrio.

2. Influencia indebida de las empresas privadas


Las empresas exitosas pueden presionar al gobierno para obtener más
subvenciones y exenciones fiscales. Además, las empresas privadas,
especialmente las grandes compañías como Bankia, pueden asumir más
riesgos porque saben que son demasiado grandes para caer. Es decir, el
gobierno las rescatará si caen en crisis económicas. Un ejemplo de ello
sucedió tras la crisis financiera del 2008 donde los principales bancos fueron
rescatados con el dinero de los contribuyentes mientras que bancos más
pequeños quebraron sin recibir esa ayuda.
Tras la Segunda Guerra Mundial, la mayor parte de los países de Europa Occidental
se decidieron a aplicar un nuevo sistema que intentaba combinar las virtudes de los
otros dos. Este nuevo sistema se conoce como economía mixta.

Origen e historia
Una fecha clave es el crack de 1929, que hizo entrar a los países economías de
mercado en una gran crisis (parecida a la del 2008). En esa época la mayoría de
países occidentales se enfrentaban a un desempleo sin precedente. JM Keynes ante
los problemas del mecanismo de mercado para salir de la crisis, escribió un libro
“Teoría de la Ocupación, el Interés y el Dinero” (1936) en el que explicaba que, en
momentos de crisis económica, el Estado podía intervenir aumentando sus
gastos, para así conseguir que las empresas no quebraran, que los trabajadores
mantuvieran sus puestos de trabajo y el consumo se pudiera mantener

La idea de un modelo económico mixto surgió a finales del siglo XIX, como parte
de diferentes propuestas político-económicas, como el Socialismo Democrático o
el Liberalismo Social, o de posturas económicas como las de John Stuart Mill
(1806-1873). Sin embargo, con el nombre de “economía mixta” el modelo
apareció en la Inglaterra del siglo XX, específicamente en la década de 1930,
primero como parte de las propuestas del socialismo cristiano y después del
partido laborista.

En buena medida, la economía mixta surgió en las naciones occidentales como


una estrategia para lidiar con las problemáticas sociales inherentes al libre
mercado, con el fin de evadir que la influencia local del marxismo y
del comunismo creciera y propiciara alzamientos revolucionarios. Sin embargo, el
éxito de la economía mixta en Europa sentó las bases para el estado de
bienestar que duró, al menos en el Reino Unido, hasta la llegada al poder de
Margaret Thatcher (1925-2013) en 1979.

Economía mixta
Sistema económico en el que el mercado se encarga de asignar los
recursos, pero
el estado interviene, en mayor o menor medida, para regular su
funcionamiento.
El escenario creado tras la Segunda Guerra Mundial obligó a la mayoría de los
países europeos, ante las limitaciones que presentaban la economía de mercado y la
planificación central, a buscar un sistema más eficaz, pero que mantuviera las
bondades de los otros dos.

Este nuevo sistema, denominado Economía Mixta, es actualmente el más


extendido en la mayoría de los países desarrollados, entre ellos España, con
significativas diferencias, dependiendo de su forma de aplicación y grado de la
intervención estatal.

Se considera a John Maynard Keynes el ideólogo y mentor de este sistema


económico, ya que fue este economista inglés (1883-1946) el primero en proponer
utilizar conjuntamente las señales del mercado y las directrices del estado para
resolver los problemas económicos.

A raíz de la publicación de su libro Teoría general de la ocupación, el interés y el


dinero (1936), donde alentaba a una política de intervencionismo estatal para
mitigar los efectos de una recesión económica, varios países, a partir de la década
de los años 30, pusieron en práctica su planteamiento para superar la crisis
iniciada en 1929.

Ventajas de la economía mixta


El modelo de economía mixta permite la participación privada en la producción, lo que se
traduce en la existencia de competencia, algo que revitaliza las finanzas del país. Sin embargo,
implica la propiedad pública en el sector manufacturero, en diferente medida, según cada caso;
con objeto de estar en disposición de responder a las necesidades de bienestar social. La
estabilidad de la economía se beneficia de esta dualidad y la sociedad, en su conjunto, se ve
más protegida.
En un modelo económico de este tipo, tanto empresas, como consumidores disfrutan de
importantes libertades que son importantes para ambos. Aunque el gobierno participa
activamente y proporciona apoyo, su control se limita, algo que en términos generales ayuda a
preservar la solidez estructural.
Las ventajas más importantes del sistema de economía mixta son:

 Las empresas privadas pueden decidir cómo administrar sus negocios.

 Los consumidores disfrutan de distintas opciones de compra.

 Existe una desigualdad de ingresos menor que en otros modelos económicos.


 Los monopolios están autorizados, pero siempre bajo la vigilancia del gobierno, que vela por la
justa competencia y evita que sea imposible para otros el acceder al mercado.

Desventajas de la economía mixta


Sin embargo, este modelo cuenta con algunas desventajas. Entre los principales inconvenientes
de la economía mixta es que este tipo de sistemas tiende a inclinarse más hacia el control
gubernamental y menos hacia las libertades individuales.
En la práctica, esto se traduce en imposiciones y restricciones tan estrictas que, en ocasiones,
terminan poniendo a algunas empresas fuera del mercado. Los requerimientos de regulación
gubernamental pueden también tener otro efecto: la paralización de determinados tipos de
producción. La consecuencia de este fenómeno sería el desplazamiento del equilibrio
económico. Un efecto nada deseable y complicado de controlar.
Otro aspecto negativo de la economía mixta es que el gobierno decide unilateralmente la base
imponible que se debe aplicar a cada tipo de producto. Esta forma de actuar puede causar el
descontento social, si la ciudadanía considera que los impuestos son demasiado elevados o se
han distribuido de forma injusta. Esto es algo que puede suceder a pesar de los beneficios que
aporte este tipo de gestión, ya que se derivan directamente hacia ellos en forma de servicios
públicos de transporte, sanidad, educación, comunicaciones, energía o seguridad.
Por otra parte, la falta de gestión de control de precios puede causar escasez de bienes,
circunstancia que, si no se supervisa es susceptible de resultar en una recesión.
Ventajas de la economía mixta
El modelo de economía mixta permite la participación privada en la producción, lo
que se traduce en la existencia de competencia, algo que revitaliza las finanzas
del país. Sin embargo, implica la propiedad pública en el sector manufacturero, en
diferente medida, según cada caso; con objeto de estar en disposición de
responder a las necesidades de bienestar social. La estabilidad de la economía se
beneficia de esta dualidad y la sociedad, en su conjunto, se ve más protegida.
En un modelo económico de este tipo, tanto empresas, como consumidores
disfrutan de importantes libertades que son importantes para ambos. Aunque el
gobierno participa activamente y proporciona apoyo, su control se limita, algo que
en términos generales ayuda a preservar la solidez estructural.
Las ventajas más importantes del sistema de economía mixta son:
 Las empresas privadas pueden decidir cómo administrar sus negocios.
 Los consumidores disfrutan de distintas opciones de compra.
 Existe una desigualdad de ingresos menor que en otros modelos
económicos.
 Los monopolios están autorizados, pero siempre bajo la vigilancia del
gobierno, que vela por la justa competencia y evita que sea imposible para
otros el acceder al mercado.
Desventajas de la economía mixta
Sin embargo, este modelo cuenta con algunas desventajas. Entre los principales
inconvenientes de la economía mixta es que este tipo de sistemas tiende a
inclinarse más hacia el control gubernamental y menos hacia las libertades
individuales.
En la práctica, esto se traduce en imposiciones y restricciones tan estrictas que,
en ocasiones, terminan poniendo a algunas empresas fuera del mercado. Los
requerimientos de regulación gubernamental pueden también tener otro efecto: la
paralización de determinados tipos de producción. La consecuencia de este
fenómeno sería el desplazamiento del equilibrio económico. Un efecto nada
deseable y complicado de controlar.
Otro aspecto negativo de la economía mixta es que el gobierno decide
unilateralmente la base imponible que se debe aplicar a cada tipo de producto.
Esta forma de actuar puede causar el descontento social, si la ciudadanía
considera que los impuestos son demasiado elevados o se han distribuido de
forma injusta. Esto es algo que puede suceder a pesar de los beneficios que
aporte este tipo de gestión, ya que se derivan directamente hacia ellos en forma
de servicios públicos de transporte, sanidad, educación, comunicaciones, energía
o seguridad.
Por otra parte, la falta de gestión de control de precios puede causar escasez de
bienes, circunstancia que, si no se supervisa es susceptible de resultar en una
recesión.
economía mixta, empresas de economía mixta, sistema de economía mixta

Fuente: https://concepto.de/economia-mixta/#ixzz8HR9plBMJ

Rol del Estado en una economía mixta


En una economía mixta, el Estado tiene un rol esencial. A continuación describimos
sus principales funciones:

 Marco jurídico: El Estado debe crear y asegurar un marco de leyes para que el mercado
pueda funcionar bien. Así por ejemplo, asegura la existencia y defensa de los Derechos de
Propiedad privada, establece canales de resolución de desacuerdos, etc.
 Regulación: El Estado interviene cuando existen fallas de mercado que impiden lograr un
resultado eficiente. Así por ejemplo, cuando existen bienes públicos como la defensa
nacional, el Estado se encarga de la recolectar los recursos y proveer de los servicios. La
regulación debe seguir ciertos principios para ser eficiente.
 Mejorar la distribución del Ingreso: El Estado busca alcanzar un sistema de reparto más
igualitario o al menos, asegurar un mínimo para que las personas puedan sobrevivir.
 Se encarga de la producción de algunos bienes y servicios: El Estado, ya sea por sí
mismo o contratando a empresas privadas, asegura la provisión de algunos bienes y
servicios que son necesarios para las personas pero que no son rentables para las
empresas. Por ejemplo, algunos gobiernos se encargan de la provisión de servicios de
telefonía en zonas aisladas.
 Fallos de mercado: Son situaciones donde el mercado no es capaz de asignar los recursos
de forma eficiente (la luz de las calles, el alcantarillado, etc)

ROL DEL ESTADO EN LA economía MIXTA

Las funciones fundamentales del Estado en un sistema de economía


mixta superan las que tenía asignadas en el sistema de economía de
mercado. Estas funciones son las siguientes:

El Estado por su parte es dueño de los medios de Producción ( materia


prima, capital, maquinaria etc.)

y el fija los precios de sus productos tratando de beneficiar a los


consumidores.

Los Particulares pueden producir lo que quieran (siendo licito), y los


precios son fijados en base a la oferta y la demanda. aunque tiene el
estado la facultad de restringir o regular el precio de ciertos productos.

 Establecer el marco jurídico-institucional:


 Suministrar bienes públicos
 Redistribuir la renta
 Suavizar la inestabilidad cíclica

El estado del bienestar


Se puede ampliar la información sobre este tema en nuestro artículo estado del
bienestar.
Como consecuencia de la evolución del sistema capitalista en los países occidentales
y de la enorme crisis de los años 30 del Siglo pasado, los países europeos implantan
este sistema de estado del bienestar a partir del fin de la II Guerra Mundial.
Básicamente es un sistema de economía de mercado, capitalista, pero donde el
Estado garantiza las necesidades básicas de la población en sectores que se
consideran sensibles, garantizando el acceso de todos a bienes como la sanidad, la
educación, la asistencia a desempleados y desfavorecidos.
Ello se hace a través de un sistema legal y burocrático, utilizando dinero público, para
poner a disposición de la población estas prestaciones que pueden ser:

 Prestaciones contributivas: en las que el beneficiario ha pagado por poder acceder a


ellas como la prestación por desempleo o la asistencia sanitaria cuando se presta a
los que han cotizado por ella.
 Prestaciones no contributivas: que se dirigen a personas que no han cotizado o
pagado por ellas pero tienen la necesidad de acceder a ellas, como la asistencia
social.

En este contexto existen prestaciones universales como la educación y la sanidad


que están al alcance de todos.

Rol del estado


El estado cumple un rol importante en la economía mixta ya que,
es el encargado de regular y garantizar el orden social, este
tiene la función de intervenir en el mercado para poder garantizar
la equidad y el orden en caso de existir la vulnerabilidad de los
derechos de propiedad privada. También interviene ante
situaciones de fallas de mercado, por ejemplo, ciclos económicos,
escasez de bienes públicos, entre otros.

El estado provee leyes de regulación para el correcto


funcionamiento del mercado y también actúa como benefactor a
la población, debido a que este puede suministrar de bienes o
servicios de primera necesidad a la sociedad.
El estado busca el desarrollo y crecimiento de la economía y
también regula la sociedad para lograr garantizar la equidad y
los derechos.

Ejemplos de economía mixta


Desde el punto de vista de la definición, todo país es una economía mixta. Sería
imposible que un país tuviera tanto una economía de mercado totalmente libre
como una economía dirigida. Incluso Estados Unidos, considerado líder en
economías de libre mercado, gasta una parte importante de su presupuesto en
intervenciones gubernamentales.
Veamos algunos ejemplos de países en los que el gobierno asume un papel
protagonista en la economía: Vietnam, Noruega y Singapur:

 Vietnam es una economía mixta en la que el gobierno mantiene el control


sobre industrias clave como la energía y las telecomunicaciones, pero
también permite la propiedad privada y la inversión extranjera.
 Noruega es una economía mixta en la que el gobierno desempeña un
papel importante en la economía del país, siendo propietario de industrias
clave como la producción de petróleo y gas, pero también fomenta la
empresa privada mediante diversas políticas e incentivos. El gobierno
posee una parte sustancial de los recursos naturales del país y ha utilizado
los ingresos para financiar servicios públicos como la sanidad y la
educación. Noruega también tiene una economía de mercado muy
regulada, con leyes laborales estrictas e impuestos elevados.
 Singapur es una economía mixta con un fuerte énfasis en los principios
del libre mercado, pero con la participación del gobierno en áreas clave
como la educación, la sanidad y la vivienda pública.El gobierno
desempeña un papel activo en el fomento del crecimiento económico y la
diversificación mediante inversiones en investigación y desarrollo,
infraestructuras y educación. Singapur es conocido por su gobierno
altamente eficaz y transparente, su escasa corrupción y sus políticas
favorables a las empresas, que atraen la inversión extranjera. Sin embargo,
el gobierno también ejerce un importante control sobre los medios de
comunicación y restringe la oposición política.

Ejemplos
En la actualidad muchos países se han sumado al tren de operar
mediante la economía mixta, pero estos son los máximos
exponentes de este movimiento, gracias a sus grandes riquezas:

 India
 Hong Kong

 Estados Unidos

 Canadá

En cada uno de ellos es totalmente aplicable el famoso «Estado


de Bienestar», en el cual muchas de las decisiones se toman en el
mercado, pero el Estado también interviene al momento de
ajustar una serie de objetivos que procuren alcanzar un pleno
bienestar en la sociedad. El Estado no va a escatimar en gastos
para facilitar los recursos a su pueblo, con el firme propósito de
asegurarles una mejor calidad de vida con aquellos bienes que no
pueden apreciar en los mercados, muchas veces por su alto
precio. Entre esos recursos se encuentran tales como:

 Servicios de higiene y salud


 Educación básica
 Vivienda
 Alimentación
 Dinero para desempleados
Ejemplos de países con modelos de economía mixta

Reino Unido es un ejemplo de economía mixta. Su base es el libre mercado,


pero el gobierno controla la mayor parte de la industria del cuidado de la salud del
país. Brinda cobertura, emplea a la mayoría de los médicos y hospitales, determina
cómo brindar los servicios, establece tarifas para el tratamiento y ve por el
bienestar de sus beneficiarios.

China, considerara muchas veces como una economía socialista, se ha venido


abriendo al libre mercado y es otro caso de economía mixta moderna. Su
gobierno, altamente centralizado, mantiene el control de muchas empresas
estatales, al punto de que el Estado casi controla buena parte de las industrias
productivas del país. Pero su éxito a ojos de la economía mundial es que estas
industrias operan dentro del contexto de libre mercado, teniendo lo mejor de
ambos mundos: una protección del gobierno y una visión de propiedad privada y
empresarial de éxito.

En la práctica, todas las economías en funcionamiento son una forma de


economía mixta en un cierto grado. Ni los mercados libres puros ni las
economías de mando o socialistas han probado históricamente ser modelos
exitosos para distribuir recursos en la sociedad.
¿Qué es el imperialismo?
Cuando hablamos de imperialismo, hacemos alusión a una doctrina política
que establece la relación entre las naciones en términos de superioridad y
sumisión, en las que una domina y ejerce autoridad sobre otra. Dicha dominación
puede darse mediante técnicas de colonización (poblamiento, explotación
económica, presencia militar) o mediante la subordinación cultural (también
llamada aculturación).

Los imperios han existido desde los inicios de la humanidad, y sus dinámicas de
conquista han sido siempre más o menos las mismas. Sin embargo,
por imperialismo usualmente nos referimos al período de expansión europea
en el mundo entero, que tiene su inicio en el siglo XV y se prolonga hasta
la Edad Contemporánea, cuando tras la Segunda Guerra Mundial se da un
complejo proceso de des-colonización en África y Asia, principalmente, pues las
colonias americanas lo hicieron a través de guerras de independencia en los siglos
XVIII y XIX.

Durante esta etapa de colonización mundial, los grandes reinos europeos


establecieron centros políticos, económicos y militares de control y acopio de
recursos en distintas latitudes: el continente americano recién descubierto, el
continente africano saqueado para alimentar la industria esclavista, y el continente
asiático, del que se extraían insumos comerciales exóticos y de mucho valor. El
período más intenso de este proceso de expansión imperial lo constituyeron las
décadas entre 1880 y 1914, en las que se dio el llamado reparto de África.

La relación entre el Imperio y sus colonias es, esencialmente, de dominación


política y económica, ya sea a través de la fuerza bruta (la conquista militar) o la
implantación de leyes que favorecen a la metrópoli, imponiendo a la colonia
restricciones, impuestos o términos comerciales injustos, pero que según la lógica
imperial serían el costo por formar parte de “una sociedad más avanzada”. Pero la
verdad es que es una forma de granjearse un monopolio de bienes y recursos.

Fuente: https://concepto.de/imperialismo/#ixzz8HLf4C0LJ

El imperialismo es la doctrina que defiende la dominación de


una nación o Estado sobre otros territorios y pueblos a través
de la adquisición de tierras o la imposición de un control
político y económico. Por lo tanto, conlleva la expansión de la
autoridad del Estado más allá de sus fronteras. El término “imperio” y sus
ejemplos tienen largo recorrido en la historia, pero el imperialismo como
sistema global puede acotarse al periodo 1875-1914, conocida como “la era
de los imperios”.
"Imperialismo". Autor: Equipo editorial, Etecé. De: Argentina. Para: Concepto.de.
Disponible en: https://concepto.de/imperialismo/. Última edición: 5 de agosto de 2021.
Consultado: 27 de octubre de 2023

Fuente: https://concepto.de/imperialismo/#ixzz8HLfC6yWB

¿Qué es imperialismo económico?


También es el dominio y control de un país desarrollado sobre otro menos
desarrollado y que no usa medios militares. Se limita solamente a
relaciones económicas en las que el país desarrollado es un participante
dominante dentro del país menos desarrollado.

sus características
La idea del imperialismo económico es similar a la anterior, y no hace
referencia los aspectos militares o políticos. Hace referencia a solamente un
dominio económico, es decir, una gran influencia en aspectos comerciales y
que puede manifestarse en dependencia. Sus características son estas:

1. Dominación
Un componente de dominación. Es decir una situación de supremacía de
una nación sobre otra. ‘Hegemonía’ es la palabra favorita para expresar
esto. ¿Qué tanto dominio o dependencia? Difícil de determinar
razonablemente.

2. Dominación económica
La exclusión de dominación física, como la ocupación de su territorio o la
presencia militar sustancial. Se refiere a solamente dominación económica,
a poder económico que sujeta a una nación por parte de otra.
De nuevo, es difícil determinar en qué momento comienza el dominio
económico. Esto es especialmente cierto con economías abiertas y
globalizadas.

3. Dominio e inversión extranjera


Un mecanismo por el que se cree que se realiza el imperialismo económico
y que es el capital extranjero que entra a un país.

Proviniendo de otro, el capital extranjero es invertido en el país


«dominado» en diversas maneras. Generalmente fundando empresas,
comprándolas o por medio de fusiones entre empresas locales y
extranjeras.

Ese capital extranjero tiene diversas fuentes —países variados y empresas


distintas. Para que exista imperialismo económico tendrían que provenir en
su gran mayoría de un mismo país. Se da por supuesto que esa inversión
extranjera causa daños innumerables en el país receptor. Y que lo dañan
ejerciendo influencia sobre el gobierno y debilitando a la economía en
general.

Características generales del Imperialismo

Los Estados que la practican conquistan a otros territorios para alcanzar el


rango de potencias mundiales.

No busca la transformación cultural de las zonas controladas, sino dominarlas


con fines expansionistas.

Atadura económica de las naciones subdesarrolladas mediante la adquisición


de grandes deudas, por parte de los países potencia.

Instalación de centros de producción en países subdesarrollados para obtener


mano de obra barata y consolidar su control económico.

Imposición de su dominio a otras naciones mediante el derrocamiento de


gobiernos no capitalistas e imposición de gobernantes controlados por el país
dominante.
Imposición de tratados de libre comercio, por parte de los países dominantes,
para la manipulación política y económica de otros países, con fines
expansionistas.

Origen
Se entiende por Imperialismo al período histórico en
el que las principales potencias del mundo
establecieron dominación efectiva sobre amplios
territorios mediante el uso de la fuerza militar,
política o económica.
Este período comienza con la madurez del capitalismo, hacia finales del siglo
XIX, y se prolonga hasta los años posteriores a la Primera Guerra Mundial.

El concepto Imperialismo se consolida a finales del siglo XIX, con el


surgimiento de la Revolución Industrial. A partir de ese momento ha surgido
una rivalización de las potencias por los nuevos mercados mundiales,
principalmente en la industria armamentista. Surge a partir de la expansión
de potencias como: Inglaterra, Bélgica, Francia, Alemania, Holanda, Italia,
Portugal, España y Japón y Estados Unidos. Para comprender mejor el
desarrollo de esta etapa histórica es importante conocer los dos grandes
periodos en los que se divide:

Revolución científico tecnológica

A partir del periodo de Ilustración surgió un importante desarrollo científico-


tecnológico que buscaba la obtención de materias primas y el aumento de la
producción; esto fue posible gracias al nacimiento de las nuevas Repúblicas, al
crecimiento de la burguesía y a la Revolución Industrial. Este periodo se
caracterizó por su carácter positivista, es decir, se confió plenamente en el
avance del hombre a través de la ciencia y de la técnica.
Expansión imperialista

A partir de la Revolución Industrial y de la competencia por la obtención de


materias primas, las naciones imperialistas entraron en una etapa de rivalidad
que desembocó en un nuevo Colonialismo, dando origen a la Primera Guerra
Mundial. Desde ese momento, los principales imperios ocuparon los
siguientes territorios:

El Imperio Austrohúngaro ocupó parte de Polonia, Serbia, Ucrania e Italia.

Francia colonizó parte de África, Túnez, Argelia y Marruecos.

Inglaterra tuvo presencia en Egipto y controló el Canal de Suez, el cual le dio


acceso a los mercados de Europa, África y Asia; también tuvo presencia en
Sudáfrica y Belice.

Bélgica colonizó El Congo.

Alemania ocupó África Oriental (actualmente Tanzania, Ruanda y Burundi).

Japón tomó parte de la actual Corea (antes perteneciente a Rusia).

Estados Unidos invadió México, controló Alaska y Hawai, e influyó en los


territorios de Cuba y Puerto Rico.

El antecedente directo del imperialismo, fue el colonialismo, éste se caracterizó


por la búsqueda de territorios para imponer una dominación militar y explotar los
recursos naturales, como consecuencia de la industrialización y llevada a cabo por
parte de las potencias europeas. Cabe aclarar que el colonialismo sufrió una crisis
que llevó a la independencia de algunas colonias, el caso más conocido fue el de
Estados Unidos, mismo que tendría un desarrollo económico importante. Después,
el sistema capitalista buscó monopolizar la industria y el comercio a escala global.

A partir de las revoluciones burguesas y de la manifestación de nuevas formas de


pensar, de plantear la economía con base en postulados liberales, las leyes,
reglamentos e instituciones, tendieron a llevar a cabo el proyecto de la burguesía
(supresión de los gremios, disolución del régimen señorial, eliminación de aduanas
interiores). La industrialización, hasta mediados del siglo XIX fue, en cierta medida
proteccionista y los Estados nacientes en su afán de generar ingresos para las
arcas públicas y el enriquecimiento del Estado optaron en un primer momento por
el proteccionismo. Con el paso de los años, los Estados mantuvieron una política
de doble sentido, por un lado, postularon en cierta forma la apertura de la
economía, y por otro, mantuvieron características proteccionistas, esto quiere
decir que tomaban decisiones a conveniencia, siempre y cuando prevalecieran sus
intereses económicos. Según el autor Gerschenkron (economista), el Estado se
convirtió en un agente más, que apoyó políticamente el desarrollo industrial, esto
quiere decir que fue parte esencial en el desarrollo de un sistema capitalista
(Immanuell Wallerstein), protegiendo y potenciando los intereses industriales.

En un principio, se propuso crear una moneda y un sistema de pesas y medidas


únicas. Además de la regulación de las relaciones comerciales, surgiendo para
este efecto, figuras tales como la responsabilidad limitada o las sociedades
anónimas (normativas para el desarrollo de un comercio estable y equitativo).

¿Qué es el imperialismo?
El término “imperialismo” hace alusión a las prácticas políticas que establecen una
relación entre naciones en términos de dominación y subordinación. En el
imperialismo, una de las naciones es sometida a la otra, que ejerce la autoridad en
materia política, militar, económica y cultural. Así se impone una agenda que
favorece a la nación que ejerce la dominación.

La dominación imperial puede darse, por un lado, mediante la colonización,


que implica el poblamiento del territorio colonizado, la explotación económica y la
presencia militar.

Por otro lado, la dominación imperial puede consolidarse mediante la


subordinación o adaptación cultural (llamada en algunos casos “aculturación”).
El gobierno imperial puede ser directo (si la autoridad imperial se impone
políticamente en el territorio sometido) o indirecto (si se mantienen las formas de
gobierno local bajo el control imperial).

El imperialismo es un fenómeno político de larga data en la historia de la


humanidad y que ha contribuido a dar forma al panorama mundial
contemporáneo. Muchas de las relaciones desiguales de la actualidad se derivan
de las prácticas imperiales del pasado. Algunos críticos consideran que el
imperialismo está vigente por el modo en que algunas potencias imponen su
agenda económica o emplean sus fuerzas armadas para alcanzar objetivos
estratégicos.

Ver además: Expansionismo

Historia del imperialismo


Origen de los imperios
Los imperios han existido desde la antigüedad y sus dinámicas de conquista
han seguido patrones similares. Por ejemplo, el Imperio egipcio, el Imperio
persa, el Imperio macedónico de Alejandro Magno o el Imperio romano
conquistaron por la fuerza y ejercieron un dominio político y económico sobre
amplias regiones del mundo conocido.

El Imperio romano en particular logró expandirse por casi la totalidad de Europa, el


norte de África y el Oriente Medio. En estos períodos de dominación imperial se
impusieron o adoptaron religiones, lenguas y costumbres del centro imperial
en los territorios sometidos. En muchos casos, la combinación de las culturas
colonizadora y colonizada llevó al sincretismo, formas culturales mixtas que
permitieron la supervivencia de muchas prácticas y creencias de las sociedades
subordinadas.

Aunque muchos historiadores emplean el término imperialismo para referirse a


estas experiencias imperiales antiguas, otros lo reservan para hablar de la
expansión europea iniciada en el siglo XV o, más concretamente, para la
dominación política y económica de regiones de Asia y África a partir de mediados
del siglo XIX.

El imperialismo europeo
La expansión europea por el mundo entero comenzó en el siglo XV y se
prolongó hasta el siglo XX. España, Portugal, Países Bajos, Inglaterra y Francia
protagonizaron las primeras etapas de colonización y gobierno imperial,
especialmente en América, y las colonias americanas alcanzaron su
independencia luego de cruentas guerras a fines del siglo XVIII y comienzos del
XIX.

Durante el siglo XIX y comienzos del XX, una nueva forma de imperialismo
promovido por el capitalismo industrial y las ideologías nacionalistas provocó el
reparto de buena parte del mundo, especialmente en África, Asia y Oceanía, entre
naciones como Inglaterra, Francia, Alemania, Italia, Rusia e incluso Estados
Unidos y Japón. Este período fue sucedido por una época de luchas por la
independencia y procesos de descolonización en Asia y África que tuvieron lugar
mayormente tras la Segunda Guerra Mundial.

Durante la etapa del imperialismo, los grandes estados europeos impusieron


controles políticos, económicos y militares a otras naciones menos aventajadas.
Así lograron hacer acopio de sus recursos y vender en ellas productos elaborados
en la metrópoli o en otras colonias.

Ver además: Colonización de América


Territorios sometidos al imperialismo europeo
El período más intenso de la expansión imperial tuvo lugar entre 1880 y
1914. Muchos historiadores consideran a la Primera Guerra Mundial como un
conflicto incentivado en buena medida por la competencia imperial de esta época.
Los principales destinos coloniales de Europa fueron:

 América. Fue en gran medida conquistada y colonizada a partir de finales del siglo XV.
Era fuente de materias primas, especialmente oro y plata, y luego de las Guerras de
Independencia dejó de tener protagonismo para el expansionismo imperial europeo. Una
de sus naciones, Estados Unidos, llegó a convertirse a su vez en una potencia
expansionista.
 África. Desde temprano fue fuente de mano de obra esclava y, cuando comenzó a ser
abolida la esclavitud, siguió siendo explotada para la obtención de recursos mineros o
exóticos y para favorecer las comunicaciones con Asia (como fue el caso de Egipto que
conectaba el mar Mediterráneo con el océano Índico).
 Asia. Los bienes exóticos y de lujo de origen asiático gozaban de mucho valor en Europa
(especias, porcelana, té, seda) y fueron uno de los objetivos del imperialismo en dicho
continente. Sin embargo, también se extraían en Asia otras materias primas para el
consumo y la industria, se explotaba mano de obra y se abrían mercados para productos
elaborados. Uno de los ejemplos más significativos de imperialismo colonial en Asia fue el
Raj británico en India.

El reparto de África
En la conferencia de Berlín casi la totalidad de África se ordenó según los intereses europeos.

Entre 1884 y 1885, en plena fase de expansión europea, las potencias


imperialistas acordaron el reparto del continente africano en la Conferencia
de Berlín. Allí estaban presentes las 12 naciones más poderosas de Europa (Gran
Bretaña, Francia, Alemania, Bélgica, Portugal, Países Bajos, Austria-
Hungría, España, Rusia, Italia, Suecia-Noruega y Dinamarca), junto al Imperio
otomano y Estados Unidos.

Al final de la conferencia, casi la totalidad del continente africano pasó a estar


distribuida según los intereses europeos, sin tener en cuenta las diferencias
étnicas entre las poblaciones locales ni sus necesidades. Por eso, hasta el día
de hoy varias naciones africanas tienen fronteras totalmente rectas, pues fueron
trazadas sobre mapas con escuadra y cartabón.

Solo dos naciones africanas permanecieron libres de la dominación imperial


europea antes de los procesos de descolonización: Liberia y Abisinia (Etiopía). El
resto se lo repartieron entre Gran Bretaña, Francia, Alemania, Bélgica, Italia,
Portugal y España.

Fuente: https://humanidades.com/imperialismo/#ixzz8HRTJs5su
Imperialismo

No es un sistema de gobierno, sino más bien una actitud, la


cual consiste en en que un país controle otras regiones o
incluso países fuera de su jurisdicción por medio del poder
militar o económico.

Dentro de los beneficios de esto, podemos encontrar que:

1. Mayor desarrollo tecnológico: Ya sea la ciencia,


agricultura, minas, electricidad, o cualquier otra área se ve
beneficiada al país poseer mayores cantidades de
recursos.
2. Mejora en la economía de una región en especifico: Los
imperios suelen destinar gran parte de sus beneficios
económicos a una región en especifico, ya sean las
grandes ciudades o la capital, lo cual causa un gran
comercio.

Y entre las desventajas están:

1. Desigualdad social y económica: Aquella región


controlada y sus habitantes simplemente no serán capaces
de aspirar el estilo de vida de aquellos que viven en la
capital, ya que buena parte de su producción es destinada
a otras regiones.

2. Opresión social y política: Como dijimos al inicio, el


imperialismo consiste en un país controlando a otra región
por medio del poder militar y económico. Esto trae como
consecuencia que las decisiones políticas sean tomadas
no por personas de la región sino por aquellas que
controlan el imperio.

Consecuencias del fenómeno imperialista


A Positivas: 

Cierto desarrollo industrial de las colonias: mecanización, ferrocarril, mejora de su agricultura, etc.

 Disminución del analfabetismo con la llegada de maestros y misioneros.

 Mejora sanitaria pues los europeos llevaron medicinas para combatir enfermedades endémicas.
Así aumentó la población.

B. Negativas:

 Económicas: explotación de las riquezas de las colonias y creación de monocultivos de


plantaciones, muy dependientes de la demanda del mercado.

 Sociales y culturales: ruptura de la organización social indígena (clanes, tribus) y sustitución de


su cultura por la cultura occidental dominante.

 Además, muchas fronteras de estos países fueron trazadas desde un despacho por los europeos,
sin respetar la ubicación de estos pueblos, siendo fuente frecuente de conflictos tribales

.  Racismo: la población negra indígena fue marginada de los órganos de poder pues se admitió la
superioridad del hombre blanco. En suma, predominan las consecuencias negativas sobre las
positivas.

A continuación se mencionan algunos aspectos


positivos y negativos del imperialismo:
Aspectos negativos del imperialismo

 Provoca la desigualdad social y económica


 Puede llevar a la extinción a muchas culturas
 Se fomenta la opresión social como un mecanismo normal
 Mediante esta actitud se violan muchos derechos

Aspectos positivos del imperialismo

 Promueve la unión de muchas regiones


 Contribuye con el desarrollo tecnológico y en otros
contextos
 Contribuye con el progreso económico en algunos
aspectos
 Permite aumentar la producción agrícola
Aspectos negativos:
•El imperialismo uso la fuerza y la represión hizo que las
economías coloniales dependieran de las necesidades de
los países metropolitanos
extinción de la cultura

Aspectos positivos:
•Creo sistemas gubernamentales
•Elimino trafico de esclavos
•Unió grandes zonas compuestas por varias regiones

Imperialismo económico
Redactado por: Guillermo Westreicher

Revisado por: José Francisco López

Actualizado el 1 febrero 2020

El imperialismo económico es el dominio de una nación sobre otra menos


desarrollada. Esto, sin tener que recurrir a medios políticos ni militares, sino solo la
influencia de las relaciones comerciales.

Es decir, nos referimos a un tipo de hegemonía que se puede ejercer por la


dependencia económica de un país respecto a otro (que usualmente es una
potencia).

Visto de otro modo, esta clase de imperialismo se da cuando, por medio de un


condicionamiento económico, el gobierno de una nación influye en las decisiones
que se dan en otro territorio.

Este fenómeno suele relacionarse mucho con la influencia que ejercen potencias
mundiales como Estados Unidos o China sobre países menos desarrollados. De esa
forma, se buscan fortalecer lazos diplomáticos y comerciales, consolidando a la vez
un dominio geopolíticamente estratégico.

Cabe señalar que cuando cuenta con una estructura formal (como el puesto de
virrey) y no se requirió del uso de la fuerza militar, al imperialismo se le
denomina colonialismo.
Formas de ejercer el imperialismo económico
Algunas formas de ejercer el imperialismo económico podrían ser:

 Inversión extranjera directa: El país A realiza una importante inversión en B, por ejemplo,
en una obra de infraestructura. Pero a cambio quizás solicitará un permiso para establecer
una base militar en el territorio de B.
 Créditos o ayudas económicas: Una potencia mundial puede otorgar un crédito a un país
en vías de desarrollo, pero a cambio de que este siga determinadas pautas en su política
monetaria y fiscal.
 Fusión o adquisición de empresas: Puede ser que una franquicia extranjera adquiera una
marca o empresa local. De ese modo, podría llegar incluso a dominar el mercado (incluso
con un poder monopólico), influenciando en la oferta y, por ende, en el precio del
producto en cuestión.

Ejemplo de imperialismo económico


Un ejemplo de imperialismo económico puede ser el Plan Marshall, mediante el
cual Estados Unidos trató de facilitar la reconstrucción y recuperación de Europa
tras la Segunda Guerra Mundial.

Este plan se desplegó mediante ayudas económicas, con el objetivo de expandir la


influencia estadounidense en el viejo continente, reduciendo además barreras al
comercio. Esto, para frenar el avance de ideas comunistas. Así, las naciones aliadas
recibieron más ayuda per cápita que los antiguos miembros del Eje o aquellas
naciones que habían permanecido neutrales durante el conflicto.

Estados Unidos buscaba con este plan impulsar el desarrollo de Europa, pero
también consolidar lazos diplomáticos y expandir las ideas del libre comercio.

Es un hecho que siguen existiendo países imperialistas, Estados Unidos de


América es el ejemplo más claro, pero también tenemos la intervención de China
en países vecinos y en África, Rusia y su intervención en Bielorrusia y Ucrania;
otros países que tienen ansias imperialistas tenemos a Turquía que de forma por
demás imprudente tiene pugnas territoriales con Grecia y Siria con el riesgo de
desencadenar una guerra regional, también Arabia Saudí que interviene en
Yemen y que junto a Turquía fomentan la inmigración ilegal a Europa para
islamizar el continente y controlarlo bajo el beneplácito de sus gobiernos
pusilánimes.
 China, está conquistando el mundo, oriente que es el futuro de la humanidad
y ya lo controla, el resto del mundo tiene una pugna con USA
 USA actualmente es un imperio en declive en menos de una década se
desmembrara y su comercio exterior será en Euros o Yuanes, por falta de
confianza.
 RUSIA quiere recuperar el espacio de la URSS, su principal musculo son las
armas y los recursos de gas y petróleo.
 ALEMANIA a través de Europa, su política es anexionar países a la CEE, y para
situarlos a través de las regulaciones del mercado común europeo
 JAPÓN, su gran baza es la alta tecnología, en biología y robótica, que están
en otro nivel y otra galaxia. (muy adelantados del resto del mundo).

I El imperialismo del capital


La lógica del capital es de acumular ganancias lo que, para
el, significa el motor y el fin de la economía y por eso
necesita un control siempre mas estrecho de las riquezas
del mundo. A este propósito, el capital, se apropió y
exploto el trabajo y desarrollo siempre nuevas tecnologías
para mejorar la productividad, últimamente las de la
informática y de las comunicaciones, permitiendo una
globalización real de su actuación. El capitalismo no
necesita hoy de ser colonialista y de ocupar territorios.
Basta de controlar espacios económicos, es decir los
mecanismos de funcionamiento de la economía. Los
ejemplos mas visibles son las normas de la Organización
Mundial del Comercio, es decir la libre competencia
globalizada que de hecho da el poder a los poderosos; a las
medidas impuestas a las economías nacionales por el FMI
o el Banco Mundial, y muchos otros.
Actualmente es el capital financiero que predomina sobre
el capital productivo, es decir los bancos, seguros, fondos
de pensión. Este capital impone su lógica de ganancia, sin
preocuparse de otros factores. Por eso todo tiende que
trasformarse en mercancía. Para controlar mejor, hay
ventajas a una fragmentación de los espacios
(desmantelamientos de ciertos estados o lo que se llama la
descentralización). De hecho se concentra el poder de
decisión económica tanto como la riqueza en tres lugares
principales, que se llaman la triada : Estados Unidos,
Europa, Japón.
Frente a las crisis tanto del capital productivo
(sobreproducción, por ejemplo de carros) y financiera
(crisis de Méjico, Argentina, Rusia, Asia, etc.) el
capitalismo contemporáneo esta buscando nuevas
fronteras. No son geográficas sino sectoriales. La primera
es la agricultura campesina. Se trata de transformar la
pequeña y mediana producción en grandes entidades de
tipo productivista y capitalista, porque los pequeños
campesinos no contribuyen o muy poco, a la acumulación
del capital. Por eso se debe concentrar la propiedad de la
tierra y realizar verdaderas contrareformas agrarias. Se
trata de la apropiación de grandes extensiones por
empresas multinacionales, en particular para monoculturas
(soya, eucaliptos, azúcar, etc.) o del control total del
mercado, tanto de los insumos, como de la
comercialización de los productos agrícolas por las
mismas compañías del agrobusiness.
Hasta la segunda guerra mundial, hubieron guerras inter-
imperialistas, como entre Alemania y Japón y los aliados.
Hoy, la situación esta totalmente cambiada, porque los
mecanismos de apropiación de ganancia por el capital no
exigen mas territorios sino espacios económicos. Existe
una competencia feroz en este campo, pero la guerras
"calientes" son exportadas a las periferias, como Irak,
Afganistán, Colombia, Sudan, Congo, etc.
El resultado global de la lógica del imperio capitalista es
catastrófico para una gran mayoría de la humanidad.
Jamas tantas riquezas han sido producidas y jamas hemos
tenido tantos pobres en el mundo. Las consecuencias son
sociales y humanas : una persona muere de hambre en el
Sur, cada cuatro segundos. Por otra parte la destrucción
del clima es un asunto que nadie puede negar hoy.
¿Qué es la plusvalía?
La plusvalía, plusvalor o supervalía es un término propio de la filosofía
económica marxista, o sea, propuesta por Karl Marx (1818), y su crítica a los
economistas clásicos como Adam Smith (1723-1790) o David Ricardo (1772-
1823), en cuyas obras ya aparecía enunciado, pero no definido, este concepto.

La plusvalía puede entenderse como el equivalente monetario (o sea, en dinero)


del valor adicional a su fuerza de trabajo que produce un trabajador, y que el
burgués se apropia o le “extrae”, con lo cual puede tener lugar el proceso de
acumulación capitalista.

En términos más simples, la plusvalía es la porción de producción que no le es


remunerada a los trabajadores, sino que forma parte de la ganancia del patrono.
Se concibe como la diferencia entre el valor del total producido y el salario
recibido por los trabajadores.

Esto se explica, según la teoría marxista, porque el capitalismo es un sistema de


producción de plusvalía, más que un sistema de producción de bienes
consumibles.

Así, cuando el trabajador en la fábrica trabaja una cantidad determinada de horas,


recibe a cambio un salario que no equivale a la producción que llevó a cabo
durante su jornada, sino al valor de su fuerza de trabajo, o sea, a lo que cuesta
tenerle allí trabajando a diario y garantizar su descendencia (que eventualmente le
reemplazará), lo cual es necesariamente menos.

De esta manera, los patrones se benefician con ese “extra” de producción


que otros trabajaron para ellos. Eventualmente lo reciben como dinero que se
acumula para ellos y del cual pueden extraer sus ganancias, invertir en
nuevos proyectos, etc.

Plusvalía

Una plusvalía es el incremento del precio de mercado de un valor. Se produce cuando el


precio al que cotiza un activo financiero es mayor al que se pagó en su adquisición (por lo
que, si se vendiese, se haría efectiva una ganancia).

Mientras se mantiene el activo, son plusvalías potenciales o latentes; la venta del mismo
supone la realización de éstas, al hacerse efectivos los beneficios.
Características de la plusvalía
Entre las principales características de la plusvalía podemos
destacar que:

 Es aquel valor que genera un trabajador por encima de


su esfuerzo laboral.
 Otorga un beneficio económico al empleador.
 Cuenta como una inversión, es decir, se capitaliza
 Es el motor del sistema capitalista.
 Desarrollado por Karl Marx a finales del siglo XIX.
 La exposición de este término busca exponer la
explotación del sistema capitalista

 Karl Marx (1974) Teorías de la plusvalía. (Volumen 2). Alberto


Corazón.
 (1986) ¿Qué es la plusvalía? (Primera edición). Progreso.
 Karl Marx (1999) Capital, trabajo y plusvalía. (Primera edición).
Longseller.

Características
Desde un punto de vista tributario, la plusvalía está gravada como
impuestos, de hecho, el incremento de valor del bien se crea directamente
con el hecho imponible ya sea por transmisión de un bien o por otro motivo.

Las plusvalías son gravadas en el impuesto sobre la renta de las personas físicas y
en el impuesto sobre sociedades, dependiendo de la naturaleza del sujeto
pasivo. A veces, la plusvalía es económica a causa de la inflación.
Si hablamos de una venta de un bien inmueble, el pago de la plusvalía
municipal se realiza en el Ayuntamiento del lugar donde se encuentra el bien
y tiene carácter anual.

Los requisitos a presentar son: la referencia catastral de la vivienda que


aparece en el Impuesto sobre bienes inmuebles, la fecha exacta de compra de la
vivienda y la fecha en la que se prevee la venta y en la oficina tributaria
municipal harán el cálculo.

La plusvalía es la ganancia que el capitalista espera obtener por su inversión. El


problema radica en que esa ganancia de la venta retorna al capitalista y no al trabajador que puso
su mano de obra.

Según el economista y pensador Karl Marx, la plusvalía es un robo enmascarado que contribuye a
la explotación laboral y al enriquecimiento del capitalista, que podría desencadenar en
monopolios y sistemas oligárquicos.

Sin embargo, para el economista Adam Smith el trabajador es libre de elegir un empleo donde le
paguen un mejor sueldo: a mayor oferta de puestos de trabajo, mayores pueden ser los sueldos
para los trabajadores.

La realidad ha demostrado que, si hay muchas personas sin trabajo, la demanda de empleos
aumenta y la oferta de salarios disminuye, lo cual resulta ventajoso para el capitalista.

A fin de refutar esa realidad, el capitalismo sostiene un crecimiento ilimitado de las


corporaciones, a pesar de que los recursos del planeta son limitados y no pueden proveerse de
manera infinita, como tampoco puede procesarse tanta contaminación consecuente del sistema
de producción y de consumo masivo.

Fuente: https://humanidades.com/capitalismo/#ixzz8HRM89hZf

¿Qué es la plusvalía?
La plusvalía es un término utilizado en economía y finanzas para referirse al aumento del valor
de un activo o propiedad con el tiempo. Se trata de una medida de la rentabilidad de una
inversión, que se calcula restando el precio de venta actual del activo o propiedad del precio
de compra original.
La plusvalía puede ser generada por diversos factores, como el aumento de la demanda del
mercado, la mejora de la infraestructura en la zona donde se encuentra la propiedad, la
inflación, entre otros. Es importante destacar que la plusvalía no es una ganancia real hasta
que se vende el activo o propiedad, ya que el aumento de valor solo es una estimación.
La plusvalía es un indicador importante para los inversores y propietarios de bienes raíces, ya
que les permite evaluar la rentabilidad de su inversión y tomar decisiones informadas sobre la
compra, venta o mantenimiento de sus activos. Además, la plusvalía también puede tener un
impacto en los impuestos que se deben pagar por la propiedad, ya que algunos países gravan
la ganancia de capital generada por la venta de bienes raíces.
Características de plusvalía.
1. La plusvalía es un término utilizado en el ámbito financiero y económico para referirse al
aumento del valor de un activo o propiedad con el tiempo.
2. Se puede calcular la plusvalía de una propiedad restando el precio de venta actual del precio
de compra original.
3. La plusvalía puede ser generada por diversos factores, como la demanda del mercado, la
ubicación de la propiedad, las mejoras realizadas en la propiedad, entre otros.
4. La plusvalía es un indicador importante para los inversores, ya que les permite evaluar el
potencial de ganancias de una propiedad a largo plazo.
5. La plusvalía también puede ser utilizada como un indicador de la salud económica de una
región o país, ya que refleja el crecimiento y desarrollo de la zona.
6. La plusvalía puede ser afectada por factores externos, como la inflación, la tasa de interés y la
situación política y económica del país.
7. La plusvalía puede ser utilizada como un criterio para la valoración de impuestos sobre la
propiedad.
8. La plusvalía puede ser utilizada como un criterio para la toma de decisiones de inversión, ya
que permite evaluar el potencial de ganancias de una propiedad a largo plazo.
9. La plusvalía puede ser utilizada como un criterio para la toma de decisiones de compra o
venta de una propiedad, ya que permite evaluar el valor actual y potencial de la propiedad.
10. La plusvalía es un concepto importante en el mercado inmobiliario, ya que puede influir en la
oferta y demanda de propiedades y en los precios de las mismas.
Ventajas de plusvalía
Las ventajas principales de la plusvalía son:
1. Incremento del valor de los bienes: La plusvalía permite que los bienes, como los
inmuebles, aumentan su valor con el tiempo, lo que significa que los propietarios pueden
obtener una ganancia significativa si deciden venderlos.
2. Generación de riqueza: La plusvalía puede ser una fuente importante de riqueza para los
propietarios de bienes, ya que les permite acumular activos valiosos y aumentar su patrimonio
neto.
3. Estímulo a la inversión: La posibilidad de obtener plusvalía puede incentivar a las personas
a invertir en bienes, lo que puede tener un efecto positivo en la economía en general.
4. Mejora de la calidad de vida: La plusvalía puede permitir a los propietarios de bienes
mejorar su calidad de vida, ya que les da acceso a recursos financieros que pueden utilizar
para mejorar su hogar, invertir en educación o viajar, entre otras cosas.
5. Estabilidad financiera: La plusvalía puede proporcionar estabilidad financiera a los
propietarios de bienes, ya que les permite tener un activo valioso que pueden utilizar como
garantía para obtener préstamos o créditos.
Desventajas de la plusvalía
La plusvalía es un concepto que se refiere al aumento del valor de un bien o propiedad con el
tiempo. Sin embargo, esta situación puede tener desventajas importantes.

En primer lugar, la plusvalía puede generar una especulación inmobiliaria que aumenta los
precios de las viviendas y dificulta el acceso a la vivienda para las personas con menos
recursos.

Además, la plusvalía puede generar una burbuja inmobiliaria que, cuando estalla, puede tener
consecuencias económicas graves para el país.

Por otro lado, la plusvalía puede generar desigualdades sociales, ya que las personas que
poseen propiedades pueden beneficiarse de la plusvalía mientras que las personas que no
tienen propiedades pueden quedar excluidas de este beneficio.

En resumen, la plusvalía puede tener efectos negativos en la economía y en la sociedad en


general.

Entre las críticas positivas a este concepto se encuentran:

 Puede que el empresario, por asumir el riesgo, merezca esa plusvalía pero habría
que controlarla. Algunos economistas defienden que el beneficio que obtienen los
empresarios es excesivo. Y que, por tanto, deberían retribuir mejor a sus
trabajadores.
 Entre los más afines a su teoría, defienden que no debería existir tal beneficio en
favor de los empresarios. Las empresas deberían retribuir a sus trabajadores
exactamente por el valor de lo que producen.
 Supone un antes y un después en la teoría económica. Tanto es así que en la
actualidad se siguen desarrollando trabajos al respecto.

Entre las críticas negativas podemos encontrar:

 El concepto tenía sentido cuando se escribió. Ahora el mercado de trabajo ha


cambiado y las máquinas (c) sí que ofrecen valor.
 La existencia de maquinaria o de automatización de procesos no empobrece a la
población. Al contrario, permite que el trabajo sea más productivo y reduce las
horas trabajadas.
 La tecnología no tiene necesariamente que aumentar el desempleo. El desempleo
se mueve de unos sectores a otros y cambia conforme las necesidades de los
mismos.
El origen del concepto de plusvalía
El concepto de plusvalía, tal como reconoce Karl Marx en sus escritos, fue tomado
del economista clásico David Ricardo. A su vez, podemos decir que, David Ricardo
había tratado de perfeccionar el concepto acuñado por Adam Smith.

No obstante, quién desarrolló el concepto tal y como lo conocemos en la


actualidad, fue Karl Marx. Marx trabajó el concepto hasta distinguir entre ‘fuerza de
trabajo’ y ‘trabajo’. Este hecho facilitó enormemente la explicación eficaz de la
plusvalía. El concepto de plusvalía constituye un término fundamental en su teoría
del ‘Valor-Trabajo’.

Marx también explicó que el capitalista es capaz de acrecentar la intensidad de la


explotación a través de la maximización de la ‘plusvalía absoluta’. Bien, tratando de
extender la jornada laboral. O, bien por medio de la ‘plusvalía relativa’, es decir, disminuir
la cantidad de obreros.

Javier Montes de Oca, 03 de junio, 2015


Plusvalía (economía). Economipedia.com

https://economipedia.com/definiciones/plusvalia-economia.html

Fuente: https://concepto.de/plusvalia/#ixzz8HLfgku7v

Origen del concepto de plusvalía


Marx desarrolla el concepto de plusvalía en su libro “El Capital”.

La plusvalía es un término que Karl Marx toma de sus lecturas de la obra de


David Ricardo. que realmente se va a desarrollar y va a adquirir importancia en El
capital (1867), quizá la obra más conocida de Marx. Desde entonces, es un
concepto indisociable del lenguaje marxista y de la crítica de la relación
de explotación del capitalismo.

¿Cómo citar?
"Plusvalía". Autor: Equipo editorial, Etecé. De: Argentina. Para: Concepto.de.
Disponible en: https://concepto.de/plusvalia/. Última edición: 28 de septiembre de
2020. Consultado: 27 de octubre de 2023
Fuente: https://concepto.de/plusvalia/#ixzz8HRGBpPzO
Fuente: https://concepto.de/plusvalia/#ixzz8HRFzSPeV

Una vez alcanzados estos conceptos, el autor previamente citado hace mención a
la plusvalía, que es cuando al trabajador se le paga menos de lo que
realmente produce. Por lo tanto, la diferencia entre lo que realmente produce y su
salario es lo que se conoce como ganancia de capital. Este valor agregado
constituye el beneficio adicional del emprendedor.

Este producto excedente o plusvalía, cuando ingresa al mercado, se convierte en


una mercancía y se vende, convirtiéndose en dinero que no vuelve al bolsillo del
empleado en forma de salario.

Marx buscó distinguir entre trabajo y salario, lo que ayudó a explicar


efectivamente el exceso de valor. Este fue un pilar clave de su trabajo sobre la
teoría del valor. También supo explicar cómo el capitalismo logra aumentar la
intensidad de la explotación maximizando el exceso de valor absoluto (alargando
la jornada laboral) o el valor relativo del exceso (reduciendo el número de
trabajadores).

La plusvalía puede entenderse como el equivalente monetario (es decir, con


dinero) del valor adicional de su fuerza de trabajo producida por el trabajador que
la burguesía se apropia o “extrae”, y con el cual el proceso de acumulación
capitalista puede tener lugar.

Un factor fundamental que Marx no tuvo en cuenta es estimar no sólo las horas
de trabajo socialmente necesarias para que el mercado logre algo, sino también la
ganancia, que puede ser particularmente útil para los compradores potenciales.

Las horas de trabajo necesarias para que midan su coste, pero no su valor de
cambio. Para que exista este último, es inevitable que las cosas despierten algún
interés en el mercado, que, en última instancia, determine su valor último.
Además, el interés de mercado puede ser proporcionado por el empresario o, al
menos, adquirido por él a su debido tiempo.

La plusvalía es una parte de la producción que no se paga a los trabajadores, sino


parte de la ganancia del empleador. Se la diferencia entre el valor del producto
total y el salario ganado por los trabajadores.

Marx hizo una distinción entre los diferentes tipos de plusvalía que hay. A saber:
• La plusvalía absoluta es aquella ganancia que se obtiene aumentando las horas
de trabajo.
• La plusvalía relativa es aquella ganancia que se obtiene disminuyendo las horas
de trabajo necesario y aumentando las horas de trabajo innecesario.
• La plusvalía extraordinaria es aquella ganancia que se obtiene por tener una
ventaja tecnológica con respecto a los competidores del mercado.

De igual forma, Marx (1848) hace la siguiente relación entre el capital y el


trabajo que hace una persona para tener una retribución denominada como
salario:

• La relación entre el trabajo asalariado y el capital, la esclavitud del obrero, la


dominación del capitalista.
• La inevitable ruina, bajo el sistema actual, de las clases medias burguesas y del
llamado estamento campesino.
• El sojuzgamiento y la explotación comercial de las clases burguesas de las
distintas naciones europeas por Inglaterra; el déspota del mercado mundial.

Entonces, es el trabajo uno de los factores originarios de la producción que se


define como una de las conclusiones finales del esfuerzo humano. El trabajo es
una actividad consciente del ser humano, encaminada a vencer la escasez y a
aumentar la cantidad de bienes disponibles para la satisfacción de sus
necesidades.

El trabajo es un conjunto de cualidades físicas e intelectuales que son inherentes


al ser humano y que se transmiten durante el proceso de producción. Esto es
exactamente lo que compran los capitalistas en el mercado. En una economía que
no es esclavista, la venta de mano de obra es personal y voluntaria, y sólo por un
cierto periodo de tiempo.

Papel de Estado
Se trata de una figura que crea valor, pero al tratarse de un sujeto enajenado no es poseedor de
dicho valor. Como resultado de dicha enajenación, el trabajo se realiza en valores de uso a través
de “medios de producción ajena”, de suerte que, el producto, es ajeno. No obstante, el trabajo del
proletario no se realiza únicamente en “valores ajenos”, sino en plusvalía, por lo tanto, pertenece
al capitalista. De esta forma la fuerza de trabajo del proletario se vende por su valor, ya que se
trata de mercancía; y el uso de la misma es el trabajo, es decir, creador del valor, por lo que el
valor que se concibe es mayor que la fuerza de trabajo, y a dicha diferencia se le denomina
plusvalía. Si nos centramos en los medios de producción, del producto del trabajo surge un valor 8
semejante al de la fuerza de trabajo o “trabajo necesario”, y una plusvalía, denominada “trabajo
excedente”.
Paralelamente, y centrándonos en los “elementos específicos” de la forma de producción
capitalista, en primer lugar, aparece una clase de trabajadores libres e independientes de los
medios de producción, rompiendo con esa sumisión personal, 9 pero que, sin embargo, se
encuentran sujetos a vender “su fuerza de trabajo”, aunque siendo libres para elegir a su
comprador. En segundo lugar, aparece una clase de propietarios que serán capaces de
incrementar el valor de su propiedad a través de esa fuerza de trabajo que venden los supuestos
trabajadores libres.

Por último, aparece el mercado donde existe una conexión entre los trabajadores y los
propietarios y se produce ese intercambio en condiciones de “libertad e igualdad”. Esto es, se da
una transformación de la fuerza de trabajo en mercancía, constituyendo el “fetichismo” de la
mercancía, por lo que se faculta a establecer la “plusvalía” como hecho económico natural, siendo
el mercado el que hace posible la propiedad.

A este modo de producción le son inherentes una serie de contradicciones, la mayor de ellas sería
la que se establece entre el trabajo vivo y el trabajo materializado. El modo de producción
capitalista es el único modo de producción social que crea una crisis de sobreproducción (Tamayo,
2015). Así mismo, dicho modo de producción deberá satisfacer las necesidades sociales, si bien su
impulsor es la plusvalía.

Por lo tanto, una vez visto descrito cómo el capital produce plusvalor en forma de mercancía, el
proceso de acumulación del capital supone el proceso de circulación, siendo "La primera condición
de la acumulación consiste en que el capitalista haya conseguido vender sus mercancías y
reconvertir en capital la mayor parte del dinero así obtenido. En lo que sigue, damos siempre por
supuesto que el capital recorre de 10 manera normal su proceso de circulación” (Marx, 2000, 692).
De manera que, conforme actúa la acumulación, el capitalista consigue vender sus mercancías y
reconvertir en capital el dinero obtenido.

Dicho esto, y como observa (Carrera, 2013, 112), “El estado empieza presentándose en el proceso
histórico como una condición para el desarrollo de la acumulación de capital”. No obstante, el
Estado como representante político del capital surge con la lucha entre clases que ocupa la
producción de plusvalía absoluta.

Ejemplo de cálculo de la plusvalía


Supongamos que existe una empresa que dedica 80 dólares a maquinaria (c), 50
dólares a los salarios de los trabajadores (v) y vende sus mercancías por 150
dólares (ingresos). Entonces la plusvalía es:

Plusvalía (s) = Ingresos – costes de producción (c+v) = 150 – (80+50) = 20


Tasa de plusvalía = 20 / 50 = 0,4

Los resultados anteriores se interpretan de la siguiente forma:

La plusvalía total del empresario (s) es de 20 dólares. Asimismo, la tasa de plusvalía


es de 0,4. Este 0,4 equivale a decir que el empresario se queda con un 40% del
producto generado por los trabajadores.

Ejemplos de plusvalía.
La plusvalía no es un concepto fácil de entender. Así que aquí hay 2 ejemplos que
pueden ayudar a ilustrar cómo funciona:

1. Imagine que usted es un obrero en una fábrica de zapatos. Se le paga un


salario de $100 por semana y produce 100 pares de zapatos por
semana, que se venden a $10 por par. Esto significa que el valor de lo
que usted produce es de $1,000 por semana. Sin embargo, el capitalista
solo le paga $100 por su trabajo, lo que significa que se aprovecha de
usted en $900 por semana. Esta diferencia de $900 se llama plusvalía.
2. Ahora imagine que usted es un agricultor. Se le paga un salario de $100
por semana y produce 100 barriles de maíz por semana, que se venden
a $10 por barril. Esto significa que el valor de lo que usted produce es de
$1,000 por semana. Sin embargo, el capitalista solo le paga $100 por su
trabajo, lo que significa que se aprovecha de usted en $900 por semana.
Esta diferencia de $900 se llama plusvalía.
En resumen, la plusvalía es la diferencia entre el valor de lo que un trabajador
produce y el salario que recibe por su trabajo. Esto significa que los capitalistas se
aprovechan de los trabajadores al pagarles un salario que es menor al valor de lo
que producen. La plusvalía es la fuente de todos los beneficios del capitalista y es
la razón por la cual el capitalismo para muchos, es injusto.

¿Cómo funciona el impuesto en cada país?


Según un estudio de la Cepal, estas son las características de los
impuestos al patrimonio o a la riqueza -según la definición que
prefiera utilizarse- en los países latinoamericanos.

1. URUGUAY
Llamado Impuesto al Patrimonio (IPAT), grava el patrimonio
neto de personas naturales y jurídicas localizadas en Uruguay.
Incluye activos como dinero en efectivo, metales preciosos,
créditos a favor del contribuyente, vehículos, inmuebles, casa
habitación y muebles.
Para personas físicas y núcleos familiares residentes en Uruguay
va del 0,4% al 0,7%. Para personas físicas no residentes va de
0,7% a 1,5%.
Entre los bienes exentos están los activos en el exterior, las áreas
forestadas con determinados tipos de bosques, los títulos de
deuda pública, las acciones de la Corporación Nacional para el
Desarrollo y bienes inmuebles rurales afectados a explotaciones
agropecuarias.

2. COLOMBIA
Se grava el patrimonio neto localizado en Colombia de personas
naturales y jurídicas.
Se calcula tomando el patrimonio total bruto menos las deudas.
Incluye los bienes en el exterior y la versión actual de la ley aplica
desde 2019 a 2021.
Tiene una tasa única de 1% para los patrimonios netos superiores
a US$1,5 millones (aproximadamente).
El bien exento es la primera vivienda del contribuyente por un
valor de hasta US$140.500 (aprox.).

ARGENTINA

3. Con el nombre de "Impuesto a los bienes personales", grava


el patrimonio bruto de personas naturales y jurídicas
localizadas en Argentina.
4. Eso incluye inmuebles, automóviles, billetes (en peso y
moneda extranjera), cuentas corrientes bancarias, saldos de
fondos comunes y otras inversiones no exentas, obras de
arte, antigüedades, objetos del hogar y bienes en el exterior.
5. Para los bienes en el país la tasa impositiva va desde 0,5%
hasta 1,25%.
6. Para los bienes en el exterior varía entre el 0,7% y el 2,25%.
7. Incluye entre los bienes exentos la vivienda del
contribuyente por un valor de hasta US$300.000 aproximado,
los saldos de plazos fijos y cajas de ahorro, los títulos de
deuda emitidos por el Estado y los bienes inmateriales como
marcas y patentes.
8. (Los valores son aproximados porque dependen de la variación de la moneda local
respecto al dólar).

II.- Ideas del tiempo futuro


Al final de su vida, volviendo la mirada hacia su estadía final en
tierra americana, al hacer un balance de sus fracasos institucionales
en escuelas populares insostenibles, contemplando las campañas
políticas contra Bolívar que lo obligaron a redactar un libelo en su
defensa, viendo que la miseria y la escasez se apoderan de sus
últimos días, observando por doquier que la cultura colonial seguía
reinando hasta en los parajes más alejados (como en su destino
final en Amotape/Perú donde el cura del pueblo –un “ignorante
poderoso”—le impidió un alojamiento final más digno porque lo
pareció un “hereje”, en fin, viendo como el viejo mundo español
mantenía su ciclo de dominación cultural, política e incuria social, tal
vez en ese momento exclamó: “Hay ideas que no son del tiempo
presente , aunque sean modernas: ni de moda, aunque sean
nuevas” (Rodríguez 1999:88). Pero, ¿realmente fue así?

Podemos partir del siguiente aserto: las ideas pedagógicas y


políticas de Simón Rodríguez no llegaron a realizarse en la América
liberada por las luchas de los ejércitos de patriotas. Podemos ver
que su autor tuvo conciencia de tal situación, de allí su empeño en
publicar su pensamiento (educativo y filosófico/ político) para evitar
un olvido entre los que seguirán construyendo un nuevo mundo en
generaciones futuras.

Rodríguez tuvo la oportunidad de presentar distintas facetas de su


formación intelectual, pero también técnica. A raíz de una visita a la
población de Arequipa (Perú) los gobernantes locales deciden
encargarle la revisión técnica/ científica del proyecto de “desviar el
curso natural” de un río de la localidad hacia el Arequipa. Es sabida
la diversa formación de nuestro ilustre intelectual, casi toda ella
producto de un autodidactismo prodigioso. El texto escrito en 1830
(Observaciones sobre el terreno de Vincocaya con respecto a la
empresa de desviar el curso natural de sus conducir aguas y las por
el río Zumbai al de Arequipa) demuestra sus conocimientos en
matemáticas avanzadas, geología y métodos de
construcción. Todavía asombra la integración de humanidades y
saberes técnicos que el texto evidencia, rasgo que bien debería ser
conocido e imitado por muchos investigadores de hoy.

Pero llama la atención una consideración al cierre del informe:

Una revolución POLÍTICA pide una revolución ECONÓMICA. Por


inquietud a los principios, por exaltación después, y ahora por
delirio, los pocos hombres que sintieron el deseo de ser
independientes forzaron la masa del pueblo a hacer la primera
revolución. En el sosiego deben calcular y meditar mucho por hacer
la segunda; porque el goce de la independencia, los pone en
necesidad de ser libre. La impotencia mental ALGUNA. La
impotencia física ESCLAVIZA.

El hombre ignorante no sabe gobernarse, ni el miserable puede


defenderse -muda el uno de estado y el otro de Señor; pero ninguno
cambia condición: la felicidad de ambos consiste en creer que están
mejor. (Rodríguez 1999:469)

Como vemos, el filósofo social y político no puede dejar de serlo


incluso en el momento en que acomete una tarea de carácter
técnico/científico. Vamos a detenernos un poco en estas
consideraciones finales del informe. En primer lugar, el
conocimiento tecno/científico cobra sentido si ayuda a la segunda
revolución que ameritan las naciones americanas: la revolución
social, en este caso destaca su aspecto económico. ¿Tiene sentido
una inversión en infraestructura del gobierno local de Arequipa --
ahora conquistada la libertad política— si no se continúa hacia la
construcción de una sociedad de hombres libres? Las posibles
significaciones de las palabras de Rodríguez no constituyen un
misterio, su texto lo indica con claridad: la ignorancia y la pobreza
preparan para la esclavitud social y la dominación de los
poderosos. El camino contrario es dar sabiduría y medios para
superar la pobreza. En fin, el conocimiento es liberador y las
herramientas para el trabajo libre.

Pero además de estas orientaciones políticas, en el informe se


recomienda que no se construya la obra tal cual está diseñada por
los empresarios contratados por las autoridades y propone una
alternativa que reduzca los costos de inversión en un 50%. Alguien
de la ciudad de Arequipa, intrigado por la recomendación que
truncaba un buen negocio, no pudo dejar de escribir en el
expediente: “En las observaciones de Rodríguez no se ve sino un
fondo de buena intención porque no es accionista ni pretende ser
empresario… ” (Rodríguez 1990:325).

Unos años después, durante su permanencia en la ciudad de


Concepción (Chile), en 1835 un terremoto devastó a esta
población. Nuevamente las autoridades municipales estiman su
formación técnica y lo nombran como integrante de una Comisión --
que la completaron Ambrosio Lozier y Juan José Arteaga— para
elaborar un informe sobre la catástrofe que el movimiento telúrico
había ocasionado en la región. Una vez más se nota la alta
calificación técnica que las autoridades chilenas vieron en
Rodríguez para asignarle una tarea tan importante. El Maestro
cumplió con el encargo y posteriormente presentó el Informe
respectivo, cuyo texto sistemático y bien elaborado refleja el
empeño puesto en la comisión recibida.

¿Y las ideas políticas y filosóficas del Maestro qué papel juegan en


este contexto? Por razones evidentes no podemos desarrollar su
ideario pedagógico y su visión de la razón (conocimiento libre)
liberada como lo interpretaron los pensadores herederos de las
tradiciones liberales de la Europa del siglo XVIII y XIX. Pero no se le
escapa a su mejor biógrafo Alfonso Rumazo González este legado
libertario que todavía tiene vigencia. Leamos un resumen que hace
al respecto:

¡Brillante defensa de su originalidad! Se atribuye, con justicia entera,


una creación que no se encuentra ni en Europa. En la Escuela
Social ya no se le toma a la docencia solamente en el sentido de
instruir y enseñar, otorgar conocimientos, aprendizaje de un oficio,
abrir las rutas intelectuales. Importa ir más lejos; Rodríguez no se
detiene nunca. Se quiere hacer del hombre un ente social desde el
principio. Hay que impedir la presencia del hombre aislado,
requiérese reorientar el individualismo que forjó la Revolución
Francesa y dar vigencia a la fijación de la persona en el medio,
integrándolo a él. Con este criterio, desconocido en América en
aquellos tiempos, el Maestro se adelanta a las lecciones de filosofía
positiva y sociológica de Augusto Comte, publicadas en Francia
entre 1839 y 1842. (Rumazo 2004:62).

Visto así (un adelantado a su momento histórico) es una forma de


hacer justicia frente al olvido que este tipo de aportaciones
intelectuales corren en la América Latina actual y que en el siglo XIX
sucedía de manera más notoria. Al final, Rodríguez entendió con
claridad que el momento posterior a la independencia política era el
de construcción de nuevos saberes sociales. Sin conciencia
republicana (nueva ciudadanía) eran inviables los proyectos
nacionales de los americanos, ya separados del régimen
español. Además, al final de su vida lo constató al evaluar los
lamentables rumbos que estaban recorriendo las naciones que
simbolizaron una esperanza de redención social en Europa y
Estados Unidos. Murió sólo y abandonado a su suerte en un rincón
de su querida América, pero entendiendo que su obra pedagógica y
política estaba por hacerse, quedaba pendiente para las próximas
generaciones de latinoamericanos comprometidos con la soberanía
y la justicia social.

V.- Alternativas frente al “capitalismo del conocimiento”

Volvamos nuevamente al Maestro Simón Rodríguez, a su visión de


la “educación popular” como forma de liberación social de la tiranía
cultural del sometimiento que España había dejado como legado
nefasto en las incipientes Repúblicas americanas. Una autora de
nuestros días observa una situación similar en relación al uso de
una forma de dominación que Rodríguez no podía conocer ni
adivinar. Gascón Muro (2008) presenta una arista singular del
“capitalismo del conocimiento” de este siglo XXI, veamos sus
razones:

Desde hace medio siglo, diversos autores han sostenido que el


conocimiento se convirtió en el motor de la economía. Este
fenómeno ha sido calificado como el advenimiento de la sociedad
posindustrial, como la economía del conocimiento o como la
sociedad del conocimiento. Las características de esta nueva
economía, productora de mercancías-conocimientos, hacen que sea
necesario dar cuenta de un sistema de riqueza que, para algunos,
significa el fin del capitalismo debido a que sus categorías y
principios habrían perdido pertinencia y sentido. Para otros, con la
economía del conocimiento el capitalismo se reinventa y
reconstruye; abarca ahora esferas y actividades que se habían
resistido a su dominio. La economía del conocimiento abre un
dilema entre dos objetivos incompatibles: garantizar el uso social del
conocimiento, que es fuente de riqueza y desarrollo individual y
social, o incentivar y proteger a los productores privados del
conocimiento y sus mercancías, base de la economía del
conocimiento. . La respuesta a este dilema orientará el desarrollo de
nuestras sociedades. (Gascón 2008:7)

Es muy preciso lo que señala Gascón Muro: el uso mercantilizado


del conocimiento para el beneficio de una élite poderosa (el 1%,
como se dice ahora) al mismo tiempo prepara condiciones para que
diferentes formas de la aplicación social del saber tecno/científico, a
saber, los beneficios del conocimiento, serán para elevar la calidad
de vida de la “masa del pueblo”. La posibilidad está ahí, latente,
esperando que los factores sociales organizados sean capaces de
instrumentarla política y económicamente. Esa es la lucha de
nuestros días. Pero también es la lucha de los tiempos de Simón
Rodríguez. ¿De qué otra manera la oligarquía del siglo XIX se
apoderó de las recién liberadas naciones americanas si no
impidiendo la circulación del conocimiento libre y liberador que
propuso la Ilustración republicana mediante el mantenimiento de la
ignorancia colectiva? El mecanismo social utilizado fue muy sencillo:
se impidió la propuesta radical de educación popular para formar
nuevos ciudadanos americanos. El legado formación del pueblo del
Maestro del Libertador fue archivado y olvidado.

Esta contradicción en el uso social del conocimiento también es


analizada por un pensador francés (nacido en Viena) que plantea
que ya están dadas las condiciones para superar este carácter
aberrante de la sociedad del conocimiento. André Gorz (2008)
reflexiona y propone alternativas políticas y económicas:

El problema que enfrenta “la economía del conocimiento” proviene


del hecho de que la dimensión inmaterial de la que depende la
rentabilidad de las mercancías no es, en la era de la informática, de
la misma naturaleza que estas últimas: no es propiedad privada ni
de las empresas ni de sus colaboradores; no tiene un carácter
privatizable y no puede por consiguiente convertirse en una
verdadera mercancía. Sólo se puede disfrazar de propiedad privada
y mercancía al reservar su uso exclusivo a través de artimañas
jurídicas o técnicas (códigos de acceso secretos). No obstante, este
disfraz no cambia nada a la realidad de bien común del bien así
disfrazado: sigue siendo una no-mercancía no vendible cuyo acceso
y uso libres están prohibidos porque permanecen siempre posibles,
porque le amenaza las “copias ilícitas”, las “ imitaciones”, los usos
prohibidos. Incluso el propietario autodenominado no los puede
vender, es transferir decir la propiedad privada a otro, como lo haría
con una verdadera mercancía; sólo puede vender un derecho de
acceso o de uso “bajo licencia”. (…) Así la economía del
conocimiento se basa en una riqueza cuya vocación es la de ser un
bien común, y los patentes y derechos de autor que deben
privatizarlo no cambian nada: la era de la gratuidad se expande de
manera irrefrenable. La informática y el Internet atacan las bases del
reino de la mercancía. (Gorz 2008:80)

Esta posibilidad de superación de los machos del capitalismo


contemporáneo –que como hemos visto es etiquetado como
“capitalismo del conocimiento”– caracteriza a la Venezuela (y más
allá a la región Latinoamericana) del siglo XXI. Del fragor de esta
nueva “guerra de independencia” como gesta de liberación social
saldrá la sociedad que veremos en el futuro.
Claro, entendemos, los problemas que enfrentan las Repúblicas
americanas de hoy son diferentes, pero mantienen una misma
matriz: los excluidos de ayer siguen existiendo hoy; eso no ha
cambiado. Los avances de la ciencia y la tecnología deben procurar
la equidad social, la inclusión de vastos sectores de la población a
una vida de calidad, a la sostenibilidad ambiental, a la renovación de
la vieja democracia representativa, a la organización regional de
naciones frente a los grandes centros de poder global, en fin, hay
que actualizar una agenda de transformación para el siglo XXI

Por otra parte, el proyecto de sociedad imbricado en lo político,


económico y social con la Educación Popular, es un proyecto con un
sujeto claramente perfilado

para Rodríguez; eran los indios unidos a los pardos. Era un


proyecto, que en lo económico formaba en contraposición a la
feudalidad y la esclavitud, en lo político, para una democracia
distinta a la representativa y para lo social, en una educación
liberadora unida a la producción y propiedad colectiva.

Con gran acierto criticó el modo como se habían organizado los


gobiernos en las nacientes repúblicas, tanto hubiesen imitado el
modelo de Inglaterra o de Francia. Y ya hurgaba en sus
disertaciones sobre cómo organizar un gobierno que fuese
expresión del pueblo, distinto al ejercicio de una democracia
representativa. Su preocupación por una verdadera democracia
popular, del pueblo, era evidente, contraria a la instalada para
entonces en Europa con dicho nombre. En efecto, en Francia se
había conservado la figura del Rey, los sectores y el pueblo.
Irónicamente llamaría Simón Rodríguez a esta combinación de tres:
el Yei (que representaba a la clase media, el guardasellos que era el
rey, representando a la monarquía y el pobre ignorante que era el
pueblo).

A imitación de la Inglaterra y de la Francia, se habían dividido los


gobiernos de la América del Sur, en Cámaras altas y bajas. Situación
que no consideraba pertinente porque no era expresión de la
composición social de los pueblos de la América española (no
estaban presentes la nobleza y el Rey).

En su visión transformadora de la relación existente entre la


democracia, el pueblo y el modo de gobierno ubicaba los
indicadores de civilización. Reflexión fundamentada en la
naturaleza de la relación entre el pueblo y sus representantes, una
relación donde, los unos eran al mismo tiempo el otro, porque éste
los ha elegido. Y va más allá, planteándonos un pueblo legislador,
porque, decía:

Hacer leyes para los pueblos no es tan difícil como se cree.


Hacer un pueblo legislador Es obra muy laboriosa. (Extracto
de la Defensa de Bolívar. En OC TII; p. 393).
Palabras finales

Para finalizar, vamos a decirlo enfáticamente: tenemos la obligación


de leer el legado de Rodríguez con las “antiparras” de este
siglo. Hemos visto que, con perspectivas diferentes y disímiles
formaciones profesionales, los autores que también reflexionan
sobre la sociedad/capitalismo del conocimiento coinciden con el
sueño robinsoniano de construir un mundo nuevo que propicie la
libertad y la justicia social.

Para Rodríguez era inconcebible la independencia política sin la


construcción de una nueva sociedad más justa, sin los prejuicios
religiosos heredados de España, con la incorporación productiva de
“la masa del pueblo” dispersa en la amplia geografía americana y
con un sistema orgánico de educación popular. Que les dé a los
niños (“renuevos prometiendo futuro”) las luces y virtudes
ciudadanas necesarias para un futuro mejor.

Simón Rodríguez no vio cumplir esta agenda en las Repúblicas


americanas de principios del siglo XIX. Esta agenda de
transformación social está más actual que nunca, Simón Rodríguez
está más vigente hoy en día que en los tiempos postreros porque el
futuro de la humanidad no permite segundas oportunidades, como
ya las tuvimos en los dos siglos anteriores y fallamos. Sin mejorar el
siglo XXI es impredecible el siglo XXII.

La transformación de nuestra civilización es ahora, en caso de


fracaso no tendremos futuro sostenible: ¡Inventamos, o erramos!,
como dijo el Maestro del Libertador. ¡Tenemos que inventar un
futuro mejor para todos y todos!

Referencias bibliográficas

Climent Sanjuán, Víctor (2006) Sociedad del riesgo: producción y


sostenibilidad. Artículos: revista de sociología, Nº 82, 2006,
págs. 121-140

Gascón Muro, Patricia (2008) La economía del conocimiento o la


reinvención del capitalismo. Revista Veredas, Nº 17, UAM-
Xochimilco, México, páginas 7-30

Gorz, André (2008) La salida del capitalismo ya ha


comenzado. Publicado en Ecorev, Revista crítica de ecología
política, 27 de julio de 2008. Disponible en:
http://ecorev.org/spip.php?article640

Hernández, D. y Benítez, F. (Comps.) (2006) La nueva universidad


cubana y su contribución a la universalización del conocimiento. La
Habana: Editorial Félix Varela.

Ideas filosóficas, políticas, sociales y económicas de Simón Rodríguez

Estos cuatro aspectos relacionados al pensamiento de Don Simón Rodríguez


se relacionan entre sí. Dedicado especialmente a la educación, este insigne
educador, incluyó en su quehacer pedagógico consideraciones políticas, enseñando
cómo debía ser la educación de los niños y niñas, para contribuir al bienestar social
y prepararse con un oficio para lograr cubrir económicamente sus necesidades.

Todo lo que conocemos a través de la historia sobre Simón Rodríguez es una


filosofía de vida. Sus ideas las repartía en cada pueblo que visitaba, no tenía
residencia estable, pues decía: … “no quiero parecerme a los árboles que echan
raíces en un lugar y no se mueven, sino al viento, al agua, al sol, a todo lo que
marcha sin cesar”. Trabaja sin descanso, descubre, innova, intuye, crea, percibe a
distancia de cien años hacia el porvenir. Pero no lo comprenden; y en ello su drama
gigante: “Hay ideas -expresa analizando su propia problemática- que no son del
tiempo presente aunque sean modernas, ni de moda aunque sean nuevas. Por
querer enseñar más de lo que todos aprenden, pocos me han entendido, muchos
me han despreciado y algunos se han tomado el trabajo de perseguirme”.

Es importante resaltar que el contexto, social, cultural, político, económico e


ideológico que le correspondió accionar a Simón Rodríguez, era sin duda alguna
adverso a un pensamiento liberador, al concepto de igualdad, educación general, al
pensamiento crítico, creador. Le correspondió vivir en sociedades que pretendían
ser estáticas.

En el plano económico, para la época, fustiga a los gobernantes, a quienes


increpaba: “Si los americanos quieren que la revolución política que el curso de las
cosas ha hecho y que las circunstancias han protegido les traiga verdaderos bienes,
hagan una revolución económica y empiécenla por los campos”.

Parafraseando los argumentos sobre la concepción de la educación social


planteada por el maestro Simón Rodríguez y plasmadas en sus obras, en las que
despliega la visión, concepción de sus ideas educativas, pedagógicas,
consustanciadas con el saber democrático, determinante de libertad e igualdad, es
muy probable que haya sido él quien habló por primera vez de la profunda
vinculación existente entre la escuela y la sociedad, o lo que es igual, la escuela en
función social. Destaca al referirse a la educación social, “El saber del ciudadano
sus obligaciones sociales es el primer deber de un republicano. Nada importa tanto
como tener pueblo: formarlo debe ser la única ocupación de los que se apersonan
por la causa social. El objeto de la instrucción es la sociabilidad, y el de la
sociabilidad es hacer menos penosa la vida, así piensa en “Consejos de amigo…”

Simón Rodríguez

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